UNIVERSIDAD PABLO GUARDADO CHÁVEZ

LICENCIATURA EN MÉDICO CIRUJANO

PSIQUIATRIA

Dr. JORGE ALBERO HERNANDEZ SALAZAR

ENSAYO: SALUD MENTAL

5 A1

MANCILLA OCAÑA NEHEMIAS ISRAEL

TUXTLA GUTIÉRREZ CHIAPAS; A 25 DE FEBRERO DEL 2024.

INTRODUCCIÓN

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la salud como un estado de completo bienestar

físico, mental y social, no simplemente la ausencia de enfermedad o discapacidad y tener la

capacidad de desarrollarse y superarse a nivel emocional e intelectual. La salud mental es

importante para las personas hoy en día porque les permite trabajar eficazmente, sentirse cómodos

en las actividades diarias, tratar mejor a los demás, reducir el estrés y mejorar las actitudes del día

a día. Resulta que en la vida moderna está aumentando el número de enfermedades mentales, así

como de trastornos relacionados con la violencia y la pobreza. Los trastornos mentales han surgido

en el escenario global y requieren investigación desde una perspectiva de salud pública y salud

mental. En nuestro país, México, es importante recordar que la atención en salud mental va más

allá del tratamiento de los trastornos mentales emergentes. La gestión eficaz de la salud mental en

nuestro país requiere de agencias gubernamentales, redes de apoyo familiar y comunitario,

academia, sociedad civil, ONG, medios de comunicación y por supuesto personal médico

capacitado. A esto hay que sumarle la eliminación de los estigmas sociales que afectan a la

humanidad, que son barreras que limitan la expresión de las emociones y no permiten que una

persona busque ayuda profesional psicológica adecuada para su salud mental por miedo a lo que

pueda suceder, o a lo que dirán de ellos y ser juzgado. En el siguiente ensayo discutiremos temas

que merecen conocer, comprender y reflexionar sobre la importancia de la salud mental, tanto del

individuo como de quienes lo rodean, y así estar en armonía con la vida.

La Organización Mundial de la Salud (OMS), define a la salud mental como el estado de bienestar

en el que la persona realiza sus capacidades y es capaz de hacer frente al estrés normal de la vida,

de trabajar de forma productiva y de contribuir a su comunidad. En este sentido positivo, la salud

mental es el fundamento del bienestar individual y del funcionamiento eficaz de la comunidad

(OMS, 2018). Debemos reconocer que la importancia de la salud mental es indispensable para

nosotros como individuos, para establecer relaciones sociales entre sí, para la familia, amigos,

nuestras metas a futuro, ser productivos en la vida y convivir con armonía y estar en sintonía con

nuestro alrededor día a día, como pude ser en nuestro trabajo, escuela y actividades que se nos

presentan diariamente. Sin embargo existen diversos factores que desencadenan diferentes

enfermedades mentales y es importante conocer cuáles son esos que pueden estar en nuestro

alrededor y en nuestra vida cotidiana sin darnos cuenta.

Los determinantes sociales y ambientales son importantes para poder clasificar los factores que

podemos tener presentes en nuestra vida cotidiana, tales como son los individuales, donde entra la

alimentación adecuada, la cercanía o apego familiar, segura y estable, las habilidades sociales,

optimismo, creencias morales, valores y la autoestima. Los familiares, que los padres proveen el

cuidado, ayuda y armonía familiar, comunicación efectiva y expresión emocional. Escolares,

donde entra los grupos de pares prosocial, colaboración en equipo, apoyo, oportunidades de éxito

y reconocimiento de logros. Sociales, donde es la relación cercana con una persona significativa,

amigos, conyugue, seguridad económica, buena salud física, acceso al mercado laboral, y en fin

una vivienda digna. Los componentes genéticos, también son importantes de reconocer, el daño

cerebral prenatal, nacimientos prematuros, salud indeficiente en la infancia, traumas del pasado,

discapacidad intelectual y física, aislamiento, habilidades sociales deficientes y afectivas.

Se refiere a la publicidad asfixiante que podemos encontrar en nuestro día a día, los mercados

pueden ser falsos y prometernos ilusiones que nunca se cumplen, vendernos felicidad, por eso

mismo algunas veces se confunde el bienestar con la felicidad. El cambio en la percepción que se

tiene del cuerpo es uno de ellos; los gimnasios, las dietas, la obsesión por la delgadez, la cirugía

estética, la moda, la cosmética, los bronceados, la celulitis, los implantes, los liftings, la ortorexia,

la vigorexia, la anorexia son parte de un nuevo culto que provoca cambios drásticos en las actitudes

de la sociedad. Asuntos ampliamente publicitarios pueden afectar nuestra salud mental, desde lo

que nos venden y exhiben en las pantallas hasta donde lo vemos cotidianamente con "normalidad"

en nuestra vida diaria, la radio, televisor, carteles, redes sociales, que será un punto muy importante

que se tomara con más detalle más adelante, o incluso con nuestra sociedad. El caso de la ortorexia

que es la obsesión patológica por la comida biológicamente pura.

Las redes sociales:

Hoy en día encontramos mucho en las redes sociales paradigmas estrictos acerca del cuerpo y la

apariencia física, la vida perfecta y el bienestar, que parece que lo que no está conectado no existe.

Quien no usa internet es una suerte de analfabeto que está, en buena medida excluido de la

dinámica social moderna. La red hoy en día, como bien sabemos, sigue ampliando su contenido

todos los días sus posibilidades, se ha constituido en la verdadera supervía del siglo XXI.

Sabemos que las redes han sido muy atractivas poderosamente, por su capacidad para envolver

nuestras mentes, con facilidad a las necesidades de cada quien, aunque por esa razón puede

terminar sometiéndonos para que seamos nosotros quienes nos adaptemos a ella. El uso

compulsivo del internet, sin tener una vida saludable, dieta equilibrada o desentendiendo deberes
o actividades productivas que se pudiera estar haciendo en esos momentos, la adicción con el

teléfono celular, el consumo, etc.

Otros factores que pueden desencadenar a trastornos mentales pueden ser el consumo de

psicofármacos frente a todo tipo de problemas: relaciones de pareja conflictivas, situaciones de

perdida, problemas asociados al envejecimiento, familiares, dificultades laborales, insatisfacción

con la imagen corporal, consumo excesivo de alcohol y otras drogas, etc. Aun en los países más

avanzados, los que han logrado un mayor desarrollo económico y social, se observan índices cada

vez más elevados de trastornos psicopatológicos. Si bien no existen estudios de laboratorio o

gabinete capaces de definir o diagnosticar completamente ningún trastorno mental, estos suelen

usarse en algunos casos para confirmar el diagnóstico o para descartar otros posibles

padecimientos por comorbilidad, es decir, la presencia de dos o más enfermedades al mismo

tiempo. En México se le da muy poca importancia a la salud mental por el mismo hecho que

existen muchos tabús, costumbres que como ya se mencionó, son barreras que limitan a las

personas a poder buscar ayuda psicológica por el miedo a ser juzgados socialmente. Esta serie de

expresiones que limitan a las personas y las avergüenza que prefieren mantenerse calladas y no

buscar ayuda por miedo a ser discriminadas. Casi el 30% de los mexicanos se han sentido

deprimidos al menos una vez y solo el 5% han tenido acceso a una terapia antidepresiva

farmacológica, entre los 18-65 años, han padecido en algún momento de su vida un trastorno

mental, pero solo uno de cada cinco, de los que lo padecen recibe tratamiento. (Tena, 2017).
 CONCLUSIONES

Es importante que le demos la importancia que se merece la salud mental, así como también darle

el manejo necesario, quitando los estigmas sociales, los tabús y el qué dirán y verlo con normalidad,

porque como dice el dicho, “está bien, no estar bien”, pero para ello hay que tomar cartas en el

asunto, buscar ayuda psicológica o psiquiátrica sin importar lo demás, preocuparnos más por

nosotros mismos y ver por nuestra vida digna y estabilidad emocional, tener mejores relaciones

personales, con nuestro alrededor, nuestro trabajo, en nuestro estudio y en nuestra vida cotidiana.

Sabemos que a nuestro país le falta más atención en ello pero debemos empezar por nosotros

mismos a ver normal el no estar bien emocionalmente por diferentes factores que ya fueron

mencionados en el ensayo, ayudar a la sociedad como futuros médicos y tener esa atención a la

salud mental de primera estancia, orientarlos y escucharlos para poder dar un diagnóstico certero

e ir descartando posibles enfermedades. No hay que minimizar los sentimientos, el sentir de las

personas, ya que esto puede llegar a mantenerlos callados y a de que nunca busquen ayuda

profesional, lo cual en los peores de los casos puede desencadenar la muerte. Los trastornos

psiquiátricos hay que manejarlos a la brevedad posible, dándole la importancia necesaria y darles

un tratamiento certero. Es un gran desafío para la salud pública de nuestro país, sobre todo po0rque

la atención de la salud mental implica erradicar desigualdades, dotar a las instituciones de mayor

apoyo técnico y financiamiento, cambiar percepciones, educar la salud desde casa y concientizar

a la sociedad sobre la importancia de la salud mental y de cómo esta es indispensable para el

desarrollo social, la productividad laboral, el bienestar y calidad de vida tanto en lo individual

como en los colectivo y en nuestro alrededor. Se requiere la participación de la sociedad civil, las

instituciones no gubernamentales y las gubernamentales, los medios de comunicación, los amigos,

el personal de salud, la sociedad en general y por último y no menos importante, la familia.

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