Actividad 7. Síntesis.
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¿Qué es Idealismo?
idealismo
Platón sostuvo que las ideas constituyen un mundo suprasensible fuera del ser.
Idealismo platónico. Platón fue uno de los primeros filósofos en hablar de idealismo. Sostuvo
que las ideas constituyen un mundo suprasensible fuera del ser, es decir, un mundo que se
intuye de manera intelectual y no solo a través de los sentidos. Es por medio del intelecto y la
razón como se logra conocer el mundo real.
Idealismo objetivo. Para esta variante filosófica, las ideas existen por sí mismas y solo se pueden
descubrir mediante la experiencia. Algunos representantes del idealismo objetivo fueron Platón,
Leibniz, Hegel, Bolzano y Dilthey.
Idealismo subjetivo. Algunos filósofos de esta corriente fueron Descartes, Berkeley, Kant y
Fichte. Sostenían que las ideas existen en la mente del sujeto y no en un mundo exterior
independiente. Según esta corriente, las ideas dependen de la subjetividad del ser que las
percibe.
Idealismo trascendental. El filósofo Kant fue su principal representante y sostuvo que, para que
tenga lugar el conocimiento, es necesaria la presencia de dos variables:
Noúmeno. Es lo pensado, que no corresponde a una percepción de los sentidos. Puede ser
conocido por medio de la intuición intelectual.
Kant sostiene que el conocimiento está condicionado por los fenómenos, mientras que los
noúmenos son los límites de lo que puede ser conocido. Las condiciones de todo conocimiento
son dadas por el sujeto y todos los fenómenos derivados de su percepción son considerados
como representaciones de la realidad. Las cosas en sí mismas no constituyen lo real.
idealismo
Requiere del intelecto que le permite formar una idea determinada de las cosas que percibe a
través de los sentidos.
La razón no se identifica con lo finito o material, sino que alcanza lo infinito, como puede ser la
concepción de la existencia de Dios.
La manera de conocer la realidad, es decir, a los objetos en sí mismos, es por medio del intelecto
y a través de la experiencia.
No se conforma con lo que en apariencia perciben los sentidos, sino que está ligado a una
realidad superior de la consciencia del ser.
Ejemplos de idealismo
Derechos humanos. Una idea universal surgida en Francia es asimilada por los dirigentes
sobrevinientes de la Segunda Guerra Mundial.
Don Quijote de la Mancha. Se caracteriza por un personaje que soñaba y se perdía en su propio
mundo de ideas.
“Pienso, luego existo”. Es la frase del filósofo René Descartes que mejor identifica a la corriente
idealista.
“Son filósofos verdaderos, quienes disfrutan contemplando la verdad”. Esta frase de Platón
alude a que la filosofía consiste en elevarse hacia la verdad o realidad.
Las obras de Carlos Marx. A partir de sus ideas, Marx explica las características y el
funcionamiento de una sociedad ideal, donde los medios de producción pertenecen a la clase
trabajadora.
Idealismo
Platón. Filósofo griego (Atenas, 427 – 347 a. C.). Sócrates fue su maestro y luego, Aristóteles su
discípulo. Fue un pensador destacado cuyo trabajo tuvo gran influencia en la filosofía occidental
y en las prácticas religiosas. En el año 387 a. C. fundó la Academia, el primer instituto superior
de filosofía idealista de la antigua Grecia. Algunos de los aportes más destacados de Platón
fueron:
La teoría de las ideas. Es el eje de la filosofía platónica. No se encuentra formulada como tal en
ninguno de sus trabajos, sino que fue abordada desde diferentes aspectos en sus obras La
República, Fedón y Fedro.
La anamnesis. Es un término empleado por Platón para hacer referencia a la búsqueda metódica
del conocimiento. Tiene que ver con un recuerdo del alma sobre una experiencia que ha tenido
en una encarnación anterior.
René Descartes. (La Haye en Touraine, 1596-1650). También llamado Renatus Cortesías en latín,
fue un filósofo, matemático y físico francés. El aporte de sus obras es considerado una revolución
en el ámbito científico y de la filosofía moderna. Se diferenció de otros pensadores porque tuvo
como propósito conocer el camino o método para llegar al conocimiento y a la verdad, mientras
que otros filósofos se basaban en corrientes preestablecidas que definían qué es el mundo, el
alma, el ser humano, etc., lo que condicionaba las ideas que pudieran alcanzar. Descartes
expone el discurso del método mediante cuatro reglas:
Evidencia. Admitir como verdadera una cosa solo si se sabe con claridad y no genera dudas. Esto
contradice el principio de identidad de Aristóteles, donde la razón es suficiente para concretar
una idea.
Análisis. Separar las posibles dificultades o incógnitas para pensarlas hasta llegar a sus
componentes últimos.
Enumeración. Revisar más de una vez y de manera minuciosa cada instancia de la metodología
para asegurarse de no omitir nada.
A través de la duda metódica, Descartes se cuestiona todos los conocimientos e intenta liberarse
de todo tipo de prejuicios. No busca no creer en nada, sino que se plantea si existen otros
motivos para cuestionar el conocimiento. Se denomina metódica porque no duda de cada
conocimiento individual, idea o creencia, al contrario, tiene como objeto analizar las razones en
las que se fundó una idea para darla como válida y, de ese modo, rastrear el camino para
encontrar la verdad.
Descartes concluye que hay algo de lo que no puede dudar y es, precisamente, de la capacidad
de dudar. “Saber cómo dudar, es una manera de pensar. Por lo tanto, si dudo, significa que
existo. Esa verdad resiste a toda duda por muy radical que sea y el solo hecho de dudar es prueba
su verdad.” Así llegó a la verdad, a partir de la cual nace el pensamiento moderno: “pienso, luego
existo”.
Immanuel Kant. (Königsberg, 1724-1804). Filósofo prusiano y figura relevante del movimiento
cultural e intelectual llamado Iluminismo, Kant establece que el problema de la filosofía es
“saber si la razón es capaz de conocer”. Deriva entonces la variante del idealismo denominada
“criticismo” o “idealismo trascendental”:
Kant considera que el hombre es un ser autónomo que expresa su libertad a través de la razón
y que no conoce las cosas en sí mismas, sino que ve una proyección de sí mismo en el
conocimiento de las cosas. Los principales conceptos de su trabajo son:
El ser humano en el centro del universo. El sujeto que conoce, lo hace de manera activa y
modifica la realidad que está conociendo.
Más allá del ser. Existen condiciones universales y necesarias, previas a la experiencia del ser.
Georg Wilhelm Friedrich Hegel. (Stuttgart, 1770-1931). Filósofo alemán que sostuvo que “lo
absoluto” o idea, se manifiesta de manera evolutiva bajo normas de la naturaleza y del espíritu.
Establece que el conocimiento tiene una estructura dialéctica: por un lado, el mundo existente
y, por el otro está la necesidad de superar los límites de lo conocido.
Cada cosa es lo que es y solo llega a serlo en relación con otras cosas. Esta realidad dialéctica
está en constante proceso de transformación y cambio. Concibe una totalidad donde cada cosa
llega a ser lo que es como suma de todos los momentos, superando la vaguedad de la
abstracción. No hay diferencia entre el ser y el pensar ni entre el sujeto y objeto: todo se diluye
en la totalidad. Proceso del conocimiento dialéctico:
El proceso de transformación para superar la diferencia entre objeto y sujeto tiende a reducir
uno a otro. Solo en la identidad es posible alcanzar un conocimiento total y absoluto.
Gottfried Wilhelm Leibniz. (Leipzig, 1646-1716). Fue un filósofo alemán erudito que supo en
profundidad sobre matemática, lógica, teología y política. Su trabajo aporta importantes
contribuciones para la metafísica, epistemología, lógica y filosofía de la religión. Leibniz busca
unir a la religión con la ciencia, explica las desdichas del hombre en base a verdades de la
voluntad divina. Esta doctrina se asocia con la enseñanza religiosa sobre la omnipotencia de
Dios.
Según Leibniz, el universo está compuesto de sustancias espirituales independientes que son las
almas, a las que Leibniz denominó “mónadas”: elementos constitutivos de todas las cosas de la
vida. Este es el aporte más significativo para la metafísica y supone una solución a los problemas
de la interacción entre mente y cuerpo. Además, evidencia la identidad del ser y derriba la falta
de individualización. Leibniz se destaca por una mirada óptima respecto al universo, que
considera el mejor que Dios pudo haber creado. En su época fue varias veces ridiculizado por
sostener esta idea.