Lobo, ¿Qué Estás Haciendo - FINAL

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Autor: Alexander Pacheco

Derechos Reservados

Lobo, ¿qué estás haciendo?

Por: Alexander Pacheco

Personajes:

- Lobualdo Ferozino
- Don Obstinado
- Abuelita
- Lucas el león
- Peter Tapa Hueco
- Humberto el árbol
- Caperucita
- El Cerdito
- Pedrito

Pieza numero uno de la trilogia “El circo del Lobo Feroz”


- Lobo ¿Qué estás haciendo?
- La familia del Lobo Feroz
- El circo del Lobo Feroz

Donde haya un corazón siempre


habrá una esperanza…

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Autor: Alexander Pacheco
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Escena 1

Es el Bosque. Música del Bosque encantado. HUMBERTO el árbol se encuentra en el


medio. Aparece LA ABUELA.

HUMBERTO: ¡¡Hola Abuelita!!


ABUELA: ¡Hola Humberto!
HUMBERTO: ¿Cómo le va?
ABUELA: Muy bien Humberto.… Aquí recolectando almendras y castañas para hacer un
rico pastel. Hoy mi nieta vendrá a visitarme.
HUMBERTO: ¡¡Oh que alegría Abuela!! Pero, ¿por qué no usa un poco de mis castañas?
(HUMBERTO mueve una de sus ramas y deja caer unas castañas)
ABUELA: ¡¡¡Gracias Humberto!! Me había olvidado que eres un lindo castaño.
HUMBERTO: No tiene de que Abuela.
ABUELA: Ahora voy a buscar las almendras.
HUMBERTO: Por aquí cerca vive mi amigo Almendro. Vaya a visitarlo y si lo ve mándele
mis saludos y dígale que aún espero me visite y no me deje plantado como siempre.
ABUELA: Así lo haré.
(LA ABUELA sale. Al poco rato se escuchan uno gritos. Música de persecución. Aparecen
una pareja de LOBOS. Uno lleva un pequeña canasta que cuida con mucho cuidado.
Llegan hasta donde está HUMBERTO y dejan la canasta detrás de él. Y salen corriendo.
HUMBERTO pone cara de extrañeza. APARECE DON OBSTINADO con un fusil. Cuando
DON OBSTINADO se acerca a HUMBERTO el pequeño castaño asusta al cazador de un
fuerte grito)
DON OBSTINADO: ¡¡¡Que extraño árbol!!! Creo que se fueron por allá.
(DON OBSTINADO sale. Por el oro lado aparece LA ABUELA)
ABUELA: ¿Qué fue todo ese griterío?
HUMBERTO: Unos Lobos y detrás de ellos un terrible cazador.
ABUELA: Ayyy!! Esos malas personas que no tienen nada que hacer.
HUMBERTO: Ojalá no los atrapen.
ABUELA: ¡Ojalá que no!
HUMBERTO: ¿Qué extraño? Como pudo llegar hasta aquí. Que caray, cada vez la mano
del hombre…
(Se escuna el llorar de un cachorro Lobo)
ABUELA: ¿Qué es eso?
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Autor: Alexander Pacheco
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HUMBERTO: Creo que viene de la pequeña cesta que escondieron esos lobos detrás de
mi.
ABUELA: ¿Una cesta? ¡Es cierto!
(LA ABUELA encuentra la cesta y descubre la manta hallando a un pequeño cachorro de
lobo que deja de llorar al ver a la ABUELA y ríe)
ABUELA: ¡¡Pero si es un pequeño cachorro!!!
HUMBERTO: ¡¡Que horrible perro!!
ABUELA: ¡¡Es un lobo!!
HUMBERTO: ¡Cierto!
ABUELA: Y si es todo peludo y feo.
HUMBERTO: ¿Ahora quién lo querrá?
(Aparece CAPERUCITA)
CAPERUCITA: ¡¡¡Hola abuelita!!! ¡¡¡Ya llegué!!! ¡¡¡Hola Humberto!!! ¿Qué es eso?
HUMBERTO: Eso es lo que queremos saber.
ABUELA: Es un pequeño cachorro de lobo. Un momento, tiene una medalla en el cuello,
se llama Lobualdo Ferozino.
CAPERUCITA: ¡Que bonito nombre!
HUMBERTO: Algo bonito tenía que tener (Ríe)
CAPERUCITA: Y vino en esta cesta. Es muy bonita también.
(CAPERUCITA coge la cesta y la hace suya. LA ABUELA coge a al pequeño cachorro y
lo queda mirando. Apagón)
VOZ DE NARRACIÓN (OFF) Y fue allí que me di cuenta que feo y peludo era y nadie lo
iba a querer. Y decidí quedármelo y hacerlo parte de la familia.
(Cambio de luz, canción)
DON OBSTINADO:
Cazar fieras y animales raros es mi labor
Pues soy Don Obstinado un gran cazador
Los llevo a circos, zoológicos y para que adornen
paredes de algún buen postor .
No les quito más el tiempo y les cuento lo que un día me pasó…
Atrapé a una extraña pareja de lobos parlante,
que hablaban de una manera fascinante
Me suplicaban que los liberara
Un pequeño cachorro los esperaba.

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Autor: Alexander Pacheco
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Supe que mucho dinero podría hacer …


Cuando a la ciudad volví, de inmediato con la prensa fui
Y los malos Lobo decidieron no hablar y solo se pusieron a aullar
todos en la ciudad de mi se burlaron y loco me creyeron.
A los lobos a un zoológico los llevaron y a mi en un manicomio me encerraron.
Varios años en el manicomio me encerraron y cuando me liberaron
Decidí buscar ese animal parlante, que limpiara mi reputación de una manera elegante
Recordando los pasos que había dado, volví aquel bosque extraño y encantado
Y después de varias horas de ir caminado, detrás de un árbol encontré lo que andaba
buscando.
Era un pequeño cachorro de lobo, que al verme sonrió y un hola pronunció.
En un costal de inmediato lo guardé, y a la ciudad al cachorro lo llevé
La prensa cuando lo vió y lo escuchó por fin me creyó y desde ese día de mi nadie se
burló.
No había nadie en el mundo que no le pusiera atención, el pequeño Lobo se convirtió en
una super atracción y yo desde aquel día soy muy rico por aquella razón
(Ríe)

APAGÓN

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Autor: Alexander Pacheco
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Escena 2

Es el circo. Se escucha la típica música circense, Aparece el teatro de sombras


mostrando diferentes siluetas.

DON OBSTINADO: Señoras señores, damas y caballeros, niños y niñas. Con ustedes, la
sensación del ártico. ¡¡¡Nanuk!!! ¡¡¡El oso malabarista!!! Aplausos.
(Aparece el Oso malabaristas que hace malabares sobre una pelota gigante)
DON OBSTINADO: ¡¡Aplausos!!! ¡Bravo! ¡bravo! Ahora permítanme presentarles a un
animal que viene desde la la selva africana; a la tierna, dulce y hermosa ¡¡¡¡Lulú!!!!!
(Aparece una Hipopótamo que se lanza sobre la cuerda floja, acompañada de una barra y
ballet)
DON OBSTINADO: Ahora viene el rey, el rey de la selva. Con ustedes el temible y fiero
León.
(Aparece LUCAS el león que salta sobre obstáculos de fuego. Aparece un domador con
látigo Al culminar cada acto se escucha el sonido de aplausos)
DON OBSTINADO: ¡¡¡Bravo!!! ¡¡¡Aplausos!!! señoras y señores, niños y niñas, damas y
caballeros, permitan presentarles a la sensación más grande de los últimos tiempos que
viene viajando en una gira internacional por las ciudades más importantes del mundo y
ahora aquí con ustedes. Al único, al increíble, al fascinante “Lobo Feroz” ¡¡¡Aplausos!!!
(Pausa) Pero que extraño, no aparece. Volvamos a llamarlo ¡¡¡Lobo Feroz!!! Al parecer
debe estar muy ocupado. Qué les parece si les preguntamos al lobo qué está haciendo?
todos juntos (Con el publico) ¡Lobo! ¿qué estas haciendo?
LOBO (Desde dentro) Estoy poniéndome mi traje para el show de hoy.
DON OBSTINADO: ¡¡¡Ohhhhh!!! ¡Lobo! ¿qué estás haciendo?
LOBO: ¡¡¡Estoy cepillándome los dientes!!!!
DON OBSTINADO ¡¡¡Ohhhh!!! ¡Lobo! ¿qué estás haciendo?
LOBO: Estoy saliendo para allá.
(Sale por el publico. Lo acompaña una canción)
DON OBSTINADO: ¡¡Que bueno tenerlo aquí con nosotros señor lobo!!
LOBO: ¡Lo mismo digo señor Don Obstinado!
DON OBSTINADO: Como pueden ver es un verdadero lobo parlante. Lobo feroz.
LOBO: Dígame.
DON OBSTINADO: ¿Te animarías a leer algo para nosotros?
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LOBO: Claro que si.


DONS OBSTINADO: Aquí tienes el periódico del día de hoy. Léenos alguna noticia
LOBO: “Las empresas petroleras y refinerías niegan cualquier hecho que las vincule con
la contaminación ambiental….”
DON OBSTINADO: Aplausos!!! Léenos otra noticia. Los presentes no vayan a pensar que
te sabes de memoria esa noticia.
LOBO: ¿De memoria? es la primera vez que la leo. Pero no la primera vez que leo acerca
de la contaminación. ¡Aquí hay una noticia interesante! Muchos niños podrán disfrutar de
un lindo día de sol el día de mañana sin lluvias ni precipitaciones anunció el portavoz de
instituto del clima.
DON OBSTINADO: Lo vieron. No solo solo puede hablar si no también la capacidad de
leer. ¡¡Aplausos!!! Lobo ¿Tendrás hambre?
LOBO: claro que sí. Pero depende, ¿qué cosa comeremos?
DON OBSTINADO: (Risas) Ya lo verás.
(DON OBSTINADO trae una pequeña mesa con ruedas con una charola encima)
DON OBSTINADO: ¡¡¡Hoy tenemos Pizza vegetariana!!!
LOBO: ¡¡¡Mi favorita!!! Pero un momento. No la puedo disfrutar.
DON OBSTINADO: Pero ¿por qué Lobo?
LOBO: No hay cubiertos ni servilletas.
DON OBSTINADO: Ohhhh Claro que si. Aquí están.
(LOBUALDO come la pizza haciendo uso de los cubiertos y la servilleta)
DON OBSTINADO: ¡¡Con ustedes fue el maravilloso Lobo Feroz!!
(Música de cierre de circo, aplausos, cambio de luz. Juego de títeres de sombras.
Narración)
ABUELA: Lobualdo Ferozino fue llevado a la ciudad desde muy pequeño y aprendió las
gracias necesarias para ser un gran entretenimiento para niños y adultos. Lobualdo
Ferozino terminaba muy cansado después de cada noche de trabajo. Nunca tuvo tiempo
de poder enfermarse o conocer lo que significaba el descaso. Cuando no había función la
pasaba viajando dentro de un viejo remolque junto a Lucas, el león y siempre miraba por
una pequeña ventana la calle y los paisajes. Una noche el Hada de los sueños visitó a
Lobualdo e hizo que tuviera un sueño de cuando era un cachorro y con sus amigos
jugaba. Los días pasaban y más recuerdos comenzaron a aparecer. La carpa del circo la
comenzaba a sentir pequeña y tenia una sensación de asfixia que no había sentido antes.

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Autor: Alexander Pacheco
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En el momento de la presentación de la noche, Lobualdo comenzó a sentirse mareado.


En la rutina no respondió ni leyó correctamente. A pesar de lo sucedido el publico lo
aplaudió muy fuerte. Pero Don Obstinado estaba muy molesto. Al terminar la función fue
hasta el remolque y con un gran garrote castigó a Lobualdo por haberse equivocado. Don
Obstinado se marchó dando de gritos y fue allí que sucedió algo nunca había pasado,
Don Obstinado se olvidó la la llave del remolque. Lucas el león, que lo había visto todo,
aprovechó el olvido de Don Obstinado y en la oscuridad de la noche se escapó llevando a
Lobualdo sobre su espalda que se había desmayado por los fuertes golpes.
(La narración termina con la imagen de LUCAS el LEON llevando a LOBUALDO en su
espalda. Música)
Al amanecer Lobualdo Ferozino despertó en medio de un parque de la gran ciudad.
Estaba aturdido y no sabia como había llegado hasta ese lugar. De pronto escuchó un
fuerte rugido y supo que era Lucas, se asomó y vió como unos policías lo intentaban
atrapar, cuando de pronto se escuchó un gran disparo que asustó a Lobualdo que salió
corriendo. Los minutos corriendo se hicieron horas y las horas que se hicieron días.
Lobualdo estaba tan asustado que cada latido de su corazón le daba más fuerza para
seguir corriendo. Corrió tanto que atravesó ciudades y países hasta llegar a un extraño
bosque. Se sentó en un tronco y pudo por fin tomar un gran respiro, secó el sudor de su
frente con un pañuelo de color amarillo que guardaba en su bolsillo y por una extraña
razón sentía que su brújula interna lo había llevado hasta ese lugar. Lobualdo tenía mucha
hambre y decidió tomar una siesta para olvidar el sonar de sus tripas. Eligió un comodo
árbol para apoyarse y quedo durmió por muchas horas.

APAGÓN

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Escena 3

Es el bosque encantado. LOBUALDO duerme a los pies de HUMBERTO. Caen unos


castaños de las ramas del árbol. LOBUALDO despierta y se percata de los castaños y
come de ellos.

HUMBERTO: ¡Hola!
LOBUALDO: ¿Quién hablo?
HUMBERTO: ¡¡Fui yo!!
LOBUALDO: ¿Quién yo?
HUMBERTO: ¡Yo!
LOBUALDO: ¿Dónde estas?
HUMBERTO: ¡¡Aquí atrás!!
LOBUALDO: ¿Dónde atrás?
HUMBERTO: ¡¡¡Aquí!!!
LOBUALDO: ¿Tu hablas?
HUMBERTO: Claro que si.
LOBUALDO: ¡¡Pero si eres un árbol!!
HUMBERTO: ¡¡¡Lo mismo digo. Pero si eres un lobo!!!
(Silencio y ambos se echan a reír)
LOBUALDO: ¡¡¡Que increíble!!!
HUMBERTO: Mi nombre es Humberto.
LOBUALDO: El mio Lobulado.
HUMBERTO: ¿Sabes? me pareces conocido pero no recuerdo de donde. Últimamente mi
memoria no anda bien.
LOBUALDO: Suele suceder, yo tampoco tengo recuerdos de cuando era muy pequeño ,
todo borrosos siempre en mi memoria.
HUMBERTO: Tenemos muchas cosas en común
LOBUALDO: ¡Ya lo creo!
HUMBERTO: Veo que tiene hambre.
LOBUALDO: Si. ¿Las castañas son tuyas verdad? No quise tomarlas sin tu permiso.
HUMBERTO: Toma todas las que gustes.
LOBUALDO: ¿Enserio? ¡¡¡Están buenísimas!!!
HUMBERTO: Que bueno que te gusten! Y cuéntame ¿Qué haces por acá?
LOBUALDO: La verdad es que busco donde vivir. Vengo de la ciudad, de vivir en un circo.
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Autor: Alexander Pacheco
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HUMBERTO: ¿De la ciudad? ¡¡Un circo!!


LOBUALDO: Si de la ciudad y vivir en un circo.
HUMBERTO: Eso es muy lejos de aquí y que interesante.
LOBUALDO: ¡Ya lo creo!
HUMBERTO: Si gustas te puedes seguir quedando el tiempo que quieras bajo mis ramas.
Me gusta mucho poder conversar.
LOBUALDO: ¿No incomodo?
HUMBERTO: Para nada, eres bienvenido.
LOBUALDO: ¡¡¡Muchas gracias!!
HUMBERTO: No tienes de que.
LOBUALDO: Este es un bosque no muy común, ¿verdad?
HUMBERTO: Bueno, es un bosque común para la gente que lo habita y quizá un poco
exótico para el que lo visita. (Rié)
LOBUALDO: ¡Interesante! ¿Y es muy grande?
HUMBERTO: Del tamaño de tu imaginación
LOBUALDO: ¡Que genial!
HUMBERTO: Anda, conoce un poco el bosque. Conoce a tus nuevos vecinos.
LOBUALDO: ¡¡¡Mis vecinos!!!
HUMBERTO: Y quien sabe, quizá haces nuevos amigos.
LOBUALDO: ¡Eso suena bien! ¡Eres muy bueno Humberto!
HUMBERTO: No digas eso. Sólo soy un castaño.
LOBUALDO: Iré a conocer a mis nuevos vecinos. No demoro.
HUMBERTO: Vuelve cuando gustes, pero cuando vuelvas cuéntame como es allá en la
ciudad y sobre todo como es eso del circo.
LOBUALDO: Lo haré. Hasta ahora Humberto.
HUMBERTO: Hasta ahora Lobualdo.
(LOBUALDO sale)
HUMBERTO: ¿De dónde conozco a ese muchacho? Que mala mi memoria.

APAGÓN

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Autor: Alexander Pacheco
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Escena 4

En otro lado del bosque aparece el Conejo que trabaja con unos papeles y lápices.

CONEJO: ¡¡¡Que noticia poner!!! ¡¡¡Que noticia!!! Tengo que colocar una buena noticia en
el periódico que sea atractiva, que venda y que esta vez sea de interés para los
habitantes del bosque encantado. Pensemos… Quizá usar la noticia de “Pinocho en la
ballena” no eso ya no… O quizá la noticia de La huelga de los siete enanos por falta de
pasteles y dulces a la hora de la merienda… No… ¿Qué notica poner?
(Aparece LOBUALDO)
LOBUALDO: ¡¡¡Que bonito lugar!!! ¡¡Hay flores de todos los colores!!
CONEJO: ¡¡Un lobo!!
LOBUALDO: ¡Hola! Tu también eres parlante como Humberto y como yo ¿verdad?
CONEJO: ¡¡¡Eso creo!!!
LOBUALDO: ¡Mucho gusto!
CONEJO: ¡Mucho gusto!
LOBUALDO: Mi nombre es Lobualdo Ferozino y seré tu nuevo vecino.
CONEJO: Oh, que buena noticia.
LOBUALDO: ¿Perdón?
CONEJO: Que esa es una gran noticia. Verá yo soy periodista ademas de asistente de la
Reina de corazones y estoy a punto de convertirme en certero del departamento de
correos del bosque. Tengo que trabajar en muchas cosas porque esta por llegar mi
primera camada de conejitos.
LOBUALDO: ¡Oh que bonito! Entiendo!
CONEJO: ¿Me permite dibujarlo un momento?
LOBUALDO: ¿Dibujarme?
CONEJO: Es para el periódico. La llegada de un nuevo vecino es toda una noticia.
LOBUALDO: ¡Oh que honor! ¡¡Me parece bien!! ¿en que posición debo colocarme? Pero
un momento. Le va a tomar mucho tiempo si va a dibujar. ¿Por qué no me toma una
fotorafía así puedo seguir con mi paseo por mi nuevo vecindario.
CONEJO: No tengo cámara y prefiero hacerlo a la antigua., además no se preocupe. No
tomara nada de tiempo. Soy muy rápido.
LOBUALDO: Está bien. ¿Me coloco así?
CONEJO: ¡Asi!

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(EL CONEJO saca unos lápices y una hoja en blanco y en menos de tres segundos el
dibujo está terminado)
CONEJO: ¡¿Qué le parece?!
LOBUALDO: ¡¡¡Wou!!! Eres muy bueno conejo.
CONEJO: ¡¡Gracias señor Lobo!!
LOBUALDO: Mi nombre no es Lobo, yo soy Lobualdo.
CONEJO: Oh perdone señor Lobualdo. Pero en ese caso déjeme decirle que yo no me
llamo conejo. ¡¡Me llamo Roldan!!
LOBUALDO: ¡Mucho gusto Roldan!
CONEJO: ¡Mucho gusto Lobualdo!
LOBUALDO: Me guardas un periodico. Seguiré con mi recorrido. Hasta ahora Roldan.
CONEJO: Hasta ahora señor Lobualdo.
(LOBUALDO sale y el CONEJO continua con los últimos detalles del periódico)
CONEJO: Listo! Ahora a vender los periódicos.
(CONEJO sale. Aparece Don Obstinado)
DON OBSTINADO: Al parecer este debe ser el lugar. Debí hacer un mapa cuando me
perdí la primera vez que aparecí en este bosque encantado. Hagamos un recuento de
como he llegado. Camine directo por la selva más oscura legando hasta el sendero de
abedules y castaños. Llegué hasta dónde cascada del rió escondido y lo cruce. Así que
aquí debe ser. Ya estoy cansado de caminar tantas horas. Ese Lobo me las va a pagar
cuando lo encuentre. Estoy seguro que está aquí. Ya verá los latigazos que recibirá.
(DON OBSTINADO sale. Aparece PEDRITO junto a las OVEJAS lo acompañan)
PEDRITO: ¿Dónde estarán las ovejas? ¡¡¡Emilia!!! ¡¡¡Olivia!!!
(Suena el ballet y aparecen ambas)
OVEJAS: ¡¡¡Meeee!!!
PEDRITO: ¿Dónde estaban?
OVEJAS: Terminando de ensayar con el Cerdito.
PEDRITO: Ya veo.
OVEJAS: Bueno a comer.
OVEJAS: ¡¡¡Meee!!!
(LAS OVEJAS se ponen a comer y aparece DON OBSTINADO, PEDRITO extrañado de
ver al nuevo visitante)
PEDRITO: ¡Hola!
DON OBSTINADO: ¿Quién eres?
PEDRITO: Mi nombre es Pedrito, mucho gus…
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DON OBSTINADO: ¿Vives aquí?


PEDRITO: ¡Si! Junto con mis Ovejas.
DON OBSTINADO: ¿Has visto a un lobo por aquí?
PEDRITO: No, para nada.
DON OBSTINADO: Escúchame niño, ando buscando a una fiera que es muy peligrosa.
Tiene que cuidar a tus animales. Si lo ves solo grita. Estaré cerca.
PEDRITO: Si señor.
(DON OBSTINADO sale)
PEDRITO: ¡¡Que extraño señor!!
OVEJAS: ¡¡¡Meee!!!! Si que extraño. Pedrito aquí ya no hay pasto.
PEDRITO: Es verdad. Vamos más allá. pero antes iré por un rico panecillo dulce de la
pandemia de mi amigo Juan. Ovejas vayan adelantándose que ahora les doy el alcance.
OVEJAS: ¡¡Me!!
(LAS OVEJAS salen por un lado y PEDRITO antes de salir se topa con la ABUELA, lleva
un vestido en brazos)
ABUELA: Quién me ayuda ahora a ser mi modelo para poder entallar este vestido. Ando
buscando a alguien y nadie me quiera ayudar. Todos andan muy ocupados.
PEDRITO: ¡Hola abuela!
ABUELA: Hola Pedrito,
PEDRITO: Bueno, cuídese. Nos vemos.
ABUELA: Pedrito, pedrito, espera.
PEDRITO: ¿Si, abuela?
ABUELA: Pedrito, quería pedirte un favor.
PEDRITO: ¿Un favor?
ABUELA: Si, es que..
PEDRITO: Abuela, abuela cuanto lo siento. Lo que pasa es que tengo algo muy, muy
importante que hacer.
ABUELA: ¿Ah si, Pedrito?
PEDRITO: Si.
ABUELA ¿Y qué es eso tan importante?
PEDRITO: Es algo de mucha, mucha importancia.
ABUELA: Pero que…
PEDRITO: Tiene que ver con al de…
ABUELA: ¿Y bien?
PEDRITO: Una bruja malevola, malevola..
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Autor: Alexander Pacheco
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ABUELA: ¡¡¡Pedrito!!! Ya sabes que no debes mentir. Si no te vas a volver en convertir en


un niño de madera.
PEDRITO: Ay verdad! Si no me van a volver a decir Pinocho.
ABUELA: Siempre es bueno decir la verdad Pedrito.
PEDRITO: Está bien abuela. Le cuento; estoy yendo a la panadería de mi amigo Juan sin
Miedo, que siempre me invita los ricos panes dulces que hace.
ABUELA: Ya ves Pedrito, no era tan complicado decírmelo.
PEDRITO: Si lo sé. Es siempre bueno decir la verdad.
ABUELA: ¿Ahora me puedes ayudar Pedrito?
PEDRITO: Es que debo ir corriendo donde la panadería de mi amigo Juan.
ABUELA: ¿Y es tan importante?
PEDRITO: ¡¡Claro, porque después se acaban los panecillo dulces!!
ABUELA: Está bien Pedrito. Anda entonces pero…
PEDRITO: Adiós abuela
(PEDRITO sale muy veloz)
ABUELA: Otra vez nadie me quiere ayudar. Bueno seguiré buscando.
(Aparece el CERDITO)
CERDITO: Hola abuelita!
ABUELA: Hola Cerdito! que bueno que te veo. Justo estoy buscando a alguien que me
ayude.
CERDITO: ¿Ayudarla?
ABUELA: Si Cerdito. Necesito que…
CERDITO: Lo siento abuela, lo que pasa es que estoy retrasado. Acabo de terminar de
practicar mi coreografía junto con las ovejas y debo ir a tomar mi baño de burbujas en
este momento.
ABUELA: Pero si sólo es un ratito.
CERDITO: Prometo ayudarla apenas termine de bañarme. Hasta mas tarde abuela.
ABUELA: Adios Cerdito.
(EL CERDITO sale)
ABUELA: Bueno al menos salió limpio el marranito. (Suspira) ¡¡Nadie me quiere ayudar!!
( Sale La ABUELA. Se escucha la voz en OFF de la mamá)
MAMÁ: Caperucita no te olvides de ir directo donde tu abuelita que te espera con los
alfileres y sobre todo la merienda.
CAPERUCITA: No mamá, voy directo a la casa de la abuelita.

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Autor: Alexander Pacheco
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MAMÁ: No te entretengas jugando con Pedrito, ni las ovejas, ni tampoco con alguno de
los cerditos.
CAPERUCITA: Esta bien mamá.
MAMÁ: Y si ves al Conejo, no le compres ningún periódico. No hay noticias nuevas en el
bosque encantado.
CAPERUCITA: Si mamá.
MAMÁ: Y sobre todo no te olvides que no debes hablar con extraños.
CAPERUCITA: No, mamá.
MAMÁ: Apura que la abuela te espera.
CAPERUCITA: Si mamá. Que aburrido, llevar esta cesta de comida siempre donde la
abuela.
(Por el otro lado aparece el CERDITO con un periódico con la cara del LOBUALDO en la
portada)
CERDITO: Caperucita!!! Caperucita!!!
CAPERUCITA: ¿Qué pasa Cerdito?
CEDRITO: Mira el periódico. Me lo acaba de vender el Conejo. Lee
CAPERUCITA: Nuevo vecino en el bosque encantado. Es un Lobo.
CERDITO: Si, un Lobo.
CAPERUCITA: Y ¿qué con eso?
CERDITO: Y ¿qué con eso Caperucita? Es muy grande y tiene unos enormes colmillos.
Se nota que debe ser peligroso. Caperucita: Yo escuché de un primo lejano que le contó a
un vecino del amigo de su tío que los lobos son malos.

CAPERUCITA: ¿Si?

CERDITO: Míralo. No te parece malo y peligroso.

CAPERUCITA: Bueno...

CERDITO: Mira la cara de Feroz que tiene. Ese es un Lobo Feroz. Hay q tener mucho
cuidado y estar alertas. Nos vemos Caperucita. Y no lo olvides. Estemos alertas.

CAPERUCITA: ¡Alertas!
(CAPERUCITA sale por un lado y por el otro el CERDITO. Aparece LOBUALDO)
LOBUALDO: Por suerte esas ovejas me ayudaron a encontrar el camino de regreso
guiándome hasta aquí, estaba un poco perdido. Pero que bonito lugar. Me es tan familiar.
Me siento como en casa. Iré por unos hongos silvestres para la pizza vegetariana. Las
ovejas son mis primeras invitadas. ¡¡Alegría!! ¡¡¡Alegría!!! Pero antes oleré un poco mas
esta ricas flores.

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Autor: Alexander Pacheco
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(LOBUALDO sale por un lado y aparece el CERDITO con su casita de madera y su radio
y se pone a bailar. Sin percatarse que aparece LOBUALDO por detrás)
LOBUALDO: ¡¡Hola vecino!!
(EL CERDITO al ver al Lobo da un grito y se esconde en su casita)
LOBUALDO: Pero ¿qué pasa vecino? Sólo me quiero presentar, yo soy…
(De pronto LOBUALDO siente una picazón en la nariz)
LOBUALDO: Parece que soy un poco alérgico a estas flores. ¡¡¡Achuuuu!!!
(LOBUALDO da un gran estornudo y derriba la casa del CERDITO)
CERDITO: Mi casita!!! El Lobo derribó mi casita!!!! Lobo Malo!!!
(EL CERDITO sale huyendo)
LOBUALDO: Cerdito, yo no quise, no sé que fue lo que pasó. Nunca he estornudado así.
¡¡¡Vecino permítame darle una explicación…!!!
(LOBUADO va trás el y luego regresa)
LOBUALDO: Que manera de hacer nuevos vecinos. Pero ¿cómo es posible que haya
podido tumbar una casa con un estornudo?
ABUELA: Solo aquí en el bosque encantado todas esas cosas pueden ser posibles
Lobualdo.
LOBUALDO: ¡¡Hola!! Ya lo creo…¿¿Quién es usted??? Pero cómo sabe mi nombre.
ABUELA: Es acaso que no te acuerdas de mi?
LOBUALDO: ¿De usted? ¿Yo?
(Aparece la narración)
NARRACIÓN (Off): Fue allí que los recuerdos más profundo de cuando era apenas un
cachorro volvieron a su mente. La abuela con una sonrisa y los brazos abiertos le daba la
bienvenida al hijo que hacia mucho tiempo había perdido. Lobualdo no sabia bien lo que
pasaba, pero sentía que estaba de nuevo en casa.
LOBUALDO: ¡¡Abuela!!
ABUELA: ¡¡¡Lobualdo!!!

APAGÓN

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Autor: Alexander Pacheco
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Escena 5

En otro lado del Bosque PEDRITO, EL CERDITO y CAPERUCITA con garrotes en mano.

CERDITO: La última vez que lo ví antes que derribará mi casita fue cerca a la casa de la
abuelita.
PEDRITO: Yo estoy seguro que debe estar en peligro tu abuelita. Mis ovejas aún no
aparecen.
CAPERUCITA: ¿Chicos ustedes creen en verdad que sea peligroso ese Lobo?
CERDITO: No es por exagerar Caperucita, pero la manera que derribó mi casita fue
aterradora. Pedrito te puede contar que el le hizo frente al lobo cuando se llevó a sus
ovejas. ¿No es así Pedrito?
PEDRITO: Si Caperucita. El Lobo es muy fiero. Yo le hice frente cuando se llevó a mis
ovejas y le di un derechazo.
CAPERUCITA: ¿Un derechazo? Pero tu eres zurdo Pedrito. ¿No estarás mintiendo
Pedrito?
PEDRITO: Bueno…
CERDITO: No perdamos más tiempo chicos. Vamos por el lobo.
PEDRITO: ¡¡Vamos!!
(Se escucha la voz del LOBUALDO desde fuera)
LOBUALDO: Chicos, todo tiene una explicación. Yo no soy un lobo malo.
TODOS: Vamos trás el.
LOBUALDO: ¡¡¡No!!!
(Aparece LOBUALDO con vestido de la Abuela. Todos tras él con garrote en mano.
LOBUALDO se logra escabullir)
CERDITO: ¿Para dónde se fue?
PEDRITO: ¡Ese lobo es muy ágil!
CAPERUCITA: Creo que se fue para allá.
CERDITO: Yo creo que por allá.
PEDRITO: Y yo por allá.
CAPERUCITA: Hagamos algo. Cada uno vaya por un camino y si ven al lobo gritemos y
todos vamos hasta donde está y le damos su merecido.
PEDRITO: Buena idea Caperucita.
CERDITO: No perdamos el tiempo chicos. Vayamos tras él.
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Autor: Alexander Pacheco
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CAPERUCITA: ¡¡Vamos!!
(PEDRITO se percata que tiene un pasador desamarrado y se sienta a amarrárselo
mientras el CERDITO y CAPERUCITA salen corriendo. Aparece DON OBSTINADO)
DON OBSTINADO: Oye niño, escuché gritos que venían de aquí ¿Has visto al Lobo?
PEDRITO: Si señor cazador. Se fue por allá. Es muy grande y fiero. Debe saber que yo le
di un gran derechazo. Si lo ve dígale que me devuelva a mis ovejas…
DON OBSTINADO: ¡¡¡Quitate de mi camino!!
(Sale corriendo DON OBSTINADO)
PEDRITO: Que caracter… Pero por favor. No se olvide de mis ovejas, me oyó? mis
ovejas
(Aparece la ABUELA)
ABUELA: Pedrito, tus ovejas te están buscando a tí. Me acabo de encontrar con ellas
cuando fui al mercado a comprar unos alfileres y más galletas para Lobualdo, que
maravillosamente ha regresado a casa.
PEDRITO: ¿Mis ovejas están bien?
ABUELA: Claro que sí y están muy contentas de ir más tarde a comer una rica pizza
vegetariana que Lobualdo cocinará. Tu eras muy chiquito entonces, no lo debes recordar
pero ambos jugaban hace un tiempo junto a los cerditos, mi nietecita y el conejo.
PEDRITO: ¿Lobualdo?
ABUELA: Si, Lobualdo. Debe estar esperándome en casa. Al final el fue el único que me
ayudó con el vestido y se lo puso para poder entallarlo a mi medida. Nadie me quiso
ayudar. Muy mal Pedrito.
PEDRITO: Entonces ese lobo no es malo.
ABUELA: Claro que no Pedrito.
PEDRITO: Creo que he cometido un error Abuela.
ABUELA: ¿Un error?
(Se escucha al CERDITO gritar)
CERDITO: ¡¡¡Auxilio!! ¡¡Auxilio!!! ¡¡Ayuda!! ¡¡¡Ayuda!!!
ABUELA: Es el cerdito. Vamos a ayudarle.
PEDRITO: Creo que el sonido viene de allá.
ABUELA: Yo creo que de allá. Aunque últimamente no escucho muy bien.
PEDRITO: Separemonos. Usted vaya por allá abuela y yo voy por allá.
ABUELA: ¡¡Vamos Pedrito!!

17
Autor: Alexander Pacheco
Derechos Reservados

PEDRITO: ¡Vamos!
(LA ABUELA y PEDRITO salen corriendo)

APAGÓN

Escena 6

En otro lado del bosque. DON OBSTINADO ha captura al CERDITO con una soga y lo
trata de arrastrar. CAPERUCITA trata de jalar al CERDITO para evitar que el cazador se
lo lleve.

DON OBSTINADO: Ya te dije niña que nada impedirá que me leve a esta animal parlante.
Deja de jalar.
CAPERUCITA: ¡¡Sueltelo hombre malo!!
DON OBSTINADO: ¡¡Dime cazador!! Y ya te dije que dejes de jalar la cadena niña.
CERDITO: Por favor señor, déjeme ir. Yo no soy el Lobo.
DON OBSTINADO: Eres igual de bueno que el Lobo. Un cerdo parlante renovará la
cartelera del Circo. Nada mal (Ríe) ¡¡Avanza!!!
CERDITO: ¡¡Auxilio!!
(Aparece PEDRITO)
PEDRITO: ¡¡Oiga cazador!! ¡¡¡Deje a mi amigo el Cerdito!!
DON OBSTINADO: ¡Hazte a un lado muchacho!
PEDRITO: No se lo lleve… Yo pensé que quería al Lobo.
DON OBSTINADO: No me iré con las manos vacías de este bosque. El lobo ya se escapó
y dudo que vuelva a aparecer. Así son esas fieras, ya nunca más se dejan atrapar. Aquí
encontraré más animales parlantes igual que él. Por el momento este Cerdito será la
mejor atracción hasta que vuelva por más.
CERDITO: ¡¡¡Auxilio!!!
PEDRITO: Déjelo.
CAPERUCITA: ¡¡Déjelo hombre malo!!
DON OBSTINADO: ¡¡Ya te dije que me digas cazador!!
(Por el otro lado aparece LOBUALDO)
LOBUALDO: ¡¡Alto allí Don Obstinado!!
18
Autor: Alexander Pacheco
Derechos Reservados

DON OBSTINADO: ¡Con que apareciste! Te habías escondido bien Lobuado Ferozino.
LOBUALDO: Déjalo ir al pobre cerdito. Tu me quieres a mi en realidad. ¡El Cerdito por mi!
CAPERUCITA: ¡El lobo está entregándose por el cerdito! ¿No era malo?
PEDRITO: ¡No Caperucita, hemos cometido un error!
DON OBSTINADO: ¿No pondrás resistencia?
LOBUALDO: Ninguna Don Obstinado, pero sólo si suelta al Cerdito.
CERDITO: Si suélteme por favor. Soy muy malo bailando y el peor constructor de mis
hermanos.
DON OBSTINADO: ¡¡¡Silencio animal!!!
CERDITO: Cerdito, dígame Cerdito!
DON OBSTINADO: ¡¡Grrrrrr!!!
CERDITO: ¿Animal racional no suena mal tampoco eh?
LOBUALDO: ¡¡Que decides Don Obstinado!!
(Silencio largo)
CERDITO: Estos silencios me matan.
DON OBSTINADO: Lo haré. No deseo perder el tiempo enseñando nuevo numero a un
nuevo animal.
(DON OBSTINADO suela al CERDITO que corriendo hacia CAPERUCITA y PEDRITO
que lo abrazan)
CERDITO: ¡¡¡Fue horrible chicos!!! ¡¡¡Una terrible experiencia!!!
CAPERUCIA: Pobre lobito. Ese mal hombre se lo llevará.
PEDRITO: SI pobre. Hemos hecho mal. Yo le dije al Cazador donde estaban.
CAPERUCITA: ¡¡Pedrito!!
CERDITOÇ: ¡¡Si que mal Pedrito!!
(DON OBSTINADO coloca unas cadenas a LOBUALDO y luego le coloca nuevamente la
cadena al CERDITO)
CERDITO: ¿Otra vez?? ¡¡¡No!!!
CAPERUCITA: ¡¡¡Sueltelo!!!
PEDRITO: ¡¡¡No!!!
LOBUALDO: ¿Oiga qué hace? ¡¡¡Hicimos un trato!!!
DON OBSTINADO: ¡¡¡Silencio!!! No puedo dejar de ir la oportunidad de tener a dos
animales parlantes. ¡¡Es el negocio de mi vida!! Pero creo que volveré mas seguido a este
bosque. Aquí encontré criaturas muy interesantes siempre.

19
Autor: Alexander Pacheco
Derechos Reservados

LOBUALDO: ¡¡Me niego a ser parte de su circo!!


DON OBSTINADO: Lo serás o te castigaré tan fuerte hasta que sepas quien es el que
manda.
LOBUALDO: ¡¡No lo haré. déjelo ir!!
DON OBSTINADO: ¡¡¡Silencio!!!
(DON OBSTINADO golpea a LOBULADO con un garrotazo)
DON OBSTINADO: Ahora caminen…
(DON OBSTINADO arrastra a LOBUALDO y al CERDITO que están encadenados.
Cuando llegan al extremo se acercan a HUMBERTO que lo ha presenciado todo. DON
OBSTINADO se acerca a unas de sus ramas)
DON OBSTINADO: ¡¡¡Avancen animales!!!
CERDITO: ¡¡¡Déjeme ir!!!
PEDRITO: Déjelos ir cazador.
CAPERUCITA: ¡¡¡No se los lleve!!
DON OBSTINADO: Silencio niños, ya me estoy cansando se escuchar su gritos
(HUMBERTO distrae con unas de su ramas a DON OBSTINADO y con la otra rama lo
golpea muy fuerte en la cabeza y cae desmayado)
HUMBERTO: Ya me tenía cansado ese cazador.
LOBUALDO: ¡Gracias Humberto!
HUMBERTO: No tienes de que Lobualdo. ¿Sabes? Ya recordé de donde te conozco. Por
cierto, veo que conociste a tus vecinos y mas que tus vecinos, a tus viejos amigos.
LOBUALDO; ¿Viejos amigos?
TODOS: ¿Viejos amigos?
(Aparece la ABUELA)
ABUELA: Así es chicos. Un viejo amigo. Ahora les cuento la historia.
(Cada uno comienza a rodear a LOBUALDO como reconociéndolo. Se escucha música
de cuando jugaban a la ronda.)
CERDITO: ¡¡Un momento, creo acordarme algo de ti!!
PEDRITO: ¡¡Yo también!!
CAPERUCITA: ¡Y yo!
LOBUALDO: ¡¡Hola chicos!!
(Todos se quedan mirando)

APAGÓN

20
Autor: Alexander Pacheco
Derechos Reservados

Escena 7

Es la casita de la Abuela. DON OBSTINADO desmayado está sentado en una mecedora


al lado de la chimenea. De pronto despierta y no sabe donde se encuentra. Aparece la
ABUELA que lleva una taza de chocolate.

ABUELA: Hasta que despertaste muchachito.


DON OBSTINADO: ¿Dónde estoy? ¿Dónde están mis..?
ABUELA: Estás en la casa de la abuela y tus armas y equipo están allí. No debes
preocuparte, te puedes ir cuando gustes a seguir con tu trabajo que supongo debe ser
muy importante. Pero antes ¿no deseas probar un tacita de chocolate caliente? Es mi
especialidad.
DON OBSTINADO: ¡¡¡No!!!
(DON OBSTINADO se levanta y va hacia sus cosas hasta que queda impactado por el
olor del chocolate que llega a su nariz)
DON OBSTINADO: Un momento!! Que rico huele ese chocolate caliente!!!
ABUELA: Siéntate muchachito. Siempre hay tiempo para una taza de chocolate.
(Suena un timbre)
DON OBSTINADO: ¿Qué fue eso?
ABUELA: Es el horno. ¡Ya están las galletas!
(LA ABUELA al pasar por las galletas de un pequeño empujón sienta a DON OBSTINADO
en la mecedora)
ABUELA: ¡¡Ahora vuelvo!!
(LA ABUELA sale por las galletas y vuelve a entrar)
DON OBSTINADO: Nada de lo que intente evitará que case a esos animales y me los
lleve al circo me entendió?
(Aparece la ABUELA con una charola de galletas)
ABUELA:¿Qué me decias hijito?
DON OBSTINADO: Que nada evitará que case a esos…
(DON OBSTINADO se percata del olor de las galletas)
DON OBSTINADO: ¡Pero un momento! ¿Qué es lo que huele ta rico?
ABUELA: Son las galletas. ¿Desea probar una?
(DON OBSTINADO prueba una y cambia de gesto)
21
Autor: Alexander Pacheco
Derechos Reservados

DON OBSTINADO: Pero que rica galleta.


ABUELA: ¿Le gustó la galleta señor cazador?
DON OBSTINADO: Dígame Don Obstinado por favor abuela. ¿Puedo tomar otra galleta?
ABUELA: ¡Las que guste Don Obstinado!
DON OBSTINADO: ¡¡Maravillosas!! Creo que iré a cazar en un rato más.
ABUELA: Don Obstinado, me permitiría contarle una pequeña historia.
DON OBSTINADO: Sólo se me convida un poquito más de chocolate abuela.
(Ambos ríen. LA ABUELA le sirve más chocolate)
ABUELA: Sabe Don Obstinado, este bosque, no es un bosque como cualquier otro.
DON OBSTINADO: De eso ya me di cuenta.
ABUELA: Hace un tiempo atrás…
(Vos en off de LOBUALDO)
LOBUALDO: La Abuela se sirvió una tacita también y se sentó en una vieja silla y
comenzó a contarle que siempre había sido una abuela y que tenía tantos años como el
bosque encantado. Le contó acerca de su granja dónde cuidaba a distintos animalitos
mágicos que desde muy pequeños habían quedado abandonados porque muchas veces
sus dueños pensaba que estaban hechizados. Contó como encontró detrás de Humberto
el árbol una cesta donde había un cachorro lobo recién nacido. No había ninguna nota o
mensaje, solo una medalla en el cuello del cachorro que decía: Lobualdo Ferozino. Era el
bebe de Lobo más feo y a la vez más lindo que había visto en su vida. Sabia que tenia ya
muchos animalitos en la granja y que iba ser muy difícil quedárselo. Pero también supo
que nadie más lo iba a querer, y simplemente lo adoptó. Así pasó el tiempo y Lobualdo fue
creciendo junto a Roldan el Conejo blanco, la familia de los cerditos, las ovejas, un
pequeño niño de madera y su pequeña nieta Caperucita que siempre venia a visitar y a
jugar. Una tarde mientras todos jugaban uno de los juegos que mas disfrutaba. El
pequeño cachorro lobo se escondió detrás de un árbol como siempre, hasta esperar en el
momento para salir y fue allí que un cazador perdido por accidente, se encontró frente a
este pequeño cachorro y descubrió que no era un lobo cualquiera.
ABUELA ¡¡¿Lobo qué estás haciendo?!! ¡¡¿Lobo qué estás haciendo? Gritamos una y
otra vez, pero el pequeño Lobualdo de su escondite no salió. Lobualdo había
desaparecido, día y noche lo buscamos y nunca lo hayamos. ¿Se siente bien Don
Obstinado? ¿Desea un poco más de chocolate?
DON OBSTINADO: ¡¡Creo que hecho muchas cosas malas..
ABUELA: ¿Se siente bien Don Obstinado?
DON OBSTINADO: No sé que me pasa. Creo que voy a…
22
Autor: Alexander Pacheco
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(DON OBSTINADO repentinamente se pone a llorar echando muchas lagrimas)


ABUELA: Don Obstinado el temible cazador, que siempre había escondido todas sus
emociones en lo más profundo de su corazón, repentinamente cayó en un llanto muy
parecido al de un bebe, que no se detuvo en minutos, ni en horas y tuvieron que pasar
días. Todos tratábamos de consolarlo y calmarlo. (Aparecen LOBUALDO, EL CERDITO,
CAPERUCITA, CONEJO, a consolarlo) Cuando se calmó y dejó de llorar, había mucho
que secar y arreglar. El corazón del cazador había cambiado. Ya no era malo ni
despiadado. Pidió disculpas a todos y se arrepintió de sus actos, dejando la profesión de
cazador convirtiéndose en el nuevo leñador del bosque encantado. Por cada árbol que
derribaba para calentar la estufas, cien más que plantaba para hacer más lindo el bosque
encantado. Ese día en el bosque se organizó una gran fiesta en honor al regreso de
Lobualdo ferozino, todos los vecinos del bosque asistieron. Nadie faltó sin excepción;
Hadas, duendes, principes, princesas, todos estaban allí. La Reina de corazones preparó
ricos manjares con la ayuda de Roldan el conejo, El Capitan Garfio tocó el acordeón, el
Gato con medias cantaba una alegre canción y el Cerdito bailaba con mucha emoción y al
final del show Lobualdo junto con sus amiguitos hizo una presentación.

CANCIÓN

TELÓN

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