Ideas Politicas
Ideas Politicas
Ideas Politicas
Tema: Las Ideas políticas en Europa en la edad moderna, teorías jurídico naturales en Alemania
siglos XVII Y XVIII ideas políticas de Pufendorf, Tomasio, Wolf.
Presentado:
Semestre: IX
Puno -Perú
2022
IDEAS POLITICAS EN EUROPA EN LA EDAD MODERNA
RESUMEN:
En la Edad Moderna la sociedad se organizaba social y políticamente a través de la corte. Esta
era contemplada como una comunidad moral y política, cuyo fundamento filosófico era el
conjunto de las disciplinas ética, o económica del griego oikos, ‘casa’ y política, heredado de la
Antigüedad clásica, existiendo una continuidad entre los ámbitos doméstico y político. Es desde
este punto de vista desde el que se analizan las ideas políticas y sociales de la Edad Moderna,
con un lenguaje dirigido tanto a estudiantes y profesionales como a amantes de la historia y de
otras disciplinas cercanas. Para ello, se explica la organización política de la corte, compuesta
por casa real, tribunales y consejos, cortesanos y sitios reales, para abordar en los capítulos
siguientes el debate sobre las ideas políticas y sociales que legitimaron el gobierno cortesano,
como fueron la económica, la libertad política, la virtud y la educación.
Se llama Edad Moderna a la etapa de la historia europea que va desde mediados del siglo
XV hasta finales del siglo XVIII.
Los sucesos que marcaron el final de la Edad Media y el comienzo de la Edad Moderna varían
según distintos autores, pero en general se consideran la invención de la imprenta en 1440;
la toma de Constantinopla por los turcos en 1453, o la llegada de los europeos a América, en
1492.
Por otro lado, sí existe consenso para tomar la Revolución francesa de 1789 como fecha de
finalización de este período y comienzo de la Edad Contemporánea.
Algunas de las características más importantes de la Edad Moderna fueron las siguientes:
La crisis de la iglesia católica que culminó con la Reforma protestante provocó la ruptura
de la unidad religiosa de Europa. A partir de la Edad Moderna convivieron, muchas veces
con graves conflictos, distintas religiones cristianas.
Los principales y más relevantes acontecimientos ocurridos durante la Edad Moderna fueron
los siguientes:
Fecha Acontecimiento
Cristóbal Colón, un navegante genovés al servicio de los reyes de España, inició una expedición
1492
marítima que lo llevó a América.
1642- Se produjo la Revolución inglesa, una serie de enfrentamientos por el poder político entre
1688 la monarquía absoluta y los integrantes del Parlamento.
1688- En Inglaterra, la Revolución Gloriosa puso fin a la monarquía absolutista y consagró la monarquía
1689 parlamentaria.
1700 Se iniciaron una serie de Reformas borbónicas para modernizar la monarquía española.
Estalló la Revolución francesa, la cual derrocó a la monarquía y cambió las estructuras de poder
1789
en Francia.
La Edad Moderna traerá consigo numerosos cambios políticos, muchos de los cuales ya habían
empezado a gestarse en el Medioevo, como el surgimiento de la burguesía mercantilista, que
asumirá posteriormente el rol político protagónico en sustitución de la antigua aristocracia y del
clero. Esta revolución política y social tendrá su primera anunciación con la Revolución Francesa
de 1789, en donde los Reyes de Francia serán decapitados.
Otro cambio importante será la escisión entre Estado e Iglesia, que se dará paulatinamente a
medida que los reinos de antaño devengan naciones estado. Esto significa que los códigos
legales y las regulaciones y disposiciones sociales dejarán de obedecer a los mandamientos
morales de la Iglesia y se desarrollarán por lo tanto como un cuerpo discursivo propio e
independiente: las leyes.
Sin embargo, los grandes Imperios europeos no verán su declive sino hasta el final de la Era,
cuando inicien los procesos de cambio que conduzcan a la pérdida de muchas de sus colonias.
Durante la era moderna, más bien, se consolidarán como potencias mundiales, una vez que sus
navegantes y exploradores descubran los continentes de América y Australia, aproximado por
primera vez territorios que se ignoraban mutuamente desde la prehistoria.
A partir del ingreso en Europa de los metales preciosos americanos, se desarrolló en los Estados
europeos el mercantilismo. Esta doctrina económica consideraba que la riqueza de los Estados
dependía de la cantidad de metales preciosos que pudieran acumular.
EL IUSNATURALISMO
El iusnaturalismo tuvo su mayor influencia en los siglos XVII y XVIII, tiempo en el que desempeñó
un rol de gran magnitud en la formación de los juristas y en la elaboración de los principios
jurídicos dominantes se caracteriza por sostener conjuntamente dos tesis
a) Una tesis de filosofía ética que sostiene que hay principios morales y de justicia
universalmente válida y asequible a la razón humana.
b) b) Una tesis acerca de la definición del concepto de derecho, según la cual un sistema
normativo o una norma no pueden ser calificados de “jurídicos” si contradicen aquellos
principios morales o de justicia
Para la doctrina del derecho natural, por encima de las normas dictadas por los hombres se
encuentra un conjunto de principios morales universalmente válidos e inmutables que
establecen criterios de justicia y derechos fundamentales insitos a la verdadera naturaleza
humana. Ellos incluyen el derecho a la vida, a la integridad física, a expresar opiniones políticas,
a ejercer cultos religiosos, a no ser discriminado por razones de raza, a no ser coaccionado sin
un debido proceso legal, etc. Estos conjuntos de principios conforman lo que se ha dado en
llamar “derecho natural”.
las normas positivas dictadas por los hombres sólo serán consideras “derecho” en la medida que
estén conformes al derecho natural y no lo contradigan. Así, el orden jurídico se justifica por su
conformidad a los principios superiores que deben guiarlo, y cuyo conocimiento permite valorar
el contenido de las normas. La obligatoriedad del derecho no deriva, por lo tanto, de la simple
existencia de un mandato –ya sea divino o humano–, sino de su adecuación a los preceptos
fundamentales que constituyen su base racional
El iusnaturalismo de orientación cristiana ha sido criticado por asentarse en postulados que todo
individuo no creyente no comparte. Como respuesta a esta crítica, Jacques Leclercq considera
que el derecho natural no está dirigido sólo a creyentes de determinada religión, y que no debe
deducirse de un plan divino sino de la “naturaleza social del hombre”, siendo la sociología “la
ciencia auxiliar por excelencia del derecho natural
IUSNATURALISMO RACIONALISTA
La escuela racionalista del derecho natural comienza con Hugo Grocio, quien sostenía que el
derecho natural tendría la misma validez universal de siempre, aunque Dios no existiese, pues
se origina en la Razón humana, que es absoluta18. Otros exponentes son: Thomas Hobbes, John
Locke, Baruch Spinoza, Samuel Pufendorf, Christian Thomasius, Gottfried Wilhelm Leibnitz,
Christian Wolf, Jean Jacques Rousseau, e Emmanuel Kant, entre otros
• Para la tesis iusnaturalista, por encima de las normas dictadas por los hombres se encuentra
un conjunto de principios morales universalmente válidos e inmutables que establecen criterios
de justicia y derechos fundamentales ínsitos a la verdadera naturaleza humana. Las normas
positivas dictadas por los hombres solo serán consideradas “derecho” en la medida que estén
conformes al derecho natural y no lo contradigan. Por consiguiente, “el derecho” se justifica no
solo por su origen sino también por su contenido;
• Los adherentes al iusnaturalismo sostienen que para que las normas tengan validez y fuerza
obligatoria no basta que sean la expresión de una voluntad competente para sancionar las sino
que, además, se requiere su conformidad con los preceptos del derecho natural, que les
proporcionan su legitimidad intrínseca;
• Mientras que para el iusnaturalismo teológico el derecho natural deriva de los mandatos de
Dios para el iusnaturalismo racionalista el derecho natural procede de la razón humana;
• Para la corriente positivista, los juicios morales son relativos y subjetivos. No existe ningún
procedimiento objetivo para demostrar la validez de ciertos juicios morales y la invalidez de
otros;
• La ideología positivista advierte que todo derecho positivo es justo por el solo hecho de ser
derecho positivo, sin importar su contenido; esto sin tener en cuenta su mayor o menor justicia
de acuerdo con el sistema moral;
Samuel Pufendorf nace en Sajonia en 1632 y muere en Berlín en 1694. Luterano ortodoxo,
enseñó en Heidelberg por primera vez en la historia la cátedra de Derecho natural y de gentes,
que posteriormente se convertirá en materia de enseñanza universitaria con el nombre de
Filosofía del Derecho. Su principal obra es De iure naturae et gentium (1672), de la cual hizo un
compendio titulado De officio hominis et civis secundum legem naturalem. Su importancia para
la historia del derecho radica, no en su originalidad y profundidad filosófica, sino en el trabajo
de sistematización y exposición de la doctrina iusnaturalista de su tiempo.
Realiza el primer intento para construir un sistema de derecho natural con la sola ayuda de la
razón, con el gran mérito de romper el monopolio del método mecanicista causal de la ciencia
de la naturaleza (Hobbes) que amenazaba extenderse a la ciencia social, al defender la
singularidad del mundo ético.
La ley es para Pufendorf, “ la decisión (decretum) con la que un superior (superior) obliga a un
inferior (subiectus) a obrar de conformidad con sus prescripciones”, y consiste por ello en un
mandato (iussum); las mismas leyes que el género humano conoce mediante la razón, o sea, las
leyes naturales tienen vigor en cuanto la razón hace entender que es voluntad y mandato de
Dios que los hombres obren conforme a ellas; erraba Grocio cuando afirmaba que la justicia
procede de la ley natural.
El hombre tiende a salir del estado de naturaleza por su instinto social y lo hace mediante la
celebración del contrato social.
Habla en primer término del pacto unión que sirve para superar la diversidad de opiniones de
los individuos que pactan, hecho lo cual se hace otro pacto por el que se crea el Estado. A
diferencia de Hobbes, que sostiene que todos los hombres renuncian a sus derechos, que ceden
a un soberano, lo que legitima cualquier forma de gobierno despótico (para Hobbes es válida la
injusticia, se cede todo en favor del Leviatán, Pufendorf afirma que el fin del Estado es la
protección de los derechos naturales, haciéndose partidario de la democracia como forma de
gobierno. De hecho, justifica el tiranicidio cuando el soberano transgrede los derechos naturales
que no desaparecen al formarse el cuerpo social, como argumentaba Hobbes, sino que se
confirman.
Ejerció una gran influencia sobre la ciencia del derecho privado, toda vez que sus obras se
convirtieron en libro de texto. Wieacker le reconoce el mérito principal de su labor
sistematizadora:
Este sistema perdura hasta hoy en los grandes códigos de la Europa central y puede decirse que,
en toda Europa, pues éstos estriban sin excepción alguna, en la sistematización de la ciencia del
Derecho por el Derecho natural; especialmente las partes “partes generales” de algunos de esos
códigos no serían imaginables sin el trabajo de Pufendorf. Algunas muestras de la trascendental
creación sistemática y problemática de su obra fundamental profundizan la comprensión del
Derecho privado actual de Europa. Resaltaremos el contrato y la promesa, la propiedad, así
como el contenido y la estructura del Derecho de obligaciones.
PENSAMIENTO POLÍTICO
Para explicar el origen del Estado, Pufendorf utiliza los dos recursos clásicos en su tiempo, el
estado de naturaleza y el contrato. El hombre natural no es totalmente peligroso, pues es
sociable, ni totalmente inocente, pues ya se ha producido el pecado original. El Estado se forma
por el doble contrato, social y político. El pueblo, por tanto, se constituye en realidad antes que
el gobernante y establece la condiciones que regulan la función del gobernante: puede limitar o
no limitar el poder del gobernante. Esta limitación se entiende en cuanto a la atribución de
funciones y en cuanto a la constitución de instituciones que controlen el poder del gobernante,
porque la misma concepción del pacto político dentro de la teoría del Derecho natural
pufendorfiano implica esenciales limitaciones internas al concepto de poder político. El contrato
político para Pufendorf es, ante todo, origen de deberes: el deber de obediencia de los
ciudadanos y el deber de promoción del orden y bienestar general del gobernante. En este deber
está incluido el derecho a determinar qué es el orden y el bienestar general, lo cual refuerza
enormemente la posición del gobernante.
Con este concepto más elaborado del Estado examinó la constitución del Imperio, «un cuerpo
irregular y semejante a un monstruo», para concluir que no constituye un Estado, sino una
confederación de Estados, pues la soberanía, el summum imperium, estaba en manos de los
príncipes. En este aspecto la teoría política de Pufendorf venía a confirmar los resultados de la
Paz de Westfalia.
Cristian Thomasio o Cristian Tomasio (1665-1728), filósofo y jurista. Nació en Leipzig Alemania
en el seno de una familia intelectual y ejerció la docencia.
El primero de los iluministas alemanes se distinguió por la búsqueda del saber práctico y como
defensor de la ética eudemonista. Su obra filosófico jurídica inicia con la publicación de sus
Institutiones iurisprudentiae divinae (1688), donde realiza una defensa de la doctrina de
Pufendorf y continúa con los Fundamenta iuris naturae et gentium ex sensu communi deductur
(1709), obra donde se aprecia la exposición de su propia doctrina.
Acorde con el espíritu iluminista, la obra de Tomasio posee un carácter pragmático, donde la
utilidad se impone como finalidad de la acción humana. La finalidad práctica del saber es la
eliminación de la intolerancia y el ejercicio de la libertad de pensamiento. Sobre este postulado
de la libertad de pensamiento Tomasio construye su doctrina más significativa respecto a la
separación de la moral y el derecho, continuando con la línea secularizadora de los pensadores
alemanes del derecho iniciada en el siglo anterior, principalmente con Pufendorf, y que, después
de Tomasio, consagrará definitivamente Cristian Wolff. La separación entre moral y derecho en
el pensamiento de Tomasio implica también, en un plano más general, la separación del derecho
natural y el divino y de la filosofía y la teología. De su primera postura como defensor de la
doctrina de Pufendorf, Tomasio radicalizará más sus argumentos en contra de la escolástica
luterana.
El derecho divino queda reducido exclusivamente a la interioridad del sujeto, por lo que se
vuelve innecesario para la conformación de la vida política y social. La razón se erige en el
sustituto definitivo de cualquier instancia religiosa, descartándose todo precepto religioso que
se entiende como un prejuicio. La razón se erige como única fuente posible del derecho natural,
al que entiende en dos sentidos:
En sentido lato comprende todos los preceptos de conducta emanados de la razón, omnia
praecepta moralia ex ratiocinatione profluentia ; en sentido estricto debe ser entendido pro
solis praeceptis justi, quatenus ab honesto et decoro distinguitur, o sea, referido a la justicia, en
cuanto distinta de las otras dos formas de la acción humana, que Tomasio llama honestum y
decorum. Así, se anuncia aquí lo que constituye el motivo principal de interés de la filosofía
jurídica tomasiana, la distinción del Derecho de las otras normas de conducta, y en particular de
la moral; distinción que para Tomasio ocupa el primer puesto y se expone con términos precisos.
El fin universal del obrar, que para Tomasio, como se ha dicho, es una vida lo más larga y feliz
posible, exige que se viva de modo honesto, decoroso y justo, si ninguno de estos tres modos
de comportarse debe excluirse mutuamente, cabe aún distinguirlos unos de otros. Tomasio los
distingue según el principio de cada uno: el honestum es hazte a ti mismo lo que quieras que
los demás se hicieran a sí mismos; el decorum haz a los demás lo que quieras que los demás te
hagan a ti; el justum no hacer a los demás lo que no quieras que te sea hecho.
Las normas éticas o morales constituyen obligaciones internas, mientras que las del decoro y la
justicia son obligaciones externas que requieren para su cumplimiento de la existencia de por lo
menos dos sujetos. Estas últimas se distinguen entre sí con la nota característica del justum
como norma coercible, de donde emana su juridicidad. La coercibilidad se justifica por la
necesidad de asegurar la paz externa.
Esta determinación tomasiana de la juridicidad es relevante no sólo bajo el aspecto lógico, sino
que lo es, o mejor dicho lo fue, también bajo el aspecto práctico y político, que era lo que más
interesaba a Tomasio como iluminista. Si solamente los deberes jurídicos son coercibles, y si
únicamente el comportamiento jurídico, es decir, el externo, es relevante a los fines de la paz
social, ya que la moral no se refiere más que a lo interno del individuo, y si sólo las acciones
externas, jurídicas, pueden ser objeto de coacción, toda aquella parte de la vida del hombre que
tiene su raíz y su causa en el interior de la conciencia no podrá, por ende, ser sujeta a coacción
por parte del poder político o eclesiástico; viene así afirmada la libertad de pensamiento y de
religión.
La doctrina de la distinción del derecho y la moral anticipó la distinción estructurada por Kant, y
aunque no fue un pensador de gran profundidad se le debe reconocer su contribución a la
tolerancia y la libertad de pensamiento.
Christian von Wolff, también conocido como Christian Freiherr von Wolff, nace en Breslau,
Silesia, 24 de enero de 1679 y fallece, 9 de abril de 1754, fue un filósofo alemán que tuvo una
destacada influencia en los presupuestos racionalistas de Kant.
Distinguido por su racionalismo extremo, Cristian Wolff buscó una sistematización general de la
filosofía y, por lo tanto, también del derecho. Más que un pensador original, Wolff es reconocido
por su labor de sistematización, que llega, sin embargo, a la reducción de la filosofía en
conceptos muy abstractos, por su racionalismo extremado ya histórico y su rigidez conceptual,
contribuyó, finalmente, al descrédito del iusnaturalismo. Autor de numerosas y extensas obras
entre las que destacan, para la filosofía del derecho, Ius naturae methodo scientifica pertractum,
obra en ocho volúmenes, un compendio: Institutiones iure naturale et gentum, y una teoría
moral esbozada en Philosophia moralis sive Ethica methodo scientifica pertractata.
En la línea general del pensamiento iusnaturalista, señala Wolff la existencia de una ley natural
que señala lo bueno y lo malo y que rige la conducta de los hombres, ley natural que existe
independiente de Dios. Seguidor de la filosofía aristotélica, indica que la ley natural obliga a
cumplir todas las acciones que tiendan a la perfección del hombre, y a evitar las que tienden a
su imperfección; ley universal, necesaria e inmutable, originaria en el sentido de que de ella han
de derivarse todas las demás leyes naturales según un proceso lógico. A diferencia de Pufendorf,
que adoptó como base de su sistema a la naturaleza social del hombre, Wolff coloca como base
a la naturaleza total del hombre, en su aspecto corporal y espiritual, y afirmó que la naturaleza
humana está determinada por el fin al que están dirigidas las acciones humanas, que es el
perfeccionamiento del hombre. De esta idea deduce el principio supremo de la ley natural,
válido tanto para el derecho como para la moral, y que prescribe a los hombres realizar aquello
que contribuya a su perfeccionamiento y evitar lo que pueda dañarlo o estorbarlo. Los hombres
no pueden alcanzar solos este fin, sino que necesitan de la unión de las fuerzas y el intercambio
de las prestaciones, de lo que deduce que además de los deberes hacia Dios y uno mismo, están
los deberes ante los semejantes, esto es, se debe contribuir al perfeccionamiento de los demás
hombres. Este deber de contribución es secundario frente al perfeccionamiento individual, por
lo que limita la obligación de ayudar a los otros como obligación de hacer, a la que considera
imperfecta, pero con la obligación de no hacer da el trato de perfecta, pues el otro puede
oponerse a que se ejecute la acción.
La ley natural sirve de fundamento a la ética y al derecho natural, y por vía de la deducción
informa a estas disciplinas y puede dar contenido al derecho positivo. La mayor aportación de
Wolff al pensamiento jurídico es, precisamente, su método deductivo para extraer la norma
concreta de la ley natural. El método de Wolff denota influencia de Pufendorf y la baja
escolástica española, y significa un esfuerzo por acercar la teoría del derecho natural con la idea
del derecho positivo. Wolff afirma la posibilidad de definir el derecho positivo, deducido de la
ley natural, con toda precisión y certeza. Wolff es el creador de la pirámide de conceptos y la
jurisprudencia de conceptos. La pirámide de conceptos es un método lógico (deductivo) para
extraer de los principios de derecho natural (axiomas generales) la norma. Estos principios son
la cúspide, y todo lo que de ellos se deduce es la base (norma). Su método es ir elaborando
conceptos hasta que adquieran su expresión más nítida en una norma jurídica.
CONCLUSIÓNES:
Samuel Pufendorf es tenido junto con C. Tomasio y C. Wolf, como uno de los representantes
más destacados del iusnaturalismo racionalista alemán de los siglos XVII y XV. Concretamente,
fue Pufendorf quien regentó, en 1661 y en Heidelberg, la primera cátedra europea de Derecho
Natural y de Gentes.
Después de haber conocido los textos constitucionales de la Ley Regia danesa, la Constitución
del Imperio alemán y los hechos ocurridos en el mundo político poswestfaliano, no cabe duda
que el gran innovador y responsable de los cambios que se introdujeron al sistema político del
siglo XVII es S. Pufendorf. Él es quien logra definir un nuevo gran marco conceptual para el
manejo del Estado, fundamentalmente a partir de su particular consideración del Derecho
Natural y del Estado. Todo esto, gracias a su privilegiada oportunidad de apreciar los
acontecimientos desde una posición académica tanto como política. Por último, podemos
agregar que con Pufendorf se inicia definitivamente la discusión intelectual sobre el Derecho
público alemán, en toda su extensión. Esto sucede de esta forma al poner Pufendorf sobre la
mesa su texto constitucional para ser sometido al debate, por lo cual, aún hasta nuestros días,
se considera a Pufendorf una pieza fundamental para construir una parte de un proyecto, con
el fin de elaborar una constitución común para la actual Unión Europea.
BIBLIOGRAFÍA:
• Bethell, Leslie (ed.). Historia de América Latina. 2. América Latina colonial: europa y
américa en los siglos XVI, XVII, XVIII. Barcelona, Editorial Crítica. 1990.
• Floristan, Alfredo (Dir.). Manual de Historia Moderna Universal. Barcelona, Ariel. 2005.
• https://www.caracteristicas.co/edad-moderna/#ixzz7RzeASlmt
• https://www.caracteristicas.co/edad-moderna/#ixzz7RzdHjmWG
• https://www.caracteristicas.co/edad-moderna/#ixzz7RzcvKSCU