Ensayos 20
Ensayos 20
Ensayos 20
No hay duda de que el tema del amor ha sido el más recurrente por todos
los escritores, de todas las épocas. El amor siempre es material
inspirador y nuevo para cualquier obra literaria. El concepto del amor ha
ido variando a lo largo de las diversas épocas en la historia de la
humanidad, pero, básicamente, en la idea de una fuerza que se la
entregamos al otro. Una fuerza que transforma, que nos impulsa a
sacrificios, a la paciencia. En fin, el amor es una energía que cada uno
transforma de una manera particular, pero que siempre lo lleva a
exteriorizarlo por y hacia alguien.
La falsa concepción del amor.
Partiendo de la base psicológica de que cada uno se forma su propio
concepto del amor, podemos afirmar que, entonces, cada persona ama de
una manera única, irrepetible. Sin embargo, la concepción que tengamos
del amor, a veces, no va acorde con un amor real y tangible.
Vivimos en una sociedad que todavía idealiza lo que es el amor
verdadero. La corriente que romantiza al amor, lo hace ver como "cursi" o
extremadamente dulzón. Canciones románticas, películas famosas, libros
y novelas de televisión, ayudaron a crear una visión idealizada del amor de
pareja. En la ficción, esto no implica ningún problema. Lo que ocurre es
que, si pretendemos encontrar un amor así en la vida real, podemos
toparnos con algo totalmente distinto.
Una concepción del amor con los pies en la tierra mezcla lo bueno del
amor romántico y lo hacer ver y sentir real, en equilibrio, respetando la
propia individualidad.
Una vieja frase dice que, nadie es indispensable para nadie en esta vida,
aun nuestros seres más queridos. Y lo mismo, aunque no queramos
aceptarlo en el fondo, se aplica a las relaciones de pareja.
Frases como "Tú eres todo para mi" "Mi media naranja" o alguna otra
similar oración, han calado hondo en nuestra sociedad desde hace
generaciones e ilustran esa visión no real del amor.
En verdad, nadie es media fruta de alguien. Hemos nacido completos a la
existencia. Nada nos falta.
El amor real de pareja, se trata de estar juntos, de mirar con un mismo,
pero siempre siendo dos. La individualidad no tiene porqué perderse.
Ensayo sobre la felicidad.
Cada persona determina lo que significa para ella la palabra "felicidad".
Algunas personas pueden encontrar su felicidad en estar en una relación
romántica. Otros pueden encontrar su felicidad en la riqueza y la fama.
Mientras que otros son felices simplemente porque se sienten sanos y
vivos. Creo que le damos a la felicidad valores diferentes en diferentes
etapas de nuestras vidas. Después de todo, incluso sucede que la misma
persona hoy en día para ser feliz lucha por el amor y la familia, mientras
que mañana lo único que le preocupa es dinero y carrera, y después de un
tiempo, todo lo que necesita está intacto. salud. Todos determinan el
significado de la felicidad de manera diferente, y esta es la única receta
universal para ser felices.
Para una gran parte de las personas, la felicidad es un activo material, una
vida segura. Para las personas espiritualmente ricas, una posibilidad de
crecimiento espiritual es de gran valor. A pesar del significado que esa
persona incluye, la felicidad no ocurre por accidente: siempre tiene que ser
creada, debe ser descubierta, creada y producida, construida desde cero.
Y esto solo se puede lograr al decidir ser feliz. La gente debe tener un
principio para ser feliz sin importar lo difícil que les esperan los
acontecimientos futuros. Por supuesto, la vida, con todas esas incontables
catástrofes y sufrimiento, siempre se interpone en el camino de las
personas que disfrutan de sus propias vidas. Esto, de hecho, puede
distorsionar la felicidad. Quizás la cualidad más importante que todo el
mundo necesita para desarrollarse en su camino hacia la felicidad es tener
gratitud.
Esta es la cualidad de estar agradecido, de estar dispuesto a mostrar
aprecio por cualquier cosa y de dar la bondad de uno a cambio. Este es
otro enfoque que usan las personas de todas las culturas para cultivar la
felicidad. Este método sugiere centrar la energía mental de uno en
elementos negativos, como problemas de salud y financieros, estas
personas prefieren centrar su energía en estar agradecidos por
despertarse por la mañana, por estar cerca de las personas que aman y
que los aman, siendo capaz de respirar y pensar, de estar vivo. Están
agradecidos por cualquier cosa y cualquier persona. El secreto de una vida
placentera es hacer de la gratitud un hábito diario o incluso un ritual. La
gente parece tener tanto miedo de sentirse sola que no reconocen una
toxicidad en sus conexiones sociales. Las personas egoístas, indignas de
confianza y adversas en general infringen más daño que bien a sus
amigos simplemente por estar cerca de ellos. Sí, la vida es bastante
solitaria, y las personas mueren solas poco después de ser llevadas a este
mundo solas. Pero esto es algo inevitable, que nadie puede posponer
todavía. Por lo tanto, no tiene sentido enfocarse en la negatividad. Sería
mejor concentrar tu energía en construir relaciones felices y saludables
con las personas, que valga la pena ser parte de tu vida, porque saben lo
importante que es la gente. La gente necesita la compañía de otros para
disipar su soledad, ya que lo más probable es que cause que uno se
entretenga con cosas negativas, como problemas y miserias. Por lo tanto,
las personas deben ser escépticas e inseguras al permitir que personas
extrañas entren en sus vidas y acercarse a las personas.
Lamentablemente, no todas las personas tienen buenas intenciones.
Muchos explotan la bondad de otras personas, y lamentablemente, esto le
sucede a los mejores que hay.
