Ejercicios de Tiro I Altres Articles D'interes
Ejercicios de Tiro I Altres Articles D'interes
Ejercicios de Tiro I Altres Articles D'interes
Con el tiro en seco un tirador de precisión puede aumentar considerablemente su nivel con
algo de tesón. Sin embargo, el tiro en seco, aunque muy importante, sólo es una parte en el
entrenamiento de precisión del tirador con arma corta.
Muchos tiradores se limitan a reproducir una y otra vez en el campo de tiro, las tiradas de
competición intentando con ello mejorar su rendimiento.
Les presentamos una serie de ejercicios que junto con el entrenamiento en seco le ayudarán a
conseguir su objetivo.
Los blancos de competición suelen ser de color blanco por su parte posterior. De modo que el
contraste con las miras del arma es total y permite verlas perfectamente.
Al no existir referencia de puntería alguna, el tirador debe apuntar al centro del cuadrado
blanco, prestando atención en mantener los elementos de puntería perfectamente enrasados y
centrados durante el proceso de disparo. A los tiradores le sorprenden de que, a pesar de no
existir referencias de puntería, las agrupaciones suelen ser tan cerradas o más que con un
blanco normal.
Dicha falta de referencia provoca que las agrupaciones sean sensiblemente verticales pero
centradas. Aunque con el tiempo la dispersión vertical termina reduciéndose.
Este ejercicio ayuda a centrar la vista en las miras sin distracciones. Además, evita la
tentación de enfocar la vista en el blanco. Es muy recomendable comenzar la sesión de
entrenamiento con este ejercicio, al menos unas 3 o 4 series de 5 disparos. Con ello se
consiguen reducir los errores angulares cometidos por el tirador.
El ancho de la banda será un poco menor que el ancho del 9. Es decir, un poco menor de 5
centímetros.
El ejercicio es muy similar al anterior solo que esta vez tiene una referencia. La banda permite
al tirador seguir manteniendo el máximo contraste en los elementos de puntería del arma y por
lo tanto su atención en estos. También le obliga a corregir su posición de tiro para que la
puntería realizada sea coincidente con la banda.
Este ejercicio ayuda, además de mejorar la puntería y el control del disparador, a colocarse
frente al blanco desde el principio sin apenas necesidad de correcciones posturales. Es decir,
ayuda a encontrar la posición de tiro ideal asociada a la postura de tiro de cada tirador. O,
dicho de otra manera, haciendo coincidir el punto de puntería natural con el centro del blanco,
el tirador asumirá su posición de tiro con menor esfuerzo.
Las agrupaciones seguirán siendo sensiblemente verticales, incluso más que con el blanco
vuelto. Esto es debido al contraste de la banda negra que puede propiciar pequeños errores
angulares en altura. De todas formas, no suponen un problema en el entrenamiento.
TIROS A BANDA HORIZONTAL
Del mismo modo que en el ejercicio anterior colocaremos una banda negra del mismo ancho
en un blanco vuelto. Ni que decir tiene que en sentido vertical y pasando por el centro del
blanco.
Este ejercicio sirve para que el tirador, una vez que ha encontrado su postura y posición
ideales, aprenda a encontrar el punto de referencia que mejor le parezca para su puntería.
Para que lo entendamos mejor, un tirador de precisión necesita tener la mejor visión de sus
miras para mantenerlas perfectamente centradas y enrasadas. Por ello, necesita apuntar a una
zona del blanco donde no se entorpezca ese contraste. La visual negra del blanco supone un
problema ya que el contraste de unas miras negras sobre un fondo negro no es el mejor.
Considerando lo anterior, los tiradores de precisión apuntan un poco por debajo de la visual
negra del blanco. De este modo mantienen el contraste de las miras sobre el papel blanco. La
puntería no se hace justo bajo la visual negra ya que un error al no enrasar el punto de mira
con el alza puede pasar desapercibido, siempre queda algo de contraste blanco sobre los
elementos de puntería.
El ejercicio de tirar sobre una banda horizontal ayuda a determinar la distancia entre nuestra
referencia de puntería y la visual negra del blanco. Una vez esté determinada solo queda
manipular los elementos de puntería del arma para que los impactos queden en la zona del 10.
Les presentamos una serie de ejercicios que junto con los anteriormente mencionados le
ayudarán a conseguir su objetivo de mejorar su rendimiento en competición.
Realizaremos este tipo de ejercicios una vez que nos sintamos cómodos en los
entrenamientos a blanco vuelto.
TIRO A UN BLANCO SIN ZONAS
Consiste en realizar series de 5 disparos sobre un blanco al que se le han borrado los anillos.
Como el proceso de borrado de los anillos puede ser engorroso lo ideal es pegar a la parte
trasera del blanco, un círculo negro de iguales dimensiones que la visual negra. Visto así, este
ejercicio es la secuencia natural a seguir tras lo ejercicios de tiro a blanco vuelto con bandas
verticales u horizontales.
Este blanco permite que el tirador realice la puntería exactamente igual que con un blanco
normal, con las mismas referencias, pero sin las distracciones en la técnica en sí, debidas a la
tendencia a contar la puntuación obtenida en cada serie.
Los disparos que pasen por la zona recortada no se verán, por lo tanto, no se podrán
contabilizar sus puntuaciones. Los impactos visibles, es decir, los de puntuación de 8 e
inferior, se considerarán como errores.
De este modo el tirador no puede contar la puntuación total obtenida en cada serie, ni
compensar los errores con los dieces, pero será mas consciente de los errores cometidos ya
que quedaran plasmados sobre el blanco.
Es un ejercicio pensado para que el tirador sea consciente de cuando comete un error e intente
averiguar que lo causó para evitar repetirlo.
Los tiradores noveles, pueden comenzar por recortar también la zona de puntuación del 8.
TIROS DE CASTIGO
Este ejercicio es una combinación de tiro real y tiro en seco. En realidad, es un variante del
ejercicio anterior que ayuda a reconocer errores en la técnica de tiro. Además, sirve para
minimizar el gasto en munición.
Realice estos entrenamientos prestando máxima atención a la técnica de disparo sin importar
el tiempo empleado en cada serie.
¡¡ BUEN ENTRENAMIENTO!!
ADIVINAR EL IMPACTO
Este sencillo, pero muy eficaz ejercicio consiste en realizar un disparo y a continuación tratar
de adivinar la ubicación del impacto en el blanco.
Para ello es conveniente tener en papel un dibujo de un blanco a pequeña escala donde
señalar nuestra predicción. A continuación, miraremos el blanco para comprobar la verdadera
ubicación del impacto.
Una vez que el tirador domina este ejercicio, puede hacer lo mismo tras una serie de 5
disparos en lugar de hacerlo de uno en uno.
Es por ello por lo que después de un tiempo realizando este ejercicio, el tirador advierte que los
impactos se aproximan más los unos a los otros; es decir se reduce la dispersión de los
mismos.
Una mejora obtenida sin la carga emocional de obtener resultados inmediatos. Puesto que se
convierte en un pequeño juego que ameniza las largas jornadas de entrenamiento, aliviando la
presión psicológica autoimpuesta por el tirador.
Llega un momento en el que se sabe con precisión el lugar exacto en donde se encontrará el
disparo. Esto ayuda a saciar la ansiedad por ver el resultado y por lo tanto evita la tendencia a
buscar el impacto enfocando en el blanco antes de que se produzca el disparo.
Este ejercicio provoca también una cierta conciencia de dominio del arma y de la técnica de
tiro. Lo que redunda en la autoestima del tirador y por lo tanto en un mayor control psicológico
en competición.
¡¡ BUEN ENTRENAMIENTO!!
Continuamos mostrándole una serie de ejercicios de tiro para reducir la dispersión de los
impactos, mejorando así sus habilidades en el tiro de precisión con arma corta. Iniciamos
este proceso con el tiro en seco, para seguir con el tiro a blanco vuelto y con ejercicios para
hacer coincidir el centro de la dispersión de los impactos con la zona de máxima puntuación
en el blanco, logrando con ello maximizar la puntuación obtenida.
Como bien sabemos, la zona de máxima puntuación en el blanco es la zona más reducida, por
lo que es clave entrenar para reducir la dispersión de los impactos sobre el blanco.
Tras dos interesantes ejercicios propuestos con anterioridad en este blog, a continuación,
describiremos otros 3 más que de seguro le ayudaran a optimizar su resultado en
competición.
Consiste en realizar series de 5 disparos procurando poner el máximo de atención en cada uno
de los 6 aspectos que intervienen para hacer un disparo perfecto. Aunque esto debería
hacerse en todos los disparos, lo cierto es que debido a la fatiga que produce, en ocasiones el
tirador suele relajar alguno de ellos.
Cada serie se realizará sin límite de tiempo y se marcará un alto objetivo en cuanto a los
puntos obtenidos.
SERIES EN TIEMPOS REDUCIDOS
Uno de los handicaps del tiro de precisión suele ser el tiempo, que sin duda juega un papel
estresante. Por ejemplo, en una serie de competición de 5 disparos en 150 segundos, tenemos
30 segundos por disparo. Ocurre en ocasiones que una interrupción o un par de renuncias al
disparo nos hacen perder un tiempo valioso.
Este tipo de ejercicios permiten que nos centremos en realizar los disparos con la máxima
concentración intentando no apurar todo el tiempo disponible. Realizaremos series de 5
disparos en 100 segundos (20 por disparo). De modo que en competición nos sintamos
completamente capaces de solventar cualquier incidente y poder realizar los disparos en el
tiempo de exposición del blanco.
Es un buen ejercicio para ayudar a crear el ritmo de los disparos, pero hay que tener cuidado
de no precipitarse y descuidar la técnica por querer disparar demasiado rápido, es
precisamente lo que se pretende entrenar con este ejercicio.
Aunque pudiera parecer que es el mismo ejercicio descrito en el artículo llamado “Ejercicios de
tiro a zona de máxima puntuación” este debe hacerse en una fase del entrenamiento un poco
más avanzada, de hecho, es un ejercicio que debe realizarse como parte final de una sesión de
entrenamiento para mentalizar el tirador que la última meta es el 10.
COMBINACIÓN DE EJERCICIOS
La realización de todos estos ejercicios, tienen como recompensa una sustancial mejora de la
técnica y de la autopercepción del tirador, lo que redunda en un mejor control psicológico del
reto de la competición y por consiguiente en una mejora de los resultados obtenidos. Ya que
ayudan a no centrarse en la puntuación en si misma sino en la colocación de los impactos, que
deben estar lo más agrupados posible y en la zona de máxima puntuación.
Recuerde que el tirador de precisión no compite contra otros tiradores sino contra si mismo,
la clave para ganar está en la mejora continua del rendimiento.
¡¡ BUEN ENTRENAMIENTO!!
Una de las mejores fórmulas para mejorar la precisión es el tiro en seco, permite
trabajar en casa, es seguro y no consume munición. Les presentamos en este
artículo unos ejercicios de tiro en seco con pistola para tiradores de precisión.
La postura de tiro es un factor de suma importancia para el tirador, de ella dependen desde el
control de la propia arma como la gestión de la fatiga. En las disciplinas de tiro de precisión
con arma corta la postura del tirador es de pie y se sostiene el arma con una sola mano.
Veamos en este artículo una serie de nociones al respecto de la postura de tiro de precisión
con arma corta.
¿Por qué cuando comparamos a dos tiradores de alto nivel parecen no ponerse de acuerdo
en una cuestión tan crítica?
La respuesta es bien sencilla, no existe una postura fija como la más idónea para la práctica
de este deporte. Cada tirador adopta la suya. Cada tirador adopta aquella en la que tira con
mayor comodidad y mejor se adapta a su constitución física.
La clave es la morfología y las características físicas del tirador; el estado de forma y el nivel
de entrenamiento son los factores que definirán la postura de tiro a adoptar.
Una vez se encuentra la postura de tiro más adecuada para cada tirador, esta debe usarse
siempre dándola como fija.
POSTURAS BÁSICAS
Como norma general iniciaremos el proceso de búsqueda de nuestra postura ideal como
tiradores desde una posición de tiro semifrontal o una de perfil total. Esto es, ofreciendo un
ángulo respecto de la línea de blancos de 45º o de 90º respectivamente.
La postura de tiro ideal para el tirador suele ser una cuya posición esté entre estas últimas. Se
suele estimar como más idónea la semifrontal. Aunque en casos muy contados hay quien se
coloca ofreciendo posiciones sensiblemente frontales e incluso, por el contrario, superando
esos 90º respecto a la línea de blancos.
Debemos evitar rigidez y la torsión en el torso, abdomen y caderas. Los únicos músculos
tensos deben ser aquellos que soportan el peso del cuerpo y los del brazo que sostiene el
arma, aunque no demasiado.
TREN SUPERIOR
Para mantener la línea de los hombros paralela al suelo, el brazo libre, puede colocarse en el
bolsillo del pantalón deportivo de forma relajada.
Intente que el brazo libre no se separe demasiado, péguelo al cuerpo como parte de un todo.
La mera circulación sanguínea a través del brazo libre es suficiente como para afectar a la
estabilidad de la postura de tiro.
Bloquee la muñeca tiradora e intente no presionar demasiado el arma y bloquee el musculo
dorsal correspondiente a la mano tiradora. Esto hará que no deba forzar demasiado los
músculos del brazo y redundará en la tardía aparición de la fatiga.
Para no forzar demasiado la musculatura del brazo de la mano tiradora intente sostener el
peso del arma sobre el tendón del bíceps. Esto se logra girando el brazo de modo que el
bíceps queda hacia arriba y la articulación del codo hacia abajo.
Levante el arma una vez adoptada la postura y diríjala al blanco. Abra los ojos y compruebe
hacia donde apunta. Si esto se repite sólidamente varias veces habrá adoptado la postura de
tiro adecuada y estará apuntando hacia el punto natural de puntería.
Nunca corrija el error en la posición con el brazo, eso modifica su postura. Pivote sobre el
talón de su pie más adelantado.
Todo lo dicho en el anterior artículo sobre la preparación del tirador, concretamente sobre la
preparación psicológica a lo largo de la temporada, logrará que el tirador consiga optimizar
sus resultados. Esto puede comprobarlo con sus propias pruebas durante los entrenamientos
o con los resultados de competiciones de menor importancia o clasificatorias. Estas
competiciones también generan un deseo de ganar o de superarse que puede hacer aparecer
el estrés, la tensión o la ansiedad. Por lo tanto, hay que tratar de evitar que afecte
negativamente al rendimiento.
Es necesario llegar al campo de tiro con tiempo suficiente antes del comienzo de la
competición para hacer las comprobaciones pertinentes, pasar revista de armas o equipo o
simplemente no favorecer la aparición del estrés por pequeños detalles de última hora.
Preparar el equipo para la competición o tenerlo dispuesto para ocupar el puesto de tiro en
cuanto den autorización para ello y familiarizarse con las instalaciones y la luz ambiental y
efectuar con tranquilidad el calentamiento o iniciar la concentración en la competición. No
provocar conversaciones inútiles o banales y ni mucho menos aquellas que puedan llegar a
alterar su concentración lo más mínimo. Si en la disciplina que practica está permitido hacer
disparos de ensayo, hágalos repasando los detalles de la técnica y permanezca atento a las
necesidades de corrección de sus miras.
Un ejercicio que puede hacer diariamente antes de dormir e incluso si suele dormir algo de
siesta es el siguiente: Tendido de cubito supino, boca arriba, con la cabeza ligeramente
levantada y los brazos relajados a lo largo del cuerpo. Ahora efectúe 5 o 6 respiraciones
profundas dejando relajados todos los músculos del cuerpo. Un pequeño truco para ello es
iniciar la relajación muscular por partes de forma sistemática; comience por los dedos de un
pie, siga por el tobillo, gemelo, rodilla, muslo… de cada pierna. Continúe así con todo el cuerpo,
note como pesa cada uno de sus músculos al relajarlos. Este ejercicio le ayudará a relajar los
músculos intervinientes en la sujeción de su arma en competición y a bajar todavía más su
ritmo cardiaco. Cuando domine este ejercicio de relajación podrá reproducirlo en el campo de
tiro sentado en una silla, como las que disponen los tiradores de precisión. Apoye la espalda
totalmente en la silla y mantenga las plantas de los pies completamente en el suelo. Los
brazos semiflexionados apoyados sobre los muslos, respire y relaje la musculatura como en el
ejercicio anterior. Sabrá hacerlo gracias a ese entrenamiento previo en casa. Este ejercicio le
aislará del resto de competidores entre tirada y tirada, mientras los árbitros puntúan o
cambian los blancos.
