UNIVERSIDAD NACIONAL DE PIURA

FACULTAD DE CIENCIAS
ESCUELA PROFESIONAL DE CIENCIAS BIOLÓGICAS

INFORME DE PRÁCTICA 01
TÍTULO:
Material extraño en muestras de heces y métodos de observación directa

ALUMNO:
Hidalgo Atoche, Marco Antonio
Núñez Rodríguez, Carlos Martín
Ruíz Polo, Archi Alejandro
Vílchez Correa, Luis Miguel.

DOCENTE:

Mcblgo. Jorge L. Bermejo Benites.

CURSO:

Parasitología

FECHA:

Viernes 22, Diciembre del 2017.

PIURA – PERU.
I. INTRODUCCIÓN

Los organismos, en la naturaleza, interactúan unos con otros, estableciéndose grados

de relacionamiento entre ellos. La supervivencia depende, en muchos casos, de la
forma, en que se encuentran relacionados. Desde el punto de vista de la microbiología,
las relaciones básicas establecidas son el parasitismo, el comensalismo y el
mutualismo (Canese & Canese, 2012).

Un parasito provoca o puede producir daño al hospedero, que siempre es de especie

diferente a la del parasito. Se considera parasito a todo ser vivo, animal o vegetal que
pasa una parte o la totalidad de su existencia en el interior o en el exterior de otros
seres vivos, animales o vegetales de diferente especie, a expensas del cual se nutren,
ocasionándole daño aparente o inaparente. Es importante mencionar que un parasito
puede vivir por un periodo como comensal, pero siempre tendrá la potencialidad
genética de producir daño; en cambio, un comensal nunca provoca daño (Werner,
2013).

La parasitosis deriva ancestralmente de seres de vida libre que se han adaptado en

épocas remotas a la vida parasitaria. Los parásitos intestinales experimentaron un
proceso de preadaptacion que les permitió adquirir en su medio habitual
características bioquímicas y morfológicas que les facilitaron sobrevivir en el nuevo
ambiente (Becerril, 2014).

A través de la evolución estos individuos de vida libre preadaptados al medio interno

del hospedero, han encontrado condiciones favorables para su desarrollo como
disponibilidad de alimento, microhábitat uniforme, ausencia de competidores y
depredadores, se fueron adaptando a la vida parasitaria (Becerril, 2014).

Los protozoos son microorganismos unicelulares eucariontes pertenecientes al reino

protista. Estos organismos carecen de pared celular rígida, son móviles, algunos con
metabolismo heterotrófico y otros autótrofos, se reproducen asexualmente por división
simple o múltiple o sexualmente y algunos alternas ambos ciclos reproductivos
(Pabón, 2014).

Las dimensiones de estos seres unicelulares (protozoos) fluctúan entre 2 y 3mm de

algunos esporozoos como Babesia spp. ha 80 mm de Balantidium coli (ciliado) y a 3
mm de Spirostomum spp. Su forma varía de acuerdo con la clase a la que pertenecen.
Las amebas son esféricas, los tripanosomas son alargados y algunos modifican su
forma dentro del hospedero que parasitan, los coccidios. Si bien la forma y tamaño de
los protozoos es variable, todos tienen estructuras comunes. Una es el citoplasma,
rodeado de una membrana plasmática; dentro del citoplasma hay organoides. Otra es
el núcleo, rodeado de una membrana nuclear que tiene gran importancia en la
reproducción celular. La membrana plasmática está formada por proteínas rodeadas
de un estrato lipídico y delimita la célula; a través de ella se realizan las funciones de
movilización, excreción y nutrición (Werner, 2013).

Los objetivos de la práctica fueron diferenciar objetos similares a parásitos y la

identificación y observación de quistes de protozoarios parásitos.
II. MATERIAL Y MÉTODOS

Se obtuvieron muestras fecales de niños del centro poblado Mala vida, la muestra se
colocó en un recipiente o contenedor de boca ancha y con tapa rosca. La cantidad de
muestra va de 3 - 6 g.

La muestra debe cumplir ciertas condiciones como no estar mezclado con orina, que
no exista el antecedente de haber ingerido bario u otros productos de contraste, y
llevar la muestra al laboratorio en corto tiempo (de 2 - 4 horas de su obtención).

Se consignó la siguiente información del paciente: Nombre, edad, sexo, ocupación,

síntomas y signos, fecha de inicio de síntomas y diagnóstico presuntivo. El
procesamiento de la muestra se realizó lo antes posible y en un lugar apropiado (que
no le llegue la luz directa). Las muestras diarreicas y las que contienen sangre, deben
examinarse en forma macroscópica y microscópica apenas lleguen al laboratorio.
Para el examen microscópico se agrega 1-2 gotas de suero fisiológico en el centro de
una lámina, como ayuda de un aplicador se agrega 1-2 mg de materia fecal, se
emulsiona y se cubre con una laminilla. Aquí los quistes se verán de forma natural.

Para muestras ya fijadas o conservadas se utiliza lugol (KOH al 10%) en vez de suero
fisiológico, de esta manera se pueden observar estructuras internas como los núcleos
y vacuolas. En cualquiera de los dos tipos de muestra (fresca o conservada), se
observó al microscopio con los objetivos de 10x o 40x, y se recorre la lámina siguiendo
un sentido unidireccional, de derecha a izquierda, o de arriba a abajo.

Los reactivos y colorantes empleados en el procesamiento deben estar en envases

adecuados, mantenerse fuera de los rayos del sol o luz, etiquetados (con nombre y
fecha de preparación).

Se observó, identificó y graficó los quistes de diferentes protozoarios parásitos. Así

mismo se reconoció al microscopio objetos o estructuras parecidos a parásitos.
IV. DISCUSIÓN

Elementos normales de origen vegetal, en su mayoría, los detritos o residuos

alimenticios de la materia fecal provienen de restos vegetales que pueden conducir a
errores o falsos positivos en los exámenes coprológicos, al ser confundidos con
huevos y larvas de helmintos y con quistes de protozoarios. Entre estos elementos se
encuentran las féculas, la celulosa no digerible y los residuos de las frutas (Kaminsky.
1996).
Se ha mencionado al agua de bebida en la transmisión de la infección; el quiste es
viable por un periodo de dos meses en agua fría y es resistente en agua potable.
(Baruch- 2013), las muestras obtenidas para la observación de estos quistes se
tomaron de un centro poblado no muy desarrollado que no cuenta con lo necesario
para un buen tratamiento del agua potable esto podría ser una causa de encontrar
estos paracitos en las muestras obtenidas de esta población.
El género Entamoeba comprende las amebas que tienen núcleo vesicular, con
cariosoma central y cromatina periférica, y forman quistes con 1 a 8 núcleos Se divide
en cuatro grupos: histolytica, coli, bovis y gingivalis (Lindsay, Dubey & Blagburn,
1997).
Entamoeba coli es la ameba intestinal no patógena (no requiere tratamiento) que,
posiblemente, menos dificultades de reconocimiento morfológico presenta, sobre todo
bajo la forma de quiste maduro. Lindsay et al (1997) afirman que los quistes miden de
15-22 µm. Sin embrago, Atías (1998) comenta que los quiste de E. coli miden de 10 a
35 µm, coincidiendo con Gomilla, Toledo & Sanchis (2011), pero estos últimos resaltan
que el tamaño habitual es de 15 a 25 µm.
En su mayor parte son esféricos, pero pueden ser ovales y la pared quística es muy
refráctil (Gomilla, Toledo & Sanchis, 2011), esta forma esférica del quiste fue
apreciada durante la observación en el microscopio.
Los quistes poseen hasta 8 núcleos y hay presencia de cromidias (Atías, 1998),
Lindsay et al (1997) también comentan que los quistes de E. coli en estado maduro
poseen 8 núcleos en el que se observan cuerpos cromatoides en forma de bastón con
extremos aguzados y una vacuola de glucógeno. Esto también es confirmado por
Toledo & Sanchis (2011) añadiendo que en ocasiones muy poco frecuentes los
quistes hipernucleados, con 16 o más núcleos. El quiste de E. coli observado en la
práctica presentaba 6 núcleos, por lo que se trataba de un quiste que no ha alcanzado
su estado maduro; Así mismo se apreció los cuerpos cromatoides de un color más
claro y difuso que el de los núcleos.
El quiste de Giardia lamblia tiene forma ovoide, mide de 7-14 um de largo por 4-6 um
de ancho, presentando 2 núcleos en los quistes jóvenes, que luego se convierten en
4 al producirse la maduración del quiste. Se observan dentro del quiste restos de
flagelos (Canese & Canese, 2012), en la observación al microscopio
desafortunadamente no se pudo observar restos de flagelo dentro de él solo se
pudieron observar algunos núcleos.
La forma quística es la que persiste en el medio ambiente y a través de los alimentos
y en el agua contaminada ingerida por el hospedador (Canese & Canese, 2012).Las
personas infectadas con estos paracitos posiblemente tienen malos hábitos de
higiene, por ejemplo no lavan los alimentos antes de consumirlos.
Cuando los quistes son ingeridos por el hombre, sus envolturas se disuelven debido
a la acción de los jugos digestivos, dejando en libertad a los trofozoitos, los cuales se
ubican en el duodeno y yeyuno, y se multiplican activamente. El desenquistamiento
ocurre por las condiciones fisiológicas en el estómago e intestino del hombre y
mamíferos. El proceso de desenquistamiento es favorecido por la exposición a la alta
acidez gástrica, seguida por la brusca elevación del pH del intestino delgado (Baruch,
2013). Según lo dicho por el autor se puede saber cuan resistentes son estos
organismos que incluso sobreviven a la alta acidez gástrica producida por el
estómago.
Balamtidium coli es un protozoo ciliado que comúnmente infecta a primates, cobayas
y cerdos, y tiene una distribución mundial. Es el único parasito de la familia de los
balantidiidae patógeno para humanos. Pertenece al grupo de los ciliados y es el único
parasito ciliado del hombre.
Es capaz de formar una estructura de resistencia al medio ambiente, es decir, un
quiste, el cual es esférico, con citoplasma y núcleos. (Cabello,R. 2007), coincidiendo
con la observación de B. coli, donde se pudo ver su gran tamaño y la presencia de
cilios en casi toda su membrana citoplasmática, se pudo también observar distintos
organelos como el núcleo, pero otras estructuras eran difíciles de diferenciar ya que
tenía en su citoplasma un color verde oscuro, no se pudo observar el macronúcleo ni
el micronúcleo.

V. CONCLUSIONES

- Se observó objetos parecidos a parásitos como la fibra de algodón.

- Se observó quistes de protozoarios de las especies Entamoeba coli, Giardia lamblia,
Balantidium coli.
- Se diferenció características morfológicas en los quistes de las diferentes especies.
- El quiste de E. coli solo poseía 6 núcleos.
-No se evidenció el axostilo en el quiste de G. lamblia.
VI. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Atías A. (1998). Parasitología Médica. Mediterráneo, Chile.

Baruch, W. (2013). Parasitología Humana. McGraw-Hill Interamericana Editores.

México.

Becerril, M. (2014). Parasitología Médica. Cuarta Edición. McGraw-Hill/Interamericana

Editores, S.A. de C.V. México D.F.

Cabello, R. (2007). Microbiología y Parasitología Humana. 3° edición. Editorial Médica

Panamericana: Mexico.

Canese, A. & Canese A. (2012). Manual de Microbiología y Parasitología Médica.

Editorial: Derechos Reservados. Séptima Edición. Paraguay.

Gomilla, B., Toledo, R. & Sanchis J.B. (2011). Amebas intestinales no patógenas: una
visión clinicoanalítica. Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica. Enferm
Infecc Microbiol Clin. 2011; 29(Supl 3):20-28.

Kaminsky, R. (1996). Manual de Parasitología. 2 Edición. Editorial Rossany Auceda:

Tegucigalpa, Honduras.

Lindsay, D. S, Dubey, J. P. & Blagburn, B.L. (1997). Biology of Isospora spp. From
Humans, Nonhuman Primates, and Domestic Animals. Clinical Microbiology Reviews
10 (1): 19-34.

Pabón, H. (2014). Consulta Práctica, Parasitología Clínica. Primera Edición. Medbook

Editorial Médica. Venezuela.

Saredi, N. (2002). Manual práctico de parasitología médica.1a. Ed. Laboratorios

Andrómaco Buenos Aires. 112 pp.

Werner, L. (2013). Parasitología Humana. Primera Edición. McGraw-Hill

Interamericana Editores, S.A. México D.F.