Lo más importante de lo que depende la felicidad es el trabajo. No importa
cuántas horas a la semana dure el trabajo, tampoco importa qué tan alta
sea la ganancia que produzca. Lo único que importa con respecto al
trabajo de uno es qué tan satisfactorio se siente haciéndolo. Si él está
trabajando en un trabajo promedio, que ni siquiera le gusta, entonces
debería abandonarlo inmediatamente. Tal posición lo convierte en una
persona peor, una persona que no quiere ser. Si esta situación hace que
uno resienta su vida, debe buscar otro trabajo. No lo hace feliz, no lo
satisface; en cambio, lo desvincula de su propia felicidad. Por lo tanto,
sería mucho mejor para una persona hacer de su hobby, lo que más le
gusta hacer para convertirse en su trabajo real. Esto significa que, para ser
feliz, uno debe tomar decisiones cruciales con respecto al trabajo o la
carrera que elija.
Finalmente, la felicidad no es algo que se obtiene por accidente. En
cambio, esto es el resultado de un trabajo continuo y desafiante. Pero se
puede lograr, y no solo la felicidad de corta duración, sino también la
felicidad verdadera y duradera. De nuevo, la felicidad no es algo que solo
le llega a una persona. De hecho, la mayoría de la gente tiene que trabajar
enérgicamente durante un período prolongado de tiempo para ser feliz.
Pero esto es algo que cada individuo puede crear por sí mismo. La
felicidad puede caer en las manos de cualquiera, principalmente porque
todos merecen ser felices.
Ensayo literario de Miguel de Unamuno.
Y no basta no mentir, como el octavo mandamiento de la ley de Dios nos ordena, sino
que es preciso, además, decir la verdad, lo cual no es del todo lo mismo. Pues el
progreso de la vida espiritual consiste en pasar de los preceptos negativos a los
positivos. El que no mata, ni fornica, ni hurta, ni miente, posee una honradez
puramente negativa y no por ello va camino de santo. No basta no matar, es preciso
acrecentar y mejorar las vidas ajenas; no basta no fornicar, sino que hay que irradiar
pureza de sentimiento; ni basta no hurtar, debiéndose acrecentar y mejorar el bienestar
y la fortuna pública y las de los demás; ni tampoco basta no mentir, sino decir la
verdad.
Hay ahora otra cosa que observar—y con esto a la vez contesto a maliciosas
insinuaciones de algún otro espontáneo y para mí desconocido corresponsal de esos
pagos—, y es que como hay muchas, muchísimas más verdades por decir que tiempo
y ocasiones para decirlas, no podemos entregarnos a decir aquellas que tales o cuales
sujetos quisieran dijésemos, sino aquellas otras que nosotros juzgamos de más
momento o de mejor ocasión. Y es que siempre que alguien nos arguye diciéndonos
por qué no proclamamos tales o cuales verdades, podemos contestarle que si, así
como él quiere hiciéramos, no podríamos proclamar tales otras que proclamamos. Y no
pocas veces ocurre también que lo que ellos tienen por verdad y suponen que nosotros
por tal la tenemos también, no es así.
Y he de decir aquí, por vía de paréntesis, a ese malicioso corresponsal, que si bien no
estimo poeta al escritor a quien él quiere que fustigue nombrándole, tampoco tengo por
tal al otro que él admira y supone, equivocándose, que yo debo admirar. Porque si el
uno no hace sino revestir con una forma abigarrada y un traje lleno de perendengues y
flecos y alamares un maniquí sin vida, el otro dice, sí, algunas veces cosas
sustanciosas y de brío —entre muchas patochadas— pero cosas poco o nada
poéticas, y, sobre todo, las dice de un modo deplorable, en parte por el empeño de
sujetarlas a rima, que se le resiste. Y de esto le hablaré más por extenso en una
correspondencia que titularé: Ni lo uno ni lo otro.
Y volviendo a mi tema presente, como creo haber dicho lo bastante sobre lo de buscar
la verdad en la vida, paso a lo otro, de buscar la vida en la verdad.
El derecho a soñar
Vaya uno a saber cómo será el mundo más allá del año 2000. Tenemos una única
certeza: si todavía estamos ahí, para entonces ya seremos gente del siglo pasado, y,
peor todavía, seremos gente del pasado milenio. Sin embargo, aunque no podemos
adivinar el mundo que será, bien podemos imaginar el que queremos que sea. El
derecho de soñar no figura entre los treinta derechos humanos que las Naciones
Unidas proclamaron a fines de 1948. Pero si no fuera por él, y por las aguas que da de
beber, los demás derechos se morirían de sed.
Deliremos, pues, por un ratito. El mundo, que está patas arriba, se pondrá sobre sus
pies:
– El aire estará limpio de los venenos de las máquinas y no tendrá más contaminación
que la que emana de los miedos humanos y de las humanas pasiones.
– El televisor dejará de ser el miembro más importante de la familia y será tratado como
la plancha o el lavarropas.
– En ningún país irán presos los muchachos que se nieguen a hacer el servicio militar,
sino los que quieran hacerlo.
ENSAYO- EDUCACIÓN EN FINLANDIA
6 años
Con esta nueva ley el estudiante debe estar 14 años en la escuela, tiempo a nuestro
juicio muy prolongado y va en perjuicio en aquellos estudiantes que tienen mayores
aptitudes y estos no pueden salir en el menor tiempo posible y va en desmedro de la
gente joven que quiere adquirir nuevas experiencias a temprana edad para
posteriormente emprender nuevos retos. Con el sistema anualizado en las escuelas a
nuestro juicio y las experiencias vividas, no es un sistema óptimo para el aprendizaje
principalmente por las siguientes razones:
· El calendario académico es evaluado por gestión haciendo que el proceso de
aprendizaje para el estudiante sea lento.