resumen
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resumen
El objetivo central del análisis financiero es proveer a los tomadores de decisiones de una
base sólida para evaluar la rentabilidad, sostenibilidad y riesgos asociados con un proyecto.
Este análisis va más allá de los cálculos financieros al considerar impactos en el entorno,
sostenibilidad y alineación con los objetivos estratégicos de las organizaciones.
El análisis financiero de proyectos incluye varias fases, cada una de las cuales contribuye a
desarrollar un entendimiento integral del proyecto.
El flujo de caja es una herramienta clave que recoge los ingresos y egresos proyectados
durante el horizonte del proyecto. Este análisis incluye:
- Inversión inicial: Los costos requeridos para poner en marcha el proyecto, como
activos fijos, activos diferidos y capital de trabajo.
- Ingresos operativos: Las ventas proyectadas del bien o servicio ofrecido.
- Egresos operativos: Costos asociados con la operación, como materiales, mano de
obra y mantenimiento.
- Valor de rescate: El beneficio económico al término del proyecto, como la venta de
activos residuales o la recuperación de capital de trabajo.
MÉTODOS DE EVALUACIÓN FINANCIERA
Tasa de descuento
Es una medida financiera que se aplica para determinar el valor actual de un pago futuro,
además de tener estrecha relación con la tasa de interés ya que se calcula siendo la inversa
de la TI. En otras palabras, se trata de lo siguiente:
- Tasa de interés: sirve para aumentar el valor o añadir intereses en el dinero actual. Es
decir, con el dinero de hoy se calcula cuánto vamos a pagar en el futuro.
- Tasa de descuento: Se considera una cantidad de dinero futura y lo trasladamos al
presente.
Normalmente la tasa de descuento suele ser positiva, ya que el dinero futuro vale mucho
más que el actual. Siendo esto de gran utilidad para tomar decisiones al querer invertir
nuestro dinero; realizando los cálculos correctos y aplicando de manera adecuada las
fórmulas podemos determinar si el valor del dinero que vamos a recibir en “x” años, tendrá
mayor valor que hoy en día.
Periodo de recuperación
Es el tiempo que debe transcurrir para lograr recuperar la inversión que realizamos al inicio de
un proyecto. Claramente el ideal es que dicho periodo de tiempo sea el mínimo posible, ya
que nos brindará la confianza de tener nuevamente nuestro capital invertido.
A pesar de que es una técnica utilizada con gran frecuencia en las empresas, no resulta ser la
más efectiva ya que cuenta con algunas áreas de oportunidad:
o Esta técnica no toma en cuenta el valor del dinero en el tiempo, dejando a un lado los
conceptos revisados anteriormente (tasa de interés y de descuento); lo cual
representa un número sobrio sin tener presente la volatilidad del dinero a lo largo de
los años.
o Así mismo, tampoco considera lo que sucede después de aplicar el método de
periodo de recuperación. Siendo más precisos, no toma en cuenta si el año siguiente
después de recuperar la inversión será igual, menor o mayor el rendimiento
económico; además de que no se tiene una proyección a largo plazo de ingresos.
o Por último, esta técnica no da certeza en cuanto al aumento de riqueza de los socios
inversionistas, simplemente brinda un panorama de cuánto tiempo tarda en regresar
el capital.
A diferencia de las dos técnicas revisadas con anterioridad, el VAN presenta información más
completa en la cual nos brinda con mayor certeza si el proyecto de inversión tendrá frutos
para los participantes en el negocio. Además, brinda números concretos en cuanto a los
ingresos y egresos comparando bajo la misma línea de tiempo, lo cual permite realizar una
comparación justa y con mayor exactitud.
Basta con tomar en cuenta algunos datos relevantes como la inversión inicial, los ingresos y
una tasa de descuento entre el 5 y 10% (que es lo recomendable). Con ello se transforman los
ingresos recaudados posterior a la inversión inicial, trasladamos el valor futuro al valor
presente en los años que estemos calculando nuestros ingresos y finalmente sumamos los
resultados; dando como primer número el valor actual total. Mismo que vamos a restar de la
inversión inicial, arrojando así el Valor Actual Neto (VAN).
Como cada método mencionado en este resumen, cuenta con interpretaciones las cuales
nos ayudarán a tomar decisiones:
Se trata básicamente de la tasa de interés que hace al VAN = 0; en otras palabras, la tasa de
interés que iguala el valor presente de los flujos descontados con la inversión y que nos
ayuda a comparar alternativas de inyección de capital.
Dicho método deja fuera la tasa de descuento en su aplicación directa, ya que para analizar
la rentabilidad del negocio se toman en cuenta los datos de VAN, inversión inicial,
pronósticos de ingresos y una serie de ecuaciones que nos ayudarán a despejar 1+TIR,
resultando un porcentaje final. Siguiendo adelante con la interpretación del resultado, se
logra mencionar lo siguiente:
- Mientras más grande sea el resultado de TIR (%), será mucho más rentable el negocio.
- Resulta con mayor impacto cuando tratamos de comparar dos posibles inversiones
de negocio y decidir cuál será el proyecto que obtenga mayores ganancias.
- Por último, la interpretación con mayor relevancia es que la TIR es la máxima tasa de
interés a la que un inversionista estaría dispuesto a pedir prestado a un banco (por
ejemplo) para financiar la totalidad del proyecto; pagando así los flujos netos de
efectivo, la totalidad del capital y de sus intereses sin tener pérdidas registradas.
El CAUE toma en cuenta los ingresos y desembolsos convertidos en una cantidad anual que
se estará replicando cada periodo. Dicha técnica resulta útil en los casos de negocio donde el
TIR y el VAN no son del todo precisos. Existen algunas fórmulas que nos brindarán soporte
para lograr obtener los datos que requerimos para tomar decisiones:
Como último paso, no podemos dejar a un lado la interpretación de los resultados, donde
vamos a elegir el CAUE con menor monto; ya que representa que los costos anuales son
menores. Resulta con mayor efectividad cuando tratamos de realizar una comparación de
negocios o inclusive algo más particular como los costos de inversión en maquinaria.
ANÁLISIS DE SENSIBILIDAD
Esta etapa evalúa cómo las variaciones en variables clave, como costos, ingresos o tasas de
interés, afectan la viabilidad del proyecto. El análisis de sensibilidad es esencial para
identificar los puntos críticos y preparar estrategias para mitigar los riesgos asociados.
ANÁLISIS DE RIESGOS
El análisis financiero también incluye una evaluación exhaustiva de los riesgos. Esto implica
identificar factores internos y externos que podrían impactar los resultados proyectados,
como fluctuaciones económicas, cambios regulatorios, problemas técnicos o variaciones en
los costos de insumos. Este análisis permite desarrollar planes de contingencia y estrategias
de mitigación para abordar los posibles obstáculos.
CONCLUSIÓN
A lo largo del resumen pudimos observar la diversidad de técnicas y métodos disponibles que
respaldan el proceso de evaluación y análisis financiero de los proyectos. La elección de la
profundidad en el análisis y la cantidad de información requerida dependerá de las
preferencias y necesidades específicas de cada inversionista, ya que el objetivo principal es
contar con bases sólidas que permitan tomar decisiones informadas.
Otro aspecto relevante es el análisis de los ingresos, los cuales dependen de factores como
la demanda del producto o servicio, la asignación de precios, las condiciones de venta y la
comercialización de posibles residuos. Asimismo, los costos desempeñan un papel crucial
en el análisis financiero, ya que engloban el precio de los materiales, los costos de mano de
obra, los gastos administrativos y de ventas, además de los impuestos asociados a la
obtención del producto final.
REFERENCIAS