HONORABLE ASAMBLEA.

Comisión de Derechos Humanos del Taller Legislativo 10 por México,

le fue turnada para su estudio y elaboración del dictamen
correspondiente, la iniciativa con proyecto de decreto por la cual se
adiciona el articulo 260 al Codigo Penal Federal.

Conforme a lo previsto en los artículos 85, numeral 2, inciso a), 861 89

y 94 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos
Mexicanos1 y los artículos 113, 117, 135, 178, 182, 188,190, 220 y
221 del Reglamento del Senado de la República, formulamos el
presente dictamen al tenor de la siguiente:

METODOLOGÍA

l. En el capítulo "ANTECEDENTES", se da constancia del trámite de

inicio del proceso legislativo y de la recepción del turno para la
elaboración del dictamen de iniciativa con proyecto de decreto por la
cual se adiciona el articulo 260 al Codigo Penal Federal.

II. En el capítulo "CONTENIDO DE LA INICIATIVA", se sintetiza la

propuesta de estudio.

III. En el capítulo "CONSIDERACIONES", la comisión dictaminadora

expresa las razones que sustentan el sentido del presente dictamen.
IV. En la sección relativa al "TEXTO NORMATIVO Y RÉGIMEN
TRANSITORIO", se plantea el Decreto por el que se reforman diversas
disposiciones del Còdigo Penal.

ANTECEDENTES

l. El 25 de noviembre de 2022, las y los integrantes Regina Martinez

Zepeda, Robredo Hernández Victoria, Aguilar Castillo Susana Esther,
Santiago Buendía Daniela, Aguilar Rojas Aida Alessandra, Arredondo
Caballero Fernanda Yamelith, Flamand Derive Nicole, Flores Bravo
Sara, Borges Sánchez Sofía, Ramírez Carrillo Ezequiel, Valle Ceballos
Bruno, presentaron a esta Comisión de Derechos Humanos la
iniciativa con proyecto de decreto por la cual se adiciona el articulo
260 al Codigo Penal Federal.

En México, la norma penal que describe la violación sexual

equiparada no requiere que se someta a la víctima con la fuerza física
o que se le neutralice con amenazas como sí lo requiere el tipo penal
básico, sino que reprocha el aprovechamiento que hace el sujeto
activo de ciertas circunstancias que impiden la producción voluntaria
de una decisión respecto a la participación del sujeto pasivo en la
cópula, sea porque le es inexigible jurídicamente oponerse a ésta, sea
porque la víctima no tiene la habilidad o capacidad para comprender lo
que está ocurriendo o no esta en condiciones de resistirlo. El
sometimiento a la cópula que, en esas circunstancias, no se puede
resistir o no se puede comprender –y en esa medida, hace innecesario
el uso de la violencia física o moral– es descartado por el injusto penal
equiparado como muestra de consentimiento como excluyente de
responsabilidad.

Para las y los mexicanos la implementación de esta ley fomentaría un

verdadero cambio, pues desde hace años se ha remarcado la
importancia de reestructurar la forma en la que educamos, legislamos
y convivimos. Debemos priorizar una sociedad armónica y empática
para romper patrones que lamentablemente hemos arrastrado y que
hoy en día, siguen vulnerando los derechos humanos de las personas
en una civilización que está en constante transformación y cambio. No
por nada en nuestra máxima legislación mexicana, se añadieron,
gracias a la reforma constitucional de 2011, los derechos humanos y
sus garantías.

La ley es como un espejo en el que se refleja la representación social

y cultural de las personas. Buscamos realizar una deconstrucción
completa en la sociedad, comenzando desde quien ejerce el mandato
en el país, hasta las personas que juzgan los delitos. Aspiramos velar
por el interés de todos, en donde no persistan distinciones que, como
hemos mencionado con anterioridad, vulneran los derechos humanos
de las personas y en este caso, la interpretación que se les otorga a
los delitos contra el libre desarrollo psicosexual de estas, en relación
con el consentimiento carecen de firmeza.

