Onicofagia
Onicofagia
Onicofagia
Los especialistas aseguran que, por razones estticas, las chicas con onicofagia son las primeras en pedir ayuda. Entre los 13 y los 15 aos las jvenes empiezan a interesarse por cmo solucionar este problema, ya que estos comportamientos empiezan con una frecuencia baja y, luego, el ritmo de repeticin va aumentando. "Conviene realizar la consulta ni bien se detecte el problema, pero, adems, tener en cuenta que se trata de un trastorno de angustia y ansiedad", advierte la especialista en nios y adolescentes. Segn Cruppi, es importante estar informados sobre los contenidos emocionales de este hbito nocivo, informar a los nios sobre los daos fsicos que puede traer esta conducta y evitar los castigos ya que se trata de una enfermedad emocional. No se aconseja, asimismo, cubrir los dedos con guantes o ponerle alguna sustancia desagradable y se recomienda consultar al dermatlogo y al odontopediatra, contener a los nios y ayudarlos con las medidas de proteccin para no lastimarse los dedos. Es importante recordar que la onicofagia tiene un significado emocional propio para cada nio. Hay que ayudar a los nios a pensar y discriminar de acuerdo con su edad sobre qu puede estar afectndolos emocionalmente para tener que comerse las uas. Resulta adecuado, asimismo, aceptar los pensamientos del nio, sentimientos y reacciones y hacerles saber que las preocupaciones que ellos tienen son primordiales y adecuadas. "Tambin es recomendable la prctica de un deporte, concurrir a un gimnasio y las tcnicas de relajacin, como el yoga, ya que mejoran este problema", concluye Cruppi. Opinin Qu hacer? Muchos nios y adultos se "comen las uas", lo cual es un habito difcil de desterrar. El trmino mdico es onicofagia y las estadsticas muestran que es ms prevalente entre los 10 y 18 aos, aunque hay nios que comienzan desde edades ms tempranas, a tal punto que se puede observar esta conducta en nios de 1 o 2 aos. Es un hbito que tiene, como caracterstica, que es compulsivo; esto quiere decir que la persona no lo puede evitar, no se da cuenta y, en ciertas situaciones, comienza con esta conducta. Generalmente, estas situaciones estn cargadas de alto contenido de ansiedad y de inseguridad. Esta conducta aparece como respuesta a ciertas situaciones que el nio siente que son difciles de manejar y le genera una sensacin de malestar, de nerviosismo y ansiedad. Es de suma importancia poder identificar en el nio qu situaciones lo hacen sentir as, para poder elaborar esto y que lo pueda superar. Lo ms probable es que no sea slo una situacin. Seguramente tendr que ver con varias y donde son interpretadas, elaboradas y resueltas por el nio de la misma manera. Cules son las consecuencias? Se trata de un hbito patolgico, influye estticamente en las manos, en la boca y en los dientes, ya que va generando un deterioro a lo largo del tiempo. Hay nios que no slo se comen muerden las uas, sino tambin se las tragan y, adems, tambin pueden comerse los "pellejitos", es decir la cutcula, la piel de alrededor de las uas. Esto lleva tambin a infecciones, herpes, puede causar deterioro de los dientes y agrietamiento de los labios. Morderse las uas puede resultar en el transporte de grmenes que se ocultan bajo las uas a la boca o viceversa, llevando a la hinchazn del dedo y, en casos extremos, a la presencia de pus. Cul es el tratamiento? En algunos casos extremos se puede utilizar medicacin para la ansiedad. Recordemos que el comerse las uas es un hbito y es el sntoma de una persona ansiosa, insegura, que se encuentra bajo estrs. Por lo tanto, la medicacin para la ansiedad no slo ayudar al paciente para que no se muerda las uas, sino tambin para manejar los niveles altos de ansiedad. La terapia cognitivo-comportamental es otro tratamiento propuesto para esta problemtica y para los pacientes ansiosos. El objetivo es, en primer lugar, disminuir el hbito y, en paralelo, intentar identificar la situaciones que llevan al paciente o al nio a ponerse nervioso o ansioso, dndole herramientas para poder enfrenar y resolverla. Qu pueden hacer los papas? * Hablar mucho son su hijo, tranquilizarlo y darle tiempo para que se exprese. * Ayudarlo a que, cuando comenz con la conducta, pueda interrumpirla, ofrecindole otra actividad ms
* Ayudarlo a que, cuando comenz con la conducta, pueda interrumpirla, ofrecindole otra actividad ms saludable para hacer. * Observar cules son las circunstancias que llevaron al nio a realizar la conducta; llevar un registro, si es posible. * Explicarle cules son las consecuencias de su conducta. Paula Tramaglia/Psicloga
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