Marco Juridico Cooperativismo
Marco Juridico Cooperativismo
Marco Juridico Cooperativismo
EL CONTROL
garante del buen gobierno, a partir de la aplicación de
sus propósitos particulares en el control a la obtención
de los resultados sociales, los procedimientos para
alcanzarlos y el cumplimiento de los deberes del
asociado, así como la garantía en el ejercicio de sus
SOCIAL: derechos.
Corporacion CRESER
Entidad Acreditada – Res. 364/2016
GARANTE DEL
BUEN GOBIERNO
Mauricio Alberto Torres Delgado
Director Académico
Especialista en Economía Solidaria
El Control Social: Garante del Buen Gobierno
Artículo 39. La junta de vigilancia estará integrada por asociados hábiles en número no superior
a tres, con sus respectivos suplentes; su período y las causales de remoción serán fijadas en los
estatutos.
1. Velar porque los actos de los órganos de administración se ajusten a las prescripciones
legales, estatutarias y reglamentarias y en especial a los principios cooperativos.
2. Informar a los órganos de administración, al revisor fiscal y al Departamento Administrativo
Nacional de Cooperativas sobre las irregularidades que existan en el funcionamiento de
la cooperativa y presentar recomendaciones sobre las medidas que en su concepto
deben adoptarse.
3. Conocer los reclamos que presten los asociados en relación con la prestación de los
servicios, transmitirlos y solicitar los correctivos por el conducto regular y con la debida
oportunidad.
4. Hacer llamadas de atención a los asociados cuando incumplan los deberes consagrados
en la ley, los estatutos y reglamentos.
5. Solicitar la aplicación de sanciones a los asociados cuando haya lugar a ello, y velar
porque el órgano competente se ajuste al procedimiento establecido para el efecto.
6. Verificar la lista de asociados hábiles e inhábiles para poder participar en las asambleas
o para elegir delegados.
7. Rendir informes sobre sus actividades a la asamblea general ordinaria, y
8. Las demás que le asigne la Ley o los estatutos, siempre y cuando se refieran al control
social y no correspondan a funciones propias de la auditoría interna o revisoría fiscal, salvo
en aquellas cooperativas eximidas de revisor fiscal por el Departamento Administrativo
Nacional de Cooperativas.
En este artículo se le otorga una característica clara al órgano de control social, ser interno y
técnico, la Supersolidaria en la circular básica jurídica se encargara de explicar este
concepto. La ley 454 no se ocupa de las funciones del organismo, por lo cual se infiere que
siguen siendo las definidas en la ley 79 de 1988 1, pero en el artículo 59 observa que las
funciones del órgano de control social se deben desarrollar con criterios de investigación y
valoración, dando así unas características técnicas a la labor, y restringiendo su labor
específicamente a lo referente al control social, y en el artículo 60 define unas prohibiciones,
tanto para el órgano de control social, como para el órgano permanente de administración.
Artículo 59º.- Funciones de las Juntas de Vigilancia. Las funciones señaladas por la ley a este
órgano deberán desarrollarse con fundamento en criterios de investigación y valoración y sus
observaciones o requerimientos serán documentados debidamente.
Los miembros de este órgano responderán personal y solidariamente por el cumplimiento de las
obligaciones que les imponen la ley y los estatutos.
El ejercicio de las funciones asignadas por la ley a las juntas de vigilancia se referirá únicamente al
control social y no deberá desarrollarse sobre materias que respondan a las de competencia de los
órganos de administración.
Los miembros del Consejo de Administración no podrán celebrar contratos de estación de servicios o
de asesoría con la entidad.
Estas directrices dadas en la ley 454 de 1998, dieron lugar a confusión, controversia y una
errónea interpretación, por lo que se hizo necesario que la Supersolidaria, aclarara, ampliara
1Es de anotar que la ley 454 no deroga las normas antes citadas, ni ninguna de las normas emitidas para las
cooperativas, fondos de empleados, asociaciones mutuales, administradoras públicas cooperativas y
cooperativas de trabajo asociado.
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y orientara su correcta interpretación y aplicación, así en diversas circulares desde 1999 con
la circular 007, se orientó al respecto, dichas circulares se recogen en lo que hoy conocemos
como Circular Básica Jurídica y tiene un capítulo dedicado especialmente a clarificar el tema,
el cual transcribimos.
En primer término, es pertinente aclarar que, con excepción del máximo órgano de la
administración (asamblea general) los demás órganos de administración y vigilancia de las
organizaciones supervisadas por esta Superintendencia tienen el mismo nivel jerárquico2 dentro
de su estructura interna.
Lo anterior significa que no existe superioridad del uno respecto del otro, puesto que tanto los
miembros del consejo de administración o de la junta directiva (o quién desempeñe las funciones
de órgano permanente de administración) como los miembros de la junta de vigilancia o del
comité de control social (o quien desempeñe las funciones de control social) son igualmente
elegidos por la asamblea general para el cumplimiento de sus funciones legales y estatutarias; y
éstas deben ser ejercidas de forma autónoma e independiente, con fundamento en el principio
solidario previsto en el numeral 8 del artículo 4 de la Ley 454 de 1998.
Ahora bien, si bien es cierto la Junta de Vigilancia o el Comité de Control Social, están al mismo
nivel jerárquico 3 que el Consejo de administración o la Junta de Directiva, dentro de la estructura
de las organizaciones, es igualmente cierto que no tienen la condición de administradores, razón
por la cual se sugiere4 que sus miembros no asistan a las sesiones del Consejo de Administración
o de Junta Directiva, toda vez que no resulta coherente que coadyuven en la administración al
participar en las sesiones de los órganos permanentes de administración con su función de
control y en igual sentido los miembros de éstos, no deberían asistir a las sesiones del órgano de
control.
“Las personas jurídicas, sujetas a la presente ley, estarán sometidas al control social, interno y
técnico de sus miembros, mediante las instancias que para el efecto se creen dentro de la
respectiva estructura operativa, siguiendo los ordenamientos dispuestos por la ley y los estatutos.
2 El texto inicia dirimiendo la jerarquía del órgano de control social respecto al órgano permanente de
administración, el cual por mucho tiempo se consideró superior por su carácter de administrador.
3 Por esta razón en un organigrama funcional de la organización, los órganos elegidos en asamblea se ubican al
mismo nivel, indicando que no hay superioridad, ni jerarquía del uno sobre el otro.
4 El decreto 962 de 2018, ya establecería esta sugerencia como una prohibición.
5 El decreto 962 de 2018, establece unos criterios adicionales, como se verá más adelante.
Toda vez que en la norma citada se emplean varios términos no definidos en la ley como son los
de “control social” y sus características de ser “interno” y “técnico”, se hace necesario determinar
a qué corresponden cada uno de estos conceptos, así como dar unas pautas generales sobre
la forma de interpretar y aplicar lo preceptuado en dicha disposición por las organizaciones
supervisadas.
El control social está relacionado con el elemento asociación 6 de las organizaciones solidarias y
hace referencia al control de resultados sociales, al de los procedimientos para el logro de dichos
resultados, así como a los derechos y obligaciones de los asociados.
En cuanto al control de los resultados sociales, este es un control de fondo, material que, en
principio, no le compete al revisor fiscal ni a ningún otro órgano de la entidad de la economía
solidaria sino a la junta de vigilancia (en el caso de las cooperativas) o al órgano que haga sus
veces en las demás tipos de organizaciones.
Como quiera que las organizaciones de economía solidaria están conformadas por un grupo de
asociados unidos por un interés económico, social, cultural o ecológico común, es necesario que
los mismos asociados, a través de un órgano interno que los represente (junta de vigilancia u otro
semejante) fiscalicen si se están o no satisfaciendo esas necesidades económicas, sociales,
culturales o ecológicas para las cuales constituyeron la entidad solidaria o se asociaron a ella
posteriormente. Es decir, si se está cumpliendo con el objeto para el cual se constituyó la
organización. En eso consiste el control de los resultados sociales.
En cuanto al control de los procedimientos para lograr los resultados propuestos, se pretende
verificar que dichos resultados sociales se obtengan respetando la ley, los estatutos y los
reglamentos, así como los principios, valores, características y fines de las organizaciones de la
economía solidaria.
Igualmente, forma parte de este control social el velar por el cumplimiento de los derechos y
obligaciones de los asociados.
Ahora bien, el control social debe reunir dos características fundamentales, según la norma
transcrita: ser interno y ser técnico.
Como se desprende del hecho de ser un control ejercido por los propios asociados, se trata de
un control interno que no puede delegarse en terceras personas, sean estas ajenas a la
organización (por ejemplo un auditor externo) o empleados de la misma, pero no vinculados
como asociados (ejemplo, un auditor interno).
