¿Qué Distingue Al Lenguaje de Otras Formas de Comunicación?
¿Qué Distingue Al Lenguaje de Otras Formas de Comunicación?
¿Qué Distingue Al Lenguaje de Otras Formas de Comunicación?
al lenguaje de
otras formas de
comunicación?
¿Cómo estudian
los antropólogos
y lingüistas el
lenguaje en
general y las
lenguas
específicas en
particular?
¿Cómo cambia el
lenguaje a corto y
largo plazo?
La variación lingüística se
asocia con la diversidad so-
cial y cultural, incluida la
etnicidad y el género. Estas
niñas mayas hablan en una
de las diversas lenguas ma-
yas que existen en
Guatemala.
Lenguaje
y comunicación
¿QUÉ ES EL LENGUAJE?
sumario
COMUNICACIÓN NO
HUMANA DE LOS
PRIMATES
Sistemas de llamadas
la antropología en
Lenguaje de signos NUESTRAS VIDAS
El origen del lenguaje
COMUNICACIÓN
NO VERBAL
ESTRUCTURA DEL
LENGUAJE
¿ Usted puede apreciar algo distinto o
inusual en su forma de hablar? Si us-
ted es de Canadá, Virginia o Savannah,
quizá pronuncie diferente la misma
palabra inglesa out (fuera). Un sureño esta-
cial, relacionadas con la región, la educación,
los antecedentes étnicos y el género. Hom-
bres y mujeres hablan de un modo diferente.
Seguramente usted puede pensar en ejem-
plos basados en su experiencia, aunque pro-
dounidense es probable que pida un “re- bablemente nunca se haya dado cuenta de
Sonidos del habla fresco” a diferencia del neoyorquino que que las mujeres tienden a llevar a la periferia
pide una “gaseosa”. ¿Cómo habla una “chica sus vocales (piense en “aiiee”), mientras que
LENGUAJE, del esnob” o bien, cómo lo hace un “sur- los hombres tienden a centralizarlas (piense
PENSAMIENTO
fista”? Por lo general, sólo ponemos atención en “uh” y “ugh”). En comparación con las mu-
Y CULTURA
en la manera en la que hablamos cuando al- jeres, los hombres tienen más probabilidad de
Hipótesis Sapir-Whorf guien nos hace algún comentario al respecto. hablar “sin gramática”. Hombres y mujeres
Vocabulario focal Sólo cuando los estudiantes se trasladan de también muestran diferencias al usar termi-
Significado una región o estado a otro identifican el parti- nologías relacionadas con el deporte o sobre
cular acento de su lugar de origen. Cuando fui los colores. Los hombres por lo general cono-
SOCIOLINGÜÍSTICA adolescente me mudé de la ciudad de Atlanta cen más términos relacionados con los de-
a Nueva York; previamente no me había dado portes, hacen más distinciones entre ellos
Diversidad lingüística
cuenta de que tenía un acento sureño, hasta (por ejemplo, carreras frente a marcadores) y
Contrastes del habla a partir que un guardián de la lengua en mi nueva tratan de usar los términos del modo más pre-
del género
escuela me lo hizo saber. Me colocaron en ciso que las mujeres. Así mismo, influidas más
Lenguaje y estatus una clase especial en la que me indicaban por la industria de la moda y de los cosméti-
Estratificación mis errores lingüísticos que nunca supuse cos, las mujeres usan más términos para des-
Inglés afromericano tener. Uno era, por ejemplo, en grupos con- cribir los colores y se refieren a ellos de ma-
vernáculo (BEV) sonantes terminales. Aparentemente no pro- nera más específica que los varones. Un
nunciaba las tres consonantes finales de pa- ejemplo de lo anterior me sucedió en una
LINGÜÍSTICA HISTÓRICA labras terminadas en sts y sks, como conferencia donde mostré al auditorio una ca-
breakfasts (desayunos) y tusks (colmillos). miseta morada y pedí que las mujeres dijeran
Pérdida de las lenguas
Más tarde me di cuenta de que no eran pala- el color de la camiseta. La respuesta fue di-
bras que usara con mucha frecuencia. Hasta versa: malva, lila, lavanda, violeta o algún otro
donde yo recordaba, nunca platiqué sobre tono purpúreo. Ante este tipo de peticiones,
colmillos o afirmé que “comí siete desayunos las mujeres rara vez tienen una sola res-
la semana pasada”. puesta, pues distinguen entre diversos tonos.
