Acidificacion Matricial de Areniscas
Acidificacion Matricial de Areniscas
Acidificacion Matricial de Areniscas
A - Introducción
El primer criterio a considerar en la selección de un fluido de tratamiento matricial de
estimulación es la naturaleza física y química del daño a remover.
En el caso que el tipo de daño sea tratable con ácidos (invasión de sólidos, migración o
hinchamiento de arcillas, algunas precipitaciones químicas, etc.) el segundo criterio a
considerar es la respuesta de la formación a la inyección de ácido.
Así es que resultan factores de principal importancia la litología y la mineralogía de la
formación. Una primera aproximación debe dividir el análisis entre areniscas y
carbonatos.
En el caso de tratarse de areniscas, es sabido que todas ellas exhiben porosidad y
permeabilidad primaria importantes y es excepcional la existencia de porosidad y
permeabilidad secundaria. Los sólidos que invaden la formación sólo penetran algunas
pulgadas. La migración de finos propios de la formación suele ser un problema en la
inmediación del pozo, donde la velocidad asociada al flujo radial es mayor.
Los ácidos reaccionan mucho más lentamente con los principales minerales presentes
en las areniscas. Podemos considerar que los granos de cuarzo de la arenisca son
insolubles en ácidos (a los fines netamente prácticos), mientras son atacados con
distinta velocidad los minerales que cementan los granos y forman la matriz de la roca.
Las partículas sólidas responsables del taponamiento de las gargantas interpolares
suelen disolverse en el ácido. De este modo, los ácidos matriciales de areniscas
remueven el daño según dos mecanismos usualmente concurrentes:
I. Preflujos
El sistema ácido indicado como Preflujo tiene como objetivos principales :
9 Disolver todos los materiales solubles en HCl : carbonatos, compuestos de hierro,
clorita (parcialmente soluble en HCl). Se evita por ejemplo la precipitación de
fluoruro de calcio y el gasto de HF con los minerales que no lo necesitan para
disolverse.
9 Separar la mezcla de HCl-HF del agua de formación (con iones sodio y potasio que
precipitan fluosilicatos).
9 Extraer cationes alcalinos de las arcillas por intercambio iónico
9 Generar un ambiente ácido (muy bajo pH) que dificulta la deposición de diversos
subproductos
El Preflujo ácido es necesario aún cuando la formación sea muy poco soluble en HCl,
bastando en este caso soluciones diluidas, débiles.
Si no se remueve totalmente el carbonato de calcio con el preflujo ácido, el remanente
reaccionará con al ácido fluosilícico o el fluoalumínico (resultantes del gasto del HF)
formando voluminosos geles hidratados de sílice y alúmina, aparte del fluoruro de
calcio.
III.Observaciones de consideración
IV. Postflujo
Toda acidificación con HF debe completarse con un post-flujo adecuado para desplazar
el tratamiento principal entre 3 y 5 pies lejos del pozo, donde la inevitable
reprecipitación de algunos subproductos afectará menos a la posterior productividad o
inyectividad.
La selección del postflujo no es tan crítica como la del tratamiento principal, pero hay
diversos aspectos a tener en cuenta :
♦ No usar gasoil en pozos de gas o inyectores de agua
♦ El uso de ácido como postflujo contribuye a mantener un pH muy bajo que
minimiza potenciales reprecipitaciones. Recordar que las sucesivas partes de
un tratamiento se mezclan considerablemente al retornar los fluidos
♦ No usar salmueras de cloruro de sodio o potasio
♦ Costo, logística y disponibilidad son consideraciones siempre importantes
♦ Tratamientos en etapas (con divergentes) se simplifican si se emplea el mismo
ácido como pre y post-flujo
♦ Post-flujos energizados con gases (nitrógeno) son útiles en pozos de baja
presión
♦ Es recomendable el uso de solvente mutual en el postflujo para dejar la
formación acuohumectada y facilitar el retorno de los fluidos