LABENDICIONDEDIOS

La Bendición de Dios
Dios el Señor plantó un jardín al oriente del Edén, y allí puso al hombre que había
formado. Dios el Señor hizo que creciera toda clase de árboles hermosos, los
cuales daban frutos buenos y apetecibles. En medio del jardín hizo crecer el árbol
de la vida y también el árbol del conocimiento del bien y del mal... Dios el Señor
tomó al hombre y lo puso en el jardín del Edén para que lo cultivara y lo cuidara, y
le dio este mandato: “Puedes comer de todos los árboles del jardín, pero del árbol
del conocimiento del bien y del mal no deberás comer. El día que de él comas,
ciertamente morirás."
Génesis 2:8-10,15-17
Dios había creado las condiciones perfectas para que el hombre disfrutara
de una vida plena. Pero para que esto fuera posible dependía de una importante
decisión, la del hombre.
Dios es te ama tanto que Él crea todo un banquete de bendiciones
especialmente para ti, pero el quiere que seas tú quien elija. El árbol del
conocimiento del bien y el mal estaba al alcance del hombre, porque así lo quiso
Dios. Donde hay amor hay libertad para escoger, no se obliga a nadie.
Luego Dios el Señor dijo: "No es bueno que el hombre esté solo. Voy a hacerle una
ayuda adecuada." Entonces Dios el Señor formó de la tierra toda ave del cielo y
todo animal del campo, y se los llevó al hombre para ver qué nombre les pondría.
El hombre les puso nombre a todos los seres vivos, y con ese nombre se les conoce.
Así el hombre fue poniéndoles nombre a todos los animales domésticos, a todas
las aves del cielo y a todos los animales del campo. Sin embargo, no se encontró
entre ellos la ayuda adecuada para el hombre. Entonces Dios el Señor hizo que el
hombre cayera en un sueño profundo y, mientras éste dormía, le sacó una costilla
y le cerró la herida.
De la costilla que le había quitado al hombre, Dios el Señor hizo una mujer y se la
presentó al hombre, El cual exclamó: "Ésta sí es hueso de mis huesos y carne de mi
carne. Porque del hombre fue sacada."
Génesis 2:18-23
Dios seguía mostrando su amor a Adán, creó los animales para que él no
estuviera solo. ¡Los hizo solo por Adán! Más Dios se pudo notar que los animales no
eran suficiente para el hombre, entonces creó a la mujer, únicamente para Adán,
pues Él conoce perfectamente los anhelos de nuestro corazón.
Y así es en nuestras vidas, Él ha diseñado tantas cosas a tu medida, sólo
porque te quiere ver sonreír .
La mujer vio que el fruto del árbol era bueno para comer, y que tenía buen
aspecto y era deseable para adquirir sabiduría, así que tomó de su fruto y comió.
Luego le dio a su esposo, y también él comió... A la mujer le dijo: "Multiplicaré tus
dolores en el parto, y darás a luz a tus hijos con dolor. Desearás a tu marido, y él te
dominará." Al hombre le dijo: "Por cuanto le hiciste caso a tu mujer, y comiste del
árbol del que te prohibí comer, ¡maldita será la tierra por tu culpa! todos los días
de tu vida... Te ganarás el pan con el sudor de tu frente, hasta que vuelvas a la
misma tierra de la cual fuiste sacado. Porque polvo eres, y al polvo volverás."
Génesis 3:6,16-17,18-19
Por su desobediencia Adán y Eva se perdieron de todas la bendiciones que

el Señor había preparado para ellos. Imagínate, la mujer no iba a sufrir cuando
tuviera hijos y el hombre no tenía que trabajar para poder suplir sus necesidades
básicas!!
¿Puedes recordar cuantas bendiciones has perdido por tu desobediencia?
Piensa en aquella palabra de amor o aliento que Dios tenia exclusivamente
guardada para ti en Su palabra, o en oración... pero tu mejor quisiste ver la tele, o
estaba muy buena la conversación por Internet, que lo dejaste para después.
Dios esta preparando cosas para ti. Asegúrate de recibirlas!! Dios quiere
cumplir tus sueños y superar todas tus expectativas.
No sólo eso: nos sentiremos seguros de Dios gracias a Cristo Jesús, nuestro
Señor, por medio del cual hemos obtenido la reconciliación.
Romanos 5:11
Aunque se escuche feo, antes, éramos enemigos de Dios, en Cristo, hemos

recibido esa reconciliación, porque Jesús pago el precio en la cruz, gracias a Él
podemos ser llamados amigos de Dios!
Nos convertimos nuevamente en enemigos de Dios cuando somos
desobedientes a Sus mandamientos, cuando tenemos actitudes rebeldes hacia
nuestros padres, cuando no lees tu Biblia y te olvidas de orar y buscar La Presencia
de Dios.
Él nos libró del dominio de la oscuridad y nos trasladó al reino de su amado Hijo
Colosenses 1:13
Es tiempo de que en tu vida des lugar a ese cambio, que te des cuenta de
todo lo que Dios ha hecho en tu vida. Como este versículo lo explica, nos ha
librado de todo poder que Satanás tenia sobre nuestra vida, si, recuerda, tenemos
un enemigo que busca destruirnos, pero Jesús nos ha regalado la victoria…y todo
no acaba ahí, Dios nos liberó y nos llevó a Su Presencia, a Su Reino.
Dios no es un Dios que da limosnas! Como ya lo habíamos mencionado
anteriormente, Él tiene todo un banquete de bendiciones preparadas solo para ti!
¿Te gustaría vivir permanentemente bajo la bendición de Dios, y no solo recibir
una que otra bendición? Todo lo que tienes que hacer es permanecer en Su
presencia!! Al caminar a su lado recibes todo lo que Dios tiene para ti, porque el es
Tu Padre, y te ama.
Dos cosas hay que te alejan de la bendición de Dios, son muy distintas, pero
ambas te apartan del plan de Dios: orgullo y vergüenza.
 El orgullo te engaña creyendo que no necesitas de Dios en tu vida, que
así estas bien, de manera que eso te lleva totalmente en la dirección
contraria.
 La vergüenza simplemente te paraliza diciéndote que “no mereces
tanto” y te impide alcanzar las cosas que Dios quiere darte.
Todos andábamos perdidos, como ovejas; cada uno seguía su propio camino,
pero el Señor hizo recaer sobre Él la iniquidad de todos nosotros.
Isaías 53:6
Pero a Dios no le importa cuan lejos hallas ido por el camino equivocado, o
por cuanto tiempo te hallas apartado de Su Presencia, Dios sabe donde estas y
sabe lo que haces y quiere restaurar tu corazón. Decide ahora, en lugar de andar
tus caminos, pídele que te ayude a andar en los suyos, en lugar de meditar tus
pensamientos, pídele que te ayude a meditar los suyos. Acércate a tu Padre y
deja que llene tu vida con su Amor, aprende a habitar bajo la sombra de Sus Alas,
en la Presencia del Todopoderoso y no te apartes de Él.
Dios te Bendiga, Juventud por Cristo

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