El Cuento

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 7

EL CUENTO

¿Qué es un cuento?

Un cuento es un tipo de narración generalmente breve, basada en hechos


reales o ficticios, en la cual un grupo de personajes desarrollan
una trama relativamente sencilla. En el ámbito literario es uno de los
subgéneros de la narrativa, ampliamente cultivado por escritores de muy
distintas tradiciones. También existen cuentos populares, transmitidos
oralmente o que pertenecen al acervo de la cultura informal.
Aunque el ser humano ha sido afecto a contar historias desde sus orígenes,
no siempre lo hizo bajo los paradigmas del cuento. Antiguamente se
contaban leyendas y relatos orales, con algún fin pedagógico, que los hacía
cercanos a la fábula.
En otros casos se contaban relatos mitológicos que explicaban el origen del
mundo o algún episodio de alguna deidad o algún héroe específicos. Hoy en
día, en cambio, se los cultiva como una forma artística en sí misma.
El cuento es un género moderno. Su nombre proviene del latín computus,
“cálculo”, ya que se trata, en el fondo, de enumerar los acontecimientos que
componen la trama.
Por otro lado, sus tramas suelen contraponerse a las de las novelas por su
extensión, ya que estas últimas suelen ser más voluminosas. Sin embargo,
ese criterio es discutible, ya que la frontera entre un cuento largo y
una novela breve puede ser muy estrecha.
A lo largo de la historia, muchos autores han hecho del cuento su género
predilecto, y lo han cultivado obteniendo así verdaderas obras de arte. Entre
ellos destacan: Edgar Allan Poe (1809-1849), Guy de Maupassant (1850-
1893), Jorge Luis Borges (1899-1986), Ernest Hemingway (1899-1961) y
Ryonosuke Akutagawa (1892-1927) y muchos otros.

Características del cuento

En líneas generales, un cuento se caracteriza por lo siguiente:

 Se trata de una narración breve, cerrada en sí misma, que relata una serie


relativamente sencilla de hechos desde su inicio hasta su fin. Esto quiere
decir que contiene todos los elementos necesarios para comprender el relato
de cabo a rabo. Procura narrar de manera más o menos directa, sin tantas
dilaciones, extravíos o divagaciones, siendo éstas más propias de la novela.
Un cuento debería poder leerse de principio a fin, en una sola sentada.
 Posee una única línea argumental, en la que convergen uno o más
personajes, a través de un conjunto variable de acciones o vericuetos. El
número de personajes en un cuento es variable.
 Posee una unidad de efecto, rasgo que comparte con la poesía. Esto
quiere decir que a través de su lectura se busca generar un efecto estético,
reflexivo o emocional, para lo cual el cuento cuenta con todas las
herramientas necesarias.
 Se encuentra escrito en prosa, y posee siempre un narrador (o en
ocasiones puntuales, más de uno) a través de cuya voz se narran los sucesos
de la trama. Dicho narrador puede formar o no parte de los personajes del
relato, y puede hablar en primera (yo) o tercera (él/ella/ellos) personas.
Ejemplo:
El patito feo

Era una preciosa mañana de verano en el estanque. Todos los animales que
allí vivían se sentían felices bajo el cálido sol, en especial una pata que de un
momento a otro, esperaba que sus patitos vinieran al mundo.
– ¡Hace un día maravilloso! – pensaba la pata mientras reposaba sobre los
huevos para darles calor-. Sería ideal que hoy nacieran mis hijitos. Estoy
deseando verlos porque seguro que serán los más bonitos del mundo.
Y parece que se cumplieron sus deseos, porque a media tarde, cuando todo
el campo estaba en silencio, se oyeron unos crujidos que despertaron a la
futura madre.
¡Sí, había llegado la hora! Los cascarones comenzaron a romperse y, muy
despacio, fueron asomando una a una las cabecitas de los pollitos.
– ¡Pero qué preciosos sois, hijos míos! – exclamó la orgullosa madre-. Así de
lindos os había imaginado.
Sólo faltaba un pollito por salir. Se ve que no era tan hábil y le costaba
romper el cascarón con su pequeño pico. Al final también él consiguió estirar
el cuello y asomar su enorme cabeza fuera del cascarón.
– ¡Mami, mami! – dijo el extraño pollito con voz chillona.
¡La pata, cuando le vio, se quedó espantada! No era un patito amarillo y
regordete como los demás, sino un pato grande, gordo y negro que no se
parecía nada a sus hermanos.
– ¿Mami?… ¡Tú no puedes ser mi hijo! ¿De dónde habrá salido una cosa tan
fea? – le increpó – ¡Vete de aquí, impostor!
Y el pobre patito, con la cabeza gacha, se alejó del estanque mientras de
fondo oía las risas de sus hermanos, burlándose de él.
Durante días, el patito feo deambuló de un lado para otro sin saber a dónde
ir. Todos los animales con los que se iba encontrando le rechazaban y nadie
quería ser su amigo.
Un día llegó a una granja y se encontró con una mujer que estaba barriendo
el establo. El patito pensó que allí podría encontrar cobijo, aunque fuera
durante una temporada.
– Señora – dijo con voz trémula-, ¿sería posible quedarme aquí unos días?
Necesito comida y un techo bajo el que vivir.
La mujer le miró de reojo y aceptó, así que, durante un tiempo, al pequeño
pato no le faltó de nada. A decir verdad, siempre tenía mucha comida a su
disposición. Todo parecía ir sobre ruedas hasta que un día, escuchó a la
mujer decirle a su marido:
– ¿Has visto cómo ha engordado ese pato? Ya está bastante grande y
lustroso. ¡Creo que ha llegado la hora de que nos lo comamos!
El patito se llevó tal susto que salió corriendo, atravesó el cercado de madera
y se alejó de la granja. Durante quince días y quince noches vagó por el
campo y comió lo poco que pudo encontrar. Ya no sabía qué hacer ni a
donde dirigirse. Nadie le quería y se sentía muy desdichado.
¡Pero un día su suerte cambió! Llegó por casualidad a una laguna de aguas
cristalinas y allí, deslizándose sobre la superficie, vio una familia de preciosos
cisnes. Unos eran blancos, otros negros, pero todos esbeltos y majestuosos.
Nunca había visto animales tan bellos. Un poco avergonzado, alzó la voz y les
dijo:
– ¡Hola! ¿Puedo darme un chapuzón en vuestra laguna? Llevo días
caminando y necesito refrescarme un poco.
 - ¡Claro que sí! Aquí eres bienvenido. ¡Eres uno de los nuestros! – dijo uno
que parecía ser el más anciano.
– ¿Uno de los vuestros? No entiendo…
– Sí, uno de los nuestros. ¿Acaso no conoces tu propio aspecto? Agáchate y
mírate en el agua. Hoy está tan limpia que parece un espejo.
Y así hizo el patito. Se inclinó sobre la orilla y… ¡No se lo podía creer! Lo que
vio le dejó boquiabierto. Ya no era un pato gordo y chato, sino que en los
últimos días se había transformado en un hermoso cisne negro de largo
cuello y bello plumaje.
¡Su corazón saltaba de alegría! Nunca había vivido un momento tan mágico.
Comprendió que nunca había sido un patito feo, sino que había nacido cisne
y ahora lucía en todo su esplendor.
– Únete a nosotros – le invitaron sus nuevos amigos –. A partir de ahora, te
cuidaremos y serás uno más de nuestro clan.
Y feliz, muy feliz, el pato que era cisne, se metió en la laguna y compartió el
paseo con aquellos que le querían de verdad.
PREGUNTAS
¿Cómo se sentía el patito feo?

¿Qué animal era realmente el patito feo?

¿A quién se encontró el patito cuando se fue del


estanque?

¿Qué pasa en la imagen del texto?

¿Qué enseñanza nos deja este cuento?

También podría gustarte

pFad - Phonifier reborn

Pfad - The Proxy pFad of © 2024 Garber Painting. All rights reserved.

Note: This service is not intended for secure transactions such as banking, social media, email, or purchasing. Use at your own risk. We assume no liability whatsoever for broken pages.


Alternative Proxies:

Alternative Proxy

pFad Proxy

pFad v3 Proxy

pFad v4 Proxy