Flora de Los Afloramientos de Marmoles y
Flora de Los Afloramientos de Marmoles y
Flora de Los Afloramientos de Marmoles y
2011
KURTZIANA
1
Departamento Biología Agrícola, Facultad de Agronomía y Veterinaria, UNRC, Ruta Nac. 36, Km. 601, C. P.
X5804BYA, Río Cuarto, Córdoba, Argentina.
2
Secretaría de Minería, Provincia de Córdoba, Hipólito Yrigoyen 401, 5000, Córdoba, Argentina.
3
Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, UNC. Av. Vélez Sársfield 1611, 5016, Córdoba, Argentina.
4
Instituto Multidisciplinario de Biología Vegetal (CONICET-UNC), 5000. Córdoba, Argentina
5
Facultad de Ciencias Químicas, UNC. Haya de la Torre y M. Allende s.n., Córdoba, Argentina
*
Autor para correspondencia: juanjocantero@gmail.com
Resumen
Cantero, J. J., J. A. Sfragulla, C. Núñez, A. A. Bonalumi, J. Mulko, A. Amuchastegui, F. Chiarini, G. E.
Barboza & L. Ariza Espinar. 2011. Flora de los afloramientos de mármoles y serpentinitas de las sierras
de Córdoba (Argentina). Kurtziana 36 (2): 11-45.
Los afloramientos rocosos constituyen hábitats importantes desde el punto de vista de conservación de la
biodiversidad. En este trabajo se provee de un catálogo de las especies de plantas vasculares que crecen
en los afloramientos cálcicos y dolomíticos (mármoles) y serpentinitas de la Sierra de Córdoba, se describe
la variación composicional de su flora y se explora su relación litológico-geoquímica sobre la distribución
de los grupos florísticos detectados. Treinta y uno (31) afloramientos fueron relevados en un área que se
extendió en unos 280 km de latitud y 120 km de longitud (30° 42’ a 33° 5’ Lat. Sur y 64° 20’ a 65° 20’
Long. Oeste) y desde los 500 m.s.m hasta los 2000 m.s.m. El área promedio relevada en cada afloramiento
fue de aproximadamente 2725 m2 en donde se realizó el inventario de todas las especies de plantas
vasculares presentes, su colección y el muestreo litológico para la evaluación posterior de la geoquímica
de las rocas. Se registraron 404 especies distribuidas en 67 familias y 255 géneros. Se mencionan 6 citas
nuevas para la provincia. La endemoflora de los 31 afloramientos comprende 88 especies. La riqueza
promedio de especies de los afloramientos fue de 68 y la diversidad promedio de H = 4,14. El total de
especies medicinales relevadas en los afloramientos fue de 212. Las hemicriptófitas (52%), caméfitas
(17 %), fanerófitas (16%) y geófitas (9 %) fueron las formas de vida predominantes. La composición
florística a nivel regional, variable a lo largo del gradiente geográfico -y climático-, se sobre impuso a la
variación local ambiental (geoquímica, altitud) entre los afloramientos. Se identificó un número mínimo
de sitios a conservar que incluyen la máxima biodiversidad a través de los datos disponibles de riqueza,
diversidad, número de especies endémicas, y rarezas.
Palabras clave: afloramientos rocosos, mármoles, serpentinitas, flora.
12 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
Abstract
Cantero, J. J., J. A. Sfragulla, C. Núñez, A. A. Bonalumi, J. Mulko, A. Amuchastegui, F. Chiarini, G. E.
Barboza & L. Ariza Espinar. 2011. Flora of marble and serpentinite outcrops of the Sierras de Córdoba
(Argentina). Kurtziana 36 (2): 11-45.
Rock outcrops are important habitats for biodiversity conservation. This paper provides a catalog of
species of vascular plants that grow on limestone (marble) and serpentinites of the Sierra de Córdoba,
describing the compositional variation of its flora and exploring the lithological-geochemical control on
the distribution of the floristic groups. Thirty-one (31) outcrops were surveyed in an area that extended
about 280 km in latitude and 120 km in length (30 ° 42 ’33 ° 5' Lat. South 64 ° 20 ’65 ° 20' Long. West)
and from 500 masl to 2000 masl. The average sampling area in each outcrop was approximately 2725 m²
where the inventory of all vascular plant species and the lithological sampling for subsequent evaluation of
the rock geochemistry were performed. There were 404 species distributed in 67 families and 255 genera.
Six new records for Córdoba province are provided. The endemoflora of all studied outcrops comprises
88 species. The average species richness of the outcrop was 68 and the average diversity H = 4.14. The
total of medicinal species in the outcrops was 212. The hemicryptophytes (52%), chamaephytes (17%),
phanerophytes (16%) and geophytes (9%) were the dominant life form. The floristic composition at the
regional level, variable along the geographic gradient (and climate), overshadows local environmental
variation (geochemistry, altitude) between the outcrops. Using available data richness, diversity, number
of endemic species and rarity we could identify a minimum set of otcrops that should be included in
conservation plans in both the provincial and national level.
al., 2008). Sin embargo, el estudio científico y Funes & Cabido, 1995). Sin embargo, no hay
sistemático de las relaciones entre la vegetación antecedentes de estudios florísticos realizados
y los tipos subyacentes de rocas datan del 1900 en afloramientos de mármoles cálcicos (C),
(Kruckeberg, 2002). mármoles dolomíticos (D) y serpentinitas (S)
Los factores determinantes de la en nuestro país.
composición florística de las comunidades Las Sierras de Córdoba se componen de
rupícolas varían de acuerdo con la escala varios cordones meridianos que se extienden
considerada, regional y local (Harrisson et desde los 29º hasta los 33º 30´ de latitud sur
al., 2006), y en la mayoría de las situaciones (aproximadamente 500 km), separados por
representan islas de comunidades xéricas dentro valles longitudinales que mantienen la misma
de una matriz de vegetación mesofítica (Jacobi dirección (Gordillo & Lencinas, 1979). Están
et al., 2007). Los límites geográficos de las conformadas por cuatro cordones mayores (de
comunidades están condicionados por el clima oeste a este Sierras de Guasapampa, Pocho y
que define unidades regionales de vegetación Altautina; Sierra Grande y de Comechingones;
(Ortiz & Rodríguez Oubiña, 1993). En la Sierra Chica y de las Peñas; Elevación
escala local, los factores activos en los hábitats Pampeana). Desde el punto de vista geológico,
rocosos se relacionan con: (1) características de estas sierras están formadas en su mayor parte
la roca donde crece, tal como las propiedades y por rocas metamórficas de alto grado y en menor
composición química ; (2) patrones de erosión proporción por rocas de grado medio a bajo
y fracturación -que a su vez están relacionadas y cuerpos intrusivos. Las rocas metamórficas
con la composición- (rocas calcáreas, cuarcitas, son en su mayor parte gneises y migmatitas
granitos, etc.) y condiciones ambientales locales; de edad Cámbrica inferior (520–540 Ma, Sims
(3) variaciones topográficas y microclimáticas; et al., 1998). En menor proporción afloran
y (4) contexto florístico regional, dinámica mármoles cálcicos y dolomíticos, anfibolitas
sucesional, perturbaciones antrópicas como y fajas discontinuas de rocas serpentiníticas.
