Varios Autores-Tecnicas para El Diagnostico Familiar
Varios Autores-Tecnicas para El Diagnostico Familiar
Varios Autores-Tecnicas para El Diagnostico Familiar
ETAPAS
Etapa social.
Etapa de identificación de problemas.
Etapa de desarrollo.
Etapa final.
· Condiciones de la vivienda
Estilo autoritario
Se centraliza el poder y la toma de decisiones fundamentales, brindando poca
participación a los miembros en la definición de metas y tareas.
Estilo democrático
Se comparte las funciones de dirección entre todos los miembros, estimulando
la participación grupal en la determinación de metas y planeamientos de
actividades
Estilo tolerante
Existe gran pasividad en el desempeño de la función directriz. Los miembros
poseen completa libertad en el desarrollo de las actividades y toma de
decisiones, no se hace explícita la determinación de metas y objetivos
· Indicadores:
Lo que sí está claro es que las relaciones que el niño establece en la familia
son - como diría F. López- "interacciones privilegiadas"(1986) que proporcionan
- cuando son adecuadas- el bienestar emocional necesario para su desarrollo
psicosocial, mientras que las carencias afectivas provocan serias
consecuencias, entre las que se pueden citar: ambivalencia afectiva,
comportamiento reactivo, sentimientos de abandono afectivo, inestabilidad
emocional, y el yo débil e inestructurado.
La ambivalencia afectiva se puede definir como la presencia simultánea de
deseos, sentimientos e ideas contradictorias respecto a un mismo objeto, que
supone un ritmo intermitente entre el niño y sus padres, que le sitúa en una
actitud emocional de esperar algo que no llega cuando lo necesita. Por
ejemplo, si usted hace algo bien, espera recompensa; por el contrario, ante un
error o una transgresión, sabe que lo más probable es un reproche. Pero en
este caso no ocurre así: los otros son impredecibles.
En la interacción se dan conductas en los padres que no siguen criterios
consistentes. Indistinta y contradictoriamente recibe premios y castigos, lo que
no le permitirá un adecuado autoconocimiento y repercutirá negativamente en
el desarrollo afectivo del adolescente.
Los comportamientos reactivos se dan a partir de interacciones inadecuadas y
consisten en muestras de desacuerdos generalmente no verbales. Si hay
ausencia de interacciones, el niño se siente abandonado, lo que también traerá
consigo reacciones de demanda afectiva, que generalmente se expresan en
conductas negativas. La inestabilidad emotiva se expresa por otra parte
fundamentalmente en reacciones bruscas, comportamientos agresivos e
hiperactividad. Por supuesto que todas estas dificultades en las relaciones
familiares afectan la formación de la personalidad y la interacción con otros, y
traerá consecuencias desestructuradoras en el yo.
La inseguridad es una característica que se manifiesta en cualquier etapa, en
un ambiente integrador, coherente y compresivo, los conflictos pueden
solucionarse, y el sujeto logra integrarse al mundo de los adultos, o sea, que el
clima familiar determina en gran medida que esto sea sólo una característica
transitoria; sin embargo, cuando la familia no permite el crecimiento adecuado
del sujeto, la inseguridad puede convertirse en permanente, y ocasionar incluso
inadaptación social. La forma más evidente de manifestarse esta característica
es mediante la afectividad alterada: desconfianza, indiferencia afectiva,
resistencia a la afectividad, labilidad afectiva, dificultad para expresar
emociones.
En fin, que cuando analizamos la relación padres- hijo le damos un lugar
privilegiado a la afectividad, la cual incluye la respuesta afectiva o
extensión en que los miembros de la familia son capaces de experimentar
y expresar emociones o afectos sobre determinado rango de estímulos, y
se manifiesta por medio de expresiones de bienestar, por un lado. En
familias que hemos atendido apreciamos que las expresiones de bienestar más
comunes son de amor, ternura, cariño, alegría. También y por supuesto, por
otro lado por medio de expresiones de malestar-ira, furia, rencor, tristeza- y la
satisfacción o no por la forma en que éste se trasmite, que va desde una plena
satisfacción por predominar la complacencia respecto al clima familiar, vivencia
de pertenencia a la familia y confianza en su apoyo, hasta la insatisfacción,
cuando el clima es negativo, con muestras de tirantez y/o indiferencia hacia los
demás, no se vivencia la familia como grupo de pertenencia, ni se confía en
ella como fuente de apoyo.
· Capacidad empática: posibilidad de cada miembro de ponerse
en el lugar del otro en el marco de las relaciones interpersonales hacia el
interior del grupo familiar.
