El Principio de La Sabiduría 05-06-2023
El Principio de La Sabiduría 05-06-2023
El Principio de La Sabiduría 05-06-2023
1 Reyes 2
Mandato de David a Salomón
Proverbios 1
7
El principio de la sabiduría es el temor de Jehová;
Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.
8
Oye, hijo mío, la instrucción de tu padre,
Y no desprecies la dirección de tu madre;
9
Porque adorno de gracia serán a tu cabeza,
Y collares a tu cuello.
10
Hijo mío, si los pecadores te quisieren engañar,
No consientas.
El principio de la sabiduría
Bosquejos Bíblicos
Prédica de Hoy: El principio de la sabiduría
Bosquejos Bíblicos Lectura Bíblica: Proverbios 4:1-27
INTRODUCCIÓN
Cuentan que tiempo atrás acusaron injustamente a una persona de
asesinato. El juez encargado de dictar sentencia estaba enemistado
con el acusado, pero para dar ante el pueblo una imagen de
imparcialidad dijo al pueblo que iba a dar una oportunidad al acusado
para que fuera él quien decidiera su suerte, eligiendo entre dos
papeles en los que iba a escribir en uno inocente y en el otro culpable.
Los doblo y le dio a escoger uno. El acusado eligió uno, se metió el
papel en la boca y se lo trago. La única forma de saber cual había sido
la elección era abrir el otro papel. Y vieron que había escrita la palabra
culpable.
Introducción
En estos días particularmente tenemos la necesidad de actuar con
total sabiduría. Los tiempos son difíciles y debemos actuar como es
debido para caminar con seguridad en este mundo de maldad. Pero
¿dónde está la sabiduría? la sabiduría no es algo que se pueda
comprar en un supermercado, es importante saber dónde encontrarla
y cómo obtenerla.
Es normal ver personas que actúan por sus impulsos sin siquiera
ponerse a pensar en la consecuencias de sus actos. Vemos también a
personas que actúan reaccionando a las masas sin tener un
pensamiento propio. Dios no quiere que seamos llevados por todo
viento de doctrina, nos pide Él mismo que seamos sabios y
prudentes.
Encontrando a cada vez más personas que actúan en su propia
opinión, no solo eso si no que hacen eco de su falta de inteligencia
cuando creen que la tienen. Es cada vez más difícil encontrar razón y
justicia en medio del pecado de este tiempo. Pero hay una esperanza
para este mundo y para este tiempo, la esperanza siempre ha sido y
siempre será Dios.
Para Concluir
1. Conducirse prudentemente:
1Sa 18:14 Y David se conducía prudentemente en todos sus
asuntos, y Jehová estaba con él.
2. Obedecer a Dios:
Sal 119:98 Me has hecho más sabio que mis enemigos con tus
mandamientos, Porque siempre están conmigo.
3. Ser entendido:
Sal 119:99 Más que todos mis enseñadores he
entendido, Porque tus testimonios son mi meditación.
4. Guardar los mandamientos de Dios:
Sal 119:100 Más que los viejos he entendido, Porque he
guardado tus mandamientos; Luk 11:28 Y él dijo: Antes
bienaventurados los que oyen la palabra de Dios, y la guardan.
8 Aborrecer el mal:
Psa 119:104 De tus mandamientos he adquirido
inteligencia; Por tanto, he aborrecido todo camino de mentira.
El principio de la sabiduría |
Proverbios
| Sabiduría que no pasa de moda
Si queremos ser sabias, ¿dónde empezamos? ¿Cuál es el
primer paso?
INTRODUCCIÓN
¿Qué es sabiduría?
La Biblia establece distinción entre dos clases:
Buscarla. Nadie nace con sabiduría, por lo que tenemos dos opciones:
buscarla o hacer frente a las consecuencias. El mundo ofrece muchas
alternativas atractivas: seguridad, riquezas, amigos, salud, popularidad,
prominencias, prestigio o belleza; pero Proverbios 8.11 dice que todo lo
deseable no puede compararse con la sabiduría. Es un don que Dios concede a
los que la buscan con diligencia como a un tesoro (Pr 2.4-7).
Meditar en la Palabra de Dios. La Biblia es la mente de Dios, escrita en
papel para nosotros. Revela sus designios, planes y propósitos. Al leerla y
entenderla, los pensamientos del Padre llegan a ser parte de nuestra
experiencia humana y afectan nuestra conducta. Por eso debemos iniciar cada
día delante del Señor rogándole que dirija todas nuestras actividades conforme
a su Palabra.
Obedecer los principios bíblicos. No basta con tener conocimientos bíblicos
y entendimiento de ellos. La sabiduría de Dios está reservada para quienes
tienen en cuenta sus instrucciones, sometiéndose y aplicando sus verdades en
todos los aspectos de su vida cotidiana (Pr 8.33, 34). Si necesitamos la
dirección divina, está a nuestro alcance en su Palabra y si creemos lo que nos
dice y obedecemos sus preceptos, cosecharemos las bendiciones de la
sabiduría que acompaña a la obediencia.
Pedirla en oración. El libro de Proverbios no enfatiza específicamente orar
para obtener la sabiduría divina, pero Santiago nos dice que la pidamos a Dios
si tenemos falta de ella (Stg 1.5, 6). Sin embargo, no basta con pedirla;
debemos pedir con fe, obedecer lo que dice el Señor y observar los resultados
de nuestras acciones. La obediencia siempre nos beneficia; pero si hacemos
caso omiso de Dios y nos dejamos llevar por nuestros caprichos, surgirán
consecuencias negativas. Para evitar los desastres debemos iniciar cada día en
oración, rogando al Señor que nos indique cómo debemos comportarnos ante
cualquier situación que atravesemos.
Observar cómo actúa Dios en el mundo. El libro de Proverbios nos dice que
la sabiduría también proviene de observar los resultados de distintos estilos de
vida. Por ejemplo, todo hombre sabio es cauteloso y se aleja del mal, pero los
necios son insolentes y confiados en sí mismos (Pr 14.16). Notemos también
que las hormigas nos enseñan la importancia de laborar diligentemente para
subsistir, porque la pereza puede llevarnos a la pobreza (Pr 6.6-11).
Hacer caso del consejo que agrade a Dios. A veces todos necesitamos
orientación espiritual, pero no todo consejo proviene de Dios. Algún consejero
puede confundirnos en lugar de ayudarnos a seguir las indicaciones que
agraden al Señor. Por consiguiente, siempre que estemos en busca de la ayuda
adecuada debemos evaluar el estilo de vida de la persona y determinar el
origen de su consejo, preguntándonos: ¿Este consejo se basa en la Palabra de
Dios o en el conocimiento académico o en opiniones personales? Una vez que
estemos convencidos que las instrucciones proceden de Dios, debemos estar
dispuestos a seguirlas y aceptar la reprensión, si es necesario (Pr 15.31, 32).
Relacionarse con los sabios. No menospreciemos la influencia de nuestros
amigos, pues ellos pueden ayudarnos a crecer en sabiduría o dar lugar a que
suframos algún daño (Pr 13.20). Por eso debemos evaluar nuestras amistades
con detenimiento para comprobar si nos edifican espiritualmente o nos desvían
de los caminos de rectitud. También debemos examinarnos a nosotros mismos
y determinar si estamos dispuestos a declararles la verdad basándonos en lo
que dice la Biblia o si nuestra meta es decirles únicamente lo que deseen
escuchar. Aconsejarles solo para lograr que se sientan mejor o que aprueben lo
que hagamos, sería causarles un daño.
REFLEXIÓN
La sabiduría es una opción que se inicia con la decisión de creer en Cristo como
nuestro Salvador y que va en aumento a medida que sigamos las enseñanzas
de la Palabra de Dios con la ayuda del Espíritu Santo. Si deseamos ser
verdaderamente sabios, necesitamos tener pasión por ser dirigidos por el
Señor, ya que existen muchas ideas, personas y situaciones que pueden
hacernos ceder a la tentación de hacer caso omiso de los principios bíblicos.
El mundo nos dice que el tiempo es corto y nos induce a disfrutar de los
placeres de la vida; pero en realidad, el hecho de comprender que nuestro
paso por esta tierra es limitado debe motivarnos a corregir tanto nuestro
comportamiento como nuestra actitud pecaminosa y comprometernos a vivir
sabiamente de acuerdo con las normas divinas. Nuestro Padre celestial
siempre capacita, defiende y ayuda a quienes confían en Él y desean
someterse a sus preceptos.