Recuerde que en estos momentos no hay nada mas importante que su técnica, su arma y su
blanco. Nada de lo demás importa ni influirá en el resultado de su actuación.
LA VISUALIZACIÓN
La mayoría de los deportistas de alto nivel saben que el éxito en sus disciplinas deportivas se
debe a factores mentales y de dominio psicológico hasta en una 90%. Un adecuado
entrenamiento en técnicas de autocontrol, junto con el conocimiento de los factores que
puedan influir en el estado psíquico del tirador, ayudan a la eficacia en la actuación en
competición cuando afloran el nerviosismo y la ansiedad.
El tirador, una vez iniciada la prueba, comienza una lucha consigo mismo para vencer al
estrés.
ANALIZAR LA SITUACIÓN
Si usted acusa estos síntomas derivados del estrés y baja su rendimiento en competición,
piense que, si puede hacer una determinada puntuación entrenando, no hay ningún motivo
lógico en no poder hacerlo en competición, sólo debe aprender a dominar ese estrés. Una
adecuada preparación psicológica del tirador ayudará a analizar las situaciones estresantes
de la competición. Este análisis le proporcionará recursos para el control de los aspectos
psicofisiológicos y emocionales de esas situaciones. Si le añade el aprendizaje de técnicas de
relajación finalmente repercutirá en una mejor actuación en competición, será como un
entrenamiento más.
Es necesario tener en cuenta una serie de aspectos que ayudaran a una adecuada condición
psicológica como llevar un plan de tiro, crear el hábito de observar la respiración, la postura y
la posición de tiro, apuntar con un enfoque adecuado y sin preocupación por el impacto, relajar
musculatura de la frente, mandíbulas, cuello y abdomen, relajar la vista… Todo esto, junto con
el análisis de cada disparo le aportará seguridad en sí mismo.
Hoy hablamos de la preparación física del tirador. Todo tirador que se proponga mejorar sea
cual sea la disciplina que practique necesita de una preparación técnica concienzuda. Pero la
preparación del tirador en cuanto a la técnica propiamente dicha quedaría incompleta sin una
preparación táctica, psicológica y física que ayuden a su crecimiento y evolución como
deportista. El desarrollo de la preparación técnica lleva casi simultáneamente a las otras. El
entrenamiento técnico activa el sistema muscular en las distintas posturas que se adoptan.
El ejercicio cotidiano, es insuficiente y suele ser poco adecuado para la práctica del deporte
del tiro. Si su objetivo es competir a medio o alto nivel, es imprescindible obtener una forma
física adecuada. La mejora cardiovascular supone una disminución del ritmo cardíaco, es
decir, del número de pulsaciones por minuto. Con ello se consigue parar mejor el arma
reduciendo el error paralelo. Además, se obtiene una mayor resistencia a la fatiga durante la
competición.
Un tirador con un sistema muscular entrenado resiste más y mejor el peso del propio cuerpo
y del arma.
LA CARRERA CONTINUA
El footing, el running o como quieran llamarlo las modas consiste en una carrera
continua durante unos minutos. Un entrenamiento dos o tres veces por semana, con una
duración que aumente progresivamente según sus posibilidades (al menos 30 minutos) le
será de gran ayuda. Puede correr también con cambios de ritmo constantes, un sistema
llamado fartlek. El Interval Training o entrenamiento fraccionado, consiste en correr unas
distancias a un determinado ritmo seguido de unos descansos en los que se anda a ritmo
forzado. Este tipo de entrenamiento es ideal para bajar el ritmo cardíaco en reposo.
EL GIMNASIO
Acudir dos o tres veces por semana a un gimnasio y trabajar todos los grupos musculares es
una gran idea. Realizar ejercicios dirigidos por un monitor, con un calentamiento adecuado es
lo más idóneo. En general realice ejercicios con poco peso, pero con muchas repeticiones que
mejoren su resistencia. Recuerde que una mala ejecución de los ejercicios puede producir
lesiones. Para el deporte del tiro no es necesario efectuar una preparación especialmente
intensa ni estar muy musculado. No es necesario hacer enormes esfuerzos, pero no deje de
prestar atención a manos muñecas y codos.
