El Juguete Preferido de Pablo
El Juguete Preferido de Pablo
El Juguete Preferido de Pablo
Cuentos originales
Autor:
Irene Hernández
Edades:
Todas las edades
Valores:
generosidad, obediencia, compartir
Pablo era un niño al que le encantaba jugar con
sus juguetes. Tenía un montón de ellos: coches,
trenes eléctricos, muñecos, peluches…pero tenía
uno que era su preferido.
- Pablo, tienes que aprender a ser más ordenado. ¡Cualquier día vas a perder la cabeza! – le
regañaba su madre
Pero Pablo creía que ser ordenado y recoger la habitación todos los días era un rollo así que
siempre se escabullía.
Una tarde, Pablo fue a una fiesta de cumpleaños que celebraba un amigo suyo en el parque
y se llevó algunos de sus juguetes, incluyendo a Roc. Fue muy divertido porque todos los
niños compartieron sus juguetes.
Cuando el cumpleaños acabó, Pablo volvió a casa y antes de irse a la cama su madre le
dijo:
- Pablo, no olvides recoger tu habitación y ordenar todos tus juguetes.
Pero Pablo estaba tan cansado que no hizo caso a su madre y se metió en la cama.
Al día siguiente, cuando Pablo volvió del colegio y se puso a jugar se llevó una sorpresa.
Buscando en el desorden se dio cuenta de que su robot Roc no estaba por ningún sitio.
- ¡Mamá!, ¡Mamá!, ¿Has visto a Roc?¡No lo encuentro por ningún lado!
- Pablo, ¿Otra vez te ha vuelto a pasar?, ¡Si fueras más ordenado no perderías tus cosas! –
le regañaba su madre
Pablo y su mamá buscaron a Roc por todos los rincones de su habitación pero no aparecía.
Entonces, su madre le preguntó:
- Pero Pablo, ¿Cuándo fue la última vez que jugaste con él?
Pablo se dio cuenta de que la tarde anterior se había llevado a Roc a la fiesta y se preocupó
mucho al pensar que podía haberlo olvidado allí.
Su madre le acompañó al parque para buscarlo, pero Roc no estaba por ningún sitio.
Pablo se puso muy triste. Roc era su juguete preferido y para él era como su mejor amigo.
Tenía que encontrarlo como fuera, pero Roc estaba perdido.
- ¡Te dije que tenías que ser más ordenado y cuidadoso con tus cosas! Probablemente a Roc
lo haya encontrado otro niño o puede que lo hayan tirado a la basura – le dijo su madre.
Pablo se acercó y cuando lo vio se dio cuenta de que era su juguete. Le faltaba el mismo
brazo y tenía el mismo color gastado.
- ¡Hola! Creo que ese robot es mío. Lo perdí el otro día en el parque y es mi juguete
favorito– le dijo Pablo al niño
Al ver que Pablo estaba tan triste el niño se lo devolvió para que pudiera seguir jugando
con él.
Y así fue. Pablo ordenó todos los días su habitación y colocó todos sus juguetes en su sitio
y de esta forma nunca más perdió a Roc ni tampoco ninguna de sus cosas.