Resumen para Expo de Derecho Romano
Resumen para Expo de Derecho Romano
Resumen para Expo de Derecho Romano
En el derecho clásico el adoptado sale de su familia civil, pierde sus derechos de Agnación y
conserva únicamente su calidad de cognado, su padre adoptivo adquiere sobre él la Patria
Potestad y su nombre se modifica como en la Adrogación.
Explicación: En el derecho clásico, el término "adoptado" se refiere a una persona que ha sido
legalmente adoptada por otra familia, abandonando así su familia civil de origen. Al ser
adoptado, la persona pierde los derechos de agnación, que se refieren a los derechos y
vínculos familiares derivados de la línea paterna, y conserva únicamente su cualidad de
cognado, que se refiere a los vínculos familiares derivados de la línea materna.
Además, en el derecho clásico, cuando una persona es adoptada, su padre adoptivo adquiere
sobre ella la patria potestad, que es la autoridad y responsabilidad parental sobre el hijo
adoptado. Esto implica que el padre adoptivo tiene los derechos y deberes legales en relación
con la crianza, educación y protección del adoptado.
Por último, se menciona que el nombre del adoptado se modifica, al igual que en la
adrogación. La adrogación es un proceso legal en el derecho romano en el cual una persona
adulta y libre es adoptada por otra persona. Durante este proceso, el nombre del adoptado se
cambia para reflejar su nueva filiación y pertenencia a la familia adoptiva.
Es importante tener en cuenta que esta descripción se refiere al derecho clásico y puede variar
en diferentes sistemas legales y culturas.
En derecho clásico, el término "cognado" se refiere a un pariente por línea materna. Se utiliza
para describir la relación de parentesco entre individuos que están vinculados por
descendencia o filiación a través de la línea materna.
En contraste con la agnación, que se basa en la línea paterna, la cognación se centra en la línea
materna y reconoce los lazos de parentesco y los derechos sucesorios que surgen de esa
relación.
En el derecho romano, por ejemplo, los cognados eran considerados parientes más cercanos
que los agnados en ciertos contextos legales y de herencia. En algunas situaciones, los
cognados podían tener derechos preferentes sobre los agnados, especialmente cuando se
trataba de la herencia de una mujer.
El Código de Familia, que es la normativa anterior, establece en los artículos del 120 al 184 la
regulación de la adopción. En dichos artículos se establece que la adopción puede ser simple o
plena. La adopción simple implica que el vínculo jurídico entre el adoptado y su familia
biológica no se rompe por completo, y el adoptado mantiene algunos derechos y
obligaciones con su familia biológica. Por otro lado, la adopción plena implica que el
adoptado adquiere los mismos derechos y obligaciones que si hubiera nacido en la familia
adoptiva, rompiendo así todos los vínculos con la familia biológica.
Sin embargo, el Código de la Niñez y la Adolescencia, que es una normativa posterior y más
específica en cuanto a la protección de los derechos de los niños y adolescentes, establece en
su artículo 68 que quedan abolidas las clasificaciones de adopción que figuran en el Código de
Familia. A partir de la entrada en vigencia del Código de la Niñez y la Adolescencia, todas las
adopciones en Honduras son consideradas adopciones plenas, es decir, se rompen todos los
vínculos legales con la familia biológica y el adoptado adquiere los mismos derechos y
obligaciones que si hubiera nacido en la familia adoptiva.
Esta modificación tiene como objetivo principal brindar una mayor protección y estabilidad a
los niños y adolescentes que son objeto de adopción, asegurando que tengan una familia
permanente y garantizando sus derechos en el nuevo entorno familiar.
No está en diapo: Los efectos jurídicos en la adopción plena crea los mismos vínculos
jurídicos que ligan a los padres con los hijos y el adoptado entra a formar parte con la
familia consanguínea del adoptante o adoptantes.
Explicación: Cuando se lleva a cabo una adopción plena, se generan los mismos
vínculos jurídicos que existen entre padres e hijos biológicos. Esto implica que el
adoptado adquiere los mismos derechos y obligaciones que un hijo biológico
tendría respecto a los padres adoptantes.
Estas garantías adicionales buscaban proteger los derechos e intereses del impúber y
asegurarse de que la adrogación se llevara a cabo de manera justa y adecuada,
teniendo en cuenta su edad y capacidad limitada para comprender plenamente las
implicaciones legales y familiares de la adopción.
2.Todos los tutores del impúber deben dar su consentimiento para que este sea
adrogado.
Explicación:
Investigación seria por parte de los pontífices: Los pontífices, como máximas
autoridades religiosas y legales en el derecho romano antiguo, llevaban a cabo una
investigación exhaustiva sobre el adrogante. Esto implicaba verificar su idoneidad y
capacidad para asumir la responsabilidad de adrogar a un impúber.
Promesa con caución por parte del adrogante: El adrogante debía hacer una
promesa formal y garantizar con una caución, que podía ser una suma de dinero o una
garantía patrimonial, su compromiso de cumplir con todas las obligaciones y
responsabilidades derivadas de la adrogación. Esto servía como una salvaguarda
adicional para garantizar la protección del impúber y su familia.
2.Si el adrogado era emancipado injustamente podía recurrir al magistrado para que le
restituyan: todo su patrimonio y una cuarta parte de los bienes del adrogante, a esta se
le da el nombre de la CUARTA ANONIMA en memoria del emperador que creó esta
institución.
Estas reglas especiales establecían los requisitos y condiciones necesarios para llevar a
cabo la adopción y la adrogación en el derecho romano, con el fin de salvaguardar los
intereses de las partes involucradas y asegurar la estabilidad y el bienestar de los
adrogados y adoptados.
Ausencia de hijos bajo la potestad: El adrogante no debía tener hijos, tanto legítimos
como adoptivos, bajo su patria potestad. Esta condición se establecía para evitar
conflictos o complicaciones en el ámbito familiar y garantizar una relación más directa
y exclusiva entre el adrogante y el adrogado.
Adrogante y Adoptante
En el contexto del derecho romano, tanto el "adrogante" como el "adoptante" se refieren a las
partes involucradas en procesos de adopción, pero con diferencias significativas:
Adoptante: El adoptante, por otro lado, se refiere a la persona que adopta a un menor o a un
individuo incapaz de ejercer plenamente sus derechos legales. En una adopción, el adoptante
asume la responsabilidad y el cuidado legal del adoptado, brindándole una nueva filiación y
protección legal como miembro de su familia. El adoptante se convierte en el padre o madre
adoptivo(a) del adoptado, asumiendo los derechos y deberes parentales.
En resumen, el adrogante es la persona que adopta a un individuo adulto y libre, mientras que
el adoptante es la persona que adopta a un menor o a un individuo incapaz de ejercer
plenamente sus derechos legales. Estos términos se utilizan específicamente en el contexto del
derecho romano y pueden diferir en otros sistemas legales contemporáneos, que pueden tener
definiciones y procedimientos diferentes para la adopción.
En el derecho romano, la adrogación del impúber se refiere a un proceso legal mediante el cual
un adrogante (adoptante) asumía la patria potestad sobre un impúber, es decir, un niño varón
menor de la edad de pubertad. Esta forma de adrogación era utilizada en situaciones
específicas en las que el niño no tenía un padre vivo o no podía recibir la patria potestad de su
padre biológico.
La adrogación del impúber era un proceso más complejo que la adopción regular, ya que se
requerían ciertos requisitos y procedimientos adicionales. Por ejemplo, se necesitaba la
intervención y aprobación de un magistrado romano para llevar a cabo la adrogación del
impúber. Además, la adrogación del impúber requería el consentimiento del paterfamilias (jefe
de la familia) del niño, quien previamente debía renunciar a su patria potestad sobre el
impúber.
Una vez que se llevaba a cabo la adrogación del impúber, el adrogante se convertía en el padre
legal del niño y adquiría la patria potestad sobre él, asumiendo todos los derechos y
responsabilidades que esto implicaba. La adrogación del impúber permitía asegurar la
continuidad de la familia y garantizar el cuidado y protección del niño en ausencia de un padre
biológico.
Es importante tener en cuenta que la adrogación del impúber era específica del derecho
romano y no necesariamente se aplica en los sistemas legales contemporáneos. Cada sistema
legal tiene sus propias reglas y procedimientos de adopción, que pueden variar en cuanto a las
edades y requisitos específicos para llevar a cabo una adopción.
1. Los pontífices deben hacer una investigación seria sobre la fortuna, la edad, la
honradez, y moralidad del adrogante y las ventajas de la adrogación para el
adrogado.
2. Todos los tutores del impúber deben dar su consentimiento para que este sea
adrogado.
3. El adrogante debe prometer dando caución, entregar a los herederos del
adrogado los bienes de este si muere siendo impúber, quedando libre de este
compromiso cuando el adrogado llegaba a la pubertad.
Reglas especiales para la adopción y adrogación
El Adrogante y el Adoptante deben tener aptitud para adquirir la patria potestad, es
decir deben ser ciudadanos y varones.
El Adrogante y el Adoptante debia ser por lo menos 18 años mayores que el adrogado
y el adoptado.
El acuerdo de voluntades.
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