El tren superior se puede trabajar empleando tensores de goma para fortalecer bíceps, tríceps
y la zona escapular. Las típicas extensiones de brazos sobre el suelo o el uso de pequeñas
pesas son otra opción. Los tiradores de precisión con arma corta suelen dirigir los ejercicios
con un brazalete lastrado en la muñeca del brazo de tiro.
Complementar todo esto con baños calientes, masajes, ejercicios de relajación y saunas,
estas sin exceso, es también muy recomendable. En el siguiente enlace puede acceder a un
ejemplo de entrenamiento programado por Javier Les.
EL EQUILIBRIO
Aunque en este artículo no nos centremos en ninguna modalidad de tiro en concreto, les
quiero hacer ver lo importante de una buena forma física y que esta se puede alcanzar o
mejorar con relativa facilidad. Un aspecto importante de esa forma física para casi cualquier
modalidad de tiro es el equilibrio, de su dominio depende en gran medida la estabilidad de la
postura de tiro y finalmente la precisión de sus disparos. Intente mejorar sobre todo
su equilibrio, para ello les propongo este enlace.
Recuerde que con solo un poco de voluntad, puede mejorar su rendimiento en el campo de
tiro.
EL DISPARO PERFECTO
Postura de tiro
La definiremos como la disposición que adopta el cuerpo del tirador para sujetar el arma y
mantenerla dirigida hacia el objetivo. Trata de hacer descansar el peso del arma, maximizando
el uso de huesos y minimizando la intervención muscular. Por la razón de que el hueso ni se
fatiga ni tiembla, procurando estabilidad al arma.
Una buena postura de tiro ayuda a disipar el efecto de retroceso del arma.
Aparece el concepto de punto natural de puntería, que es aquel donde apunta el arma
de forma natural una vez adoptada la postura de tiro.
Posición de tiro
Entendemos como posición el ángulo que ofrece el tirador con respecto al objetivo. De igual
importancia para lograr el disparo perfecto. Un error muy común es modificar la postura de tiro
para apuntar al blanco. Cuando en realidad lo que debemos modificar es la posición, es decir,
hacer coincidir el punto natural de puntería con la referencia que usamos para impactar en el
centro de nuestra diana. De esta forma, conseguiremos agrupar nuestros impactos, ya que
reducimos la fatiga producida por el peso del arma.
Empuñamiento o agarre
Según se use arma corta o larga, respectivamente, definiremos éste como el modo de unión
entre el tirador y su arma. Es fundamental para un buen dominio del arma. Además, debe
hacerse siempre de forma consistente, sea a una o dos manos. Su correcto uso también
ayuda al control del retroceso.
Puntería
Es la alineación del ojo del tirador con los elementos de puntería del arma y el blanco. Debe
tenerse en cuenta que el ojo humano sólo puede enfocar a una única distancia para ver
nítidamente los objetos que desea. Además de que el enfoque a diferentes distancias no es
instantáneo: lleva su tiempo. El conocimiento y destreza en el uso y manejo de los llamados
errores angular y paralelo se hace imprescindible para una correcta acción de apuntar.
Eurosimulator, un simulador de puntería virtual. Este le permitirá aprender cómodamente el
uso de varios tipos de elementos de puntería.
Respiración
Obviamente, no creo necesaria la definición de respiración. Por otro lado, sí lo es el
mencionarla como un elemento importante durante el proceso de disparo. Ya que la
respiración implica cambios en la postura debido al cambio de volumen de la caja torácica, y
la ausencia de respiración durante el proceso de apuntar conlleva una cierta ansiedad por
seguir oxigenando nuestros órganos. De su correcta gestión depende en gran medida
conseguir el disparo perfecto.
En posteriores artículos desarrollaremos un poco más en detalle cada uno de estos aspectos.
Así ayudarle a comprender mejor el manejo preciso de sus armas de fuego.
¡¡ BUEN ENTRENAMIENTO!!