HELIA
HELIA
HELIA
Profesor:
Rodrigo Chiari
Materia:
Historia del Derecho
Tarea:
Derecho Penal en Atenas
Estudiantes:
Fecha de Entrega:
23 de noviembre de 2024
Índice
Índice..................................................................................................................................................3
Introducción.......................................................................................................................................4
ORIGEN..............................................................................................................................................4
INSTITUCIÓN Y COMPOSICIÓN DE LA HELIEA.....................................................................................5
NOMBRAMIENTO DEL JURADO..........................................................................................................6
JURISDICCIÓN.....................................................................................................................................7
PROCEDIMIENTO................................................................................................................................8
Conclusión........................................................................................................................................10
Bibliografía.......................................................................................................................................11
Introducción
ORIGEN
Para los procesos públicos, eran 501, 1001 o 1501 jueces. La labor de
juzgar era difícil, ya que no había un código de procedimiento, ni código
penal, ofreciendo así una gran libertad de interpretación de las leyes
(por otra parte, de cantidad reducida).
No está claro si la Heliea fue instituida por Clístenes o por Solón, pero
parece que este último inició una función de la Asamblea para
representar a un tribunal de recursos. El mismo Aristóteles afirma que
los tribunales son un elemento democrático en la constitución de Solón.
Según Aristóteles, «Pericles fue el primero que dio una retribución a los
tribunales para hacer frente a la popularidad de Cimón por su riqueza».
Los 6000 procedían de las diez tribus (cada tribu ofrecía 600 miembros)
y eran divididos en cámaras de 600 jurados, 500 o 501 eran miembros
regulares y el resto constituía un jurado alternativo. En caso
excepcional, el tribunal podía constituirse en sesiones plenarias. A
veces las cámaras estaban compuestas de 201 a 401 miembros o de
1001 a 1501 miembros. Después de la elección, los heliastas tenían que
prestar juramento una vez al año.
Después del acto de juramento, cada juez recibía una tablilla de madera
de boj con su propio nombre, el de su padre y el de su demo inscritos en
esta, así como una letra del alfabeto, hasta la kappa y los jurados de
cada tribu eran divididos en secciones, aproximadamente en una
cantidad igual a cada letra.
La expresión por tribus (katà phylás) no quiere decir que cada tribunal
era asignado a una tribu diferente, sino que representantes de todas las
tribus estaban en cada tribunal. En 390 a. C., la asignación diaria no era
por tribus, sino por «divisiones heliásticas» o «secciones».
Las diez secciones (mérē), distinguidas con las letras del alfabeto
griego desde la Α hasta la Κ, no coincidían con las diez tribus, sino que
cada sección tenía aproximadamente un número igual de jueces de
todas las tribus. Las tablillas que se conservan prueban que miembros
de diferentes tribus pertenecían a la misma sección.
La primera serie de cajas era de cien, diez por cada tribu, porque
los jueces de cada tribu estaban divididos en diez secciones en las
que estaban distribuidos todos ellos.
JURISDICCIÓN
10. La votación era secreta (cada jurado debía tapar con los
dedos el voto para que nadie viera en cuál ánfora lo arrojaba) y se
verificaba introduciendo en la urna de bronce una ficha perforada
si el voto era culpable, o una maciza, si el voto era inocente,
descartando la ficha sobrante en la urna de madera. Durante los
casos civiles, el proceso de votación era diferente, ya que las
ánforas eran tantas como las partes litigantes.
Conclusión
Bibliografía