· Cohesión: capacidad que tienen los miembros de la familia de
apoyarse mutuamente y establecer compromisos unos con otros.
· Identidad familiar: es fenómeno complejo y plurideterminado por
diversos factores y procesos. Es hablar de sentido de pertenencia, de procesos
de continuidad y ruptura, es hablar de un sistema de creencias compartidas.
Constituye el sentimiento subjetivo de la familia de su continuidad a lo largo
del tiempo. Es una estructura cognoscitiva con una gran carga emocional y
vivencial. Representa una series de creencias, actitudes y atribuciones
fundamentales que la familia comparte respecto así misma. Esta identidad
familiar, es lo que en plano psicológico distingue una familia de otra.
Por otra parte y bajo otra visión. ¿Cuáles son los modos que se utilizan en la
familia para comunicarse? ¿Se defienden constantemente porque se sienten
atacados?, ¿se agreden?, ¿se escuchan con respeto?, ¿unos lo acatan todo
pasivamente mientras otros se imponen? Al respecto V. Satir (1995) señala
cinco estilos comunicativos que se emplean, que no son más que el cómo se
efectúa la comunicación:
Esta autora explica que los cuatro primeros son expresión de comunicación
disfuncional y cada uno evoca una actitud determinada en el otro.
ESTILOS CONSECUENCIAS
· Inculpador ------------------- Temor
· Aplacador ------------------ Culpa
· Calculador ----------------- Envidia
· Distractivo ---------------- Diversión
Nota: el profesor puede utilizar la visión que considere más adecuada según su
experiencia.
· Solución de conflictos
Estrategias en el manejo de los conflictos
“El conflicto es una realidad de la vida personal y de la interrelación entre
padres e hijos. Se define como un evento que comprende conductas
incompatibles, de desacuerdo y oposicionales”. (De la Espriella, C; 1995; p. 48)
Consideramos que las estrategias para su manejo pueden clasificarse en tres
categorías; evasión, defusión o aplazamiento y confrontación. Esta clasificación
ha sido retomada por diferentes autores e su ejercicio práctico, entre los que se
encuentra M. Myers Tolela, (1985)
· Evasión o Evitación: Puede emplearse como respuesta al conflicto
actual o potencial. El fundamento de la evitación es que si de alguna
manera se pasa por alto una situación desagradable, ésta se alejará y
no habrá necesidad de enfrentarla. Existen muchas maneras de evitar el
manejo del conflicto como reiterarse, negarse, suprimir o suavizar algo.
Este se manifiesta en la familia cuando se está fuera de la casa la
mayoría del tiempo, se excusan con el cansancio o pretenden estar
siempre distraídos en otra actividad. Puede también ser empleada la
maniobra de saturarse de trabajo y como resultado, no tener tiempo para
las relaciones interpersonales que potencialmente producirán conflictos.
Algunas personas suavizan el conflicto y parecen muy adaptables, otras
pretenden que todo se encuentre bien, cambian el tema de conversación
cuando éste se acerca al punto que genera desacuerdo, bromean y
distraen a los demás. Pero evitar las situaciones pocas veces resuelve el
problema, pues el conflicto puede volver a presentarse.
· Defusión o Aplazamiento: Se emplea cuando la persona involucrada
en un conflicto decide ganar tiempo hasta que se calmen los ánimos y
ceda la intensidad de los sentimientos. Se tratan de buscar acuerdos
sobre aspectos mínimos del tema y mantener alejado el problema
principal hasta que se obtenga más información, haya más calma o
exista una oportunidad que se considere desde una perspectiva
diferente. Las estrategias de defusión permiten cierta concordancia, pero
cuestiones principales quedan sin resolverse, a menudo, durante largo
período de tiempo.
· Estrategias de Confrontación: Son aquellas que se utilizan cuando los
involucrados se orientan a enfrentar la situación y resolverla. Según los
resultados de la confrontación ésta pueden ser:
o Estrategia de ganar–perder o de poder: Se apoya en la premisa de
que para que un conflicto se resuelva, una persona debe ganar y otra
perder. La persona que la emplea opera con aplastante autoridad. El
hecho de que el padre diga “yo soy el que mando en esta casa” es una
manera, por lo menos a corto plazo, de encontrarse del lado ganador.
