Bosque de Terraza No Inundable
Bosque de Terraza No Inundable
Bosque de Terraza No Inundable
Este ecosistema posee una tierra firme con una topografía generalmente plana o con leves
ondulaciones de hasta 20 metros de altura a medida que el río se va alejando.
Tiene una extensión aproximada de 4 805 993 00 hectáreas del territorio nacional en los
departamentos de Loreto, Ucayali, San Martín, Madre de Dios, Amazonas, Huánuco, Pasco y
Junín.
Madera: Los árboles en estos bosques proporcionan madera de alta calidad para la industria
maderera.
Productos no madereros: estos bosques pueden proporcionar una serie de productos como
frutas silvestres, nueces, hongos comestibles, hierbas medicinales, resinas y aceites esenciales.
Hábitat para la vida silvestre: son hábitats críticos para una amplia variedad de especies de
vida silvestre, algunas de las cuales pueden tener importancia económica o cultural, como la
caza sostenible de ciervos o la observación de aves para el ecoturismo.
Flora: Árboles: Perú alberga una gran diversidad de árboles en sus bosques de terraza no
inundable. Tipos de cacaos, sapotes, bálsamo, caucho, huevo de mono, paca, copal, etc.
Fauna: Tipos de perdices, codornices, gallinazo de cabeza roja, tipos de osos hormigueros,
otorongo, puma, tocón, zarigüeya, musmuqui, sachavaca, sajino, etc.
Los bosques de terraza no inundable en el Perú están influenciados por diversos factores
ambientales que afectan su composición, estructura y funcionamiento. Estos son:
Clima: El clima en los bosques de terraza no inundable puede variar según la altitud y la
ubicación geográfica. En Perú, los factores climáticos como la temperatura, la precipitación y la
estacionalidad influyen en la flora y fauna de estos bosques. Los bosques de montaña pueden
experimentar temperaturas frías y precipitación estacional.
Altitud: La altitud es un factor crítico en los bosques de terraza en Perú. A medida que
aumenta la altitud, las condiciones climáticas cambian y esto afecta la distribución de las
especies de plantas y animales. La vegetación y la biodiversidad varían significativamente a
diferentes altitudes.
Suelo: La calidad del suelo es esencial para el crecimiento de la vegetación. Los tipos de suelo y
su composición pueden variar en función de la geología local, lo que influye en qué especies de
plantas pueden prosperar en un área específica.
Hidrología: La disponibilidad de agua es crítica para la salud de los bosques. Los arroyos y ríos
que atraviesan estas áreas proporcionan agua para la vida silvestre y la vegetación. La gestión
adecuada de los recursos hídricos es fundamental.
Presión humana: La actividad humana, como la tala de árboles, la agricultura, etc. puede tener
un impacto significativo en estos bosques.
Cambio climático: El cambio climático global está alterando las condiciones climáticas en todo
el mundo, lo que puede tener un impacto en la distribución de las especies y en la salud de los
bosques de terraza no inundable en Perú.
La relación entre los bosques de terraza no inundable y las actividades humanas es compleja y
puede variar según la región y las prácticas locales. Las actividades humanas pueden tener
tanto impactos positivos como negativos en estos ecosistemas. Aquí se describen algunas de
las principales interacciones entre los bosques de terraza no inundable y las actividades
humanas:
Impactos Positivos:
Impactos Negativos:
Deforestación y Tala Ilegal: La tala ilegal y la deforestación son amenazas significativas para
estos bosques. La demanda de madera y tierras agrícolas a menudo resulta en la degradación y
pérdida de hábitat forestal.
Cambio Climático: Las actividades humanas que contribuyen al cambio climático, como la
emisión de gases de efecto invernadero, pueden aumentar la vulnerabilidad de estos bosques
a eventos climáticos extremos y a enfermedades de las plantas.
En resumen, la relación entre los bosques de terraza no inundable y las actividades humanas
es crucial para la conservación y la sostenibilidad. La planificación y la gestión adecuadas son
esenciales para equilibrar el uso de los recursos naturales con la protección de la biodiversidad
y los servicios ecosistémicos que estos bosques proporcionan.
Es importante gestionar de manera sostenible estos recursos naturales para garantizar que
sigan siendo disponibles para las generaciones futuras. La explotación insostenible, la
deforestación y la degradación de estos bosques pueden tener consecuencias negativas tanto
para el medio ambiente como para las comunidades que dependen de ellos. La conservación y
la gestión responsable de estos ecosistemas son cruciales para mantener su valor a largo plazo.
En Perú, se han establecido áreas protegidas y reservas naturales para conservar estos
ecosistemas y su biodiversidad. La investigación científica y la gestión sostenible de los
recursos forestales también son importantes para preservar estos bosques y su biodiversidad
única.