Prop Aud
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MARCO TEÓRICO
En la actualidad, gracias a los avances científicos que debemos a la Medicina, los
avances tecnológicos que debemos a la Audiología y los metodológicos que debemos al
Magisterio, la Pedagogía y la Didáctica, nos encontramos con una nueva generación de
niños sordos, que nos lleva a replantearnos la respuesta educativa que requieren y las
implicaciones de la sordera en estos alumnos (Jáudenes, 2010).
Se exponen aquí algunas de esas claves para el diseño de esta nueva perspectiva
educativa (Jáudenes ,2010):
Según la Guía para la atención educativa del alumnado con deficiencia auditiva de la
Junta de Extremadura (s.f.) son varios los términos utilizados para denominar esta
alteración. Así, el término “Sordera” se utiliza, para las pérdidas auditivas graves y
profundas; y el término “Hipoacusia” se utiliza para referirse a la pérdida auditiva en
general, no sólo en los casos más graves, sino en cualquier pérdida: leve, mediana, severa
y profunda.
Las repercusiones de la sordera son múltiples y las diferencias individuales muy grandes,
de manera que esta deficiencia puede producir alteraciones de distinto grado en el
desarrollo del lenguaje, el habla y en la voz. Las repercusiones serán también variables a
nivel de desarrollo cognitivo y de socialización.
Una sordera puede ser clasificada en función de diversos criterios. Por ello,
clasificaremos una hipoacusia en función de la intensidad de la pérdida auditiva, de la
localización de la lesión responsable de la sordera y del momento de aparición de la
misma, tanto desde un punto de vista cronológico como en relación al periodo de
adquisición del lenguaje. (Manrique y Huarte, 2004). Se clasificaran también los déficits
auditivos en función de la etiología que las ha provocado.
Sordera mixta.
Cuando están afectados simultáneamente el oído externo o medio y el interno.
La pérdida auditiva ligera permite percibir el habla con voz normal y los ruidos
familiares, sin embargo, tendrá dificultades para percibir la voz baja o lejana.
Primer grado: la pérdida tonal media está entre 91dB y 100 dB. Segundo
grado: la pérdida tonal media está entre 101 y 110 dB. Tercer grado: la pérdida
tonal media está entre 111 y 119 Db.
1r grado: entre 41 y 55 dB
Deficiencia Auditiva Media DAM
2º grado: entre 56 y 70 dB
(o Moderada)
1r grado: entre 71 y 80 dB
Deficiencia Auditiva Severa DAS
2º grado: entre 81 y 90 dB
Profunda dB
Cofosis 120 Db
Sordera perilocutiva: la pérdida auditiva aparece entre los dos y los cuatro años,
momento en que se está desarrollando el lenguaje oral.
Según el dossier divulgativo para familias con hijos/as con discapacidad auditiva
publicado por Fiapas (2007), las consecuencias de las pérdidas auditivas son distintas en
función del grado de sordera:
Pérdidas leves (20-40Db) En estas pérdidas no tiene por qué haber dificultades en la
adquisición y desarrollo del lenguaje, pero si puede haber algunas dislalias y
dificultades en el aprendizaje. En las pérdidas leves, aunque el niño pueda oír, tendrá
dificultades para comprender todo lo que oye sobre todo en ambientes ruidosos,
situaciones de grupo y dentro del aula.
Pérdidas severas (70-90 Db) En estas pérdidas se percibe la voz a intensidades muy
elevadas, y el lenguaje oral no se desarrolla de manera espontánea. Se requiere el uso
de prótesis auditivas, y apoyo logopédico para desarrollar el lenguaje oral.
Una estrategia efectiva es emplear letras de canciones, haciendo que el niño las repita;
también promover la lectura de cuentos que le motiven, fortaleciendo su vocabulario y
fluidez.
Fortalecer los canales visual y táctil: Colocando objetos en las manos del niño para
que sienta movimientos y texturas; realizar pinturas, dibujos, modelar plastilina, crear
diversas manualidades, títeres, entre otras ideas artesanales.
Utilizar juegos en la computadora: Como laberintos, busca minas, dedo tic tac, que
son bastante sencillos. También hay juegos interactivos que ofrecen diversos sitios en
internet, promoviendo así el uso de nuevas tecnologías para canalizar mejor el
aprendizaje y la motivación del niño.
Utilizar rompecabezas: Ya que es un juego que estimula las funciones cognitivas de
los niños como: la resolución de problemas, memoria y atención.
Promover actividades al aire libre: Para que el aprendizaje llegue mediante estímulos
del ambiente, y puedan ver de manera concreta los cambios en la naturaleza, además
de conectarse con otros niños, lo cual les ayuda a comunicarse mejor.
Utilizar la televisión para el entretenimiento: Colocarle programas subtitulados, que
los haga acostumbrarse a la lengua escrita.
Instruirlos en la lengua de señas: Esta es una de las actividades más importantes,
para hacer que el niño tenga una vía de comunicación y no se sienta desplazado de las
demás personas.
IV. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Jáudenes, C. y Gómez, B. (2010). Capítulo 3.3: Información y comunicación accesible
para personas con discapacidad auditiva en los espacios públicos urbanizados.
En Accesibilidad en los espacios públicos urbanizados (pp. 187-197). Madrid:
Ministerio de Vivienda
Marchesi, A. (2009). Capítulo 9: Desarrollo y educación de los niños sordos. En A.
Marchesi, C. Coll, y J. Palacios, J., (2ª edición), Desarrollo psicológico y
educación. 3. Trastornos del desarrollo y necesidades educativas especiales (pp.
241-271). Madrid: Alianza editorial.
Manrique M. (2004). Non-verbal development of children with deafness with and without
cochlear implants. Revista de Dev Med Child Neur, 46, 599-606.
FIAPAS (2007). Dossier divulgativo para familias con hijos/as con discapacidad
Auditiva. Información básica. Madrid: Confederación Española de Familias de
Personas Sordas.