Sin embargo, es probable que el conflicto se posponga y no que se
resuelva. Aunque el demostrar autoridad puede contribuir a que se le
gane una discusión, a largo plazo debilita la posición de los padres si los
hijos piensan que son gobernados sólo por la fuerza de la autoridad. En
ocasiones, el conflicto intenta resolverse con amenazas.
o Estrategia de poder–poder: Este enfoque del manejo de los conflictos
puede adoptar diversas formas. En ocasiones las partes están de
acuerdo en llegar a un punto medio que tal vez no satisfaga a nadie por
completo, pero por lo menos no proporciona una victoria o derrota total o
ninguno de los dos lados. Esta estrategia es útil a corto plazo, pero
cuando se convierte en habitual se puede pensar que la otra persona
está más ansiosa por evitar que gane que pro resolver realmente el
problema.
o Estrategia ganar–ganar o de compromiso: Se basa en el supuesto de
que el conflicto pueda resolverse en forma tal que nadie pierda. Este
manejo de conflicto permite integrar punto de vista potencialmente
opuestos y es una manera muy efectiva de resolver diferencias. Se hace
hincapié en solucionar el problema común más que en determinar quién
tiene la razón, quién no y quién es el culpable. Las necesidades de
información tienen que intercambiarse de forum abierta con el fin de
determinar los hechos a que se refiere el problema. La exploración
creativa de soluciones posibles no debe iniciarse hasta que el problema
no haya sido definido. Es importante que todos los implicados tengan
oportunidad en la sugerencia de soluciones. El resultado de la
confrontación ganar – ganar es, con frecuencia, una mejor solución que
cualquiera de las que hubiese podido lograr las partes por separado.
INTRODUCCIÓN:
En la actualidad la practica médica va en busca de una medicina más humana
pues ve al hombre en su medio familiar y social ; trasciende así los marcos
tradicionales de los enfoque clínicos, lo que da cabida a un nuevo enfoque
clínico -Epidemiológico, donde el conocimiento de la salud de la familia se hace
indispensable para el planeamiento de la acciones de la salud.
El médico de la familia no limita su trabajo solamente a la cura, al tratamiento
de las enfermedades y a los problemas de salud, sino que abarca a las
acciones educativas, de promoción de salud, prevención, rehabilitación y
mantiene el control sobre los pacientes dispensarizados. Para esto es
necesario que este se vincule estrechamente con la familia y la comunidad, y
conozca así los estilos de vida y los factores de riesgo que inciden en cada uno
de ello, de forma tal que sus acciones de intervención estén dirigidas a lograr
un modo de vida más sano.
Para alcanzar este objetivo es necesario que el médico de la familia se
convierta en un conocedor de la familia: de su composición, características,
etapa del ciclo vital en que se encuentra, desarrollo de los roles y jerarquías y
crisis por las que atraviesa la familia.
Otro aspecto importante dentro del estudio de la familia lo constituye el análisis
de la dinámica relacional interna, en tanto funcionamiento familiar, por la
influencia que éste cobra en la salud de sus miembros. La OMS considera que
la salud es un hecho que determina y está determinado por el funcionamiento
efectivo de la familia, como unidad bio-psicosocial en el contexto de una
sociedad dada.
Se conoce que el funcionamiento familiar influye en la aparición y
descompensación de las enfermedades crónicas, en la mayoría de las
enfermedades psiquiátricas y en las conductas de riesgo de salud, y es en el
grupo familiar donde se establecen las bases del proceso salud-enfermedad.
No es difícil entonces, darse cuenta de que cuando la familia pierde su
capacidad funcional se produce un daño importante en cada uno de sus
miembros y en la familia como grupo sistémico, de ahí la necesidad del estudio
del funcionamiento familiar.
En la literatura revisada hemos encontrado que no existe entre los
especialistas dedicados al estudio de la familia un criterio uniforme en cuanto a
las categorías que se deben utilizar para medir el funcionamiento familiar, de
esta misma forma se destaca un pobre desarrollo de los instrumentos que
utilizan para su evaluación.
Por toda lo anterior nos motivamos a estudiar el funcionamiento familiar, en
tanto dinámica relacional sistémica del núcleo familiar, con vistas a la creación
de un instrumento que contribuye a salvar en alguna medida las limitaciones
existentes, y que a su vez sea de fácil aplicación para el médico y el personal
que trabaja en función del desarrollo armónico de la familia, con la finalidad de
construir un instrumento que posibilite establecer un criterio homogéneo de
funcionamiento familiar.
Para la construcción del instrumento se realizó una profunda revisión
bibliográfica y se llegó a la obtención de las categorías siguientes, que a
nuestro juicio son las que evalúan el funcionamiento familiar.
Variables que evalua: cohesión, armonía, comunicación, permeabilidad,
afectividad, roles y adaptabilidad.