A diferencia de los gramáticos, los lingüis- Posteriormente, pregunté a los varones, y res-
tas y antropólogos están más interesados en pondieron de manera consistente “MORADO”.
lo que la gente dice, que en lo que debería Es raro el hombre que, al momento, pueda
decir. Las diferencias en el habla se asocian imaginar la diferencia entre fucsia y magenta
con, y dicen mucho acerca de, la variación so- o uva y berenjena.
COMUNICACIÓN NO
HUMANA DE LOS PRIMATES
Sistemas de llamadas
Sólo los humanos hablan. Ningún otro animal
tiene algo que se aproxime a la complejidad del
lenguaje. Los sistemas de comunicación natura-
les de otros primates (monos y simios) son siste- sistemas de
mas de llamadas o sonidos. Dichos sistemas llamadas
vocales constan de un número limitado de soni- Sistemas de comunica-
dos, llamadas, que se producen sólo cuando se ción de los primates no
encuentran estímulos ambientales particulares. humanos.
Tiene la capacidad de decir las cosas y eventos que no Dependen de los estímulos; una llamada de alimento
están presentes (desplazamiento). sólo se presentará ante la presencia del mismo; no se
puede falsificar.
Tiene la capacidad de generar nuevas expresiones me- Consiste de un número limitado de llamadas que no se
diante la combinación de otras expresiones (productivi- pueden combinar para producir nuevas.
dad).
El lenguaje es una capacidad propia de los seres huma- Tiende a ser específico de una especie, con poca varia-
nos, pero cada comunidad lingüística tiene su propia ción para cada llamada entre comunidades de la misma
lengua y se transmite culturalmente. especie.
F
mejores o peores, porque se les asocia con cier- laca, negro, gordo y mono (rubio) son nombres que usaría para
tos grupos que los utilizan, los cuales también algunos de los miembros de mi familia y amigos. También son al-
son clasificados de determinada forma. La gente gunos de los apodos más populares en mi país natal, Colombia.
que en inglés dice dese, dem y dere en lugar de Las familias en Colombia usualmente llaman al hijo de piel más oscura
these, them y there se comunica perfectamente negro o negra y al que tiene la complexión más clara mono o mona,
bien con cualquiera que reconozca el sonido d, mientras que los apodos favoritos entre las parejas incluyen gordo/a y
ya que sistemáticamente sustituyen el sonido th flaco/a. Dichos sobrenombres por lo general se usan entre miembros de
en su habla. Sin embargo, esta forma de habla se la familia y buenos amigos. Sin embargo, en ocasiones, las personas que
ha vuelto indicio de baja clasificación social. Se le se sienten cómodas con sus apodos incluso los utilizan cuando se presen-
llama, como al uso de ain’t (en lugar de I’m not), tan, y usualmente agregan sus apellidos con propósitos de diferenciación
“habla inculta”. El uso de dem, dese y dere es una como: “soy el gordo Ramírez, no el gordo Rodríguez”.
de muchas diferencias fonológicas que identifi- En Estados Unidos, las etiquetas basadas en atributos físicos se consi-
can los estadounidenses y que menosprecian. deran políticamente incorrectas. El uso de términos como “negro”,
“gordo” o “rubio” con frecuencia se consideran insultos. Sólo bajo cir-
Contrastes del habla a partir cunstancias muy específicas se pueden usar dichos términos, por lo ge-
neral con fuertes restricciones en cuanto a cuándo, dónde y a quién se
del género puede llamar así. Tales apelativos descriptivos se sustituyen por palabras
Al comparar a hombres y mujeres, existen dife- más aceptables como “afroamericano” o “sobrepeso”. Desde luego,
rencias en fonología, gramática y vocabulario, ninguna de estas sustituciones podría considerarse como apodos.
