Resumen Gourevitch 1986
Resumen Gourevitch 1986
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Capítulo 2
En cada crisis los países eligen una política. La meta de este libro es dictaminar cómo y por qué
los países eligen políticas particulares en respuesta a las grandes perturbaciones de la
economía internacional. Se identifican 5 grandes áreas en materia de política: liberalismo o
neoclasicismo, socialización de la propiedad y planeamiento.
El liberalismo clásico sostiene que un mercado libre y sin trabas rinde la mayor producción y
por lo tanto la mayor riqueza total. Reducir el papel de la acción del gobierno. La solución
neoclásica a las dificultades consiste en dejar que el mercado reasigne recursos y en permitirle
hacerlo con toda desenvoltura. Concepto de ventaja comparativa: todo el mundo se beneficia
de la especialización.
En momentos de crisis esta opción nos dice que la respuesta es dejar que el mercado haga lo
suyo, dejar que la competencia imponga un reajuste, aun al costo de desempleo y quiebra de
empresas. Los malos tiempos son parte del proceso que producen los buenos tiempos.
En los períodos de desempleo el gobierno debe reducir el gasto y los impuestos. Debe
equilibrar el presupuesto al nivel más bajo posible para reducir los costos de las empresas. La
presión del desempleo obligará a los salarios a responder a las fuerzas del mercado y se
reducirán. Los precios caerán hasta el punto en que la demanda es reanimada.
El gobierno debe intervenir para sostener una paridad fija con el oro, dando esa predecibilidad
de los valores que es necesario para sostener el comercio internacional, esta es la única
excepción. Esta actitud política es prociclica, es decir que exige que el gobierno proceda junto
con el ciclo de los negocios y no contra él, y que sean favorecidos los efectos disciplinarios de
la baja de la demanda en lugar de oponerse a ellos. No tolera ningún esfuerzo gubernamental
por ofrecer compensación o facilitar la caída.
Socialización y planeamiento
El proteccionismo
El estímulo a la demanda
Surgió durante los 30 tras la Segunda Guerra Mundial. El estímulo a la demanda consiste en un
gasto deficitario del gobierno para dar oxígeno a una economía estancada. La formulación
teórica de Keynes hizo ver la insuficiente atención que la ortodoxia del mercado prestaba al
problema de la demanda. El problema no consiste en tener muy poco capital como argumenta
la escuela clásica, sino en tener demasiado capital y muy poca demanda. La respuesta
adecuada a un estancamiento severo consistía en reestimular la economía por medio de déficit
gubernamental. Gastar más de lo que se recibía haría entrar dinero a la economía aumentando
la demanda de bienes. Mediante un efecto multiplicador este gasto llegaría a penetrar en la
economía elevando el nivel general de la demanda y desencadenando una espiral ascendente
y benéfica de demanda, produciendo ventas, ganancias y ofreciendo nuevos incentivos a la
inversión.
Mercantilismo
El término mercantilismo significa acción del estado en ayuda de industrias específicas o aún
de empresas específicas. Tal acción puede adoptar varias formas: subsidios para empresas
individuales, regulación legal de mercados, normas de fabricación, etc. En contraste con otras
opciones políticas el mercantilismo puede intervenir en un nivel microeconómico, es decir en
el nivel de la empresa específica. Las otras opciones actúan al nivel del mercado, la política
mercantilista se centra en problemas de organización y estructura industrial. Pero la política
mercantilista no tiene que limitarse a la industria. La política mercantilista es que el mercado,
por sí mismo, no es adecuado para la tarea económica de que se trata. La tecnología es
sumamente compleja, costosa e inestable y causa demasiada incertidumbre con respecto a las
ganancias para apoyar la inversión. Cuando se quiere justificar el mercantilismo se habla de los
problemas específicos del capitalismo en diferentes situaciones nacionales. El mercantilismo
exige mecanismos institucionales muy complejos en comparación con las otras políticas. La
selectiva asignación de recompensas y frenos exigen una maquinaria institucional capaz de
establecer discriminaciones. Si los gobiernos quieren recompensar a quienes triunfan y
compensar a quienes pierden deben poder determinar quiénes son quiénes.
Para explicar las elecciones de política económica tenemos que vincular los resultados de las
medidas con la política en general. El autor simplifica el universo de las teorías en 5 familias de
argumentos: La explicación por medio del perfil de la producción (1) subraya las preferencias
de los actores sociales, cómo son determinadas por su situación en la economía internacional y
nacional. La explicación por medio de asociaciones intermedias (2) subraya el papel de las
organizaciones como los partidos políticos y los grupos de interés al relacionar las preferencias
sociales con las instituciones del estado. La explicación por la estructura estatal (3) subraya el
papel de las instituciones formales, es decir la burocracia, y las reglas al mediar entre interés,
al definir tanto los intereses como las asociaciones intermedias. La explicación mediante la
ideología económica (4) subraya el papel de percepciones, modelos y valores al determinar las
interpretaciones de la situación económica y de las circunstancias políticas que influyen sobre
las preferencias y la conducta.
Para las empresas son pertinentes 5 consideraciones principales a determinar las actitudes
hacia la política económica:
El interés del autor está en las preferencias y alianzas políticas. La conducta de los actores
económicos es afectada por sus preferencias y éstas a su vez son afectadas por la situación.
Los actores idénticamente situados pueden adoptar diferentes políticas, dependiendo de las
preferencias de otros actores del sistema político del que forman parte. Entonces, explicar la
opción política de un país nos exige trazar la situación de los actores sociales en la economía
internacional.
Entre los políticos y los actores hay una red de asociaciones planeada para representar a los
actores sociales y establecer nexos entre el gobierno y la sociedad. Los partidos políticos, los
grupos de interés,etc. Semejantes organizaciones ejercen sobre la política un efecto que puede
interpretarse como autónomo de los grupos, los individuos o las fuerzas que representan.
Las fuerzas sociales y las asociaciones representativas deben actuar por medio del estado para
alcanzar sus objetivos. La estructura del estado, sus reglas e instituciones, pueden ejercer un
efecto muy considerable sobre los resultados. Las instituciones y la política dan forma a las
organizaciones. Esta explicación por estructura estatal obtiene su fuerza de los efectos que los
mecanismos de toma de decisiones tienen sobre el resultado de la agregación de las
preferencias sociales y el cabildeo de grupos de interés y partidos.
Los actores evalúan una crisis económica en función de sus propias situaciones en la economía
internacional. La ideología económica también puede decidir los cálculos políticos, al influir
sobre las interpretaciones de quiénes son los actores, qué desean y de lo que harán. Algunos
países tienen robustas tradiciones de libre comercio, o de participación activa en el gobierno
para promover el desarrollo económico.
El sistema internacional ejerce una poderosa influencia sobre los factores que integran el
sistema nacional. La economía y el efecto de poder del mercado y las rivalidades político-
militares y el efecto de la fuerza. La teoría militar al nivel del sistema examina los efectos de la
guerra sobre la distribución del poder en la sociedad. Cuando los países entran en rivalidades
militares desarrollan maquinarias militares que alteran sus sistemas políticos.
La relación entre las variables no es constante. Las relaciones se alteran con las circunstancias
y los períodos, es decir que no son teóricas sino sociológicas.
Capítulo 4
El Gran Crash de 1929 fue la más grande catástrofe económica. Conforme se sentía por todo el
mundo las consecuencias de la Depresión, la mayoría de los países respondían con la misma
política económica: la deflación, la respuesta prescrita por el análisis ortodoxo. Pero no
funcionó. Luego de unos años de fracaso casi todos los países abandonaron la deflación y se
apartaron de la ortodoxia.
Suecia
Acuerdo de 1938: Aceptación de las empresas altos costos laborables (altos salarios y
beneficios del estado benefactor) una política fiscal de pleno empleo y activismo
gubernamental en pro de servicios sociales, a cambio de paz laboral en los mercados de
trabajo, es decir nada de huelgas. Esta pauta prevaleció. Los socialdemócratas lograron
aprovechar la Depresión para hacer una realineación decisiva de política sueca, su propia
política no desempeñó un gran papel para sacar de la Depresión a Suecia.
Gran Bretaña
En UK el bloque de las empresas tenían desventajas de posición en comparación con las de los
otros países. En ningún otro país se enfrentó la industria a un numeroso grupo de intereses
atados al comercio y los pagos internacionales. USA, Alemania, Suecia y Francia tenían menos
inversionistas extranjeros y no manejaban una moneda de reserva. Ese internacionalismo
inhibía al militarismo, pues la autarquía no era atractiva viviendo del comercio internacional.
En segundo lugar, la agricultura como sector era la más pequeña en UK que en ninguna otra
parte. Como consecuencia, había menos aliados para el ataque al internacionalismo. Además,
la fuerza de trabajo estaba fuertemente unida a la rebanada barata, hacendo más difícil la
formación de una alianza proteccionista que incluyera a la fuerza laboral.
Alemania
La experimentación fue más drástica, utilizó un poderoso estímulo fiscal antes y más
extensamente que otros países. La experimentación de política económica de los primeros
años del régimen nazi es una forma intensificada de aquello a lo que Suecia, USA y Francia iban
avanzando. Este experimento político combinó elementos de apoyo a las masas, incluyendo
una mano de obra no sindicalizada, agricultura y elementos antiinternacionalistas. Las
innovaciones en materia de política económica estuvieron unidas al más extremo
nacionalismo.
Estados Unidos
La pauta de USA se asemeja a la de Suecia. La política de la deflación se desplomó después de
la depresión, cediendo ante la experimentación política del New Deal. La depresión debilitó la
influencia republicana sobre la política económica de USA. Los internacionalistas buscaban
intensificar la inserción de USA en la división internacional del trabajo y para ello pedían bajos
aranceles, tratados comerciales, etc. Los nacionalistas no veían la necesidad de promover el
comercio internacional. El soporte básico a los internacionalistas procedió de los banqueros
orientados al comercio. El apoyo a los nacionalistas procedió de las grandes industrias de
acero.
Cuando la depresión llegó con mayor furia a finales de 1929 Hoover mezcló dos formas de
ortodoxia: la neoclásica de la deflación, y la habitual republicana de los altos aranceles. Pero la
depresión empeoró y aumentó el descontento contra la ortodoxia. Surgió también el
descontento entre los obreros contra los republicanos.
El corporativismo fue una solución interna y el primer New Deal fue una derrota para los
internacionalistas. Roosevelt pasó por alto las tradiciones librecambistas en favor de los
sentimientos proteccionistas de clase obrera. La situación económica mejoró pero sólo
lentamente. Fue un esfuerzo para introducir cierto grado de corporativismo en una economía
política liberal. Se permitió que la agricultura, la fuerza de trabajo y algunos elementos de las
empresas organizaran sus mercados, dando un refugio contra las fuerzas de mercado.
Francia
Probó una vasta gama de medidas políticas para combatir la depresión, ninguna de ellas
funcionó como se deseaba. El Frente Popular logró romper con la ortodoxia de forma similar a
otros países: seguro social, derechos sindicales, aumentos salariales, estímulo a la demanda,
etc. Sin embargo, no lograron alterar mucho la política económica y prevaleció la ortodoxia
económica. Los socialistas y comunistas se beneficiaron de no haber estado en el poder
cuando la depresión llegó, la interpretaron como una crisis del capitalismo, que solo podía
resolverse mediante la socialización de la economía. La política popular de 1936 buscaba
responder a las presiones de agricultores, obreros y diferentes grupos de empresas.
La mayor parte de la industria francesa era intensiva en mano de obra y proteccionista, y pocas
compañías buscaban crear una estrategia abierta, internacionalista. No funcionaron bien los
esfuerzos de los franceses por romper con la ortodoxia, nuevas coaliciones se inclinaron hacia
la derecha anulando muchas reformas del Frente Popular. A diferencia de Suecia en Francia la
coalición de estímulo a la demanda fue más débil y tuvo menor éxito.
Parece haber cierta congruencia en la sociología política de los esfuerzos por romper con la
ortodoxia económica y experimentar con el estímulo a la demanda. Se puede ver en dos
pautas: La “propensión marginal” de varios grupos a apoyar o no apoyar los grandes
rompimientos con los principios del mercado durante los 30’s. La otra es la “valencia de la
alianza” de los grupos, es decir, su propensión a formar alianzas con otros grupos para apoyar
ciertas medidas políticas en particular.
En la cúspide de la depresión, 1932- 1933 los sindicatos, asociaciones agrícolas, las industrias
preocupadas por la estabilidad de la demanda, fueron los grupos que más presión hacían
pidiendo soluciones a la crisis, encabezados por el Estado. En muchos puntos estos grupos
tradicionalmente habían estado en intenso conflicto por los costos de los alimentos y precios,
salarios y derechos de propiedad, etc. Sin embargo, al empeorar las condiciones rápidamente
evolucionaron las preferencias políticas de estos grupos: desearon ayuda. Sus compromisos
ideológicos con el papel “apropiado” del gobierno se desintegraron.
Después de 1935, al resucitar las economías, vemos una segunda fase de la experimentación
política y económica, con algunos cambios en la sociología política de las decisiones.
Donde la agricultura estuvo dispuesta a aceptar las metas de los industriales y de la fuerza de
trabajo y a olvidar su repugnancia a toda intervención del estado puedo recibir ayuda de
muchas índoles. Donde las empresas estuvieron dispuestas a pagar costos por la fuerza de
trabajo y a aceptar la extensión del estado pudo aceptar ciertos recursos que fueron desde la
institucionalización de acuerdos hasta medidas de urgencia. Sin embargo, donde no hubo
concesiones la ortodoxia prevaleció, como en UK.
1944- 1949
Los programas de beneficencia no sólo ayudaron a sus receptores sino tmb a los productores,
fijando un mínimo de la demanda y un estabilizador a los vaivenes del mercado abierto. Estos
programas nacionales quedaron insertados en un orden internacional que sería abierto e
institucionalizado. Para combatir el nacionalismo económico de los 30’s los países suscribieron
el acuerdo general sobre aranceles aduaneros y comercio, comprometiéndose con el libre
comercio. Fue la disposición a colaborar lo que produjo el compromiso histórico. A cambio
recibieron el estado benefactor, la negociación colectiva y fueron aceptados por el sistema
político. Las empresas abandonaron sus deseos de una fuerza laboral pasiva.
Alemania: Equilibrio logrado entre los impulsos liberales y los socialdemócratas en la Alemania
de posguerra. El milagro económico alemán reforzó las tendencias centristas de los años
formativos de la república federal. La Gran Coalición ayudó a certificar el Partido
Socialdemócrata y a Brandt como capaces de gobernar, entonces el partido socialdemócrata
ocupó directamente el cargo de canciller.
Francia: Francia fue el que menos éxito tuvo buscando un acomodo centrista, pero sí
experimento unos importantes cambios en sus medidas generales y su política. El desastre fue
el principal agente del cambio como en Alemania, la depresión condujo a la coalición forjada
durante la guerra entre socialistas y nacionalistas que creían en la necesidad de un cambio
drástico. El descrédito a la derecha dio al estado la influencia necesaria para cambiar la
dirección de la economía. El centrismo triunfó en Francia como en otros países, pero significó
parálisis.
UK: El gobierno laborista desarrolló un estado benefactor pero pronto fueron contenidas unas
mayores demandas de mayor transformación. Poco después de terminada la guerra fue
rechazada la planificación económica, ni la fuerza laboral ni las empresas aceptaban las
restricciones a su autonomía de acción que significaba la planificación.
Suecia: Desde el “acuerdo de vacas” de 1932- 1933 entre los agrarios y los socialdemócratas
hasta Saltsjobaden en 1938 las fuerzas sociales de Suecia llegaron a una comprensión. La
política fue de coalición como en USA y la agricultura, tmb como en USA, fijó límites a los
logros de la fuerza de trabajo. En cambio, el partido aceptó la realidad de tener que
administrar una economía capitalista, de equilibrar las reclamaciones de sus votantes
sindicales contra los de los inversionistas. Y lo hizo con éxito.