fuego y ganadería, paleoclima e historia Estas últimas se agrupan en dos fajas, oriental
(Porembski et al., 1994; Escudero, 1996; Larson y occidental (Kraemer et al., 1995). La faja
et al., 2000; Seine et al., 2000; Burke, 2002a, b; oriental está ubicada al este del ambiente serrano
Wiser & Buxton, 2008, 2009). (Sierras Chicas), mientras que la faja occidental
En diferentes países se han realizado se ubica en el sector centro occidental de las
numerosos estudios florísticos en distintos sierras (Sierras Grandes y Comechingones). En
tipos de afloramientos, en especial en dolomías el lapso Mioceno-Plioceno, en la región centro
(Medina Cazorla et al., 2005; Mota et al., 2008); oeste de las sierras se produjo un magmatismo
calizas (Fernández Areces et al., 1983; Morat compuesto por vulcanitas y rocas piroclásticas
et al., 2001); granitos (Burbanck & Platt, 1964; (Complejo Volcánico de Pocho) y asociados
Wiser et al., 1996) y serpentinitas (Safford a este magmatismo se depositaron calcáreos
et al., 2005; Grace et al., 2007). La ecología travertínicos (Olsacher, 1960).
y fitosociología de la vegetación rupícola ha En las Sierras de Córdoba se reconocen
recibido escasa atención en Sudamérica (Gutte, dos tipos de yacencias de rocas carbonáticas
1986; Galán de Mera et al., 2003; Scarano, (Sfragulla et al., 1999). El grupo más importante,
2007) y en Argentina los estudios realizados en cuanto a volumen, está constituido por
no abarcan la totalidad de los ambientes. Así mármoles cálcicos y dolomíticos, originados por
lo revelan trabajos en las Sierras de Tandil metamorfismo regional de rocas carbonáticas
(Frangi, 1975), en la precordillera de Mendoza de origen químico, que afloran asociados
a baja altitud (Martínez Carretero, 1994), en a otras rocas del basamento metamórfico,
la cordillera de Neuquén (Gandullo & Faggi, especialmente gneises, anatexitas, anfibolitas
2006), en el flanco oriental del Cordón del Plata y en algunos casos a serpentinitas. Un grupo
en Mendoza (Méndez, 2010) o en afloramientos de menor importancia areal son las calizas
de granito en Córdoba (Cabido et al., 1990; sedimentarias, que reconocen dos orígenes
14 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
distintos; los travertinos, de origen sedimentario vez en nuestro país un interés por las especies
químico relacionado a fenómenos subvolcánicos, endémicas y amenazadas (PlanEAr, 2010) y las
y los calcretes, cuyo origen estaría relacionado respuestas a estos interrogantes son importantes
a procesos químicos de origen freático y que para las futuras decisiones de conservación y
en muchos casos han sido clasificados como manejo de estas entidades.
travertinos.
La flora vascular de la provincia de Córdoba Materiales y Métodos
está integrada por unas 1929 especies (Zuloaga
et al., 2008). La vegetación de esta provincia ha Área de Es tudio
sido estudiada en diferentes ambientes y escalas
espaciales (Cabido, 1985; Cabido et al., 1989, Tomando a las Sierras de Córdoba en su conjunto,
1990, 1998; Acosta et al., 1989; Cantero et al., y siguiendo el criterio propuesto por D’Aloia (1959)
2001; Giorgis et al., 2011), pero la vegetación se delimitaron tres grandes lineamientos regionales
con orientación submeridional: Cordón Oriental,
rupícola ha sido sólo analizada en afloramientos
Cordón Central y Cordón Occidental en los cuales
graníticos de las Sierras Grandes de Córdoba se localizaron 31 afloramientos de interés, entre
(Funes & Cabido, 1995). mármoles y serpentinitas (Figura 1).
La singular flora y vegetación de los El Cordón Oriental de mármoles comprende
afloramientos carbonáticos de Córdoba aún no ambos flancos de las Sierras Chicas extendiéndose
han sido estudiadas. Relevamientos preliminares desde Ascochinga por el norte hasta Las Peñas
han mostrado la presencia de especies de por el sur (afloramientos: Candonga, Malagueño,
gran valor medicinal (Hedeoma multiflorum Bosque Alegre, Buena Esperanza, San Agustín y
Benth., Thymophylla pentachaeta (DC.) Small Los Cóndores). El Cordón Central abarca la Sierra
Grande desde las inmediaciones de Cruz del Eje hasta
var. belenidium (DC.) Strother) y ornamental
Achiras (afloramientos: Las Lajas, Quilpo, La Fronda,
(Trichocline reptans (Wedd.) Hieron.) que están Valle Hermoso, Los Azulejos, Iguazú, El Saucesito,
actualmente amenazadas por la rareza en su Corral de Carnero, El Pantano, Los Cienegueros, La
distribución o por la cosecha a la que se someten Higuera, Cuchi Yaco, La Sierrita, Piedra Sonadora,
por sus usos (Barboza et al., 2006). Estos son Cerro Azul, Cañada de Álvarez y Achiras), mientras
ejemplos de taxones y también de los sitios que el Cordón Occidental abarca las Sierras de
donde crecen, que reclaman urgentes medidas Guasapampa, Pocho y Altautina (afloramientos:
para su conservación. Para ello es necesario Ojo de Agua, Altautina, Rumi Huasi, La Playa y
primero disponer de información básica sobre Mesa La Argentina, estos dos últimos de travertino).
Las serpentinitas estudiadas pertenecen a la faja
su flora, la vegetación y las relaciones entre
ultrabásica occidental de Kraemer et al., (1995) y se
la variación fitosociológica y los factores relevaron los afloramientos 12 de Noviembre, Tigre
ambientales. Muerto y Árbol Seco.
Los objetivos de este trabajo son: 1)Proveer El área de estudio seleccionada se extendió en
de un catálogo de las especies de plantas unos 280 km de latitud y 120 km de longitud (30°
vasculares de los afloramientos de mármoles 42’ a 33° 5’ Lat. Sur y 64° 20’ a 65° 20’ Long.
cálcicos (C), mármoles dolomíticos (D) y Oeste) y desde los 500 m.s.m. hasta los 2000 m.s.m.
serpentinitas (S) de la Sierra de Córdoba y 2) comprendiendo los departamentos de Calamuchita,
Explorar el control geográfico y litológico- Cruz del Eje, Punilla, Rio Cuarto, Minas, San Alberto,
Pocho y Santa María. Las precipitaciones, a lo largo
geoquímico sobre la composición florística
de ese gradiente de latitud y altitud, varían desde los
de los afloramientos. En orden a entender 400 mm en el extremo más occidental hasta los 800
mejor la vegetación de estos afloramientos nos mm en el extremo más oriental (Bianchi & Cravero,
preguntamos: 1) ¿la composición florística a 2010). Los valores térmicos medios del mes de enero
nivel regional es uniforme en estos afloramientos oscilan entre los 16°- 30°C en el sur hasta los 18° –
o varía? 2) ¿el gradiente geográfico -y climático- 32°C en el extremo norte del área. Las temperaturas
a nivel regional se sobreimpone a la variación medias del mes de julio van desde los 2°C hasta los
local ambiental (geoquímica, altitud) entre 16°C en el sur y desde 4°C y hasta 18°C en el norte.
afloramientos? Actualmente existe por primera Las temperaturas mínimas absolutas oscilan entre
los -10,5°C a 45°C en el extremo norte y -7,6°C a
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 15
Fig. 1. Mapa geológico de las Sierras de Córdoba y ubicación de los afloramientos muestreados.