Las personas socialmente reproducen lo que conocen y

lamentablemente en su gran mayoría la información expuesta resulta
ser errónea o carente de veracidad. Al hablar de esta iniciativa, se
busca que el valor y significado del consentimiento no esté expuesto a
interpretación. Pues, así como existe una excluyente de
responsabilidad establecida de manera explícita para eliminar el delito
cometido, debe existir una definición que beneficie a toda víctima
conforme a su valor interpersonal, para tomar arbitrariamente las
decisiones sobre su desarrollo psicosexial de manera libre y no
viciada. Porque el consentimiento no lo define la vestimenta, la
relación sentimental, el género, la cultura o sobre todo la sociedad que
lo ha normalizado como una conducta generalizada y negociable.

OBJETO Y DESCRIPCIÓN DE LA INICIATIVA

A lo largo de la historia la violencia contra las mujeres y los actos que la denotan,
han pasado a ser identificados como una problemática real y sistemática que
vulnera el derecho de las mujeres a vivir sin violencia y obstaculiza la realización
de derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales, claves todos para
su pleno desarrollo en condiciones de igualdad con los hombres.1

En esta constante lucha, gran parte de los organismos internacionales y

nacionales han establecido y propugnado nuevos estándares y políticas públicas
para lograr proteger a las víctimas de violencia sexual y de genero. A su vez, han
trabajo en la elaboración de leyes y políticas públicas en el marco del derecho
interno para asegurar la prevención, atención, sanción, investigación y reparación
de las víctimas de violencia sexual. Como el caso del CEVI, quien ha insistido en
la importancia de generar una ley nacional armonizada con la Convención de
Belém do Pará, en la tipificación del tipo penal de trata de personas, en el
fortalecimiento de las acciones de Estado para sancionar el acoso y la violencia
sexual, así como en la necesidad de tomar acciones necesarias para erradicar la
violencia contra las mujeres.2

1 OEA/MESECVI. Segundo Informe de seguimiento a la implementación de las recomendaciones del Comité de Expertas
del MESECVI. Abril de 2015. Disponible en: http://www.oas.org/es/mesecvi/docs/MESECVI-SegundoInformeSeguimiento-
ES.pdf.

2 OEA/MESECVI. Recomendaciones del Comité de Expertas (Cevi) del Mecanismo de Seguimiento de la Implementación
de la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia Contra la Mujer, Convención De Belém
Do Pará (Mesecvi) a los Estados parte. Disponible en: https://www.oas.org/es/mesecvi/docs/Round2-FollowUp-
ShadowReport-Mexico-CATWLAC.pdf
Dentro de las problemáticas que día con día las mujeres se ven obligadas a
afrontar, se encuentra el abuso sexual. Pero muy a pesar de tener que sobrellevar
el abuso, se ven en la necesidad de afrontar otra lucha, la lucha moral para
demostrar si existió o no un consentimiento para el acto sexual. El consentimiento
sexual es un fenómeno que, lejos de discutirse, se da por sentado en el ámbito de
las ciencias sociales. Normalmente, en la literatura sobre violencia sexual o
sexualidad se reduce su complejidad a nociones de sentido común más o menos
compartidas, tenemos entendido que sucede o se puede decir que existe, cuando
dos o mas personas están de acuerdo en realizar una práctica sexual de un modo
determinado en un momento cualquiera. Por el contrario, está ausente, se vulnera,
cuando se fuerza una práctica sexual; la máxima expresión es la violación. El
término "consentimiento" forma parte del lenguaje cotidiano para reivindicar
posturas en tensión: las mujeres deciden cubrir su cuerpo o mostrarlo; eligen
quedarse con su pareja golpeadora o dejar la relación violenta; escogen con quién
tener relaciones sexuales, cuándo y cómo o mantenerse vírgenes hasta el
matrimonio.

El consentimiento funciona como una "fórmula mágica" para zanjar dilemas éticos,
limitando la discusión a un problema de elecciones individuales, ajeno a las
estructuras socioculturales dentro de las cuales se inscribe.3

Tomando en cuenta algunas definiciones oficiales respecto a la palabra

consentimiento, la Real Academia de la Lengua Española (RAE), “consentimiento”
remite a la manifestación de voluntad expresa o tácita a través de la cual una
persona se vincula jurídicamente. En los contratos legales, se refiere a la
conformidad de las partes respecto al contenido del convenio. La RAE también

3 MELGAR, Lucía (2012). "Prólogo". En Del consentimiento , editado por Geneviève Fraisse, 9-28. México: Universidad
Nacional Autónoma de México /El Colegio de México.
especifica que el consentimiento informado es el que presta un enfermo o, de
resultar imposible, sus allegados, antes de iniciarse una intervención médica o
quirúrgica, después de la información que debe transmitirle el médico de las
razones y los riesgos de dicho tratamiento.

De la definición anterior es posible deducir algunas ideas. Consentimiento y

voluntad son fenómenos vinculados pero diferentes, y existen, por lo menos, dos
formas de manifestar su aceptación: explícita e implícitamente.

La legislación civil en México establece que las personas al cumplir 18 años son
mayores de edad, adquiriendo la capacidad para el ejercicio de sus derechos, y
pueden disponer libremente de su persona y de sus bienes. Las personas
menores de edad tienen capacidad de goce, pero por falta de plenitud física y
psicológica la ley restringe su capacidad de ejercicio y crea normas especiales
para protegerlas, ejemplo de esto es la patria potestad. Los niños por falta de
madurez física, psicológica y social, se encuentran en una situación de
dependencia y vulnerabilidad que hace necesaria la protección y los cuidados
especiales a cargo del Estado y del derecho internacional.

Al hablar de sexualidad, debemos entender que no se reduce a las relaciones

coitales, pues la palabra sexualidad conlleva un contexto mucho más amplio.
Según la Organización Mundial de la Salud, se conceptualiza como una función
vital del ser humano desde su nacimiento hasta su muerte, pues esta incluye el
sexo, la identidad sexual y de género, la vinculación afectiva y el amor, erotismo,
placer, la reproducción, pensamientos, deseos, creencias, valores, conductas,
prácticas, y relaciones interpersonales.4

Respecto a los Derechos Reproductivos, se entenderán como aquellos que tiene

toda persona para ejercer su salud reproductiva mediante la toma de decisiones
de manera consciente, así como el acceso a la información y planificación familiar.
4 Organización Mundial de la Salud (2002). Defining sexual health Report of a technical consultation on sexual health 28-31
January. Ginebra: OMS.
De conformidad con el documento sobre Derechos Sexuales y Derechos
Reproductivos, elaborado por la ONU, se incluyen los siguientes:

1. Ejercer la sexualidad de manera independiente de la reproducción.

2. Estar libre de discriminación, presión o violencia en nuestras vidas sexuales y

en las decisiones sexuales.

3. Contar con acceso a educación sexual (y afectiva) desde temprana edad

dirigida al desarrollo de la persona y el ejercicio responsable de la sexualidad en
forma plena, libre e informada.

4. Tener acceso a servicios médicos de calidad, adecuada y digna para la salud

de las mujeres, con atención a la erradicación de la violencia obstétrica.

5. Decidir libremente respecto de la reproducción, es decir, de manera informada,

libre de presión, discriminación y violencia si se desea o no tener descendencia;
cuánta y el intervalo de tiempo entre los nacimientos; anticoncepción de
emergencia; educación sexual y reproductiva; interrupción del embarazo.

6. Contar con atención en temas de fertilidad (reproducción asistida).5

El 76% de los códigos penales de las entidades federativas del país, establecen
que la edad legal mínima para que se dé el consentimiento sexual es, entre los 12
y 14 años de edad, y es que precisamente es en la etapa de la adolescencia que
los jóvenes son más vulnerables a sufrir violencia y abusos sexuales, lo que
contribuye a incrementar los problemas de salud sexual. De mayor repercusión
tenemos que el 27% de los códigos del país, desde 1931, (año en que fue
promulgado el CPF), han mantenido inalterada la edad de 12 años pese a la
evolución que ha tenido en la sociedad, la cultura, el Estado, la democracia, y los

5 ONU, Derechos Sexuales y Derechos Reproductivos, Disponible en: https://hchr.org.mx/historias-destacadas/derechos-

sexuales-y-reproductivos-2/ Fecha de Consulta: 18 de noviembre de 2022.
derechos humanos de los niños. El CPF y otros seis códigos en el país, se han
reformado para elevar la edad a 15 años, y únicamente uno ha establecido la edad
de 16 años.

El análisis de los factores de salud sexual, condiciones sociales, y el derecho

humano a la salud sexual, indican que los adolescentes en México obtienen la
madurez física y psíquica para ejercer la libertad sexual sin daño para su salud, en
promedio a los 15 años de edad. La legislación penal de las entidades federativas
cumpliría con su función garantista al establecer esta edad en el delito de violación
equiparada, lo que tendría un fuerte impacto en la solución del problema de salud
sexual que aborda la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en
Adolescentes.

En América Latina los adolescentes en su vida social adquieren la gestión de su

propia sexualidad en un promedio aproximado de 15 a 19 años de edad y en
contraste con esta realidad, predominan los códigos penales que definen la edad
mínima para el consentimiento sexual a los 14 años (adolescencia temprana). 6

Técnicamente, el concepto de consentimiento no se utiliza en la ley mexicana para

definir la violación, aunque sí para otros delitos, como el abuso sexual. Según el
Código Penal Federal vigente: "Comete el delito de violación quien por medio de la
violencia física o moral realice cópula con persona de cualquier sexo" (2016: 83).
Sin embargo, los operadores de la justicia, en su práctica jurídica, incorporan una
noción no muy clara de “aquiescencia femenina” a través de "indicadores de
consentimiento" (¿qué ropa vestía la víctima?, ¿aceptó ir al departamento con el
agresor?, ¿tenía una relación sentimental con el atacante?, entre otros) para
evaluar la denuncia de la víctima y, por extensión, su culpabilidad o inocencia.

En Inglaterra, por ejemplo, el Acta de Ofensas Sexuales considera explícitamente

el consentimiento para penalizar la violación:
6 Shutt-Aine, J. y Maddaleno, M. (2003). Salud sexual y desarrollo de adolescentes y jóvenes en las Américas:
Implicaciones en programas y políticas. Washington, DC: Organización Panamericana de la Salud.
Una persona A comete esta ofensa si:

1) un hombre intencionalmente penetra la vagina, ano o boca de otra persona B

con su pene;

2) B no consiente la penetración, y

3) A no cree razonablemente que B consintiera

Varios estudios nacionales demuestran que hasta el 70 por ciento de las mujeres
ha experimentado violencia física y/o sexual por parte de un compañero
sentimental.7 Erradicar la violencia contra las mujeres implica obtener el
consentimiento en todas las situaciones, incluso en el ámbito del matrimonio y las
relaciones a largo plazo.8

Consecuencias de la falta de definición

La necesidad de desarrollar la reflexión que planteamos surgió luego de advertir

en algunas noticias periodísticas la deslegitimación práctico-discursiva de casos
de violación, sustentada en el argumento de supuestas "relaciones
consensuadas". Cuando los juristas y jueces, establecen la aceptación en el
marco de una denuncia por violación, la víctima se vuelve sospechosa de ser
"consintiente": activa sexualmente, participante voluntaria, y por ende, culpable.
En este contexto, la víctima se vuelve parte de 2 juicios, el juicio de violacion y el
juicio moral para determinar si dio su consentimiento o no. En este tenor de ideas,
es importante establecer que el sistema jurídico es diferente de acuerdo al
contexto en el que se vive y es que, el consentimiento no debe ser objeto de

7 OMS (Organización Mundial de la Salud), on behalf of the United Nations Inter-Agency Working Group on
Violence Against Women Estimation and Data (2021).

8 18 de noviembre de 2019 https://www.unwomen.org/es/news/stories/2019/11/feature-consent-no-

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interpretación. Por lo tanto, el argumento para juzgar el consentimiento o
aceptación no es nuevo. La diferencia entre un ultraje y una relación consensuada
es, teóricamente, el consentimiento. A pesar de que el Código Penal Federal
Mexicano no establece una definicion de consentimiento, ni tampoco, lo exige para
acreditar el delito de violación (primero es necesario comprobar el uso de la
violencia física y/o moral) este es una pieza fundamental en los discursos
jurídicos y sociales, así como en la subjetividad masculina y femenina. Las
dimensiones socioculturales y subjetivas del fenómeno rebasan la esfera del
derecho y se instalan en manifestaciones cotidianas del más variado tipo
(prácticas, ideas, canciones, refranes, entre otros), campos de investigación
sociológica y antropológica por excelencia. Su dimensión política y las
consecuencias de la naturalización, deshistorización e invisibilización son
preocupantes: el aparente carácter neutral, racional y privado abona a su
reproducción en la estructura de dominación masculina.9

Sostenemos que el consentimiento, entendido como conducta o acción individual

juega un papel central en la reproducción del sistema de géneros y, en este
sentido, actúa en detrimento de los derechos sexuales de las mujeres. A nivel
simbólico, social y subjetivo, consentir, se estructura a partir de un sistema de
oposición jerárquicamente organizado, fundamentado en el orden sexual: dar o
conseguir aprobación es un tema serio. Las consecuencias de aceptar -querer o
desear o bien, no tener otra opción que aceptar, no tener más opciones, entre
otras- o negarse -no poder, no tener la fuerza o no querer negarse- recaen sobre
nadie más que ellas.

9Pérez Hernández, Yolinliztli. (2016). Consentimiento sexual: un análisis con perspectiva de género. Revista
mexicana de sociología, 78(4), 741-767. Recuperado en 18 de noviembre de 2022, de
http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0188-25032016000400741&lng=es&tlng=es.
El enfoque jurídico ofrece pautas para reflexionar acerca del consentimiento
sexual. La exclusión temporal o total de ciertas personas de la capacidad de
autorizarse por sí mismas supone un dato importante para sospechar que no es
una capacidad inherente a la condición humana. En todo caso, se obtiene con la
mayoría de edad, se pierde con una enfermedad mental o se gana con derechos
civiles y políticos. Por otro lado, si pensamos que "lo dado" es un indicador de que
algo no es natural, podríamos cuestionarnos si todas las personas jurídicamente
capaces de consentir son igualmente libres, autónomas y racionales para hacerlo.
Es decir, ¿las condiciones de posibilidad objetivas (materiales) y subjetivas
(conocimiento y apropiación de los derechos) están generalizadas? En otras
palabras, ¿la igualdad formal es posible frente a la desigualdad de hecho? Si la
libertad sexual es un derecho protegido jurídicamente y el consentimiento es parte
de dicha libertad, parece claro plantear que éste forma parte de los derechos
sexuales, toda vez que involucra la integridad corporal, el control sobre el propio
cuerpo, la autodeterminación y el placer sexual. Sin embargo, en la actualidad el
respeto a los derechos sexuales y a la integridad corporal siguen siendo temas de
primera línea en las agendas nacionales, internacionales y feministas, sobre todo
las últimas en la lucha por la libertad sexual que hace falta.

La mirada jurídica aísla el acto de consentir de su dimensión simbólica y social. No

se trata solamente de consentir o no, sino fundamentalmente de la posibilidad de
hacerlo. El problema es que el consentimiento jurídico, que se fundamenta en la
libertad individual, se preocupa poco por la relación de fuerza entre los
10
contratantes. Este enfoque, sostenido discursivamente desde una visión de
racionalidad, asume stricto sensu que consentir es el producto de dos voluntades
libres, autónomas y racionales.

10 FRAISSE, Geneviève (2012). Del consentimiento. México: Universidad Nacional Autónoma de México /El Colegio de
México.
Panorama internacional

En varios países anglófonos el tema se ha convertido en un bastión de denuncia

social, tanto por sus implicaciones jurídicas como por su cercanía con la violencia
11
sexual y la sexualidad. Sin embargo, en América Latina las discusiones no han
incorporado de manera efectiva el concepto a las discusiones sobre violencia
sexual. De hecho, los debates al respecto son prácticamente inexistentes; el
vocablo "consentimiento" tiene un lugar más bien secundario y, usualmente,
tangencial. Se usa para definir, por oposición, la violación, (delito cometido cuando
se impone la cópula contra la voluntad de una persona a través del uso de la
fuerza física o moral). El consentimiento sexual como fenómeno en sí mismo -y
sus diversas manifestaciones- es un campo de investigación poco explorado. En
general, se ha abordado, principalmente, desde tres perspectivas: la jurídica, la
psicológica y la sociológica. Todas brindan datos y reflexiones imprescindibles
para la construcción del objeto de estudio; ofrecen aportes, pero tienen límites.
Dentro de los tres enfoques, una cantidad considerable de estudios son de corte
feminista o parten de una perspectiva de género.

En el artículo 61.H.A.2 de la Ley sobre Delitos (en inglés) de Nueva Gales del Sur
(Australia), promulgada en 1900, se dice:

2) Significado de consentimiento: Se entenderá que una persona ha “consentido”

en mantener una relación sexual si ha aceptado de forma libre y voluntaria
mantener dicha relación sexual.

