TFM NereaGonzalezBernardez
TFM NereaGonzalezBernardez
TFM NereaGonzalezBernardez
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Resumen
En el presente trabajo se expone el caso de una paciente diagnosticada con Trastorno de Depresión
Mayor con ansiedad. La sintomatología presentada incluía llanto continuo, falta de concentración, sin
laboral. Algunos de estos síntomas eran tan intensos que se deriva para evaluación médica y comienza a
tomar medicación durante unos meses. A su vez se realiza la evaluación y se propone un tratamiento
basado en técnicas de distintas terapias de corte cognitivo conductual, específicas para los objetivos
meses de trabajo terapéutico en los que se desarrollaron diecisiete sesiones de manera quincenal, tras las
cuales se determinó el alta terapéutica debido a los avances obtenidos respecto a los objetivos
propuestos.
Palabras clave: caso único, terapia cognitivo conductual, Trastorno de Depresión Mayor con
ansiedad.
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Abstract
This paper presents the case of a patient diagnosed with Major Depressive Disorder and anxiety. The
feelings of loneliness, permanent sense of anguish and self-demanding work. Some of these symptoms
were so intense that she was referred for medical evaluation and started taking medication for a few
months. At the same time, she was evaluated by the psychologist and a treatment based on different
cognitive-behavioural techniques, specific for the proposed objectives, was proposed. These objectives
were mainly focused on emotional management and self-knowledge, increasing the number of reinforcing
activities, working on negative thoughts and irrational beliefs and the acquisition of social and assertive
skills. Seventeen biweekly sessions were held in eight months of therapeutic work, after which discharge
Keywords: case study, cognitive-behavioural therapy, Major Depressive Disorder and anxiety.
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Tabla de Contenido
Resumen ................................................................................................................................................... 2
1. Introducción...................................................................................................................................... 6
1.3.Epidemiología ................................................................................................................................13
1.4.Comorbilidad .................................................................................................................................13
1.5.Evaluación .....................................................................................................................................14
3. Estrategias de Evaluación.................................................................................................................20
4.4.Objetivos .......................................................................................................................................36
5. Tratamiento .....................................................................................................................................37
4
Tablas y Figuras
1. Figura 1……………………………………………………………………………………………………………………………………29
2. Tabla 1…………………………………………………………………………………………………………………………………….35
3. Tabla 2…………………………………………………………………………………………………………………………………….37
4. Tabla 3…………………………………………………………………………………………………………………………………….41
5. Tabla 4…………………………………………………………………………………………………………………………………….47
5
1. Introducción
El 5,4% de la población española en 2020 presentó algún tipo de cuadro depresivo, es decir, 2.1
millones de personas, considerando 230.000 casos como graves por la severidad presentada en su
Es por ello que el estudio acerca del adecuado diagnóstico, comprensión de la sintomatología y su
Para comprender los datos que hoy se tienen acerca de la depresión hay que tener muy presente
permitido ver de primera mano la importancia de la soledad en la salud mental. Existen estudios que
afirman que la existencia de sentimientos de soledad multiplica por cinco la probabilidad de que una
persona desarrolle una depresión, frente a la población que no tiene ese tipo de sentimientos (IRSJD,
2021).
depresiva, centrado principalmente en el estudio del Trastorno de Depresión Mayor (TDM) con ansiedad.
1.1.Criterios Diagnósticos
El TDM con ansiedad aparece en el DSM-5 (APA, 2014) dentro del epígrafe de trastorno
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- Trastorno de desregulación destructiva del estado de ánimo.
Dentro de los criterios que aparecen en el DSM-5 para poder realizar el diagnóstico de TDM
encontramos:
A) Cinco o más síntomas siguientes han estado presentes durante el mismo periodo de dos
- Estado de ánimo deprimido la mayor parte del día, casi todos los días, según se desprende de la
información subjetiva (p.ej. se siente triste, vacío, sin esperanza) o de la observación por parte de
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- Disminución importante del interés o el placer por todas o casi todas las actividades la mayor
parte del día, casi todos los días (como se desprende de la información, subjetiva o de la
observación).
- Pérdida importante de peso sin hacer dieta o aumento de peso (p.ej. modificación de más de un
5% del peso corporal en un mes) o disminución o aumento del apetito casi todos los días.
- Agitación o retraso psicomotor casi todos los días (observable por parte de otros; no simplemente
- Sentimiento de inutilidad o culpabilidad excesiva o inapropiada (que puede ser delirante) casi
todos los días (no simplemente el autorreproche o culpa por estar enfermo).
- Disminución de la capacidad para pensar o concentrarse, o para tomar decisiones, casi todos los
- Pensamientos de muerte recurrentes (no sólo miedo a morir), ideas suicidas recurrentes sin un
B) Los síntomas causan malestar clínicamente significativo o deterior en lo social, laboral u otras áreas
importantes de funcionamiento.
C) El episodio no se puede atribuir a los efectos fisiológico de una sustancia o de otra afección médica.
Nota: Los Criterios A-C constituyen un episodio de depresión mayor. Nota: Las respuestas a una pérdida
significativa (p. ej., duelo, ruina económica o pérdidas debidas a una catástrofe natural, una enfermedad o
discapacidad grave) pueden incluir el sentimiento de tristeza intensa, rumiación acerca de la pérdida de
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peso que figuran en el Criterio A, y pueden simular un episodio depresivo. Aunque estos síntomas pueden
presencia de un episodio de depresión mayor además de la respuesta normal a una pérdida significativa.
Esta decisión requiere inevitablemente el criterio clínico basado en la historia del individuo y en las normas
E) Nunca ha habido un episodio maníaco o hipomaníaco. Nota: esta exclusión no se aplica si todos los
episodios de tipo maníaco o hipomaníaco son inducidos por sustancias o se pueden atribuir a los efectos
Nota: Muestra de los criterios diagnósticos del DSM-5 de trastorno de depresión mayor. Recuperado del
Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales de la Asociación Americana de la Psiquiatría, 5ª edición,
Dentro de los criterios diagnósticos para el TDM (APA, 2014), también encontramos ciertos
es: la ansiedad se define como la presencia de dos o más de los síntomas siguientes durante la mayoría de
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4. Miedo a que pueda suceder algo terrible.
1.2.Modelos Teóricos
Existen diversas explicaciones etiológicas sobre la depresión. Esto es así porque es un concepto
complejo y diverso en sus manifestaciones y, por lo tanto, difícil de encontrar una única explicación. A
continuación, se presenta un recorrido por los modelos que tratan de explicar este fenómeno:
Modelos Biologicistas:
Desde estos modelos, se trata de dar una explicación de la depresión y sus síntomas asociados a
También existen otros aspectos fisiológicos que se han intentado unir con la aparición o no de
trastornos depresivos. Podemos encontrar también las teorías bioquímicas, como la teoría
transmisión de noradrenalina (NA) y/o serotonina (5-HT) en el sistema nervioso central. Es en estas
teorías bioquímicas donde se ubican los mecanismos de acción de los medicamentos antidepresivos bajo
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Modelos Conductuales:
proceso de aprendizaje a través de las interacciones ocurridas entre el individuo y el entorno, incluyendo
también las cogniciones, conductas y emociones (Vázquez et al., 2000). Dentro de los modelos más
- Teoría de la disminución del refuerzo positivo de Lewinsohn (1974): según este autor, la
depresión se trataría de una respuesta ante la falta o disminución de las contingencias positivas
ante las conductas que realiza el sujeto, lo que conduce a una disminución de esas conductas
antes realizadas. Esto deriva, a su vez, en sentimientos de desesperanza y baja autoestima debido
- Teoría del autocontrol de Rehm (1977): esta teoría se basa en las maneras en las que las personas
manejan y controlan su propia conducta para poder obtener metas a largo plazo. Según esta
premisa, la desesperanza presente en los episodios depresivos hace que no se pueda organizar la
conducta en base a esas metas. Así, el comportamiento depresivo atiende más a los eventos
que se autoimponen, a las atribuciones que se realizan, los insuficientes refuerzos recibidos y los
- Modelo basado en resolución de problemas de Nezu: según este modelo, en estados depresivos
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(orientación general, definición y formulación del problema, generación de alternativas, toma de
Modelos cognitivos:
- Modelo cognitivo de Beck: este modelo postula que la depresión tiene su sustrato en la tríada
cognitiva, los esquemas y los errores cognitivos. Se entiende como tríada cognitiva a los patrones
negativos de pensamiento acerca de sí mismo, sus experiencias y el futuro. Por su parte, los
evaluación de las experiencias. Todo esto es acompañado de los errores cognitivos, los cuales son
- Terapia de Ellis: lo que propone este autor es que la base de los estados depresivos se encuentra
en las creencias disfuncionales e ideas irracionales, las cuales se pueden reestructurar a través de
produce cuando se ha estado expuesto a una falta de contingencia entre la conducta propia y las
consecuencias que siguen a esa conducta. En este sentido, aparecería un estado de pasividad en
el que se dejan de emitir conductas debido a la incapacidad para discriminar las contingencias
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1.3.Epidemiología
personas afectadas que reside en países con ingresos de medianos a bajos no recibe ningún tipo de
La depresión es el trastorno mental que más correlaciona con la existencia de ideas suicidas o
intentos autolíticos. El porcentaje de personas con depresión que muestran riesgo de suicidio asciende al
frecuencia en mujeres de casi tres veces mayor que la de los hombres. Según la Subdirección General de
Información Sanitaria (2021), en España en adultos de 40 años o más, el psicofármaco más dispensado
1.4.Comorbilidad
Existen estudios que afirman que, cuando existe un trastorno depresivo, es común que existan
observaron que, de los casos con depresión que acudían a los servicios de atención primaria, sólo el
26,2% no presentaba ninguna comorbilidad con otro trastorno mental. El porcentaje de los casos que
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1.5.Evaluación
La depresión es un constructo complejo por lo que su evaluación debe de ser amplia y centrada
Según las pautas que se ofrecen en la Guía de Práctica Clínica sobre el Manejo de la Depresión en
el adulto (Grupo de trabajo de la Guía de Práctica Clínica sobre el Manejo de la Depresión en el Adulto,
2014), la evaluación de la depresión debería incluir una valoración acerca del curso, gravedad y riesgo de
suicidio. Para ello, el procedimiento que se considera esencial es la entrevista y el juicio clínico. A través
de la entrevista, se evalúa las características del episodio, situación psicosocial, grado de interferencia,
Existen también distintas pruebas psicométricas con las que se puede evaluar la sintomatología
Clinical and Talent Assessment España. Se trata de un autoinforme con 21 ítems en escala tipo
Likert utilizado para detectar y evaluar la gravedad de la depresión. Se puede aplicar a partir de
los 13 años con una duración de entre 5-10 minutos. Los síntomas evaluados corresponden con
los criterios que aparecen en los manuales diagnósticos DSM y CIE. Los puntos de corte
clasificatorios son: mínima depresión (0-13), depresión leve (14-19), depresión moderada (20-28)
y depresión grave (29-63). En cuanto a la validez, presenta una excelente validez predictiva y de
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constructo. En cuanto a la fiabilidad, consta de una elevada consistencia interna (Consejo General
- Hamilton Depression Rating Scale (HDRS): es una escala heteroaplicada utilizada en los casos en
los que ya existe un diagnóstico de depresión para poder evaluar la gravedad y los cambios
durante el tratamiento. Consta de 17 ítems y sus puntos de corte son: no deprimido (0-7),
- Montgomery Asberg Depression Rating Scale (MADRS): es una escala heteroaplicada que evalúa
gravedad de los síntomas presentes en depresión. Consta de 10 ítems que oscilan del 0 al 6 y
ninguno de ellos evalúa ansiedad. Los puntos de corte recomendados son: no depresión (0-6),
leve (7-19), moderada (20-34) y grave (35-60) (Grupo de trabajo de la Guía de Práctica Clínica
1.6.Tratamientos Eficaces
igual que explicaciones etiológicas. Aunque existen también tratamientos farmacológicos, se pasará a
describir brevemente los tratamientos psicológicos más relevantes para el tratamiento de la depresión.
Terapias Cognitivo-Conductuales:
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modificación en esquemas cognitivos y en la perspectiva negativa de sí mismo (Carrasco, 2017). Dentro de
este enfoque, podemos encontrar como tratamientos eficaces y posibles piezas dentro del tratamiento de
- Activación conductual.
- Terapias de autocontrol.
- Técnicas de exposición.
Terapia Interpersonal:
Esta terapia se centra en cuatro áreas que suelen aparecer en los cuadros depresivos (Pérez y
García, 2003):
- La transición de rol: cambio de un papel social a otro debido a cambios en el contexto, edad, otras
circunstancias.
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Terapia de Aceptación y Compromiso:
Incluida dentro de las terapias de tercera generación, el objetivo de esta terapia es aprender a
reconceptualizar de una manera más adaptativa todos los pensamientos, emociones, sensaciones físicas,
etc. que son temidos. Se basa en la aceptación de todo aquello que se teme, sin evitar, estando presentes
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2. Identificación del Paciente y Motivo de Consulta
Los datos aportados en este estudio cuentan con el consentimiento informado del paciente. Los
datos personales incluidos acerca del caso que se presenta están alterados con el fin de no poder
identificar a la persona que acude al centro de psicología, según la ley de protección de datos de carácter
personal.
En este estudio se tratará el caso de A., quien acude a consulta privada por primera vez en
octubre del 2021. A. es una mujer soltera de 44 años residente en Madrid. Vive sola y tiene muy buena
relación con su madre y con sus dos hermanos mayores. Disfruta mucho de pasar tiempo en familia,
principalmente con sus sobrinos. Trabaja en una multinacional de gran nivel y tiene un puesto de elevada
responsabilidad.
Al llegar por primera vez a consulta, presenta un llanto continuo, falta de concentración, refiere
no tener ganas de relacionarse, piensa y analiza mucho cualquier situación, presenta también
a consulta, su demanda inicial es “cambiar la sensación de pasar por la vida a vivir la vida”.
Tras la evaluación, A. es diagnosticada con un Trastorno de Depresión Mayor (296.22 (F32.1)) con
ansiedad (APA, 2014). En esta fase de evaluación, se situó que la problemática comenzó hace unos 5 años
por la situación laboral que comenzaba a vivir, aunque también refiere que desde pequeña ha sido muy
recibido comentarios de compañeros del colegio que han provocado sentimientos de incapacidad o de no
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Acude en este momento concreto a terapia motivada por un conflicto con un compañero de
trabajo. El área laboral es muy importante en su vida ya que dedica gran parte del día a la misma. Otro
dato relevante que aporta como posible desencadenante de la problemática es una ruptura repentina
hace unos 10 años con su pareja estable. Todo esto ha propiciado los pensamientos negativos acerca de sí
sintomatología hace complicado el desarrollo de las sesiones y desde este recurso se le receta orfidal
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3. Estrategias de Evaluación
demandas de la paciente.
Entrevista Semiestructurada:
mediante la cual se consiguió recopilar abundante información divida en distintas áreas de interés clínico.
El formato de la entrevista semiestructurada utilizada por la psicóloga encargada del caso fue la
proporcionada y utilizada en el centro psicológico donde se desarrolló la terapia, usando como guía la
historia clínica que allí es usada para la organización de la información obtenida de cada paciente.
semiestructurada.
Área Familiar
La madre y uno de los hermanos de A. residen cerca de su casa, por lo que se ven y comparten
tiempo a menudo. Su otro hermano y sus sobrinos residen en otra Comunidad Autónoma, pero realizan
viajes frecuentes para verse. Su padre falleció hace 15 años. Refiere que la relación familiar, tanto en su
infancia como en la actualidad, es muy buena y los siente como un apoyo muy importante cuando los
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necesita. A. no está casada ni tiene hijos. Tuvo una relación larga y estable, la cual terminó de manera
Área Laboral
A. dedica gran parte de su tiempo al trabajo. Lleva trabajando varios años en la misma
que coordina a un equipo de varios empleados. Le gusta el trabajo que realiza, pero muchas veces no se
siente lo suficientemente competente o con las capacidades necesarias, principalmente por cuestiones
relacionadas con hablar en público, gestionar grupos de gente o imponer respeto. En el momento que
inicia la terapia, mantiene un conflicto con un compañero de trabajo, el cual no respeta su autoridad. Es
una de las motivaciones para iniciar el tratamiento ya que no siente la capacidad de resolver ese
problema. También, debido a su trabajo, realiza numerosos viajes por toda Europa.
Relaciones Sociales
A. cuenta con apoyos sociales, entre ellos su grupo de amigos de la infancia. Mantiene una buena
relación con ellos, aunque en la actualidad surgen algunos roces debido a los diferentes estilos de vida
que cada uno presenta, principalmente porque la mayoría están casados y con hijos y esto dificulta el
poder verse con continuidad. A parte de este grupo, mantiene otras amistades derivadas principalmente
del trabajo.
21
Actividades y Aficiones
Debido al poco tiempo libre del que dispone a raíz de las demandas del trabajo, A. no presenta
muchas aficiones al inicio de la terapia. Además, unido al ánimo depresivo y la anhedonia, ha dejado de
realizar algunas de las actividades que sí mantenía como la práctica de deporte y las compras.
Salud
Lleva una vida sana, en la que incluye una dieta equilibrada, una buena higiene del sueño y deporte
esporádico.
Observación:
observación de las conductas presentadas durante las sesiones. A través del lenguaje no verbal
presentado en el desarrollo de las sesiones se pudo obtener una información más completa de la
Autorregistros:
También se utilizaron autorregistros como medida de evaluación para conocer en qué situaciones
aparecen las conductas problemáticas. Estos autorregistros se utilizaron con el objetivo de poder
identificar más en profundidad cuáles eran los contextos que desencadenaban los pensamientos y
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emociones negativas y desbordantes y conocer cuáles eran las estrategias que estaba poniendo en
- Situación
- Pensamiento
- Conducta y consecuencias
Cuestionarios y Test:
Por último, se utilizaron también cuestionarios con los que obtener datos objetivos y medibles de
Con esta escala de 21 ítems (ya desarrollada en el marco teórico) se evalúa la posible existencia
de síntomas depresivos y la gravedad de los mismos a partir de los 13 años. Se utilizó la adaptación al
español más reciente (2011) realizada por J. Sanz y C. Vázquez en colaboración con el Departamento de
I+D de Pearson Clinical and Talent Assessment España. Al pasar este test, A. obtiene una puntuación de
Este test es utilizado para evaluar los estilos de personalidad más predominantes en el paciente,
evitativo, dependiente, obsesivo compulsivo, pasivo agresivo, sádico, autodestructivo y depresivo. Consta
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de 170 ítems en los que hay que valorar del 1 al 7 en función de lo característicos o propios que son los
de mí” y 7 “totalmente característico de mí”. En cuanto a sus características psicométricas, presenta una
elevada consistencia interna y fiabilidad. Tras realizar el test, los resultados obtenidos fueron los que se
presentan a continuación:
- Paranoide: 33.
- Esquizoide: 54.
- Esquizotípico: 46.
- Antisocial: 23.
- Límite: 49.
- Histriónico: 20.
- Narcisista: 27.
- Evitativo: 63.
- Dependiente: 37.
- Autodestructivo: 31.
- Depresivo: 59.
- Sádico: 15.
- Sinceridad: sí.
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A. obtiene un predominio de estilo de personalidad evitativa (puntuación de 63), seguida del
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4. Formulación Clínica del Caso
detallados, se realiza la formulación clínica del caso. Para realizar el análisis del caso de A., se plantearán
la hipótesis de origen y la hipótesis de mantenimiento. La hipótesis de origen trata de explicar las causas
de un problema psicológico concreto, incidiendo también en el contexto en el que se dio ese problema
psicológico. La hipótesis de mantenimiento es aquella que explicará cuáles son los motivos que hacen que
esa conducta problema se siga dando en el presente, prestando atención a todos aquellos aspectos que la
Hipótesis de Origen:
(factor predisponente). Esto le ha llevado a sufrir, desde edades tempranas, por el miedo al rechazo, no
compararse con los demás. A este factor de vulnerabilidad se le une también ciertas situaciones que han
trabajo al tener que coordinar y liderar a grupos de personas, el conflicto vivido con uno de sus
subordinados y la diferente etapa vital por la que están pasando sus amistades (matrimonios e hijos) con
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El conjunto de todos estos factores predisponentes y precipitantes convergen dando lugar a un
trastorno depresivo mayor. Los síntomas descritos por A. fueron sentimientos de tristeza y desesperanza,
futuro, taquicardia y sensación de ansiedad, bloqueo ante los conflictos pérdida de interés y de energía.
Hipótesis de Mantenimiento:
Todos estos síntomas típicos del trastorno depresivo que presenta A. en el inicio de la terapia se
mantienen por la visión global negativa que tiene sobre sí misma (“soy una inútil”, “me gustaría que las
cosas me costaran menos como a los demás”). Esta visión se confirma cada vez que aparece una situación
en la que su valía como persona puede medirse (hablar en público, gestionar conflictos con compañeros,
relacionarse socialmente), activando esta visión global negativa sobre sí misma, lo que provoca que haga
predicciones disfuncionales acerca del “poco éxito” que tendrá en esta situación. Esto produce que
realmente su comportamiento no sea adaptativo (se confirman las ideas negativas sobre sí misma),
acrecentando los síntomas depresivos. Así, se puede ver cómo se crea un círculo en el cual la baja
4.2.Modelo Explicativo
(1997).
De acuerdo con este modelo, la baja autoestima sería una pieza clave en el desarrollo y
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Esta baja autoestima se define como esquemas, siguiendo también la teoría cognitiva de Beck
(1967) y los estudios de Bartlett (1932) (como se citó en Fennell, 1997). Estos esquemas consistirían en
representaciones cognitivas generales que están basados en experiencias cuya labor es modificar la
Siguiendo este modelo, la baja autoestima tendría su origen en experiencias tempranas, las cuales
sirven a las personas para formar sus creencias acerca de sí mismos, el resto y el mundo. Cuando se dan
ciertas circunstancias concretas, estas creencias se activan, provocando que se mantengan los síntomas
depresivos.
28
Figura 1
29
A continuación, se explicarán las distintas fases del proceso aplicado al caso de A.:
Experiencias Tempranas
Según este modelo, estas experiencias tempranas que derivan en baja autoestima son la
sentir en demasiadas ocasiones la autoeficacia de resolver los conflictos que se le pudieran interponer.
Esto se puede unir también a las experiencias vividas en la infancia en las cuales no se ha sentido
integrada o han existido comentarios que han hecho que se cuestione su competencia social.
“Bottom Line”
conclusión negativa sobre sí misma a la que llega la persona tras las experiencias tempranas. En el caso de
A., encontramos verbalizaciones, tanto en sesión como en autorregistros realizados, que muestran esta
visión negativa sobre sí misma. Algunas de estas verbalizaciones son “tengo algo mal en mí que el resto
Suposiciones Disfuncionales
Estas suposiciones guían el comportamiento de las personas, poniendo condiciones irreales con
las que medir su valía. Esto permite que se pueda aliviar de cierta manera la angustia que va intrínseca en
la visión negativa de uno mismo. Así, en vez de cambiar estas creencias negativas, se pueden
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consigue o puede no conseguirse llegar a los mínimos irreales autoimpuestos para poder valorarse como
persona, estas creencias se seguirán activando. En el caso de A. se puede observar que trata de ser muy
Incidentes Críticos
Son aquellas situaciones en las que la valía se pone a prueba en función de las suposiciones
disfuncionales. Cuando no se consiguen esos mínimos, se inicia un círculo vicioso, que se explicará a
sirven para confirmar las creencias nucleares negativas ya existentes. Estas situaciones pueden generar
dudas o sensación de que no se llegará al mínimo necesario autoimpuesto (en el diagrama, se seguirá el
camino de líneas sin puntear) o pueden realmente no llegar a ese mínimo (camino de líneas punteadas).
Un ejemplo de esto en el caso de A. podría ser basar su valía como persona en ser querida y aceptada por
el resto y como incidente crítico encontrar la ruptura repentina con su pareja, en la que realmente existe
Predicciones Negativas
Aquellas auto verbalizaciones que aparecen al enfrentarse a los incidentes críticos. En el caso de
A., algunas de las predicciones que refiere son “¿qué pasará si me equivoco delante de todos?”, “seguro
que todos notan que no estoy capacitada para el puesto”, “con esta edad y sintiéndome así, esto nunca
cambiará”.
31
Ansiedad
La activación psicofisiológica que se deriva de todo este proceso, que en el caso de A. la describe
Comportamiento Disfuncional
disfuncional. Éste puede ser evitativo de las situaciones temidas o puede realizarse de una manera más
torpe de la que sucedería en situaciones sin estas predicciones catastrofistas. En el caso de A.,
sociales.
Confirmación
Normalmente, sea cual sea el resultado del incidente crítico, se suele ver como una prueba de
realidad que permite seguir validando la visión negativa de la persona. Este proceso es debido a la
Pensamiento Autocrítico
que encontramos en el caso de A. son “¿por qué siempre fastidio este tipo de situaciones?”, “nunca
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Depresión
Estos pensamientos negativos tienen una relación directa con el ánimo de la persona,
apareciendo así la sintomatología depresiva. Esta sintomatología, a su vez, retroalimenta las creencias
incluidas en el “bottom line”. La sintomatología depresiva presentada por A. consta de llanto continuo,
actividades.
Existen otros estudios (Hilbert et al., 2018) que también relacionan la autoestima con la
sintomatología depresiva.
cara a una compresión más profunda de la problemática para el diseño del tratamiento. Se destacan tres
conductas principales como problemáticas y éstas son el aislamiento, la autoexigencia que se impone en
el ámbito social y laboral y, por último, el autoesquema negativo que mantiene pensamientos
A. evita situaciones en las que se puedan ver cuestionadas sus habilidades sociales. En las que no
puede evitar (algunas reuniones de trabajo) y considera que tiene que llegar a unos mínimos
autoimpuestos para considerar que tiene el respeto de sus subordinados, le dedica muchas horas de
trabajo para poder sentir control. Todo esto se mantiene también por los pensamientos negativos sobre sí
misma, los cuales le ofrecen una explicación sesgada de todos los fallos o torpezas que comete,
obteniendo así un autoconcepto desadaptativo y una autoestima disminuida. Estas conductas son
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mantenidas a corto plazo gracias a la sensación de control que le proporcionan (refuerzo positivo) y al
alivio del malestar y los síntomas de ansiedad derivados (refuerzo negativo). Sin embargo, a largo plazo
encontramos que sigue llevando una vida en la que se pierde el contacto social deseado (castigo negativo)
y sin habilidades asertivas para solucionar problemas de una manera más adaptativa, lo cual es algo muy
negativo para ella. Esto produce grandes sentimientos de soledad y tristeza (castigo positivo) y una
pérdida de confianza en sí misma y en sus capacidades (castigo negativo), lo que seguirá afectando a la
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Tabla 1
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4.4.Objetivos
Objetivo General
Objetivos Específicos
36
5. Tratamiento
presentados, basados en las fases encontradas en el modelo de Fennell (1997) para la explicación de la
Tabla 2
Objetivo Técnica
Psicoeducación conducta ansiosa.
Fomentar el autoconocimiento y la Psicoeducación conducta depresiva.
identificación y gestión emocional. Rueda de las emociones.
Respiración profunda con retención de aire.
Modelo ABC.
Identificar los pensamientos Creencias irracionales.
negativos y generar respuestas Tríada cognitiva negativa.
alternativas más adaptativas. Distorsiones cognitivas y pensamientos alternativos.
Reestructuración cognitiva.
Incrementar el número de
actividades agradables y ganar Activación conductual.
reforzadores.
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El periodo de tratamiento de este caso abarca 17 sesiones en un periodo de 8 meses (octubre
2021 – mayo 2022). La duración de la terapia se vio alargada debido a los numerosos viajes de trabajo que
A. tenía que realizar, por lo que, aunque inicialmente se establecieron sesiones semanales, hubo que
diferentes terapias y técnicas de corte cognitivo conductual, ya que son efectivas para esta problemática
según la literatura expuesta en la introducción. Se utilizaron los siguientes elementos de estos enfoques:
- Tríada cognitiva negativa: explicación de los patrones cognitivos que propician la visión
idiosincrática de sí mismo, su futuro y sus experiencias. Esto se debe a las atribuciones que se
hacen de las experiencias desagradables a defectos propios (“lo negativo que sucede es a causa
con obstáculos insuperables (“todas las situaciones que me rodean me superan”) aunque existan
otras interpretaciones alternativas más realistas y la percepción de que sus dificultades van a
seguir indefinidamente, por lo que se anticipan una visión negativa del futuro.
erróneas que existen en el procesamiento de la información que nos llega. Las distorsiones
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- Reestructuración cognitiva: trabajo en la identificación y modificación de esos patrones cognitivos
que producen finalmente las conductas desadaptativas, todo ello mediante el cuestionamiento de
esas cogniciones y creencias negativas (examinar su utilidad, qué pasaría si fueran ciertas,
- Modelo ABC: explicación acerca de la relación existente entre los pensamientos, emociones y
sensaciones físicas y los comportamientos. Comprensión de por qué, ante una misma situación,
las personas pueden desarrollar conductas y respuestas distintas. Los componentes de este
cómo vemos al mundo y a nosotros mismos) y las consecuencias que se derivan (aquí se incluyen
las respuestas emocionales y conductuales que se emiten moduladas por el sistema de creencias
activación conductual: la clave para cambiar lo que se siente es cambiar lo que se hace, las
estrategias a corto plazo de adaptación a cambios que pueden producir depresión pueden
bloquear, importancia de entender qué procede y sigue a las conductas, programar actividades en
39
actividades que sean reforzadoras por naturaleza, actuar como entrenadores, enfoque empírico
- Exposición en vivo: exponerse a situaciones temidas reales de manera sistemática como aquellas
terapéutica.
enfrentando, experimentando todos los estímulos que estarían presentes en la situación real.
sociales y derechos asertivos (derecho a decir no, a expresar lo que se siente, a cometer errores,
(exposición simulada). Estos ensayos iban seguidos de reforzamiento por parte del terapeuta y de
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Técnicas de Gestión Emocional
- Respiración profunda con retención de aire: con el objetivo de enviar el aire hasta la parte inferior
de los pulmones y así oxigenar de manera adecuada la sangre en momentos en los que existe una
elevada activación o tensión. La manera de realizarla será sentarse cómodamente con una mano
sobre el abdomen, la cual se deberá elevar con las inspiraciones y volver a su posición inicial en
las espiraciones. Se inspirará por la nariz durante cinco segundos, se retendrá el aire de cinco a
siete segundos y se expulsará por la nariz o la boca lentamente durante unos diez segundos. Este
- Rueda de las emociones: se compone de las ocho emociones básicas (alegría, confianza, miedo,
sorpresa, tristeza, aversión, ira y anticipación) y de los solapamientos que pueden existir (díadas
primarias, secundarias o terciarias) para formar emociones más complejas (Plutchik, 2001).
Tabla 3
Sesiones Técnicas
-Explicación del funcionamiento de la terapia.
-Firma del consentimiento informado.
-Entrevista clínica semiestructurada.
Sesiones 1 – 4 -Establecimiento vínculo terapéutico.
-Cuestionarios.
-Autorregistros.
-Establecimiento de objetivos terapéuticos.
-Psicoeducación sobre la conducta ansiosa y depresiva.
-Activación conductual.
Sesiones 5 – 9 -Ejercicios de gestión emocional y respiración.
-TREC de Ellis (modelo ABC, autorregistros).
-Terapia cognitiva de Beck (tríada cognitiva negativa).
41
-TREC de Ellis (modelo ABC, autorregistros).
-Terapia cognitiva de Beck (reestructuración cognitiva, trabajo
Sesiones 10 – 13
distorsiones cognitivas y pensamientos alternativos).
-Activación conductual.
-Técnicas de exposición.
-Entrenamiento en habilidades sociales y asertividad.
Sesiones 14 – 16
-Técnicas de exposición.
Sesión 17 -Cierre.
Las cuatro primeras sesiones se dedicaron a la evaluación. A. acudió a consulta con muchos
síntomas fisiológicos que dificultaban en gran medida el desarrollo de las sesiones, por eso se necesitaron
cuatro para poder realizar una evaluación en profundidad. Es en esta etapa en la que se le recomienda
dirigirse a su médico de cabecera para que valorase la necesidad de incluir medicación, la cual finalmente
le fue recetada. Se pasaron los cuestionarios BDI-II y CEPER III y se enviaron autorregistros entre sesiones
para poder analizar las situaciones, pensamientos, emociones y conductas respuesta que identificaba
tratamiento.
situación de la paciente. Lo primero que se realizó fue una psicoeducación acerca del funcionamiento de
vez, se incidió en la necesidad y la relevancia que tiene en los estados depresivos el realizar activación
conductual y se comenzaron a programar pequeñas actividades que podía ir añadiendo en su día a día,
poniendo objetivos pequeños y realistas (p. ej.: dar paseos de 15 minutos). Para controlar la
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respiración diafragmática. Como también le costaba mucho desde las primeras sesiones y los primeros
autorregistros el identificar las emociones que sentía, se trabajó también con la rueda de las emociones
para poder mejorar la identificación emocional. También relacionado con la psicoeducación, se fueron
concretamente, se explicó el porqué de la visión negativa de todo que tanto le pesaba a través de la
tríada cognitiva negativa de Beck. Además, se le explicó la relación y la influencia que existía entre los
pensamientos/interpretaciones que se hacían sobre las situaciones que vivía, las emociones que sentía y
las conductas que emitía, todo esto a través del modelo ABC de Ellis y las once creencias irracionales que
propone. Para una mayor comprensión de estos conceptos, se siguieron mandando autorregistros como
En las sesiones de la décima a la decimotercera fue cuando se realizó un trabajo más exhaustivo
acerca de las cogniciones. Se siguió profundizando en el modelo ABC a través de los autorregistros y éstos
se utilizaron también para comenzar a buscar pensamientos alternativos no basados en ideas irracionales
observar en sus autorregistros. Para facilitar este cambio que se comenzaba a dar en sesión, se enviaban
tareas para casa para seguir examinando las pruebas o la utilidad de esos pensamientos que aparecían
(preguntas para examinar los datos que se tenían a favor del pensamiento, la probabilidad de que fueran
ciertos, reflexionar acerca de si ese pensamiento era útil para conseguir los objetivos o para solucionar el
problema, etc.). También, se propusieron situaciones en sesión que para A. eran problemáticas para que
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pudiera imaginarse viviendo esa situación y reestructurara los pensamientos negativos que apareciesen
(exposición en imaginación). En cuanto a la activación conductual, al ver el gran beneficio que tenían en
su estado de ánimo, se siguieron estableciendo actividades cada vez de más complejidad para A.,
finalmente incluso consiguió apuntarse de voluntaria en una ONG, que es algo que deseaba y que le
esta etapa la paciente ya tenía un buen manejo en buscar pensamientos alternativos más adaptativos, lo
que se veía reflejado en los autorregistros, y era muy consciente del modelo ABC y de las distorsiones
cognitivas, por lo que también su estado de ánimo y la sintomatología con la que llegó mejoraron
través de técnicas de exposición, tanto exposición simulada a través de role-play durante las sesiones
como exposición en vivo en situaciones temidas para ella. En ambas formas de exposición, se evitó el
escape de las mismas mediante prevención de respuesta con el objetivo de que la evitación de estas
situaciones no se convirtiera en una señal de seguridad (Echeburúa y del Corral, 2008). Estas situaciones
en vivo se centraron principalmente en el ámbito laboral, al tener que interactuar con subordinados o
dirigir reuniones y hacer exposiciones. Aunque, siguiendo el modelo de Fennell (1997) ya expuesto para
este caso, la autoestima debería mejorar como respuesta a la modificación en el resto de áreas, se realizó
principalmente mediante el refuerzo en sesiones acerca de las metas que iba consiguiendo.
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Por último, se realizó una sesión de cierre en la que se valoraron la consecución de los objetivos
marcados al inicio de la terapia. Por los niveles alcanzados, se optó por finalizar ahí el tratamiento.
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6. Valoración del tratamiento
6.2.Adherencia al Tratamiento
La duración total del tratamiento fue de 8 meses (octubre 2021 – mayo 2022). En este tiempo, se
combinó la terapia farmacológica durante los primeros seis meses (consumo de orfidal durante un mes y
Durante el transcurso del tratamiento psicológico, A. mostró muy buena adherencia al proceso y
gran alianza terapéutica. Desde sesiones muy iniciales, ya refería estar aprendiendo y “ver un poco de luz
al final del túnel”. Los cambios obtenidos respecto de la primera sesión que acudió fueron muy notables,
destacando su implicación con los ejercicios realizados durante las sesiones y las tareas para casa al ver
Todo esto es aún más notable teniendo en cuenta la dificultad de tiempo con la que A. contaba.
Al realizar tantos viajes de trabajo y tener que espaciar las sesiones a una periodicidad quincenal, podría
esperarse que fuera más complicado desarrollar el vínculo terapéutico o la adherencia a las técnicas
propuestas. Sin embargo, A. encajó muy bien con la psicóloga del centro y con la forma de trabajo y
favorable.
tratamiento, los cuales se evaluaron con instrumentos de medida específicos y se trataron con diversas
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Tabla 4
Instrumentos de Instrumentos de
Objetivos
evaluación Técnicas evaluación
terapéuticos
pretratamiento postratamiento
Psicoeducación conducta
ansiosa.
Fomentar el Psicoeducación conducta
Entrevista Entrevista
autoconocimiento y la depresiva.
semiestructurada. semiestructurada.
identificación y Técnicas de gestión emocional
Observación. Observación.
gestión emocional. (rueda de las emociones y
respiración profunda con
retención de aire).
Terapia racional emotiva
Identificar los conductual de Ellis (modelo
pensamientos ABC).
Autorregistros. negativos y generar Terapia cognitiva de Beck Autorregistros.
Observación. respuestas (creencias irracionales, tríada Observación.
alternativas más cognitiva negativa, distorsiones
adaptativas. cognitivas y pensamientos
alternativos y reestructuración
cognitiva).
Incrementar el
Observación. número de actividades Activación conductual. Observación.
agradables y ganar
reforzadores.
Enfrentar situaciones
Entrevista problemáticas de Terapias de exposición. Entrevista
semiestructurada. manera asertiva Entrenamiento en habilidades semiestructurada.
Observación. desarrollando sociales y asertividad. Observación.
habilidades sociales.
Disminuir la
sintomatología
depresiva, Conjunto de todo el Entrevista
BDI-II aumentando la tratamiento. semiestructurada.
autoestima y la Observación.
confianza en sí misma
(objetivo general).
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Como se ha comentado, la paciente obtuvo una buena evolución respecto a la consecución de los
La paciente acudió a sesión con un muy pobre autoconocimiento. Los síntomas la desbordaban
tanto que no era capaz de identificar qué emoción era la que sentía (cuando se le preguntaba cómo se
sentía, la respuesta general era “no lo sé”) ni mucho menos cómo gestionarla. Mediante mucha
psicoeducación y con la rueda de las emociones como apoyo, se pudo observar en las sesiones que A.
consiguió al finalizar el tratamiento ser capaz de identificar y ponerle nombre a las emociones que sentía.
Esto le permitió ser consciente de cómo se sentía cada emoción en su cuerpo y, al identificarla, poder
poner en marcha las técnicas de gestión emocional, avance que ella misma refirió en las entrevistas en
sesión. Mediante la técnica de respiración profunda con retención de aire, fue capaz de controlar los
síntomas ansiosos que al inicio del tratamiento le paralizaban y poder seguir con las actividades que
estuviera realizando.
Este es el objetivo en el que más mejoras se han observado. A. acudió a terapia con pensamientos
muy negativos, basados en creencias irracionales y cogniciones distorsionadas. Tras un trabajo muy
centrado en su reestructuración, la paciente terminó siendo capaz por ella misma de darse cuentas de
estos fallos de pensamiento que no le beneficiaban para cumplir sus propios objetivos. También fue
estado de ánimo y a sus acciones. Todo el cambio sucedido en cómo interpretaba las situaciones de su
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vida cotidiana o cuáles eran las consecuencias en sus acciones, aunque las emociones fueran negativas
para ella, se pudo observar en los autorregistros enviados como tareas para casa. Se pudo observar
principalmente que, ante situaciones que hubiera evitado debido a estas creencias irracionales, comienza
a enfrentarlas y a acudir a pesar de las emociones desagradables que pudiera estar sintiendo. Además,
estas emociones desagradables también disminuyeron al comenzar a interpretar de una manera más
En este objetivo también se pudo observar la diferencia existente entre el inicio de la terapia y la
finalización de la misma. Cuando inició el tratamiento, A. no realizaba casi ninguna actividad en su día a
día, exceptuando el trabajo. Le fue muy difícil poder encontrar actividades que le gustaran o que le
resultaran gratificantes y reforzantes. Al finalizar la terapia, retomó algunas de las actividades que sí
realizaba antes de comenzar con el estado depresivo que presentaba, como la práctica de deporte (se
comenzó por objetivos pequeños, como realizar paseos cortos por su vecindario). Al ver los beneficios en
su estado de ánimo, A. consiguió introducir actividades reforzantes mucho más demandantes que al inicio
no se veía capaz, como apuntarse de voluntaria a una ONG relacionada con las personas en situación de
En este objetivo se pudieron observar también mejoras, debido también a que la situación que
principalmente había motivado a la paciente fue un conflicto con un subordinado en su trabajo. Es por
ello que demostró mucha implicación también en las técnicas y ejercicios propuestos para la consecución
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de este objetivo. Temporalmente este fue el último objetivo que se trabajó, por lo que el estado de ánimo
general que presentaba A. era mucho mejor que el inicial, lo que pudo también influir en los avances que
se observaron. Al terminar el tratamiento, la paciente era capaz de realizar role-play de situaciones que le
resultaban problemáticas resolviendo la situación de una manera asertiva, velando por sus intereses.
Además, esta práctica se trasladó a la exposición en vivo en situaciones reales. A. refirió en las entrevistas
en sesión que se sentía capaz de resolver esas situaciones reales de una manera mucho más efectiva que
al inicio de terapia. Refirió también que este era el objetivo en el que aún sentía que podía mejorar, ya
que algunas situaciones laborales aún le costaban aplicar esas soluciones asertivas.
En cuanto al objetivo general de la terapia, se concluyó que se había alcanzado de una manera
satisfactoria. Al inicio de la terapia se midió este objetivo a través de una prueba objetiva, el BDI-II. Al
finalizar la terapia, se consideró que con los datos recogidos a través de las entrevistas realizadas y la
observación en sesiones era suficiente para concluir que A. ya no se encontraba en un estado depresivo.
fase de evaluación (llanto continuo, falta de concentración, sin ganas de relacionarse, sentimientos de
soledad, sensación de angustia o ansiedad permanente, autoexigencia laboral, etc.). Además, como se
deriva del modelo de Fennell (1997), al modificar los objetivos anteriores, la autoestima de A. aumenta,
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7. Discusión y Conclusiones
En este trabajo se ha presentado un caso de depresión con ansiedad, una condición muy común
en las clínicas de psicología. En este caso se ha planteado un tratamiento compuesto por un conjunto de
técnicas de corte cognitivo conductual para unos objetivos relacionados con esta sintomatología
Todo ello ha sido explicado desde un modelo explicativo que relacionaba toda esta sintomatología con
una inadecuada autoestima. Es interesante ver desde este modelo explicativo cómo convergen en un
círculo vicioso diversos aspectos que derivan en depresión y ansiedad y, aunque nuestro objetivo sea
modificar las actitudes y conductas actuales, cómo influyen también las experiencias tempranas en la
manera en la que se instaura la manera de interpretar y valorar la información que nos llega. Al tener una
idea clara de cómo funciona el caso, más allá de la etiqueta que se otorgue, es fácil ver los puntos en los
que hay que incidir a través del tratamiento. En este caso, se ha podido comprobar que el tratamiento
basado en la unión de varias técnicas derivadas terapias cognitivo conductuales fue efectivo para el
En este caso convergía también la terapia farmacológica junto con la psicológica. Se pudo
observar que fue muy beneficial en la evolución del caso debido a que la cantidad de sintomatología
fisiológica hacía casi imposible el desarrollo de las primeras sesiones. Sin embargo, considero que, aunque
fue un buen apoyo durante un tiempo necesario, el cambio realmente se realizó y se asentó cuando A.
entendió la naturaleza de su estado, las variables que se relacionaban para que tuviera ciertos síntomas y
entendiera que podía trabajar sobre ello para cambiarlo. Con esto quiero destacar la importancia del
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tratamiento psicológico, aunque exista un tratamiento farmacológico. Mientras que los medicamentos
pueden suprimir ciertos síntomas durante un tiempo determinado, es un cambio en los patrones
sintomatología más común que se puede encontrar cuando se pregunta de manera general acerca de
problemáticas de salud mental. Es muy posible que este tipo de sintomatología, dentro de una
determinada gravedad y duración, aparezca en algún momento en la vida de cualquier persona. Es por
ello que también se han desarrollado diversas técnicas y tratamientos enfocados a ellas. En este caso
hemos podido ver cómo el enfoque cognitivo conductual ha ayudado a la paciente a modificar los
mecanismos desadaptativos que estaba poniendo en marcha. Con la evidencia expuesta al inicio de este
trabajo se ha podido comprobar que la terapia cognitivo conductual ha sido efectiva al usarse en casos
similares al de A. Esto no significa que sea el único enfoque útil que se deba utilizar en este tipo de casos,
se ha explicado también que hay otros enfoques considerados como eficaces en el tratamiento de la
depresión y la ansiedad. Lo importante en el tratamiento de este tipo de casos, en los que convergen
diversas cuestiones y que pueden arrastrar patrones cognitivos y conductuales desde hace muchos años,
es realizar un buen análisis del caso en el que se pueda observar específicamente qué es lo que está
fallando y sobre qué hay que aplicar las técnicas. Esto es importante para poder estructurar un
tratamiento mucho más eficaz y, también, poder aumentar la implicación del paciente en su propio
proceso. En este caso se ha podido observar también cómo la demanda más inmediata de la paciente era
resolver un conflicto con un compañero, para lo que se podrían necesitar habilidades sociales y nociones
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de asertividad. Sin embargo, el entender por qué tenía esa clase de problemas con sus subordinados en el
trabajo y por qué esas problemáticas se habían generalizado también a cómo se relacionaba en general
en su día a día o cómo enfrentaba los problemas que se le presentaban hizo que A. viera la importancia
de trabajar sobre los pensamientos y las creencias disfuncionales que presentaba (inicio del círculo vicioso
en el modelo de Fennell (1997)). El entender la función de sus conductas, por qué se habían originado y
por qué se mantenían en el presente hizo que la adherencia al tratamiento y a las tareas enviadas como
trabajo para casa fuera mucho mayor. Saber sobre qué se tenía que trabajar y ver los avances que se iban
consiguiendo fue muy importante en la evolución del caso. También fue interesante ver cómo en este
caso la paciente tenía un buen apoyo familiar y social (muy cercana con su familia, grupo de amigos que
se preocupaban por ella y por su estado de ánimo, compañeros de trabajo que la apreciaban), lo que
suele considerarse un factor de protección y de buen pronóstico en el tratamiento. Sin embargo, cierta
parte de ese malestar también provenía de ese mismo entorno social, el cuál servía para compararse.
Aquí se activaban creencias de cómo debería ser su situación personal a su edad (estar casada y con hijos
como el resto de sus amigos y su entorno más cercano) y la frustración al no haberlo conseguido tras la
ruptura repentina que vivió cuando ya tenía incluso fecha para casarse. Tras el trabajo en
reestructuración cognitiva, se pudo ver cómo el tener este entorno social pasó de causarle malestar a
funcionar, como sería previsible, como un factor de protección y de buena evolución terapéutica.
Como limitaciones en este caso se podría destacar la periodicidad de las sesiones. Inicialmente se
propusieron las sesiones semanales, pero se vio imposibilitado por la agenda de la paciente. Esto a priori,
en un caso de estas características en el que la sintomatología era tan elevada, podría parecer
53
contraproducente para el buen desarrollo de la alianza terapéutica. Sin embargo, gracias a los
autorregistros y a las tareas entre sesiones, se aprovechó ese tiempo de más para afianzar y poner en
marcha lo trabajado en sesión. Aunque esta característica sí que afectó a la duración total de la terapia, se
ha comprobado que se puede desarrollar un buen vínculo y adherencia a pesar de que la terapia se inicie
con sesiones más espaciadas temporalmente. También se puede encontrar como limitación el hecho de
autorregistros, observación y las entrevistas en sesión para poder dar el alta terapéutica y considerar que
los objetivos propuestos habían sido alcanzados. Habría sido interesante poder pasar de nuevo el BDI-II y
comprobar objetivamente que la puntuación para depresión disminuía. Así mismo, hubiera quedado por
planificar alguna sesión de seguimiento en la que poder comprobar si el objetivo de enfrentar situaciones
problemáticas de manera asertiva desarrollando habilidades sociales, el cuál la paciente refirió que sentía
que podría haber mejorado más, realmente se había mantenido en el tiempo o si, por el contrario, se
necesitaba un pequeño recordatorio de las técnicas aprendidas. Realmente, hubiera sido interesante
realizar un seguimiento y comprobar también los objetivos que consideraba que sí que había mejorado
totalmente para ver su evolución en el tiempo y si se podía mejorar algo antes de que derivara en otra
tratamiento expuesto y tras aproximadamente seis meses, la paciente volvió a acudir a sesión por
cuestiones distintas a las que aquí se han expuesto, pero se exploró y se llegó a la conclusión de que sería
necesario volver a trabajar sobre las habilidades sociales y la asertividad. Dada esta cuestión, habría que
valorar si quizá se ha creado cierta dependencia con la psicóloga y con la terapia en general. Esto sería
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problemático debido a que el objetivo de la terapia debería ser dotar a los pacientes de la mayor
independencia posible para que, ante situaciones complicadas, puedan utilizar las herramientas
aprendidas y superar los obstáculos sin la necesidad de la terapia. Como objetivo de futuro, sería
necesario explorar este punto para poder valorar si se necesitan aplicar otras estrategias distintas de
trabajo.
Como conclusiones del trabajo presentado se puede afirmar que, para este caso, un tratamiento
compuesto por técnicas de diversas terapias cognitivo conductuales fue efectivo para conseguir tanto los
objetivos específicos como el objetivo general, consiguiendo disminuir la sintomatología depresiva. Esto
lleva a concluir la importancia de utilizar tratamientos basados en enfoques validados y eficaces, ya que
es nuestro deber como profesionales. También destacar la importancia de que esos tratamientos
validados y eficaces estén orientados a las características propias del caso, adaptando siempre las
técnicas utilizadas a las conductas detectadas en el análisis funcional del caso. Considero que seguir
analizando casos de práctica clínica y realizando investigaciones acerca de sintomatologías tan comunes
como pueden ser la ansiosa y la depresiva es fundamental para conseguir ofrecer a los pacientes el
tratamiento que necesitan y merecen. A pesar de ser una condición común en los problemas de salud
mental, no todo el mundo que la sufre pide ayuda o simplemente recibe tratamiento farmacológico, sin
poder acceder a un tratamiento psicológico de calidad. Es por ello que, aunque común, es necesario que
los psicólogos como yo que nos iniciamos en la práctica clínica tras realizar el máster habilitante estemos
muy entrenados en el estudio de este tipo de casos y podamos ofrecer la mejor de las atenciones a
nuestros pacientes.
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9. Anexos
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63
Anexo B. Consentimiento Informado
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