Popper
Popper
Popper
Los «poppers» se encuentran en las estanterías de las tiendas de sexo, empacados en pequeñas y coloridas botellitas
con nombres como Buzz (zumbido), Rush (euforia), Bullseye (blanco).
No sucede todos los días que un parlamentario británico reconozca públicamente ser
consumidor de una droga recreativa utilizada mayoritariamente por homosexuales para
incrementar el placer sexual.
Pero eso pasó cuando el conservador CrispinBlunt admitió, la semana pasada, ser consumidor
de «poppers» –el nombre genérico de la droga– al oponerse a una nueva legislación que las
acaba de prohibir en Reino Unido.
El acta ha sido redactada en términos muy amplios, describiendo las sustancias psicoactivas
como algo «capaz de producir un efecto psicoactivo en la persona que las consume».
Unos señalan, entre varias críticas, que el gobierno no manifiesta una preocupación
similar con otras sustancias legales que están vinculadas a muertes, como el
alcohol, la cafeína y el tabaco.
Y hay indicaciones que la prohibición de los «poppers» pueda ser derogada. Pero, hasta que eso
suceda, habrá redadas en los expendios y, sin duda, arrestos por posesión y distribución.
«Aromatizadores de ambiente»
Los «legal highs«, euforizantes o estimulantes legales, habían logrado eludir el control de la ley
porque tenían una composición química diferente de otras sustancias proscritas.
Por lo general se publicitan como «sales de baño» o «fertilizantes para plantas» o
«aromatizadores de ambiente».
Y también se ofrece información muy vaga sobre su contenido, aunque, para evitar problemas,
los vendedores especifican que no son para el consumo humano.
En la época del disco, en los años 70, los «poppers» se volvieron de uso cotidiano.
Aunque el conocimiento de los efectos a largo plazo son muy imprecisos, los defensores de los
productos afirman que su impacto en la salud es mínimo.
Eso es lo que se dice de los «poppers», cuyo uso es 25 veces más común entre los
hombres homosexuales que entre los heterosexuales, según una encuesta reciente.
Y es por eso que los críticos del acta sostienen que se trata de una ley discriminatoria, que
criminaliza el estilo de vida electivo de la comunidad gay.
La razón de su atractivo para este grupo: contienen nitritos de alquilo en forma líquida que, al
inhalarse, dilatan los vasos sanguíneos, relajan los músculos lisos (como el de los
esfínteres) y producen una intensa sensación de alegría.
Lo que explica por qué en los principales almacenes de productos sexuales, los «poppers» se
encuentran en las estanterías empacados en pequeñas y coloridas botellitas con nombres
como Buzz (zumbido), Rush (euforia), Deep (profundo) yHardOn (erección).
Nitrito de amilo
La primera encarnación de la droga, el nitrito de amilo, fue sintetizada por el químico francés
Antoine Jerome Balard para tratar la angina.
Pronto se convirtió en la manera tanto para desinhibirse socialmente como para facilitar el
sexo.
Un empleado de una de esas tiendas en la zona de Soho, en Londres, dijo a BBC Mundo que
estarían vendiendo el producto hasta el plazo de abril.
Pero el acta también tiene implicaciones para aquellos consumidores que tiene su reserva en
casa.
Igualmente, alguien que vaya de vacaciones y tenga en su neceser una de las botellitas podría
ser interceptado y acusado de tráfico de estupefacientes.
Algunos indican que la prohibición tiene más que ver con su asociación con el sexo y
la cultura gay que con cualquier riesgo que pueda representar la sustancia.
Y los mismos asesores científicos del gobierno británico han criticado la prohibición.
Un grupo defensor de los derechos de los homosexuales, Stonewall, advirtió que
podría poner en riesgo la salud de hombres gay y bisexuales.
http://www.bbc.com/
http://impactocna.com/que-son-los-poppers-la-droga-recreativa-popular-entre-los-gays-que-se-
prohibira-en-reino-unido/