En el Reino Unido, la cuestión del consentimiento se formula de la siguiente

manera:

“[…] una persona consciente si decide aceptar y tiene la libertad y capacidad para
tomar esa decisión”.

11 En países como Escocia o Inglaterra y Gales, diversos grupos feministas han logrado reformas de ley para sancionar la
vulneración del consentimiento en el delito de violación.
En el artículo 273.1.2 del Código Penal de Canadá (R.S.C., 1985, c. C-46)
modificado por 1992, c. 38, s. 1 (en inglés) se afirma que,

No existirá consentimiento cuando:

a) la aceptación se exprese mediante las palabras o los actos de una persona

distinta de la denunciante;

b) la persona denunciante sea incapaz de consentir en realizar la actividad;

c) la persona acusada induzca a la persona denunciante a realizar la actividad

prevaliéndose de una posición de confianza, poder o autoridad;

d) la persona denunciante exprese mediante palabras o actos que no acepta

realizar la actividad; o

e) la persona denunciante, después de haber consentido en realizar una actividad

sexual, exprese mediante palabras o actos que no acepta seguir realizando dicha
actividad [...]

En la ley se dice también que:

3) Nada de lo dispuesto en el subartículo 2 se interpretará como una limitación de

las circunstancias en las que se considera que no existe consentimiento (párrafo
273.1.3)12

ONU Mujeres
Palabras que acompañan al consentimiento. Este debe ser
I. Con convencimiento, nacido de un sentimiento de motivación;
II. Dado libremente, sin presiones, en estado inconsciente o en un estado
mental alterado bajo efectos de alcohol, drogas o similares;
III. Informado, consciente de los hechos que en el acto se presenten;

12 https://www.canlii.org/en/ca/laws/stat/rsc-1985-c-c-46/latest/rsc-1985-c-c-46.html
IV. Específico, el consentimiento de una situación específica del acto, no
implica el consentimiento general del mismo;
V. Reversible, el consentimiento puede variar o incluso retirarse aún cuando
el acto haya sido reiterativo en el pasado

CONSIDERACIONES

PRIMERA. La Comisión de Derechos Humanos es competente de

conformidad con lo establecido en los artículos 85, 861 89 y 94 de la
Ley Orgánica del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos
así como en los artículos 1131 1171 135, numeral, fracción I, 1361
137, 1501 175, 178, 182, 1851 186, 187, 188, 190 y 191 del
Reglamento del Senado de la República, para emitir dictamen
respecto de la Iniciativa a la que se hace referencia en el apartado de
ANTECEDENTES.

SEGUNDA. Esta comisión dictaminadora concuerda con lo

establecido por parte de los proponentes ya que es necesario adecuar
el cuerpo normativo en favor de nuestra sociedad y de las mujeres en
edad reproductiva. Teniendo en consideracion la situacion que se vive
en el pais dia con dia, es de suma importancia que todas las personas
se sientan con la seguridad de que sus decisiones y consideraciones
al momento de consentir o no una relacion sexual tienen validez ante
la sociedad y ante la ley.
 TERCERA: Trabajamos diariamente con codigos que hablen de
consentimiento pero jamas nos tomamos el tiempo de establecer en
que consiste y en que situaciones es valido o no, por lo cual el judicial
se ve orillado a tomar “juicios de valor” o juicios morales al momento
de dictaminar si hubo o no violacion, dudando y dejando en evidencia
la creibilidad de la victima, al igual que su integridad fisica y emocional.
El tener una definicion de consentimiento sexual en la legislacion
federal fomentara la libertad sexual y cuidara los intereses de todos y
todas los mexivanos.

CUARTA: Por tales razones, la comision de Derechos Humanos del

taller legislativo 10 x México, emite dictamen positivo de la iniciativa
con proyecto de decreto por la cual se adiciona el articulo 260 al
Codigo Penal Federal; al tenor de lo expuesto y para mayor
entendimiento se plantea el siguiente cuadro comparativo:

ANTERIOR PROPUESTA

Artículo 260. Comete el delito de abuso Artículo 260. Para efectos de este código, se
sexual quien ejecute en una persona, sin su entiende por consentimiento sexual:
consentimiento, o la obligue a ejecutar para sí
o en otra persona, actos sexuales sin el La libre manifestación o autonomía qué
propósito de llegar a la cópula. muestra la voluntad plena de una persona
para realizar cualquier actividad de índole
A quien cometa este delito, se le impondrá sexual, está debe darse de manera libre y sin
pena de seis a diez años de prisión y hasta algún tipo de presión, manipulación o
doscientos días multa. influencia por parte de otra persona, siempre
que concurran los siguientes requisitos:
Para efectos de este artículo se entiende por
actos sexuales los tocamientos o manoseos I. Con libertad de decidir si se quiere o no la
corporales obscenos, o los que representen realización de un acto de índole sexual con
actos explícitamente sexuales u obliguen a la una o más personas.
víctima a representarlos.
II. Con voluntad, sin ningún tipo de violencia
También se considera abuso sexual cuando física o verbal y sin incapacidad, producto de
se obligue a la víctima a observar un acto alteraciones por parte de sustancias tóxicas
sexual, o a exhibir su cuerpo sin su o psicoactivas
consentimiento.
III. Con la capacidad de ser reversible de
Si se hiciera uso de violencia, física o
relaciones efectivas
psicológica, la pena se aumentará en una
mitad más en su mínimo y máximo. IV. Debe ser informado, para ser libre de
vicios, con voluntaria decisión y con
acuerdo de todas las partes

Entiéndase por no consentido al acto

realizado con incumplimiento de alguno de
los supuestos contemplados en las
fracciones mencionadas con anterioridad.

Artículo 261. Comete el delito de abuso sexual

quien ejecute en una persona, sin su
consentimiento, o la obligue a ejecutar para sí o
en otra persona, actos sexuales sin el propósito
de llegar a la cópula.

A quien cometa este delito, se le impondrá pena

de seis a diez años de prisión y hasta
doscientos días multa.

Para efectos de este artículo se entiende por

actos sexuales los tocamientos o manoseos
corporales obscenos, o los que representen
actos explícitamente sexuales u obliguen a la
víctima a representarlos.

También se considera abuso sexual cuando se

obligue a la víctima a observar un acto sexual, o
a exhibir su cuerpo sin su consentimiento.
 Si se hiciera uso de violencia, física o
psicológica, la pena se aumentará en una mitad
más en su mínimo y máximo.

TEXTO NORMATIVO Y RÉGIMEN TRANSITORIO

Por lo anteriormente expuesto y fundado, la Comisión de Derechos

Humanos con fundamento en lo dispuesto por el artículo 72 de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; 85, 86, 89, 90,
94 y 103 de la Ley Orgánica del Congreso General de los Estados
Unidos Mexicanos; 113, 114, 117, 135, 136, 137, 150, 162, 163, 174,
178, 182, 183. 185, 186, 187, 188, 190 191, y 192, del Reglamento del
Senado de la República, acordamos aprobar la iniciativa, por lo que
sometemos a consideración del Pleno del Senado de la República el
siguiente:

DECRETO

ÚNICO: INICIATIVA CON PROYECTO DE DECRETO POR MEDIO

DE LA CUAL SE CRE EL ARTÍCULO 260 DEL CÓDIGO PENAL
FEDERAL, para quedar como sigue:

Artículo 260. Para efectos de este código, se entiende por

consentimiento sexual:
La libre manifestación o autonomía qué muestra la voluntad plena de
una persona para realizar cualquier actividad de índole sexual, está
debe darse de manera libre y sin algún tipo de presión, manipulación o
influencia por parte de otra persona, siempre que concurran los
siguientes requisitos:

I. Con libertad de decidir si se quiere o no la realización de un acto de

índole sexual con una o más personas.
II. Con voluntad, sin ningún tipo de violencia física o verbal y sin
incapacidad, producto de alteraciones por parte de sustancias tóxicas
o psicoactivas

III. Con la capacidad de ser reversible de relaciones efectivas

IV. Debe ser informado, para ser libre de vicios, con voluntaria
decisión y con acuerdo de todas las partes

Entiéndase por no consentido al acto realizado con incumplimiento de

alguno de los supuestos contemplados en las fracciones mencionadas
con anterioridad.

TRANSITORIOS

PRIMERO: El presente decreto entrará en vigor al día siguiente de su

publicación en el Diario Oficial de la Federación.

SEGUNDO: Dentro de los 90 días siguientes a la publicación del

presente Decreto, se deberá hacer la actualización y armonización de
las leyes estatales correspondientes.

TERCERO: Se recorre la numeración del código a partir del art.

Adicionado