así como en las posturas y movimientos corpo- La forma en la que los colombianos y muchos otros latinoamericanos
rales que acompañan al habla (Baron, 1986; Ec- ocupan las características físicas para identificarse mutuamente podría
kert y McConnell-Ginet, 2003; Lakoff, 2004; Tan- parecer en Estados Unidos ofensiva y desconsiderada. Pero para muchos
nen, 1990). En contextos públicos, las mujeres latinoamericanos el cuidado que se ejerce en Estados Unidos para evitar
japonesas tienden a adoptar una voz artificial- referencias a tales atributos físicos parece excesivo e indica ignorancia
mente alta, por cuestiones de cortesía, de acuerdo del contexto en el que se usan. Los colombianos muestran una mayor
con su cultura tradicional. En Estados Unidos y variación física dentro de las familias o entre grupos sociales cercanos, a
Gran Bretaña, el habla de las mujeres tiende a diferencia de la mayoría de las familias estadounidenses. Es en este con-
ser más similar al de los hombres. Considere los texto en el que se usan los apodos, por lo general para subrayar las dis-
datos de la tabla 5.2, recopilados en Detroit. En tinciones dentro de la familia o los grupos de amigos. Dado que virtual-
todas las clases sociales, pero particularmente mente toda familia tiene su propio negro, gordo o mono, es probable
en la clase trabajadora, los hombres tendieron a que dichos apodos no se conviertan en etiquetas para subgrupos más
usar negativos dobles (por ejemplo, “no quiero amplios de la sociedad, contextos en los que podrían considerarse de-
nada”). Las mujeres procuran ser más cuidado- gradantes u ofensivos.
sas con respecto del “habla inculta”. Esta ten-
dencia se muestra tanto en Estados Unidos
como en Inglaterra. Los hombres suelen adop-
tar el habla de clase trabajadora porque la aso- nen, 1990). Por ejemplo, oh querido, oh esquivo u
cian con la masculinidad. Quizá las mujeres po- oh Dios, son menos fuertes que expresiones
nen más atención a los medios de comunicación, como demonios y maldición. Observe los labios de
donde se emplean dialectos estándar. un atleta molesto en una competencia televi-
De acuerdo con Robin Lakoff (2004), el uso sada, como un juego de futbol. ¿Cuál es la pro-
de ciertos tipos de palabras y expresiones se babilidad de que diga “¿tonterías”? Las mujeres
asocia con la falta de poder que tradicional- tienen más probabilidad de usar adjetivos como
mente se otorga a las mujeres en la sociedad es- adorable, encanto, dulce, lindo y divino que los
tadounidense (vea también Coates, 1986; Tan- hombres.
girse a alguien sin usar su nombre, como “Dr.”, El idioma japonés posee muchos honoríficos,
“Mr. President”, “Senator” y “Miss”. Los británi- algunos de los cuales transmiten más respeto que
cos tienen un conjunto más desarrollado de ho- otros. El sufijo -sama (agregado a un nombre), que
noríficos, que corresponden a distinciones de muestra gran respeto, se usa para dirigirse a al-
rango con base en clase, nobleza (por ejemplo, guien de mayor estatus social, como un lord o un
lord y lady Trumble), y reconocimiento especial profesor respetado. Las mujeres pueden usarlo
(por ejemplo, caballerosidad: “sir Elton” o “dame para demostrar amor o respeto a sus esposos. El
Maggie”). honorífico japonés más común, -san, unido al ape-
FUENTE: Peter Trudgill, Sociolinguistics: An Introduction to Language and Society, 4a ed. (Londres: Penguin Books, 1974, ediciones revisadas 1983, 1995, 2000),
p. 70. Copyright © Peter Trudgill, 1974, 1983, 1995, 2000. Reproducido con permiso de Penguin Books Ltd.
llido, es respetuoso, pero menos que “Mr.”, “Mrs.” ción de la r. En algunas partes de Estados Uni-
o “Ms.” en el inglés estadounidense. Unido a un dos, la r se pronuncia regularmente, y en otras
nombre, -san denota más familiaridad. El honorí- áreas no (sin-r). Originalmente, el habla sin-r es-
fico -dono muestra más respeto y es intermedio tadounidense se modeló a partir del habla de
entre -san y -sama. moda de Inglaterra. Debido a su prestigio se
Otros términos japoneses honoríficos no ne- adoptó en muchas áreas y continúa como la
cesariamente honran a la persona a la que uno norma alrededor de Boston y en el sur.
se dirige. El término -kun, por ejemplo, trans- Los neoyorquinos buscaban prestigio al elimi-
mite familiaridad cuando uno habla con un nar sus r en el siglo xix, después de pronunciarlas
amigo, tal como el uso de -san unido al nombre. durante el xviii. Sin embargo, los neoyorquinos
El término -kun se usa también con personas contemporáneos regresaron al patrón del siglo
más jóvenes o de rango inferior. Un jefe puede xviii de pronunciar las r. Lo que importa y go-
usar -kun con los empleados, especialmente mu- bierna el cambio lingüístico no es la reverbera-
jeres. Aquí las palabras honoríficas se invierten; ción de una fuerte r del medio oeste, sino la eva-
el hablante usa el término (un poco como luación social de si la r está “de moda” o “caduca”.
“chico” o “chica” en inglés) para dirigirse a al- Los estudios de la pronunciación de la r en la
guien que se percibe con un estatus inferior. Los ciudad de Nueva York clarificaron los mecanis-
hablantes de japonés usan el término muy amis- mos de la variación fonológica. William Labov
toso y familiar -chan con alguien de la misma (1972b) centró su atención en cómo se pronuncia
edad o más joven, incluyendo a amigos cercanos, la r detrás de las vocales en palabras como car,
descendientes y niños (Free Dictionary, 2004; Lo- floor, card y fourth. Para conseguir datos acerca de
veday, 1986, 2001). cómo esta variación lingüística se correlaciona
Los términos de parentesco también pueden con la clase social, usó una serie de encuentros
asociarse con rango y familiaridad en diversos rápidos con empleados en tres tiendas departa-
grados. Papi es un término de parentesco más fa- mentales, cuyos precios y ubicaciones atraían a
miliar y menos formal que padre, pero todavía diferentes grupos socioeconómicos de la ciudad
muestra más respeto que usar el nombre del pa- de Nueva York. Saks Fifth Avenue (68 encuen-
dre. Al tener un rango superior al de sus hijos, los tros) atiende a la clase media superior, Macy’s
padres rutinariamente usan los nombres de sus (125) atrae a compradores de clase media y S.
hijos, apodos o nombres de bebé, en lugar de di- Klein’s (71) tiene clientes predominantemente de
rigirse a ellos como “hijo” e “hija”. Los términos clase media baja y trabajadora. Los orígenes de
estadounidenses como bro, man, dude y girl (en clase del personal de la tienda tendían a reflejar
algunos contextos) parecen similares a los hono- el de sus clientes.
ríficos informales/familiares en japonés. Los su- Después de ubicar un producto que se en-
reños estadounidenses de cierta edad (y en oca- contraba en el cuarto piso en cada almacén, La-
siones con mucho más edad) de manera rutinaria bov abordó a los vendedores de la planta baja y
usan “ma’am” y “sir” para las mujeres y hombres les preguntó dónde estaba dicho producto.
ancianos o de estatus superior. Luego de que el vendedor respondía “fourth
floor” (cuarto piso), Labov repetía “¿dónde?”,
con la finalidad de obtener una segunda res-
Estratificación puesta. La segunda réplica era más formal y en-
El habla se usa y evalúa en el contexto de fuerzas fática, el vendedor pensaba que Labov no había
extralingüísticas: sociales, políticas y económicas. escuchado o comprendido la primera respuesta.
Un estadounidense común evalúa el habla de los En consecuencia, para cada vendedor, Labov te-
grupos de estatus bajo de manera negativa, y la nía dos muestras de pronunciación/r/ en dos
llama “inculta”. Esto no se debe a que esas for- palabras.
mas de hablar sean malas por sí mismas, sino Labov calculó los porcentajes de trabajadores
porque se les asocia simbólicamente a un estatus que pronunciaban /r/ al menos una vez durante
menor. Considere la variación en la pronuncia- la entrevista y obtuvo los siguientes resultados: