Universidad Central de Venezuela

Facultad de Agronomía
Departamento de Agronomía
Cátedra: Producción de Cultivos
Asignatura: Cultivos I
Unidad Temática Raíces y Tubérculos

ESTRUCTURAS DE PROPAGACIÓN DE RAÍCES Y TUBÉRCULOS

Profª PETRA MADRIZ

Las plantas de raíces y tubérculos se caracterizan porque sus estructuras de valor

alimenticio y económico se encuentran bajo tierra, ya sea en forma de raíces o tallos
modificados. La importancia radica en que estas estructuras almacenan proteínas,
minerales, vitaminas pero principalmente carbohidratos, es decir, son alimentos
energéticos básicos en la nutrición humana y animal.

La propagación de las raíces y tubérculos puede ser sexual mediante semillas botánicas,
o asexual, partes vegetativas, la cual es normalmente la forma comercial de
multiplicación. El uso de semillas sexuales es principalmente para la investigación y
multiplicación especial. Esto se debe a que estas especies son plantas alógamas, en otras
palabras, cada semilla da origen a una planta genéticamente diferente a la planta madre,
por lo cual su uso es difícil y requiere de cuidados especiales.

En el caso de las tuberosas (término que se utiliza para referirse a estas especies, que
engrosan y almacenan, principalmente, carbohidratos) no todas producen semillas
botánicas y, en algunos casos, es difícil su obtención. Un ejemplo de lo anterior es la
batata, en la cual se utilizan técnicas especiales para inducir su floración. Otra causa,
quizás la más importante, es que el ciclo de cultivo de estas especies varía entre 3 (papa
y batata) y aproximadamente 14 meses (yuca, ocumo, ocumo chino, ñame, apio criollo)
utilizando “semillas” asexuales o vegetativas, mientras que al propagar semillas
botánicas el ciclo aumenta en 3 meses, aproximadamente.

El medio de propagación comercial de las tuberosas es el asexual, a través del uso de

partes de las plantas como tallos verdaderos y modificados, raíces, hojas. Tiene como
ventaja que facilita la obtención de “semillas” y acorta el ciclo de cultivo, como se
mencionó con respecto a las botánicas. Igualmente, se mantienen las características de
la planta original, ya que se obtienen clones. Sin embargo, por ser estructuras
vegetativas son de mayor peso, cantidad y susceptibilidad a plagas y enfermedades en la
plantación, que las semillas sexuales.

Cabe destacar que al hablar de semillas sexuales se debe usar el término sembrar y
cuando se utilizan estructuras vegetativas se debería hablar de plantar. Asimismo, al
ocurrir la estimulación del crecimiento, en semillas, y aparecen la radícula y plúmula, se
habla de germinación, por venir de un cigoto producto de la autógamia o de la
alógamia. Entre tanto, que para estructuras asexuales, se debe referir a brotación o
grelación, que ocurre al estimularse la división celular en el meristemo en las yemas,
para que formen y crezcan los brotes o futuros tallos y raíces. Esto debido a que no

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provienen de un embrión sino que son parte de una multiplicación de células y
mantienen las mismas características de la planta madre.

Las diferentes estructuras de propagación de las especies de plantas pueden ser: tallos,
raíces, tubérculos, rizomas, cormos, raíz caulino tuberosa gemífera u otros, que
dependerán de la especie. Entre esas especies están:

La yuca, nombre científico: Manihot esculenta L. Crantz, es una planta erecta, perenne
y semileñosa. Su órgano de reserva y consumo es la raíz, rica en hidratos de carbono,
mientras que sus estructuras de propagación son los tallos semileñosos denominados
estacas. Las estacas poseen yemas ubicadas en los nudos entre la parte leñosa y el resto
de los pecíolos. Dichas estacas, al ser plantadas de forma correcta (las yemas hacia
arriba), las yemas son estimuladas a producir raíces, brotes, tallos y hojas.

La batata, Ipomoea batatas L. Lam, es una planta herbácea rastrera que produce
estolones. El órgano comestible es la raíz caulino tuberosa gemífera, denominada así
porque caulino significa que proviene o es extensión del tallo, tuberosa por ser de
reserva de carbohidratos y gemífera por tener yemas internas, no visibles, ubicadas en la
parte próxima a tallo, que brotan al ser plantadas o conseguir un medio húmedo
apropiado. Esto significa que también sirve como estructura de propagación,
especialmente para mantener un clon, ya sea para trabajos de investigación o
propagación. No obstante, en países como Argentina, donde existen las cuatro
estaciones climáticas, es uno de los medios de propagación del cultivo, después del
invierno.

En Venezuela y otros países tropicales la estructura de multiplicación es el tallo

herbáceo denominado “bejuco”. El tallo de hábito de crecimiento rastrero estolonífero
posee hojas y yemas en cada nudo; estas últimas al entrar en contacto con el suelo
forman raíces, tallos y una nueva planta idéntica a la que le dio origen. Este tipo de
crecimiento permite su perpetuación en el terreno de plantación, de allí el popular dicho:
“En rastrojo (conuco) viejo siempre hay batata”.

El ocumo, Xanthosoma sagittifolium (L.) Schott, de la familia Araceae, es una planta

herbácea que forma un tallo central subterráneo denominado cormo. Este cormo es un
tallo modificado corto, redondeado, de crecimiento indefinido, vertical, consistente,
fibroso y reservante; presenta nudos, entrenudos, yemas evidentes y hojas modificadas
llamadas catáfilos. Ejemplos de otras plantas que presenta cormo son el cambur y el
plátano.

En el ocumo común el cormo sirve, al ser seccionado y con presencia de al menos dos
yemas, como “semillas” llamadas trozos. Asimismo, cuando se aprovecha la parte
superior del cormo, con parte de los pecíolos, se le denomina corona. De este tallo
subterráneo, al desarrollarse y crecer la planta, se producen los órganos comestibles que
son los tallos modificados llamados rizomas.

Los rizomas son alargados, de crecimiento indefinido normalmente horizontal y son

completamente reservantes, de consistencia generalmente carnosa, con presencia de
nudos, entrenudos, yemas y con catáfilos fibrosos y semideciduos. Presenta una yema
terminal que en la planta al ser estimulada (principalmente al no arrimársele tierra o
aporcar y quedar expuesta al sol) produce una nueva planta. En esta condición estos

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rizomas no deben ser consumidos, ya que parte de sus nutrientes se han utilizado en la
formación de hojas; por lo cual, se deben utilizar como “semillas”, que se denominan
hijuelos. Basado en lo anterior, se pude indicar que el ocumo se propaga
comercialmente mediante el cormo (trozos y coronas) y los rizomas brotados (hijuelos).

El ocumo chino, taro o malanga, Colocasia esculenta (L.) Schott, al igual que el ocumo
común pertenece a la familia Araceae. Es una planta herbácea parecida al ocumo,
formada también por un tallo modificado o cormo central, con nudos, entrenudos y
yemas evidentes, además de las hojas modificadas o catáfilos. Del cormo se desarrollan
cormelos laterales con una yema terminal, cada uno, que puede dar origen a una nueva
planta. La estructura de consumo de esta especie es el cormo central, el cual se
caracteriza por almacenar parte de los carbohidratos como oxalato de calcio. Estos
oxalatos tiene forma de agujas, y al eliminar la parte externa del cormo debe hacerse
bajo el agua, para evitar molestias en la piel.

Las estructuras de propagación del ocumo chino son el cormo central y los cormelos. La
planta se caracteriza por soportar condiciones de inundación, como el arroz y en
Venezuela se planta en los estados orientales, en riachuelos y morichales.

La papa, Solanum tuberosum L., es de las plantas más importantes en la alimentación

humana. Su órgano de reserva de hidratos de carbono y nutrientes, de consumo y de
propagación es el tubérculo. La papa es una planta herbácea, de crecimiento erecto. El
tubérculo es un tallo modificado, que proviene del engrosamiento de un estolón,
presenta nudos y entrenudos poco visibles pero con yemas hundidas evidentes,
denominadas vulgarmente como “ojos”.

El tubérculo de papa pasa por un período de latencia, durante el cual queda en reposo
sin producir brotes. Se debe esperar la formación incipiente de dichos brotes, antes de su
plantación, ya que de lo contrario, al plantar las “semillas” ciegas (sin brotes) la
emergencia de los brotes se retarda (entre 13- 30 días, según variedad y condiciones de
clima y manejo) ocasionando irregularidad en el desarrollo y crecimiento de las plantas.
Al plantarse los tubérculos, enteros o en trozos, de al menos dos yemas con brotes, y
dársele las condiciones adecuadas, se producirán tantos tallos como yemas o brotes
presenten.

El ñame, Dioscorea spp, pertenece a un grupo de especies de este género y reciben este
nombre y otros, como mapuey. Es una planta herbácea, con hábito de crecimiento
trepador. Se caracteriza porque su estructura de reserva de carbohidratos, consumo y de
propagación es la raíz caulino tuberosa gemífera (igual a la batata). Este tipo de raíz
tampoco tiene las yemas visibles, pero las mismas se ubican en la parte proximal al
tallo, lo que se evidencia en la formación de brotes en esta área.

Las raíces caulino tuberosa gemíferas presentan latencia (como los tubérculos de papa)
y se les deben dar condiciones para que, según el cultivar, ocurra el reposo y grelen
(sean estimulados las yemas produciendo pequeños brotes), para ser plantadas y
permitan un buen crecimiento y desarrollo de los tallos. Se pueden utilizar ñames
enteros pequeños o trozos, para la propagación.

El apio criollo, Arracacia xanthorrhiza, es una de las raíces de mejor calidad de

granulos de almidón. Es una planta herbácea, que forma una macolla unida a un cormo

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central, donde los tallos o hijos son denominados “colinos” y son pequeños cormos con
nudos, entrenudos, yemas, pecíolos y láminas de las hojas. Estos colinos son las
estructuras de propagación del cultivo. En cuanto a la estructura de reserva y consumo
es la raíz, con las mismas funciones de absorción de agua y nutrientes y de sostén de las
plantas pero con la adición de engrosarse y reservar almidón para su perpetuación y
alimentación propia, humana y hasta animal.

Existen otras raíces y tubérculos menos conocidas y de uso más local, tanto de clima
cálido como fresco a frío, originarias principalmente de las zonas tropicales, que son de
gran importancia por su diversidad genética para diferentes usos, que son objeto de otro
curso.

LITERATURA REVISADA

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Mímeo. 43 p.

MONTALDO, A. 1991. Cultivo de raíces y tubérculos tropicales. Servicio editorial

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J. Mantilla, C. Zambrano, P. Zárraga. Universidad Central de Venezuela. Ediciones
OPSU. pp 35- 44.

Maracay, enero 2008.

Modificado: Julio 2011. Octubre 2012. Marzo 2015.