Este documento presenta diez características de un matagigantes según la historia bíblica de David y Goliat en 1 Samuel 17. Las características incluyen que los matagigantes no se intimidan por las críticas, enfrentan desafíos con confianza en Dios en lugar de en sus propias habilidades, y tienen un propósito más alto que derrotar al gigante, como glorificar a Dios. Al vencer al gigante, un matagigantes inspira a otros a lograr cosas grandes que antes parecían imposibles.
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Este documento presenta diez características de un matagigantes según la historia bíblica de David y Goliat en 1 Samuel 17. Las características incluyen que los matagigantes no se intimidan por las críticas, enfrentan desafíos con confianza en Dios en lugar de en sus propias habilidades, y tienen un propósito más alto que derrotar al gigante, como glorificar a Dios. Al vencer al gigante, un matagigantes inspira a otros a lograr cosas grandes que antes parecían imposibles.
Este documento presenta diez características de un matagigantes según la historia bíblica de David y Goliat en 1 Samuel 17. Las características incluyen que los matagigantes no se intimidan por las críticas, enfrentan desafíos con confianza en Dios en lugar de en sus propias habilidades, y tienen un propósito más alto que derrotar al gigante, como glorificar a Dios. Al vencer al gigante, un matagigantes inspira a otros a lograr cosas grandes que antes parecían imposibles.
Este documento presenta diez características de un matagigantes según la historia bíblica de David y Goliat en 1 Samuel 17. Las características incluyen que los matagigantes no se intimidan por las críticas, enfrentan desafíos con confianza en Dios en lugar de en sus propias habilidades, y tienen un propósito más alto que derrotar al gigante, como glorificar a Dios. Al vencer al gigante, un matagigantes inspira a otros a lograr cosas grandes que antes parecían imposibles.
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Características de un matagigantes.
(Cómo manejar sus mayores desafíos en el liderazgo)
“Entonces dijo David al filisteo: Tú vienes a mí con espada y lanza y jabalina; mas yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los ejércitos......Jehová te entregará hoy en mi mano......y toda la tierra sabrá que hay Dios en Israel...” (1º. Samuel 17:45-46)
Verdades gigantes y los gigantes en la vida.
1. Cada “gigante “me presenta a mí mismo Una crisis no nos hace, solamente revela lo que somos. Las situaciones negativas y los retos sólo descubren lo que hay dentro de los líderes. 2. Las personas que alcanzan "posiciones gigantes" han derrotado gigantes. Ningún equipo o persona ha alcanzado nunca la grandeza sin enfrentar un obstáculo gigante. Un estudio llamado "Cunas de la Eminencia" (Cradles of Eminence) reveló en 1962 que los investigadores encontraron en común, un hilo corriendo a través de todas las vidas sobresalientes que estudiaron. Casi todos ellos tuvieron que vencer obstáculos muy difíciles para poder convertirse en quienes eran. 3. Los gigantes con frecuencia son instrumentos que Dios usa para agudizarnos para oportunidades más grandes. Una vez que David derribó a Goliat, la mayoría de las personas pudieron ver que él estaba siendo preparado para el liderazgo nacional. Nombre algunos "gigantes" en su vida:
Diez características de un matagigantes. (1º. Samuel 17)
1. Los matagigantes no comienzan como matagigantes. (vv.14-24) Cuando estalló la guerra entre los filisteos y los israelitas, David estaba joven. Él era músico y pastor. Mientras sus hermanos servían como soldados, David se convirtió en mandadero de su papá, llevándoles comida y viendo cómo estaban. Él encontró a los soldados vestidos para la guerra, pero sin presentar batalla contra el enemigo. Goliat no se iba; por cuarenta días, seguía regresando diciendo la misma cosa. Observaciones sobre David y los soldados. David era fiel en cada tarea pequeña. El ejército era infiel en su gran tarea.
2. Los matagigantes ven la recompensa potencial si derrotan al gigante.
(vv. 25-27) La mayoría de la multitud ve los obstáculos; sólo unos pocos ven los objetivos. Lo que separa a un líder fructífero de uno que no da fruto es esto: los líderes fructíferos ven el impacto y la recompensa de tomar un riesgo y lo toman. Para otros el riesgo parece demasiado alto. El día que David enfrentó a Goliat, todos tuvieron la misma oportunidad: El ejército vio a Goliat. David vio a Dios. El ejército vio el problema. David vio el potencial. No podemos evaluar una situación en términos de lo que vemos. Lo que se puede observar es real, pero no es la realidad final. Atrás de lo que vemos está el todopoderoso, amoroso Dios, y debemos recordarnos a nosotros mismos esta realidad.
3. Los matagigantes no escuchan las críticas de duda. (vv. 28-33,41-44)
Usted puede determinar con facilidad el calibre de una persona por la cantidad de oposición que se necesita para desanimarlo. Como David, nosotros debemos hacer tres cosas para manejar la crítica: Debemos lograr pasar nuestro Eliab. (No intimida emocionalmente) Debemos lograr pasar nuestro Saúl. (No intimida por su posición) Debemos lograr pasar nuestro Goliat. (No intimida por su habilidad) Los críticos de David dijeron cosas como: “Tú no perteneces aquí”. “Eres demasiado joven”. “Estás lleno de orgullo”. “No tienes experiencia”. Fue difícil porque las críticas eran continuas y venían de gente que él respetaba; ellos cuestionaron sus motivos, y sus habilidades. Recuerde: todos los que nunca han matado un gigante (tomado un reto) le van a decir que es imposible lograrlo. 4. Los matagigantes no se abruman por el desafío. (v.32) El ejército israelí se encogió atemorizado. Ellos tenían razones legítimas para su ansiedad. Goliat era el oponente más feroz y poderoso que jamás habían visto, pero David quiso saber quién era aquél que desafiaba a los escuadrones del Dios Viviente. El ejército vio a Goliat como alguien muy grande para pelear. David lo vio como alguien demasiado grande para fallar. Podemos abrumarnos cuando estamos en una situación como la de David: Nuestros gigantes tienen reputación. Nuestros gigantes nos confrontan continuamente. Nuestros gigantes nos siguen derrotando psicológicamente. Otros a nuestro lado tienen miedo. Venimos juntos y nunca tratamos con el gigante. Nuestro líder le tiene miedo al gigante.
¿Por qué David no fue abrumado?
Su pasión era que Dios fuera honrado. Su deseo era tener la recompensa. Su confianza fue que Dios era su fortaleza.
5. Los matagigantes construyen sobre éxitos pasados. (vv.34-37)
La confianza de David estaba basada en la protección de Dios en encuentros exitosos contra un león y un oso. Él se recordaba a sí mismo y a los demás la fidelidad de Dios. Pensemos en un logro en nuestra vida que nos trajo una sensación de orgullo. ----- Probablemente involucró un desafío. Tal vez usted sintió alguna duda de usted mismo, pero en algún momento tomó un compromiso total. Después de que el desafío termina, frecuentemente olvidamos la duda que tuvimos inicialmente respecto a nosotros mismos, pero cuando recordamos la fidelidad de Dios, podremos derrotar la duda sobre nosotros.
6. Los matagigantes convencen a otros de que van a tener éxito. (v.37)
Lo que usted cree es más importante que cualquier otra cosa en situaciones difíciles: más que lo que usted pueda ganar, más que donde usted viva, más que su posición social, y más que lo que cualquiera pueda pensar de usted. Jesús dijo, “Conforme a vuestra fe os sea hecho” (Mateo 9:29) La confianza en sí mismo causa que otros crean en usted. La confianza en Dios causa que otros crean en Dios. Saúl en algún momento le dijo a David: “Ve y el Señor esté contigo”.
7. Los matagigantes no tratan de ser alguien más o imitar a otra persona.
(vv. 38-40) El rey Saúl le ofreció a David su armadura y sus armas. David se las probó por cortesía, pero se dio cuenta que no se amoldaban a quien era él. Con frecuencia usted se va a encontrar en este tipo de situación: Durante una crisis, las personas tratarán de hacerlo como ellas. Usted nunca derrotará a los gigantes en su vida con armas carnales. Dios sólo espera que usemos lo que tenemos para derrotar nuestros gigantes.
8. Los matagigantes enfrentan el desafío con un propósito más alto.
(vv.45-47) David vio este reto como algo más que una batalla con un tipo de 2.80 m. de alto. Él lo enfrentó con un propósito más alto. David corrió a la batalla para que el mundo conociera al Señor de Israel. Lo vio como un enemigo que no tenía un pacto con el Dios Viviente, que iba contra un hombre que sí tenía un pacto y lo representaba a Él. Era una declaración de las cosas por venir del gran poder de Dios. “La verdadera prueba de un hombre no es cuando desempeña el papel que él quiere para sí mismo, sino cuando desempeña el papel que el Dios tiene para él” El poder de un propósito superior... Noé pudo vencer la burla de la gente porque tenía un propósito. Abraham pudo dejar su hogar por una nueva tierra porque tenía un propósito. José tuvo la fuerza de soportar una prisión oscura porque él tenía un sueño Daniel pudo dormir en el foso de los leones porque se aferró con fuerza a un propósito superior. Los tres hombres hebreos pudieron entrar al horno de fuego porque tenían un propósito. Juan el Bautista pudo menguar en popularidad porque tenía un propósito. Esteban predicó y murió por un impopular Evangelio debido a un propósito. Pablo soportó tortura, difamación y naufragio porque tenía un propósito. Jesús, nuestro ejemplo, sufrió la cruz...por Su propósito superior:¡buscar y salvar a los perdidos 9. Los matagigantes están ansiosos de ganar. (v.48) El primer paso para resolver un problema es comenzar. Los vencedores están inspirados por un desafío y están apasionados por ganar la victoria. David no caminó hacia Goliat... ¡él corrió! Usted puede medir el tamaño de la persona por el tamaño del problema que está dispuestos a enfrentar.
10. Los matagigantes llevan a los que están a su alrededor a un nivel
Superior. (vv. 49-52) La primera señal de una crisis es cuando usted tiene un problema mayor y nadie trata de ayudarle a resolverlo. Una vez que David resolvió el problema de Goliat, las armadas de Israel corrieron para perseguir el resto del ejército filisteo. Ellos ganaron la batalla ese día, pero fueron capaces de hacerlo solamente porque David les abrió el camino.