Antonio Guzmán Blanco
Antonio Guzmán Blanco
Antonio Guzmán Blanco
Abogado. Político, estadista, jefe militar de la Guerra Federal, caudillo del Partido Liberal
Amarillo y presidente de la República en varias ocasiones entre 1870 y 1888. Hijo del
político Antonio Leocadio Guzmán, fundador del Partido Liberal, y de Carlota Blanco Jerez
de Aristeguieta, emparentada con la familia de Simón Bolívar. Durante su infancia y
adolescencia, Guzmán Blanco, primogénito de ese matrimonio, sufrirá, junto con su
madre y hermanos, los avatares de la vida pública de su padre, poderoso unas veces y
perseguido otras. Inició sus estudios en Caracas en el colegio Independencia de Feliciano
Montenegro y Colón. A mediados de 1848, a los 19 años de edad y mientras estudiaba
derecho en la Universidad Central de Venezuela, desempeñó su primer cargo público
como jefe de sección en la Secretaria de Relaciones Exteriores. En 1854, ingresó a las
logias masónicas caraqueñas Concordia y Esperanza, y Sociedad de María. El 1 de marzo
de 1856 se recibió como licenciado en derecho civil, y el 14 de abril siguiente obtuvo el
título de abogado.
En esta época cortejó a Luisa Teresa Giuseppi, nieta del general José Tadeo Monagas,
presidente de la República por segunda vez y quien desaprobaba esos amores. Es
probable que por tal motivo, Guzmán Blanco haya sido nombrado cónsul de Venezuela en
Filadelfia, de donde pasó con el mismo cargo a Nueva York y luego como secretario de la
Legación de nuestro país a Washington. Dos años permanece en Estados Unidos.
En agosto de 1858, al poco tiempo de su regreso a Venezuela, Guzmán Blanco fue acusado
de participar en un movimiento conspirativo contra el gobierno de Julián Castro llamado
La Galipanada. Fue arrestado y sometido a un juicio pero resultó absuelto. Sin embargo,
esto no evitó que el 18 de septiembre de 1858, Castro ordenara su salida del país. Tras
evadir a las autoridades, protestó por escrito ante las autoridades judiciales y la
Convención Nacional reunida en Valencia, alegando que aunque había sido declarado
inocente por los tribunales todavía se le quería desterrar. A pesar de esto, fue desterrado
el 8 de enero de 1859.
Debido al proceso de amnistía política implementado por Julián Castro, en vez de terminar
en la cárcel, Guzmán Blanco fue enviado con la misión de establecer un diálogo con los
jefes federalistas que conocía, en especial Falcón. La estrategia de Castro fue en vano, y
las fuerzas revolucionarias no solo continuaron con las hostilidades, sino que cuando
Falcón desembarcó en Palma Sola el 24 de julio de 1859, llevaba a su lado a Guzmán
Blanco quien, como licenciado en derecho, fue designado auditor general del ejército.
Con los federalistas, Blanco participó en los principales combates que vinieron, primero
como teniente coronel en la toma de Barquisimeto el 3 de septiembre de 1859, y más
tarde, como Coronel en la batalla de Santa Inés el 10 de diciembre de 1859, la primera
gran victoria de la Federación. Un mes más tarde, el 10 de enero de 1860, presencio la
muerte de Zamora durante el sitio de San Carlos.
[editar] Post-Guerra
En la primera de estas ciudades observó con atención los progresos materiales que se
llevaban a cabo: el establecimiento de institutos de crédito, sociedades científicas y en
especial la política ferrocarrilera de Napoleón III. A partir de este momento concibió la
idea de hacer de Caracas una copia en pequeño del París que tanto le impresionó. Regresa
a Caracas a mediados de octubre de 1864 y desembarcó en La Guaira el 3 de noviembre.
De allí pasó a Puerto Cabello, donde Falcón lo designa presidente encargado de la
República. El 18 de marzo de 1865 el Congreso Nacional elige al mariscal Falcón
presidente constitucional de la República de los Estados Unidos de Venezuela y el 13 de
mayo al general Guzmán Blanco primer designado. Durante los lapsos en que ocupó
interinamente la presidencia, dictó medidas para reorganizar la Hacienda Pública,
reglamentar la ley de crédito público y promover la construcción de ferrocarriles.
El 25 de mayo de 1866 Guzmán Blanco sale de nuevo hacia Europa como ministro
plenipotenciario, instalándose al poco tiempo en París donde realiza negociaciones con los
gobiernos de Francia, Inglaterra, Dinamarca e Italia. Durante su permanencia en dicho
continente, el Gobierno de Venezuela decidió suspender el pago de la deuda externa, lo
cual motivó una protesta pública de Guzmán Blanco y hasta una polémica con el ministro
de Relaciones Exteriores, que produjeron su destitución y su casi inmediata reposición en
el cargo por órdenes de Falcón. A comienzos de 1867 volvió a Venezuela, siendo elegido
ese mismo año presidente del Senado y en mayo comandante de armas del Distrito
Federal. El 13 de junio de 1867 contrajo nupcias con Ana Teresa Ibarra en la catedral de
Caracas. Posteriormente, en septiembre y octubre de ese año es nombrado por Falcón
como jefe del ejército encargado de enfrentar la revolución denominada La Genuina, que
dirigen los generales Luciano y Natividad Mendoza, a quienes derrota luego de algunos
combates.
Una vez en Venezuela Guzmán Blanco inicia con su padre durante el año 1868, una
estrategia destinada a crear una base propia de poder político, organizando la sociedad
denominada Unión Liberal y financiando el periódico del mismo nombre. No obstante, sus
planes se frustran el 14 de agosto de 1869, cuando una multitud azuzada por los
gobernantes azules termina a pedradas una recepción que él y su esposa ofrecían esa
noche. Ante lo peligroso de la situación decide buscar asilo en la Legación de Estados
Unidos, mientras su padre lo hace en la de Brasil. Poco después, salen del país hacia
Curazao.
Sólo dos años más tarde Guzmán Blanco volvía a Venezuela, esta vez armado con un vasto
ejército. Comandó la llamada Revolución Liberal o Revolución de Abril, con la cual depone
a Guillermo Tell Villegas, para tomar el gobierno y es reconocido automáticamente como
supremo líder, el liberalismo había vuelto y ahora Guzmán Blanco era el nuevo presidente
del país, toda una nueva etapa estaba por dar comienzo, la hegemonía de Antonio
Guzmán Blanco había comenzado.
Periodos de gobernación
Su permanencia como presidente del país durante tres períodos que suman casi 14 años se
complementó con 6 años de "gobiernos títeres" con figuras como Francisco Linares Alcántara
(1877-1878), José Gregorio Valera (1878), Joaquín Crespo (1884-1886) y Hermógenes López (1887-
1888), todos partidarios del «guzmancismo». Estas dos décadas son conocidas en la historia de
Venezuela como el «guzmanato» o «hegemonía guzmancista».3
El Septenio (1870 – 1877)
El septenio se divide en dos etapas, la primera etapa que es un gobierno de facto que
dura 3 años, y la segunda es un gobierno constitucional que va a durar hasta 1877. El
septenio fue considerado como una de las etapas más productivas de la historia del siglo
XIX.
6. Construye el Capitolio, los bulevares centrales, con una idea francesa de urbanismo.
Decora el Capitolio con pintura de Manuel Tovar y Tovar donde se narre la historia de
Venezuela. Construye el Teatro Guzmán Blanco, hoy Teatro Municipal, levanta templos,
avenidas. En 1870 dicta el famoso decreto de la Instrucción Pública, en el que se declara
que el estado asume la obligación de dar la instrucción primaria gratuita a todos los
venezolanos.
Uno de los grandes avances que realizó se vio reflejado en el Decreto de Instrucción
Pública Gratuita y Obligatoria. Este decreto entró en vigencia el 27 de junio de 1870 y
significó una transformación profunda dentro del sistema educativo en nuestro país.
Se creó una Dirección Nacional de Instrucción Primaria con sedes en los distintos estados
de la Unión.
Esta decisión del Ejecutivo planteó un cambio fundamental ya que se coordinó un plan
que se ideó en la Capital, pero se replicó a todas las entidades de la nación.
Otra de las obras de mayor importancia dentro del Septenio de Guzmán fue la unificación
de la moneda nacional. Para la época en que Guzmán Blanco llegó al poder, estaban en
circulación gran diversidad de monedas dentro de las regiones. Es por ello que la
unificación sirvió de mucho para facilitar y estimular el comercio. Al año siguiente de su
llegada al poder, se creó el “Venezolano” o “Peso Fuerte” como moneda nacional. Esta
nueva moneda presentaba la esfinge de Simón Bolívar por una cara y, por la otra, el
escudo nacional.
Uno de los objetivos principales de Guzmán Blanco durante este y sus otros mandatos fue
la modernización del país. Por ello, se dio prioridad a la construcción de obras públicas y
medios de transporte, entre otras.
Las dos ideas principales que tenía Guzmán Blanco para llevar el gobierno era el
Centralismo, con apariencias de Federalismo, y el Nacionalismo, término que constituyó
uno de los elementos más importantes de su filosofía política.
Conflictos internacionales
Igualmente, consciente de que muchos de sus enemigos escapaban a las Antillas con
preferencia a las islas de Aruba, Curazao y Bonaire a conspirar en su contra, a pesar de ser
estas colonias de Holanda, no vaciló en exigir al gobierno de dicho país que los expulsase,
algo que le traería una extraordinaria red de problemas con el mismo, al llegar a una
situación tan crítica, que estuvo al borde de declararle la guerra. Fue esto lo único que
evitó semejante desenlace, el que finalmente Holanda cediera.
La mayoría de los países del mundo, se vieron severamente impresionados por semejante
actitud, entre ellos, uno al que muchos problemas le trajo semejante enfoque, Inglaterra
con quien Guzmán Blanco se enfrentó a causa de la usurpación de la Guayana Esequiba y
de Trinidad, convirtiéndose en uno de los presidentes que más ha presionado por su
devolución.
Tras los sucesos ocurridos en la Revolución de Abril y la toma del poder por parte de
Antonio Guzmán Blanco, el país y sus instituciones se arrodillan, literalmente ante él,
excepto la Iglesia católica, la más poderosa de todas ellas y la cual ejercía una inmensa
influencia sobre el país, desde la era colonial. El entonces Arzobispo de Caracas, Monseñor
Guevara y Lira, se rehusó a realizar actos eclesiásticos en honor al mandatario, lo cual
disgusta en sobremanera a Guzmán Blanco. Las fricciones entre el Arzobispo y el gobierno
de Guzmán Blanco, continuaron y a ellas se sumó el Arzobispo de Mérida. Guzmán
demandó a la Santa Sede la sustitución de Guevara y Lira, por un clérigo más dócil y
obediente, pero ésta se negó.
Ante esta actitud, Guzmán Blanco decidió cerrar seminarios, claustros y templos y
transferir las cátedras religiosas a las Universidades Laicas. Como mecanismo de presión
para doblegar la jerarquía católica a las intenciones del Estado, la despojó de su influencia
y de la gran mayoría de sus bienes, pero lo único que consiguió fue la salida de Monseñor
Guevara y Lira al extranjero, quien se negó a renunciar a su cargo de Arzobispo de
Caracas, a pesar de estar fuera del país.
Entonces, Guzmán Blanco, estableció el Registro Civil, dejando sin efecto el registro
parroquial, aún vigente en otros países para la época, el cual imponía el bautismo
obligatorio en el culto católico para registrar los nacimientos y el 1 de enero de 1873 el
mandatario establece el matrimonio civil. No faltó la oposición de una parte del clero,
ante esta última medida, porque el matrimonio civil debía realizarse ante el Presidente del
Concejo, antes del matrimonio eclesiástico. La publicación de la Ley se hizo el 8 de enero,
y diez días más tarde entró en vigencia. El 16 de enero hicieron uso de la nueva
disposición las primeras parejas conformadas por Manuel María Martínez y Carmen Paz
Castillo; José Ignacio Cardozo y Carmen Núñez de Cáceres y el General Aníbal Marott y
Ramona España. De esta tercera unión fueron testigos el mandatario y el General Víctor
Rodríguez. El propio Presidente legalizó civilmente su matrimonio con su esposa Ana
Teresa Ibarra el 14 de febrero de ese año, aunque se casó por la Iglesia católica el 13 de
junio de 1867. También Guzmán Blanco fue quien introdujo el concepto del divorcio, algo
mal visto por la jerarquía eclesiástica, pues presentaba la posibilidad de disolver la unión
matrimonial, considerada como sagrada por la Iglesia católica.
A pesar, de todo este avance en contra de la jerarquía eclesiástica, esta se mantuvo firme
en su oposición al gobierno de Antonio Guzmán Blanco, quien disgustado por la situación,
optó por planificar la separación de la Iglesia católica venezolana de la Santa Sede y
constituirla en independiente. Ante esta estrategia, el papa Pio IX, a fin de evitar dicha
acción, destituyó a Monseñor Guevara y Lira y nombró un nuevo Arzobispo de Caracas,
escogido a antojo de Guzmán Blanco.
El gobierno de Caracas puso resistencia ante esta arremetida liberal; sin embargo fueron
derrotados en la batalla de la Victoria, el 6 de febrero de 1879.
En 1880 el Telégrafo era uno de los servicios más importantes que prestaba el Estado a
sus ciudadanos; existían estaciones en Caracas, La Guaira, Petare, Los Teques, entre otros.
Durante esta época la minería tuvo un auge, ya que se agregaron a los productos de
exportación. El cobre y el oro incrementaron su producción con el desarrollo de los
ferrocarriles.
La finalizar el segundo gobierno de Guzmán, el país estaba inmersa en una profunda crisis
económica causada por la baja en los precios del café.
EL QUINQUENIO (1879 - 1884) Este período de 5 años consistió la segunda oportunidad
de ejercer el poder de Antonio Guzmán Blanco. En este período de gobierno quiso poner
en práctica el modelo europeo. Trajo de Francia el proyecto de los ferrocarriles y también
un estilo social en las costumbres y las modas. En su delirio de grandeza le pone su
nombre a las calles, parques, teatros, distritos, incluyendo un estado.
8. El 25 de mayo de 1881 se decreta el ¨ Gloria al Bravo Pueblo¨ como himno Nacional
de Venezuela. A finales de este Gobierno el país sufrió una gran crisis económica
provocada nuevamente por la caída de los precios del café. En 1882, el Consejo Federal
elige al General Guzmán Blanco presidente para el período 1882-1884. En dicho período
continúo con su política cultural y con la construcción de obras públicas, pero
acompañado de endeudamiento, corrupción administrativa y persecución a sus
opositores. Partitura del Himno Nacional de Venezuela
En 1886, Antonio Guzmán Blanco vuelve al poder con el mandato conocido como Bienio,
el cual duró dos años. También fue llamado como “La Aclamación”, mismo nombre que
llevó el movimiento que lo llevó al poder por tercera y última vez.“La Aclamación” fue
organizada por Joaquín Crespo al final de su período presidencial y llevó a Guzmán Blanco
nuevamente al poder. Una de las razones más importante por la cual se solicitó
nuevamente su gestión fue la situación económica que atravesaba el país durante ese
período, donde el escenario era casi insostenible.Un gran número de personas,
elaboraron un libro para ser firmado para pedir su retorno para el cargo de la primera
magistratura.El Consejo Federal elige finalmente por unanimidad a Guzmán Blanco
nuevamente como Presidente de Venezuela.Es entonces cuando Guzmán Blanco entra en
el apogeo de su poder político, y su regreso obtuvo buenas críticas en el comienzo del
mismo, ya que se aumentó el valor de los títulos de la deuda pública y encontró solución a
muchos de los problemas surgidos durante el mandato de Crespo.Se logró restablecer el
equilibrio fiscal, lo que llevó a inaugurar en Caracas la Casa de la Moneda, sustituyendo así
el circulante extranjero por una moneda nacional. Esto fue lo que emprendió
definitivamente lo que hoy se conoce como el bolívar venezolano.
Otro de los logros económicos durante su gobierno, fue la inauguración del ferrocarril
Puerto Cabello-Valencia y el cable submarino con Europa.Durante la gestión del Bienio, la
oposición de Guzmán Blanco se torna más fuerte y algunos de los partidarios de su
gobierno se dividen y se separan de él. Se crea el periódico “El Yunque”, que atacaba sin
cesura a las gestiones de Guzmán Blanco y logró tener una gran aceptación en la
comunidad de aquella época.Otro de los acontecimientos más importantes ocurridos
durante “La Aclamación” fue la suspensión de las relaciones diplomáticas con Inglaterra,
debido a las peticiones del gobierno venezolano de retirar los británicos de las zonas
reclamadas por Venezuela como suyas.
Muerte
La lucha contra la autocracia de Guzmán Blanco cobró impulso con la introducción de las
ideas positivistas y el movimiento político estudiantil que se inició durante la primera
presidencia de Crespo. La oposición estudiantil contra Guzmán Blanco tuvo su origen en
ciertas medidas del gobierno que afectaban la Universidad Central de Venezuela, sobre
todo la supresión de la autonomía universitaria y la apropiación por Guzmán Blanco de la
hacienda Chuao propiedad de la Universidad. Pero Crespo, a diferencia de Linares
Alcántara, reprimió el movimiento anti-guzmancista con la cárcel y el destierro y cerró la
Universidad. Bajo los auspicios de su gobierno se preparó un movimiento nacional de
“Aclamación” para el retorno de Guzmán Blanco, a quien el Consejo Federal eligió
Presidente Constitucional para el período 1886-1888.
Guzmán Blanco ocupó de nuevo el mando hasta 1887, pero ese año se fue
definitivamente a Europa, dejando encargado del gobierno al General Hermógenes López,
a quien hizo elegir para que terminara su período.
Una vez retirado del gobierno, y entre 1887 y julio de 1889, concentró buscó resolver los
conflictos diplomáticos de Venezuela con Inglaterra por los límites de la colonia
guayanesa, planteando al Gobierno británico que la frontera se fijará en el río Esequibo.
En julio de 1889, después de un conflicto con el gobierno de Rojas Paúl, renuncia a sus
cargos diplomáticos.
Desligado de la política, se dedicó a escribir sus memorias (cuyo paradero se ignora) y
entre 1890 y 1896, publicó varios folletos sobre la cuestión de límites, especialmente los
de Guayana. En 1894 fueron publicados en París sus libros En Defensa de la Causa liberal y
Muerte del general Ezequiel Zamora. Sus últimos años transcurrieron en París, donde
murió el 28 de julio de 1899.
El 11 de febrero de 1876 Guzmán Blanco ordena el traslado de los restos de los próceres y
ciudadanos eminentes de Venezuela al Panteón Nacional, que el mismo había
reacondicionado.
Los restos de muy pocos presidentes venezolanos han podido regresar luego de haber
sido enterrados en el extranjero. En el caso de Simón Bolívar fueron traídos al país
precisamente por Guzmán Blanco; los de José Antonio Páez se salvaron de caer en la fosa
común de un cementerio neoyorkino gracias a las acciones de Hermógenes López y los de
Cipriano Castro fueron traídos y enterrados en Capacho por las gestiones de Marcos Pérez
Jiménez.
El 31 de Julio de 1899, el presidente Ignacio Andrade emitió el decreto por el cual los
restos del General Antonio Guzmán Blanco, debían ser trasladados a Caracas desde París,
para que tuvieran eterno descanso en unas de las tantas obras que había sembrado en el
país, pero esto no sucedió. Más tarde el General Manuel Antonio Matos, yerno de
Guzmán, quiso traerlo pero fue absorbido por la Revolución Restauradora en contra de
Cipriano Castro. Durante sus 27 años de mandato, Juan Vicente Gómez ignoró el asunto, al
igual que López Contreras. Este ultimo, según cuenta la historia, no quiso gestionar la
repatriación porque comparó el gobierno de Guzmán Blanco y el de Gómez y determinó
que ambos habían sido igual de dictadores.
De los presidentes democráticos, Carlos Andrés Pérez, Luis Herrera Camping y Jaime
Lusinchi estuvieron dispuestos a llevar a cabo la misión. Algunos aseguran que Campíns
estuvo a punto de hacerlo, pero en la historia de los restos de Guzmán Blanco abundan las
anécdotas. En 1981, por ejemplo, El Nacional publicó la noticia según la cual el Consejo
Municipal del Distrito Federal había aprobado un decreto en el que se disponía el traslado
de los restos del ex-presidente venezolano, de París a Caracas. En julio de 1985, otra
noticia alarmaba a la opinión pública venezolana, al parecer los restos de Guzmán Blanco
estaban a punto de ser enviados a una fosa común.
A continuación fue trasladado al salón Elíptico del Palacio Federal Legislativo al que
acudieron los ministros de Relaciones Exteriores, José Vicente Rangel; de Defensa, Raúl
Salazar; de Educación, Héctor Navarro y el Gobernador del Distrito Federal, Hernán
Grúber Odremán. El Historiador José Ramón Castellanos tuvo a su cargo elaborar y
efectuar el discurso de orden. Los cadetes de las diferentes escuelas de formación de
oficiales de las Fuerzas Armadas Nacionales permanecieron en guardia de honor durante
todo este día, mientras los restos de Antonio Guzmán Blanco se mantuvieron en capilla
ardiente.
Fortuna y corrupción
Dos cosas son innegables acerca de Guzmán Blanco, la primera dispuso de una muy grande
fortuna, con haciendas, hatos, inversiones, empresas y propiedades en toda Venezuela e
incluso varias de ellas en Francia y otros países europeos. La segunda, es que dicha fortuna
se forjó en gran medida gracias a variedad de movimientos ilícitos o cuestionables, todos
estos manejos realizados desde la presidencia de Venezuela.
Comisión millonaria
Igualmente Guzmán Blanco, varias veces durante el gobierno de Juan Crisóstomo Falcón,
acudió a Londres para extraer cuantiosas sumas monetarias de cuentas y fideicomisos
«encriptados» durante el gobierno Conservador, del que sólo Guzmán Blanco tenía
conocimiento, ello a causa de su relación con el ex-secretario de José Antonio Páez, Pedro
José Rojas, a quien conociera en Estados Unidos durante su período como diplomático allá,
el mismo período en el cual Páez estaba desterrado en dicho país.21 Rojas, le informó
acerca de la existencia de dichos fondos, hacia finales de la Guerra Federal, tras cuya
conclusión, Guzmán Blanco, inmediatamente investido con el cargo de Ministro
Plenipotenciario en Europa, se dirige a Londres para extraer los capitales y luego dirigirse a
París. Estos toques técnicos, se dieron dos o tres veces, durante el gobierno de Falcón y
cada una de ellas representaban millones moviéndose hacia las cuentas del consagrado
caudillo.
La inmensa cantidad de recursos obtenidos por Guzmán Blanco, fueron invertidos por él
mismo en numerosas inversiones y propiedades legítimas, contándose haciendas, hatos y
viñedos, la adquisición de empresas, la participación accionaria de Guzmán en muchas
otras compañías y la obtención de numerosas propiedades dentro y fuera del país. Todo
esto le permitió concentrar una vasta fortuna y de un poder económico sin precedentes. De
hecho, Guzmán Blanco llegó a poseer tantas tierras, solares, haciendas y hatos, que se decía
que era capaz de satisfacer un mercado internacional por su cuenta.25
Propiedades
Por otro lado, en el extranjero, su más valiosas posesiones, tendían a concentrarse en París,
donde a manera de inversiones, acciones y propiedades, disponía de una vasta fortuna bien
agrupada, y su residencia más valiosa, sería su Palacio de París, su esplendorosa
residencia, al estilo neoclásico, con todo tipo de lujos y digna de un auténtico noble
europeo.
En general Guzmán creó una fortuna, con base a los movimientos que hizo desde las altas
esferas del poder, convirtiéndose a sí mismo en uno de los hombres más ricos de
Venezuela, pero al mismo tiempo acentuó un mal que ha acometido desde entonces: la
corrupción.
Masón
En 1854, da un paso decisivo en su vida, cuando ingresa a las logias masónicas caraqueñas
Concordia y Esperanza, así como a la Sociedad de María, fue esta una institución en la que iría en
ascenso hasta alcanzar el encumbramiento, así como también el centro de origen de sus futuros
roces con la Iglesia católica debilitando su poder, al pasar al Estado funciones que
tradicionalmente eran realizadas por ésta, creando las instituciones del registro civil, la educación
pública, promovió la instauración del culto a los héroes de la guerra de independencia. Hoy
después de 200 años de independencia el «Ilustre Americano» sentó las bases civiles de lo que es
el país al introducir los tres poderes Legislativo, Ejecutivo y Judicial.
La herencia Guzmán-Blanco
Guzmán Blanco fue conocido por ser un hombre que cosechó una gran
fortuna, para algunos, gracias al tesoro nacional. No es secreto que viajó por
Europa y que en él se generó un gran amor por la Francia de su época. Para
que linaje trascendiera en el tiempo, unió sus apellidos y aunque sus
herederos fueron numerosos.
Casado con Ana Teresa Ibarra y Urbaneja logró procrear once hijos: Carlota,
Mercedes Luisa, Antonio Leocadio (homónimo de su padre), Bernardo
Antonio, Simón Antonio, Ana Teresa, Andrés Antonio, Diego Antonio,
Roberto Antonio, Vicente Antonio y otra Ana Teresa.
Su testamento
Aportes
Panteón Nacional
Como gobernante, Antonio Guzmán Blanco fue un hombre progresista y un gran estadista,
que logró posicionar a una Venezuela rural en el escenario internacional de su tiempo. Pero
también fue un gran luchador por la defensa de las fronteras nacionales. Durante su
mandato, inició negociaciones con el gobierno inglés para solucionar el problema limítrofe
con Guyana.
Otros homenajes
El Estado Guzmán Blanco fue una antigua entidad federal de Venezuela ubicado en la
región norte-central del país, que a lo largo de sus escasos 16 años de existencia
comprendió los territorios de los actuales estados de Aragua, Guárico, Miranda, Nueva
Esparta y Vargas. Bautizado en honor a Antonio Guzmán Blanco fue fundado en 1873 con
el simple cambio de nombre de la entonces provincia de Aragua (conformada en Estado
por medio de la constitución de 1864) y disuelto para resultar en otros estados en 1889.
El Teatro Guzmán Blanco: su construcción fue iniciada en 1876 por el arquitecto francés
Esteban Ricard y completada a partir de 1879 por el venezolano Jesús Muñoz Tébar.
Inaugurado por Guzmán Blanco en 1881 se ofreció una representación de la ópera Il
Trovatore de Giuseppe Verdi, a cargo de la Compañía de Ópera Italiana Fortunato Corvaia.
Su denominación actual es Teatro Municipal de Caracas Alfredo Sadel.
El Parque Guzmán Blanco: su construcción fue ordenada por el presidente Guzmán Blanco
a unos paisajistas franceses para crear un jardín botánico y paseo en la colina de El
Calvario. La obra fue inaugurada en 1883 con el nombre de Paseo Guzmán Blanco. Los
jardines fueron emplazados en grandes terrazas y fueron realizados por Luciano Urdaneta
y Eleazar Urdaneta, el paseo contaba además con una capilla y una estatua de Guzmán
Blanco, llamada popularmente "El Manganzón" que fue derribada luego que éste saliera
del poder. Su denominación actual es Paseo Ezequiel Zamora.
La Plaza Guzmán Blanco de Caracas localizada en la parroquia Coche del Municipio
Libertador al oeste del Distrito Metropolitano de Caracas.
La Avenida Guzmán Blanco localizada en la parroquia Coche del Municipio Libertador al
oeste del Distrito Metropolitano de Caracas.
La Avenida Guzmán Blanco, conocida como Cota 905, localizada en la parroquia El Paraíso
del Municipio Libertador al suroeste del Distrito Metropolitano de Caracas.
La Avenida Guzmán Blanco es una de las seis (6) vías que desembocan en la céntrica Plaza
Bolognesi ubicada en el Cercado de Lima y el Distrito de Breña, en la capital del Perú. Las
otras son las avenidas Brasil, Arica, Alfonso Ugarte, y 9 de Diciembre, y el jirón Paraguay.