16 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
43°C en el sur (Bianchi & Cravero, 2010; INTA, y sus provincias limítrofes y finalmente endémica
2011). Actualmente, la vegetación que rodea los nacional la que tiene una amplia distribución en
afloramientos y que también aporta sus entidades a Argentina.
los mismos, corresponde al Bosque Serrano, Palmar, Para las especies identificadas se consideró sus
Matorral Serrano y Pastizales y Bosquecillos de formas de vida (Raunkiaer, 1934). La distribución
Altura (Luti et al., 1979) integrados a la unidad regional de los corotipos fue determinada según sus
fitogeografica del Chaco Serrano (Cabrera, 1976) orígenes (Cabido et al., 1998; Zuloaga et al., 1994;
y también con el Bosque Chaqueño Oriental en los Zuloaga & Morrone, 1999a, b; Zuloaga et al., 2008).
contactos con los sectores norte y oeste del área de Para corroborar la actualización de los nombres y las
estudio. abreviaturas de los autores de las especies se uso el
Catálogo de las Plantas Vasculares del Cono Sur en
Muestreo su versión online (www.darwin.edu.ar). Todos los
ejemplares coleccionados fueron depositados en los
Para caracterizar el quimismo de los mármoles herbarios del Museo Botánico de Córdoba (CORD)
y travertinos, se empleó la clasificación propuesta y de la UNRC (RIOC). Para la determinación
por Sfragulla et al. (1999) quienes denominan como del tamaño de los tres tipos de pool (Pärtel et al.
calcáreos con tendencia calcítica a aquellos que tienen 2006): el «pool» regional (provincia de Córdoba),
entre 30%-52% de OCa y entre 0% y 11% de OMg, el «pool» local (sierras de Córdoba) y el «pool»
y calcáreos con tendencia dolomítica los que poseen actual (afloramientos de mármol y serpentinitas),
entre 30%-35% de OCa y entre 13%-21% de OMg. se analizaron listas florísticas y distribuciones
Por otro lado, las serpentinitas son rocas que poseen publicadas en diferentes trabajos realizados en el
altos tenores de OMg, habiéndose determinado para centro de Argentina (Sayago, 1969; Cabido, 1985;
las serpentinitas de Córdoba valores entre 27, 8 y 34, Cantero & Bianco, 1987; Acosta et al., 1989; Cabido
5% de OMg (Sfragulla et al., 2009). et al., 1989, 1990; Funes & Cabido, 1995; Cantero et
En los afloramientos rocosos en general y en los al., 2001; Cantero et al., 2008; Giorgis et al., 2011).
pocos conocidos desde el punto de vista botánico Para la identificación de las especies medicinales de
como los de este estudio, las unidades florístico- cada afloramiento se emplearon las bases de datos de
ecológicas concretas reconocibles a campo son Barboza et al. (2006, 2010).
difíciles de detectar (Heywood, 1953). Por ello y en Como criterios complementarios para la selección
función del objetivo de este trabajo, cada afloramiento de áreas a proteger, para cada afloramiento se
de interés, planar, mayor de 1 hectárea y sin ningún determinó su riqueza, diversidad y el grado de
signo de laboreo minero fue considerado como una estenocoria o rareza en continuo (Mota et al., 2003).
unidad muestral (Sadler & Bradfield, 2010). La rareza en continuo de cada afloramiento es el
El trabajo de colección se extendió desde octubre resultado de sumar la rareza de cada uno de los
de 2009 a marzo de 2010 y fue llevado a cabo por un taxones presentes en ella. La rareza de cada taxón
equipo interdisciplinario de geólogos, botánicos y se obtiene calculando el inverso del número de
ecólogos. Como la forma, extensión y accesibilidad afloramientos donde aparece el taxón. Así, cuanto
fue variable entre los afloramientos, no fue posible mayor sea el número de especies raras (de escasa
elegir un área mínima estándar para el relevamiento distribución) presentes en un afloramiento, mayor será
florístico. Por ello, para cada relevamiento el área la rareza en continuo de éste.
investigada se fue incrementando hasta que ninguna En cada sitio de relevamiento de la vegetación
especie adicional podía ser agregada luego de 15 se realizó también el muestreo litológico para la
minutos de búsqueda o bien hasta cubrir en forma evaluación posterior de la geoquímica de las rocas.
completa el afloramiento. El área de trabajo intensivo Para ello se constituyó una muestra compuesta,
promedio fue de aproximadamente 2725 m2 (Tabla cuidando que la muestra obtenida fuera representativa
3) donde se realizó el inventario de todas las especies de la roca aflorante. La totalidad de la muestra
de plantas vasculares presentes y su colección. En original fue triturada, mezclada, sometida a cuarteo
este estudio se consideraron solamente las especies (cuarteador Jones) y la fracción de ensayo reducida
nativas. Para la evaluación de la especies amenazadas a polvo (partículas < a 150 micras) mediante
se empleo la base de datos online PlanEAR (2011). molino Siebtechnik con mortero de ágata. Las
Las especies con uso medicinal fueron referenciadas concentraciones de Calcio (Ca), Magnesio (Mg),
según la base de datos de Barboza et al. (2009). Se Hierro (Fe) y Sodio (Na) fueron determinadas por
consideró como especie endémica local a la que crece espectrofotometría de absorción atómica en un equipo
solamente en la provincia de Cordoba, endémica Varian 220 con flamas de Oxido Nitroso-Acetileno y
regional a la que crece en la provincia de Cordoba
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 17
Aire-Acetileno. En las serpentinitas se determinaron Huasi; Ojo, Ojo de Agua; Piedra, Piedra Sonadora;
óxidos mayoritarios (SiO2, Al2O3, Fe2O3, MgO, CaO, Valle, Valle Hermoso; Lajas, Las Lajas; Quilpo,
TiO2, Na2O, K2O y P2O5) mediante Espectrofotometría Quilpo; Fronda, La Fronda; Candonga, Candonga;
de Emisión por Plasma de Argón (ICP). Agustín, San Agustín; Condores, Los Cóndores; Alta,
Las variables espaciales consideradas fueron Buena Esperanza; Elco, Corral de Carnero; Altautin,
latitud, longitud y altitud, utilizando un posicionador Altautina; Achiras, Achiras; Playa, La Playa; Mesa,
global satelital (GPS) Garmin eTrex Vista Cx. Se La Argentina; Cieneg, Los Cienegueros; Cuchi, Cuchi
utilizó el software Garmin Map Source Versión Yaco; Malag, Malagueño; Noviem, 12 de Noviembre;
6.16.2 (2010) para realizar la descarga de los puntos Tigre, Tigre Muerto; Arbol, Árbol Seco.
marcados en el área de estudio y con formato de
coordenadas geográficas UTM (WGS 84) para Resultados
poder analizarlas como variables espaciales. Para la
selección de las variables ambientales relevantes para La flora vascular nativa de los afloramientos
los análisis se siguió la propuesta de Palmer (2011) de mármoles y serpentinitas está representada
evaluando su estructura de correlación a través del
por 404 especies distribuidas en 67 familias y
PCA. Finalmente se seleccionaron los porcentajes
de óxido de calcio y óxido de magnesio de las rocas 255 géneros (Tabla 1). Ocho familias reúnen
como las variables ambientales de interés. el 64 % de las especies nativas: Asteraceae
(16,95 %), Poaceae (16,92 %), Fabaceae
Análisis de l os datos (7,75%), Euphorbiaceae (6,54 %), Cactaceae
(5,33 %), Malvaceae (3,87 %), Solanaceae
Para evaluar la longitud del gradiente ambiental, (3,63 %) y Verbenaceae (3,63 %). Los géneros
se ordenaron los relevamientos con los datos de más importantes son: Croton (10 especies),
presencia/ausencia de las especies a través de un Baccharis (9 especies), Euphorbia, Solanum
Análisis de Correspondencias forzado libre de
(8 especies), Paspalum, Nasella, Opuntia y
tendencias (DCA) (ter Braak, 1995). La significancia
Aristida (6 especies). Las Monocotyledoneae
de las diferencias florísticas entre los tres grupos
litológicos definidos por su quimismo fue evaluada y Dicotyledoneae reúnen el 96,36 % de los
a través de Pruebas de Combinaciones Múltiples taxones.
(MRPP) y el carácter indicador de los taxones para La endemoflora comprende 88 especies de
cada grupo fue explorado con el Análisis de Especies las cuales 10 son especies endémicas locales, 32
Indicadoras (ISA). Para poder establecer prioridades son endémicas regionales y 46 son endémicas
en la conservación de los afloramientos se los agrupó
nacionales. Cuatro familias reúnen el 61 %
según el número total de especies endémicas y
amenazadas de cada uno de ellos y además, por sus
de las especies endémicas: Asteraceae (17%),
valores de rareza en continuo, riqueza y diversidad. Cactaceae (17%), Poaceae (16%) y Fabaceae
Para ello, se empleó un Análisis de Agrupamientos (11 %).
usando la distancia euclideana y al método de Ward Las especies endémicas locales son:
para la constitución de los grupos. Las diferencias en Alternanthera pumila O. Stützer, Apurimacia
la composición de las diferentes formas de vida de las dolichocarpa (Griseb.) Burkart, Astragalus
tres litolologías fue evaluada a través de una Prueba
parodii I. M. Johnst., Gymnocalycium
de comparaciones múltiples de medias (Prueba de
Tuckey). amerhauseri H. Till, G. andreae (Boed.)
Backeb., G. capillense (Schick) Hosseus, G.
Las relaciones entre la vegetación y las variables
ambientales fueron exploradas mediante el Análisis
mostii (Gürke) Britton & Rose, G. quehlianum
de Redundancia (RDA). Todos los cálculos fueron (F. Haage ex Quehl) Vaupel ex Hosseus,
realizados usando PC-ORD vs. 5 (Mc Cune & G.robustum R. Kiesling, O. Ferrari & Metzing e
Mefford, 1999). En las figuras y en el texto, los Isostigma cordobense Cabrera.
nombres de los afloramientos fueron abreviados sin Entre las especies endémicas regionales
acentos de la siguiente manera: Cañada, Cañada que crecen en los afloramientos se destacan:
de Álvarez; Cerro, Cerro Azul; Bosque, Bosque
Croton lanatus Lam. var. lorentzii (Müll. Arg.)
Alegre; Azulejos, Los Azulejos; Iguazu, Iguazú;
Sauce, El Saucecito; Pantano, El Pantano; Condor, P.E. Berry, Dalea elegans Gillies ex Hook. &
La Sierrita; Higuera, La Higuera; Rueda, Rumi Arn. var. elegans, Echinopsis aurea Britton
18 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
& Rose var. aurea, Gymnocalycium bruchii de Salsacate), 31º19’48’’ S, 65º2’5’’ W, 1041
(Speg.) Hosseus var. bruchii, G. monvillei m, 17-XII-2009, Cantero et al. 6076.
(Lem.) Britton & Rose ssp. monvillei, Habenaria
hexaptera Lindl., Helenium argentinum Ariza, 2. Nothoscordum gracile (Dryand. ex Aiton)
Hyaloseris cinerea (Griseb.) Griseb. var. Stearn var. gracile
tomentella Griseb., Ipomoea stuckertii O’Donell,
Junellia bisulcata (Hayek) Moldenke var. Material examinado
campestris (Griseb.) Botta, Tephrocactus Argentina. Prov. Córdoba. Dpto. Cruz del Eje:
articulatus (Pfeiff.) Backeb. var. articulatus, Los Cienegueros, 31º17’41’’ S, 64º49’45’’
Trichocereus lamprochlorus (Lem.) Britton & W, 1805 m, XII-2009, Cantero et al. 5588;
Rose y Trichocline plicata Hook. & Arn., entre Dpto: Cruz del Eje: El Cóndor, 31º7’55’’ S,
otras. 64º46’4 7’’ W, 1599 m, XII-2009, Cantero
Las especies endémicas de Argentina con et al. 5614.
mayor frecuencia en los mármoles dolomíticos
son: Zexmenia buphtalmiflora (Lorentz) Ariza, 3. Pavonia cymbalaria A. St.-Hil. & Naudin
Borreria eryngioides Cham. & Schltdl. var.
ostenii (Standl.) E.L. Cabral & Bacigalupo, Material examinado
Nassella sanluisensis (Speg.) Barkworth,
Galactia glaucophylla Harms, Sisyrinchium Argentina. Prov. Córdoba. Dpto. Pocho: Cuchi
unguiculatum Griseb.; en los mármoles cálcicos Yaco (cerca de Salsacate), 31º19’48’’ S,
y travertinos Zexmenia buphtalmiflora (Lorentz) 65º2’5’’ W, 1041 m, 17-XII-2009, Cantero
Ariza, Borreria eryngioides Cham. & Schltdl. et al. 6091.
var. ostenii (Standl.) E.L. Cabral & Bacigalupo,
Nassella sanluisensis (Speg.) Barkworth, 4. Mitracarpus megapotamicus (Spreng.)
Galactia glaucophylla Harms, Junellia Kuntze
hookeriana (Covas & Schnack) N. O’Leary
& P. Peralta y en las serpentinitas Condalia Material examinado
microphylla Cav., Echinopsis aurea Britton & Argentina. Prov. Córdoba. Dpto. Calamuchita: 12
Rose var. aurea, Galactia glaucophylla Harms, de Noviembre, 32º-26’48’’ S, 64º37’26’’W,
Parodia submammulosa (Lem.) R. Kiesling ssp. 792 m, 26-XI-2009, Cantero et al. 5358;
submammulosa, Ayenia cordobensis (Hieron.) Cerro Azul, 32º03’01’’ S, 64º-42’04’’ W, 922
Hieron. m, XI-2009, Cantero et al. 5461 & 5462;
De las 1929 especies que integran el «pool» San Agustín (Cerro La Cruz), 31º58’15’’ S,
regional: 1053 especies integran el «pool» local 65º25’15’’ W, 689 m, 22-XII-2009, Cantero
y 406 el «pool» actual, de las cuales 151 son et al. 6109.- Dpto. Cruz del Eje: Iguazú,
rupícolas. 31º3’51’’ S, 64º47’39’’ W, 1233 m, 1-XII-
Se registran seis citas nuevas para la flora de 2009, Cantero et al. 5552.- Dpto. Pocho:
la provincia, que se documentan a continuación. Cuchi Yaco (cerca de Salsacate), 31º19’48’’
S, 65º2’5’’ W, 1041 m, 17-XII-2009, Cantero
1. Poa ligularis Nees ex Steud. var. resinulosa et al. 6080.- Dpto. Punilla: Valle Hermoso,
(Nees ex Steud.) Fernández Pepi & Giussani 31º7’16’’ S, 64º30’37’’W, 1009 m, 10/17-XII-
2009, Cantero et al. 5730 & 6030.- Dpto. Río
Material examinado Cuarto: Achiras (Monte Guazú), 33º2’36’’ S,
64º59’25’’ W, 1185 m, 08-III-2010, Cantero
Argentina. Prov. Córdoba. Dpto. Calamuchita: et al. 6293.- Dpto. Santa María: Bosque Alegre,
San Agustín (Cerro La Cruz), 31º58’15’’ S, 31º34’55’’ S, 64º34’57’’ W, 1019 m, XI-2009,
65º25’15’’ W, 689 m, 22-XII-2009, Cantero Cantero 5512.
et al. 6149.- Dpto. Pocho: Cuchi Yaco (cerca
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 19
Entre las especies medicinales endémicas Se hallaron diferencias significativas entre los
regionales más frecuentes se destacaron diferentes tipos de litologías según el análisis de
Trichocline plicata Hook. & Arn., Flourensia MRPP (Multi-Response Permutation Procedures):
oolepis S.F. Blake, Dalea elegans Gillies A = 0,009 y P < 0,04). El valor promedio
ex Hook. & Arn. var. elegans, Sphaeralcea de la riqueza de especies en las serpentinitas
cordobensis Krapov., Baccharis flabellata fue mayor (S=74,3) que en los mármoles
Hook. & Arn., Echinopsis aurea Britton & Rose dolomíticos (S=70,5) y que en los mármoles
var. aurea y entre las que tuvieron los valores cálcicos (S=64,8). El mismo patrón ocurrió
mas bajos de frecuencia (raras) se encontraban: para la diversidad (H= 4,26; 4,18 y 4,08 para las
Proustia cuneifolia D. Don var. mendocina serpentinitas, mármoles dolomíticos y mármoles
(Phil.) Ariza, Solanum incisum Griseb. var. cálcicos, respectivamente). Esta diferenciación
incisum, Eupatorium artemisiifolium Griseb., permitió el posterior análisis de las especies
Gymnopogon spicatus (Spreng.) Kuntze y indicadoras de cada litología.
Tephrocactus articulatus (Pfeiff.) Backeb. var. Las hemicriptófitas (52%), caméfitas (17
articulatus. %), fanerófitas (16%) y geófitas (9 %) son las
Otras especies medicinales endémicas formas de vida predominantes (Figura 3, Tabla
nacionales frecuentes en los afloramientos 3). Este espectro de formas de vida es revelador
fueron: Junellia hookeriana (Covas & de las características xéricas de estos hábitats.
Schnack) N. O’Leary & P. Peralta, Condalia En la Tabla 3 se detallan las diferencias en la
microphylla Cav., Hybanthus serratus (Phil.) composición de las diferentes formas de vida
Hassl., Buddleja cordobensis Griseb. y Lippia de las tres yacencias litológicas a través de
junelliana (Moldenke) Tronc. Entre las más una prueba de comparaciones múltiples de
raras se destacaron: Minthostachys verticillata medias (Prueba de Tuckey). La composición
(Griseb.) Epling, Ophryosporus charua en terófitas diferenció a las serpentinitas de los
(Griseb.) Hieron., Polygala stenophylla A. Gray, otros afloramientos. Los mármoles cálcicos y
Trichocline sinuata (D. Don) Cabrera, Acaena mármoles dolomíticos no tuvieron diferencias
myriophylla Lindl. y Moya spinosa Griseb. significativas entre sí respecto a la composición
de hemicriptófitas, fanerófitas y terófitas; los
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 21
Fig. 4. Análisis de Redundancia (RDA), triplot con (1) afloramientos (ref. idem Tabla 2), y (2) variables am-
bientales: longitud (Lon), latitud (Lat), altitud (Alt), óxido de calcio (CaO), óxido de magnesio (MgO), relación
Ca:Mg. Eigenvalue eje 1, 0,1; eje 2, 0,07; correlación (r) especies-ambiente: eje 1, 0,91; eje 2, 0,93; 26 % de la
variación florística y 53,3 % de la relación vegetación-ambiente explicada por los dos primeros ejes. Prueba de
Monte Carlo significativa (P < 0,01). Suma de los valores propios canónicos, 0,30. Las especies (indicadoras)
se corresponden con las de las Tablas 7, 8 y 9: Crotsubp, Croton subpannosus; Galalati, Galactia latisiliqua;
Macrpetr, Mandevilla petraea; Porteruc, Portulaca eruca; Sorgpell, Sorghastrum pellitum; Cliosela, Cliococca
selaginoides; Crotorbi, Croton orbignyanus; Eriopil, Erioneuron pilosum; Hedemult, Hedeoma multiflorum;
Helearge, Helenium argentinum; Monndict, Monnina dictyocarpa; Physmend, Physaria mendocina; Tricplic,
Trichocline plicata; Bonaseri, Bonamia sericea; Linuscop, Linum scoparium; Polyhier, Polygala hieronymi;
Poroobsc, Porophyllum obscurum; Thelmega, Thelesperma megapotamicum.
a) Ca
b) Mg
Fig. 5. Variables geoquímicas (CaO, MgO y relación Ca/Mg) en el plano del ordenamiento del RDA parcial,
a) CaO, b) MgO, c) Ca:Mg. Los centros de los círculos están localizados en las posiciones de los respectivos
afloramientos en el espacio del ordenamiento. El tamaño de los círculos se corresponde con el valor de la va-
riable observada para cada sitio en particular.
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 25
c) Ca:Mg
zonas de contacto de los afloramientos con las especies de la matriz circundante debido
distintas unidades fitogeográficas circundantes a una combinación de factores tales como
(Méndez, 2010), siendo importante el corotipo baja retención hídrica, escasez de nutrientes,
chaqueño occidental en los afloramientos dificultades para la retención y germinación
situados en el extremo norte (ej. Rueda, Playa), de semillas, exposición a vientos y aislamiento
el corotipo austral brasilero en los afloramientos relativo a áreas vecinas (Larson et al., 2000). Por
más australes (ej. Achiras, Cañada) y los ello, los afloramientos rocosos frecuentemente
corotipos patagónico, andino y submontano en soportan una vegetación muy especializada
los afloramientos localizados en las posiciones (Sarthou & Villiers, 1998; Booth & Larson,
altitudinales más elevadas (ej. Pantano, Cieneg). 1999; Burke, 2002a). Tales condiciones tan
La endemoflora presente en estas superficies extremas y definidas pueden promover la
geomorfológicas es una de las singularidades endemicidad (Gómez Campo, 1985; Médail
más interesantes (Gomez Campo, 1985). & Verlaque, 1987; Baskin & Baskin, 1988;
Las 88 especies endémicas reflejan la gran Anderson et al., 1999; Seine et al., 2000). Los
importancia que tienen estos afloramientos en sitios estudiados son aparentemente importantes
la conservación de la biodiversidad vegetal. filtros ambientales, que resguardan a manera
Así por ejemplo, de las especies endémicas de refugio (Gram et al., 2004), a un grupo muy
que crecen solamente en Córdoba, el 31% se importante de plantas endémicas.
hallaron en estos paisajes geomorfológicos. La Al igual que afloramientos de otros
importancia de los afloramientos rocosos como continentes (Burke, 2002a,b; Wiser &
reservorios de endemismos ha sido reconocida Buxton, 2008), los mármoles y serpentinitas
para diferentes tipologías de geoquímica de centroargentinos no son verdaderamente
rocas (Porembski et al., 1994; Anderson et al., insulares ya que intercambian especies con la
1999; Seine et al., 2000). matriz circundante, tanto a lo largo del tiempo
Las superficies rocosas constituyen una evolutivo como del tiempo ecológico. Poseen,
barrera ecológica para la mayoría de las sin embargo, especies muy singulares por su
26 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
Fig. 6. Análisis de Redundancia parcial (partial-RDA), triplot con (1) afloramientos (idem Tabla 2); (2) va-
riables ambientales: óxido de calcio (CaO), óxido de magnesio (MgO) y (3) especies indicadoras (ídem Tablas
4,5 y 6). Eigenvalue eje 1, 0,04; eje 2, 0,03; correlación (r) especies-ambiente: eje 1, 0,94; eje 2, 0,84; 16 % de
la variación florística y 65,5 % de la relación vegetación-ambiente explicada por los dos primeros ejes. Prueba
de Monte Carlo significativa (P < 0,01). Suma de los eigenvalues canónicos, 0,07. Las especies (indicadoras) se
corresponden con las de las Tablas 4, 5 y 6: Crotsubp, Croton subpannosus; Galalati, Galactia latisiliqua; Ma-
crpetr, Mandevilla petraea; Porteruc, Portulaca eruca; Sorgpell, Sorghastrum pellitum; Cliosela, Cliococca
selaginoides; Crotorbi, Croton orbignyanus; Eriopil, Erioneuron pilosum; Hedemult, Hedeoma multiflorum;
Helearge, Helenium argentinum; Monndict, Monnina dictyocarpa; Physmend, Physaria mendocina; Tricplic,
Trichocline plicata; Bonaseri, Bonamia sericea; Linuscop, Linum scoparium; Polyhier, Polygala hieronymi;
Poroobsc, Porophyllum obscurum; Thelmega, Thelesperma megapotamicum.
fidelidad, un hecho común en yacencias de estas Núñez et al., 2002; Petryna et al., 2002; Cantero
características (Stevanovic et al., 2003; Safford et al., 2003; Goleniowski et al., 2006). Otros
et al., 2005; Selvi, 2007; Baskin & Baskin, estudios confirmatorios deberán corroborar estas
2007). Cuatro especies endémicas no se han observaciones exploratorias.
encontrado creciendo en la matriz circundante, En el gradiente geográfico los afloramientos
solo en los afloramientos: Physaria mendocina, estudiados tuvieron diferencias florísticas muy
Bonamia sericea, Astragalus parodii e Isostigma marcadas, con extremos de riqueza y diversidad
cordobense (González et al., 1998, 1999; muy contrastantes, desde 140 especies y H= 4,34
Cantero et al., 1999, 2001; González et al., 2002; (Cañada) hasta 27 especies y un H de 3,29 en
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 27
Lajas. Es probable que las diferencias en esta riqueza y diversidad. Este tipo de afloramientos
escala regional estén asociadas a las diferencias por sus singularidades químicas y atributos
en los regímenes climáticos y al contacto que florísticos es otro de los candidatos a incluirse
tienen los afloramientos con diferentes unidades en programas futuros de conservación.
fitogeográficas, Chaco Serrano, Chaco Árido, En la escala regional, el gradiente geográfico
Espinal y Pastizal Pampeano. Patrones similares y el gradiente altitudinal se asociaron
de vinculación entre la flora de afloramientos estrechamente con el patrón florístico de los 31
rocosos y unidades fitogeográficas circundantes afloramientos estudiados. La altitud incorpora
ha sido reconocidos en otras provincias los gradientes directos de precipitación (que se
(Mendez, 2010) y países (Rivas Martinez, 1960; incrementa con la altitud) y temperatura (que
Bagella & Urbani, 2006). decrece con la altitud). Al igual que lo hallado
Uno de los temas centrales de la biología de en otros estudios regionales (Cabido et al., 1990)
la conservación es la pérdida de biodiversidad y diferentes países (Ashton & Webb, 1977;
(Saetersdal et al., 1993). Con el incremento Maycock & Fahselt, 1992; Wiser et al., 1996;
en la fragmentación y destrucción del Wiser & Buxton, 2009) la altitud es un factor
Chaco Serrano (Cagnolo et al., 2006), es discriminante importante de la composición
necesario poder identificar los elementos de la de la vegetación de los paisajes rocosos. En
biodiversidad que están en riesgo para poder la escala local, la composición química de los
establecer en forma adecuada prioridades de mármoles y serpentinitas fue significativamente
conservación e implementar en forma exitosa las diferente y se asoció estrechamente con la
correspondientes estrategias de manejo (Sadler variación composicional de la flora de cada una
& Bradfield, 2010). La discusión sobre preservar ellas, de manera similar a lo hallado en otros
un amplio territorio con continuidad territorial estudios (Mota et al., 2008; Pope et al., 2010).
o varias localidades con superficie reducida ha La variación ambiental a nivel regional, variable
sido largamente debatida (Mota et al., 2003). a lo largo del gradiente geográfico (y climático),
En este trabajo, con los datos disponibles se sobre impuso y enmascaró la variación
de riqueza, diversidad, número de especies local ambiental (geoquímica, altitud) entre los
endémicas, y rareza en continuo se ha podido afloramientos. De esta manera, las variaciones
identificar un conjunto mínimo de lugares que florísticas encontradas entre los afloramientos
incluyen la máxima biodiversidad. Así los no pueden atribuirse exclusivamente a las
afloramientos con prioridad de conservación son: características químicas del sustrato rocoso. En
Valle (27 especies endémicas y 4,1 de rareza en serpentinitas de California, Grace et al. (2007)
continuo), Cañada (23 y 4,5), Cuchi (22 y 2,7), pudieron establecer asociaciones estrechas
Cerro (20 y 3,4), Agustin (20 y 3,4), Malag (20 entre la variación de la vegetación y las
y 3,5), Noviem (19 y 3,5), Quilpo (19 y 3,2) y precipitaciones en la escala regional y hallaron
Mesa (18 y 1,9). Al mismo tiempo, el grupo patrones más complejos con la relación Mg/Ca
seleccionado tiene entre 11 y 19 especies bajo para las escalas locales.
amenaza, que son el rango de valores más altos Solamente un estudio detallado de la
hallados, por lo que se refuerza la propuesta. flora que crece en estos afloramientos y
En los afloramientos estudiados el 75% de particularmente un análisis de la distribución
las formas de vida presentes se corresponden de sus especies en otros substratos del territorio
típicamente con los espectros hallados en los estudiado, podrán revelar si verdaderamente
ambientes xéricos (hemicriptófitas, 52% y existe en el centro de Argentina una verdadera
caméfitas, 17%) que no hacen más que reflejar las flora dolomítica, calcícola y serpentinícola, o
singularidades ambientales de este tipo de hábitat si se trata solo de especies tolerantes al calcio
(Phillips, 1982; Selvi, 2007; Mota et al., 2008). Los y magnesio que pueden crecer indistintamente
afloramientos de serpentinitas (Noviem, Tigre y tanto en la matriz circundante como en los
Arbol) tuvieron la mayor cantidad de especies mismos afloramientos rocosos.
indicadoras y además los valores mayores de
28 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
Tabla 1
Distribución de las familias, géneros y especies en los grandes grupos de Tracheophyta
de los afloramientos de mármoles y serpentinitas de la provincia de Córdoba.
Tabla 2
Endemismos locales, regionales y nacionales, especies amenazadas, rareza en continuo, riqueza (S), diversidad (H), óxido de
calcio (CaO), óxido de magnesio (MgO), altitud, superficie de muestreo del afloramiento (Sup.), litología (Lit.:D, mármoles
dolomíticos; C, mármoles cálcicos; S, serpentinitas) y corotipos (CH, Oeste Chaqueño; MB, Montañas Bajas; P, Patagónico; A,
Andino y AB, Austrobrasilero) de los afloramientos de mármoles y serpentinitas de la provincia de Córdoba.
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 29
Tabla 3
Composición de formas de vida de los afloramientos de mármoles y serpentinitas de la
provincia de Córdoba. Prueba de comparaciones múltiples de medias (Prueba de Tuckey).
Tabla 4
Análisis de Especies Indicadoras (McCune & Medford, 1999) de los afloramientos de serpentinitas de la Sierra de Córdoba.
I.V., valor del indicador (% de indicación perfecta de cada especie para cada grupo en base a la combinación de las abundan-
cias relativas y frecuencias relativas); P, proporción de pruebas aleatorizadas con el valor indicador igual o superior al valor
indicador observado; Frecuencia, frecuencia relativa, porcentaje de cada especie en cada grupo definido por su composición
química.
Tabla 5
Análisis de Especies Indicadoras (McCune & Medford, 1999) de los afloramientos de mármoles cálcicos de la Sierra de
Córdoba. I.V., valor del indicador (% de indicación perfecta de cada especie para cada grupo en base a la combinación de
las abundancias relativas y frecuencias relativas); P, proporción de pruebas aleatorizadas con el valor indicador igual o supe-
rior al valor indicador observado; Frecuencia, frecuencia relativa, porcentaje de cada especie en cada grupo definido por su
composición química.
30 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
Tabla 6
Análisis de Especies Indicadoras (McCune & Medford, 1999) de los afloramientos de mármoles dolomíticos de la Sierra
de Córdoba. I.V., valor del indicador (% de indicación perfecta de cada especie para cada grupo en base a la combinación
de las abundancias relativas y frecuencias relativas); P, proporción de pruebas aleatorizadas con el valor indicador igual o
superior al valor indicador observado; Frecuencia, frecuencia relativa, porcentaje de cada especie en cada grupo definido por
su composición química.
Tabla 7
Coeficientes de correlación de Pearson de las variables espaciales y geoquímicas
con los dos primeros ejes del ordenamiento generado por RDA (Figura 4).
Bartlett, R. M., U. Matthes Sears & D.W. Larson. Caiafa, A. & A. Da Silva. 2007. Structural analysis of
1990. Organization of the Niagara Escarpment cliff the vegetation on a highland granitic rock outcrop in
community. II. Characterization of the physical Southeast Brazil. Revista Brasil. Bot. 30 (4): 657-664.
environment. Canad.J. Bot. 68: 1931-1941. Cantero, J. J. & C. A. Bianco. 1987. El límite austral de
Baskin, J.M. & C.C.Baskin. 1988. Endemism in rock outcrop Polylepis australis Bitter (tabaquillo) en la República
plant communities of unglaciated eastern United States: Argentina. Parodiana 5(1): 65-71.
an evaluation of the roles of the edaphic, genetic and Cantero, J. J., M. Partel & M. Zobel. 1999. Is species
light factors. J. Biogeogr. 15: 829–840. richness dependent on the neighbourhood? An analysis
Benzing, D.H. 2000. Bromeliaceae: profile of an adaptive of the community patterns in mountain grasslands of
radiation. Cambridge University Press, Cambridge. central Argentina. Oikos 87 (2): 346-355.
Bianchi, A. & S. Cravero. 2010. INTA. Programa Nacional Cantero, J. J., M. Cabido, C. Nuñez, L. Petryna, M. Zak &
Ecoregiones. República Argentina. Atlas Climático M. Zobel. 2001. Clasificación de los pastizales de suelos
Digital. sobre rocas metamórficas de las Sierras de Córdoba,
Booth, B. D. & D. W. Larson. 1999. Impact of language, Argentina. Kurtziana 29 (1): 27-77.
history, and choice of system on the study of assembly Cantero, J. J., J. Liira, J. M Cisneros, J. C González, C.
rules, en E. Weiher & P. Keddy (eds.). Ecological O. Núñez, L.Petryna, C., Cholaky & M. Zobel. 2003.
assembly rules: Perspectives, advances, retreats, pp. Species richness, alien species and plant traits in central
206-229. Cambridge University Press, Cambridge. Argentine mountain grasslands. J.Veget.Sci.14: 129-
Brooks, R. R. & C. C.Radford. 1978. Nickel accumulation 136.
by European species of the genus Alyssum. Proc. R. Soc. Cantero, J., C. Nuñez, C. & M. Amuchástegui. 2008.
Lond., Ser. B, Biol. 200: 217–224. Distribución de la endemoflora en los pastizales de la
Burbanck, M. P. & R. B. Platt. 1964. Granite outcrop sierra de Comechingones. XXIII Reunión Argentina de
comunities of the Piedmont Plateau in Georgia. Ecology Ecología. 195p.
45: 292-306. D’Aloia, M. 1959. Las calizas y calcáreos de Córdoba.
Burke, A. 2002a. Island-matrix relationships in nama Karoo Dirección Provincial de Minería. Córdoba.
inselberg landscapes Part I: Do inselbergs provide a Davies, P. H. 1951. Cliff vegetation in the eastern
refuge for matrix species? Pl. Ecol. 160: 79-90. Mediterranean. J. Ecol. 39: 63-72.
Burke, A. 2002b. Island-matrix relationships in nama Karoo de Lange P.J., D. A. Norton, P. B. Heenan, S. P. Courtney,
inselberg landscapes Part II: Are some inselbergs better B. P. J. Molloy, C. C. Ogle, B. D. Rance, P. N. Johnson
sources than others? Pl. Ecol. 158: 41-48. & R. Hitchmough. 2004. Threatened and uncommon
Burke, A., K. J. Esler, E. Pienaar & P. Barnard. 2003. Species plants of New Zealand. New Zealand J. Bot. 42: 45–76.
richness and floristic relationships between mesas and Debrot, A. O. & J. A. Freitas. 1993. A comparison of
their surroundings in southern African Nama Karoo. ungrazed and livestock-grazed rock vegetations in
Diversity and Distributions 9: 43–53. Curaçao. Biotropica 25: 270-280.
Cabido, M. 1985. Las comunidades vegetales de la Pampa Escudero, A. 1996. Community patterns on exposed cliffs
de Achala. Sierras de Córdoba, Argentina. Documents in a Mediterranean calcareous mountain. Vegetatio 125:
phytosociologiques 9: 431-445 99-110.
Cabido, M., A. Acosta & S. Díaz. 1989. Estudios Escudero, A., S. Pajarón & R. Gavihin. 1994. Saxicolous
fitosociológicos en los Pastizales de las Sierras de communities in the sierra del Moncayo (Spain): a
Córdoba, Argentina. Las comunidades de la Pampa de classificatory study. Coenoses 9: 15-24.
San Luis. Phytocoenologia 17(4): 569-592. Esgario, C. P., A. P. Fontana & A. G. Silva. 2009. A flora
Cabido, M., A. Acosta & S. Díaz. 1990. The vascular flora vascular sobre rocha no Alto Misterioso, uma área
and vegetation of granitic outcrops in the upper Córdoba prioritária para a conservação da Mata Atlântica no
mountains. Argentina. Phytocoenologia 19: 267-281. Espírito Santo, Sudeste do Brasil Natureza on line 7
Cabido, M., G. Funes, E. Pucheta, F. Vendramini & S. Díaz. (2): 80-91. [on line] http://www.naturezaonline.com.br
1998. A chorological analysis of the mountains of Fernández Areces, M., P. Penas & T. Díaz. 1983.
central Argentina. Is all what we call Sierra Chaco really Aportaciones al conocimiento de las comunidades
Chaco?. Contribution to the study of flora and vegetation vegetales de los paredones rocosos calizos de la
of Chaco. XII. Candollea 53: 321-331. Cordillera Cantábrica. Anales Jard. Bot. Madrid 40:
Cabrera, A. 1976. Regiones fitogeográficas argentinas. 2 213-219.
ed. Enciclopedia Argentina de Agricultura y Jardinería. Frangi, J. 1975. Sinopsis de las comunidades vegetales y
ACME, Buenos Aires. el medio de las Sierras de Tandil (Provincia de Buenos
Cagnolo, L., Cabido, M. & G. Valladares. 2006. Plant species Aires). Bol. Soc. Argent. Bot. 16: 293-319.
richness in the Chaco Serrano Woodland from central Fuente, V. de la. 1985. Vegetación orófila del occidente de la
Argentina: Ecological traits and habitat fragmentation provincia de Guadalajara (España) Lazaroa 8: 123-219.
effects. Biol. Conserv. 132: 510-519.
32 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
Fulls, E. R., G.J. Bredenkamp & N. van Rooyen. 1993. Low Gutte, P. 1986. Beitrag zur kenntnis central-peruanischer
thicket communities of rock outcrops in the northern Planzengeselleschaften. III. Pflanzengesellschaften der
Orange Free State. South African J. Bot. 59: 360-369. subalpine Stufe. Feddes Repert. 97: 319-371.
Funes, G. & M. Cabido. 1995. Variabilidad local y regional Harrison, S., K. Davies, H. Safford & J. Viers. 2006. Beta
de la vegetación rupícola de las Sierras grandes de diversity and the scale-dependence of the productivity
Córdoba. Kurtziana 24:173-188. relationships: a test in the Californian serpentine flora.
Galan de Mera, A., C. Cáceres & A. González. 2003. La J. Ecol.94: 110-117.
vegetación de la alta montaña andina del sur del Perú. Heywood, V. H. 1953. E1 concepto de asociación en las
Acta Bot. Malacitana 28: 121-147. comunidades rupícolas. Anales Inst. Bot. Cavanilles
Gandullo, R. & A.M. Faggi. 2006. La vegetación rupícola 11: 463-481.
del Parque Provincial Copahue, Neuquén, Argentina. Houle, G. & D. L. Phillips. 1989. Seasonal variation and
Kurtziana 32: 13-24. annual fluctuation in granite outcrop communities.
Giorgis, M. A., A. M. Cingolani, F. Chiarini, J. Chiapella, Vegetatio 80: 25-35.
G. Barboza, L. Ariza Espinar, R. Morero, D. Gurvich, Hruska, K. 1987. Syntaxonomic study of the Italian wall
P. Tecco, R. Subils & M. Cabido. 2011. Composición vegetation. Vegetatio 73: 13-20.
florística del Bosque Chaqueño Serrano de la provincia Hunter J. T. 2003. Persistence on inselbergs: the role of
de Córdoba, Argentina. Kurtziana 36: 9-43. obligate seeders and resprouters. J. Biogeogr. 30:
Giulietti, A. M., J. Pirani & R. M. Harley. 1997. Espinhaço 497–510.
range region, eastern Brazil, en: S. D. Davis, V. H. INTA. 2011. Instituto de Clima y Aguas. http://climayagua.
Heywood, O. Herrera-MacBryde, J. Villa-Lobos & A. inta.gob.ar/ (accedido en 12 de Agosto de 2011).
C. Hamilton (eds.). Centres of Plant Diversity: A Guide
and Strategy for their Conservation, pp. 397-404. IUCN Jacobi, C. M., F. Carmo, R. Vincent & J. R. Stehmann. 2007.
Publication Unity, v.3, Cambridge. Plant communities on ironstone outcrops: a diverse
and endangered Brazilian ecosystem. Biodiversity and
Goleniowski, M. E., G. Bongiovanni, L.Palacio, C.O. Núñez Conservation 16: 2185-2200.
& J. J. Cantero. 2006. Medicinal plants from the «Sierra
de Comenchingones», Argentina. J. Ethnopharmacol. John, E. A. & M. R. T. Dale. 1990. Environmental
107: 342-341. correlates of species distributions in a saxicolous lichen
community. J. Veget.Sci.1: 385-392.
Gómez Campo, C. (ed.).1985. Plant conservation in the
Mediterranean Area. Geobotany 7. W. Junk. Dordrecht, Kraemer, P. E., M. P. Escayola & R. D. Martino. 1995.
Boston, Lancaster. Hipótesis sobre la evolución tectónica neoproterozoica
de las Sierras Pampeanas de Córdoba (30° 40’ – 32°
González, J. G., J. J. Cantero & J. M. Cisneros. 1998. 40’), Argentina. Rev. Asoc. Geol. Argentina 50: 47-59.
Caracterización de la estructura de los paisajes serranos
del centro de Argentina. Revista Univ. Nac. Río Cuarto Kruckeberg, A. R. 2002. Geology and Plant Life. University
18 (1): 25-37. of Washington Press, USA.
González, J. G., J. J.Cantero, C. O.Núñez, C. Cholaky, J. Kupper, H., E. Lombi, F. Zhao, G. Wieshammer & S. P.
M. Cisneros & L. Petryna. 1999. Cartografía de los Mcgrath. 2001. Cellular compartimentation of nickel
ecogrupos vegetales en los paisajes serranos del centro in the hypperaccumulators Alyssum lesbiacum, Alyssum
sur de Córdoba, Argentina. Revista Univ. Nac. Río bertolonii and Thlaspi goesingense. J. Exp. Bot. 52:
Cuarto 19: 5-17. 2291–2300.
González, J. G., T. Robinson, J. M. Cisneros & J. J. Cantero. Larson, D., U. Matthes & P. E. Kelly. 2000. Cliff ecology:
2002. Utilización de los SIG en la gestión de los pattern and process in cliff ecosystems. Cambridge
recursos naturales en una cuenca serrana del centro Studies in Ecology. Cambridge University Press,
argentino. Revista Univ. Nac. Río Cuarto 22 (1-2): Cambridge.
27-35. Losa, J., M. Mayor, J. Andres & F. Navarro. 1975.
Gordillo, C. & A. Lencinas. 1979. Sierras Pampeanas de Comunidades rupícolas en el Bierzo (León, España).
Córdoba y San Luis. II Simp.Geol. