La Figura Del Padre
La Figura Del Padre
La Figura Del Padre
¿qué
ventajas y qué desventajas trae esa figura?
¿Conoce que es una sociedad patriarcal y las críticas a tal
sociedad?
¿Qué alternativas propondría usted para hablar de Dios teniendo
en cuenta las dificultades actuales para llamarlo padre? Justifique
su respuesta.
Uno de los motivos que han llevado a esta evolución en el rol de los mismos es la
llamada procreación reflexiva. En la actualidad, en la mayoría de los casos, la
decisión de tener niños es ampliamente discutida, consensuada y reflexionada, lo
que «implica una relación más afectiva, menos autoritaria».
La figura del padre «ha ido evolucionando a través de la historia así como el de
familia. Hasta la Edad Moderna tenía autoridad sobre la mujer y los hijos, y es a
partir del siglo XIX cuando empieza a tener ciertas limitaciones», en gran medida
por el comienzo de las reivindicaciones, de las mujeres. «Esto supone un
debilitamiento de su status».
«Los padres están más ausentes por motivos de trabajo y es la madre quien
desempeña más esas funciones»
«Es muy importante que los padres y las madres actuales podamos contribuir a que
los niños se conviertan en personas implicadas, con una educación en la igualdad
y la responsabilidad»
Algo fundamental para que nuestros hijos en el futuro asuman su papel de padre en igualdad de
condiciones con la madre es «educarlos en ese valor, y en la responsabilidad, formarlos para
que asuman sus comportamientos y para que adquieran límites claros. Enseñarles a tolerar las
frustraciones, a que sepan esperar, a que sean respetuosos con los demás, con las diferencias,
para que vivan en una sociedad y en un mundo mejor «.
Según asegura Yolanda Carballeira, es cierto que aún sigue habiendo diferencias a la hora de
educar a nuestros hijos e hijas. «Se tiende a que ambos ayuden en las tareas domésticas y a
hacer menos diferencias debido a la diferencia de sexo. Pero esto es muy general, todavía se
suele ser más protectores con ellas que con ellos».
Además, para la psiquiatra, «es muy importante que los padres y las madres actuales podamos
contribuir a que los niños se conviertan en personas implicadas, con una educación en la
igualdad y la responsabilidad, proporcionándoles los límites adecuados en un clima afectivo
donde predomine el diálogo. Para guiarlos en estas tareas, no siempre fáciles, estamos todos los
profesionales que nos ocupamos de la infancia y de la adolescencia».
0 4 minutos
La falta de implicación emocional de los padres deja una enorme huella en los hijos | Fuente:
Canva
Si una persona no recibe la atención y el amor necesarios durante su infancia, es muy probable
que acabe teniendo problemas emocionales y de personalidad que le impidan disfrutar de una
vida plena. Por esa razón, cuando un niño tiene padres ausentes emocionalmente, puede crecer
con dificultades para cultivar relaciones duraderas, padecer ciertos trastornos psicológicos y
desencadenar estados anímicos volátiles.
Veamos de qué forma perjudica a los menores el hecho de tener unos progenitores distantes
desde el punto de vista de los afectos:
Las experiencias de la infancia determinan en gran parte la forma en que interactuamos con los
demás a lo largo de nuestra existencia. Si fuimos queridos y cuidados de manera apropiada, lo más
seguro es que exhibamos esos mismos rasgos como adultos.
Pero si un niño se siente desprotegido y poco querido, es bastante posible que desarrolle
aptitudes defensivas para salvaguardar sus sentimientos, como ser demasiado desconfiado.
Es muy posible, asimismo, que cuando crezca tienda a tener relaciones de corto plazo e inestables.
Sin embargo, hay que decir que muchos son capaces de superar estas situaciones y se convierten
en mejores personas que sus progenitores.
Cada situación es diferente y las variables en la vida de los hijos de padres emocionalmente
inaccesibles también son muy distintas.
La psicóloga Marian Carrero, licenciada por la Universidad de Jaén, asegura que este estilo de
crianza suele generar un desapego afectivo que produce inseguridad cuando el niño comienza a
establecer relaciones interpersonales.
“Hay desconfianza y, por ello, la idea de proyectar una gran carga afectiva en alguien genera
miedo a ser traicionado, a no ser reconocido o, lo que es peor, a sentirse ignorado”, menciona
Carrero.
Aquellos que han crecido con padres ausentes emocionalmente se convertirán, con una elevada
probabilidad, en individuos con dificultades para vincularse con los demás y recibir o demostrar
amor.
“La confianza es un componente importante del vínculo emocional positivo. Cuando el niño no ha
experimentado el amor, el afecto y la protección de un adulto cariñoso, es más probable que
desarrolle defensas o mecanismos de protección que lo mantengan separado de otras personas
de alguna manera”, explica Hill.
El desinterés y la falta de cariño paternos hace crecer la desconfianza hacia los demás | Fuente:
Canva
El trastorno de personalidad narcisista (NPD, por sus siglas en inglés) y el trastorno límite de la
personalidad (TLP) son dos alteraciones que a menudo surgen en el carácter de un menor que ha
tenido este tipo de progenitores desafectos.
Los estados de ánimo inestables y emocionalmente frágiles, a menudo característicos del TLP,
pueden provocar discusiones frecuentes, paranoia, culpas y agresión física o verbal.
Por su parte, los comportamientos egocéntricos y arrogantes del NPD suelen hacer que los niños
se sientan distanciados de ese padre. Sin el tratamiento o la terapia adecuados, estos dos
trastornos son fuente de desestabilización en el hogar y en muchas relaciones.
4. Egoísmo
Sabemos que es normal que los padres no quieran que sus hijos jueguen hasta que terminen los
deberes o las tareas del hogar que tengan asignadas. Pero esta no era la razón que esta madre
tenía para restringir el acceso a la tablet.
Finalmente admitió que no le gustaba que el niño tocara su dispositivo porque le había costado
mucho dinero y le gustaba el hecho de que todavía parecía nuevo. Argumentó que cuando ella era
pequeña rara vez tenía algo propio y sentía la necesidad de ‘proteger’ su inversión. Este tipo de
egoísmo resultó ser una fuente de conflictos durante muchos años.
En fondo de un niño egocéntrico y egoísta a menudo está la falta de cariño en su hogar | Fuente:
Canva
Para hacer frente al dolor y la tristeza, es bastante común recurrir a las sustancias adictivas como
el alcohol y los estupefacientes. Por desgracia, el uso recreativo o prescrito de drogas se convierte
en un hábito y el impulso de automedicarse puede llevar a la adicción.
Una vez que la persona se hace dependiente, todo se vuelve aún más complicado, ya que las
relaciones, el empleo y otras áreas importantes de la vida ya no parecen tan relevantes.
Quienes crecieron con padres ausentes emocionalmente carecen de una base moral sólida y
suelen tener conflictos de identidad. Sin entender quién eres realmente, es más fácil que te dejes
influenciar por los demás y que permitas que cualquiera que tenga el más mínimo interés se
acerque a ti.
Otro sentimiento común en quienes fueron criados por progenitores afectivamente indiferentes
es el de pérdida y dolor. La incapacidad de conectarse con ellos puede generar un sentimiento
devastador en los hijos y llega a ser una experiencia muy trágica.
Es muy posible que estos sentimientos se interioricen, que empiecen a sentir falta de esperanza y
de alegría, que pasen por estados depresivos y que lleguen a tener pensamientos suicidas. Estas
tendencias se agravan si son consumidores de sustancias estupefacientes.
Es realmente triste que la vida de un menor se vuelva complicada por la inestabilidad emocional y
la falta de disponibilidad de un padre. Irónicamente, esta carencia parece otorgar a este tipo de
progenitores más ‘poder’ del que les corresponde y merecen.
ENRIQUE CLEMENTE
ACTUALIDAD
C. A. L.
El sociólogo y psicoanalista Luigi Zoja critica que los padres se
quieran convertir en una segunda madre y no asuman su
responsabilidad
19 mar 2018 . Actualizado a las 08:09 h.
Comentar · 0
-Se puede trazar una genealogía del declive del patriarcado, que es
fruto de un proceso histórico que se acelera en el siglo XX. En la
primera mitad con las dos guerras mundiales, donde hay una
ausencia material del padre; y en la segunda mitad con el aumento de
los divorcios a partir de los años setenta. La descomposición de la
figura paterna tiene dos caras. Una simbólica y cultural relacionada
con la secularización de la sociedad, que hace que desaparezca la
jerarquización vertical en la que en la cúspide estaban el rey en la
sociedad, el padre en la familia y Dios sobre todos, como símbolos de
los símbolos. La otra es estadística: el siglo XX es el de los divorcios,
que en Estados Unidos aumentaron el 700 %.
-Habla de los padres terribles, los dictadores del siglo XX, como
Stalin y Hitler. ¿Por qué surgen?
personales duraderas.