Campaña Marítima
Campaña Marítima
Campaña Marítima
MARÍTIMA:
El enfrentamiento del monitor peruano Huáscar, al mando del capitán de navío Miguel Grau
Seminario, y la corbeta chilena Esmeralda, al mando del capitán de fragata Arturo Prat Chacón.
Se realizó el bloqueo de la escuadra chilena en el puerto de Iquique.
El combate naval de Iquique fue uno de los enfrentamientos más importantes ocurridos
durante la campaña naval de la Guerra del Pacífico. Tuvo lugar en la bahía de Iquique el
miércoles 21 de mayo de 1879. En él se enfrentaron el monitor peruano Huáscar y la corbeta
chilena Esmeralda. El resultado de esta acción fue el hundimiento de la corbeta chilena y el
levantamiento del bloqueo del puerto de Iquique. El 16 de mayo de 1879 la escuadra chilena
dejó bloqueando el puerto de Iquique a la Esmeralda y la Covadonga, además del transporte
chileno Lamar, y zarpó rumbo al norte para enfrentar a la flota peruana que esperaba
sorprender en el puerto del Callao. Sin embargo, el mismo día los buques capitales de Perú
habían salido con rumbo al sur con la intención de defender sus puertos en Tarapacá. Ambas
flotas se cruzaron sin verse y las naves peruanas encontraron el día del combate a las menores
naves chilenas en Iquique.
El 23 de julio, ambos buques peruanos capturaron al vapor transporte “Rímac” y lo condujeron
hacia Arica. El “Rímac” navegaba con las precauciones; en su rumbo directo a Antofagasta
tomó alta mar sin divisar la costa y durante toda la noche no se encendieron las luces.
La caza y apresamiento del transporte chileno Rímac¹¹ se captura del vapor Rimac es el nombre
de una importante acción ocurrida en el marco de las la Guerra del Pacifico. Fue un miércoles
23 de julio 1879 en frente a Antofagasta Bolivia como resultado fue la victoria peruana.
Durante una expedición sobre los mares en conflicto, los buques de la Marina de Guerra del
Perú, Huáscar y la Unión, aprehenden al vapor de guerra chileno Rímac, que era un transporte
artillado, tomando toda su carga y capturando a su tripulación, incluidos un escuadrón de los
carabineros de Yungay.
En Chile las noticias de la captura del Rimac detonaron una crisis política y social que motivó la
renuncia de varios funcionarios del gobierno, entre ellos la del contraalmirante Juan Williams
Rebolledo, comandante general de la Armada de Chile.
La intención de Grau era continuar con los ataques a las líneas de abastecimiento
chilenas, pero a la vez disminuir su exposición al peligro de perder el último buque
capital peruano
El puerto estaba artillado desde abril, contaba con el monitor Manco Cápac como batería
flotante y operaba en la isla del Alacrán la Primera División de Torpedos, al mando del teniente
segundo Leoncio Prado.
COMBATE DE ANGAMOS
Se enfrentaron los buques peruanos Huáscar y Unión contra los buques chilenos Cochrane,
Blanco Encalada, Loa y Covadonga. Ese día, las naves de guerra peruanas navegaban con
rumbo Norte.
Fue la primera división chilena que constaba del Blanco Encalada, Covadonga y Matías
Cousiño los cuales se dirigían hacia el sur por la costa del Pacífico, al divisar en el horizonte a El
Huáscar y La Unión viajando en la dirección opuesta, procedieron a cerrarles el paso.
El 17 de marzo, el crucero peruano Unión realizó la doble ruptura del bloqueo de Arica. Lo
único importante fue que llevó la lancha torpedera Alianza.
En junio del mismo año, el triunfo chileno en la batalla de Arica consolidó la ocupación de la
zona.
El bloqueo del Callao fue una operación bélica que se dio durante la Guerra del Pacífico y que
consistió en que la escuadra chilena impidió el ingreso de buques al puerto del Callao y las
caletas vecinas entre el 10 de abril de 1880 y el 17 de enero de 1881. Victoria chilena.
Pese a esos pequeños triunfos peruanos, la escuadra chilena mantuvo el bloqueo firmemente
y luego, tras las derrotas del ejército peruano en Chorrillos y Miraflores, ocurridas el 13 y 15 de
enero de 1881 respectivamente, donde además algunos buques de la escuadra apoyaron al
ejército chileno atacando las posiciones peruanas cercanas a la costa, la autoridad naval
peruana en el Callao ejecutó el 17 de enero la destrucción de las baterías y los buques que aún
le quedaban a la marina peruana, entre ellos la corbeta Unión, para evitar su captura por los
chilenos.
Ambas escuadras no estaban preparadas para la guerra. Pero, como constata la Armada de
Chile el plan peruano era el más adecuado a las circunstancias y condenaba al fracaso lo
concebido inicialmente por el Almirante Juan Williams Rebolledo.
Jorge Basadre considera, citando a Pedro Dávalos Lissón, que la opinión pública en Perú no
aceptaba la misión defensiva que las condiciones de inferioridad técnica imponían a la armada
peruana. Señala que cuando García y García salvó su nave desde el combate en Angamos fue
considerado una cobardía