1- Cohesión: unión familiar física y emocional al enfrentar diferentes
situaciones y en la toma de decisión de las tareas cotidianas (1-8)
2- Armonía: correspondencia entre los intereses y necesidades individuales
con los de la familia en un equilibrio emocional positivo. (2-13).
3- Comunicación: los miembros de la familia son capaces de transmitir sus
experiencias y conocimientos de forma clara y directa. (5-11).
4- Adaptabilidad: habilidad de la familia para cambiar de estructura de poder,
relación de roles y reglas, ante una situación que lo requiera. (6-10).
5- Afectividad: capacidad de los miembros de la familia de vivenciar y
demostrar sentimientos y emociones positivas unos a los otros. (4-14).
6- Rol: cada miembro de la familia cumple las responsabilidades y funciones
negociadas por el núcleo familiar. (3-9).
7- Permeabilidad: capacidad de la familia de brindar y recibir experiencias de
otras familias e instituciones. (7-12).
A partir de estas categorías se elaboró un instrumento provisional, que fue
sentido al criterio de 30 expertos.
Después de obtenidos los resultados del criterio de expertos, mediante un
análisis cualitativo, se realizaron las transformaciones señaladas por el 85% de
éstos, como mínimo. Posteriormente se reevaluó el instrumento por el grupo de
expertos hasta llegar al instrumento final y se confeccionaron mediante,
procedimientos estadísticos, las normas para su calificación.
El instrumento confeccionado evalúa el funcionamiento familiar (dinámica
relacional sistémica que se da entre los miembros de una familia), mediante la
percepción de uno de los miembros. El principio es que fuera un instrumento
sencillo, de bajo costo de fácil comprensión para cualquier nivel de escolaridad
y que pudiera ser aplicado por personal especializado y no especializado.
USO
· Específico para la evaluación cuanti-cualitativa de la funcionalidad
familia.
· Para fines diagnósticos investigativo, para la preinvención o terapia de
Disfuncionabilidad familiar.
· Factible de ser utilizado por diferentes especialista y técnicos que
trabajen con la familia.
Modo de aplicación:
El tests se responde en forma auto-administrada o no.
Podrá ser aplicada a cualquier miembro núcleo familiar que tenga entre 18 y 65
años de edad y que viva establemente en el hogar de modo que conozca su
dinámica.
El sujeto realizará una valoración de cada enunciado propuesto y responderá
en función de las alternativas de frecuencias presentadas.
Sólo debe marcar una (X) en el acápite elegido.
Para la confección de las normas de calificación del instrumento se tomaron
como punto de partida las 5 categorías de la escala LiKert, y se designaron
una puntuación entre 5 y 1:
Casi siempre 5 puntos
Muchas veces 4 puntos
A veces 3 puntos
Pocas veces 2 puntos
Casi nunca 1 punto
Posteriormente se utilizaron medidas despectivas de posición (cuartiles) y
confeccionó las escalas ordinales siguientes de la cual se realizó la nominación
cualitativa del instrumento, que va desde la expresión positiva de las categorías
que define el funcionamiento familiar, hasta la expresión negativa:
De 70 a 57 Familia funcional
De 56 a 43 Familia moderamente funcional
De 42 a 28 Familia disfuncional
De 27 a 14 Familia severamente disfuncional
La puntuación final se obtiene de la suma de los puntos por ítems. Es
necesario considerar la necesidad de realizar un análisis cualitativo de los
resultados en donde más que decir si es funcional o no, es de gran importancia
reconocer porque lo es teniendo en cuenta los resultados, para lo cual se
podría realizar una entrevista de retests.
1. Se toman decisiones
para cosas impor- ________ ______ _____ _______ ________
tantes de la familia.
12. Ante una situación fami- __________ _________ _______ _____ ______
liar difícil somos capaces
de buscar ayuda en otras
personas.
Revisar:
· Revista Cubana de Medicina General Integral 1994, Vol. 10. No 1
· Revista Cubana de Medicina General Integral 1996, Vol. 12. No 1
Antecedentes:
Este tests ha sido utilizado por varios investigadores, sin que alguno de ellos
haya expresado su origen y autoría. A sido empleado en la investigación de la
familia adaptándolo a los objetivos que se pretenden alcanzar.
El objetivo del tests es diagnosticar el modo aproximado de cómo el niño
expresa, mediante un dibujo, el lugar que tiene en su núcleo familiar y las
relaciones afectivas que se han establecido con sus padres y otros miembros
de la familia. Las vivencias que expresan en sus relaciones familiares.
Instrucción: consiste en la petición que el investigador hace al sujeto de que
se dibuje con su familia realizando una actividad “Píntate tú y tu familia
realizando una actividad”. Es importante dejar bien expuesta la consigna que
se le da, solo se puede repetir la misma, sin destacar algo en ella. No se le
brindan niveles de ayuda al niño. El investigador deberá estar muy atento al
modo en que el niño realiza el dibujo de su familia
Materiales: se utiliza una hoja de papel de 28x21 cm. y lápiz de escribir.
Opcional colores.
Procedimiento: Una vez culminado el dibujo del niño el profesional realiza una
entrevista de retes con el objetivo de constatar el por qué de las características
pictóricas expresadas por él.
Calificación: El análisis del tests es cualitativo en función de los parámetros
siguientes:
· Miembros de la familia que incluye: señalar a los miembros de la familia
que pinta el menor.
· Orden en que pinta las figuras: La primera persona pintada es aquella a la
que el niño le da mayor importancia.
· El tamaño de la figura que dibujan: será pintada tanto más grande cuanto
mayor sea su acercamiento afectivo.
· La calidad del trazo: mientras más cuidado demuestre en su presentación
mayor será su compromiso afectivo, de naturaleza afectiva.
· Lugar en que se coloca el dibujo en la hoja: el cuadrante superior
derecho es el reservado para la mejor figura.
· Lugar que ocupa la figura del niño en relación con las otras, posición
en que se pinta el niño: el niño se pintará al lado de los familiares más
significativos para él. El que tiene a la derecha es el más importante.
· Cuando encuadra la figura (las encierra en recuadros): significa que
separa las relaciones afectivas entre ellas.
· La actividad que realizan cada miembro de la familia. Tipo, forma y
dinámica de actividad que realizan: esta puede corresponder a
situaciones reales o imaginadas. Si es una sola actividad en los que todos
intervienen, resulta fácil concluir que existe buena armonía familiar. Es
importante destacar cuál es la actividad que realizan.
· Las figuras excluidas, omisiones: son en realidad rechazadas.
· Si el niño se excluye del dibujo realizado por él: denota que su grado de
integración familiar es bien pobre.
· Si el niño se pinta sobre el borde inferior de la hoja: será signo de
búsqueda de apoyo y seguridad.
· Si las figuras se pintan a distintos niveles: hay desorganización en la
familia y los niveles superiores corresponden a los miembros de la familia
considerados más importantes.
· Figuras mutiladas: indagar razones de la mutilación.
· Figuras escondidas dentro o detrás de objetos: algo impide el
acercamiento afectivo. Indagar.
· Elaboración de cada figura: las figuran más elaboradas denotan
cercamiento afectivo.
· Estructura del dibujo.
Debe tenerse en cuenta la lateralidad del infante en algunos de los indicadores
expresados con anterioridad.
En general se valoran las vivencias que el niño exprese sobre el modo en que
se han establecido los vínculos afectivos que mantienen en su núcleo familiar,
así como aquellos aspectos que más se destaquen en las relaciones, y que él,
o bien ha manifestado en su dibujo, o bien lo expresa a partir de las preguntas
del investigador.
El tests puede brindar más posibilidades de análisis, si se le orienta al niño el
empleo de colores.
De manera general, recuerden que en el diagnóstico familiar es importante
determinar la funcionalidad familiar, teniendo en cuenta los indicadores
funcionales y disfuncionales de la familia.
Indicadores de funcionales en la evaluación familiar.
· Ambiente familiar organizado y cuidado independientemente de las
condiciones materiales de vida.
· Jerarquías claras aunque flexibles entre padres e hijos y entre
generaciones.
· Roles genéricos claros aunque flexibles, roles psicoemocionales
potencializadores de la autoestma y la acertividad, roles funcionales
equitativos.
· Estilo democrático y participativo que permite la existencia de varios tipos
de liderazgo, en función de las potencialidades de sus miembros.
· Límites entre subsistemas claros, permeables y flexibles.
· Ética relacional justa.
· Capacidad de expresar afectos positivos con lenguaje de sentimientos.
Permiso para expresar la hostilidad sin carácter violento ni destructivo.
· Capacidad empática de los miembros de la familia. Respeto y comprensión
por los problemas de los otros familiares.
· Sentimiento de pertenencia, identidad familiar.
· Patrimonio simbólico amplio y diverso.
· Rutinas cotidianas claras y establecidas.
· Capacidad de celebrar y emplear tiempo ritual.
· Comunicación clara con direccionalidad adecuada, directa y con apertura.
· Capacidad de solucionar conflictos de manera efectiva.
· Capacidad de aprender de las crisis.
· Capacidad de utilización de las redes de apoyo formal e informal.
Familias multiproblemas: