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Vanesa Romualdo
Pensando los sentidos sobre las desigualdades escolares:
El Plan de Mejora Institucional en Buenos Aires........................51
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pone parte de los resultados de una tesis de maestría cuyo objetivo
general fue analizar los sentidos sobre las desigualdades escolares
que se configuraron a partir de la implementación de las políticas
destinadas a garantizar la obligatoriedad de la escuela secundaria
en la ultima década en Argentina. El estudio focaliza el análisis en
las estrategias institucionales que desarrollaron las escuelas en el
marco del programa nacional Plan de Mejora Institucional, a través
del cual se instrumentó el Plan Nacional de Educación Obligatoria.
Nos interesamos por los modos de apropiación de la política por
parte de las escuelas, centralmente por los sentidos sobre las des-
igualdades escolares presentes en los proyectos institucionales que
definieron y llevaron a cabo. La investigación asumió una metodo-
logía cualitativa. Realizamos un estudio de casos en cuatro escuelas
de la Provincia de Buenos Aires pertenecientes a dos de los distritos
con mayor vulnerabilidad social durante 2014 y 2015.
Volviendo a nuestro país, y a nuestra realidad, César Darío Fon-
seca Bautista, Rosana Santiago García y Luz Marina Ibarra Uribe, en
La transversalidad en la educación media superior. El trabajo colabo-
rativo docente como recurso, muestran el significado que tiene para
la Secretaría de Educación Pública la transversalidad en el denomi-
nado Modelo Educativo para la Educación Obligatoria, particular-
mente respecto a la Educación Media Superior (EMS); además de
resaltar las ventajas y dificultades del trabajo colaborativo como es-
trategia viable para desarrollar contenidos disciplinares de diversas
asignaturas y aquellos temas transversales impulsados y promovi-
dos por la Subsecretaría de Educación Media Superior. Se empleó
una metodología de corte descriptivo-hermenéutico documental.
Se revisó el documento del Modelo Educativo, para identificar la
forma cómo se emplea el concepto de transversalidad. Igualmente
se hizo una revisión de documentos institucionales relacionados
con el tema y elementos conceptuales referentes al trabajo colabo-
rativo docente en la EMS.
Jimena Gómez Chávez en Sendas cotidianas de mujeres académi-
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originarias, reflexiona sobre las diversas maneras de aprendizaje
parten de la observación y en el saber escuchar estos procesos son
las pautas de aprendizaje, de esta manera los niños practican me-
diante la imitación de acciones a través del juego conforme van
creciendo concretan los aprendizajes en situaciones reales como
sujetos participantes en las actividades. Las aulas son espacios que
pueden incluir estas vivencias en la construcción de materiales di-
dácticos situación que recrea la lengua en relación a su contexto
que esta socialmente determinado por las prácticas sociocultura-
les, mismas que les otorga a los niños competencia comunicativa,
participativas y favorables para la lectoescritura.
Por su parte, Adriana Hernández Silvano y Manuel Alejandro
Moreno Muñoz, en Contradicción de la comprensión lectora: hablar
tzotzil y entender en español, ofrecen un acercamiento al desarrollo
de la comprensión lectora en español en comunidades indígenas
de habla tzotzil, de forma específica, el Embarcadero Jericó del mu-
nicipio de Villacorzo Chiapas. Asimismo, su trabajo abre la opor-
tunidad de analizar la lectura desde una perspectiva distinta, en la
que el español es una barrera para lograr cumplir con los estánda-
res u objetivos curriculares que plantea el programa de educación
básica 2011. También analiza las diferencias culturales existentes
y propone una alternativa distinta de aprender. La investigación
muestra que hablar una lengua distinta al español es una barrera
para lograr la comprensión lectora desde una visión convencional,
o aprendes la lengua oficial o quedas fuera de todo proceso educa-
tivo formal.
Azucena Hernández Silvano y Rogelio Ernesto Marcial Zavala,
TIC y educación indígena: contexto intercultural en El Mirador, munici-
pio de Cintalapa, Chiapas, ofrecen un acercamiento a la labor educa-
tiva en comunidades de contexto indígena, así como una visión en
el uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC)
para atender la diversidad cultural existente en el aula, con la fir-
me intención de generar ambientes interculturales que favorezcan
15
17
RESUMEN: En este comunicado se realiza una reflexión, necesaria,
respecto a las recientes reformas educativas impulsadas en Méxi-
co y en particular respecto del Modelo Educativo que acompañó
a dichas reformas en el año de 2017. Se pone en cuestión el ali-
neamiento entre lo reformado y la propuesta educativa y de cómo
estos dos asuntos sucumben ante la organización de un sistema
educativo cooptado por una autoridad desdibujada y un sindicalis-
mo poco sensible a las necesidades educativas del México de hoy.
PALABRAS clave: Modelo Educativo, Reforma Educativa, Magiste-
rio.
19
(SEP, 2017).
De acuerdo a los ejes del modelo educativo, sería conveniente
que se explicitara el modelo cultural subyacente, el modelo políti-
co-económico y el tipo de sociedad correspondiente, ya que el mo-
delo educativo es la abstracción y conceptualización de la sociedad
y cultura de donde emerge. Existe, entonces, un implícito en el mo-
delo que consiste en concebir a la sociedad en la dimensión de la
globalización donde se tiende a la homogeneización; lo anterior
nos lleva a la pregunta ¿es la sociedad mexicana semejante o igual
a la sociedad europea, asiática o norteamericana?.
Sería pertinente también explicitar los sustentos del plantea-
miento curricular que no son sólo los principios filosóficos, sino
que incluyen las necesidades sociales y educativas, fundamental-
mente; pareciera que en el Nuevo Modelo Educativo la obligación
de México es responder a las exigencias del mundo global. Asi-
mismo, deberían existir rutas para integrar los factores sociales e
institucionales de la gobernanza, ¿pueden surgir del humanismo
del Renacimiento? o ¿están surgiendo del neoliberalismo, neoposi-
tivismo y neopragmatismo?.
El perfil de egreso que se presenta en el mismo modelo, com-
prende las siguientes grandes categorías: Lenguaje y comunica-
ción, Pensamiento matemático, Exploración y comprensión del
mundo natural y social, Pensamiento crítico y solución de proble-
mas, Habilidades socioemocionales y proyecto de vida, Colabora-
ción y trabajo en equipo, Convivencia y ciudadanía, Apreciación y
expresiones artísticas, Atención al cuerpo y la salud, Cuidado del
medio ambiente y Habilidades digitales. Dicho perfil abarca a los
estudiantes del nivel básico como del nivel medio superior. Como
se comprende, la formación y desarrollo profesional docente, esta-
rán determinados por estas categorías, pero también, el quehacer
docente se enfocará a la consecución de las mismas categorías en
cada uno de los estudiantes. En el perfil están comprendidas las
ciencias exactas, las ciencias naturales, las ciencias de la comunica-
21
no saben qué comerán el día que amanece?, ¿el proyecto de vida
no es un privilegio de las clases sociales que todo lo tienen?, ¿pue-
den trabajar de forma colaborativa y en equipo los descartados por
la sociedad del consumo?, ¿cómo pueden trabajar en equipo los
pobres y miserables que pertenecen al “ejercito industrial de reser-
va”?, ¿puede haber convivencia armónica y formación de ciudada-
nía en un mundo injusto?; todo esto subyace al Modelo Educativo
y ni los constructores del modelo, ni los aplicadores, tienen ojos
para verlo.
De la misma manera, ¿qué sentido tienen el desarrollo de ha-
bilidades digitales cuando el estómago está vacío y el espíritu tien-
de a morirse?; ¿qué sentido tiene el desarrollo de estas habilidades
en un mundo de deprimidos?, ¿cómo es la apreciación artística
desde las dimensiones del sujeto vacío?, ¿cómo se logra la salud, en
especial la salud mental, fuera de la espiritualidad y del amor?. To-
das las categorías que forman el perfil de egreso son importantes,
pero social y psicológicamente insuficientes; el medio ambiente
está exigiendo respeto y no sólo cuidado; al parecer las filosofías de
la globalización no garantizan el respeto al medio ambiente, desde
la depredación que están haciendo las empresas trasnacionales a la
naturaleza (Laudato Si del Papa Francisco, 2017).
Igualmente, la formación y el desarrollo profesional docente se
visualiza en distintos planos: profesional centrado en el aprendiza-
je de los estudiantes, persona que genera ambientes de aprendizaje
incluyentes, profesional comprometido con la mejora constante de
su práctica y capaz de adaptar el currículum a su contexto especí-
fico y fortalecer la condición profesional de los docentes. Todo esto
suena muy bien, pero habrá que ver si la sociedad es incluyente,
cuando en ella abundan los excluidos; ¿cómo la escuela puede ser
una isla dentro de un mar de convulsiones por las desigualdades
en la sociedad? ¿Puede haber mejora constante de la práctica pro-
fesional cuando el docente puede formar parte de los excluidos
sociales? ¿Puede haber mejora constante de la práctica profesional
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deben construir los ambientes de aprendizaje? ¿Es el humanismo
del Renacimiento la perspectiva para la construcción de los am-
bientes de aprendizaje? ¿Será una perspectiva interdisciplinaria y
transdisciplinaria la que sustente esta construcción? ¿Los progra-
mas de la formación continua están en este sentido? ¿Posee el pro-
fesor metodologías para determinar conocimientos previos en los
alumnos, ya que esta pretensión viene desde los años 80’s en estos
contextos? ¿Cómo el profesor acepta la diversidad y la aplicación
del currículum en contextos educativos heterogéneos, si carece de
una filosofía intercultural, e incluso, carece de formación filosófi-
ca?
La docencia como profesión, de acuerdo al modelo educati-
vo es administrada y evaluada por el Servicio Profesional Docente
(SPD), organismo con fundamento jurídico; la docencia se conci-
be como un “servicio basado en el mérito”; sujeto a mecanismos
de ingreso, promoción, reconocimiento y permanencia; la docen-
cia como profesión conlleva a la “enseñanza como una profesión
respetada y una elección de carrera más atractiva”; asimismo, la
instancia en cuestión y la sociedad en general, deben motivar y
acompañar a los docentes que están en servicio para la mejora
continua y el quehacer docente estará sujeto al proceso de eva-
luación conceptualizada como “mejora continua” y como proceso
que posibilita la localización de fortalezas y áreas de oportunidad
(Modelo Educativo, 2017).
Este tipo de evaluación instrumentaliza al docente, ya que se le
desviste de su ser cultural y se le convierte en obrero de la educa-
ción, ya que un instrumento cuantitativo de evaluación del queha-
cer docente, prescinde de lo profundamente humano de este acto;
de tal manera que en vez de motivar al docente a una mejora con-
tinua de su práctica, se le condiciona a una simulación continua de
mejora. No son solamente los aspectos científico-técnicos lo que
convierten el quehacer docente en exitoso, sino que interviene la
identidad docente, las motivaciones intrínsecas y sobre todo, que
25
interdisciplinaria y transdisciplinaria; lograr el dominio del inglés
y de las TIC; finalmente, la formación inicial debe darse bajo una
perspectiva equitativa, inclusiva e intercultural (Modelo Educativo,
2017).
Pareciera que el examen de ingreso a la docencia y la modifi-
cación de planes y programas de estudio es garantía de la calidad
educativa, pero ¿tiene sentido la modificación de planes y progra-
mas de estudio, cuando las estructuras injustas de la sociedad no
cambia?, ¿los exámenes de ingreso a la docencia valoran la salud
psicológica de los docentes y sobre todo, la identidad con la docen-
cia?. Convendría hacer un análisis de dichos instrumentos en este
sentido; asimismo, ¿se puede garantizar la calidad educativa y del
aprendizaje, cuando en la actualidad los normalistas chiapanecos,
que pertenecen a grupos radicales, presionan a las autoridades de
la Secretaría de Educación para que les gestionen hasta tres opor-
tunidades para repetir el examen de ingreso a la docencia?, ¿qué
sucederá con el desempeño de los docentes que ingresan al servi-
cio después de haber aprobado su examen en una tercera oportu-
nidad?; además de que existe el problema de plazas para docentes.
A manera de conclusiones
Los principios pedagógicos de la labor docente, de acuerdo al
modelo en cuestión son: poner al alumno y a su aprendizaje en el
centro de su proceso educativo, tener en cuenta los saberes previos
del estudiante, ofrecer acompañamiento al aprendizaje, mostrar in-
terés por los intereses de los estudiantes, dar un fuerte peso a su
motivación intrínseca, reconocer la naturaleza social del conoci-
miento, diseñar situaciones didácticas que propicien el aprendizaje
situado, entender la evaluación como un proceso relacionadocon
la planeación y el aprendizaje, modelar el aprendizaje, reconocer
la existencia y valor del aprendizaje informal, promover la relación
interdisciplinaria, favorecer la cultura del aprendizaje, reconocer la
diversidad en el aula como fuente de riqueza para el aprendizaje
Referencias
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POSNER, G. (1982). A cognitive sciencie conception of curriculum
and instruction. Journal of Curriculum Studies 14(4) pp. 343-
351.
27
Una perspectiva intercultural para la formación
escolar
RESUMEN: Se expone en este documento, algunas reflexiones
construidas en torno a la importancia de la manera como se posi-
ciona el docente de frente a la diversidad en el aula; entendiendo
que es el docente, a partir de su práctica, de sus actitudes, concep-
ciones y creencias en relación con la diversidad cultural presente
en las aulas, el único que podrá –o no- promover una educación
para la interculturalidad en la que se recupere lo más significativo
de cada cultura que llega al aula con cada uno de los alumnos. La
intención es promover un cambio significativo que ofrezca la posi-
bilidad de crear ambientes de igualdad, de equidad y de respeto a
la propia construcción del “Otro” desde su cultura, en la búsqueda
de procesos educativos centrados en el reconocimiento de la diver-
sidad, el respeto, la equidad y la posibilidad de sentirse aceptados y
reconocidos como parte importante del proceso formativo escolar.
PALABRAS clave: Práctica Docente, diversidad cultural, intercultu-
ralidad, proceso educativo, formación intercultural.
29
las prácticas educativas planas, acartonadas y generalizadas, por-
que la diversidad cultural nos está pidiendo en cada momento, que
se generen procesos dinámicos de encuentro entre los estudiantes
y el docente, con una base de respeto y reconocimiento del otro
como agente de diversidad cultural que al integrarse al grupo gene-
ra experiencias de interculturalidad.
Así, entender que la educación es un proceso intercultural, tie-
ne como referente principal la comprensión de que nuestra socie-
dad es, sin duda, cada vez más multicultural, tanto por los procesos
de migración y las culturales originales que llegan a nuestras aulas,
como por las múltiples culturas familiares que se traducen en es-
tilos de vida, creencias religiosas, costumbres, principios y valores
familiares. Por lo tanto, la escuela, como institución social que es,
no queda al margen de este escenario; más aún, es uno de los esce-
narios donde más se encuentra esta multiplicidad de culturas por
intercambiarse y enriquecerse con la convivencia diaria entre sus
actores, porque la cultura es todo lo que cada persona es y mani-
fiesta en las interacciones con los otros.
Y es a partir de este encuentro que se enriquece el conoci-
miento, la experiencia y la formación de los estudiantes, encon-
trando puntos de coincidencia a partir de la diferencia y la diversi-
dad cultural.
1. Desde y hacia dónde pensar la interculturalidad
Trabajar en el aula es permanentemente un reto que requie-
re ser abordado desde una mirada abierta y comprometida con la
emergencia de nuevas formas de participación en la escuela y la
sociedad, en la que todos seamos reconocidos como agentes gesto-
res de la transformación del entorno. Desde una perspectiva para la
interculturalidad el principio es pensar en una serie de cuestiona-
mientos en torno a las determinaciones de la práctica docente, que
nos llevan a pensar en lo qué es la interculturalidad, la existencia
de la diversidad cultural en el aula y la necesidad de estructurar
escenarios que guíen la experiencia hacia procesos interculturales.
31
darse en la polaridad de aprendizaje de lo propio y lo ajeno sino
propiciar una reflexión sobre los espacios intermedios de negocia-
ción y encuentro (muchas veces conflictivos)” (Zavala citado por
Unesco 2008, p. 18).
Sin embargo, uno de los problemas más sentidos en la prácti-
ca docente, es que parecemos olvidar que las diferencias son inhe-
rentes a los seres humanos, y que la principal diferencia es la que
“emana de la procedencia cultural, sustento dinámico y cambian-
te desde el cual el sujeto construye su identidad propia” (Unesco
2008, p. 17), y caemos en el vicio de tratar a todos por igual, como
si todos tuviéramos los mismos referentes, como si todos hubiése-
mos tenido las mismas experiencias. El resultado de lo anterior es
la experiencia escolar carente de sentido para los alumnos, quie-
nes pierden el interés en el contenido, en su formación y en la
construcción de su propio conocimiento, al no entender la manera
cómo van a hacerlo, ni recibir la guía y el apoyo para ello. Esto,
además, tiene como consecuencia que su trayectoria escolar se ca-
racterice por el desinterés, la apatía y la mediocridad, que se tradu-
ce muchas veces en fracaso escolar.
La interculturalidad, en cambio, se refiere a un intercambio
entre culturas que tiene lugar en términos equitativos y condicio-
nes de igualdad, por lo que se traduce en una meta a alcanzar, en
un proceso permanente de “relación, comunicación y aprendizaje
entre personas, grupos, conocimientos, valores y tradiciones distin-
tas, orientada a generar, construir y propiciar respeto mutuo y a un
desarrollo pleno de las capacidades de los individuos por encima
de sus diferencias culturales y sociales” (Walsh, P.4, 2005), lo que
representa nuevas oportunidades de desarrollo para las generacio-
nes jóvenes y para nuestra sociedad, porque permitirá trascender
las relaciones tradicionales de poder, el discurso hegemónico y las
prácticas mediatizadas por los estereotipos de clase, raza, origen,
género y condición social, porque “Entender la interculturalidad
como proceso y proyecto intelectual y político dirigidos hacia la
33
2008, p. 17).
Lo anterior significa que tenemos que romper con los mitos
en torno a la interculturalidad. El primero y más importante es que
la educación intercultural tiene lugar en nuestra aula regular sola-
mente cuando hay grupos minoritarios (esto es diferente de la ma-
yoría) y tendemos a creer que es entonces que tenemos que crear
espacios adecuados para ellos y poner, por encima de los demás,
sus necesidades. El problema es que en este caso, manifestamos
una actitud sobreprotectora con la que lo único que logramos es
hacer más plausible la diferencia entre el integrante de grupo mi-
noritario y la generalidad, generando exclusión.
Otro error muy común es pensar que tenemos que respetar
la diferencia en cuanto a formas de pensar y de actuar de quienes
vienen de una cultura diferente, pero que en el intento, nos volva-
mos tolerantes y complacientes y no les damos la oportunidad de
integrar lo que le ofrecen otras culturas. Esto representa otro tipo
de exclusión al no considerar que vale la pena ayudarle a enrique-
cer su cultura con las otras ni a ofrecer lo que su cultura tiene para
dar. Al respecto, Jordán (2003, p. 1) dice:
…ha llegado el momento de tomar conciencia pedagógica de que
los niños y jóvenes de esos centros ya viven también y, sobre todo,
están llamados a vivir como ciudadanos en una sociedad irreversi-
blemente más global, plural, y multicultural. No preparar a todos los
alumnos para ser capaces de “vivir y convivir” dentro de esa nueva
realidad social (en construcción) sería algo tan erróneo como no cul-
tivar en todos, desde la escuela su competencia para desenvolverse
con fluidez en su vida adulta personal, laboral y social, gracias al
dominio de dos o más lenguas.
35
de conflictos escolares.
La actitud del docente, en este contexto, ha de permitir hacer
a un lado los estereotipos en torno a las culturas y las diferencias
de género, creencias, formas de convivencia que llevan consigo los
actores al llegar al aula. Es necesario trascender la concepción tí-
pica de cultura que se centra solamente en una visión folklórica o
tradicional, para entender que la cultura es lo que nos determina
y determina a nuestros alumnos. La cultura es siempre algo más
que fiestas y modos de vestir y comer. Si no estamos en estrecho
contacto con la cultura diaria de los niños, sino que hacemos hin-
capié en aspectos poco habituales (de su cultura viva), puede que
contribuyamos más a enajenarlos que a valorizarlos. Es necesario,
pues, conocer lo que los padres desean; a qué elementos de su cul-
tura conceden verdadera importancia; cuáles de esos elementos les
resultan prácticamente indispensables; qué pueden y quieren co-
municarles (de su cultura) a sus propios hijos; y qué aspectos de su
cultura quieren los padres que la escuela les ayude a mantenerlos
vivos (Godenzzi, 2006).
Todo lo anterior, implica una visión diferente del proceso edu-
cativo y de nuestra participación en el aula; una visión sustentada
en la formación docente basada en la reflexión y el reconocimien-
to del otro desde su riqueza cultural; una formación pedagógica
que se lleve a cabo bajo la forma de un encuentro y diálogo entre
personas que tienen raíces histórico – culturales diferentes pero
igualmente importantes.
Es renovar el compromiso y las actitudes que determinan
nuestro quehacer y que muchas veces nos impiden ver toda la ri-
queza implícita en el intercambio natural de la experiencia áulica.
Significa comprometernos con los alumnos para ayudarles a exter-
nar su potencial en beneficio de ellos mismos, de su desarrollo y su
intelecto, de tal forma que aprendan en confiar en sí mismos y en
sus posibilidades en la sociedad. Si los profesores, de forma realista
pero esperanzada, “consiguen inyectar en esos niños la convicción
Esto ofrece una idea muy clara sobre la importancia que tie-
ne para el alumno, el reconocimiento del profesor, pues este será
como el puente por medio del cual, el alumno accederá al recono-
cimiento por parte de sus compañeros y hasta de sí mismo.
No cabe duda entonces acerca de la enorme necesidad de que
el profesor se interese por todos y cada uno de sus alumnos, vién-
dolos como “personas reales y singulares”, con toda su circunstan-
cialidad global; pero sobre todo, concibiéndolos como una cultura
viva, latente, vibrante que ayudará a enriquecer la cultura de los
otros. Es necesario diseñar prácticas educativas
…dirigidas a todos y cada uno de los miembros de la sociedad en
su conjunto; que propone un modelo de análisis y de actuación que
afecte a todas las dimensiones del proceso educativo. Los objeti-
vos de esta educación son la igualdad de oportunidades –entendi-
da como oportunidades de elección y de acceso a recursos sociales,
económicos y educativos-, la superación del racismo y la adquisi-
ción de competencia intercultural (Aguado, 2003: 63).
37
de diálogo, de cooperación y de intercambio como base para el
enriquecimiento cultural y educativo mutuo, para lo cual resulta
importante que el docente logre tomar como base “los principios
educativos de conocimiento intercultural, convivencia democráti-
ca, igualitarismo y participación comunitaria” (Leyva, p.3, 2008).
39
de la democracia, la práctica de valores universales y el estable-
cimiento de los derechos humanos como forma de expresión, de
equidad y respeto mutuo.
¿Cómo nos posicionamos frente al “otro”? Las prácticas so-
ciales que se están construyendo en las escuelas de México son en
muchos casos, más violentas, más discriminatorias y más xenofó-
bicas; la responsabilidad de la familia, de los medios de comuni-
cación, de las políticas públicas, no están cumpliendo su papel de
contribuir con la formación de alumnos con lógicas de interacción
desde la interculturalidad, estableciendo la “Otredad” como base
en los esquemas de intercambio dialógico de los actores. “La edu-
cación intercultural nos lleva a reflexionar a partir de la práctica
docente, un cambio significativo que ofrezca la posibilidad de crear
ambientes de igualdad, equidad y respeto a la propia construcción
del Otro desde su cultura” (Chávez, 2014, p. 179).
Hablar de interculturalidad es promover el reconocimiento,
compresión y valoración de la diversidad cultural, física, económi-
ca, de género, religiosa, étnica, lingüística y política, de los actores
que interactúan en un espacio, en este caso la escuela. Al educar a
partir de una mirada intercultural, es alcanzable la reivindicación
de los actores sociales, con estrategias de inclusión y participación
en la toma de decisiones.
Conclusiones
Sin duda, cuando pensamos en gestionar un proceso educativo
que promueva la interculturalidad, nuestra formación permanente
es la alternativa real para dar un nuevo sentido a la práctica docen-
te, pues nos da la oportunidad de conocer nuevas posturas, nuevas
tendencias teóricas en torno a la educación. Hoy más que nunca,
es necesario reconstruir una y otra vez la práctica educativa que
desarrollamos, con nuevos matices más cercanos a las necesidades
de nuestros alumnos, más propicios para fortalecer su potencial,
41
saberes desde las comunidades de aprendizaje, en donde de forma
holística y circular aprendemos todos de todos, y los conocimientos
no valdrán más o menos según quien lo dijo, o que tantas páginas
escribió de un concepto; más bien, se podrán construir aprendiza-
jes desde los saberes ancestrales, saberes culturales y regionales;
desde lo expresado por todos los actores y agentes involucrados.
Así, la escuela estará cumpliendo la tarea de formar agentes
de cambio desde su participación social, estará ofreciendo la po-
sibilidad de fortalecer sus diferentes ámbitos a partir de una ac-
ción reflexionada, de un proceso de intercambio en el que todos
recibimos de todos y la participación de cada uno es igual de tras-
cendente. Ello implica dos cosas: el reconocimiento del “Otro” y
la importancia de su participación; y la consolidación de la vida
democrática en la escuela que garantice su réplica en la sociedad.
Y este es el único camino para la transformación de la sociedad.
La educación intercultural es, por tanto, un medio importante
para el logro del ambiente democrático que tanto está necesitando
la realidad en todos sentidos; y no podemos dejar de observar su
importancia y trascendencia.
Bibliografía
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FREIRE, P. (1996). La pedagogía de la Autonomía. México: Siglo XXI,.
43
trabajo docente
RESUMEN: Este trabajo trata sobre la estrategia que lleva a cabo
el Instituto Estatal de Evaluación e Innovación Educativa (INEVAL)
en Chiapas, denominada Experiencias Educativas Exitosas (EEE), la
cual fue creada con el fin de reconocer el trabajo que realizan los
docentes a través de un ejercicio académico que consiste en la sis-
tematización y escritura de la experiencia significativa relacionada
con los objetivos curriculares. En este sentido, se entiende al curri-
culum en su más amplio sentido, como todo aquello que los agen-
tes de la escuela y de la comunidad ponen en juego en la formación
de los niños y niñas que se encuentran bajo su responsabilidad.
PALABRAS clave: curriculum, experiencias educativas exitosas, in-
novación del trabajo docente.
ABSTRACT: This paper deals with the strategy carried out by the
State Institute for Educational Evaluation and Innovation (INEVAL)
in Chiapas, called Experiencias Educativas Exitosas (EEE), which was
created in order to recognize the work done by teachers through an
academic exercise that consists in the systematization and writing
of the significant experience related to the curricular objectives. In
this sense, the curriculum is understood in its broadest sense, as
everything that the agents of the school and the community put
into play in the formation of the children who are under their re-
sponsibility.
KEYWORDS: curriculum, successful educational experiences,
teacher work innovation.
45
académico que consiste en la sistematización y escritura de la ex-
periencia significativa relacionada con los objetivos curriculares. En
este sentido, se entiende al curriculum en su más amplio sentido,
como todo aquello que los agentes de la escuela y de la comunidad
ponen en juego en la formación de los niños y niñas que se encuen-
tran bajo su responsabilidad.
Antecedentes
En Chiapas, los índices de logro educativo se sitúan por de-
bajo de la media nacional, así lo muestran las cifras más recien-
tes publicadas por el INEE (2016). Los estudiantes chiapanecos se
encuentran en el nivel de logro educativo catalogado como insufi-
ciente en estos rubros evaluados en las pruebas de EXCALE 20121.
Si se revisan los resultados de PISA2 del año 2012, el porcentaje de
estudiantes de 15 años con bajo rendimiento en la competencia
de matemáticas es de 74.4%, 19.7 puntos porcentuales más que la
media nacional, situada en 54.7%.
La situación se agrava por tratarse de un contexto poco favo-
rable caracterizado por uno de los más bajos índices de desarrollo
humano (IDH) del país, según datos del Informe sobre Desarrollo
Humano en México 2016: “Se requiere equilibrar el desarrollo de
las entidades federativas del país. En los datos presentados en este
informe, se observa que las oportunidades en entidades federativas
como Oaxaca, Chiapas y Guerrero han sido menores que las del
resto del país (PNUD, 2016, p. 16).
En este contexto, cobra relevancia, el estudio realizado, pues
lo que muestran las EEE es que, pese a las condiciones adversas, los
profesores participantes dan cuenta del trabajo que realizan y de la
importancia que éste tiene para sus estudiantes, así como de una
preocupación real y sentido innovador que les demanda el contexto.
1
Examen de Calidad y Logro Educativo (EXCALE). Los datos de 2013, 2014 y 2015 no apare-
cen reportados en el informe del INEE (2016).
2
Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) de la OCDE.
Objetivo
Se pretende el acercamiento al proceso de convocatoria y par-
ticipación en el evento organizado por el INEVAL que se denomina
Experiencias Educativas Exitosas (EEE), con la finalidad de conocer
desde la voz de los actores –profesores participantes y dictamina-
dores de las experiencias– cómo han vivido y significado su parti-
cipación en dicho proceso.
47
tación directa.
Resultados
El acercamiento a los sujetos de la investigación, dictamina-
dores y profesores participantes en las convocatorias de EEE nos
deja ver que existen rasgos importantes de innovación curricular
enfocada al cambio; los cuales se presentan a continuación:
La innovación y las necesidades del contexto
De acuerdo con lo expresado por los profesores, se percibe
una sensibilidad especial por el contexto donde se trabaja, los pro-
fesores son conscientes de los problemas de rezago y precariedad
socioeconómica que rodea a las familias de los niños y niñas que
conforman su salón de clases y en concordancia con ello, promue-
ven, a través de sus innovaciones, incidir en el aprendizaje de los
alumnos, en sus vidas y en la posibilidad de vislumbrar un futuro
distinto para ellos.
Hacer conciencia del contexto desfavorable donde se desem-
peñan los profesores, sobre todo en las zonas rurales e indígenas,
los ha llevado a trabajar en el aula buscando generar aprendizajes
significativos para lo cual acercan los contenidos escolares a sus
contextos específicos; como ejemplo de ello se tiene que la ma-
yoría de las experiencias (80%) se sitúa en el campo temático re-
lacionado con las estrategias de enseñanza-aprendizaje, así como
con el uso de estrategias metodológicas en el aula y su impacto en
los resultados educativos, no obstante que las convocatorias han
considerado hasta siete campos temáticos distintos.
La innovación del trabajo docente
La participación de los profesores en las EEE muestra que su
trabajo ha sido en solitario, aspecto que ha de superarse, pues des-
de la perspectiva del cambio educativo, este no es posible sin la
participación de todos los agentes educativos. No obstante este tra-
bajo en solitario, los resultados obtenidos son importantes.
El reto de participar
Para los profesores, considerar su participación en las convo-
catorias representó un reto, sobre todo por someter a juicio de un
grupo de dictaminadores su trabajo. El reto fue superado por la
importancia que representaba para ellos dar a conocer lo realizado
y que esto sirviera de guía o ejemplo para otros profesores de la re-
gión o del estado. Dentro de sus expectativas estaba la posibilidad
de presentar su trabajo y que se difundiera ampliamente; asimismo
la posibilidad de tener retroalimentación por parte de los dictami-
nadores para poder mejorar su práctica, pues consideran toda ex-
periencia como experiencia de aprendizaje.
Conclusiones
La innovación curricular en las escuelas parece germinar des-
de la preocupación del profesor, de su compromiso y responsa-
bilidad con los niños y niñas que acceden a EEE. Esto nos lleva a
cuestionar los procedimientos y mecanismos desde los cuales se
Referencias bibliográficas
49
FULLAN, Michael (2002) “El significado del cambio educativo; un
cuarto de siglo de aprendizaje”. En Profesorado, revista de
currículum y formación del profesorado, 6 (1- 2). http://www.ugr.
es/~recfpro/Rev61.html
HARGREAVES, A., y D. Fink (2006). Estrategias de cambio y mejora
en educación caracterizadas por su relevancia, difusión y con-
tinuidad en el tiempo. En Revista de Educación, 339. Pp. 43-58.
INEE (2016). Banco de indicadores educativos. Consultado el 13 de
mayo de 2017 en: http://www.inee.edu.mx/bie_wr/mapa_indi-
ca/2014/PanoramaEducativoDeMexico/EF/Chp/2014_EF_Chp.
pdf
PNUD (2016). Informe sobre Desarrollo Humano México 2016. Desigual-
dad y Movilidad. México: Programa de las Naciones Unidad
para el Desarrollo.
51
Institucional en Buenos Aires
53
mejora llevados a cabo por el Instituto Nacional de Educación Tec-
nológica (INET) en escuelas técnicas y por el Instituto Nacional de
Formación Docente (INFD) desde 2006 y diversas experiencias juris-
diccionales referidas a procesos de apoyo y mejora a la educación
secundaria como el Programa de Fortalecimiento Institucional de
las escuelas de enseñanza media de la Ciudad de Buenos Aires que
comenzó en el año 2001 y que, a su vez, se inscribe en experien-
cias anteriores como el Proyecto XIII y los proyectos de orientación.
El porcentaje del presupuesto educativo nacional destinado a este
programa rondó en el período 2010-2015 el 1% del total y fue el
Ministerio de Educación de la Nación el encargado de gestionarlo.
Según la matrícula, cantidad de estudiantes, de cada escuela dicho
Ministerio le asigna un monto de dinero que debe destinarse a ho-
ras institucionales para el desarrollo de actividades previstas (se les
paga a docentes que trabajan fuera del horario de clases en tutorías
académicas y de orientación, clases de apoyo y espacios formati-
vos) y otro monto para los gastos operativos que dichas acciones
requieren (se pueden organizar viajes y visitas, brindar viandas y
refrigerios, adquirir materiales didácticos, herramientas, útiles, in-
sumos informáticos, material audiovisual, entre otros). Dicho dine-
ro se deposita en una cuenta bancaria a nombre de los directivos de
las escuelas, quienes son los encargados de administrarlo. A nivel
nacional se sugieren además estrategias institucionales y líneas de
acción referidas a la articulación primaria-secundaria, tutorías, es-
trategias para potenciar la enseñanza o recuperar los aprendizajes
(cuyas líneas de acción van desde las clases de apoyo hasta la pro-
moción de la lectoescritura), gestión de la convivencia, diseño de
un proyecto post-secundario y actividades extraclase, entre otras.
Las jurisdicciones también establecen prioridades y recomiendan
líneas de trabajo en sus Planes Jurisdiccionales. Y finalmente, lue-
go de la aprobación de los equipos técnicos locales, cada escuela
diseña e implementa su propio PMI ajustándolo a los lineamientos
establecidos y al financiamiento disponible (Romualdo, 2017).
Romualdo. Pensando los sentidos sobre las desigualdades escolares... pp. 51-71
La particularidad del PMI es que propone intervenir a través de
una estrategia común a todo el sistema sobre las desigualdades es-
colares a partir del reconocimiento del modo como la organización
escolar incide sobre las mismas. Nuestra preocupación por lo insti-
tucional deriva de la centralidad que adquirió la discusión sobre la
organización escolar en las denominadas “políticas de inclusión”
en materia de educación durante el período 2006-2015 en nuestro
país y de la relevancia que esta dimensión adquiere en los estudios
54
55
transformarlas.
Por último, siguiendo a Carranza (2008) consideramos que lo
que van inscribiendo las instituciones y los sujetos en el plano dis-
cursivo y en las prácticas al apropiarse de las políticas públicas ex-
presa el permanente interjuego entre lo estructural, lo institucional
y lo subjetivo. Todo aquello que los sujetos hacen o dejan de hacer
no tiene que ver sólo con la adhesión o rechazo emocional a las po-
líticas sino que también es producto de las posibilidades, intereses,
tensiones y límites estructurales, institucionales y de sus propias
significaciones.
En este trabajo nos interesa analizar los modos de apropiación
del PMI por parte de las escuelas y específicamente los sentidos
sobre las desigualdades escolares que estuvieron presentes en los
proyectos institucionales que ellas mismas diseñaron y llevaron
a la práctica. En ese sentido, sostenemos que la práctica implica
siempre una operación de conocimiento más o menos compleja
que requiere de una clasificación, el conocimiento práctico es una
operación práctica de construcción que pone en juego sistemas
de clasificación que reorganizan la percepción y la apreciación y
estructuran la práctica (Bourdieu y de Saint Martin, 1998). Las de-
cisiones de trabajo tomadas por los docentes y directivos de las
escuelas para implementar el programa PMI son moldeadas a la
vez que moldean sentidos sobre las desigualdades escolares en las
que pretenden intervenir. Asimismo, los sentidos resultantes pue-
den ser más o menos próximos a los subyacentes en el diseño del
programa. Para su análisis decidimos clasificar las actividades de-
sarrolladas durante 2015 en las escuelas analizadas en tres tipos.
Un primer tipo de actividades son aquellas que se organizan
en torno al apoyo para la aprobación de asignaturas. Aquí se clasi-
fican todas las vinculadas al apoyo escolar y a la preparación de los
estudiantes para aprobar exámenes y/o materias pendientes. Una
segunda línea focaliza en propiciar el desarrollo de disposiciones
a la participación y la mejora de las capacidades expresivas de los
Romualdo. Pensando los sentidos sobre las desigualdades escolares... pp. 51-71
estudiantes e involucra proyectos que proponen la realización de
actividades extracurriculares, varias de tipo lúdico-recreativo, con
el objetivo de fortalecer su vínculo con la escuela y su desarrollo
personal. Por último, consideramos que hay una tercera línea en la
que los recursos del PMI se utilizaron para sostener o reforzar acti-
vidades escolares para las que las escuelas no contaban con recur-
sos y cuyos objetivos inmediatos no necesariamente se vinculan
directamente con lo que la normativa de PMI establece.
56
57
dades escolares que consideran a la escuela como su productora
en dos variantes. En una primera variante tenemos a los docentes
que piensan que la forma que adopta la gramática de la escolaridad
provoca el fracaso escolar de muchos estudiantes y en la segunda
están aquellos que encuentran las causas de las desigualdades es-
colares en el ausentismo y/o la falta de compromiso individual de
los compañeros docentes.
En la primera variante los sentidos sobre las desigualdades es-
colares consideran que éstas no son producto de las capacidades
o cualidades individuales de los estudiantes sino más bien de las
condiciones institucionales. En ese sentido, se realiza una crítica a
la gramática de la escolaridad por no contemplar la diversidad de
trayectorias escolares posibles y a las mesas de exámenes como
instancia de evaluación en sí. Las clases enmarcadas en esta línea
de PMI surgieron principalmente a causa de la gran cantidad de
estudiantes que fracasaban o directamente no se presentaban a las
mesas de exámenes tradicionales debido a las dificultades que és-
tas conllevan, como lo explica una de las docentes:
“—¿Cuáles creés que son las motivaciones por las que
ellos [los estudiantes] están hoy acá [en PMI]?
—Y… porque no se presentan a las mesas de pre-
vias2, entonces lo ven como que les resulta más sencillo.
—¿Por qué?
—Porque uno le da como clases particulares y sobre todo en las
materias previas porque sino cuando caen a rendir previas tienen
por ahí a un profesor que ni conocen, el profesor mira los conte-
nidos que tiene que tomar y toma el examen y no tienen idea de
nada. En cambio acá vos les das bien los contenidos, entonces
2
En Buenos Aires se denomina “previas” a las materias o asignaturas pendientes de años
anteriores. En el período de estudio analizado, según el régimen académico de la Provincia
de Buenos Aires, los estudiantes del nivel secundario podían pasar de un año a otro dejando
hasta tres materias previas pendientes en total. Una de ellas debía ser aprobada al inicio del
año escolar inmediatamente posterior, en una mesa examinadora especial, y las otras dos
podían rendirse durante el transcurso de su escolaridad secundaria.
Romualdo. Pensando los sentidos sobre las desigualdades escolares... pp. 51-71
ya se sienten seguros, saben que les vas a tomar lo que les diste.”
Docente PMI Matemática escuela 2
59
‘¡Uy! Pero Juan Pirincho no viene más a la escuela. Entonces, ¿quién
te puede tomar en este momento? No hay nadie, que sé yo, date una
vuelta mañana porque quizás viene Juan Pirincho Dos así te da los
temas’. Y el chico viene a ver a Juan Pirincho Dos y otra vez no vino
el profesor y el pibe dice ‘Pero yo tengo que rendir la materia’, y yo
digo ‘Bueno, mirá, yo tengo acá un modelito que dejó Juan Pirincho
Tres…’. El pibe se pudre de dar vueltas, pero no porque sea culpa
nuestra, sino que el sistema lo deja en la maraña y el pibe termina
no viniendo, eso es lo que ocurre en muchos casos.”
Vicedirector escuela 2
“Yo creo que uno [de los problemas que intenta resolver PMI] es la in-
serción de los chicos, o sea esto de que de repente tengan una apoya-
tura en esas materias que ellos no han aprobado, porque una cosa es
decirles ‘chicos vengan a rendir’, en forma oral uno insiste, insiste; y
otra cosa es acompañarlos a que ellos vayan a rendir […] El profesor
que le va a tomar lo prepara, entonces ellos como ya conocen quién les
va a tomar, y saben más o menos qué se les va a pedir, y de acuerdo a
esos tres encuentros ellos, no es que uno los manda a estudiar afuera
sino que se estudia lo que se va explicando en clase, entonces eso a
ellos les da el impulso necesario para poder terminar su secundario.”
Docente PMI Lengua escuela 2
Romualdo. Pensando los sentidos sobre las desigualdades escolares... pp. 51-71
Por otro lado, en la segunda variante de los sentidos sobre las
desigualdades escolares que consideran a la escuela como su pro-
ductora encontramos muchos docentes y directivos criticando el
alto ausentismo docente y la consiguiente alta rotación de suplen-
tes, además de la falta de claridad de los contenidos que deben ser
evaluados en las mesas de exámenes, los cuales al no estar debida-
mente explicitados institucionalmente provocan confusiones:
60
61
Por último, tal como su nombre lo indica, el hecho de que las
estrategias agrupadas en esta clasificación sean “ad hoc” hace que
no apunten a modificaciones estructurales de la gramática de la
escolaridad ni del puesto de trabajo docente. Un ejemplo de esto es
que los estudiantes que participaron de las propuestas de PMI en
esta línea3 y aprobaron (que según los docentes fueron la mayoría)
prescindieron del pasaje por las mesas examinadoras sin que éstas
dejaran de existir y desde el punto de vista administrativo y legal
se equipararon ambas formas de acreditar asignaturas porque las
calificaciones se registraban todas en las actas correspondientes a
la instancia tradicional. De todos modos, esto no impide que estas
experiencias resulten en ensayos muy útiles para el diseño de re-
formas educativas a largo plazo.
Consideramos que las estrategias de PMI como espacio ad hoc
para la acreditación en realidad apuntan a responder a una de las
expresiones que materializa las desigualdades escolares, como es
el fracaso o la no presentación de los estudiantes a las mesas de
exámenes de asignaturas previas, sin modificar sus causas. Así, se
les brinda apoyo y seguimiento a algunos estudiantes previamente
a ser evaluados y son los docentes a cargo de esos procesos los que
luego los evalúan sin afectar esto a la totalidad de los jóvenes y sin
apuntar a la modificación de las prácticas pedagógicas docentes o
a disminuir su ausentismo en general, ambos elementos recono-
cidos por los entrevistados como causales del problema. Por otra
parte, tampoco se realiza un cuestionamiento a los motivos por
los que desaprueban los estudiantes ni se revisan los procesos de
enseñanza-aprendizaje ni las formas de evaluación.
Nos parece interesante ver cómo el director de la escuela 2
identifica claramente que la organización escolar y ciertas prácticas
docentes son causales del fracaso escolar de muchos estudiantes y,
por tanto, reproductoras de desigualdades escolares, sin embargo
3
En la escuela 4 no existió la posibilidad de acreditar materias en las clases enmarcadas en
PMI (si bien esa era la intención a largo plazo).
Romualdo. Pensando los sentidos sobre las desigualdades escolares... pp. 51-71
él mismo reconoce que aunque programas como PMI lo habiliten
a llevar adelante estrategias que rompan con las lógicas injustas de
la escuela tradicional, las soluciones “verdaderas” llevarían mucho
tiempo y no dependen solamente de su labor:
“El profesor que me manda 30 chicos a examen en matemática no lo
voy a poner a dar Plan Mejora, si es lo mismo, ¿no? […] uno desde lo
administrativo realiza una serie de estrategias para que no se vuelva a
62
63
colar. En palabras de los directivos:
“Ya este año empezamos a trabajarlo desde otro lado, buscando el
Plan de Mejora más desde las actividades para que los chicos estuvie-
ran más en la escuela, que se apropiaran de los espacios de la escuela,
por eso pusimos artes marciales, por eso pusimos manualidades, jun-
to con el CAJ,5 entonces venían los chicos a hacer estas actividades.”
Director escuela 4
Romualdo. Pensando los sentidos sobre las desigualdades escolares... pp. 51-71
“—¿Los chicos que vienen a Plan de Mejora después
se quedan a CAJ o no necesariamente?
—Sí, la mayoría se da una vueltita, mira si le gusta, sí, se comparten...
Compartimos los chicos dentro de todo. Es que por ejemplo los chicos
[de CAJ] van a tocar la guitarra afuera [al patio] por ejemplo hoy, y el
chico que sale no sé, que está dando matemática por decir, sale, le gus-
tó y capaz que se queda, pega onda con los chicos y ya el sábado que
viene hace lo mismo, viene y se queda con ellos.”
64
65
estaba abierta, que era para ellos. Pero no cuando ellos quisieran
sino cuando la escuela tuviera los espacios para ellos. Algunos lo
fueron aceptando, otros no. Empezaron a participar. Se les ofreció
participar tanto a los que estaban adentro como afuera la posibili-
dad de cuarto año que ya estaba aprobado. Algunos aceptaron, los
tenemos de alumnos. En realidad fueron tres, hay uno solo que con-
tinua en el quinto, los otros dos están trabajando. Bueno eso fue
cambiando, modificando algunas de las actitudes que tenían ellos.”
Director escuela 4
Romualdo. Pensando los sentidos sobre las desigualdades escolares... pp. 51-71
escuela como institución y el contexto social a la producción de las
desigualdades escolares. Así lo vemos en los relatos de la directora
acerca de la reticencia de los estudiantes a participar y de sus difi-
cultades para reflexionar y hablar:
“Ellos [los estudiantes] tienen que aprender a participar, cuesta, son
bastante reticentes a participar. Ellos quieren que les den todo y bueno,
entonces digamos que nos cuesta mucho, cada año más, que ellos par-
66
67
Director escuela 4
Romualdo. Pensando los sentidos sobre las desigualdades escolares... pp. 51-71
otros espacios para que el profesor-tutor pueda estar en la biblio-
teca o en lo que sea, entonces necesita un espacio aparte para ha-
blar con los pibes. La cuestión son los tiempos en que se concretan
las cosas, en el aula vos no podes dedicarte”
Directora escuela 1
Reflexiones finales
Pensando los modos de apropiación del PMI por parte de las
escuelas analizadas podemos decir que si bien las estrategias de-
sarrolladas reconocen los límites de la gramática de la escolaridad
para garantizar la escolarización de todos los jóvenes, sólo desplie-
gan mecanismos ad hoc que denuncian dichas limitaciones sin mo-
dificar sus causas.
En la línea de PMI como espacio ad hoc para la acreditación,
entre los sentidos sobre las desigualdades escolares que orienta-
ron las prácticas de los docentes encontramos, en primer lugar,
una mirada economicista que valora positivamente la existencia
de estas clases de apoyo por la posibilidad de acompañamiento
gratuito que brindan a sus estudiantes, y, en segundo lugar, encon-
10
Hace referencia a otra escuela secundaria del barrio que tiene más recursos por su mayor
tamaño y por no estar, como la escuela 1, conformada por lo que anteriormente fueron otras
dos escuelas.
69
asignaturas previas, sin modificar sus posibles causas: el mecanis-
mo de evaluación en sí, las prácticas pedagógicas docentes y/o su
ausentismo, los procesos de enseñanza-aprendizaje.
Respecto a las concepciones sobre las desigualdades escola-
res que subyacen a las estrategias de PMI como ámbito de expre-
sión, participación y pertenencia institucional, consideramos que
si bien en todas ellas hay un registro del origen social de las des-
igualdades escolares, buscan trabajar sobre los sujetos educandos
y no sobre el trabajo escolar ni la organización escolar. Incluso en
algunos casos encontramos una preocupación tan enfocada al im-
pacto en lo individual que obtura la posibilidad de ver lo que aporta
la escuela como institución y el contexto social a la producción de
las desigualdades escolares produciéndose una psicologización de
las relaciones sociales que singulariza a los estudiantes y convierte
mecanismos como la escucha de los docentes en un método de
control o pacificación social.
Por último, las estrategias que agrupamos bajo el nombre de
PMI como recurso complementario no se preocupan particular-
mente por las desigualdades escolares entre los estudiantes sino
que funcionan más como una solución temporal a determinadas
necesidades de las escuelas que no implica ningún tipo de modi-
ficación en la organización escolar ni en el puesto de trabajo do-
cente o el trabajo escolar. Sin embargo, el uso que se les da a los
recursos en las estrategias enmarcadas en esta línea da cuenta de
la fragmentación educativa como expresión de las desigualdades
escolares.
A modo de cierre, nos interesaría dejar abiertos algunos inte-
rrogantes sobre las condiciones de implementación que requeri-
rían los programas y las políticas educativas para evitar contribuir,
si es que eso fuera posible, a la reproducción de las desigualdades
escolares en contextos de fragmentación educativa. En primer lu-
gar nos preguntamos qué capacidad de intervención pueden tener
las políticas educativas si no son parte de un conjunto de políticas
Romualdo. Pensando los sentidos sobre las desigualdades escolares... pp. 51-71
integrales y/o van acompañadas por cambios en las estructuras ob-
jetivas que permitan una distribución más justa de los bienes ma-
teriales y simbólicos. Y en segundo lugar, resulta pertinente ade-
más indagar cuáles serían las condiciones necesarias para poner
en marcha transformaciones sociales que incidan efectivamente
en las prácticas cotidianas de los sujetos que hacen las políticas
educativas –dentro y fuera de las escuelas– que (re)producen des-
igualdades.
70
71
LEY Nacional N° 26.206/2006.
MINISTERIO de Educación de la Nación (2011). Diseño e implementa-
ción del Plan de Mejora Institucional. Serie de documentos de
apoyo para la escuela secundaria. Documento Nº1.
RESOLUCIÓN CFE Nº 79/09.
RESOLUCIÓN CFE Nº 88/09.
RESOLUCIÓN CFE Nº 123/10.
RESOLUCIÓN DGCyE Nº 2273/04.
RESOLUCIÓN Ministerial Nº 514/12 del Ministerio de Educación de
la Nación.
ROCKWELL, E. y Ezpeleta, J. (1987). La escuela: relato de un proceso
de construcción inconcluso. En F. Madeira y G. Namo de Mello
(Coords.), Educação na América Latina, Os modelos teóricos e
realidade social, Sao Paulo: Cortez Editora-Editora Autores Aso-
ciados.
ROMUALDO, V. (2017) Políticas educativas y desigualdades escolares:
El caso del programa Plan de Mejora Institucional (PMI) en el
conurbano bonaerense. [Tesis] Maestría en Política y Gestión de
la Educación, Universidad Nacional de Luján.
Romualdo. Pensando los sentidos sobre las desigualdades escolares... pp. 51-71
César Darío Fonseca Bautista
Rosana Santiago García
Luz Marina Ibarra Uribe
La transversalidad en la educación
media superior. El trabajo colaborativo docente
73
como recurso
RESUMEN: El propósito de este artículo es mostrar el significado
que tiene para la Secretaría de Educación Pública la transversalidad
en el denominado Modelo Educativo para la Educación Obligato-
ria, particularmente respecto a la Educación Media Superior (EMS);
además de resaltar las ventajas y dificultades del trabajo colaborati-
vo como estrategia viable para desarrollar contenidos disciplinares
de diversas asignaturas y aquellos temas transversales impulsados
y promovidos por la Subsecretaría de Educación Media Superior.
Se empleó una metodología de corte descriptivo-hermenéutico
documental. Se revisó el documento del Modelo Educativo, para
identificar la forma cómo se emplea el concepto de transversali-
dad. Igualmente se hizo una revisión de documentos instituciona-
les relacionados con el tema y elementos conceptuales referentes
al trabajo colaborativo docente en la EMS.
PALABRAS clave: Educación Media Superior, Temas transversales y
Trabajo Colaborativo
75
un trabajo colegiado que atienda a la transversalidad en el trato de
temas emergentes para la EMS, lo cual pueda resultar una estrategia
didáctica interesante y sobre todo formativa.
Con base en lo anterior, el propósito de este artículo es iden-
tificar y resaltar cómo la Secretaría de Educación Pública (SEP)
concibió e incorporó la transversalidad en el denominado Modelo
Educativo para la Educación Obligatoria (MEEO), particularmente
para el tipo medio superior3, además de destacar las características
del TC como estrategia para trabajar los contenidos disciplinares
entre diferentes asignaturas y aquellos temas transversales impul-
sados por la Subsecretaría de Educación Media Superior (SEMS),
tales como la prevención de adicciones, la equidad de género, la
violencia, la formación ciudadana y más recientemente, las habili-
dades socioemocionales.
La metodología empleada es de corte descriptivo-herme-
1
El título del proyecto es “Diagnóstico del desempeño docente al interior de sus acade-
mias en un bachillerato tecnológico y su tránsito hacia el trabajo colegiado como estrategia
educativa”, cuyo propósito es identificar la manera cómo los docentes asumen y perciben
su participación en las academias locales del plantel, su disposición y/o resistencia hacia el
Trabajo Colegiado y a través de una intervención desde la perspectiva investigación-acción,
sensibilizarlos para su transición al trabajo colaborativo de acuerdo con los lineamientos
establecidos por la Subsecretaría de Educación Media Superior.
2
Para el caso particular de la EMS, la autoridad educativa federal prescribe que el TC entre
los docentes es una filosofía de trabajo en la que se comparten objetivos y metas comunes;
la premisa fundamental es el consenso construido a partir de la cooperación. Si bien en
todo el ámbito académico resulta importante el TC, es en la EMS donde, como estrategia de
participación y mejora continua, se vuelve de vital importancia pues es una forma eficaz de
responder a los desafíos que traen consigo las nuevas generaciones de jóvenes que cursan el
bachillerato, y que cuentan cada vez con más habilidades, destrezas y talentos, pero también
necesidades muy diversas y cada vez más marcadas, como lo es el acompañamiento que
requieren para concretar con éxitos su proyecto educativo. SEP-SEMS, Desarrollo de mecanis-
mos para el trabajo colaborativo, SEP, México, 2015, http://www.sems.gob.mx/work/models/
sems/Resource/12183/1/images/desarrollo_mecanismos_tc.pdf, consultado en junio de 2017.
3
Asumimos que es discutible hablar desde la denominación del Nuevo Modelo Educativo,
igualmente de su coherencia, consistencia y sobre todo su viabilidad de aplicación, sin em-
bargo por falta de espacio y por no ser este el lugar para argumentar dichos cuestionamien-
tos, aceptamos sin conceder y lo reconocemos así. Se recomienda revisar –entre otros do-
cumentos– la editorial del No. 157 de la Revista Perfiles Educativos titulado: Dos comentarios
sobre el Nuevo Modelo Educativo: consistencia y viabilidad, escrita por Alejandro Márquez.
77
Fuente: Información obtenida del Modelo Educativo para la Educación Obligatoria
79
uso de las tecnologías de la información y la comunicación. Esta
es una veta que nos interesa destacar pues creemos que a través
de la transversalidad se puede promover el TC como una estrategia
importante y de efectos múltiples para darle sentido y significado
a temas emergentes que son considerados prioridades de interés
institucional para trabajarlos con los estudiantes, con la intención
final de lograr su permanencia en la escuela y aumentar las posibi-
lidades de que concluyan su formación con los mejores resultados
posibles para enfrentar la vida, continuar estudios de tipo superior
o integrarse al mercado laboral.
La estrategia del gobierno federal respecto al MEEO, es sociali-
zarlo, desarrollarlo de manera gradual, participativa y con la flexi-
bilidad necesaria que demanda la diversidad cultural y social que
caracteriza a nuestro país. Para la autoridad la meta es que todas las
niñas, niños y jóvenes reciban una educación integral de calidad
con equidad, donde se pongan los aprendizajes y la formación de
los sujetos en el centro de todos los esfuerzos educativos y que los
prepare para vivir plenamente en la sociedad del siglo XXI (SEP,
2017).
81
de valores y normas, por ejemplo, el cambio climático, la exclusión
social, la discriminación, la sobreexplotación de los recursos na-
turales, la equidad de género y la puesta en riesgo de la sustenta-
bilidad del planeta. Su denominación de transversal, hace alusión
a su presentación, presencia y desarrollo en que se abordarán sus
contenidos en el proceso formativo de los jóvenes en todos los es-
pacios curriculares de un determinado nivel educativo.
En el marco de una educación por competencias, los contenidos
transversales van más allá de la simple apropiación de conceptuali-
zaciones o contenidos informativos, el propósito es que además de la
conceptualización de sus temáticas, el estudiante adquiera y desarro-
lle actitudes, habilidades procedimentales y socioemocionales.
Definitivamente, la implementación de la transversalidad
como estrategia educativa altera la conceptualización y la cultura
de la práctica docente, razón por la cual se hace indispensable una
adecuada y anticipada sensibilización, apertura y formación de los
docentes para modificar sus esquemas de trabajo y que dicha aper-
tura les permita fundamentalmente estar atentos a los principales
problemas sociales actuales, adquirir la habilidad para tender un
puente entre el mundo de la escuela y su entorno, e identificar los
valores a promover entre su comunidad escolar.
De acuerdo con Busquets y otros (1995), los temas transversa-
les están encaminados a paliar algunos de los efectos perversos de
los que la sociedad actual ha tomado conciencia y que, junto con
otros de gran validez, hemos heredado de la cultura tradicional.
Su incorporación no significa desplazar las materias curriculares,
ni tampoco asumirlos como nuevos contenidos, ya que de hacerlo
así únicamente cumplirán la función de sobrecargar los programas
y hacer más difícil la tarea del profesorado, sin que ello reporte
ningún beneficio al alumnado. Si se consideran los temas transver-
sales como el hilo conductor de los trabajos del aula, se haría girar
en torno a ellos las materias curriculares y de esta manera permiti-
rían desarrollar una serie de actividades que, a su vez, conducen a
83
tellanos, citado por Tejeda:
La transversalidad es un enfoque pedagógico dirigido a la integra-
ción, en los procesos de diseño, desarrollo y evaluación curricular,
de determinados aprendizajes para la vida, de carácter interdiscipli-
nario, globalizador y contextualizado, que resultan relevantes con
vistas a preparar a las personas para participar protagónicamente
en los procesos de desarrollo sostenible y en la construcción de una
cultura de paz y democracia, mejorando la calidad de vida social e
individual (Tejeda, 2016, p. 204).
Por otra parte, para Yus (2013, p. 21) los temas transversales
han reavivado en el ámbito educativo un viejo debate –no agotado-
sobre el papel de los contenidos disciplinares y la relevancia que
para el individuo y la sociedad suponen otras áreas temáticas. Es la
tensión entre globalización o interdisciplinariedad y la visión com-
partimentada de la cultura a través de las disciplinas.
La potencialidad de los tremas transversales de recuperar el debate
sobre qué contenido es realmente relevante para un ciudadano en
una sociedad democrática, justa y solidaria como la que se preco-
niza desde las grandes declaraciones como la Carta de los Derechos
Humanos […] Como lo señala Carbonell (1994) […] los temas trans-
versales pueden significar una reestructuración y fortalecimiento de
todos los contenidos y no sólo de los hábitos, valores y actitudes,
sino también los procedimientos y contenidos informativos y con-
ceptuales (Yus, 2013, p. 21).
85
ción teórica del aprendizaje colaborativo descansa en cuatro pers-
pectivas teóricas: la de Vygotsky, la de la ciencia cognitiva, la teoría
social del aprendizaje y la de Piaget.
Para Johnson y Johnson (1999) -agrega el referido documento-
la más influyente teorización sobre el aprendizaje cooperativo se
centró en la interdependencia social. Esta teoría postula que la for-
ma en que esta se estructura establece la manera en que los indi-
viduos interactúan, lo cual, a su vez, determina los resultados. Una
interdependencia positiva, basada en la cooperación, trae como re-
sultado la interacción promotora, en la que las personas estimulan
y facilitan los esfuerzos del otro por aprender. En oposición, una
interdependencia negativa, basada en la competencia, suele gene-
rar oposición, desaliento en los sujetos, y canalización de la ener-
gía en la obstrucción de los esfuerzos que aportan los demás. La
interacción promotora aumenta esfuerzos por el logro, relaciones
interpersonales positivas y una salud psicológica. La interacción de
oposición y la no interacción, llevan a una disminución de los es-
fuerzos para alcanzar el logro, relaciones interpersonales negativas
y desajustes psicológicos.
De acuerdo con Zañartu (2013) aprender es por naturaleza un
fenómeno social, la adquisición del conocimiento es el resultado
de la interacción de sujetos que dialogan. Aprender es un proceso
dialéctico y dialógico en el que un individuo contrasta su punto de
vista personal con el otro hasta llegar a un acuerdo. Ante la pre-
gunta por qué resurge con tal fuerza el trabajo colaborativo, Za-
ñartu (2013) ofrece tres respuestas: La primera tiene que ver con la
revolución tecnológica lo cual implica un entorno de aprendizaje
digital de carácter global, representado en la red de redes, donde
la supresión de obstáculos o barreras, amplía las posibilidades de
colaboración entre los sujetos. Estamos hablando de un entorno
electrónico de aprendizaje, que antes no existía y que pone en red
simultáneamente a millones de personas, sin considerar distancias,
ni importar su lugar de residencia. En segundo término, los medios
electrónicos se caracterizan por ofrecer a sus usuarios interactivi-
87
el concepto y la figura de las “Reuniones de Academia” es concebi-
da formalmente como un órgano colegiado, el cual opera en cuatro
distintos niveles: local, estatal, regional y nacional. El rasgo que
caracteriza a dichas reuniones por lo menos en los planteles, es su
conformación a partir de la integración de docentes que imparten
una misma asignatura o por campo disciplinar.
De acuerdo con los documentos operativos de los diversos
subsistemas de EMS, hasta antes de la puesta en marcha de la
RIEMS (2008), la Academia aparecía como el órgano colegiado con
capacidades y facultades para desarrollar un amplio abanico de es-
trategias orientadas a la mejora del proceso educativo. No obstante
que en dichos documentos y manuales se hace referencia al TC en
las academias, no existe alguna evidencia empírica (por lo menos,
no en el plantel objeto de estudio), de que dicho espacio es aprove-
chado por los profesores para este fin. Independientemente de que
la promoción de temas transversales llegó con la RIEMS, no ha sido
a través del TC como se ha promovido y desarrollado.
En planteles donde aún no se ha transitado hacia el TC –como
el objeto de estudio- las reuniones de Academia son espacios más
bien de tipo informativo, donde las áreas técnico-operativas dan
seguimiento al cumplimiento de tareas y compromisos de los do-
centes para con la administración. Han sido una instancia apro-
vechada por los profesores en algunas ocasiones, para exponer y
discutir inconformidades relacionadas con condiciones laborales
e incluso, hasta problemas de tipo personal se ventilan en dichos
espacios.6
A partir de 2008, con la implantación de la RIEMS la autori-
5
Cuatro de ellos elaborados por docentes de bachilleratos tecnológicos (dos de la Dirección
General de Educación Tecnológica Agropecuaria y dos de la Dirección General de Educación
Tecnológica Industrial, ambas ya desaparecidas), sin embargo en ninguno aparece como ob-
jeto de estudio o análisis, sino más bien se hace alusión a él de manera marginal.
6
Observación participante y no-participante durante un semestre (2-2017) en dos reunio-
nes de cada una de seis academias locales (Ciencia Tecnología Sociedad y Valores, Inglés,
Matemáticas, Ética, Lectura Expresión Oral y Escrita y Contabilidad) en el plantel objeto de
la investigación.
89
tica de los docentes y otras causas personales de los jóvenes. A
partir de ese momento, la Subsecretaría de Educación Media Supe-
rior activó programas y acciones (la RIEMS les llama mecanismos
de gestión) con el objetivo de detener el éxodo de adolescentes y
revertirlo gradualmente hasta el 9% en lo que resta del año (2018).
Se multiplicaron acciones y recursos (becas, programas de
apoyo y orientación, campañas de sensibilización, incremento de
espacios educativos y diseño e instrumentación de prácticas para
mejorar el proceso educativo). En este contexto, una de las estra-
tegias educativas que puso en marcha la autoridad educativa fe-
deral, fue el relanzamiento del programa Construye-T, mismo que
fue diseñado por la SEMS en 2008 con el respaldo del Programa
de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), el Fondo para
la Infancia de las Naciones Unidas (UNICEF) y posteriormente con
el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas para la Edu-
cación, la Ciencia y la Tecnología (UNESCO), todas ellas agencias
de la ONU. Es aquí donde nace el programa Construye T, conocido
formalmente como Apoyo a los y las jóvenes del nivel medio su-
perior para el desarrollo de su proyecto de vida y la prevención de
riesgos, como estrategia conjunta de la SEP, el PNUD, la UNESCO y
el UNICEF.
Este Programa fue creado originalmente para contribuir a re-
ducir el abandono escolar en la EMS mediante la realización de
actividades encaminadas a apoyar a las y los jóvenes para desarro-
llar su proyecto de vida y evitar caer en situaciones de riesgo tales
como violencia, adicciones o embarazo temprano. Hasta 2013, se
basó en la realización de actividades en seis dimensiones de traba-
jo que estaban relacionadas con el abandono escolar: conocimien-
to de sí mismo; vida saludable; escuela y familia; cultura de paz y
no violencia; participación juvenil, y construcción de proyecto de
vida. Algunas de estas dimensiones cambiaron de nombre durante
la primera etapa pero básicamente abarcaban las mismas temáti-
cas.
7
Por lo menos para los planteles federales y descentralizados del gobierno federal. Los ba-
chilleratos universitarios, no son operados por la autoridad federal por el estatus jurídico de
las universidades autónomas, sean estas nacionales, federales o estatales.
91
La incorporación de las HSE al Marco Curricular Común se
hace utilizando la taxonomía de las HSE del programa Construye T.
• Las 6 HSE de primer nivel de Construye T (que a su vez agrupan
a 18 HSE de segundo nivel), serán secuenciadas a través de los
seis semestres de la EMS, de tal forma que en cada uno de los
semestres de EMS se dé prioridad a una de estas HSE.
• Las HSE serán incorporadas al currículo con un enfoque mixto:
se enseñan de manera específica y con actividades encaminadas
a conocerlas, y practicarlas, (es decir no como parte del conteni-
do de las demás materias del Marco Curricular Común).
• Las enseñan todos los maestros incorporando a su programa de
trabajo una sesión semanal dedicada al desarrollo de HSE.
• Se hará una programación para secuenciar las 6 habilidades
socioemocionales de primer nivel y sus respectivas HSE de se-
gundo nivel, que permita a cada docente tener el programa de
actividades Construye T que incorporará a sus clases.
• Todos los docentes imparten, una vez a la semana, una lección
para desarrollar en los alumnos HSE.
• Durante el semestre cada docente impartirá 12 lecciones, en se-
siones de 20 minutos y como parte de su curso.
• Cada maestro contará, al principio del semestre, con el “paque-
te” de actividades Construye T que le corresponderá impartir a
su grupo.
• Hay una habilidad principal a desarrollar en cada uno de los
semestres, por tanto todos los maestros que imparten clases a
los alumnos que cursan el mismo semestre imparten lecciones
relacionadas con dicha habilidad. Sin embargo cada maestro
realiza actividades de aprendizaje diferentes a las de los demás
maestros del mismo semestre para que los alumnos desarrollen
la misma habilidad emocional, pero con distintas actividades de
aprendizaje con cada uno de sus maestros.
93
Conclusiones
El modelo educativo actual (2017) ha causado polémica en-
tre especialistas de la educación, analistas políticos, educadores y
público en general; mucha de la discusión gira en torno a si en
realidad es “nuevo” el Modelo como se pregona. Si bien buena par-
te de su planteamiento no lo es, en el caso del presente artículo
intentamos rescatar una de sus propuestas, la cual a la luz de la ex-
periencia en otros contextos consideramos altamente valiosa para
lograr el objetivo del modelo que es, brindar a los estudiantes una
educación integral. Nos referimos al empleo de la transversalidad
en el tratamiento de problemas sociales contemporáneos, de algu-
nos temas disciplinarios y del Desarrollo de las Habilidades Socioe-
mocionales, lo que sería factible si además se logra transitar del
trabajo individual o en equipo al TC, como expresión del Trabajo
Colegiado.
Considerando la diversidad de ambigüedades y dudas existen-
tes en el Enfoque Basado en Competencias, trabajar de manera co-
laborativa podría ayudar a clarificar y retroalimentar, por ejemplo,
en la elaboración de las secuencias didácticas, definir el tipo de
competencias para los contenidos temáticos programáticos, preci-
sar qué formas y estrategias de evaluación serían las más adecua-
das, con qué dinámicas de trabajo, con qué materiales didácticos
y por supuesto, tener una mayor incidencia en el manejo de los
temas transversales.
Los contextos escolares son entornos en los que participan va-
rios actores sociales, autoridades, padres de familia, estudiantes y
docentes, no obstante, solo los docentes son actores permanentes
dentro de este contexto, los otros tres van y vienen en función del
tiempo, de sus intereses y expectativas. En cambio los docentes per-
manecen, es con base en ello, que apuntamos la necesidad de que
al interior de este grupo de actores fundamentales en el proceso
educativo, se logren afianzar lazos de confianza y solidaridad que
permitan de manera más sencilla conseguir los logros educativos.
95
organizar de forma cooperativa el aprendizaje en el aula. [Docu-
mento de Trabajo]. Laboratorio de psicopedagogía, Univer-
sidad de Zaragoza, España. http://www.xtec.cat/~ilopez15/
materials/ambitpedagogic/treballcooperatiu/elaprendizajecoo-
perativo.pdf, consultado en diciembre de 2017.
SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA (2017). Modelo Educativo para
la Educación Obligatoria, México: SEP.
SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA (2018). Programa Construye-
T. https://www.gob.mx/sep/acciones-y-programas/programa-
construye-t-4598, consultado en marzo de 2018.
SECRETARÍA DE GOBERNACIÓN (2013). Decreto por el que se reforman
los artículos Constitucionales 3º y 73, DOF, martes 26 de febre-
ro, 2013, http://www.inee.edu.mx/index.php/proyectos/517-re-
forma-educativa/marco-normativo/1602-decreto-de-reforma-al-
articulo-3-de-la-constitucion, consultado en junio de 2017.
TEJEDA DÍAZ, R. (2016). Las competencias transversales en la for-
mación de profesionales, Revista Didasc@lia: Didáctica y Edu-
cación. (7) 6.
YUS, R. (2013). Temas transversales: hacia una nueva escuela. Editorial
Grao,
BARCELONA.
ZAÑARTU, L. (2013). Aprendizaje colaborativo: una nueva forma de diá-
logo interpersonal y en red. http://www.colombiaaprende.edu.
co/html/docentes/1596/articles-346050_recurso_5.pdf, consul-
tado en marzo de 2018.
97
académicas: El techo de cristal en la universidad
99
buidos a las mujeres y enmarcados en mecanismos de control y
relaciones de poder establecidas a partir de la diferencia de género.
Estas sendas cotidianas se refieren a las distancias y tiempos que re-
corren las mujeres académicas diariamente para dar cumplimiento
a las tareas propias del espacio laboral (como académicas de tiempo
completo en la universidad) y familiar (como madres de familia y
amas de casa).
De acuerdo con las cifras de la Encuesta Intercensal 2015 del
INEGI, en el estado de Chiapas, del total de mujeres, más del 21%
son trabajadoras en términos estrictos, pero más de la mitad de las
mujeres (57%) se dedican exclusivamente a las labores domésticas,
y en contraparte, del total de personas en el estado que dicen dedi-
carse sólo a las labores domésticas, el 99% son mujeres. Se puede
decir que, mucho se ha hecho por alcanzar la emancipación de las
mujeres en el espacio laboral, pero ha sido poco el trabajo logrado
en reducir el poder que se ha otorgado a lo masculino, por descen-
tralizarlo de su obligación de proveer y controlar la economía tanto
del hogar como de su espacio laboral (Lázaro, 2007).
Estos planteamientos me llevan a formular una pregunta:
¿Cuáles son las experiencias de las mujeres académicas de la Uni-
versidad Autónoma de Chiapas (UNACH), en la conciliación de sus
actividades, obligaciones y restricciones en los espacios donde se
desenvuelven cotidianamente? Esta pregunta se genera como obje-
tivo de una investigación que obedece al supuesto de que, a pesar
de que existen discursos de equidad de género que permean la vida
laboral universitaria, las mujeres académicas no cuentan con las
estructuras institucionales de apoyo que les permiten conciliar sus
espacios cotidianos (académico y familiar), limitando sus posibi-
lidades de desarrollo profesional. Ante esta situación, ellas tienen
que impulsar dispositivos de carácter individual que les demandan
mayores tiempos y esfuerzos para realizar su trabajo.
Dado que la investigación se enmarca en el campo de los Es-
tudios Regionales, y además se desarrolla en la línea de Problemas
Gómez Ch. Sendas cotidianas de mujeres académicas: El techo de cristal... pp. 97-120
Educativos Regionales, es importante iniciar con una serie de dis-
cusiones que permitan al lector comprender cómo la problemática
planteada es un problema regional.
1. La Región se construye
Regionalizar un problema, no refiere únicamente a la acción
de observar e interpretar las conductas sociales de un territorio es-
100
101
riencias, disputas y prácticas culturales que significan el espacio y
contribuyen a la construcción identitaria.
Por otro lado, Hassbert (2011) afirma que el territorio como
espacio solo puede ser concebido a través de una perspectiva in-
tegradora, privilegiando una mirada sobre la espacialidad huma-
na, con una visión integradora del territorio, capaz de evidenciar
la condensación de estas dimensiones que el espacio manifiesta.
Similar a lo que afirma Ginsburg (2010) quien habla de la planifi-
cación regional, y la necesidad de integrar todos aquellos factores,
que definen a una Región, en una unidad comprensiva, para la so-
lución de problemas regionales.
Después de la exhaustiva revisión e propuestas regionales, la
más permanente para el problema en cuestión es la de Giménez
(2007), cuando habla de sociocultural, implícita en esta la región
percibida-vivida, donde: “Nos permite acceder a su composición
cultural, ya que la percepción del espacio depende, en gran medida
de la memoria histórica de sus habitantes” (p. 138). La región so-
ciocultural se concibe como un espacio geosimbólico cargado de
afectividad y de significados. Para ejemplificar mejor la propuesta
de Giménez (2007), será expuesta brevemente la problemática del
proyecto.
Gómez Ch. Sendas cotidianas de mujeres académicas: El techo de cristal... pp. 97-120
de la época, de los intereses, de las condiciones que se presenten,
es decir, el campo de estudio del espacio vivido es tan amplio y sus
implicaciones son tantas que siempre será necesario delimitar.
En este sentido, el espacio vivido por las docentes universita-
rias se constituye a partir de las sendas que recorren en la cotidia-
nidad para conciliar las actividades propias de su trabajo profesio-
nal con las que son propias de los trabajos del cuidado del hogar;
102
103
cial, reglados y normados por una serie de estructuras de tipo so-
ciales y culturales convertidas en marcadores simbólicos que se
convierten en fronteras para definir una región. Es decir, los espa-
cios en los que las mujeres concentran sus acciones cotidianas, así
como las relaciones que establecen en ellos; las sedes se expresan
en las maneras en las que las personas usan el espacio para proveer
los escenarios de interacción (no se limita a los elementos físicos
que la delimitan sino a los modos en que se utilizan), en la investi-
gación se toman en cuenta dos espacios, la universidad y el hogar,
entendiendo que en ambos espacios, hay fuertes resistencias que
tienen como base una serie de expectativas guiadas por el género,
llegando así a la conclusión de que el espacio o las sedes pueden
estructurarse sobre la base del género:
Los espacios y los lugares, así como el sentido que tenemos de ellos
junto con otros factores asociados, como nuestros grados de movili-
dad— se estructuran recurrentemente sobre la base del género. Más
aun, se estructuran sobre la base del género en miles de maneras
diferentes, que varían de cultura a cultura y a lo largo del tiempo.
Y esta estructuración genérica de espacio y lugar’ simultáneamente
refleja las maneras como el género se construye y entiende en nues-
tras sociedades, y tiene efectos sobre ellas (Massey, 1994, p. 40).
Gómez Ch. Sendas cotidianas de mujeres académicas: El techo de cristal... pp. 97-120
Los encuentros que los individuos tienen en las trayectorias de la
vida diaria están sujetos a restricciones que derivan de la lista antes
trascrita […] los agentes no son meros cuerpos móviles sino que son
seres intencionales con objetivos o lo que él denomina «proyectos».
Los proyectos que los individuos tratan de realizar, para ser puestos
en acto, tienen que utilizar los recursos intrínsecamente limitados de
tiempo y espacio a fin de superar las restricciones a que se enfrentan
(Giddens, p. 14).
104
105
históricos y descriptivos de los espacios vividos, en función a las
mujeres trabajadoras y su vida cotidiana; demostrar la existencia
de una brecha de género en la UNACH, a partir del análisis de los
indicadores de género que devele desigualdades en diferentes esce-
narios de la universidad (académicos, administrativos, legislativos);
y analizar las disposiciones políticas que intervienen en el espacio-
tiempo de la investigación.
La discusión principal de este momento de la investigación es
en torno a la educación, que al ser un derecho humano y por tanto,
público, debe ser equitativa, incluyente, de calidad y continua (a
lo largo de la vida), debe garantizar el acceso igualitario al apren-
dizaje, y la reducción de las disparidades entre los distintos grupos
poblacionales (Treviño; Villalobos & Baeza, 2016). Esto más que ser
el objetivo del sistema educativo, es un reto que, hasta el día de hoy,
no se ha logrado superar, pues la diversidad de contextos, proble-
máticas y condiciones tan difíciles de comprender y asimilar para
las autoridades educativas, generan contantemente desafíos para
las instituciones, a la hora de diseñar estrategias para mejorar, ade-
cuar y reformar los espacios de aprendizaje.
Es aquí donde es necesario hablar de políticas para la edu-
cación, que embonan perfectamente con los estudios regionales,
pues en breve, se comprenderá cómo las políticas, al ser elaboradas
de lo global a lo local (y viceversa) comprenden una peculiaridad
regional importante. Pero antes de adentrarnos en las políticas edu-
cativas, es preciso hablar de lo político y la política, Juárez (2013)
define lo político como aquello que:
Emerge como lo indecidible, lo que queda siempre en espera de una
decisión que no tiene como referente, ni la estructura firme, pero
tampoco el vacío, sino el desenlace temporal de la correlación de
fuerzas, es decir, la emergencia de una operación política que en
dicho acto instala los referentes de identificación (p.31).
Gómez Ch. Sendas cotidianas de mujeres académicas: El techo de cristal... pp. 97-120
tenta fundar a la sociedad (Juárez, 2013). Es entonces un momen-
to simbólico fundacional productor de un acontecimiento social,
lo político se constituye en el lugar del conflicto, donde surge un
posicionamiento, y se instituye así el sujeto político, aquel que se
posiciona simbólicamente (Retamozo, 2009)
Así, mientras lo político se vincula a un momento instituyente,
la política se relaciona con la administración de lo instituido, re-
cuperando la dimensión de la pluralidad, donde puede surgir algo
106
107
venciones propias específicas que pueden estar alineadas con las
políticas nacionales. Otro elemento a considerar es la organización
de los desafíos de política educativa, que son múltiples y van de lo
general a lo particular, pues corresponden a un contexto con diná-
micas culturales, sociales, económicas y políticas propias.
Estos planteamientos me lleva a pensar en una Región Plan
pues la universidad, como se plantea en este momento de la inves-
tigación, se aprecia como un espacio que es objetivo de una acción
emprendida por un organismo educativo, es así como, hablar de
una región plan, nos lleva a ubicar estos aspectos en el espacio:
• Se define con base en un plan, que delimita un área geográfica de
acción, bien por parte de un organismo público, o bien una orga-
nización privada.
• En relación a un campo de fuerzas. Donde la influencia de un es-
pacio respecto a lo circunscrito define el área o región.
• Como un agregado homogéneo. Que es el área que comparte un
elemento común, o donde cierta característica existe de forma
uniforme. Que comparten un mismo rasgo (Ramírez, Isauro, 2008,
p. 105).
Gómez Ch. Sendas cotidianas de mujeres académicas: El techo de cristal... pp. 97-120
barreras (familiares y personales) a la hora de desenvolverse en el
ámbito académico profesional, y es que, aunque las mujeres in-
cursionemos en los espacios laborales de manera aparentemente
igualitaria, el hogar continua siendo un espacio estereotipado don-
de las tareas del hogar y la crianza de los hijos siguen siendo tareas
femeninas.
En el interés intelectual por localizar las fronteras regionales
108
109
Treviño; Villalobos & Baeza, (2016), ponen como ejemplo a
Brasil y su programa “Niñas y jóvenes mujeres en Ciencias Exactas,
Ingeniería y Computación”, que tiene el propósito de incrementar
el número de mujeres en carreras científicas y tecnológicas, pro-
moviendo el apoyo financiero a proyectos desarrollados por las es-
cuelas que persigan los propósitos de dicho programa, buscando
así despertar en las mujeres el interés por tales profesiones; otro
de sus objeticos es el fomento a la participación de las mujeres en
programas de posgrado, en particular en áreas de ingeniería, ma-
temáticas, física, química informática y otros campos de la ciencia.
El programa sin duda, manifiesta el interés por romper con
prejuicios sexistas que se proyectan en la congregación de mujeres
y hombres en carreras y profesiones específicas, que en su campo,
se encuentran características semejantes a los atributos de lo feme-
nino y lo masculino, es decir que el hecho de ser hombre o mujer
se asocia casi “por naturaleza”, con ciertas actividades, potenciali-
dades, limitaciones o actitudes, por ejemplo, los hombres son ra-
cionales, buenos científicos, calculadores, sistemáticos, prácticos
y poco afectivo, características esenciales en las ciencias exactas,
mientras que las mujeres son intuitivas, creativas, sensibles, afecti-
vas, pacientes y mesuradas, características esenciales en las cien-
cias humanas.
Otra de las recomendaciones de la UNESCO, es tomar en cuen-
ta en la preparación docente, como parte de una formación inicial
y continua, la promoción de una perspectiva de género integradora
y equitativa en los procesos de enseñanza, pues estos procesos se
relacionan con prácticas de socialización arraigadas en las culturas
que suelen transmitirse en la práctica docente. Otro ejemplo de
esto es el “Programa Escuela de formación para mujeres en oficios
no tradicionales de su sexo” desarrollado en México, en la bús-
queda de una propuesta educativa que fortalezca el liderazgo en
mujeres que viven en situación de marginalidad, con la intención
de atacar la discriminación y segregación ocupacional mediante el
aprendizaje activo de mujeres, en distintos oficios técnicos que son
Gómez Ch. Sendas cotidianas de mujeres académicas: El techo de cristal... pp. 97-120
poco realizados por mujeres, como la electricidad, albañilería, plo-
mería y/o mecánica (Informe Educación Para Todos, 2015; en Trevi-
ño; Villalobos & Baeza, 2016). Por último, las acciones no deberán
encaminarse exclusivamente en la disminución en las brechas de
aprendizaje, sino también deben promoverse acciones y progra-
mas para atacar fenómenos que vulneran a las mujeres, como el
acoso sexual, la prostitución, la violencia de género etc.
110
Dado que es una ley, y esta es del “deber ser”, establece úni-
camente que cada institución deberá diseñar sus propias políticas
que cumplan con las mencionadas disposiciones. La equidad edu-
cativa y la igualdad de oportunidades toma en cuenta a personas
que pertenezcan a grupos y regiones con mayor rezago educativo,
dispersos o que enfrentan situaciones de vulnerabilidad por cir-
cunstancias específicas de carácter socioeconómico, físico, mental,
de identidad cultural, origen étnico o nacional, situación migrato-
ria o bien, relacionadas con aspectos de género, preferencia sexual,
creencias religiosas o prácticas culturales.
Por otro lado, en el contexto Nacional de la Educación supe-
rior, el Plan Nacional de Desarrollo (PND 2013-2018), elaborado por
el Gobierno Federal, establece dentro de las cinco grandes metas
nacionales la denominada “México con educación de calidad” para
el desarrollo del potencial humano de los mexicanos con educa-
ción de calidad, donde el Objetivo 3.2, pretende garantizar la in-
111
• Fomentar que los planes de estudios de todos los niveles incorpo-
ren una perspectiva de género, para inculcar desde una temprana
edad la igualdad entre hombres y mujeres.
• Incentivar la participación de las mujeres en todas las áreas del
conocimiento, en particular las relacionadas a las ciencias y la in-
vestigación.
• Fortalecer los mecanismos de seguimiento para impulsar a través
de la educación, la participación de las mujeres en la fuerza laboral.
• Robustecer la participación de las niñas y mujeres en actividades
deportivas, para mejorar su salud y su desarrollo humano.
• Promover la participación equitativa de las mujeres en actividades
culturales. (Plan Nacional de Desarrollo, 2013-2018, p. 130).
Gómez Ch. Sendas cotidianas de mujeres académicas: El techo de cristal... pp. 97-120
género, con rectores y autoridades. Estas declaraciones se dividen
en los siguientes rubros: Legislación, Igualdad de oportunidades,
Conciliación de la vida profesional y la vida familiar, Estadísticas
de género y diagnósticos con perspectiva de género, Lenguaje, Sen-
sibilización a la comunidad universitaria, Estudios de Género en la
educación superior, y Combate a la violencia de género en el ámbi-
to laboral y escolar (Ordorika, 2015).
112
113
pectiva de género (Ordorika, 2015), se plantea la necesidad de ge-
nerar diagnósticos sobre las brechas de género en cada institución,
utilizando un sistema de indicadores y así crear un banco de datos
con la información. En el rubro de Lenguaje, se sugiere fomentar
el lenguaje inclusivo institucional no sexista. En el rubro: Sensi-
bilización a la comunidad universitaria, se pretende visibilizar el
sexismo, la desigualdad de género y sus consecuencias en la vida
cotidiana, a través de acciones como campañas de difusión, talle-
res y formación permanente en el tema.
En el rubro de Estudios de Género en la educación superior,
sugiere que en cada institución se establezca un departamento de
Género, que cuente con su propia infraestructura, plazas académi-
cas y administrativas de base, presupuesto, recursos, equipamien-
to, para así llevar a cabo acciones como proyectos y trabajos de
investigación, talleres, cursos, foros, e incorporar una asignatura
perspectiva de género, en todas las licenciaturas, como herramien-
ta teórico-metodológica (Ordorika,, 2015)..
En el último rubro: Combate a la violencia de género en el
ámbito laboral y escolar, se propone impulsar códigos de ética con
perspectiva de género que sensibilice a la comunidad universitaria,
minimizando el ambiente hostil, violento, discriminativo, misógi-
no y homofóbico a partir de estrategias y recursos como asesoría
psicológica y jurídica para las víctimas (Ordorika,, 2015).
En la universidad, está a punto de culminar el proyecto aca-
démico 2014-2018, el cual no impulso en su gestión políticas de
género, a pesar de estar explícito en el proyecto escrito, donde se
menciona que es necesario un Modelo de Equidad de Género, que
reconozca el derecho de hombres y mujeres de disfrutar de su ciu-
dadanía en condiciones de igualdad, que permita el acceso a los
puestos de responsabilidad de manera equitativa.
Al respecto de la equidad de género, se planteó la búsqueda de
la igualdad de oportunidades, respetando las diferencias individua-
les de cada persona, sin importar su origen, raza, religión, etnias,
posición social y orientación sexual.
Gómez Ch. Sendas cotidianas de mujeres académicas: El techo de cristal... pp. 97-120
Actualmente la UNACH cuenta con un departamento de gé-
nero, que tiene el objetivo de “institucionalizar la perspectiva de
género en las funciones sustantivas de la Universidad, en la orien-
tación de programas, y servicios universitarios, mediante la im-
plementación de acciones que incidan en la erradicación de las
desigualdades y vulnerabilidades de la comunidad universitaria”
(www.extension.unach.mx, 2018). Y ofrece los siguientes servicios:
114
115
se piensa en una región educativa pues:
Una institución educativa está trazada por los sentidos y significados
anclados en la vida cotidiana de los sujetos con la geografía huma-
na, pero al mismo tiempo esta vida cotidiana es atravesada por las
propias condiciones sociales instituidas por normas, temporalidad,
procesos y medios que determinan la actividad de los sujetos (Her-
nández, 2017, p. 94).
Gómez Ch. Sendas cotidianas de mujeres académicas: El techo de cristal... pp. 97-120
3.3 Región simbólica
La última etapa de la investigación pretende localizar las sen-
das que recorren cotidianamente las mujeres académicas para
conciliar el espacio profesional y del hogar, y analizar cómo las
mujeres académicas viven, significan y nombran los espacios de
su cotidianidad y las estrategias que despliegan para conciliar las
actividades, obligaciones y restricciones de dichos espacios, y es
116
117
como de la limpieza y los cuidados del hogar, dejando exentos y
excluidos a los hombres en esta participación.
Las problemáticas de género no obedecen a una sola región
institucional, como lo es la UNACH, ni tampoco a las sedes particu-
lares de cada mujer académica en sus hogares, esta problemática
responde a un problema de tipo global, pues históricamente han
existido las diferencias de género que privilegian a los hombres
(sobre todo en el espacio laboral y académico), y aunque estas dife-
rencias se construyen de manera diferente a partir del contexto, la
época y la cultura, hay una característica persistente a lo largo de
la historia y en casi todos los contextos, donde las mujeres de al-
guna manera se encuentran en desventaja. Esta realidad tiene una
densidad tal, que configura la mayoría de los espacios donde se en-
cuentra la interacción entre hombres y mujeres en las sociedades
contemporáneas. En esta era de la globalización, la región no pue-
de pensarse como aislada, sino constituida a partir de las relacio-
nes que desde lo local se establecen con lo global estas relaciones
se manifiestan a través de flujos constantes que reconfiguran las
percepciones que los habitantes tienen de los espacios que habitan
y recorren cotidianamente, y desde esta experiencia vivía puede
comenzar a regionalizarse:
Escoger entre el estudio del lugar (espacio cotidiano) o el espacio
mundial cuantitativo ha sido un asunto de discusión importante
para muchos geógrafos contemporáneos, que sin embargo, no pa-
recen haber reparado en la reflexión de los párrafos anteriores: el
espacio mundial, concéntrico, cubre al espacio cotidiano. En conse-
cuencia, vivencia y objetividad marchan juntas en geografía (Gómez,
2001, p. 121)
Gómez Ch. Sendas cotidianas de mujeres académicas: El techo de cristal... pp. 97-120
donde, las mujeres han renunciado a esta carga para dedicar más
tiempo al trabajo profesional. Esto es, la presencia de otras mujeres
que han encontrado en estos hogares una oportunidad laboral con
poca remuneración, pues es un oficio propio de sectores socioeco-
nómicos inferiores, y en el caso particular de Chiapas, muchas de
estas mujeres proceden de pueblos originarios marginados econó-
micamente, por lo que también están de por medio característica
118
Conclusión
La construcción previa de las regiones a partir de las catego-
rías de análisis, es resultado de la identificación de aquellos ele-
mentos de la acción social en la universidad que definen los límites
y fronteras regionales, estas acciones se expresan en sendas coti-
dianas, trayectos, desplazamientos, sedes e interacciones con y en
el espacio (Pons, 2011).
Esos rasgos particulares, nos guiaran a la necesidad de consi-
derar los elementos y las dimensiones que constituyen el territorio,
y que podrían convertirse en los planos sobre los que se edifique
la región. En el caso particular de este proyecto, esa acción estará
encausada para encontrar en las experiencias las formas de inte-
racción que obedecen a una estructura que producen y reproducen
prácticas sociales que podría servir como frontera para dibujar la
Región, pues se distingue de otros espacios y territorios, no solo
por sus características geográficas, sino por aquellos rasgos que la
integran, la forma en que se organizan, el tipo de relaciones que se
establecen, las formas de reproducción social y cultural, la forma en
que la Región es percibida y sobre todo, la forma en que es vivida.
Es así como del objeto de estudio de esta investigación (la
experiencia de mujeres académicas representada en sus cotidia-
nidades) se derivan tres tipos de región fundamentales: la región
plan, donde las políticas educativas enmarcan la experiencia y
trascendencia de mujeres académicas al interior de la universidad;
la región educativa, construida desde la experiencia vivida en los
espacios universitarios, en las trayectorias académicas determina-
das desde su inicio por vivencias y experiencias otorgadas por con-
diciones específicas (de género, por ejemplo), rescatando aquellos
119
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120
121
digitales
RESUMEN: En la actualidad, las tecnologías de la información y
la comunicación (TIC) han formado parte fundamental de la vida
de los adolescentes, las relaciones sociales se han modificado, al
hacer uso de las redes sociales digitales para la socialización, la
integración y el crecimiento de los denominados millenials y cen-
tenialls, coadyuvando a la mejora de la calidad de vida de manera
profesional como personal, facilitando las actividades de la vida
diaria. Sin embargo, no todo lo que ha traído consigo la era digital
son situaciones positivas, también existen escenarios complicados
que vulneran la integridad y exponen a los adolescentes a diver-
sas situaciones negativas Por ello es de vital importancia presen-
tar como son utilizadas las redes sociales digitales, mediante las
TIC, como contribuyen al desarrollo personal del sujeto, además
de existir situaciones que atentan contra su entereza y finalmente
proponer una reflexión del uso seguro de las mismas en contextos
globalizados.
PALABRAS clave: Redes sociales digitales, adolescentes, cyberbu-
llying, hipersexualización, uso seguro de TIC.
123
do la interacción social.
Es ineludible afirmar que existe una correspondencia social,
cultural, política y económica gracias al proceso globalizante que
en múltiples ocasiones puede ser contradictorio, sin embargo, di-
cha correspondencia maximiza e intensifica el devenir de los suje-
tos. Por ello, tenemos que
Las llamadas Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC)
son una parte del núcleo de desarrollo del proceso de integración de
los mercados globales (…) Absolutamente todo individuo que esté
interesado puede tener acceso a un conocimiento de estas tecno-
logías superior al que podrían adquirir de cualquier otro sector (…)
las TIC han revolucionado el mundo y lo han cambiado de tal forma
que ya no se parece en nada al que conocíamos. Han cambiado la
manera que tiene la sociedad de comunicarse, la forma de trabajar,
la gestión de recursos… Ahora el mundo es un lugar más eficiente,
más productivo, más ágil... Es más grande y a la vez más pequeño
(López, 2015, pp. 1-4).
Marcial y Armijo. Uso de las TIC en contextos globalizados: adolecentes... pp. 121-135
diferenciados y contradictorios acompañado de la distribución de
información desmedida en los mass media y en las redes sociales
digitales, propician una sociedad de consumo en un contexto neo-
liberal, que influye fuertemente en la conformación de las nuevas
identidades juveniles, la globalización influye en la identidad en
primer lugar porque pone a individuos, grupos y naciones en con-
tacto con una serie de nuevos “otros”, en relación con los cuales
124
Por tanto, debemos decir que las TIC han cambiado la con-
cepción del espacio-tiempo y las formas de interacción social en el
planeta, además de perpetuar la correlación en todos los sectores
-sociales, culturales, económicos, educativos e industriales-. Por
ello, Beck (1998), nos menciona que el impacto de las TIC no se
refleja únicamente en un individuo, grupo, sector o país, sino que,
se extiende al conjunto de las sociedades del planeta. Los propios
conceptos de “la sociedad de la información” y “la globalización”,
tratan de referirse a este proceso. Así, los efectos se extenderán a
todos los habitantes, grupos e instituciones conllevando importan-
tes cambios, cuya complejidad está en el debate social actualmente.
La adolescencia es una etapa de vida llena de encuentros y
desencuentros, donde todos los sujetos tratamos de definir nuestra
identidad -que es cambiante y no estática- construyéndonos con
elementos socioculturales existentes y definiéndonos a partir de lo
que “el otro” no es. Por tanto, podríamos aseverar que son sujetos
vulnerables socialmente; pero también hay que decir que son un
sector de la población que se encuentra atravesado por las nue-
vas tecnologías de la información y comunicación, además de ser
usuarios activos de las redes sociales digitales, que enmarcan el
sentido de este artículo, al significar un consumo cultural con altas
tasas de apropiación al significar experiencias de vida desde plata-
formas digitales.
125
adaptándose a las nuevas tecnologías en todos los rubros, la vida de
estos sujetos se volvió una extensión de la vida real, conservando –
no en todos los casos- algunos códigos de privacidad con relación
a lo que exponen o no en Internet.
Por otra parte, Los Centennials o “Generación Z”, son aquellos
sujetos nacidos a partir de 1995 hasta la actualidad, socialmente
son considerados los verdaderamente “nativos digitales”, pues des-
de su niñez usan el Internet, generalmente se encuentran sobre
informados, pues tienen altas tasas de propensión al consumo de
información y entretenimiento y su vida social pasa en un alto por-
centaje por las redes (Kirschbaum, 2017).
Estas generaciones, han significado el boom de los mercados
globales, de nuevas formas de socialización en la era de la infor-
mación, de modificaciones y adaptaciones culturales, cambios
contextuales, tecnológicos y globales. Por ello Castells plantea la
noción de paradigma sociotécnico, de esta manera tenemos que
Internet es el corazón de un nuevo paradigma sociotécnico que
constituye en realidad la base material de nuestras vidas y de nues-
tras formas de relación, de trabajo y de comunicación. Lo que hace
Internet es procesar la virtualidad y transformarla en nuestra realidad,
constituyendo la sociedad red, que es la sociedad en que vivimos [cursi-
vas añadidas] (1999, p. 11).
Marcial y Armijo. Uso de las TIC en contextos globalizados: adolecentes... pp. 121-135
las redes sociales proporcionan libertad de expresión al completo.
Además, permiten estar informados de todo lo que ocurre a nivel
mundial y a tiempo real, por lo tanto, se han convertido en canales
que permiten expresar opiniones propias, estableciendo un espacio
para participar de forma activa, entretenerse y buscar información.
Por otro lado, debido al carácter social que por naturaleza tiene el ser
humano, las redes sociales permiten compartir experiencias, ideas y
opiniones personales, lo que favorece el sentimiento de pertenencia
126
127
to de hipersexualización de las prácticas corporales se define como
la centralización de la sexualidad como medio de socialización de
los sujetos, que se convierten en objetos de deseo y consumo para
el otro de manera consciente y/o inconsciente, comprendiéndolo
como parte de un proceso emergente en un contexto hipermoder-
no en donde los escenarios y las posibilidades de mostrarse se mul-
tiplican.
Un ejemplo de escenario digital en donde las posibilidades de
observar prácticas corporales hipersexualizadas como base de la
interacción para múltiples sujetos son las redes sociales digitales
-entendidas como espacios en internet diseñados para la interac-
ción entre personas, que se nutren de los contenidos creados y
compartidos por las mismas- y una población con un grado parti-
cular de vulnerabilidad en torno a la temática serían los adolescen-
tes que para el Fondo de las Naciones Unidas (UNICEF) son perso-
nas entre 10 y 19 años.
Marcial y Armijo. Uso de las TIC en contextos globalizados: adolecentes... pp. 121-135
Por su parte la Asociación Mexicana de Internet (AMIPCI) en el
“Estudio sobre los hábitos de los usuarios de internet en México”,
con datos de 2013, publicó que el uso inicial de internet fue en un
40% para acceder a redes sociales digitales, el 71% correo elec-
trónico y 64% búsqueda de información. El 71% de los usuarios
encuestados se conectaban en el hogar, 66% utilizaba wi-fi con-
tratado y el 64% wi-fi de acceso público dependiendo del espacio
128
129
entre activa y pasiva; las participaciones pasivas obtuvieron por-
centajes más altos: el 73% de los adolescentes encuestados dedica
su tiempo de conexión a ver fotografías de otros usuarios y el 57%
a leer publicaciones de otras personas.
La participación activa se da a partir de actualizar estados
(37%), subir fotografías (51%) y publicar mensajes personales
(32%); en el caso de estos dos últimos destaco que son las mujeres
las que encabezan dichas actividades. El 70% de estos usuarios ha
compartido videos en Facebook y un 20% en Instagram, en este
caso también son mayoría mujeres.
A partir de estos datos podemos inferir que los adolescentes
son una parte importante de la población que accede a internet y
hace uso de tecnologías de la información, particularmente en el
caso de México, y reconocer que el uso de redes sociales digitales
se ha convertido en parte importante de la vida diaria de estas per-
sonas.
Las relaciones sociales en el escenario digital como cara a cara
están en la presencia continua de mediadores que rodean las rea-
lidades de los agentes sociales que diferencian las maneras y los
significados que éstos le dan a las diversas prácticas corporales que
realizan, es decir, el hecho de que los adolescentes encuentren ma-
yor facilidad en desarrollar sus habilidades en espacios digitales
o, que desdibujen con sencillez los límites de lo on y lo off line no
significa que estén desconectados de las condicionantes sociales
que rigen el actuar de los adultos, por lo tanto también se reprodu-
cen las tensiones presentes en el contexto social al que pertenecen.
Haciendo una lectura de la resistencia que plantea Touraine
(2000) podríamos relacionarla con lo que Ortner (2006) dice sobre
la capacidad de agencia, entendida como una propiedad del sujeto
social que está moldeada por el medio en el que se desenvuelve el
sujeto; pero lo que me parece relevante es la parte en la que enun-
cia que ésta es distribuida, es decir, que algunos llegan a tenerla,
unos en más y otros en menor medida y hay quienes no la obtie-
nen en absoluto. Esta capacidad no es individual, sino que se arrai-
Marcial y Armijo. Uso de las TIC en contextos globalizados: adolecentes... pp. 121-135
ga en las redes de relaciones, por lo que es negociada. Es donde
creemos que se explica su término serius games, esa relación entre
la agencia como forma de deseo/intención, la búsqueda de metas
y la promulgación de proyectos, donde podría parecer que es un
deseo individual pero está guiado por el sentido de pertenencia al
proyecto colectivo. El sujeto, pues, entra al juego y dependiendo
del grado desarrollado de la capacidad de agencia, podrá reprodu-
130
131
ces son sus amigos y, otras veces, la misma sociedad, a la que nece-
sitan integrarse y pertenecer (Morduchowicz, 2012, p. 93).
Marcial y Armijo. Uso de las TIC en contextos globalizados: adolecentes... pp. 121-135
les: 50.24% de los encuestados eran mujeres y el 47.80% hombres
mientras que el resto no especificó sexo; se rescataron los roles
en la participación en el sexting: 80.97% pasivos, siendo quienes
habían recibido imágenes o las habían visto con compañeros y ac-
tivos un 17.56%, quienes enviaban imágenes sugestivas, eróticas o
de desnudos completos, el 6.82% de los participantes activos ad-
mitieron que subían fotos de este tipo a sus perfiles en redes socia-
132
133
millennials y centennials traen consigo en la sociedad de la infor-
mación y la hipermodernidad. Pues, al involucrar a los diversos
actores inmersos en la educación -en cualquiera de sus ámbitos-
de los adolescentes del país, estaremos estableciendo parámetros
seguros y de potencialidad benéfica.
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Marcial y Armijo. Uso de las TIC en contextos globalizados: adolecentes... pp. 121-135
Fernando Lara Piña
Elsa María Díaz Ordaz Castillejos
137
Gratuitos de Historia sobre la infancia
RESUMEN: Desde la perspectiva teórica y metodológica desarro-
llada por Fairclough, en este artículo abordamos el análisis crítico
de una serie de textos sobre la infancia, incluidos en los Libros de
Texto Gratuitos de Historia (LTG), con el fin de develar la órbita ideo-
lógica relativa a la imagen de la infancia que se ofrece en dichos
textos. El análisis de cómo han sido construidos muestra la toma de
postura que el redactor adopta frente a una particular versión de la
infancia, encaminada a orientar la interpretación del lector en una
determinada línea de pensamiento y, de esta manera, acercarle al
punto de vista que coincida con el del redactor.
PALABRAS clave: Libros de Texto Gratuitos, Análisis Crítico del Dis-
curso, ideología.
139
De acuerdo con el enfoque del ACD desarrollado por Fair-
clough (1995b), la cuestión de cómo los discursos influyen y son
influidos por relaciones de poder —dentro del sistema social—,
involucra analizar cómo el lenguaje establece puntos de vista par-
ticulares de representar el mundo, así como formas específicas de
construir identidades y relaciones sociales.
Asimismo, Fairclough (1992) propone que cualquier evento
discursivo puede abordarse simultáneamente como texto, y como
ejemplo de práctica discursiva y práctica social. Se trata, entonces,
de abordar el discurso desde estas tres dimensiones de análisis di-
ferentes, pero a la vez complementarias, ya que existen numerosas
intersecciones entre ellas.
Los discursos que conforman el corpus de análisis provienen
de una de las secciones titulada “La infancia en…”, incluida en los
LTG de Historia, editados en el contexto de la Reforma Integral de la
Educación Básica (RIEB) en México. En dichos libros, esta sección
se ofrece como complemento de estudio de la historia de México,
en los libros de cuarto y quinto grado, y de la historia universal en
el libro de sexto grado. Aquí solamente nos referiremos a algunos
de estos discursos, a los que llamaremos cápsulas informativas o
simplemente cápsulas.
Perspectiva teórica
Dentro de las diversas perspectivas teóricas del ACD, la elabo-
rada por Fairclough (1992, 1995a, 2004) nos parece una de las más
congruentes, por su comprensión teórica del discurso y del mode-
lo tridimensional que propone para el análisis del discurso como
práctica social, práctica discursiva y práctica textual.
En el enfoque del ACD de Fairclough, hallamos una serie de
conceptos clave, en los cuales se condensan los principales elemen-
tos de su teoría en relación con la noción de discurso y del propio
análisis crítico del discurso que ha desarrollado. Además, dichos
conceptos se encuentran estrechamente vinculados entre sí.
Lara y Díaz Ordaz. Qué dicen los Libros de Texto Gratuitos de Historia... pp. 137-157
Las concepciones en las que Fairclough (1993, 1995a, 1995b)
basa sus consideraciones teóricas, respecto a la noción de discurso,
son las siguientes: i) discurso, en un sentido abstracto para referirse
al uso del lenguaje como práctica social; ii) discurso (o evento dis-
cursivo) entendido como un tipo de lenguaje utilizado dentro de un
campo específico (educativo, histórico, político, científico, publi-
citario, etc.), el cual es analizado como texto, práctica discursiva y
140
141
por ejemplo, la elaboración de los LTG para la primaria ha estado
acompañada de actividades legislativas y, de igual manera, también
emergieron discursos sobre el contenido mismo de los LTG como
recursos didácticos, con los cuales se viene asistiendo a la práctica
educativa desarrollada en las instituciones escolares, como vere-
mos más adelante. En suma, es esta una extensa concepción del
discurso que tiene especial rendimiento en el ACD.
Enfoque metodológico
Si bien ya expusimos en forma aislada las bases teóricas en las
cuales se sustenta esta investigación, cabe aclarar que los métodos
no se encuentran aislados, sino explícita o implícitamente relacio-
nados con estructuras y supuestos teóricos (Titscher et al., 2000),
pues “cualquier método de investigación siempre va acompañado
de una teoría. Método y teoría no pueden estar separados, a pesar
del hecho de que los métodos a menudo son considerados como si
pudieran permanecer aislados” (Gee, 1999, p. 5).
Por consiguiente, para el análisis del corpus conformado por
14 textos relativos a la infancia que aparecen en los LTG de Historia
(4 en el de cuarto, 5 en el de quinto y 5 más en el de sexto grado
de primaria), y en congruencia con el modelo tridimensional pro-
puesto por Fairclough (1992, 2004), establecimos una distinción
entre la práctica social, la práctica discursiva y la práctica textual
como tres niveles que pueden separarse para efectos de su análisis,
pero que se encuentran imbricados. Dicho de otro modo, estas tres
etapas corresponden a un proceso único a pesar de que por razo-
nes metodológicas las hemos separado en sucesivas fases, aunque
en la práctica casi resulta imposible aislarlas.
Los LTG como textos y como práctica discursiva son dos di-
mensiones que forman parte de una más amplia práctica social, lo
cual implicó explorar algunos aspectos para su contextualización,
así como trazar las relaciones sociales, culturales y no discursivas
que constituyen el extenso contexto de la práctica discursiva, o
Lara y Díaz Ordaz. Qué dicen los Libros de Texto Gratuitos de Historia... pp. 137-157
bien la “matriz social del discurso” (1992, p. 237), según la expre-
sión de Fairclough.
Por otro lado, el análisis de la práctica discursiva se centra en
cómo los textos son producidos y consumidos. Para el análisis de
este nivel, se prestó especial atención a la intertextualidad y la in-
terdiscursividad. La primera se refiere a la relación que un texto
mantiene con otros textos, o bien la presencia de otros textos u
otras voces ajenas en el interior del discurso que realiza un hablan-
142
143
cional de Libros de Texto Gratuitos (CONALITEG), dependiente de
la SEP y, asimismo, se legisla sobre la gratuidad y obligatoriedad de
los LTG. De esta manera, el Estado mexicano asegura su hegemo-
nía no solo en el control de la edición y distribución, sino también
en el diseño de los libros de acuerdo con los planes y programas
vigentes, textos que han venido utilizando generaciones de estu-
diantes de educación básica en todo el país, bajo el argumento de
que “la Educación Primaria impartida por el Estado —Federación,
Estados y Municipios— ha de ser, además de obligatoria, gratuita”
(Diario Oficial de la Federación, 1959, p. 4).
Por una parte, frente a los intereses económicos y lucrativos
que perseguían las empresas en manos de editores privados y, por
otra, el hecho de que la niñez de las clases desfavorecidas no podía
acceder a los libros y materiales para la enseñanza, hicieron de los
libros escolares de nivel elemental caldo de cultivo para la creación
de la CONALITEG y los LTG, “con el fin de convertir en realidad la
gratuidad de la educación, al separar la edición de libros de texto
de cualquier interés lucrativo” (Villa Lever, 2009, p. 46).
A partir de entonces, de acuerdo con Ixba Alejos (2013, s.p.),
por el carácter gratuito, único y obligatorio, todos los alumnos, por
grados y asignaturas, recibirían los mismos impresos. Sus profeso-
res, además, debían utilizarlos en clases y no solicitar textos comer-
ciales excluidos del catálogo oficial de la Secretaría de Educación
Pública (SEP), so pena de incurrir en desacato.
Lara y Díaz Ordaz. Qué dicen los Libros de Texto Gratuitos de Historia... pp. 137-157
libros de texto para todo el país limitaba la libertad de educación”
(Corona Berkin, 2015, p. 24).
Así pues, diversos actores sociales estuvieron en desacuerdo
con el control del contenido de los libros escolares y con la idea
de uniformar la educación a lo largo y ancho del país, mediante
la obligatoriedad del uso exclusivo de los LTG. Este hecho, desde
el principio, fue foco de tensión y desató una serie de reacciones.
Resultado de ello, la SEP fue blanco de ataques, críticas, protestas
144
145
canos dejarían de recibirlos de manera gratuita.
Otro rasgo característico de los LTG es que, como consecuencia
de la serie de reformas educativas, estos también han sido objeto
de diversas modificaciones, tanto en su forma como en su conteni-
do y método, con base en los nuevos planes y programas estableci-
dos en cada una de las reformas educativas vigentes. No obstante,
otros contenidos han permanecido o guardado continuidad a pesar
de las reformas (Corona Berkin, 2015).1
En suma, las distintas versiones de los LTG han sido expresión
del proyecto educativo que se corresponden con las reformas edu-
cativas en México. Tal es el caso de los LTG editados en el contexto
de la RIEB —concebidos bajo un modelo por competencias—, los
cuales comienzan con esta presentación:
La Secretaría de Educación Pública, en el marco de la Reforma Inte-
gral de la Educación Básica, plantea una propuesta conformada por
los libros de texto desde un nuevo enfoque que hace énfasis en la
participación de los alumnos para el desarrollo de las competencias
básicas para la vida y el trabajo (SEP, 2011a, p. 3).
Lara y Díaz Ordaz. Qué dicen los Libros de Texto Gratuitos de Historia... pp. 137-157
el resultado de una serie de acciones de colaboración, como la Alian-
za por la Calidad de la Educación, así como con múltiples actores en-
tre los que destacan asociaciones de padres de familia, investigado-
res del campo de la educación, organismos evaluadores, maestros y
expertos en diversas disciplinas. Todos han nutrido el contenido del
libro desde distintas plataformas y a través de su experiencia (SEP,
2011a, p. 3).
146
147
una serie de principios que proceden de otro lugar, que representan
una visión particular de la normalidad y la desviación, del bien y del
mal y del «cómo actúan las buenas personas».
Lara y Díaz Ordaz. Qué dicen los Libros de Texto Gratuitos de Historia... pp. 137-157
aun cuando no se violen de forma manifiesta las pautas que estipu-
la la teoría de los géneros discursivos, y que esa pretendida impar-
cialidad es solo aparente, como veremos más adelante.
Si concebimos a los textos informativos de nuestro corpus
como género discursivo, podemos observar que en algunos de es-
tos predominan tanto ingredientes descriptivos como elementos
narrativos. Los siguientes textos son una buena muestra de ello:
148
149
(3) La infancia en Tenochtitlan
Lara y Díaz Ordaz. Qué dicen los Libros de Texto Gratuitos de Historia... pp. 137-157
ción vertida en cada una de estas secciones de los LTG de Historia
es muy breve, 13 con extensión de un párrafo y solamente una
aparece con dos párrafos, las cuales representan distintas estampas
sobre la vida cotidiana de la infancia. En estos textos, con frecuen-
cia se emplean las oraciones simples, ya que con ellas se facilita la
comprensión de la información por parte de los lectores.
Las cápsulas informativas están encabezadas por un título que
150
151
miento”, más no con sus debidas excepciones. Y este hecho, en sí
mismo, tiñe ya de un tono ideológico al texto, en tanto que recoge
un punto de vista que se contrapone a la idea de un acceso desigual
a esas nuevas formas de entretenimiento, a través de la televisión.
Desde luego, solamente algunas familias con poder adquisitivo, en
aquel entonces, tuvieron acceso de manera inmediata a esos “bie-
nes”, tal como ha sucedido con las nuevas tecnologías de la infor-
mación y la comunicación, entre otros bienes sociales y materiales.
Por otra parte, se muestra una población infantil esencialmen-
te unánime en relación con la producción televisiva que consumen,
“como las caricaturas, y los programas musicales y de concursos”,
las cuales se dice que han permanecido en el “gusto del público
infantil”, cual manifestación colectiva que pretende igualar a los
muy diversos grupos de niños mexicanos: tanto a los que viven
debajo del umbral de pobreza como a aquellos que provienen de
las familias más ricas. En un país como el nuestro, el niño lector de
este texto no le resta más que concluir que, al menos, se ha podido
lograr la igualdad social en el “gusto del público infantil”.
No obstante, cuando de manera explícita se atribuye a los ni-
ños la pertenencia a una clase social, por lo general solo se trata
como un asunto exclusivo de épocas pasadas, sin relación alguna
con el presente histórico de sus lectores, como podemos ver en la
siguiente cápsula:
(5) La infancia en el siglo XIX
En esta época los niños de las clases altas vestían de forma similar a
los adultos; usaban joyas, flores, sombreros y plumas en el cabello.
Sin embargo, en algunas escuelas a las niñas se les autorizó usar un
pantaloncillo con el que podían jugar y saltar. Los niños más peque-
ños usaban un trajecito holgado compuesto por pantalón ancho y
chaquetín, al que se le conoció como el mameluco (SEP, 2011b, p.
71).
Lara y Díaz Ordaz. Qué dicen los Libros de Texto Gratuitos de Historia... pp. 137-157
“los niños de las clases altas”. En todo caso, cobra sentido referirse
a esos exclusivos privilegios que disfrutaban porque sus necesida-
des básicas (comida, lugar donde vivir…) ya estaban cubiertas o
satisfechas por sus progenitores, inferencias que el redactor de la
información evita presentar. Por consiguiente, cada niño que lea
esta cápsula deberá extraer sus propias inferencias: ¿privilegios de
clase o conquistas sociales de ciertos grupos en la sociedad?
Si en la particular forma de vestir y los adornos que usaban
152
153
ban con ellos. Asimismo, de manera indirecta, el texto funciona
como referencia al progreso de Europa y Estados Unidos, lugares de
donde proveían los juguetes “modernos”. Por otra parte, obsérvese
cómo el redactor ha evitado el término “importados”, ya que su-
giere de forma demasiado directa la acción de importar productos
extranjeros y ha preferido emplear “eran traídos”, con lo cual tam-
bién se ha ocultado a los agentes (importadores) de dicho proceso.2
Por último, veamos ahora cómo se describe y contrapone la
situación actual del trabajo infantil con otra similar de un pasado
remoto.
(8) La infancia en la Edad Media
Actualmente se procura evitar el trabajo infantil, pero en la Edad
Media era muy común; los niños no sólo ayudaban a sus padres,
sino que tenían tareas específicas: desde los ocho años podían ser
pastores y a los diez ya trabajaban igual que los adultos; incluso al-
gunas niñas se empleaban como sirvientas desde que tenían cinco
años (SEP, 2011c, p. 114).
2
La participación de niños en conflictos bélicos deviene en el empleo de un léxico (verbos
y sustantivos) procedente del campo de la guerra: lucha revolucionaria, batallón, bajas, ene-
migos, invasores, ejército, atacadas, atacaron, combates, diana militar, mensajeros, centinelas,
lucharon, derribar, conquista, tropas, atacadas, artillería, artillero, cañón, sitio de Cuautla.
Por otro, también encontramos el léxico del desarrollo cuando la finalidad de la información
es dar cuenta de la educación de la infancia, se concreta en términos como: educación, escue-
la, escribir, recitar, dibujar, aprender, estudiantes, educaba, preparaba, enseñaban, saberes,
aprendían, clase en grupos.
Lara y Díaz Ordaz. Qué dicen los Libros de Texto Gratuitos de Historia... pp. 137-157
De acuerdo con Ascombre y Ducrot (1994), la partícula “pero”
no solo sirve para contraponer o presentar como opuestos las dos
proposiciones que enlaza, sino también “marca una oposición...
entre las conclusiones que podrían extraerse de ellas” (p. 50): si el
trabajo infantil “en la Edad Media era muy común”, hoy en día ha
dejado de serlo; no obstante, basta con salir a la calle en las grandes
ciudades, visitar el campo o las paupérrimas zonas conurbadas de
154
155
Sin embargo, disimular cualquier viso de que la información
que se ofrece carece de intenciones ideológicas, la convierte en un
asunto más ideológico en la medida que, en un gran número de
casos, lo importante no es lo que se dice, sino lo que se calla, oculta
u omite, desde el momento mismo en que la elección y el trata-
miento de la información no siempre es inocente, como hemos
constatado en nuestro análisis de los textos.
También, hemos visto cómo las generalizaciones hechas en
torno a la infancia y que sirven de fundamento a las descripciones
plasmadas en los textos suelen ser utilizadas para crear una cierta
homogeneidad de la infancia, y de este modo borrar u ocultar toda
clase de diferencias y desigualdades sociales entre los distintos gru-
pos de niños, como si todos hubieran participado de las mismas
experiencias de vida, con lo cual se crea la ilusión de una historia
común a todos los niños.
Así pues, el hecho de que algunos de los textos analizados re-
curran a las generalizaciones interpretativas de la infancia, con-
duce a pensar en la inexistencia de desigualdades sociales entre
ellos. O bien, en todo caso cuando se hace referencia a ellas, estas
fueron un asunto del pasado como para pensar que, hoy en día, la
población infantil y sus familias viven un cambio significativo que
les depara un futuro prometedor. Es obvio que el lector infantil no
necesita de unas destrezas de comprensión muy profundas como
para entender que aun los individuos marcados por la desigualdad
social y la privación de bienes sociales y materiales, en una socie-
dad como la nuestra fuertemente estratificada, hoy al menos pue-
den aspirar al progreso y desarrollo como históricamente lo han
venido haciendo quienes gozan de privilegios y poder.
Finalmente, si no se ha considerado necesario que los lectores
infantiles, para quienes se han elaborado los textos analizados, co-
nozcan las causas que han generado las diversas situaciones a las
que se aluden en las cápsulas informativas, entonces se trata de la
más pura transmisión factual o una simple declaración de hechos,
y valdría preguntarse qué puede hacer el niño aprendiz con esta in-
Lara y Díaz Ordaz. Qué dicen los Libros de Texto Gratuitos de Historia... pp. 137-157
formación, para qué le puede servir el conocimiento de la misma; o
bien, cuál ha sido la intención de acercarle a la historia universal y
a la de México de una manera pasiva y sin explicación alguna. Por
lo tanto, resulta casi una utopía pensar que dichos lectores lleguen
a utilizar esta información como base de la discrepancia política o
ideológica, o bien para exigir (o pensar en) un mundo más justo,
equitativo y humano.
156
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María Magdalena Gómez Sántiz
159
las lenguas originarias
161
y participar en las actividades docentes, reflexionamos que una
practica situada e intercultural pueden fortalecer la lectura y escri-
tura de la lengua materna de los alumnos.
Se pretende mostrar elementos etnográficos para la compren-
sión de las prácticas educativas y las relaciones entre profesores
y alumnos del primer ciclo, a través de un recorrido en las cla-
ses de alfabetización observadas en las distintas escuelas visitadas
permitió conocer diferentes procesos de enseñanza, considerando
minuciosamente el uso de materiales didácticos y la participación
de los alumnos en el espacio áulico, el uso de recursos visuales y
manipulables y la ambientación pedagógica.
Es crucial apreciar la idoneidad de los materiales didácticos
adquiridos y elaborados, incluso cuando están expuestos en las pa-
redes de las aulas, además de las estrategias de organización inter-
na y de duración de cada clase, el estudio etnográfico permite ver
las formas de interrelación entre maestros y alumnos con énfasis
en las interacciones suscitadas por estrategias y recursos moviliza-
dos en la enseñanza de las lenguas originarias y la alfabetización
en español.
Gómez Sántiz. La importancia de los materiales didácticos para el fomento... pp. 159-172
experiencias y se afianza las prácticas culturales, la socialización es
un actividad fundamental para los individuos de una comunidad,
porque:
La socialización es, por consiguiente, un proceso interactivo, nece-
sario al niño y al grupo social donde nace, a través del cual el niño
satisface sus necesidades y asimila la cultura, a la vez que, recípro-
camente, la sociedad se perpetúa y desarrolla […] la socialización
162
163
perfectibilidad, como proceso es considerado como interminable
mientras el hombre esté vivo.
Gómez Sántiz. La importancia de los materiales didácticos para el fomento... pp. 159-172
personas en el marco de las prácticas sociales que promueve una co-
munidad determinada. […] La adopción de un enfoque de enseñan-
za situada recupera y amplía algunos de los principios educativos del
constructivismo y la teoría del aprendizaje significativo (Díaz, 2006,
pp. 20-21).
165
pable y perceptible para los niños; para ello, proponemos fomen-
tar la lectoescritura que consiste en construir materiales didácticos
que proporcionen y faciliten en los niños competencias para la lec-
toescritura comprensiva. De modo que el profesorado movilice el
repertorio de una gama de materiales didácticos para el desarrollo
de aprendizajes con pertinencia cultural.
La práctica docente basado en los conocimientos propios que
los niños han adquirido en su contexto, potencia la educación si-
tuada y el aprendizaje significativo; los profesores pueden incluir
para el fomento de la lectoescritura temas como los astros, la arte-
sanía, los alimentos, las partes del cuerpo, los animales, la milpa,
la herbolaria, arboles frutales, el cuidado del medio ambiente, la
medicina tradicional etcétera. El desarrollo de temas conocidos por
los alumnos motiva el agrado por la lectura y el uso de materiales
didácticos son estrategias que facilitan el aprendizaje y el trabajo
cooperativo.
Los procesos de lectoescritura desde los primeros ciclos esco-
lares se deben procurar que los niños escriban de forma adecuada
los enunciados o textos. Asimismo, cuidar que los niños expresen
fluidamente sus ideas, esto es posible en la medida que el profeso-
rado apoye a los alumnos con materiales didácticos. La innovación
es incluir en los materiales didácticos las cuestiones sociocultura-
les y lingüísticas propias del contexto; el compromiso, la creativi-
dad profesional del profesorado, el interés y la participación activa
de los alumnos garantizarán el aprendizaje significativo.
La eficiencia de la enseñanza de la lectoescritura de las len-
guas es necesario definir procedimientos, estrategias y materia-
les didácticos que implican retomar los conocimientos propios
que permiten comprender los significados culturales y buscar la
constante innovación para la calidad educativa. El uso de diversos
materiales didácticos con imágenes, fotografías, dibujos, escritos,
entre otros, apoyan el fomento de la lectoescritura, hacen que los
procedimientos sean agradables cuando los niños participan en la
construcción del conocimiento.
Gómez Sántiz. La importancia de los materiales didácticos para el fomento... pp. 159-172
Trabajar con materiales didácticos que ofrecen procedimien-
tos diversificados y flexibles para fortalecer la lectoescritura de la
lengua materna de los niños, con el fin de dar respuesta a una rea-
lidad dinámica y heterogénea; asimismo los materiales buscan fa-
vorecer los vínculos entre alumnos para fomentar la solidaridad,
cooperación y aprecio a su lengua materna. El desarrollo de los
materiales didácticos es variable de acuerdo al avance e interés de
166
los niños.
Para garantizar el desarrollo exitoso de la lectoescritura las ac-
tividades deben ser motivadas, cuidadas, vigiladas por el profesor,
en todo momento orientará a los niños con preguntas para poten-
ciar la comprensión de los textos. Se trata de desarrollar activida-
des situadas para lograr aprendizajes significativos, los profesores
y alumnos deben incluir temas del contexto con su respectivo ma-
terial didáctico; ejemplos:
• Presentar escritos de leyendas con imágenes (en papel bond
con letras grandes).
• Presentar fragmentos de un cuento para que los niños lo or-
ganicen y lean (con imágenes y texto).
• Proporcionar o crear adivinanzas, cantos, refranes y otros
para que los niños lean,comenten o canten.
• Escribir anuncios para pegar en puntos principales de la es-
cuela y localidad.
• Elaborar escritos sobre actividades cotidianas y creencias
propios de la cultura.
• Escribir textos para el periódico mural.
• Crear cuentos para compartir lecturas.
• Motivar a los niños que lean un pequeño texto al día.
• Organizar una pequeña biblioteca en el aula para que los ni-
ños tengan acceso directo con los libros y sus escritos.
Otras situaciones favorables en cuanto al aprendizaje situado
consiste en la consideración que tiene el profesor en relación al
valor o el nivel de prestigio que atribuye a las prácticas culturales
propias del contexto, así como la identidad de sí mismo, es decir se
reconoce plenamente como indígena, emancipa el carácter valioso
de la pertenencia étnica, potencia el orgullo de ser portador y re-
productor de una cultura.
En las aulas el profesorado desempeñan un papel fundamen-
tal en motivar a que los niños se expresen en su lengua con toda li-
bertad, que platiquen entre ellos, entre profesores también pueden
167
Actualmente el profesorado reconoce la necesidad en emplear
materiales para fomentar la lectura y escritura de manera situada
y significativa. En este tenor se requiere la participación compro-
metida del profesor en incluir en estos procesos los conocimientos
culturales y lingüísticos de los niños; son situaciones que merecen
prioridad para atender las realidades socioculturales, encaminada
a la afirmación de la dignidad, de la reivindicación cultural, la len-
gua, la historia y los derechos de la niñez indígena.
Integrar los conocimientos propios en los contenidos esco-
lares, reconocer y revalorar la lengua y cultura son los inicios de
fortalecimiento en la enseñanza aprendizaje; priorizar la participa-
ción creativa y la práctica más que las exposiciones orales de parte
del profesor en la formación de los niños, es hacer una educación
diferente a la que se realiza comúnmente en las diversas institucio-
nes escolares; es querer iniciar una educación participativa donde
se escuchen las voces de los niños y que los profesores terminen
con la práctica vertical para emprender los ciclos de participación
de todos los sujetos implicados.
Estas acciones potencian el trabajo docente, cuando los ni-
ños se sienten motivados por el profesor estimula cierta seguridad
en ellos, se ha observado que la mayoría de los niños tienden en
aprender cuando existe actividades colaborativas, armoniosas y
con significado cultural; el uso de materiales didácticos favorece
en los niños la creatividad, la curiosidad y las habilidades para el
desarrollo de la lectoescritura; asimismo resulta satisfactorio ser
considerado sus ideas, sus pensamientos y sentimientos;’ además,
permite desarrollar seguridad y consolidar las condiciones de ge-
nerar los conocimientos a partir de su lengua y cultura.
De esta manera los procesos de enseñanza y aprendizaje que
se desarrolla a partir de la lengua y cultura son altamente potencia-
les porque la cultura guarda significados y para comprenderlas es
fundamental vivir situaciones en los contextos inmediatos debido
que “la cultura es la organización social de significados interiori-
zados por los sujetos y grupos sociales, y encarnados en formas
Gómez Sántiz. La importancia de los materiales didácticos para el fomento... pp. 159-172
simbólicas, todo ello en contextos históricamente específicos y so-
cialmente estructurados” (Giménez, 2007, p. 271).
Evidentemente, las palabras que se emiten tiene sentido y sig-
nificado para los hablantes, porque “las palabras se enriquecen a
través del sentido que les presta el contexto, esta es una ley funda-
mental de la dinámica del significado” (Montealegre, 2004, p. 246).
Los significados construyen sentidos de vida, es por esto que hace-
mos énfasis en que la lengua y cultura constituyen una cosmovi-
168
169
la estrecha relación entre lengua, cultura y educación que cons-
tituyen los referentes socioculturales, los conocimientos que los
individuos interiorizan y exteriorizan en la interacción con otros.
Asimismo, para fortalecer los diferentes procedimientos de la prác-
tica docente que suscitan en las aulas es necesario “Apropiarse de
las prácticas del lenguaje escrito y las normas de su sistema de
escritura promoviendo el fortalecimiento de su lengua” (SEP. 2017:
225). Siendo la escuela una imagen de la realidad social local y re-
gional, su singularidad radica en la práctica docente del profesora-
do al implementar o no, procedimientos prácticos asociados a los
significados culturales.
Para el desarrollo de las actividades se recomienda el apren-
dizaje colaborativo, integrando a los niños en equipos de trabajo
para animar la solidaridad, la equidad de género y el apoyo mutuo
entre alumnos. El trabajo en equipo potencia la socialización de
saberes y de experiencias, se ha observado que cuando trabajan en
equipo emplean naturalmente sus propias palabras, el desarrollo
de estrategias, las opiniones son escuchadas mismas que ayudan a
construir los conocimientos en equipo, pues esto es lo que genera
aprendizajes significativos, porque la comunicación y la informa-
ción son de manera mediática (Gómez, 2017, p. 206). Por otra par-
te, el aprendizaje colaborativo coadyuva en:
Apreciar a los compañeros y sentirse apreciado. Los métodos de
aprendizaje cooperativo son intervenciones sociales, de modo que
aumentan el contacto entre los alumnos, les ofrece una base com-
partida de similitudes como la pertenencia a un grupo, los involu-
cra en actividades conjuntas agradables y les hace trabajar hacía un
objetivo común. La suma de estos de estos elementos contribuye a
aumentar el afecto entre ellos (De la Cerda, 2013, p. 32).
Gómez Sántiz. La importancia de los materiales didácticos para el fomento... pp. 159-172
ción cara a cara, el desarrollo de actividades con tendencia a la
participación con paralelismo, crea o forma correspondencia en
las actividades a realizar.
Conclusiones
La educación que requiere los pueblos originarios se trata de
un proceso integral, útil para la vida, que fortalezca las prácticas so-
170
171
la lengua y la cultura de pertenencia; el profesorado le compete
enseñar en la lengua propia de los niños, la que le permite nom-
brar el mundo; asimismo la construcción de materiales facilita la
enseñanza y aprendizaje de la lectoescritura enriquece el lenguaje
y los diálogos intraculturales e interculturales.
Para los profesores y niños es imprescindible partir de la ora-
lidad para transitar hacia lo escrito; para ello, siempre se requiere
pensar, sentir y reflexionar en la lengua materna sin interferen-
cia de una segunda lengua. La incorporación de los conocimientos
socioculturales y lingüísticos es una propuesta que está pensado
para reivindicar y empoderar la lengua, cultura y educación de los
pueblos originarios. Estas acciones se inscriben como parte de un
proceso que posibilitan la apropiación y construcción de compe-
tencias y conocimientos para la implementación de una práctica
reflexiva y por ende innovadora.
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Contradicciones de la comprensión
173
lectora: hablar tzotzil y entender en español
175
la capital, Tuxtla Gutiérrez; a pesar de la cercanía a estas ciudades,
existe una gran diversidad geográfica, económica, cultural y social,
que hace de Jericó un poblado peculiar en el territorio chiapaneco
(Viqueira,1995).
La población total de Embarcadero de Jericó está conformada
por 522 personas, de los cuales 266 son hombres y 256 mujeres. El
97,37% de la población es indígena, y el 77,08% de los habitantes
habla una lengua amerindia (INEGI, 2005).
En la actualidad según registros de las asambleas generales,
Prospera y listas de asistencia de las escuelas Preescolar, Prima-
ria, Telesecundaria, y Tele bachillerato, revelan que en la comu-
nidad hubo un incremento de habitantes, sumando aproximada-
mente 800 personas, no incluyendo a niños menores de 3 años.
La conformación de familias es un máximo de 11 a 12 integrantes,
la mayoría de los niños asisten a clases ya que reciben el apoyo
de gobierno del programa Prospera, que condiciona el apoyo a la
asistencia escolar.
En este poblado el idioma español ha sido reproducido princi-
palmente desde las instituciones educativas1 como el único medio
de comunicación con los alumnos, los libros de texto y la práctica
docente en los distintos niveles educativos son muestra de ello. Se
Contextualizan algunos aspectos geográficos, políticos y sociales
de la comunidad, pero para fines de la investigación se retomaron
a un grupo de alumnos de cuarto grado de la Escuela Primaria Bi-
lingüe Belisario Domínguez Palencia, donde prevalece el problema
en la comprensión lectora y que como resultado del proceso inves-
tigativo se demostró el conflicto comunicativo se da porque están
escritos en una lengua distinta a la que ellos los alumnos hablan
y los contenidos están descontextualizados de lo que viven coti-
dianamente. Estos aspectos se abordarán en el trabajo, prestando
1
En la comunidad se oferta desde prescolar hasta bachillerato, todas ellas y en pláticas con
profesores manifiestan que el problema común es que los alumnos no entienden lo que leen,
aunque efectivamente todas ellas tienen al español como medio de comunicación con los
alumnos tzotziles.
¿Cuál es el problema?
176
177
modelo intercultural bilingüe establece la necesidad de priorizar
las lenguas indígenas, la realidad es que si no aprendes el español
eres automáticamente marginado por la misma estructura social
que se ha generado en el país.
Los libros de texto, con los cuales los docentes trabajan, están
en español, pese a pertenecer al sistema de educación indígena.
Anteriormente con el plan 1993 se editaron algunos libros en Tzo-
tzil2, pero ya fueron descontinuados, infringiendo de este modo al
artículo segundo constitucional que establece que el país tiene su
sustento en sus pueblos originarios, que deben garantizar e incre-
mentar los niveles de escolaridad, a través de la educación bilingüe
e intercultural, hasta la conclusión de la educación básica.
Chiapas es considerado uno de los estados del sur de México
con los más altos índices de pobreza, que se acentúan especial-
mente en el tercio de la población indígena, donde las estrategias
de cobertura de educación básica se enfrentan con problemas de
formación de profesores, equipamiento educativo, asistencia esco-
lar, e incluso de dificultades en el manejo de lenguas indígenas.
(Escalona ,2005, p. 3)
En ese sentido la educación en Chiapas aparte de que carece
de los medios materiales necesarios, se encuentra descontextua-
lizada. Los niños no comprenden el español y los libros de texto
están enfocados a otros espacios de la realidad social, que se alejan
por mucho de las condiciones socioculturales que viven los niños
que asisten a la Primaria Belisario Domínguez Palencia.
Existe la idea generalizada y no solo por parte de los alumnos,
que aprender hablar correctamente el español conlleva a tener ma-
yor acceso a oportunidades que eleven la calidad de vida, en este
sentido es común escuchar en la escuela que los niños ya no quie-
ren hablar tzotzil o que simplemente ya se les olvidó. El problema
radica en la dificultad de entender las lecturas de los libros de texto
en español, dado que se encuentra en un idioma que no les es pro-
2
Sin embargo, estos libros de texto traducidos en tzotzil eran únicamente los de lectura, que
de hecho traen consigo relatos que son desconocidos por la mayoría de los alumnos.
los perros de agua, de la mujer que fue llevada por el tsosk´ab, con
el aburrimiento notorio cuando tratan de entender algo que no re-
presenta ningún significado dentro de su entorno cultural.
Efectivamente hay una negación de su lengua por la discri-
minación histórica y falta de oportunidades que representa el no
hablar, leer y comprender el español en este país. Pero, la realidad
es que, si bien hay una negación, también puede verse que existe
apego a la historia del pueblo, existe atención cuando los alferes
hablan, cuando los ancianos opinan, dicho interés sobrepasa las
barreras entre los pueblos y colonias, como las diferencias exis-
tentes de índole religiosa entre las diversas comunidades cercanas.
Ante la falta de Libros del Rincón y los pocos existentes en la
escuela no encuentran los niños materiales que les intereses leer,
los libros de texto no responden a las inquietudes. La propuesta
sería proveer a las escuelas en estas condiciones una pequeña bi-
blioteca con materiales en tzotzil o español adecuados así como
encontrar otra alternativa que incluya las aportaciones culturales
de la comunidad (los relatos de los abuelos, de los alfares, de los
padres, etcétera), mismos que favorezcan y motiven a los niños a
la lectura, dado que la incomprensión de conceptos no manejados
dentro de su vocabulario dificulta el proceso de la misma
Metodología
La metodología con la que se trabajó se fundamenta en la
propuesta de acción participativa de Peter Park y Daniel Aguirre
(2003), permitiendo una intervención con un taller denominado
“Jun loil batsimelel” (una historia de verdad).
Como punto de partida, lo primero que se realizó fue acer-
carse al contexto comunitario y visualizar aquellas cuestiones que
influyen en el proceso del aprendizaje de los niños tzotziles, que en
ocasiones no se toman en cuenta, cuestiones económicas, políticas
y sociales de cada contexto. En la comunidad puede notarse que
3
Alfares, son ancianos que dirigen a la comunidad, en cuestiones de acuerdos, desorden,
dando consejos o sugerencias.
179
educación y director de la escuela; adentrándose al grupo, puede
apreciarse en su interior, niños , inquietos, con ilusiones, curiosos,
pero que por otro lado sufren de problemas como el maltrato, vio-
lencia intrafamiliar, etcétera.
Derivado de explorar estos dos contextos (comunidad y escue-
la) puede apreciarse que la concepción que los niños tienen sobre
la lectura y la escritura en español es asimilada por ellos como
una tarea aburrida, lo que se hace que las tareas escolares sea una
actividad que no les agrada. El maestro de grupo se queja de esta
situación, porque los niños no entienden, porque los niños se des-
envuelven académicamente de acuerdo con las expectativas de los
planes y proyectos educativos.
La tercera fase de la investigación consistió en realizar visitas
a los hogares de los niños, para convivir con ellos, comer con ellos,
con el propósito de observar las formas de vida de estas familias,
donde puede apreciarse que algunas de ellas se caracterizan por
la amabilidad y la hospitalidad, sin embargo hay otras en las que
pueden verse indicios de agresión, maltrato familiar, etcétera; estas
visitas ayudaron a comprender los porqués del actuar de algunos
niños en el salón de clases, ya que indagar en las dinámicas fami-
liares ayudo a explicar comportamientos como: miedo, gritos, llan-
tos, llegadas tardes al salón, desmayos, ruidos en los estómagos,
sueño, entre otros.
Se observa entonces mediante este acercamiento diagnostico,
el contexto comunitario y contexto escolar, dando pautas para en-
contrar el problema y delimitar, los alcances del estudio. Posterior-
mente se decidió que además de los cuestionarios aplicados a los
padres de familia, profesores y alumnos, se utilizaría el diario de
campo y la observación constante en el grupo como instrumen-
tos metodológicos, dicha integración de documentos permitió mas
adelante tener una visión amplia de la problemática de interés.
de su contexto.
En una de las entrevistas realizada a un padre de familia, se
hace mención que los niños deben de ser enseñados en español
puesto que el tzotzil ya lo saben, queremos aprender la otra lengua
“el español” esto también es reflejado en lo niños, por ejemplo en
la sesión “4” del taller lecto-escritor donde un niño, Andrés4 men-
ciona que él quiere hablar español para ser maestro y ganar dinero,
el español es visto como una alternativa de economía y como un
proceso de formación, puesto que si no se aprende a hablar el es-
pañol las puertas de formación académica sería un obstáculo para
ellos.
Es un hecho que lo niños tzotziles de la comunidad Embar-
cadero Jericó tienen que aprender el español para su formación
escolar, sin embargo debido a que el nivel de comprensión del idio-
ma español es muy bajo, esto afecta directamente el rendimiento
académico, no existe comprensión de los contenidos impartidos
por parte del maestro, indicaciones de tarea, interpretación de los
libros de texto como español, matemáticas, historia, geografía etc.
Derivado de esto, es inexistente en el alumno el gusto por realizar
las tareas o actividades escolares.
Bilbao (2001) hace una reflexión sobre esta situación afirman-
do que para que algo produzca placer, es necesario que las activida-
des sean gratificantes, que tengan un sentido, y que entiendan para
que les servirá como individuo, y para que les servirá como grupo.
Antun kúsi la yal te maitro, mencionó un niño y Antonio quien in-
tenta hablar el español le explica y repite lo que yo había dicho, sin
embargo no queda aún entendible para los dos, Antonio pregunta
maitro no entiendo que es traducir y dramatizar5
La lectura es comprender
181
Para que un niño pueda comprender lo que esta leyendo es
necesario partir de lo que ya sabe, y no implementarle lecturas
que para el no tengan sentido, lecturas que no van más allá de solo
leer y no comprender lo que dice. Para darle sentido a lo que se
lee en necesario encontrar el camino que te guía a dicha práctica,
imponer, castigar con lecturas, obligar a leer aquello que no les
interesa es caer en un error, porque fuera de ello, los niños llegan
a ver la lectura como una actividad tediosa y jamás encontrarle un
significado, por eso el reto es hacer que la lectura de libros o cual-
quier documento escrito no lo vean como un sufrimiento sino goce
(Pennac 2006).
183
podían leer y comprender lo que decía el texto.
Conclusiones
Derivado del proceso investigativo y de la aplicación de la
metodología basada en la acción participativa, con el apoyo de la
observación directa e indirecta se tuvo la oportunidad de realizar
un proyecto de intervención “Jun Loil Bats´i Melel” (una historia de
verdad), esta actividad permitió reunir a padres, maestros y alum-
nos, donde se facilitaron las condiciones para interactuar de una
manera distinta a lo establecido por los programas de estudio, un
espacio en el que se priorizó la oralidad y las historias propias de la
comunidad. Una historia de verdad, es eso, un proyecto que reto-
mó la realidad de actores educativos que tienen mucho que contar,
las historias, los cuentos, las leyendas, las actividades son parte de
un conocimiento que no precisamente tiene que reflejar la estruc-
tura del pensamiento marcado por una visión eurocéntrica.
De acuerdo a lo anterior y los resultados que fueron sometidos
a un análisis crítico, se llegó mas que a conclusiones, a ciertas
reflexiones finales que son la pauta para futuros análisis:
El lenguaje oral es un instrumento de vital importancia, para
el aprendizaje de los niños, pueden comprenden mejor lo que leen,
escriben y explican, en este sentido es preciso mencionar que al
menos en esta comunidad y como en muchas otras comunidades
indígenas la forma de relacionarse es por medio del lenguaje oral,
las historias o leyendas no se ven reflejadas de manera escrita, sino
que se transmiten de generación en generación por medio de char-
las informales, pero con un sentido valioso.
El nivel de dominio del español en los niños es insuficiente
para fomentar la lectura tal como lo proponen los programas de
estudio a pesar de esto los niños intentan, se esfuerzan para com-
prender, pero su estructura cognitiva es distinta, es decir ellos no
leen y comprenden, al menos no lo hacen bajo el esquema impues-
to por la SEP, ellos tienen una forma distinta de hacerlo que por ser
a pesar de que esta condición es vital para cumplir con los linea-
mientos que marca el la educación intercultural bilingüe.
El gusto por la lectura no se consigue por el simple hecho de
introducirle al alumno mucho texto, de copiar, y memorizar, que si
bien no es una practica negativa, no es suficiente para que los ni-
ños comprendan lo que leen y reflexionen de lo escrito, tiene que
verse inmerso en el su mundo, su historia, su lengua, para que los
simples códigos pasen a ser parte de un algo que le sea significativo
e interesante.
Los niños se interesan por la lectura cuando sus padres y abue-
los les narran historias en su mismo nivel de lenguaje, facilitando la
escritura y comprensión de la misma, por esta razón es que Jun Loil
Bats´i melel, reunió a los actores de la escuela para que los resulta-
dos fueran los esperados.
Esto demuestra que para promover la lectoescritura no basta
un sistema de organización y un acervo amplio, más bien es nece-
saria una sensibilización para replantear la utilidad de la lectoescri-
tura en el entorno educativo y darle un valor significativo en toda la
comunidad estudiantil.
No hay un instructivo para el fomento a la lectura y escritura,
más bien es un proceso que se desarrolla en el transcurso de la
vida de cada individuo, tomando en cuenta el conocimiento previo,
cultura, lengua e intereses, de no ser así la lectoescritura no tendrá
ningún sentido, se estaría cometiendo un error como en el caso
de los alumnos del embarcadero Jericó, donde se visualiza clara-
mente que no existe una comprensión lectora, considerando que
el esquema sociolingüístico está alejado a lo que se plantean en los
libros de texto. Este hecho seguramente no está aislado de otras
comunidades con una lengua distinta al español, siendo esto una
posible explicación de los bajos resultados en comprensión lectora
aplicados por los distintos sistemas de evaluación implementados
por instituciones oficiales, sirva entonces para sentar las bases para
una investigación futura al respecto.
185
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187
Municipio de Cintalapa, Chiapas
RESUMEN: El presente artículo ofrece un acercamiento a la labor
educativa en comunidades de contexto indígena, ofrece una visión
en el uso de las Tecnologías de la Información y Comunicación
(TIC) para atender la diversidad cultural existente en el aula, con
la firme intención de generar ambientes interculturales que favo-
rezcan los procesos de enseñanza aprendizaje. Las actividades rea-
lizadas como proyecto de intervención, buscan demostrar que los
medios tecnológicos son una alternativa para generar aprendizaje,
además de ser medios para lograr una integración independiente-
mente de las diferencias culturales.
PALABRAS Clave: TIC, educación indígena, interculturalidad, inte-
gración educativa, procesos de enseñanza aprendizaje.
189
necesario nuestra intervención para que el uso de estas se haga con
responsabilidad.
Las TIC deben ser vistas como una herramienta de acceso al
conocimiento, además de aprovechar que las características del
equipo de cómputo y el internet son el dinamismo, la interactivi-
dad, el procesamiento y la oportunidad que tenemos de ser crea-
dores de artículos, videos, historias, y un sin fin de producciones
que contribuyan a la transmisión de la herencia cultural, la promo-
ción de nuevos entendimientos, la creación de modelos propios de
pensamiento, y que aseguren a las nuevas generaciones el acceso
a la información, al conocimiento actual, al desarrollo de compe-
tencias de mayor alcance y a la comunicación con otros grupos
culturales u otras institutos, además de ser una puerta abierta para
la comunicación con el mundo.
Las políticas educativas de hoy exige a través del acuerdo 592
(SEP 2011), asegurar que todos los estudiantes posean una cultu-
ra básica en relación al uso de las TIC, ser capaces de ampliar su
aprendizaje, tener igualdad de oportunidades para aprender y ser
ciudadanos bien informados capaces de entender las cuestiones
propias de una sociedad que avanza hacia la tecnología.
La interculturalidad no es nada nuevo, según Catherine Walsh
este término se ha usado desde hace más de 20 años, no obstan-
te, a pesar de ese tiempo. En América Latina este concepto tiene
su mayor referencia en el campo educativo específicamente en la
educación bilingüe e indígena. En sí, la interculturalidad intenta
romper con la historia hegemónica de una cultura dominante y
otras subordinadas y, de esa manera, reforzar las identidades tra-
dicionalmente excluidas para construir en la vida cotidiana, una
convivencia de respeto y de legitimidad entre todos los grupos de
la sociedad (Walsh, 2006).
Es importante retomar este concepto con un enfoque socio-
critico, no solo el de valorar la diversidad como una oportunidad de
enriquecimiento cultural, sino la importante necesidad de politizar
191
Preescolar Indígena, Primaria indígena y una escuela Telesecun-
daria que se fundó hace dos años, lo que significa que para tener
acceso a la educación media superior tienen que trasladarse a la
cabecera municipal, lo que ha generado un obstáculo para aquellos
que no cuentan con esas posibilidades.
La Escuela Primaria Bilingüe: Fray Servando Teresa de Mier,
con clave de centro de trabajo 07DPB2726D, se fundó en el año
2007, se encuentra a 700 metros de la entrada, que nos comunica
con la comunidad La Florida, cuenta con los servicios de luz eléc-
trica, agua potable e Internet. Tiene 3 salones en buen estado pues-
to que es de una construcción reciente, 2 salones más en estado
regular que fueron adaptados para la dirección y la sala de compu-
to, hay un aparato de sonido que se usa para los eventos culturales,
también cuenta con una cancha de básquetbol, 2 baños en con-
diciones regulares, tres cuartos para maestros y un patio extenso.
Esta comunidad escolar está conformada por tres maestros,
uno de ellos realiza la función de director con grupo, como en todo
ambiente escolar se presentan conflictos, resultado de intereses de
diversa índole que convergen en la escuela; en esta interacción se
presentan las culturas dominantes que pueden ser representadas
por el director -por su cargo- o los maestros -por ser mayoría- o
en su caso los estudiantes, o los padres de familia, incluso las au-
toridades educativas que realizan aportaciones dentro de la misma
cuidando los intereses de la comunidad en general.
Diagnostico pedagógico
Para Buisán (Citado por Molla, 2007), el diagnóstico pedagó-
gico es el conjunto de técnicas y actividades de medición e inter-
pretación cuya finalidad es conocer el estado de desarrollo del
estudiante. Nos facilita la identificación de las características per-
sonales que pueden influir en el progreso del alumnado y de sus
causas, tanto individualmente como en grupo. Consiste en saber
cómo se desarrolla, evoluciona el proceso de enseñanza-aprendi-
193
ca docente, la cual, las actitudes y posturas frente a los alumnos
conllevan a hacerlos dependientes e inseguros, es así como, poner
por delante nuestro bagaje cultural nos impide ver otras formas de
aprendizaje.
En las conversaciones que se establecen fuera del salón de cla-
ses, comentan que no les agrada mucho asistir a la escuela, aun no
entienden el porqué de la importancia de asistir a una institución
educativa. Sin embargo, cabe mencionar, muchos docentes tam-
poco han entendido su importancia, cayendo en la tan criticada
educación tradicional, en la transmisión de contenidos sin siquiera
saber cuáles son los objetivos fundamentales de los mismos. Pues
como lo menciona Piaget (1987), debe ser objetivo fundamental de
la educación la reconstrucción individual a partir de la reinvención
de la cultura (Pérez,1998).
Algunos trabajan mejor solos, les encanta que les cuenten his-
torias, en ocasiones cada grupo se reúne para platicar, acerca de las
actividades que realizan en el campo, potrero, casa y las cuestio-
nes que ocurren dentro de su comunidad, murmuran entre ellos y
cuando se les pregunta de qué hablan se avergüenzan y se quedan
callados, dejando claro que tienen la preconcepción de que el pro-
fesor es una autoridad a quien tienen que guardar sumo “respeto”,
aunque en realidad tienen que ver con temerle, esto es una desven-
taja porque los limita a mostrarse tal cual son.
Existen muchas diferencias, incluso prevalece la discrimina-
ción entre ellos mismos, desde las formas de hablar, vestir, por la
situación económica o cargos familiares. Los hijos de los de los
ejidatarios se sienten con más derechos y se hace notar, no única-
mente en el salón, si no fuera de él, pues recordemos que la insti-
tución educativa y la sociedad son pleno reflejo de las situaciones
que se viven en el diario acontecer.
Con respecto a las materias, están acostumbrados a trabajar
con los libros de texto que proporciona la secretaria de educación,
incluso realizan las actividades en casa sin que se les dé indica-
ciones, las materias que más les gustan son matemáticas, español
Con esta teoría podemos constatar que los alumnos que re-
quieren de mayor tiempo para organizar, procesar y/o generar res-
puestas adaptativas, esto no tiene que ver con la falta de inteligen-
cia, sino que cada niño tiene una forma distinta de aprender. Los
niños del grupo, se motivan mediante las actividades que son nue-
vas que atiendan a sus intereses y necesidades.
Con respecto a sus interés queremos exponer una donación
de tabletas que realizó el Sistema Nacional para el Desarrollo Inte-
gral de la Familia (DIF) municipal, para los alumnos de sexto gra-
do, las cuales han sido un tema de conversación en clases, incluso
han interferido en las actividades que realizamos dentro de clases,
pues, los alumnos se la pasan buscando la mejor ubicación que
detecte la señal del internet, o indagando las aplicaciones de las
mismas, el director ha sugerido que no lleven las tabletas a la es-
195
En este sentido se logra visualizar que los alumnos tienen di-
ferencias personales de acuerdo a sus valores culturales, pero con-
cuerdan en la forma en cómo les gustaría aprender. Lo anterior
se visibiliza de la observación del grupo escolar con alumnos del
sexto grado y del contexto donde se desarrollan. Existen relaciones
conflictivas, degradantes y discriminatorias, que se dan entre los
grupos indígenas y no indígenas dentro de la comunidad y del con-
texto escolar, todo esto repercute en la conducta de los niños, exis-
te una lucha constante por mostrar quienes son mejores que otros.
197
La indicación para esta actividad fue que ellos terminaran el
final de este cuento, para lo cual teníamos que formar equipos,
entonces a través de unas tarjetas que contenían las partes de una
computadora, se otorgó una a cada uno y sin ellos saber para qué
era comenzamos a reconocer las partes principales que conforman
un equipo de cómputo, como lo son: CPU, monitor, teclado y el
mouse, pedimos a un niño que pasara al frente y mostrara a sus
compañeros el dibujo que le tocó, era un teclado, luego se agre-
garon las otras partes y finalmente se les explicó que ese era el
equipo número uno, de esta forma se armaron los otros equipos.
Los niños se mostraban bastante emocionados, cada equipo
inició con el diálogo de cómo les gustaría que fuera la vida de porfi-
ria, iniciaron la redacción usando el procesador de textos, cada vez
el interés era aún mayor, incluso cuando llegó la hora de receso,
varios pidieron quedarse un rato más, argumentando que no tenían
sed ni ganas de jugar, por lo que les dije que no había prisa, que
tomaran su receso porque era necesario. Y que aún tenían tiempo
para continuar con la historia que estaban trabajando.
Nos sorprendió ver como en su mayoría hacia aportes para la
historia, en un principio creímos que trabajar en equipo solo con
una computadora sería un obstáculo, sin embargo, supieron orga-
nizarse, unos utilizaron papel y lápiz para escribir las ideas prin-
cipales, otros hicieron dibujos para poder agregarlo a la historia,
empezaron a contar o relacionar relatos que sus padres o abuelos
les habían contado como era la escuela anteriormente.
Finalmente concluyeron el final de la historia de Porfiria, ha-
ciendo más de lo que se había solicitado, dentro de la planeación
no se había considerado agregar dibujos cosa que algunos equipos
hicieron, usando el programa Power point, posteriormente publica-
ron su presentación en el blog creado para que a través de este pu-
dieran compartir experiencias vividas o dificultades que se les ha-
yan presentado. Se recomendó que todos hicieran un comentario
con respecto al trabajo de cada uno de los equipos, identificamos
que muchos tienen muy buenas ideas, pero les es muy difícil decir-
los lugares que querían visitar, iniciamos todos revisando los ma-
pas unos en la computadora otros retomaron el mapamundi, se les
explicó la herramienta google maps, quedando muy sorprendidos,
se dieron a la tarea de indagar que lugares eran los más reconoci-
dos en todo el mundo, se llevaron más del tiempo estimado para
crear el itinerario para su viaje virtual.
Un equipo tuvo detalles ya que se les dificultó coordinarse
para buscar los lugares a visitar. En un momento se molestaron y
dijeron que ya no querían trabajar. Se les explicó que estaba bien,
que estaban cansados y que la planeación de viajes a veces suele
ser complicada, sin embargo, también se les dijo que en cuanto
estuvieran solos en otro lugar deberían buscar la estrategia para
poder coordinarse y apoyarse como compañeros para continuar
con su viaje. Nuevamente se sintieron motivados y sonrientes con-
tinuaron con sus planes.
Casi todos los equipos descargaron una imagen del mapa-
mundi el cual nos pidieron autorización para poder hacer una im-
presión que les serviría para ir marcando los países de su interés.
Empezaron a discutir en que querían trasladarse, incluso se escu-
chaban risas y bromas con respecto al tema, diciendo que saliendo
tendrían que preparar su equipaje, llevando ropa adecuada para
cada uno de los lugares a visitar.
Por momentos hubo pequeñas discusiones entre equipos por-
que se quejaban de que los otros veían lo que estaban haciendo y
no querían que se repitieran los lugares. Se intervino diciendo que
no importaba si todos querían ir al mismo lugar, hay tantos viajeros
que probablemente estén interesados en el mismo lugar y nosotros
no podemos prohibir que vayan, que existe libertad de elección so-
bre lo que queremos hacer o a dónde queremos ir, no convencidos
del todo continuaron trabajando.
Mientras tanto, otros niños platicaban hasta de películas que
habían visto en casa, uno de ellos comentó busquemos un lugar que
se llama Kremlin, en ese lugar hay muchas guerras, pero no sabían
en qué país se encontraba y se metieron a navegar y encontraron
199
ciaran, con esto podemos constatar que las TIC, como método de
integración pueden ser un medio para lograr relacionar o superar
las diferencias existentes entre los alumnos al interior del salón de
clases.
Las siguientes actividades se centraron también en el uso co-
lectivo de las herramientas digitales con las que se contaban, la
experiencia motivó a los niños a ayudarse mutuamente, cuando a
uno se le dificultaba comprender algo, los demás le ayudaban, al
principio temían a no saberlas utilizar, esto da pauta para darnos
cuenta que el desarrollo tecnológico es una manera de poder co-
nocernos e interactuar sin prejuicios o estereotipos en pro de la
integración social del alumnado, llegando también a aplicarse en
actividades de la vida diaria, esta es una manera de ejercer la do-
cencia, una que permita el aprendizaje colaborativo de los alumnos
desde sus distintas visiones culturales (Correa, 2008).
Reflexiones finales
Es una realidad que niños y jóvenes mexicanos no logran la
excelencia académica como se ha pretendido; ya que los diseños
de los planes y programas de estudio que la Secretaría de Educa-
ción Pública, han llevado a olvidar otras temáticas que se omiten
y que son parte de las voces de los estudiantes, el propósito de
la educación radica en lograr la excelencia educativa que ayude a
conformar una sociedad equitativa y esto se logra haciendo lazos
de comprensión hacia las diversas realidades contextuales y las ne-
cesidades del alumno.
En este proyecto se consideró abordar el uso de las TIC como
herramientas para generar la educación intercultural, pero para
eso se requiere sensibilizar al docente, a los padres de familia, y a
los estudiantes, motivarlos a concientizar y rectificar las actitudes
que obstaculizan la convivencia y el alcance de la paz para todos,
en pequeños espacios; como es la escuela y la comunidad.
Tal vez suene como una utopía abordar temas con respecto a
201
Actualmente vivimos en una era donde los avances científicos
y tecnológicos se dan rápidamente, los cuales han sido la base y
la diferencia entre nuestro país y los países más desarrollados. Sin
embargo, tenemos fortalezas que no hemos aplicado al cien por
ciento como lo son la creatividad, la iniciativa y el espíritu empren-
dedor.
El uso de TIC puede ser realmente significativo y motivante
si son utilizadas con metodologías variadas e innovadoras. Sirven
para estimular el desarrollo de aprendizajes de alto nivel cognitivo,
las cuales se vuelven invisibles para el profesor y el estudiante si
se apropian en un marco situado en el aprendizaje. Esto puede evi-
denciarse en los siguientes puntos: Usar las tecnologías para plani-
ficar estrategias con el fin de facilitar la construcción del aprender;
para apoyar las clases, como parte del currículum o para aprender
el contenido de una disciplina.
Definirnos como país multicultural significa, entre otros as-
pectos, hacernos cargo del fortalecimiento de las lenguas y de las
prácticas culturales que nos hacen ser tan diversos, pero también
implica una educación que, frente a toda la población, trabaje el
conocimiento, la valoración y el aprecio de la diversidad cultural;
que combata el racismo que se encuentra en la base de enormes
injusticias. Es decir, que lo anterior vaya construyendo una socie-
dad en la que las asimetrías sociales y económicas entre población
indígena y no indígena se vayan desarmando y las relaciones entre
los miembros de las diferentes culturas se puedan ir dando desde
posiciones de igualdad, se fundamenten en el respeto y resulten
mutuamente enriquecedoras. Por ello tenemos que
La discriminación hacia los indígenas expresa finalmente un cier-
to rechazo de nuestra ascendencia india, no solo por considerarla
pobre, sucia o devaluada, sino también por arrastrar de generación
en generación la herencia de la negación que nos vincula a ellos
(Gerrero, 2003)
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nidad.
1
Según la Academia Mexicana de la Lengua. Hasta hace unos años las formas preferentes
eran tzeltal y tzotzil, aunque eran correctas y posibles las formas tseltal y tsotsil. En la actua-
lidad, tseltal y tsotsil se consideran como formas únicas para nombrar estas lenguas, ya que
así se le da mayor uniformidad a su ortografía.
El indígena en la educación:
construcciones identitarias desde una perspectiva
205
colonial
RESUMEN: El presente refiere a la denominación que se ha otor-
gado a los pueblos indígenas o pueblos originarios desde una
perspectiva colonial. Considérese que, pese al reconocimiento
constitucional existente no se ha dado el autorreconocimiento o
autonombramiento desde los mismos pueblos, por el contrario, se
reafirma las políticas de identificación desde la educación oficial
que se dice tener un enfoque intercultural. Por tal razón, muestra
un análisis desde algunos resultados de un proceso investigativo
realizado en escuelas de contextos “indígenas”
PALABRAS clave: Pueblos indígenas, pueblos originarios, cultura,
identidad, educación.
207
sé, pero así esta desde hace mucho tiempo, soy tseltal… la verdad no
sé pero así es así estamos reconocidos, desde que estudié hasta aho-
ra sé que así es, pero como o de dónde surgió pues no sé (Entrevista
realizada a profesor él 10/12/2018).
209
radas desde el plano educativo
Trabajos recientes muestran precisamente que la educación
que imparte el estado está enfocada a forjar una identidad nacional
a costa del no reconocimiento a la diversidad (Urdapilleta 2015,
González 2015, Cruz 2010, Bastian 2011, León, 2008), pese a que
dentro de los programas de estudios se retomen el respeto a la di-
versidad cultural y el impulso a la interculturalidad (Guzmán, 2012).
De la misma manera, como resultado del análisis y de charlas
sostenidas con profesores y padres de familia del sistema de edu-
cación básica, se ha podido visualizar que la educación “indígena”
(o quizá educación para “indígenas”), únicamente se establece en
prescolar y primaria; en secundarias aun cuando se encuentren en
zonas marcadas como “indígenas”, ya no existe tal educación bilin-
güe, como si bastaran nueve años de educación institucional para
integrarlos al estado nacional mediante programas que reconocen
la diversidad (Zárate 2018), pero nombran y significan a estos gru-
pos culturales desde una postura cultural propia (nombrar y aten-
der la diversidad en la educación desde una sola visión cultural), a
la vez que se plantean estrategias didácticas que no responden al
aprendizaje contextualizado que van moldeando la identidad del
alumno, llegando a una fragmentación identitaria promovida des-
de diferentes espacios públicos, específicamente la escuela (Cruz,
2010).4
En la escuela se refuerza la identidad del alumno, se les enseña en
su lengua materna, como tienen que escribirlo, la historia de su cul-
tura, sus historias, leyendas y todo, se les apoya a que valoren y re-
conozcan su cultura, esa es la importancia de la educación indígena
porque se enfoca a una educación bilingüe sustentado en recono-
cimiento, la escuela tiene un papel importante en la formación del
alumno, en este caso el alumno indígena tendría que ser una perso-
4
Además de lo comentado, el autor plantea que en la actualidad muchos pretenden decir
qué son o quiénes son, donde se encuentran y que hacen los “pueblos indígenas” desde una
visión exógena.
211
modifican en torno al espacio social e histórico (Gutiérrez, 2005).
Aunque como ya se mencionó en párrafos anteriores, desde la co-
lonialidad, son las estructuras impulsadas por el grupo que ostenta
el poder, las que determinan la clasificación y el nombramiento a
los grupos culturales minoritarios. Para esto, es importante consi-
derar los tres tipos de identidad que acertadamente Castells (1994)
señala:
• Identidad legitimadora: está que proviene directamente del
estado y que las instituciones como la escuela. Será de vital
importancia para entender el papel que juega la escuela en el
proceso de construcción identitaria de los pueblos indígenas.
• Identidad de resistencia: es una que permite visualizar desde
los colectivos que genera una auto identificación que permite
resistir frente a lo que sería la asimilación de un sistema en
el que su situación se encuentra subordinada. Esta parte se
da retomada para ver la probable y autodenominación de los
pueblos “indígenas” respecto a su identidad.
• Identidad proyecto: a partir de la autoidentificación con ma-
teriales culturales históricos y territoriales.
La colonialidad entiéndase que tiene sus inicios desde 1492
con el supuesto descubrimiento e invención de América, marcada
por la modernidad que da paso al posicionamiento hegemónico
de Europa. Ahora bien, la colonialidad se ve reproducida desde la
perspectiva de Mignolo (2010), se ve reproducida en ámbitos eco-
nómicos, políticos, sociales y epistémico. Es decir, si se ostenta el
poder y se dominan la estructura, explotan, dominan, señalan, de-
terminan roles y nombran a los otros de acuerdo a los intereses
que permitan mantener el estatus hegemónico.
Con lo anterior, el indígena ya mencionado como una catego-
ría colonial, un nombramiento del cual nunca fueron consultados,
se refleja como el otro en una estructura inferior y que pese al
reconocimiento a la diversidad y el pequeño traspaso academicista
al concepto de pueblos originarios no se les considera para formar
5
A manera de reflexión y en charlas sustentadas, se argumenta que los mismos grupos
“indígenas” se asumen como tal, y que aquellos que se dicen sentirse orgullosos de ser parte
de un “pueblo originario” se encuentran reivindicando su cultura, lo que no se analiza es que
en muchos casos se emplea como estrategia o como una forma de acceso de derechos ya
reconocidos constitucionalmente para un grupo, pero que no precisamente tiene que ser el
que ellos eligieron o que los represente significativamente.
213
Pues es parte de la identidad, todos tenemos una y realmente sería
interesante que lleguemos a tener un México donde podamos ser
como Alemania, donde no exista la necesidad como las que se ven
en las comunidades, hay una serie de grupos indígenas en México y
pues si se encuentran con un rezago educativo bastante fuerte, la im-
portancia de la educación bilingüe es que ellos se abran a la oportu-
nidad de conocer y progresar para llegar a ser alguien en la vida, cla-
ro que sin perder su propia identidad que es necesario preservarla,
los mismos programas nos marcan nos enseñan las historias de los
pueblos, de los pueblos originarios de nuestro país y de los que exis-
ten en América desde antes de la llegada de los españoles(Entrevista
a profesor el 13/12/2018).
215
ciales, tiene que entenderse como una construcción de y desde los
grupos minoritarios y subalternos, que han sufrido una historia de
sometimiento (Walsh, 2007). Esta parte tiene que ver precisamente
con lo que Quijano (2000) al hablar sobre la identidad o las formas
de clasificación desde la colonialidad del poder, puntualizando que
las resistencias surgidas desde los grupos sometidos son los que
podrían dar paso al resurgimiento y verdadero nombramiento de
los pueblos.
Quizá la interculturalidad sea un concepto que esté de moda y
por muchos ya bastante trillado, pero lo que sí es cierto es que este
concepto es cada día más empleado en discursos oficiales de los
que rigen la nación mexicana y el sistema educativo. Por ello la im-
portancia aun de trabajos, que no se dejen llevar por los discursos
románticos de la interculturalidad, se necesita ser serios cuestiona-
dores ante éste y ante la estructura social dominante.
Ahora bien, la interculturalidad crítica aterrizada en educa-
ción conlleva a generar una pedagogía distinta que permita cons-
truir nuevos procesos y condiciones, no limitándose únicamente al
aula, la escuela o el sistema educativo, sino desde las realidades, de
la propia gente que se encuentran luchando día a día dentro de esta
estructura del Estado.
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219
Derecho en la UABC Valle Dorado.
221
propósito de dimensionar si estos alumnos se ven a sí mismos como
actores tendientes al empoderamiento y la acción política social.
El Capital Social se vincula, en este sentido, con la percepción
de valores sociales y se considera que su existencia es fundamental
para la construcción de la ciudadanía a partir de la sociedad civil.
Es así como, derivada del sentido de justicia y de pertenencia a la
Universidad, la ciudadanía se empodera y hace suyas las manifes-
taciones sociales que fomentan sociedades democráticas, partici-
pativas y complejas.
Este estudio se realizó a los estudiantes de Derecho por consi-
derarse la matricula educativa más extensa dentro de este campus;
además, se considera a los estudiantes de esta licenciatura como
críticos, participativos y políticamente interesados en su entorno
y en el cambio social, aunado a que la Universidad Pública es un
centro educativo que fomenta, a través de su formación, el análi-
sis, la discusión y la generación de propuestas para una sociedad
participativa.
Desde esta perspectiva, se infiere entonces que los centros edu-
cativos son los espacios en los que se generan habilidades, prácticas
y planteamientos necesarios para impulsar el capital social, por lo
que del análisis de la situación actual que perciben los alumnos de
la confianza, el empoderamiento y la identidad pueden plantearse
competencias profesionales que atiendan el Capital Social.
Esta investigación fue lograda gracias al apoyo otorgado por
la Secretaría de Educación Pública a través del Programa de Incor-
poración a los Nuevos Profesores de Tiempo Completo durante el
periodo 2016/2-2017-2.
Antecedentes
Las administraciones públicas locales, tanto del estado de Baja
California como del municipio de Ensenada, cuentan con portales
del instituto de acceso a la información gubernamental en los que
refiere la atención a las solicitudes emitidas por la ciudadanía a te-
Soberano y De las Fuentes. El Capital Social de los estudiantes de Derecho... pp. 219-245
mas específicos; como ejemplo, el estado manifiesta haber atendi-
do durante el ejercicio 2015 un total de 4,188 solicitudes, habiendo
obtenido de este universo “respuesta afirmativa” 3,615 (cfr. http://
om.bajacalifornia.gob.mx/uct/estadisticas/index.html) y teniendo
el mayor número de consultas el apartado correspondiente a se-
guridad pública.
Sin embargo, tal como se desprende de la revisión del portal en
222
223
pública por los alumnos de Derecho? ¿Se consideran los alumnos
de Derecho actores sociales con capacidad de generar una ciudada-
nía representativa y orientadora de la política pública regional? ¿La
legislación local permite la adopción de esquemas de participación
ciudadana tendiente a la construcción de ciudadanía?
Así mismo, se considera a la Universidad como ese espacio de
conocimiento, generación y desarrollo de competencias, y se vi-
sualiza sobre todo a la Universidad Pública como el espacio idóneo
para el análisis crítico y la propuesta de acciones encaminadas a la
creación de una ciudadanía participativa.
Soberano y De las Fuentes. El Capital Social de los estudiantes de Derecho... pp. 219-245
Para Durston (1999), el Capital Social se refiere al contenido de
ciertas relaciones sociales expresadas en actos de confianza, reci-
procidad y cooperación, que proveen mayores beneficios a quienes
lo poseen; interesa saber que desde su concepción, el Capital Social
se activa solamente en tiempos de necesidad, riesgo u oportuni-
dad. Así mismo reconoce su naturaleza dinámica cuando se rela-
ciona con proyectos particulares que requieren de la movilización
de diferentes aliados.
224
225
tivos tendientes a la formación y referencia cultural, las relaciones
sociales e individuales se configuran como relevantes, por lo que
se considera pertinente incluirlo como variable explicativa de los
procesos socioeconómicos y culturales.
El énfasis en la identidad social importa por los niveles de co-
hesión social que generan las sociedades que lo comparten: hay
mayores compromisos comunes y la solidaridad se vive más es-
pontáneamente lográndose objetivos comunes y mayor pertenen-
cia a ellos.
Así entonces definimos al capital social como las relaciones
sociales de participación, cooperación y asociación que con base
en la confianza y la reciprocidad, permiten a las personas obtener
beneficios y recursos, y que se observan en redes de amistades o
las de conveniencia, es decir, aquellas que orientan el ser, vivir y
sentir de los jóvenes en el espacio universitario, considerándose
entonces también la importancia con la que cuenta la Universidad
como espacio de intercambio, de promoción y de consolidación
de estas redes que generan entre otras cosas a los ciudadanos que
toman las decisiones políticas, económicas, culturales, sociales y
de determinación del futuro de una región.
Estas relaciones de incluyen bienes materiales o económicos,
información, contactos, relaciones, etc., lo que para el desarrollo
de la identidad personal, común y regional tiene implicaciones y
fortalezas intrínsecas de tal naturaleza que permiten el desarrollo
en el seno de la construcción de una ciudadanía organizada y par-
ticipativa.
El Banco Mundial (2002) considerando las múltiples posibili-
dades para un efectivo desarrollo (cfr Prólogo de Measuring capital
social) ha creado entre sus herramientas de medición específicas
para el capital social: el cuestionario denominado: Cuestionario
integrado de medición de capital social (CIMCS) que pretende ge-
nerar datos cuantitativos observando la existencia de seis distintas
dimensiones:
Soberano y De las Fuentes. El Capital Social de los estudiantes de Derecho... pp. 219-245
Gráfico 1. Dimensiones de Capital social
227
coincidencia en las percepciones existentes entre los individuos que
pertenecen a un mismo grupo, en la que la intensidad y la orienta-
ción común son los ejes sobre los que se plantea esta integración.
Un punto trascendental para el análisis de la cohesión social
tiene que ver con el bienestar común, con la orientación que da la
sociedad, el colectivo organizado, hacia la consecución de acciones
que permitirán obtener el bienestar de todos los miembros que la
integran; es un concepto que enlaza su connotación política, im-
plica el ejercicio de una democracia entendida y vivida por los ciu-
dadanos, con aspectos jurídicos básicos elementarles como el bien
común y aspectos económicos propios del “Estado de bienestar”.
Durkheim (1982) entiende la cohesión social como un atribu-
to duradero y estable entre la ciudadanía y entre la ciudadanía y las
instituciones, distinguiendo como sociedades modernas a las que
cuentan con transformaciones derivadas del crecimiento simultá-
neo del tamaño y la densidad de las sociedades, a lo que Parsons
(1999) agrega la importancia de la definición de los roles y activida-
des otorgadas dentro de la estructura social que se trate.
Desde la perspectiva de la política pública, el concepto “Cohe-
sión social” ha sido abordado a profundidad en al menos tres es-
cenarios sobresalientes para esta investigación y para las políticas
públicas nacionales: La comunidad Europea, La Organización para
la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE)yla Comisión para
América Latina y el Caribe (CEPAL).
En el caso de Europa, el interés por la cohesión social se ma-
terializó sobre todo en el Tratado de Maastricht en 1993 con la
creación del Fondo de Cohesión Social creado para la reducción de
las disparidades económicas de los países menos ricos intentando
lograr un desarrollo más equilibrado y, por ende, generando políti-
cas públicas tendientes a abatir esa desigualdad; sin embargo, nos
referimos en específico al impacto que en la región se tiene desde
la celebración de la Cumbre de Jefes de Estado miembros de Amé-
rica Latina y la Unión Europea (ALC-UE) celebrada en la ciudad de
Guadalajara, Jalisco en el 2005, en la cual se asentaron las bases del
Soberano y De las Fuentes. El Capital Social de los estudiantes de Derecho... pp. 219-245
programa EUROsociAL, en la que se considera este elemento como
prioritario para las bases del desarrollo birregional.
El programa para la cohesión social en América Latina, depen-
diente de la Unión Europea define a la cohesión social como:
Un atributo de las sociedades que implica la igualdad de oportunida-
des para que la población pueda ejercer sus derechos fundamentales
y asegurar su bienestar, sin discriminación de ningún tipo y aten-
228
229
Tendrán la facultad y la responsabilidad de gobernarse a sí misas;
realizarán sus fines de educar, investigar y difundir la cultura de
acuerdo con los principios de este artículo, respetando la libertad de
cátedra e investigación y de libre examen y discusión de las ideas;
determinarán sus planes y programas; fijarán los términos de ingre-
so, promoción y permanencia de su personal académico y admi-
nistrarán su patrimonio (Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, 2017).
Soberano y De las Fuentes. El Capital Social de los estudiantes de Derecho... pp. 219-245
oportunos a su entorno a través de soluciones sociales que nece-
sariamente requieren de esfuerzos conjuntos, de construcciones
paralelas y de cohesión y capital social.
Como es sabido, al interior de la Administración Pública Fede-
ral la competencia para atender los temas de Educación correspon-
de a la Secretaría así denominada, es decir, la Secretaría de Educa-
ción Pública y, conforme también a la lógica centralizada que priva
230
231
los que los países deben acudir a instancias internacionales que les
otorguen los apoyos y por ende los lineamientos necesarios para
afrontar las distintas crisis que han sucedido.
Soberano y De las Fuentes. El Capital Social de los estudiantes de Derecho... pp. 219-245
de la sociedad; III. Difundir las experiencias y los conocimientos so-
bre el proceso de transformación social obtenidos mediante el ser-
vicio social, a las comunidades involucradas y al público en general,
y IV. Fortalecer la misión institucional de la Universidad”.
Metodología
Considerando las características de la población estudiantil se-
232
Tamaño de la muestra
La población de estudiantes de Derecho de la Facultad de Cien-
cias Administrativas y Sociales del campus Valle Dorado de la UABC
es de 1,021 alumnos, a partir de este número se calculó la muestra,
sin dejar de considerar los aspectos que la determinan:
1. Error permitido, muestral o de estimación (indica precisión);
2. Nivel de confianza estimado;
3. Carácter infinito de la población (más de 100,000 habitantes o
finito (menos de 100,000 habitantes);
4. Es necesario aclarar que el error permitido y el nivel de con-
fianza no se complementan, es decir puedo tener un nivel de
confianza del 95% y un error permitido del 1%,5% o 10%. El
5% de error es el ideal, pero requiere tamaños muestrales bas-
tante elevados, por lo que considerar una precisión del 10%
puede ser suficiente en este caso. Otro aspecto que puede ha-
cer variar su tamaño de muestra es el nivel de confianza, en
ambos casos no se sugieren valores superiores a 10% de error
ni menores a 90% de confianza. De acuerdo a la fórmula em-
pleada para poblaciones finitas, se tienen la siguiente
233
los alumnos de la UABC en la licenciatura en Derecho de la FCAyS
Campus Valle Dorado de a UABC, se implementaron 111 encuestas
basadas en el CIMCS (Banco Mundial, 2002) a efecto de conocer si
estos alumnos tienen, entre otras, habilidades generadoras de capi-
tal social o sienten el compromiso de beneficio a la comunidad, lo
que indica la formación de una conciencia ciudadana participativa,
las cuales se vinculan tanto al actuar institucional al exigírseles el
cumplimiento de servicios comunitarios y, a la vez, al otorgar una
formación académica pertinente a la ciudadanización; estas capa-
cidades se detectan a través de las dimensiones acción colectiva y
cooperación y cohesión social e inclusión.
Se seleccionó a los estudiantes de la licenciatura en Derecho
por ser la matrícula más representativa de la Facultad de Ciencias
Administrativas y Sociales de Ensenada, además de que se trata de
alumnos que por su vocación y formación tienden a conocer y de-
fender los Derechos y la ciudadanía.
El estudio fue realizado durante los meses de octubre y no-
viembre de 2016, dentro del período escolar 2016-2 del calendario
escolar universitario.
Análisis de resultados
De un total de 111 alumnos entrevistados 49 fueron hombres y
62 mujeres, 85 de los cuales son del sistema escolarizado y 26 del
semiescolarizado, distribuidos de la siguiente manera (véase Gráfi-
cos 1 y 2).
La mayoría de los alumnos viven con sus padres; sin embargo,
dentro de la modalidad semiescolarizada, en la que estudian adul-
tos que trabajan o incluso cuentan ya con otra carrera profesional,
también hay quienes tienen casa propia (Véase gráfico 3), este in-
dicador es importante para la investigación porque dentro de las
Dimensiones de Capital Social el empoderamiento, la participación
ciudadana y la información y toma de decisiones se tienen con re-
lación al patrimonio con el que cuentan los entrevistados.
Soberano y De las Fuentes. El Capital Social de los estudiantes de Derecho... pp. 219-245
Gráficos 1 y 2: Género y modalidad de entrevistados.
234
235
siendo las principales las orientadas hacia la celebración del día del
niño, el regalar juguetes en navidad a niños de primarias rurales, la
rehabilitación de parques y la limpieza de la universidad.
Con relación a la dimensión Grupos y Redes prevista en el CI-
MCS, los estudiantes seleccionados manifestaron que pertenecen
a algún grupo social 26 de ellos, entendiendo como grupo social
aquella reunión de personas con actividades comunes no obligato-
rias, relacionadas con amistades, deportivas, artísticas y religiosas
(Véase Gráfico 5).
Gráfico 5. Pertenencia a grupos.
Soberano y De las Fuentes. El Capital Social de los estudiantes de Derecho... pp. 219-245
Gráfico 6. Obtención de información de las acciones de gobierno
236
237
Fuente: Elaboración propia a partir del CIMCS
Soberano y De las Fuentes. El Capital Social de los estudiantes de Derecho... pp. 219-245
Sin embargo en los rubros, participación en una campaña de
elecciones o un partido político y en el rubro de votación en las
elecciones, estos porcentajes incrementaron, siendo la participa-
ción en el primer rubro del 26.13% y en el segundo del 71.17%
(Véase gráficos 10 y 11).
Gráficos 10 y 11: Participación en una campaña/ votación en elecciones
238
239
Fuente: Elaboración propia a partir del CIMCS
de 2016 y 24 en 2015 (Cruz Aguirre, 2017); sin embargo, en esta
misma nota se hace constar que los vecinos están organizándose
en su colonia, encontrándose hasta el momento 18 redes ciudada-
nas que han contratado seguridad privada o que han puesto cáma-
ras o plumas para controlar o incluso impedir el paso a quienes no
conocen.
Gráfico 13: Percepción de incremento de la violencia en la comunidad
Soberano y De las Fuentes. El Capital Social de los estudiantes de Derecho... pp. 219-245
rencias que existen son causantes de división, el 52.25% manifies-
tan que ni mucho ni poco, seguidos por el 21.62 que indican que es
poca esta división derivada de las diferencias.
Con relación a la confianza, el 63% de los entrevistados mani-
festaron estar muy de acuerdo en confiar en la comunidad, el 32%
estuvo en desacuerdo con la afirmación y un 5% estuvo muy en
desacuerdo con ella.
240
241
Fuente: Elaboración propia a partir del CIMCS
Gráfico 16. Percepción de mejora en la comunidad a partir del trabajo propio
Conclusiones
Es evidente que el Capital Social es uno de los elementos pre-
ponderantes para la construcción de sociedades más participati-
vas, confiables y cohesionadas, con individuos que a partir de las
experiencias de apropiación y resolución de los problemas propios
de la comunidad y con dimensiones como la cohesión social vayan
construyendo y resolviendo las acciones ciudadana que, a la larga,
derivarán en sociedades más plurales y tomadoras de decisiones.
Soberano y De las Fuentes. El Capital Social de los estudiantes de Derecho... pp. 219-245
La Universidad es, de igual forma, el espacio educativo por
excelencia en el que los estudiantes conocen e inician estas vías
de participación que,a la postre, desembocan en acciones de bene-
ficio comunitario, y en el caso específico de la Autónoma de Baja
California, éste actuar no es voluntario, es decir, se trata de una
acción prevista desde el Plan de Desarrollo Institucional hasta el
Reglamento del Servicio Social y, por ende, se considera un requi-
242
243
se refuerza también en la percepción del incremento de la violencia
en los últimos años en los que tanto la ciudad como la población
han crecido; sin embargo, también es cierto que ante este incre-
mento en la violencia la comunidad no espera que la resolución del
problema sea sólo parte del gobierno, ya que se ha involucrado en
redes como vecinos vigilantes o ha adquirido equipo o contratado
servicios para la vigilancia y cuidado de su entorno.
Para hablar de una sociedad ciudadanizada, el hecho de que el
56.76% de los entrevistados consideren que pueden hacer algo por
mejorar la calidad de vida es representativo; sobre todo si en la ex-
periencia diaria consta que no sólo eligen a sus gobernantes, sino
que ante las situaciones de ineficiencia se organizan para obtener
resultados más satisfactorios; sin embargo, este índice de respuesta
puede incrementarse en la medida que al interior de la universidad
de abone a una participación más real y comprometida con la co-
munidad, se entienda la identidad universitaria como resultado de
la formación integral de los valores y el servicio que debe retribuir-
se a la sociedad y se fomenten más programas y estímulos hacia la
consecución de acciones sociales, lo que de acuerdo con la función
universal, integral, ética y formativa de la Universidad Autónoma
de Baja California debe ser mayor.
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Soberano y De las Fuentes. El Capital Social de los estudiantes de Derecho... pp. 219-245
Adriana Saldaña Ramírez
247
Morelos
RESUMEN: En este artículo se analizan las relaciones establecidas
entre población oriunda mestiza e inmigrantes indígenas en la zona
de Tenextepango, en el oriente de Morelos. La instalación de miles
de trabajadores indígenas y mestizos para desarrollar las cosechas
de productos agrícolas, ha derivado en el surgimiento de nuevas
localidades. Grupos diferenciados en los planos económico, social
y cultural componen a la sociedad tenextepanguense, que se ca-
racteriza por su segmentación y jerarquización, donde los mestizos
oriundos ocupan la escala más alta, mientras que los indígenas in-
migrantes las más bajas. Cuando la presencia de estos trabajadores
era temporal las relaciones entre los segmentos de la población se
limitaban al ámbito laboral, no obstante, a partir del asentamiento
tampoco se han extendido más allá. Más bien se hacen evidentes
actitudes discriminatorias hacia los indígenas. En este escenario
las poblaciones indígenas han desplegado estrategias que les han
permitido la inserción en este nuevo lugar.
PALABRAS clave: Migración, jornaleros, asentamientos, relaciones
interétnicas, discriminación.
249
El asentamiento de población jornalera en los lugares de traba-
jo ha interesado en los últimos años a los estudiosos de las migra-
ciones internas (Lara, 2008; Velasco, et. al., 2014) e internacionales
(Torres y Gadea, 2012), debido a la importancia que han cobrado en
el marco de las reestructuraciones productivas de regiones agríco-
las orientadas a la exportación, bajo el modelo de la globalización
agroalimentaria que privilegia los productos de alto valor. Uno de
los temas analizados es el de los cambios provocados en la estruc-
tura social local de las áreas donde se desarrollan las producciones
de frutas y hortalizas. El asentamiento de familias de trabajadores,
en otro momento temporales, ha derivado en la diversificación ét-
nica de estas regiones.
Los datos que aquí se presentan son resultado de una investi-
gación sobre este fenómeno sociodemográfico en el estado de Mo-
relos, que ha buscado responder las siguientes preguntas: ¿cómo
son las interacciones cotidianas entre poblaciones de diferentes
etnias y entre éstas y las mestizas? Y ¿cómo hacen frente las pobla-
ciones indígenas a contextos de discriminación?
Para analizar los datos obtenidos en campo, retomamos las
propuestas de Giménez (s/f), Bartolomé (2008) y Escalante (2009).
De acuerdo al primer autor, la discriminación social se debe enten-
der como:
la actitud culturalmente condicionada y negativamente orientada
de los grupos dominantes hacia los grupos dominados, que en los
procesos de interacción se traduce en comportamientos de hostili-
dad y trato desigual de los individuos identificados con los primeros
respecto a los individuos identificados con los últimos (Giménez, s/f,
p. 2).
251
agrícolas
La región oriente de Morelos ha sido una de las más produc-
tivas de la entidad, donde se instalaron las haciendas más grandes
en la época colonial y la que actualmente presenta los índices más
altos de producción de hortalizas para abastecer al mercado inter-
no e internacional de productos frescos, a través de la Central de
Abastos de la Ciudad de México y, en los últimos años, también de
mercados mayoristas del estado de Puebla. Particularmente el eji-
do de Tenextepango (municipio de Ayala), el lugar donde se llevó a
cabo la investigación, ha sido un importante centro de siembra de
ejote verde, elote, calabacita y cebolla, que desarrollan productores
ejidatarios que cuentan con pequeñas parcelas de riego, de una a
cinco hectáreas.
Esta producción de hortalizas ha necesitado grandes contin-
gentes de trabajadores para las cosechas, pues la población local ha
sido insuficiente, por lo que desde los años cincuenta del siglo XX
arribaron familias indígenas y mestizas pobres de la región de la
Montaña de Guerrero y, en menor medida de la mixteca oaxaqueña
y poblana. En un inicio se trataba de una migración temporal, entre
los meses de noviembre y abril, para luego regresar a sus comuni-
dades de origen a desarrollar diferentes actividades agropecuarias
(milpa, cría de animales, jornalerismo y artesanías).
Sin embargo, en los ochenta comenzó un progresivo proceso
de asentamiento que se ha acelerado en los últimos años. Desde
la llegada de estas familias jornaleras no han existido reportes ni
estadísticas serias de su presencia en Morelos, pocas fuentes como
Canabal (2008) señalaba que en la primera década del siglo XXI
había 12,153 jornaleros registrados en el Programa de Atención a
Jornaleros Agrícolas (PAJA) de la Secretaría de Desarrollo Social (SE-
DESOL), de los cuales más de la mitad eran temporales y el resto
asentados. No obstante, nuestras propias investigaciones han cons-
tatado que la presencia de familias jornaleras asentadas, particular-
mente las originarias de Guerrero, se ha incrementado de manera
dramática en los últimos años.
253
tablecer su residencia radicó en tres aspectos significativos: conse-
guir terrenos para habitar, la oferta de empleo y la relativa cercanía
a sus lugares de origen. Al mismo tiempo que las condiciones de
vida en sus pueblos se volvieron más precarias, principalmente por
la desarticulación de la agricultura maicera de subsistencia, la falta
de empleo local, la violencia generada por el narcotráfico –en el
caso de la Montaña de Guerrero- y la dificultad de acceder a los
servicios.
Tenextepango ofrecía mejores condiciones de vida, donde el
factor más importante fue la oferta laboral, dentro de la entidad o
fuera de ella. Ya en otros documentos se ha ahondado (Saldaña,
2014; Sánchez y Saldaña, 2017) que los asentados no han hecho un
alto en sus rutas migratorias, sino que han tomado su nueva resi-
dencia como “trampolín” o estación intermedia hacia otras regiones
agrícolas, básicamente hacia el Valle del Mezquital (Hidalgo) y Valle
de Culiacán (Sinaloa), donde migran para laborar en las cosechas de
hortalizas, regresando a Tenextepango una vez que éstas terminan.
Fuente: Elaboración propia basada en trabajo de campo. Cabe señalar que Valle de Morelos
y Cerro Olinche pertenecen al ejido de Abelardo Rodríguez, pero consideran a la localidad
de Tenextepango como centro comercial, educativo y religioso (Saldaña, 2014).
255
tierras, aunque con algunas resistencias.
En los ochenta un Comisario Ejidal acordó con el Ayudante
Municipal que no se venderían terrenos para construcción de ca-
sas ni parcelas de producción a las personas que llegaban de fuera,
“pues ellos echan sus raicitas y el nativo se atemoriza” (Testimonio
DE, Tenextepango 2016). En una entrevista, ese ex Comisario Ejidal
reconocía que a pesar de esos esfuerzos no se pudo contener la
venta en posteriores administraciones, por lo que actualmente hay
más “fuereños” que “gente del pueblo”. Así la venta de tierras se
permitió, más o menos sin problemas, a partir de 1985.
De acuerdo a un productor local, el hecho de que las familias
migrantes comenzaran a establecerse en Tenextepango derivó en
que los oriundos consideraran la venta de la tierra de temporal y
uso común como una posibilidad de negocio, que también apro-
vecharon los mismos migrantes, ya que los que tuvieron oportuni-
dades compraron varios terrenos y comenzaron a revender a sus
paisanos.
257
embargo, esto no es así. Existe una desacreditación y discrimina-
ción hacia las familias inmigrantes, particularmente indígenas, a
los que los oriundos asocian apelativos como “paisanitos”, “gue-
rreritos” o “oaxaquitos”. Estos no aplican para las familias mestizas
que han llegado a vivir ahí, solo se usan para referirse a los nahuas
y mixtecos.
Si bien los inmigrantes indígenas siempre asistieron a las mis-
mas plazas públicas, iglesias, escuelas y a otros espacios usados
por los oriundos, sus asentamientos en las faldas de los cerros y
las lomas que rodean a Tenextepango quedaron en “manos” de la
población tenextepanguense. Esto ha resultado en una segregación
socioterritorial de los inmigrantes.
Los lugares de ocio, comercio y religiosos han sido espacios
de encuentro cotidiano entre los diferentes grupos que forman la
estructura social de Tenextepango, en los cuales se ha dado una co-
presencia más o menos pacífica, pero también se han constituido
como espacios donde se observan expresiones que derivan de las
actitudes discriminatorias. En el espacio público los oriundos asu-
men autoridad sobre los inmigrantes indígenas, regañándolos por
tener muchos hijos, porque tiran basura o porque beben alcohol, o
bien haciendo comentarios indirectos que muestran la percepción
que se tiene de ellos.
Cecilia, una mujer de poco más de 30 años, originaria de Co-
panatoyac (Guerrero) recuerda cuando ella y su familia estaban en
la primera etapa del asentamiento en 1998, rentaban un espacio
en el centro de Tenextepango y fueron agredidos a su regreso des-
pués de la jornada laboral: “Unos niños estaban en la calle, venía-
mos de trabajar con mis sobrinos y hermanos, pero unos niños
que estaban jugando en la calle nos gritaron: ¡indios patarrajadas”
!, ¡“indios”! Nosotros no hicimos nada, seguimos caminando” (Tes-
timonio CV, La Joya 2016).
Otro espacio de discriminación ha sido la escuela, donde los
niños indígenas han sido objeto de malos comentarios y burlas por
hablar su lengua, tanto de sus compañeros como de sus profesores.
Los oriundos han sido cuidadosos de “no dejar subir a los que
llegan de otro lado”, como lo comentó un Ayudante Municipal,
pues hay espacios a los que no pueden acceder, como por ejemplo
258
259
El Estado: acciones y discurso sobre la diversidad étnica en
Ayala
En cuanto al Estado también consideramos que reproduce una
visión discriminatoria de la población inmigrante indígena. La ac-
tual administración estatal difunde discursos de respeto y recono-
cimiento a las diversas etnias de la entidad. En ese escenario se
observa que el Plan Estatal de Desarrollo 2013 – 2018 reconoce la
necesidad de la conformación de municipios indígenas, por lo que
hasta el momento se ha modificado el Artículo 40 constitucional
para cambiar el número de habitantes requerido para la creación
de un municipio, con el argumento de reconocimiento a los pue-
blos originales del Estado de Morelos (Poder Ejecutivo, 2014).
Anterior a este periodo se creó, en 2012, el Catálogo de Pue-
blos y Comunidades Indígenas para el Estado Libre y Soberano
de Morelos con el objetivo de reconocer los derechos de los pue-
blos indígenas y respetar sus costumbres, culturas y tradiciones
para cumplir con la Ley de Fomento y Desarrollo de los Derechos
y Cultura de las Comunidades y Pueblos Indígenas del Estado de
Morelos. Éste se pensó desde el inicio en constante actualización
debido al asentamiento de poblaciones de otros estados y que sería
fundamental para la aplicación, diseño, desarrollo y evaluación de
las políticas públicas respecto a la población indígena. Dicho do-
cumento reconoce como “comunidades y pueblos indígenas” a los
asentamientos que analizamos en este artículo (ibíd.).
A pesar de ello en la realidad se presenta un desconocimiento
por parte de las autoridades municipales sobre los asentamientos
y su composición étnica. Sin embargo, para la administración de
Ayala, el reconocimiento de su presencia ha sido una estrategia
para allegarse recursos de programas de la Comisión Nacional para
el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) y SEDESOL que tienen
como objetivo a población indígena y pobre. Los bajos presupues-
2
Las capillas de los asentamientos de inmigrantes forman parte de la Parroquia de Tenex-
tepango.
tiempo que llevan viviendo ahí han sido ellos mismos quienes han
gestionado y cubierto sus necesidades de servicios.
El reconocimiento del municipio hacia los indígenas no ha
representado una difusión de los pueblos migrantes y su cultura,
tampoco de su aportación a la economía regional como trabaja-
dores, solo se ha reducido a su situación de pobreza y de adscrip-
ción étnica, receptores de recursos. Esto no quiere decir que los
inmigrantes indígenas sean pasivos, ya que han utilizado esto para
mejorar sus condiciones de vivienda y la dotación de servicios a su
colonia.
261
Reflexiones finales
La implementación de un modelo de agricultura comercial en
un ejido morelense, en la década de los cincuenta del siglo XX, des-
encadenó una serie de transformaciones importantes, entre las que
se encuentra la diversificación étnica, con la llegada de indígenas y
mestizos de regiones más empobrecidas.
La inserción de las poblaciones indígenas inmigrantes en Te-
nextepango se dio a partir de su participación en mercados labora-
les segmentados. En éstos existe una jerarquía laboral, en la base de
ésta se ubican las tareas desvalorizadas socialmente y devaluadas
técnicamente (Sayad, 1989; citado en Pedreño, 2011), que son de-
sarrolladas por población que se encuentra discriminada en la es-
tructura social: indígenas, migrantes y mujeres, ya que tienen una
gran capacidad para adaptarse a procesos flexibles (Lara, 1992),
precisamente por su discriminación social. Es decir, los criterios
adscriptivos tales como la edad, el sexo o la etnia; así como los ad-
quiridos, el nivel de estudios, son fundamentales para conseguir un
empleo (Marañón, 2003, p. 28). En este sentido, cabe señalar que la
segmentación del mercado laboral agrícola permitió que los inmi-
grantes indígenas se insertaran en la economía de Tenextepango.
Las cosechas de hortalizas fueron desarrolladas casi desde
su introducción en la región por migrantes indígenas de Oaxaca,
Puebla y, principalmente, la Montaña de Guerrero. Ésta es la tarea
que más demanda mano de obra, pero que la población oriunda
no desempeñó porque se desarrolla en condiciones difíciles: bajo
el sol, agachado, diariamente y es mal pagada. Los oriundos, con
mejores condiciones económicas y mayores posibilidades de deci-
sión, no se emplearon en ella; en cambio los migrantes temporales
e inmigrantes, apremiados por la falta de empleo en sus lugares de
origen, aceptaron laborar en condiciones precarias.
Después de varias décadas de arribar temporalmente consi-
deraron a Tenextepango para establecer su residencia formando
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265
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periodicidad semestral, orientada a la divulgación de temas rela-
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Reseñas
Las reseñas de libros, revistas, direcciones de Internet y tesis
doctorales relacionadas con la temática propia de Devenir se ajus-
tarán a la siguiente estructura:
a) Autor de la reseña.
b) Titulo de hasta ocho palabras como referencia a la obra a
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c) Referencia de la obra, conforme lo siguiente:
Libros: Primer apellido e iniciales del segundo apellidos y
nombre del autor o autores separados por coma y en MAYÚSCULA,
año de edición entre paréntesis, punto, título del libro en cursiva,
punto, lugar de edición, dos puntos, editorial, coma, número de
páginas del libro, punto. Si hay dos autores o más, estos irán sepa-
rados entre sí por punto y coma. Ejemplo:
ORTEGA R. P.; MÍNGUEZ V. R. (2001). Los valores en la educación. Bar-
celona: Ariel, 256 pp.
269
Al final del contenido de la reseña de la revista será prescripti-
vo indicar la dirección postal o electrónica completa de los editores
de la misma.
Direcciones de Internet: Nombre de la institución que edita la pá-
gina web de la que se va a hacer la reseña en MAYÚSCULA, dos puntos,
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cha de consulta de la dirección entre paréntesis. Ejemplo:
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31/10/2006).
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versidad, facultad o departamento donde ha sido defendida, punto,
ciudad, punto. Ejemplo:
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de la Unión Europea: estudio comparado. Director: J.L. GARCÍA GARRIDO. Facultad
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