6La Supersolidaria se refiere al elemento asociación, en alusión a la doble naturaleza de la organización solidaria,
definidos por la Supersolidaria como el elemento empresa y el elemento asociación.
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Son los propios asociados quienes, en desarrollo del principio de autogestión, deben ejercer el
control social de la organización de economía solidaria correspondiente.
El control social interno, no obstante estar en manos de los propios asociados, no puede ser un
control que no revista características técnicas. Por el contrario, debe tratarse de un control
idóneo, que sea eficiente y eficaz para que los asociados puedan supervisar cabalmente la
gestión de la organización solidaria.
A este respecto el legislador, en la Ley 454 de 1998, señaló unos parámetros generales para lograr
que dicho control fuera técnico:
De una parte, el parágrafo del artículo 7 de la Ley 454 de 1998, ya trascrito, ordenó que en los
estatutos de las organizaciones de economía solidaria, se establecieran requisitos rigurosos para
acceder a los órganos de administración y vigilancia.
De otra parte, los incisos primero y tercero del artículo 59 de la misma ley, si bien se refieren
expresamente a las juntas de vigilancia (incisos que se pueden aplicar por remisión a las demás
organizaciones de la economía solidaria) disponen:
“Las funciones señaladas por la ley a este órgano deberán desarrollarse con fundamento en
criterios de investigación y valoración y sus observaciones o requerimientos serán documentados
debidamente (inciso primero).
“El ejercicio de las funciones asignadas por la ley a las juntas de vigilancia se referirá únicamente
al control social y no deberá desarrollarse sobre materias que correspondan a las de
competencia de los órganos de administración” (inciso tercero).
La norma citada es imperativa en cuanto a que debe haber un control social en toda
organización de la economía solidaria, el cual debe ser interno y técnico, y estar a cargo de los
propios asociados.
En resumen, el artículo 7 de la Ley 454 de 1998 se refiere a un control de los propios asociados
sobre el aspecto social (elemento asociación), y este control debe revestir las características de
ser interno (a cargo de los mismos asociados) y técnico (con fundamento en criterios de
investigación, valoración y procedimientos claramente establecidos; cuyas observaciones o
requerimientos serán debidamente documentados). Luego no se está hablando de tres clases
de controles (control social, control interno y control técnico), sino de uno solo, el control social,
pero aclarando que este debe ser interno y técnico.
Como se desprende de la lectura del artículo 7 de la Ley 454 de 1998, ya citado, todas las
organizaciones de la economía solidaria están obligadas a realizar el autocontrol, en los términos
de la norma transcrita.
Si bien la norma citada hace referencia a las “instancias que para el efecto se creen dentro de
la respectiva estructura operativa”, expresamente advierte que se deben seguir para el efecto
los ordenamientos dispuestos por la ley y los estatutos.
Así, por ejemplo, según los artículos 38 y siguientes de la Ley 79 de 1988, en el caso de las
cooperativas el órgano encargado del control social es la junta de vigilancia que debe estar
conformado por dos o tres asociados hábiles y cumplir, por lo menos, las funciones señaladas en
la ley.
Una vez respetados esos parámetros mínimos, bien se podría en una cooperativa de grandes
dimensiones implementar estatutariamente, por ejemplo, la creación de comités de vigilancia
que apoyen a la junta de vigilancia en su función, bajo su coordinación y sin perjuicio de las
responsabilidades que les corresponden a sus miembros titulares.
No se debe entender que la cooperativa, además de la junta de vigilancia, debe crear otros
órganos de control social que ejerzan las mismas funciones que según una norma expresa, el
artículo 40 de la Ley 79 de 1988, son de competencia exclusiva de la junta de vigilancia.
En el caso de los fondos de empleados, el Decreto Ley 1481 de 1989 consagró como opcional,
la existencia de un comité de control social (artículo 42). Es claro que con lo dispuesto en forma
taxativa por el artículo 7 de la Ley 454 de 1998, ya citado, esta opción se convirtió en una
obligación y que todo fondo de empleados, al igual que toda organización de la economía
solidaria, debe contar con un órgano o comité de control social.
Por lo tanto, el inciso primero del artículo 42 del Decreto-Ley 1481 de 1989 debe entenderse de
la siguiente manera:
Debe interpretarse en el sentido de que ya no es facultativo sino obligatorio contar con dicho
comité de control social.
El segundo inciso del mismo artículo sigue teniendo validez cuando preceptúa que:
“El número de integrantes, su período y sistema de elección serán previstos en los estatutos. Si no
se previese sobre este aspecto, se aplicará el sistema del cuociente electoral previa inscripción
de planchas.”
En las demás organizaciones que reúnan las características señaladas en la Ley 454 de 1998 para
formar parte del sistema de la economía solidaria y que no cuenten con una norma legal
especial, se debe contemplar en los estatutos un órgano de control social, interno y técnico.
Con el fin de que el ejercicio de los órganos de control social permita el fortalecimiento y
desarrollo de los principios de autonomía, autocontrol y autogobierno y para hacer eficaz y
eficiente el papel de dichos órganos, se definen los siguientes parámetros 7 de obligatorio
cumplimiento:
7Estos parámetros se deben entender como una ampliación y aclaración a las funciones dadas en la ley 79 de
1988, aunque es claro que se adicionan 4 que en la ley no se observan (b, c, y e).
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CRESER ETDH.
Política. En tales investigaciones internas se deberá observar, como mínimo, las siguientes
etapas, las cuales deben tener un tiempo o plazos razonables para cada una de ellas:
• Práctica de pruebas.
h. Hacer seguimiento semestral a las quejas presentadas por los asociados, ante el Consejo
de Administración o Junta Directiva o quien haga sus veces o ante el representante legal,
con el fin de verificar la atención de las mismas. Cuando se encuentren temas recurrentes
o la atención no haya sido oportuna, deberá investigar los motivos que estén
ocasionando estas situaciones, presentar sus recomendaciones y solicitar la aplicación
de los correctivos a que haya lugar. Cuando las quejas no hayan sido atendidas, se
procederá del mismo modo, solicitando adicionalmente la atención de las mismas en
forma inmediata.
i. En cuanto a las quejas presentadas directamente al órgano de control social, éste debe
estudiarlas, adelantar las investigaciones pertinentes y solicitar a quien corresponda la
solución de las circunstancias que motivaron la queja y dar respuesta al asociado. En
todo caso, el ente de control social deberá responder al asociado con todos los
argumentos legales, estatutarios y reglamentarios.
Así mismo, las quejas deberán ser resueltas en las condiciones y en los términos
establecidos en la presente circular o en las disposiciones que la modifiquen, adicionen o
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Todas estas disposiciones deben ser cumplidas por el órgano de control social, sin perjuicio del
cumplimiento a lo establecido en las leyes 79 de 1988, 454 de 1998 y en el artículo 109 de la Ley
795 de 2003 o en las normas que las modifiquen, adicionen o complementen y en sus estatutos y
reglamentos.
Adicionalmente, vale la pena recordar que, según lo dispuesto en el artículo 59 de la Ley 454 de
1998, los miembros del órgano de control social responderán personal y solidariamente por el
incumplimiento de las obligaciones que les imponen la ley y los estatutos, y sus funciones deben
desarrollarse con un carácter técnico y con fundamento en criterios de investigación y
valoración; y sus observaciones o requerimientos serán debidamente documentados.
Por lo aquí expuesto, y ante la importancia de las funciones que ejercen los miembros que
integran las instancias administrativas, de control y vigilancia, la Superintendencia de la
Economía Solidaria reitera, una vez más, a todas sus organizaciones supervisadas que en sus
estatutos deben establecer requisitos rigurosos para acceder a los cargos de los órganos de
administración y vigilancia.
Por otra parte, el concepto No. 0094-2002, le otorga al comité de control social, la función de
reglamentar el derecho de inspección del asociado, “…por ser función legal de ésta, ejercer
el control social a nombre de los asociados”, puntualiza el concepto.
Ahora bien, en atención al Buen Gobierno que se debe implementar en las organizaciones
solidarias, el ministerio público emitió el decreto 962 de 2018, donde reglamenta, detalla y
define una serie de obligaciones para cada uno de los órganos en virtud de hacer real y
efectivo el Buen Gobierno y en el capítulo 6 de dicho decreto se especifican algunas
funciones y características para el órgano de control social, sin embargo al revisar el
documento se pueden inferir otras funciones, que son competencia del OCS. Veamos.
Parágrafo 1. Para la aplicación del numeral 2 del presente artículo, previo a la realización de la
asamblea se dará cumplimiento a lo previsto en el parágrafo 1 del artículo 2.11.11.4.2., del
presente decreto y en general, se verificará por el órgano o funcionario competente el
cumplimiento de los requisitos que se requieren para la postulación.
Como se desprende de la norma, la función sobre el control social, obliga entonces a dicho
organismo estar atento y vigilante al cumplimiento de lo referido en estos artículos, es de
aclarar que la actividad adicional sobre la comunicación a los asociados inhábiles, no suple
la obligación de publicar el listado, toda vez que la norma no deroga dicha función.
El parágrafo 1 del artículo 2.11.11.2.3., se aclara en el parágrafo del artículo 2.11.11.4.2. Elección de
miembros de consejo de administración o junta directiva., el cual específica que la función de verificar
el cumplimiento de los requisitos es deber de la junta de vigilancia.
Parágrafo 1. Los requisitos de que trata el presente artículo deberán ser acreditados al momento
en que los candidatos se postulen para ser elegidos. La junta de vigilancia o comité de control
social, verificará el cumplimiento de tales requisitos, de acuerdo con las funciones que le han
sido atribuidas por la Ley, y en consonancia con lo previsto en el artículo 2.11.11.6.2., del presente
decreto.
Ya en el capítulo 6, dedicado al órgano de control social, observamos que los dos primeros
artículos recapitulan lo definido en el artículo 7 de la ley 454 de 1998, sobre el control social
interno y técnico, transcribimos a partir del 3, donde orienta sobre su proceso de elección y
conformación.
Artículo 2.11.11.6.3. Elección de miembros de la junta de vigilancia o comité de control social.
Con sujeción a lo previsto en los artículos 39 de la Ley 79 de 1988 y 42 del Decreto Ley 1481 de
1989, para la postulación de candidatos como miembros de la junta de vigilancia o comité de
control social, las organizaciones requerirán que los aspirantes cuenten como mínimo con los
siguientes requisitos:
1. Contar con calidades idóneas para la función de control social y para actuar en
representación de todos los asociados.
Parágrafo 2. Las organizaciones fijarán el nivel de los requisitos previstos en los numerales 1 y 2 del
presente artículo, considerando sus características y la complejidad de sus operaciones. En todo
caso, deberán propender por la formación y capacitación de todos sus asociados,
especialmente en relación con estos requisitos.
En caso que la organización permita la permanencia de miembros por períodos que superen los
6 años consecutivos, se fijarán condiciones de participación posterior en otros órganos de
administración, controlo vigilancia.
Parágrafo. Los miembros de la junta de vigilancia o comité de control social no podrán usar o
difundir en beneficio propio o ajeno, la información confidencial a la que tengan acceso. Para
el efecto, las organizaciones fijarán requisitos de confidencialidad y revelación de la información.
Para comprender el artículo se debe recordar los fundamentos del Buen Gobierno, los cuales
descansan en la Dirección eficiente y el Control oportuno, dos acciones del proceso
administrativo, que se consideran fundamentales, no porque las otras no lo sean, pues una
organización solidaria, o cualquier empresa sin planeación, no puede establecer metas de
crecimiento y no le es posible identificar fallas que podrían incluso hacerles incurrir en pérdidas
sin darse cuenta, si no hay planeación, tampoco es posible organizar el equipo de trabajo, no
es posible estructurar una planta de cargos, ni definir una estructura salarial o económica,
igualmente no tendrían sentido los presupuestos, pues carecerían de fundamento y la
dirección sería de tipo doméstico, sin objetivo empresarial , carente de visión y de misión.
Participación y Democracia
Empecemos por la acción fundamental, asegurar la participación de los asociados. Parece
una tarea titánica, seguramente hemos visto, escuchado y seguramente hemos sido testigos
de la apatía de los asociados a las diversas actividades de la organización… al revisar el
decreto observamos que se ocupa de este tema de dos maneras:
Así mismo asegurar la participación le implica al órgano de control social, estar atento a la
correcta verificación de asociados inhábiles, y su posibilidad de habilitarse, y en el momento
de la elección tener presente el quórum.
Hay que recordar que una función dada por la ley al órgano de control social es la de hacer
llamadas de atención a los asociados en el cumplimiento de sus deberes, la cual puede ser
útil para incentivar en el asociado el ánimo de participación.
1- Competencias Individuales, es decir, aquellas que deberían cumplir los integrantes del
organismo, o capacitarse para adquirirlas.
2- Competencias del Organismo, referidas al cumplimiento de sus deberes sin caer en la
coadministración, extralimitación o duplicidad.
Competencias Individuales
El ejercicio del control social es exigente, pues requiere una alta preparación de las personas
que desempeñan esta labor tan importante, desde la corporación CRESER, consideramos que
quien alcance esta dignidad, en lo posible debería haber pasado por todos los cargos
sociales, incluido el órgano de administración, pues de esta manera tendrá una visión general
del funcionamiento de la organización en su parte operativa y estructural, en esa dirección
consideramos que un asociado que quiere formar parte del órgano de control social, debería
alcanzar las siguientes competencias.
Saber ser: El asociado que desea formar parte del órgano de control social, debe tener un
liderazgo basado en la probidad, es decir en la transparencia, la confianza y la
prudencia, debe ser una persona con una alta capacidad de confidencialidad, es
decir, de reservar con cautela, con sigilo, información relevante de asociados o de
Saber Saber: Debe tener capacidades comunicativas, argumentativas y de análisis, pues sus
actividades, le exigen la lectura cuidadosa y atenta de documentos diversos, que
debe estar en capacidad de relacionar, identificar, valorar y analizar con juicio
crítico y argumentos razonables. Es conveniente, también, que tenga buena
capacidad de aprendizaje, que surge del gusto por leer y el deseo de aprender, y
en la medida que conozca la organización, tendrá la capacidad de identificar
posibles anomalías. En lo posible debe tener la capacidad de escuchar y así mismo
la capacidad de transmitir.
En la medida que el órgano de control social comprenda que sus funciones las pueden realizar
valiéndose de las actas y otros medios diferentes a participar de las reuniones, puede lograr
una mayor eficiencia.
En la medida que conozcan con claridad cuáles son los servicios sociales y que estos deben
tener como función contribuir al mejoramiento de la calidad de vida del asociado, tendrán
mayor acierto en el cumplimiento de sus funciones y en los criterios de medición de los mismos,
oportunidad, pertinencia y calidad.
Para ello debe servir el plan de desarrollo, la política social de la organización los indicadores
sociales y el Balance social, documentos que relacionan y dan cuenta de las actuaciones del
organismo en pro de los asociados, así como la correcta inversión de los Fondos Sociales.
En la vida institucional confluyen distintos actores que desde distintas miradas y facultades
hacen posible el desarrollo del objeto social de la entidad, es allí cuando el órgano de control
social debe tener muy clara la órbita de sus atribuciones y la de los demás organismos, para
evitar incurrir en extralimitaciones.
Es muy útil que el órgano de control realice un mapeo de las distintas actividades con las
cuales se desarrolle el objeto social de la entidad y que estén en sus campos de acción, e
identifique las atribuciones de los demás organismos, un ejemplo de ello puede ser:
Atribuciones Campo de
Organismos que
Actividad Función del órgano de acción del
intervienen
Control Social Control Social
Consejo/Junta Definir los Verifica que
Directiva servicios los servicios
sociales sociales estén
en el marco
del objeto
social y la ley
Consejo/Junta Reglamentar Verificar que
Directiva los servicios se
sociales reglamenten
con criterios
de equidad y
garanticen la
mayor
cobertura e
impacto
Gerente/ Socializar los Verificar que
Comunicaciones reglamentos se garantice al
asociado su
derecho a la
Brindar
información Control de
servicios de
oportuna resultados
bienestar
Comité de apoyo Realizar el Verificar que sociales
social
programa y el el programa y
presupuesto el presupuesto
se ajuste a lo
dispuesto en la
CBCF, el plan
de desarrollo y
el PESEM
Gerente Suscribir N/A. En este
convenios o caso es el
alianzas para Revisor Fiscal
desarrollar el quien debe
servicio vigilar la
contratación.
Trabajadores/Comités Prestación de Verificar que
los servicios al asociado se
le respeten sus
derechos
relacionados
con el servicio
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El Control Social: Garante del Buen Gobierno
y la adecuada
prestación del
mismo.
Asociado Utiliza los Verificar que
servicios el asociado
cumpla con
sus deberes
relacionados
con la
utilización del
servicio