1251 Alfonso X-Calila e Dymna
1251 Alfonso X-Calila e Dymna
1251 Alfonso X-Calila e Dymna
>\; «
CALILA Y DIMNA
REAL ACADEMIA ESPAÑOLA
BIBLIOTECA SELECTA DE CLASICOS ESPAÑOLES
CALILA Y DIMNA
COTEJADA CON EL ORIGINAL ÁRABE DE LA MISMA
MADRID: 191
LIBRERÍA DE LOS SUC. DE HERNANDO
IMPRESORES Y LIBRBROS
DE LA REAL ACADEMIA. ESPAÑOLA
Arenal, 11.
'
-..(
V-v
y de la corriente de un
se curima a una pjired y
río,
Dimna no de
saldrá salvo (p. 155); le relata el cuento
tos mercaderes y mures que comían hierro (p. 157),
los
(i) a. y B. siete.
CALILA Y DIMNA
CAPÍTULO XIV .
— Del león e del axxahar rrelicio-
so Pág. 404
—
gue a los calumniadores, p. 420. El león manda sacar
al lobo de la cárcel; éste rehusa volver a la perdida
—
o Nixhuen léase Anuxirvan (i) fué enviado por — ,
los moros, no permitió que Barzuyeh sacara copia del libro, sino
TOMO I. c ^
CALILA Y DIMNA
(i) Indicamos estas dos ediciones con las letras C. y J., res-
pectivamente.
en los textos, o cuando, habiéndola en el pensamien-
to, la traducción castellana no resulta literal del ára-
* *
TOMO r. I
CALILA Y DIMNA
gunda es, que lo fallaron por buena manera con los en-
tendidos por que les crezca el sabor en aquello que les
mostrar071 de la filosofía quando enella pensavan e co-
nocían su entender; la tercera es, que los fallaron por
juglaría alos digípulos e alos niños. Et por esto lo a:na-
ron e lo tovieron por estraña cosa et quisieron estudiar
enello e saberlo; que (i) quando el inofo ovierc hedat e su
entendimiento conplido, e pensare enlo que dcllo oviere
decorado en los días quz enello esludió e asmare lo que
ende ha notado en su corafón, sabrá ende que avrd ai-
caneado cosa que es más provechosa que los tesoros del
pusda ayudar.
Et aquel que se trabajare de demandar el saber per-
fizólo asi, e levó cada uno dellos lo que pudo levar a S7t
posada, efeziéronlo desta guisa fasta que ovicron levado
iodo el tesoro. Et desi esto fecho, fuese el orne {^) para
su posada e non falló nada, mas falló que cada uno de
(i) C. Et aque! que desea acumular mucho saber 3' leer libros
sin ningún esfuerzo de atento examen en lo que leyere, merece-
(3) ^-B.o
(4) C. Et así, quien lea este libro y no entienda el sentido
manifiesto y el encubierto de él, no se aprovechará de la fortuna
(M J. sabia
y culta, y
(*)Creo que debe enmendarse, en C. y en J., e! verbo cía.', com-
frender, por \ _?", Icet.
INTRODUCCIÓN DE BEN ALMOCAFA 7
los que debe substituirse ^V-^A, obrar, obra, por jfJ-^j saber, para que
estén conformes coa la versión castellana.
CAX-iLA Y di:.í;;,v
(*) J. enseñarla; pues (hay) cosas que debe el seglar adquirir y ense-
ñar: entre ellas, la ciencia y la riqueza; y entre ellas desear hacer bien.
—
y no debe el sabio reprender en, etc. Como se ve, J., a pesar de no tener
correcto el texto, corrobora la legitimidad de nuestra versión en este
pasaje.
CALILA Y DIMNA
(2) —
el o ne ettt^'udido Falta en C, pero está en J.
(3)
—
a tal... aqueste... Mejor en J. que en C.
(4) C. para mejorar su vida; ni mire a quien asiste el hado y
le es propicio, sin cooperación de parte de él; porque éstos en-
[CAPÍTULO I]
(*) cuerpos, — Así en A. y eu B., palabra que tal vez deba substiluirse
en A. por j/ervaí.
CALtLA. Y DIMXA
(2) A. fizo
(3) A. fui yo el mejor de sus fijos
(4) J. avían, y tuvieron en mí más cuidado que en los demás
de mis hermanos, fasta que, cuando tuve siete años cumplidos,
pusieron m. c. m. —
C. avia. Y tuvieron por mí mayores cuidados
que por mis demás hermanos, y me dedicaron al aprendizaje de
la escritura hasta que cumph' siete años.
CALILA Y DTMNA
bución en este mundo, ni sus ventajas, tal vez sea como el co-
merciante, etc.
(4) A. a fazer
(5) En J. falta esta última cláusula. — C. adelantar el bien y la
De aquí hay que volver ea C. a la página 30, línea 10, para seguir
i*)
(4) A.yB.o
(5) A. ayuntan los con engrudo,
(6) C. es quitado el
(3) te fíes —
C. te engañes
(8) A. en
DEL MEDICO BERZEBl'EY
ove
(7) C. quería y pudiere desear mi alma, y más de lo que yo
merecía. Et
33 CALILA. Y DIMNA
(7) A. saberes
(8) A. saber
(9) C. mente que ellos según sus caprichos argumentaban y
disputaban et
CALILA Y DIMNA.
que nos non quería/nos, et deste saber que nos dende ave-
rnos, nos devenios más pregiar que de iodo quanto ende
ganaremos^ (6). Desi estodieron grande ora quedos,
fasta que cuy dar on que el dueño déla casa era adormc-
fido et su ntuger otrosí, et después que cuydaron ser
giERTOS DESTO, levantóse el cabdiello dellos ct fuece
para la Jiniestra, que esta va en somo de casa, por do
entrava la luz de la luna, et (i) dixo siete vezes: «sau-
lan, saulan», et abracóse conla luz por descender por
ella ala, casa, et cayó (2) cabega ayuso. Et levantóse el
dueño dcla casa (3) í/ dio le tantos de golpes fasta [que]
le quedó diciendo el ladrón: « Yo ¡nerezco cuanto mal
me has fecho, porque creí lo que me dexiste et me engañé
con vanidat^ (4).
—
dad.» J. «Yo soy el crédulo engañado y seducido por lo que no
podrá suceder nunca. Y esto es el fruto de tu engaño y el resul-
—
tado de quien cree todo lo que oye.^ A. luna e dexúse caer por
la ñniestia e cayó en casa del buen oinnc. Et déla caída quebran-
(•) se^ún creía. Traducción de ^^''i 1'^^ creo debe eliminarse del
' ''
texto de C.
CALILA Y DIMNA
(*) tinaja, i^^'i.is»., que la versiúu castellana traduce por pozo, más
conforme con el texto árabe.
(*•) Ea C. está muy obscuro este pasaje, como ya advierte el editor.
CALILA Y DIMKA
(6) el mercador :
—
Falta en C, pero está en J.
CALILA. Y DIMXA
(5) me-CyJ.le
(6) A. traspusiese
(7) A. lo devía fazer. — C. y J. folgura, razonable sería que no
estimase estos años en 7iada.
DEL MÉDICO BERZEBUEY 45
bebida de ella. Et
(2) C. parto, apodérase el espíritu de la madriz
(6) e — C. o
(7) C. acorren. Además de lo que siente
(5) Ce el miedo de la
(G) C. lluvia, y después las distintas penalidades de la vejez a
(*) mieubra —
Falta en C, pero está en J.
(**) de aquello... hora. Esta es la traducción literal, cuyo sentido
es 'de la situación en que se encuentra él eu aquella hora>.
DEL MEDICO BERZEBUEY 49
giosos (6).
perdida y desconogida
(3) C. e amanecieron los
(6) C
pies en unos sostenes, y rriiró y vio que eran J. co- —
mo B.
CALILA Y DIMNA
cayese (i), et algo los ojos contra las dos (2) rramas, e
vio estar enlas rraizes dellas dos viiircs, el uno blanco
non quedaban;
c el otro negro, rroyendo (3) sienpi-e qii¿
et él pensando ensu fazienda e buscando arte por do es-
(2) í;í/-C.yJ.y
(3) J* rramos, con la muerte que viene a su tiempo sin que
se libre (nadie) de ella ni de perecer, et. — C. véase la nota si-
guiente.
M^rpiente; e — J. como B.
(5) C. dulzor (***) que el hombre ve y huele y come y oye
y toca, que le faze descuidar de su alma y le distrae desu
(''5) C. y ]. fazienda a quedar contento en mi estado, e
[CAPÍTULO III]
5ñ CALILA Y EIMNA
(i) a. de ganar.
(2) A. díxoles
(3) C. fruto después de haberlo ganado, J. como A. —
(4) En la distinción de estas cuatro cosas, no convienen los
textos. J. dice: ganar aver de buena parte; mantener bien lo
<¡ue se ha ganado; fazer le fazer fruto; despendello... vida y den
jilacer a los parientes y amigos y sirvan de utilidad para el otro
mundo. — C. ganar... parte; mantener bien lo... ganado y hacerle
dar fruto después de haberlo ganado; despendello... mundo;
l)revalerse contra todas las desgracias que sobrevengan. E
(5) C. destas cuatro cosas, non — J.destas maneras de pro-
ceder, non
(6) [si] no lo ganare, ni fuese rico, no podrá
C. desea; porque
vivir ni vivirá y aunque fuese rico y obtuviese ganancia, si
de él;
midos. Y había .cerca un león que era rey de aquella región; y con
él muchos lobos 3^ chacales y zorras y demás bestias. Et
(i) C. consejo; y su consejo no era cabal. Y cuando el león
oía los bramidos del toro — pues no había visto un toro nunca ni
oído sus bramidos — , espantávase — J. consejo, sin tomar con-
sejo de ninguno de sus compañeros, etc.
(2) C. lugar sin salir a parte alguna. Et
(3) C. nías perverso corazón y de más penetrante mirada en
las cosas; et
mano Calila: «¡Oh hermano! ¿Por qué causa el león está quieto
ea su lugar, sin moverse y sin solazarse, en contra de su cos-
tumbre?»
(5) C. Dixo Calila: «¿Qué te imperta preguntar lo que no es
de tu deber? Nos
DEL LEÓN E DEL BOEY Gl
vil cora(;ón abaxa del alta medida ala vil. Et pujar (2)
ala nobleza es muy noble cosa e grave; ca abaxar se
della (3) es vil cosa e rrafez. Et es así commo la pie-
(4) A. alcanzar
(5) C. caer del hombro a tierra. Por — J. caer a tieira. Por
(6) En C. hay que substituir i¿)\_5ji.\ por o^ (3^=»^' P'^'a que
esté conforme con J. y con la versión castellana.
(7) C. consejo, y le tiene perplejo a él y también a sus vasa-
llos, su fazienda, e
(8) C. punto con mi buen consejo, avré
(9) C. y J. está perplejo en su asunto?» Dixo
DEL LEÓN E DEL BUEV 6$
sepas que los que están más cerca del rey que nosotros no(**)lo
estaban, ni eran éstas sus dignidades; pues se acercaron a él
poco a poco y alcanzaron las dignidades. Y yo he de trabajar
por alcanzar las dignidades y puestos de ellos, con mi esfuerzo
para acercarme a él; ca
(4) al león — C. y J. a él
(5) falta en C. la conjunción, pero está en J.
(G) C. costunbres, condescendería con sus caprichos e gui-
saría
(*) J. su compañía
DEL LEÓN E DEL BUEY 69
como está en J.
(i) a. eres?
(2) C. y J. de la puerta del rey, a
(3) A. te ayudases de mí por tuyo consejo. — C. alguna cosa
en que yo pudiese servir al rey. Ca — J. alguna ... servir al rey con
mi persona y mi consejo.
(4) C. Ca son muchas las cosas de él (el rey) en que frecuen-
temente necesita a aquellos de quienes nunca hizo caso. Y no
debe ser menospreciado nadie, por insignificantes que sean su
poder y posición, si hay en él alguna utilidad, por pequeña que
sea. Pues el fuste que yace en tierra, frecuentemente se sirve
uno de él (*), cuando siente comezón en la oreja y se la rasca
con él. Y el animal que conoce el daño y el pro, más digno es
de que se sirva uno de él. Quando
(5) C. y J. Et sé dirigió a los q. e. conél y les dijo : «El
e en que
ha menester, Desí faze lo que tiene por
los
bien en ponerlos enla medida que deve. Et alas vezes
acaesge al rrey alguna enfermedat que le faze grant
mal, e non gela tuelle si non la melezina que le
(4)
aduzen de lueñe. E el mur mora conel omne en su
casa, et porque le faze mal, échalo fuera (5); et el agor
que es muy bravo críalo e quiérelo aun tanto que ha
sabor délo levar (6) enla mano.»
(*) a él, 0L>''; pero si se quita un punto queda 0L>", a su padre, como
J. y como piden el contexto j el orijíinal sánscrito.
DEL LEÓN E DEL BUEY 75
(*) Así el texto de C. en este pasaje, que falta en J., y que creo está
mejor en la versión castellana.
76 CALILA Y DniNA
(i) C. es?» Dijo el león, pues no quería que supiese Dimna que
esto era miedo de él : «Non
(2) miedo.» — C. ^^, coraje.»
(3) C. bramó el toro un bramido fuerte que asustó al león
tanto, que le hizo manifestar a Dimna lo que pasaba en su cora-
zón, y dijo «Esta voz que oigo non
:
78 CALILA Y DIMNA
(2) <7 — B, o
(3) ha caído en la pobreza y miseria y no pue-
C. mal¡gioso,o si
mada la versión castellana, que dice: «o si le han fecho perder lo que tenía
del rrey». En árabe la vo2 sultán significa <rel poder>, y también <la per-
sona que lo ejerce».
DEL LEÓN E DEL BUEY 79
(3) C^-C.e
(4) Traducción de oscv^; es decir, partes vergonzo-
vergiie7ii;a.
8o CALILA y DIMNA
(•) C. el toro
TOMO I. 6
82 CALILA Y DIMNA
38 CALILA Y DIMNA
excusa que pudiese alegar por ello, y mandó el cadí que el bar-
bero fuese castigado. Et —
J. parientes y la vieron en tal estado
vasallos T>
(2).
(3) C. non veo que al león, ni por el lugar que ocupa el toro
respecto de él ni por su elevada dignidad, le venga desprecio nin
(*)Esta frase debe estar alterada en C. Está más clara en j., que
dice: [Una] de ellas, mirar al daño y al pro [que ha sufrido] en lo pasa-
do, para guardarse del daño que sufrió en lo pasado, para no volv£r a
sufrir este daño; y desear el beneficio que ha disfrutado y emplear su
astucia para volver a disfrutarlo.
DEL LEÓN E DEL BUEY QI
(6) A. grandez
(7) e el león... egual.» — J. e el león siente por el toro tal pa-
sión como ya he dicho, que le ha de deshonrar y perjudicar
te
en su facienda.» Dixo —
Esta frase de J., que tiene su lugar aquí
92 CALILA Y DIMNA
de la página anterior.
C. «¿Cómmo podrás con el toro, que es más valiente que
(i)
(2) A. antes
(3) C. y J. cates a mi pequenez y debilidad, ca
(4) C. fuerga y violencia; que un débil afligido por la peque-
nez y debilidad, ya triunfó del león. ¿Non J. fazen por la de- —
bilidad, ni por por la pequenez, ni por la grandeza,
la fuerza, ni
(*) —
que q. m. a u. cangrejo, Falta, como se ve eu J., en el texto cas-
tellatio y tambiéc en el original indio.
:
94 CALILA Y DBINA
mo A.
(2) A. «Más mal que bien
ella:
—
mos aquí primero?» Dixo C. al otro: «Veo aquí muchos peces
pesquemos aquí ahora.» Dixo
(5) C. truchas, y quiero que comencemos allí, y cuando aca-
bemos que nos volvamos aquí; y permaneceremos aquí hasta
que no quede una.» E
(6) e mi desfallecimiento. — Falta en C, pero está en J.
(5) C. lohé por vos; pero poco a poco, que tal vez los pes-
cadores no se den cuenta de mí hasta que yo haya terminado.»
Comentó — En J. falta esta frase.
(6) rribera — C. y J. y en el original sánscrito, colina
fué eso?»
Dixo Dimna: «Dizen que un león estava en una
.
C. han y te librarán de la culebra. Y fuese el cuervo has-
(i)
98 CALILA Y DIMNA
(4) A. o
(•) J. conmigo hacia el leÓD, que me lleve despacito para que lle-
gue a él algo
í") J. él sólita y lentamente.
^••*}
J. hambriento y sañudo el
CALILA Y DIMNA
rado de ellos; mas yo tengo por bien que te ocupes en este asunto
antes de que llegue a agravarse; y no esperes que acaezca, pues
yo no sé si podrás enmendarlo luego o no. E
(i) enviso — A. y B. camiso
(2) C. guisas : dos son resueltos (*) y uno perezoso. Y uno
de los resueltos es — J. guisas : el resuelto, el más resuelto que
¿ste y el perezoso. Y el resuelto es
(3) nin p. e. —
Las palabras árabes correspondientes
coragón,
a esta frasede la versión castellana se hallan en C. al final de la
oración, después de la palabra «-caído*. J. como A. —
(4) C. et más resuelto que éste es el previsor dotado de
lejana penetración, que
(5) C. y J. acaescan y les presta la debida consideración, e
(6) C. tribulagión y queda aislado, sin saber qué hacer hasta
que peresge.
(*) ^jL¿., firme, resuelto, segiín los diccionarios; pero en esta ver-
sión, no sólo en este caso, sino en otros muchos, tiene la significación
—
de inteligente. J. emplea después, ea el cuento que sigue, ¿•s^hm,^ inte-
ligente, en vez de ^»",1.^..
—
(4) C. agua que salía del lago al río, y se fué a otro pareje. E
J. sallóse por el sitio por donde entraba el agua del río al lago y
se salvó. E
(5) A. Et muchas
I06 CALILA Y DIMNA
—
donar los medios de buscar.» Et J. E en cuanto a la inteligente,
la otra, pues se quedó en su lugar y no hizo caso de la cosa hasta
(i) non creo que el toro me sea infiel, ni que desee mi des-
C.
gracia, después que ha experimentado mi bondad y el bien que
le he hecho; pues en verdad que él no podrá recordar acción
mala que por mí se le haya ocasionado, ni buena que yo no le
Non lo impulsará a esto sino lo que has dicho del honor que le
has hecho, y de haberlo puesto en todas las dignidades, excep-
tuando la tuya, que es a la que él mira. Ca
(3) desconosgido, ¿=^lc, débil, incapaz.
(4) C. esto ha logrado, lo desprecia y busca
. (5) e-A. y B. o
(6) e — A. y B. o
(7) atada — A. y B. atado
(8) la— A. y B^ lo
108 CALn,A Y DIMNA
(1) C. can, que siendo curva se ata para que esté tiesa, y no
deja de estar tiesa mientras está atada; y cuando se la desata
—
vuelve a encorvarse y a torcerse. Et J. can, que se ata para que
se ponga tiesa, y n. d. d. e. recta m. e. a.; y c. s. 1. d. se encorva y
tuerce como antes era. Et
e
(2) —
C. y J. deben substituir la partícula L« por_5.
A. ñziese más délo que ellos tienen por bien,
(3)
(3) A. auna
(4) A. por mayor folgura lo averia
(5) C. fiziere almohada de las víboras y cama del fuego, esta-
ría más dispuesto que si supiese que su com-
a conciliar el sueño,
pañero le es enemigo y tuviese que permanecer con él mañana
y tarde. Et
(6) C. vagares y el que menos atiende a los asuntos (*); et
CALILA Y DDINA
(4) Qengeba, —
C. toro, J. como A. —
(5) C. de tus vasallos, que los ha enemistado contra ti et ha
fecho atrevidos contra En — J. como A.
ti.
CALILA Y DIMNA
pecto de él, e
estar muy Y
cuando el toro lo vio, le dio la bienvenida
afligido.
ser que esto le pesó e dixo «¿Quién fizo a este atrevido que diga
:
(2) de mando me
C. yerva; pues la fea codicia y el deseo
metieron en esta tribulación, y me han impedido la salida, como
queda impedida la abeja J. yerva. Y yo en esta tribulación soy
—
como la abeja
(3) C. nenúfar cuando se deleita con su esencia e
(4) C. bolar antes de que se cierre la ñor, y ciérrase sobre
ella e
(i) et — a. a
(2) que da consejos al
C. simiente en terrenos salinos o el
muerto.» Dixo —J. sienbra en terrenos salinos, y como
el que da
C. y J.
(3) al león. Y le dijo el león: t;De dónde vienesr> Y
contóle su
(4) «{Qué quieres?^ Dijo: «Quiero per-
C. fazienda. Díjole:
manecer en compañía del si quieres mi com-
rey.» Dijo: «-Pues
pañía, quédate como compañero, tranquilo y con buen pasto y
abundancia. Et —
J. Dixo el león: «¿De dónde vienes?» Dijo:
«De tal lugar.» Dijo: «;Y qué quieres?» Dijo: «Lo que me mande
el rey.» Dijo: «Quédate conmigo en la abundancia y seguridad
y buen pasto. Et —
B. seguranza, e averás aquí vigió e abun-
dancia.
re) J. vivir; pues cómame el rev, que con ello doy placer a mi alma.»
Y contestaron el lobo y el chacal: «Calla, pues no tiene gusto el rey
le
en comerte, ni tiene hartura en ti.» Dijo el abnue: «Yo saciaré al rey;
pues cúmame, que me alegro de ello y doy placer a mi alma.» Y le con-
tradijeron el lobo y el cuervo con su contestación: «Tú apestas; eres
sucio.» Dijo el lobo: «Yo en verdad no soy así; pues cómame el rey,
que tengo gusto en ello y se complace mí alma.» Y le contestaron el
cuervo y el abnue,'y dijeron: «Ya dijeron los médicos que quien quiera
morir que coma carne de lobo.» Et
132 CALILA Y DIMNA
sobre él y lo destrozaron.
(i) B. sus conpañas, porque sé que ellos se acordaron
(2) C. non di este ejemplo del león y de sus compañeros
sino porque sé que si ellos están de acuerdo para matarme, no lo
podré impedir; y aunque el juicio del león respecto de mí fuera
diferente de lo que es, no habrá en su alma más que buena dis-
posición. Et —
J. por que sepas que si los compañeros del león
están de acuerdo para matarme, pues no podré yo impedirlo ni
defenderme, aunque el juicio del león respecto de mí sea dife-
rente del juicio de ellos; porque esto no me aprovechará ni me
servirá para nada. Et
(i) C. ¿No ves tú que el agua es más blanda que la voz, y que
la piedra es más dura que el corazón, y que no deja el agua,
cuando persiste en correr sobre la piedra dura, de marcar enella
(2) C. si non lidiar con él; ca
(3) sinpleza, & va, piedad.
(•) Cc(v.Kfi
il-^' Os
s° '^'sz <3e o •,»>.-. iV-*-9 O'i 'J"^ ''^s si texto
o mejor, para que venga conforme con !o que sigue: «si es rauerto por
su enemigo», supliendo la partícula que falta autes de la palabra enemi-
go eu el texto árabe.
DEL LEÓN E DEL BUEY 13;-,
»D¡xo ella: «Dizen que eii una fuente avía dos ána-
des e un galápago, et eran amigos por la vezindat que
era entre ellos. Desí vino el tienpo que les menguó
el agua e secóse la fuente. Quando esto vieron las
(i) J. »Et solamente te conté esta historia para que sepas que
luchar con el león no lo tengo por consejo.» Dixo — C. "Et sola-
mente te conté esta histeria para que sepas que no conviene a
nadie exponerse a peligro, si es que puede; porque si lo matan,
se dice que pierde su alma; y si triunfa, se dice que es por el
destino; pero el sabio se apresura a lidiar y deja a un lado la
(5) Sengeba: —
C. toro: J. como A. —
(5) J. quando mirares al león lo que quiere él de ti.» [Dixo
—
C. Et dixo al toro: «Ciertamente que si tú miras bien al león,
verás manifiestamente lo que quieres de él.» [Dixo
en lo que me dices.»
(3) en que trabajavas?» — Falta en C, pero está en J.
(4) C. y J. quería y tú querías. Non
(5) C. amigos, si emplea su arte para romperla el (hombre)
dotado de astucia y suavidad.» En seguida Calila y Dimna se fue-
ron juntos para presentarse al león, y encontraron a Sengeba
que entraba hacia él. Y cuando lo vio el león se irguió sentán-
dose sobre su trasero, atiesó las orejas, abrió la boca e hirió
142 CALILA. Y DIMNA
fazer (i) ala ora déla lid, nin [ha] el consejo ninguna
mejoría del esfuerzo (2); ca en muchas cosas cumple
el consejo sin la fuerga, et non cunple la fuerga (3)
sin el consejo. Et quien quiere fazer engaño, e non
sabe manera délo que acaesgerá por loar su
la
sas (5) ante que las faga e se meta aellas, e las que ha
esperanza que se acabarán segunt él quiere, atrévese
que sabe que sele agraviarán, déxala[s].
aellas, et las
Et yo non te dexé de fazer entender tu yerro e tus
aleves al comiengo desta cosa si non por que (6) era
cosa que non podía mostrar (7), nin quería fazer tes-
(*) Creo que el te3rto castellano está mejor que todos los árabes,
siendo fácil de explicar el error de éstos, que ha consistido en haber
-escrito o leído los copistas Ov.*<-a., vida, en vez de ^ü»*.a., artificio,
astucia.
TOMO I. 10
1 4*5 CALILA Y DIMNA
sidad y el estudio.
esta frase.
:
DEL leo:; £ Ei
el hueco y di: «El torpe tomó los dinares.» Dijo el padre del
(2) A. alegrarteas en su
(3) C. aver la amistad del generoso, aunque no sea digno de
alabanza su consejo, y aprovéchate de su largueza y ayúdale
contu
(4) J. Et yo debía huir de ti; pues ;cómo podrán esperar tus
amigos en ti nobleza y amor, aviendo —
C. Et yo debía huir y
apartarme de ti; pues ¿cómo podrá esperar otro que no seas tú
lealtad y nobleza, aviendo — A. E cómo avrás tú esperanza en
tu lealtad
(5) C. y J. onrrara y había ensalzado, lo que has hecho? Et
(6) infantes.» —
C. y J. elefantesj»; pero está mejor el texto
castellano, conforme con el original sánscrito.
(7) C. non (hay cosa) más fácil que esta pérdida; pero alabo
a Dios por tu honradez.» Y se alegró el hombre de lo que oyó
al comerciante et
(8) C. salióse el mercader de allí y encontró a un su fijo p. q.
a. y lo cogió e
(9) C. torrnóse para el hombre, que ya estaba impaciente por
la ausencia del muchacho y le esperaba y llamaba. Y preguntó
al comerciante «-¿Viste :
DEL LEÓN E DEL BUEY 159
(8) En
C. y en J. empieza este párrafo con la última cláusula
del anterior, de modo que dice Y
llegaba el razonamiento de
:
TOMO I. 11
1 62 CALILA Y DIMNA
(i) En A.
falta este título, que se lee en B., conforme con C.
J. cuydoso y pensativo de
(*) lo que le sucedía por la muerte de
Sen?eba, y
CALILA Y DIMNA
(i) C. Dixo
e. 1. «Mucho he pensado y deseado hallar algu-
:
(') Este pasaje creo que también está alterado en C. La voz (yX<^
debe ser errata del copista y corregirse con ,<* •»-' u otra de esta
misma raíz.
(*') J» 1"s ™' amor y lealtad al rey me hicieron temer por él y
hacerle saber lo que le manifesté acerca del secreto de su enemigo trai-
dor. Y el rey viú por sí mismo en él lo que le pusieron de manifiesto las
señales que yo le había dado.
176 CALILA y DIMNA
(4) A. seña
(5) C. noche, sin llamarme ni tirar [piedrecitas] ni cosa ninguna
que pueda infundir sospechas, sería esto más fácil para mí y para
ti.» Díjole el pintor: «Tengo para esto un ardid que te alegrará,
> luego una vez en pos otra, aviendo fecho atu guisa?»
Et non digo esto que vos oídes (2) con miedo déla
muerte; ca maguer aborrida cosa sea, ninguno non
la puede fuir, nin ha otro rrefugio, e todas las cosas
(4) Et éste... pro.» —Esta cláusula está aquí fuera de lugar. Véa-
.se la nota 3 de la página siguiente.
(5) C. este criminal falso,
DE LA PESQUISA DE DIMNA 1 83
que oír tus sermones y los cuentos que cuentas a quien te hable,
es cosa más admirable para mí que lo que ha sucedido por tu
>
oviesen pro.» Dijo la madre del león: «¡Ah falso, traidor! Ante la
que devía.»
(2) dexiste — C. prometiste
(3) verdat — C. fidelidad
(4) C. fuese non m.e atrevería a hablar delante de él falsa-
mente nin
DE LA PESQUISA DE DIMNA I85
(i) callar —
A. y B. callas —
C. (*) del león que las palabras
de Dimna no hacían más que aumentar la benevolencia en aquél,
llegó a dudar; y le entró miedo, por temor de que el león creye-
ra, por algo de lo que decía Dimna, en la inocencia de éste y en
como esto
que sepáis; y sepa, por lo tanto, quien se atreva a decir una pa-
labra en mi proceso, que todo dicho tiene su consecuencia más
tarde o más pronto; y que su ileclaración en mi proceso ha de
ser un elemento de juicio que me salve o me mate. Y quien de-
ponga contra mí para que me maten, sin saber nada, o declare
en mi proceso por dudas o sospechas, le sucederá, por lo que
diga, lo que sucedió al médico que se atribuyó la ciencia que no
tenía. > Dixo
(l) C. gibdat de la India había un físico que tenía habilidad y
ciencia; y era, por esto, muy reputado en las operaciones que ha-
cia para devolver la salud a los enfermos que trataba con sus
curas y sus medicamentos; y murió este médico, y se aprovecha-
ron los hombres de lo que hallaron en sus libros. Y sucedió que
cierto ignorante se atribuyó la ciencia de la medicina, y se divul-
gó esta noticia entre los hombres. Et
les son esas señales y signos? Porque los que ignoran lo que son,
hablan mucho de ellos.» Y levantando su voz el encargado déla
mesa, dijo «Los sabios han dicho que
:
—
J. enxenplo para que
(3) Dimna.»
C. son en
(4) C. Y
cuando terminó su discurso fué mucha la admiración
de Dimna por lo que aquél había dicho, y dijo: «Por
iq8 calila y dimna
Dios; si hubiera hecho eso, en verdad que sería por ello nueva-
festar tus tachas antes de hoy sino la amistad que había entre los
dos; pues no quería ser yo el único que las manifestase sin (*).
Y puesto que ya me has difamado y has comenzado a calum-
niarme por la enemiga que me tienes, y me acusas sin conoci-
miento y falsamente en presencia de la corte, quiero y. d. 1. 1. que
sé que tienes, empezando por lo que callé de tu suciedad, porque
ninguno que las tenga podía pretender estar al servicio del rey
ni al de quien sea inferior a él.»
(i) C. Dixo el servidor de la mesa «¿Es posible que me insul-
:
tes (**) así, ¡oh miserable!?» Dixo Dimna: «Yo no te acuso sino
de los defectos que tienes, que son: la lepra de tu cuerpo, la
suciedad de tus piernas y la dolencia de tus testículos.» Cuando
el servidor de la mesa oyó de Dimna se abstuvo, y se abs-
esto
tuvieron todos los que estaban en la reunión de decir nada del
asunto de él, hasta que mandaron los jueces que fuese llevado a
a la cárcel (***).
cias a Dios, ensalzado sea, que no murió Calila hasta que me pro-
porcionó un amigo, un hermano, tal como tú. Pues yo confío en
el auxilio de Dios, ensalzado sea, y en su bondad para conmigo,
verdad que tú, respecto de los que entran y salen en casa del
león, eres más merecedor que otro. Dedícate, pues, enteramente
a mi proceso y pon en él todo tu cuidado, y entérate de lo que
se diga de él ante el león cuando se le haga presente todo lo
que ha pasado entre mí y mis adversarios, y lo que se sepa de
la madre del león en mi proceso, y lo que se vea acerca de la
página 201.
DE LA PESQUISA DE DIMNA 20$
bra, ca (2) veo que non sabes qué te tiene pro nin
daño por el engaño deste falso. Pues líbralo e folga-
rás; ca si lo a vida dexas confonderá tu mesnada.» E
torrnóse muy sañuda contra él (3).
Desí fuese Jauzaba e llegó a Dimna ala cárgel e
fízol' saber quanto dixiera la madre del león quan-
dol' leyeran los escriptos. Et en seyendo así fablando
vino el mandadero del álcali e del fiel e leváronlo ala
casa del juizio c pará[ro]nlo ante la mesnada e el pue-
blo, e ayuntáronse estando Dimna ant'ellos, Dixo el
mayor de la mesnada: «Ya sope yo tu pleito, Dimna,
et dixovislo quien es bien flel e es entendida la ver-
dat, et non avernos más que pesquerir de (4) ti; ca tú
con traygión e con falsedad e con tu mestura feziste
al rrey, nuestro señor, que matase a Seníjeba, su ami-
Et
go, et era leal e verdadero, sin culpa que fiziese.
sinon fuese por la su grant merged e por la su grant
piadat que nos mandó que sopiésemos más de tu
fazienda, ya el juizio manifiesto fuera dado de nos
contra ti.» Dixo Dimna: «Non fablas commo quien ha
piadat nin merged, nin commo quien cata al pleito
del que -rresgibió tuerto, nin commo quien sigue la
verdat nin el derecho; mas usas de voluntad e quie-
estos que tienes aquí delante y no digan nada, la opinión que tie-
nen ya los hizo convenir en que tú eres un criminal y que nada
bueno hay en tu vida, desde que cayó en sus corazones la sos-
pecha que de ti tienen; y no veo cosa mejor para ti sino que
confieses tu pecado para librarte del castigo del otro mundo y
volver a tener buena fama, por dos razones la una, por tu inven-
:
tiva para disculparte y fingir excusas con las que puedas quedar
libre; y la otra, porque el confesar tu pecado es mejor para tu
felicidad en la otra vida, [la cual vale más] que la feUcidad de
este mundo; pues los sabios ya han dicho «Morir honradamente
:
DE LA PESQUISA DE DIMNA 207
los escritos de los antiguos que el juez, para ser justo, debe co-
nocer las acciones de los buenos y las de los malos, para premiar
a los buenos por sus bondades y castigar a los malos por sus
maldades; porque si procede así, tienen los buenos mayor deseo
de hacer el bien y los malos de evitar el mal. Y mi juicio respecto
de ti, ¡oh Dimna!, es que pienses en la situación en que te hallas
:
(*) J. proceso,a no ser que te suceda, según dicen los sabios, que
dijeron : cQuien se atribuye una ciencia que no sabe y atestigua lo que
no vio, sucédelo lo que sucedió al halconero. > Dijo el cadí
: «¿Et
(••) maraziba, plural de (^Uj j.^, marzuban, sátrapa.
TOMO I. 14
C.AXILA Y DIMNA
que dizes?» Dixo él: «Sí.» Guando esto ovo dicho (3)
(3) A. rrostro
(4) C. poblado, no tardará en ocultársele el rastro de (**) vos,
(5) A. dixo
(6) C. Et vi lo que tú has hecho y tu fidelidad en las promesas
con tus amigas, y lo que por ti ha beneficiado Dios a las palo-
mas, y [por esto] que he visto ove
(7) C. vine a ti por este.» Dixo
(8) carrera —
C. v «.-^.co, causa, por j_J--^.^-*o, camino, ca-
rrera.
EL CUERVO, LA COLLARADA, EL RATÓN, ETC. 223
(3) C. contra ti, sino por daño de vos contra mí. Y para la
enemistad natural no hay reconciliación, sino el pecado que
vuelve a la enemistad. No hay paz... (*), ca
(3) e-Co
(4) C. y J. puerta sin gustar comida fasta
(5) C. comengé con lo que te comengé si — J. non te he pro-
bado con lo que te he probado si
TOMO í, 15
226 CALILA Y DIMNA
J. arráncala y échala.»
EL CUERVO, LA COLLARADA, EL RATÓN, ETC. 22/
—
(6) A. «Escarrnio fazedes de mí, que me demandades que
vos cuente nuevas, e vos faziéndose esto.» C. contigo y tú sue- —
nas tus palmas como si te burlaras de mi cuento (**); pues ¿por
qué me interrogaste?-»
—
mujer: «Por J. miénbrome de las palabras del que dijo: «Por
(6) C. oí que el hombre y la mujer hablaban una noche, y oí
la conversación que sostenían y que el hombre decía: « Yo J. oí —
que le decía una noche a su mugir:
(7) J' y C. 'i Cómo convidas a comer a los hombres, si no hay
en tu casa (*) nada que sobre a la familia, et
«Ahuyenta, etc.
E QUE SUBE EN ÉL, e los otros fion, que por alguna cosa
lo puede fazer. Pues búscame un agadón, e cavaré
enesía su cueva e quifd sabré algo desu fazie7ida> (4).
*Ei estonge demandó el rrcligioso (5) un agadón, e trá-
xole al huésped (6), et yo estando en otra cueva ajena,
oyéndolo que dezían. E avía enla (7) mi cueva mili
maravedís (8), et yo non sabiendo quién los posiera ai]
enpero yo menedvalos e gane(;ía con ellos (9) quando
quier que me venía emientes. Así qu'el huésped cavó
la cueva fasta que llegó aellos e sacólos e dixo (10):
«Este mur non podría saltar do saltara si non por
falta, dice así: «Y vi [que] quien [tiene dinero tiene] amigos; quien
el^„yOi camino, por í^^-**j, terreno salino, que se lee en J., con-
forme con el original sánscrito. (Véase Panchatmitra, traducido
por Alemany, libro 11, zloca 89.)
(i) C. tribulación y atrae hacia el que la sufre el odio de los
hombres; y por esto se ve privado del seso y del valor, y huye de
él la sabiduría y la educación, y es sujeto de la sospecha y sujeto
en quien no cabe la
(2) C. Et aquel a que... vergüenga; —
Falta en C, pero está
en J.
alabamiento del rrico que non sea por denuesto del (i)
pobre; ca si fuere esforgado dirán que es loco, e si
(i) a. E non ha cosa que bien esté el rrico que mal non
esté al
(2) C. y J. parlero, y si fuere callado dirán que es ignorante.
Pues
(3) C. pobreza que obliga al pobre a pedir, y sobre todo a que
pida alos
(4) C. y J. escaso vil. Et
(5) C. torrnar o [se viera afligido] por tal pobreza que lo for-
(5) E —
A. yB. que
(6) C. et vi que exponerse a grandes peligros y emprender
largos viajes en busca de riqueza es cosa más ligera al codicioso
que al generoso parar la mano para recibir dinero. Et
(7) C. y J. Et no vi cosa como el contentamiento. Et
(8) obra —
C. y J. ^J-J»^, sabiduría, por ^J-^, obra.
enél ha, non le faría pro sinon lo poco, tanto que non
oviese menester lo ageno (2), que todo lo ál en sus
lugares se queda, e non ha dello si non la vista del
ojo, así commo otro omne qual quier (3). Et vine
conel cuervo coneste acuerdo, et yo ser tehé amigo e
CONPAÑERO, e tú otrosí quiero que en tal lugar me
tengas.»
Et pues que ovo acabado el mur lo que dezía, rres-
pondió el galápago muy blanda mente e a sabor, e
díxole: «Ya oí lo que dexiste muy bien (4), enpero
véote ESTAR ASÍ coMMO
TRISTE, E rrcmiéubraste (5)
de cosas que tienes enel coragón; e por que aquí eres
con ñusco en ageno lugar non seas de tal acuerdo, e
DÉXATE ENDE c scpas quc cl bucu dezir non se acaba
si non conlas buenas (6) obras. Ca el enfermo que
(3) pagiendo —
Falta en C, pero está en J.
(4) C. y J. canpo, y no me dejaron de perseguir los
(5) C. amor y nuestra morada,
(6) C. acogían todos los días e
(7) C. ora, y como no llegase ovieron — J. ora, y no vino. Y
como se tardase ovieron
(8) el galápago e el mur — Falta en C, pero está en J.
(4) A. ligero?»
(5) A. ligero
(6) C. vistas, ni hay previsión contra ellas?»
(i) ayudarías —
Según el texto castellano, el verbo sU de C.
i —
no debe corregirse por ^^jSu^, como propone Cheikho, de
acuerdo con las demás ediciones árabes, sino por o^- El error
del copista consistió sólo en poner el punto bajo de la letra, en
vez de ponerlo encima.
(2) C. y J. e yo temería al cazador por ti.»
calador tanto que sea gerca del, ca fío por Dios (3)
que si te él que dexará la ballesta e la rred e
viere,
el galápago, e irá atí por te tomar. Et quando fuere
(i) C. vayas tú, ¡oh gamo!, hasta que llegues cerca del
camino
(2) B. estás ferido, et — C. llagado (*) verdaderamente, et
galápago, e — como A.
J.
(3) a — A. e
(4) C. dimonios.» Y se volvió alejándose [sin] buscar cosa [nin-
guna] y sin mirar hacia ella. E —
J. dimonios.> Y se volvió aleján-
dose sin buscar cosa '[ninguna] ni volver la cabeza hacia ella. E
(5) C. seguros. Y éste es el cuento de los amigos que mutua-
mente se atildan. Fin del libro de la paloma collarada.
(i) a. lealtad
(2) C. Dijo el rey Dibcelim a Bidpa el filósofo: «Ya me has
forjado el ejemplo de los amigos puros que se ayudan y se aman;
pues fórjame, si te parece, el ejemplo del enemigo en quien no
conviene que uno se engañe, aunque le haga buena cara y le
muestre humildad públicamente. > Dijo el filósofo: «Quien se
deja engañar por enemigo astuto, conocido por su enemistad, le
sucederá por esto lo que sucedió a los (*) cuervos». Dixo
(3) C. filósofo : «Había en una tierra, en uno de sus montes,
un — J. como A.
(i) a. avían
(2) A. muchos nidos de — C. monte un lugar (*) en el que
había mil buhos,
(3) C. corriólos, con los buhos que le acompañaban, de tal
(*) No
tienen sentido las dos palabras últimas de este párrafo. —
J. dice:logremos nuestra oportunidad y nuestros deseos y rechacemos
de nosotros al enemigo.»
DE LOS CUERVOS E DE LOS BUHOS 259
(i) extremidad — C. y
J. ¿^ »-¿J extrañamiento,
\ , expatriación.
(2) C. nobles y —
más dignos. E J. como A.
(3) C. y J. mesnadas y perderás la vida.> Et
(4) A. irguieren — C. inclinares
(5) C. menor aproximación, onde mi consejo es hacer la gue-
rra y sofrir.»
(5) liebre, —
Así en J. C. Feyrus, —
(6) C. fuente y miró en ella e vido
(7) liebre :
— C. y J. Feyrus
(8) C. quando metió su manga en el agua y la removió, seme-
jóle
alcalde?» Dixo
(3) A. deste
(4) rrío — C. y J. mar
(5) C. rreligioso que hace oración todo el día e n. f. m. a. n.
(4) A. bueno
(5) C. y J. obras que haya verificado. Et
(6) A. demandar la cosa que ha de turar e que le torme
(7) del otro mundo. —
Falta en C, pero está en J.
CALILA Y DIMNA
(2) A. es
(3) puesta —
B. cabsado
J. Et ya habéis plantado vosotros los cuervos, entre nos-
(4)
otros y vosotros, el árbol del odio, de la enemistad y del rencor.»
C. Et ciertamente vosotros los cuervos, ya habéis plantado entre
nosotros un árbol de odio para siempro
(5) C. >Et dijo el buho estas palabras muy sañudo, y se fué
omiziado.
(6) C. y J. dixe, que con ello he ganado enemistad contra mí
y contra mi gente, et
(7) C. devía hablar y trabajarse
(8) C. paré, y especialmente cuando fueron las palabras cara
a cara; pues en verdad, las palabras en que está presente el que
las dice al que las oye, por el disgusto que éste recibe y por el
TOMO I. 18
274 CALILA Y DIMNA
(5) Et yo —
En C. debe corregirse el UóU en bl^, como se
lee en conforme con A., y arreglar el resto del párrafo en vista
J.,
del texto de J. y de la versión castellana.
(6) traxóse —
B. traxese
fue eso?»
Dixo el cuervo: «Dizen que un rreligioso conpró
un ^iervo (5) para fazer sacrificio, e llevólo consigo
por una cuerda (6). E viéronlo tres (7) omnes enga-
ñosos, e consejáronse entre sí (8) cómmo lo engaña-
rían. Et füéronse al camino por do él avía de
IR (9), et paró se el uno delante e díxole: <¡0h tú,
(3) — —
Et pues... can, Falta en C. J. Et no dejaron al religioso
con estas expresiones y otras semejantes, hasta que no dudó de
que lo que llevaba tras de sí era un can,
(4) C. E soltó el chivo y lo dejó, y lo tomaron los tres hom-
bres e
(5) por arte e —
Falta en C, pero está en J.
(6) A. fagas saña entre mí e ti
(7) C. tengo por bien que se ensañe el rey contra mí y man-
de ante su mesnada picarme y herirme atanto
>
CALILA Y D1MN\
esto Dixo
(3) C. «<E por qué fué ese desprecio?» Dixo
(4) C. non podréis lidiar —
J. como A.
los cuer\-os. Et
(5) avremos gran espagio
C.
(6) C. su consejo y de su falsedat,
(7) C. dizen «Quien tiene en su poder un negocio importante
:
conpañia en un camino
fiirtar, c fizo conél [¡m] diablo
QUE ANDAVA cn fomia de ame. Dixo el ladrón al dia-
blo: ^ (Quién eres}-» Dixo: o\Yo só\ el diablo: vo en pos
desie rreligioso por le afogar qtiando dormiere-» (i).
Dixo el « Yo seguile
ladrón (2) por le furtar aquella
:
(2) buho: —
C. y J. visir:
(i) C. ella [lo] estuvo mirando hasta que salió por la puerta.
(4) C. ca el cuervo es
(i) soltóla —
B., que en vez de rata dice mur, soltóle.
(2) C.íDizen que era un b. o. rr. c. b. o. Dios, y mientras es-
tava u. d. rr. d. u. rrío, pasó p. y u. m., e. 1. enlas u. u. rr., et ca-
yósele de las uñas delante
(3) C. en el extremo de su manga, e —
J. como A., y también
C, si en él se corrige d^j » extremo de su manga, por ^s^,
,
hoja.
mas guiar tehé a otro que es más fuerte que yo, que
con su grand fuerga non puedo aver derecho conél, e
non me puedo defender dél, que me faze quanto daño
puede.» Díxole el rreligioso: «¿E quién es ése.^*»
Díxole: «Es un mur, ca éste me faze quanto daño
quiere, que me forada de todas partes.»
»Et fuese el rreligioso al mur, e llamólo asícommo
alos otros, e díxole el mur: «Atal só yo commo tú
dizes en poder e en fuerga; mas ¿cómmo se podrá
guisar que yo casase con muger seyendo mur e mo-
rando yo en covezuela e en forado.^» Dixo el rreli-
gioso ala moga: «^Quieres ser muger del mur, que ya
sabes commo fablé con todas las otras cosas, e non
fallé más fuerte qu'él, e todas me guiaron aél? ¿Quie-
res que rruegue a Dios que te torrne en rrata e que
te case conél? E mor[ar]ás conél en su cueva, et yo
rrequerir tehé e visitar tehé, e non te dexaré del
todo.» Díxol' ella: «Padre, yo non dubdo en vuestro
consejo. Pues vos lo tenedes por bien, fazer lohé.» Et
rrogó a Dios que la torrnase en rrata, e fue así, et ca-
tengo como si fuera mi hija; te voy a casar con ella, porque ella
con (i) que se lava, nin a su lecho, nin a sus paños (2),
nin a su bestia, nin a sus armas, nin alo que ha de
comer, nin a ninguna de sus cosas» (3),
Dixo el rrey cielos cuervos (4): «Non murieron los
Ijuhos non por necedat (5) e flaqueza de con-
si
> yan (7), et pocos son los que han sabor délas mugeres
>que afrontados (8) non sean, et pocos son los que mu-
(4) A. cuervo
(5) A. desdén
(6) C. «Non murió el rey de los buhos por culpa suya, si non
yj. n. e. f. d. consejo de sus privados.» Dixo
(7) «Pocos... cngreyan, — En C. no se entiende este pasaje,
que en J. viene a decir lo mismo que en A.
(8) A. aforcados
296 CALILA Y DIMNA
(i) J. rranas, adonde ella iba ya antes y solía cazar las ranas
para mantenerse. E — En C. falta «para mantenerse».
(2) fuente, — C. estanque,
(3) C. rranas que cazaba, et
libresde ellos.» Et
(2) A. fortaleza
(3) C. maniera de luchar con la suavidad y el engaño, es más
fuerte para desarraigar al enemigo que la manera de los grandes
ejércitos; que
(4) A. deve omne desdeñar,
(5) C. cuervo : <Lo que ha sucedido ha sido por la buena ven-
tura del rey y por su seso. Et
(6) al cuervo :
— Falta en C, pero está en J.
DE LOS CUERVOS E DE LOS BUHOS 3OI
se logra. Y conviene
que el rey esté atento a sus asuntos y tenga
firmeza en ellos, pues él es victorioso, respetado; si no desempeña
bien su gobierno y trata bien a su pueblo, es poca su quietud y
reposo, así como el ximio que siempre se mueve y agita. Y un
reino es [cosa] preciosa e insigne; y quien lo obtenga, sepa go-
bernarlo y defenderlo, pues se ha dicho «Él es en su poca es-
:
(*) Así dice C, traducido literalmente y tal como reza íu texto, que,
como se ve, es muy incorrecto.
[CAPÍTULO VII]
(i) a. comadre
(2) comadre :
— C. vecina
(3) C. atí y no llora por ti cuando tú lloras por él. Pero
(4) C. galápago perdía el color y enflaqueció tanto que quedé
muy desfallecida y consumida.
(5) «Hermana, —
C. «Querida,
(6) comadre — C. vecina
(7) C. dixo] : «Muy grave es el estado de tu mujer. Su enfer-
30S CALILA Y DIMNA
(3) omne —
C. amigo
los días, et eso non faze atu muger pro; mas busca físi-
(i) A. un
(2) A. faga dapño.
(3) C. galápago «¿Qué : te impidió, ¡oh amigo!, si sabías esto,
Dijo «¿Y qué te movió a ello?» Dijo «Es costumbre entre nos-
: :
otros los simios, cuando salimos a visitar a los amigos, dejar nues-
tro corazón para desechar las sospechas de él; pero si quieres
que te lo lleve, lo haré» (*). Et
(4) C. conél apresuradamente ala
gua la cevada.»
>Dixo el lobo gerval: «[;Et cómo consientes eso?»
Dixo «¿Et qué puedo fazer, e cómo escapar de las
:
león.
[A., ful. 67. — B., fol. 84. — C, págs. 175 a 177. — J., págs. 276 a 280.]
(3) C. omne precipitado en sus cosas, que las hace sin preme-
ditación y sin reflexión* (*). Dixo
(4) A. non faze sus cosas devagar, —
C. Dixo Bidpa el filó-
sofo : «El que no sea en sus cosas y en sus empresas pausado,
siempre
(5) A. e fue su marido
CALILA y DIMNA
(i) a. tanto
(2) que está más completo que C, dice Et comía de ello
J., :
se fué con él, y no dejó con su hijo a nadie, sino a una comadreja
que tenía domesticada en casa, y la dejó con el niño, y se fué a
casa del sultán. Et
(2) e ensangrentó se todo del. —
Falta en C, pero está en J.
(•)
J. dijo ella: «Éste
[CAPÍTULO IX]
(2) C. *Dizen que en un lugar asi que asá había un árbol muy
e las naves escapan por los omnes, e así fío por Dios
que escaparemos desta tribulación amos, ayudando
nos» (i).
de cuyta; Ca ma-
los fijos délas bestias siguen a sus
dres mientre han de mamar dellas, et quando las
pueden escusar fuyen dellas, et el enemigo quando
se torna amigo por esperanga de algunt pro, después
que lo acaba tórnase a su enemistad, así commo faze
el agua quando la escalienta el fuego, que si se parte
[CAPÍTULO X]
(i) Catra. — C. y
Fanza (01X9), y así en todo el cuento.
J.
(2) hombre que se halla rodeado de ene-
C. oí el ejemplo del
migos y solicita el auxilio de uno de ellos y se reconcilia con él,
hasta que escapa mediante esta [reconciliación] de lo que temía,
y se salva. Pues dame, si te parece, ejemplo de dos enemigos, a
uno de los cuales conviene que se guarde del otro.» Dixo J. oí —
este ejemplo; pues dame ejemplo de los enemigos, de los cuales
uno de ellos no puede menos que temerse del otro.» Dixo
(3) guardar. —
En J. <íJisl:S''^\ mejor que en C, -cL^a-JLvj^)\
(4) C. guardar. Y parió su mujer un J. como A. —
DEL REY BERAMER E DEL AVE CATRA 337
(4) A. veno Catra e falló su fijo muerto e dio vozes e fizo grant
duelo (**)
fué traidor con el tuyo, y ya tenemos cada uno lo que nos con'es-
ponde; pues ya no... seguridad y no temas.» Dixo
(6) C. fuere y más te honrare, tanto
(i) C. acuerdo non debe creer que aquel que le tiene rencor
y a quien él ha ofendido, se olvide de la ofensa y se desentienda
de ella, et
(7) C. y J. es la tierra do
DEL REY BERAMER E DEL AVE CATRA 347
cirse dicha palabra por «valor, valentía». Asi dice: mesura o va-
lor en la defensa o franqueza.» — J. como A.
(*) Este capítulo sigue en C. al que en la versión castellana es
«1 VIII, o sea el <Del rreligioso e del can».
DEL REY CEDERANO 349
(i) a. fieles
(4) si-A.yB. e
350 CALILA Y DIMNA
(') Cuentan que había uu rey llamado Beled, y tenía un visir lla-
J.
mado que era un devoto religioso. Y el rey estaba durmiendo una
Iled,
noche y vio durante su sueño ocho visiones, que le espantaron, y des-
pertó muy asustado. Y llamó
352 CALILA Y DIMNA
(2) Et díxoles
... cosa es.»: — —
Así en J. El copista de C. alteró
este pasaje,que dice: Et díxoles el rey: «La muerte es mejor que
lo que acabo de oír. ¿Cómo he de matar a estas personas que
amo tanto como a mí mismo y he de cometer tal crimen e iniqui-
dad? Y nadie puede escapar de la muerte en ningún estado y ;
(*) J. temo que les haya manifestado alguno de sus secretos, y temo
que le hayan aconsejado algo que le perjudique y lejneta en algún pe-
ligro. Pues
:
estado.»
(2) C. «Non te lleve el rencor en semejante día como éste; ca
(3) cuydado y se me presenta Helbed, desaparece de mí
C.
esto; pues (*) vete hacia él (**) y dile lo que entendieres que
jiueda alegrar su espíritu, y le aliviarás de la pena que tiene» (***).
(4) C. Et cuando esto oyó Helbed, se dirigió hacia el rey y
entró junto a él e —
J. Et fuese Helbed y entró al rrey e
hazme saber cuál sea su respuesta, pues esto para mí y la gente del reino
es gran alivio.»
DEL REY CEDERANO 359
(i) C. as, ¡oh rey!, señor recto y loado, y qué es lo que te di-
jeron los Albarhamiun, pues te veo cuitado y triste? Y si es que
conviene que yo haga algo en que consista la desaparición de
tu tristeza y tu alegría, y te conviene para ello que nosotros per-
damos la vida, hazlo; y si estás airado contra nosotros, te daremos
satisfacción y haremos lo que te contente.»
(i) C. Et dijo Helbed : «No quiera Dios que estés triste, ¡oh
rey!, ni que te aflijas, ca — J. Et cuando oyó esto Helbed se en-
tristeció, pero impidióle su buen juicio demostrar al rey su tris-
do dellos
(3) C. mili. ¿Y acaso crees que ellos han olvidado esto? Pues
por mi vida non
(4) C. vissión ni enterarles de tus secretos; pues ellos sólo
quieren, con la expHcación que te dan de tu visión, tu ruina y la
pérdida de tus seres queridos y el exterminio de tus visires, [que
son] gente buena, pnidente y justa, y [la de] tus vehículos, con
los que has triunfado de ellos. Pues vete a ver a Caymerón, —
J. vissión ni enterarles de ella; pues sólo te dijeron lo que te dije-
ron por el odio que te tienen, por ver si así te pierden y pierden
a los que tú amas, y a tus visires, y alcanzan de ti lo que se pro-
(•) J. a quien lo conozca. > Y tú, ¡oh rey!, no conoces a tus eaemigos,
et niénbrate, q. [I. d.] A. n. b. t. quisieron, et
DEL REY CEDERÁN O },G}
(3) J. monte blanco, pues ello es que te vendrá del rey Cai-
dor (**), quien se te presentará con un elefante blanco que —
C. está alterado en este pasaje.
(4) J. lo que veías sobre tu cabega que parecía fuego, pues
ello es que te vendía del rey de Alarzun (***), quien se te pre-
sentará con una corona de oro guarnecida de perlas y de jacin-
tos. Et —
En C. falta esta cláusula.
(5) C. ave blanca que te picava J. como A.—
(6) C. y J. cabega con su pico, esto
(7) temas J. —
,J-^j, mejor que C. ^J-^-> •
(*) Ruz o Raz, j\, pero es probable que el original árabe del que
se hizo la versión castellana dijera f^si romano.
(**) Caidor por Candor, errata fácil en árabe.
(***) AlarzuD, — También corrigiendo en este nombre el \ ea r», que-
da legitimada la versión castellana.
366 CALILA Y DIMNA
rrey fue muy ledo e ovo grant plazer e dixo: «Si non
que me ovo
Dios merged (3) e me acorrió con con-
sejo de Helbed, fuera perdido eneste siglo e enel
otro. Et por esto conviene al omne cuerdo que se
aconseje toda vía con sus amigos que sabe que lo
desengañarán (4); ca Helbed me consejó muy bien, e
yo creíla e por ende só agora gozoso (5), et afirmó
et dixo
(4) C. díxole: «¡Oh Beled! ,;Xo ves al rey del mundo cómo
lo ha despreciado esta mujer y le ha hecho lo que le ha hechor
Pues vete con ella y córtale el cuello y no le tengas compasión.»
Y salió Beled con Helbed de la presencia del rey, et
(5) C. «Non la mataré yo fasta q. s. a. 1. s. d. rr., c. es mujer
sesuda, señora entre las reinas, tal que n. h. s. semejante entre
las mujeres por su piedad y saber, et
(6) A. de
(1) el — A. al
(*) J» pena y alcanzaré entre todos los hombres del mundo gracia
por ello.
372 CALILA Y DIMNA
(i) a. veno
(2) A. con su espada sangrienta,
(3) C. pesante y dijo al rey: «Ya he cumplido tu orden en
Helbed.» Et
(4) C. menbróse de hermosura de Helbed y de su seso, y
la
FUE ESO?»
[Dixo Belet] «Dizen :
(5) que un omne traía (6) un
Helbet» (7). Dixo Belet: «Dos son los que deven aver
dón del otro siglo (4), e del que non tuelle los oios
délo que non es suyo, nin sus orejas de escuchar [al
omne malo], nin su vergüenza délas (5) mugeres age-
nas, nin su coragón del pecado e déla cobdigia que se
le antoja; ca esto[s] átales irán ala pena perdurable.»
c. V. el rrío q. n. h. a., et
: 1. q. n. h. rr. e la mujer q. n. ha ma-
1. ,
demí» (2). Dixo Belet: «Tres son los que deven aver
pesar: aquel que ha gordo ca vallo e fermoso e ha
malas mañas; et el que ha mucho caldo e poca carr-
ne, por que pierde el sabor del comer (3); et el que
se casa conla muger de grant linage e fermosa e non
la puede honrrar, onde le (4) ha ella de dezir (5) lo
que le pesa.»
Dixo el rrey: «Perdióse Helbet de balde e sin rra-
zón» (6). Dixo Belet: «Tres son los que se pierden (7)
sin rrazón el omne que viste los buenos paños e
:
necio, Beled.> Dixo Beled «Tres deben ser tratados como ne-
:
y confían en que sus almas estarán con las almas de los temero-
sos de Dios y bienaventurados dignos de perdón y clemencia.»
Dijo el rey: «Yo soy el que doy tormento a mi corazón por causa
de Helbed.» Dijo Beled: «Tres son los que se atormentan el co-
razón el que va a la guerra y no se defiende y lo matan; el que
:
otros dos, Beled.» Dijo Beled «Tres son aquellos cuya amistad
:
(i) Dixo Beled «-Tres son los que no deben contarse en-
C. :
bet, Belet.» Dixo Belet: «Tress (i) son los que non
fazen derecho: el que cree que non dize verdat, et
al
Beled!» Dijo Beled: «Cuatro son los que pierden el bien: el que
-contamina su cuerpo obrando ma! y pecando, el villano envane-
cido de sí mismo, el que se ha habituado al robo y el que es
pronto en ensañarse y tardo en contentarse.» Dijo el rey: «No
conviene que me fíe de ti, Beled.» Dijo Beled: «Cuatro hay en
quien no se debe confiar: la serpiente enfurecida, la bestia fiera,
temida, los criminales culpables y el animal contra el que se ha
decretado la muerte.» Dijo el rey: «En verdad que no conviene
que los hombres graves rían ni jueguen.» Dijo Beled: «Cuatro
son aquellos a quienes no conviene reír ni jugar: el rey que es
gran sultán, el religioso dedicado al servicio divino, el hombre
sabio de baja condición y el hombre de mal carácter y de natural
avaricioso.»
(i) C. «Non me conviene mezclarme contigo, Beled, después
que mataste a Helbed.» Dixo
(2) Dixo el rrey... buhos.» —
Esta cláusula está dislocada.
Hállase en C. una página después, o sea en la 198, línea 18 y si-
guientes. (Véase la nota 4 de la página siguiente.)
TOMO I. 25
386 CALILA Y DIMNA
autoridad.» Dijo el rey: «Cuando veo mis diez y seis mil mujereS;
sin estar entre ellasHelbed, es muy grande mi tristeza.» Dijo
Beled: «Cuatro son las mujeres por las cuales no debe uno
entristecerse la torpe que se atreve con su marido; la casquiva-
:
led. —
¿Y cómo si no hubiera sido por vuestra clemencia y por la
—
amplitud de vuestra piedad os hubierais arrepentido de lo que
habíais decidido de mí, en la forma en que os habéis arrepentido?
Pues ciertamente, si no os hubieseis acordado de mí hasta el fin
de la eternidad, merecía yo muy bien, por lo que hice, el castigo
por el cual el rey mandó que me mataran. Y a vuestra clemen-
cia se os asoció Beled en abstenerse de matarme; que si no
hubiera sido por la confianza de Beled en la amplitud de vuestra
clemencia, además de su bondad, ciertamente que cumpliera el
(6) ^-C.y
DEL ARQUERO E DE LA LEONA E DEL AXARA 399
(3) C. ne(io deja tal vez de hacer daño a otro por el daño que
él recibe, como la leona que se dejó de comer la carne de las
bestias por lo que le ocurrió con sus leoncillos; y por la exhorta-
ción del anxahar, comió hierba y se dedicó a la religión y a la
(A., falta.— B., fol. 99 t. — C, págs. 24 j y 244. —J., págs. 340 a 343.]
<; Qué tan dulces e tan sabrosos son estos dátiles! Man-
dase Dios que enla tierra donde yo soy nagiese tal fru-
ta, como quier que ay otras buenas frutas que cunplen
asaz, con que se pueden escusar los dátiles^(i). Dixo
de los villanos contra los nobles. Y puestas las cosas así, conti-
núa el mismo desorden hasta que llega el peligro supremo de
[A., fols. 79 a S2. — B., fols. loo a 105. — C, págs. 217 a 227.
J., págs. 298 a 312.]
(6) A. creas
(7) A. quieras;
(8) C. Dixo el rey (*): «No te preocupe (*) la enemistad de
rey contra mí, que no se apresure [el rey] en mi asunto, sino que
se asegnre de lo que le denunciaren de mí y haga una inves-
tigación acerca de ello. Luego haga el rey lo que por bien
tuviere; pues cuando yo fuere seguro de él (**) en esto, le ayii-
daré con mi alma y con la mayor sumisión, y haré aquellas cosas
de que me encargare, con lealtad y vehemencia, y pugnaré por
que no se le dé carrera [de proceder] contra
(2) C. vasallos en pedirle consejo y en la dirección de su ca-
sa; y aumentaba cada día su admiración por él y lo acrecentaba
en honores y oficios.
(3) le —
A. lo
(4) C. pesó a aquellos que rodeaban al león, de entre sus
allegados y servidores y oficiales, y le odiaron y envidiaron
et c. e. p. entresí para incitar al león contra él para que lo ma-
(*) Creo que los textos árabes deben corregirse de modo que digaa
lo mismo que el castellano.
DEL LEÓN E DEL AKXAHAR E DEL RELIGIOSO 4I3
las otras tachas que dizen del.» Dixo otro: «Si fallar-
des la carme en su posada, tenedlo por falso, e sea
justiciado» (2). Dixo otro «Non deve ninguno ser
:
Dixo otro: «Si este divino rreligioso tal obra fizo (6),
por grant maravilla lo tengo. > Dixo otro: «Si esto fa-
llamos por verdad, non es tan sola mente falsedat,
mas conla falsedat desconocer el bien e la merged
DEL SEÑOR, e atreverse a tan grant fecho» (i). Dixo
otro: «Vos soys verdaderos conosgedores de dere-
chos; non vos puedo desmentir; mas por ver si es
verdat o mentira, mande el rrey ir a su posada (2) e
cátenla.» [Dixu otro:] *Sz su posada non es (3) cata-
(•) Como se ve, tanto C. como J. están faltos, y entre los dos com-
pletan la versión castellana: en C. falta el verbo^ &Á^o, perdonar, des-
pués de «de éste», y en J. falta el verbo ».i^,s^ , investigar, antes d«
«lo perdonará».
:
rido, nin los fijos si non por los padres, nin el dis^i-
plo si non por el maestro, nin los vasallos si non
por el (i) duque, nin el rreligioso si non por la ley,
nin el pueblo sinon por el rrey, nin los rreyes non son
TOMO I 27
8
41 CALILA Y DIMNA
(i) C. >E
(*) debías haber meditado acerca del asunto del lobo
cerval muy
detenidamente, y sabrías que él, cuando nunca se
ha comido la carne que alguna vez tú le has encomendado en
mayor cantidad que ésa, y más aún, la carne que él ha puesto
muchas veces para tu comida y la comida de tu ejército, en ver-
dad que él no es capaz de robar un poco de carne que le man-
daras tú guardar. Investiga, pues, este asunto, que en verdad
siempre ha sido costumbre de los malvados y de los viles
envidiar a los varones esforzados y a los excelsos, y perjudi-
carles y preocuparse de ellos. Y
el lobo cerval tiene virtud y
lla fuese. Y ¿quién entre tus compañeros tiene esa virtud cuando
la conducta de aquél solamente es comparable a la conducta de
los padres, hijos o hermanos?>
(i) a. sabio
(2) entonce — A. conteste
(3) C. león conél, entró uno de los que habían tramado el ardid
contra el (*) lobo y manifestó al león el asunto. Y cuando
cei~val
contra mí. Y
hacen esto, no necesitarán, para que el rey les
si
[A., fols. 82 a 8+. — B., fols. 105 a 107. — C, págs. 228 a 232.
J., págs. 343 a 3 so.]
con A. que C, pues dice así pero que los reyes y los demás hombres
:
entendidos, etc.
428 CALILA Y DIMNA
(*) J. hombre del pozo, pues no hay cosa más desagradecida que el
[A., fols. 84 a 88. — B., fols. 107 a 112 v. — C, págs. 233 a 238.
J., págs. 350 a 359.]
(i) C. El hijo del rey, el hijo del jerife, el hijo del comer-
ciante y el hijo del labrador. — J. El hijo del rey y sus compa-
ñeros.
(2) C. Dixo el [rey al] filósofo : «Ya he comprendido lo que
me has dicho que debe hacer el rey cuando se propone hacer
bien a la gente reconocida, ya vivan cerca de él, ya lejos; pues
cuéntame por qué necio obtiene preeminencias y honores y
el
si non con sus ojos, nin oye si non con sus orejas, así
el saber non se acaba si non con sofrimiento e con
seso e con gertedunbre; enpero a todo esto venge la
ventura que es prometida a cada uno ei el juizio
divino, que la cosa avuya al orne o le mata (i).
Así QUE algunos son a que Dios da buena an-
dancia EN su RRIQUEZA, ET RRECABDAN LO QUE QUIE-
REN SIN su ALVEDRÍO E SIN NINGUNA OBRA, ET ALGU-
NOS SON QUE SELES ACABA SU BUENA ANDANgiA, QUE
LOS GUÍA Dios A SER ENVISOS ET LOS ENDERESgA ET
LOS ENSEÑA DE GUISA QUE CONOSgEN BIEN LAS COSAS E
LAS SABEN BIEN TRAER, ET ES LES ESTO MOVIDO DÉLA
VENTURA QUE DiOS DIO E PROMETIÓ POR JUIZIO; EN-
PERO NON AYA NINGUNO ESPERANgA EN NINGUNA
BUENA MANERA, NIN EN NINGUNA BUENA BONDAD QUE
OMNE AYA, [que] DURE SIN SESO E SIN SUFRIMIENTO E
SIN BUEN ACUERDO CON QUE MANTENGA SU FAZIENDA.
Et NINGUNO NON PUEDE POR ARTE NIN POR SESO DES-
VIAR LO QUE Dios le judgó e prometió de antes.
Et esto paresge enel enxemplo del [fijo del] rrey
que fizo escrivir sobre la puerta de su gibdat que
dezían Matrofil, que el buen entendimiento e la valor
o la femengia e la arte eneste mundo, todas son en
se la nota siguiente.)
440 CALILA Y DIMNA
ríaes lo mejor de todas las cosas. > Dijo el hijo del jerife: *La
hermosura es mejor que lo que habéis dicho.» Dijo el hijo del
labrador: «El trabajo vale más que todo eso.» Luego se dirigie-
ron hacia una ciudad nombrada Matún. Y cuando llegaron a esta
ciudad se sentaron (*) cerca de ella y dijeron al hijo del labra-
dor: «Vete y gana para nosotros con tu trabajo la comida de
este día.»
'
(i) el fijo del labrador — Falta en C, pero está en J.
(4) A. ovo
(5) J. Dixeron le: «No hay en esta ciudad cosa más cara que
la leña, y está la leña distante de ella una parasanga.» Y se fué
el hijo un haz de leña, y vínose con él a la
del labrador, y reunió
ciudad y vendió por una dracma, y compró con ella comida,
lo
comamos.» Et
(3) el fijo dalgo e 11. a. p. d. gibdat. — Falta en C. — J. dalgo
para dirigirse a la gibdat.
ella [la nave] por cien mil dinares. Y cuando supieron los mer-
ventura.» Et
(2) C. ^bdat y se sentó en uno de los bancos que había en la
puerta de la ciudad. Et
(3) A. En pasando por allí llevando el cuerpo [a ente]rrar,
estava aquel mancebo
(4) A. o
446 CALILA Y DIMNA
rey?» (*). Et
(2) C. echó lo. —
J. echó lo el portero de la puerta.
(*) cadáver del rey, y no se entristeció por ello cuando todos esta-
J.
ban volvió la cara hacia ellos, ni se preocupó de lo que a to-
tristes, ni
dos tenía afligidos. Y desconocieron su condición, y lo denostó el por-
tero y le dijo: «¿Quién eres, ¡oh villano!, y por qué te has sentado a la
puerta de la ciudad, y no te vemos triste por la muerte del rey, ni preocu-
pado?* £t
DEL FIJO DEL REY E DEL FIDALGO, ETC. 447
(2) A. do
nieron con él y
J, reino, y mi padre me había designado por
(*•) heredero del rei-
no; pero me lo arrancó por la fuerza mi hermano, y huí
(•**)
J. cuando contó el muchacho lo que
había contado de sus co-
sas, lo conoció uno que había ido a! país de su padre de ellos,
DEL FIJO DEL REY E DEL FIDALGO, ETC. 449
(3) C. y J. »Et temía que si las soltaba por tierra habitada que
hice más que cavar un poco, cuando tropecé con ella y la saqué.
fallavan enel mar. Así que una ave que dezían garga
ovo sabiduría del, e vido que era lugar muy apartado
de la carrera de los pescadores e muy yermo, et (i)
ovo grant sabor de morar y, e de mudar ai su nido.
Et dixo en su coragón: «Quando yo traxiere mi nido
e mi fenbra a este lugar, escusaremos, con lo que
AQUÍ HA, de fazer enbargo alas otras aves enel pes-
cado del mar, e avremos este lugar por hereda-
miento para nos e para los que denos venieren (2),
et ninguno otro non avrá a ello derecho (3), ca nos
lo avremos más con derecho.»
Et puso en su coragón de mudar su fenbra e su
nido para (4) allí; et quando fue tornado ala mar,
dixo a su fenbra lo que viera e lo que tenía en cora-
gón de (5) fazer. Et la fenbra avía puesto su(s) nido(s)
enla rribera, en que tenía sus huevos (6), et era ya la
sazón en que los devía sacar. Et avía ella un garapico
mucho su amigo que ella mucho amava, e sin él non
veía plazer, et a quien fazía parte en todas sus cosas.
Et después que su marido ovo dicho su acuerdo ala
muger (7), pesóle mucho por se apartar del garapico,
bera, et
(6) D. aquel lugar y pesco uno o dos peces, para que los
lleves con nosotros.»
(i) D. buscar león por los desiertos, los montes y los ma-
torrales para obtener la carne de aquél, pues es débil para esto;
y si se obstina, esto lo lleva a la perdición y a la ruina. Et
(2)D. te ir a buscar lo que hay en tal o cual isla, cuando en
ella hay peligros y es muy largo el camino. Renuncia, pues, a eso
que deseas, y lleva conmigo el nido, así como los huevos que
hay en él, hasta que lo traslademos al lugar que yo quiero; ca
(3) D. carreras; no hay en él pájaro ninguno. Et
(4) D. peligro, acontécele lo
magrez» (5).
Dixo el otro ximio «Yo oí un omne encantador
:
digas, así
Dixo
(3) D. avía un lugar donde había muchos
(4) D. que era el más fiero, el de menos piedad y el que
(5) D. estado entre sus semejantes. Y salió buscando [un
lugar] más fértil que aquel en que se hallaba, et
medio de matarlo. Et
(4) D. tres dotados de consejo y sabiduría, a quienes el rey
tenía la costumbre de consultar, y proceder según le aconseja-
ban. Et
(5) D. fazer en el asunto de este
(6) D. dapño en la caza de las bestias y nos quita nuestro
(7) D. veo en el asunto de éVaí
(8) D. faze en este asunto, y tener resignación para conten-
DE LAS GARZAS Y DEL ZAIL\PITO 469
tamos con lo que nos deja, y sujetamos a él hasta que Alá nos
conceda lo que tenga por bien; ca
(i) D. lidiar con él ni vencerle.» Dixo
(2) D. nos mudemos de este lugar a otro, y que nos marche-
mos a sitio en que encontremos lo que necesitamos para nuestro
sustento, y que no permanezcamos en esta situación; ca
(•) Así dice literalmente el texto árabe, que, como se ve, está alte-
rado.
476 CALILA Y DIMNA
(2) un gato, —
D. una comadreja; y así en todo el cuento.
(3) amortar los —
D. ^-f^ cazarlos expulsarlos apar-
, , ,
tarlos.
(6) Desde aquí hasta el fin se halla muy resumido este capítulo
en el texto árabe, como se verá por la traducción, que expone-
mos seguidamente. —
D. Dixo la comadreja «B. e. 1. q. dizes, y yo
:
(i) a. cometí
#
478 CALILA Y DIMNA
[CAPÍTULO XVIII]
(A., fol. 94- — B., fol. 119, sólo dos líneas. — C. (i), pigs. 247 a 149.
J., págs. 360 a 363.}
texto de su manuscrito C.
(2) Así en J. y en el manuscrito C. de Cheikho, que añade:
y es el capítulo del que ve la advertencia para otro y no la ve
para sí.
(3) A. consejo
(4) J. y ejemplo de ésos?» Dixo
ms. C. «<E cuál es el
sofo: «Señor, ojalá vivas mil años y reines sobre los siete climas
El libro es acabado.
Dios sea siempre loado.
FIX
GLOSARIO
albarhamiun.')
Álcali y alcalld, p. 88; alcalld., ps. 158, 269 y 270; pl. álcalis.,
p. 208. — s. m. Alcalde, juez. (Del ár. ^^^Uü!, alcadi.)
GLOSARIO 489
vado).
Andar, v. n. La radical del perfecto es andud- en ps. 18, 58, 150
y 170, y andotí- en ps. 316, 327, 439, 445, 449 y 451. (Véase
además p. 146, nota 2.)
Anochecer. Usado como personal en p. log.
Anviso, sa, ps. 105 y 161. — adj. Anteviso, enviso. (Del lat. vulg.
iiHtev'isunt .^
pero creo más bien con Gayangos que el atoleólo del texto
debe ser errata por oteólo. La voz atóla, que como instrumento
músico se ve en Du Cange, y de la cual podría derivar aquel
yerbo, es dudosa; y la variante de B., que dice: «entrando por
lapuerta el que avía de foradar las piedras vio estar un salte-
rio, e paró mientes en él», autoriza la opinión de Gayangos. Ni
en J. de Capua (véase Directorium, p. 28) ni en los textos
árabes (véase la nota) tiene correspondencia dicha voz.
Atríaca, p. 273. — s. f. Antídoto, contraveneno. (Del ár. Jjb J>J\,
attriaca^
— Perdurar,
Aturar, ps. 133 y 176. v. n. persistir.
GLOSARIO 491
y que el ár.
f
'^> al que traduce. En p. 337, mal barata, ea fra-
lat. iúrsam.)
Broznedat, p. 147. — s. f. Aspereza, rudeza. (De brozno.)
Bueytre, p. 132. — S. m. Buitre. (Del lat. vulg. voUiírem, cUs. vüU&rem.)
Busco, ps. 136 y 278. Con busco (véase conhusco). (Del lat. vobií-
CMtn.)
lat. carnalem.)
Carpentero, p. 84. — m. Carpintero.
s.
diíátetn.)
—
Colora, ps. 47 y 146. s. f. Cólera, bilis. (Del lat. cholera, gr. xo>¿po.)
—
Colpa, p. 346. S. f. Culpa. (Del lat. cülpam.)
Collarada, adj. Paloma collarada, p. 217, y s. f. la collarada, ps. 218
—
y siguientes. Paloma torcaz, llamada así (del lat. torques, co-
llar) por tener «el cuello verdoso y cortado por un collar in-
substantivado).
Commer, ps. 109, 129, 331, 377, 440, 442, etc. — v. a. Variante de
comer. (Del lat. comedere.)
noíftr, conocer.)
GLOSARIO 493
Cuydoso, sa, ps. 166, 173, etc. — adj. Cuidoso, angustioso, fatigo-
so. (De cuydar.)
Dolar, p. 149. — Errata, sin duda, por doblar que pide (2), el con-
texto, conforme con el ár. Lía. en VII forma, al que traduce.
ciare.)
Faldrido, p. 68.—
Es traducción del ár.
adj. oj\ (véase C, <.
GLOSARIO 497
—
Taza., ps. 197, etc. prep. Hacia. {De faz a, cara a.)
TOMO I. 32
——
Irnos, p. 170. Primerapers.pl. del pres. indic.de ir. (Del lat. imus.y
—
longe lozano; Era muy soberbio e de seso liviano.»)
—
Lunar, p. 267. s. m. Luna, luz de la Luna.
GLOSARIO 499
dio, medicina.
Menazón, p. 190. — s. f. Diarrea, disentería. Comp. el ant. fr. me-
nison, metioison, 7naneson, y véase en la nota la traducción de
C, según el cual Calila muere de una indisposición de vien-
tre. B. y de Capua omiten este particular.
J.
—
Menos. Hallar únenos, p. 83. fr. Notar la falta de. —
—
Menudez, p. 50. s. f. Bajeza, ruindad, villanía. Traducción de
o&l3> j. (Véase C, p. 42, línea 17.)
misiüram.)
Mesturero, ps. 55 y 388. — s. m. Cizañero, intrigante. (De mestura.)
Mijoría, p. 78. — s. f. Mejoría.
—
Mintroso, sa, p. 184. Variante de mentiroso.
—
Miraglo, p. 87. s. m. Mirado, milagro.
Moler, p. 331. V. a. Reducir a menudísimas partes los alimentos
introducidos en el aparato digestivo, digerir; acepción que to-
davía conserva en valenciano su equivalente moldre.
Morir. En el futuro y condicional, por síncopa de la i, tiene por
radical tnorr- en ps. 37, 116, 130, 364, 454 y 479.
Mover, p. 46. — v. n. que legítimamente puede interpretarse por
nacer; ^tro he de que es traducción literal de i.tiji^-',
advertir
inf. II de i¿5'v=^, que significa mover, agitar. (Véase C, p. 40,
línea 19.)
Muguer, p. 280. — Variante de muger.
Nenbrar, ps. 117, 330, 344 y 361. —Variante de vienbrar, mem-
brar.
Nlngund, ps. 230 y 240, y ningunt, ps. 181 y 244. adj. Ninguno, —
ninguna. Usado, como algunt, con s. f. en p. 241 ningunt :
alegría.
Ñusco. — Co7i ñusco, ps. 127, 242 y 428. — Conusco, con nosotros.
(Del lat. nohiscum.)
Opiñón, — Opinión.
p. 22. s. f.
iicu.)
Considerar, tratar. ||
p. 434, pensar de con infinitivo, dispo-
nerse a, empezar a.
Pesante, 372. —
p. Pesaroso,
adj. afligido. {T>e pesar.)
Pesar, —Variante de pensar.
p. 52.
Pesgar, 121. —
p. Apesgar. {De
v. a. pesga.)
Pesquerír, ps. 176 y 412, nota — Pesquisar, indagar. 6. v. a.
GLOSARIO 501
ducción de fí
, nataha. (\'éase C, p. 79, línea 9.)
putare.)
— Resistir.
Rregistir, p. 406. v. a.
j>osítdñum.)
Rrepaesto, p. 411, y rrespuesto, p. 367. s. m. Tesoro. En la p. 411 —
es traducción del ár. ^^\-iL., pl. de óO\y.^^ jazana, tesoro.
(Véase C, p. 220, línea 20.) (Del lat. reposttum.)
Rresestirse, p. 346. — v. r. Resistirse.
Rriepto, p. 358. — s. m. Repto.
Rrogatura, p. 435. — s. f. Ruego, súplica. (Del lat. rogstaram.)
Rroido, ps. 432 y 435. — s. m. Ruido. (Del lat. rügítum.)
Sallir, ps. 104, 105, 185, 204, 219 y 294. — v. n. Salir. (Del lat. salzre.)
GLOSARIO 503
y 53. —
Variantes de serpiente.
Sinsamo, ps. 230 y 232, etc., y sísamo, ps. 9 y 10. — s. m. Sésamo.
Sise, p. 93. Asise. a sí mismo. (Del lat. siBi ipse.)
Sollar, p. 148. V. n. Soplar. (Del lat. süffláre.)
Soseido, p. 262. — adj. Sometido, sujeto (p. p. de soseer, del lat. sub
y sedere.)
Sospirón, p. 45. —
s. m. Respiradero, órgano o conducto de la
Sue, p. 331, línea 9 (dice «su» por errata). —m. sing. del adj. pron.
posesivo.
—
Teñir, p. 176. Variante de tener.
Terrería, p. 143. — s. f. Artería, astucia. (De terrero^
Terrero, p. 162. — adj. Artero, vi!.
351, 366, etc., y trox- (del vulg. traxui) en ps. 195, 414, 450, etc.
El p. p. traído al lado de trecho en p. 57. Fut. trayrás, p. 67.
Traspaso, p. 262. Poner en traspaso, diferir, dilatar.
Veganbre, — Vedegambre.
p. 84. s. f.
Vegninidat, 407. —
p. Benignidad.
s. f.
Venar, 467. —
p. Cazar. (Del
v. a. lat. venári.)
res, p. 10, línea 4 (dice veréis, por errata). Ger. veyendo, p. 239.
—
Vergüenza. s. f. En ps. 79 y 200, traducción del ár. 'i\^^ aquello
de lo que se tiene vergüenza, parte del cuerpo comprendida
entre el ombligo y las rodillas; y en p. 377 es traducción de
r vS, partes pudendas.
Veridad, p. 442. — s. f. Verdad. (Del lat. verttatem.)
Vestiblo, ps. 407, 427, 436 y 461, y vestiglo, p. 435.— s. m. Animal
en general. (Del lat. vulg. bésñcUlum, de bestia.)
Veadez, p. 77. — s. f. Beodez (?). Ni en el texto árabe ni en J. de
Capua tiene exacta correspondencia.
Vez, p. 344. Nunca vez, fr.adv. Jamás.
Vezinidat, p. 468. — s. f. Vecindad. (Del lat. vicfniiaiem.)
VÍ5Í0, ps. —
460 y 473. s. m. Placer, gozo. (Del lat. vifíum.)
—
Vigioso, sa. adj. Aplicado a lugar, ps. 58, 93, 98, 316 y 469, abun-
dante, provisto, deleitoso. Aplicado a persona, ps. 98, 110, 125
y 461, gozoso, regocijado, contento. (Del lat. vitUsum.)
Vidiganbre, p. 68. —
Variante de vedeganbre.
Viganbre, p. —Variante de veganbre.
55.
Yazer, La radical del perfecto es^<?^-, yug- en ps. 179, 200, etc.;
^^xo yaziese en p. 167, nota i.
ERRATAS QUE SE HAN NOTADO
PAGINA.
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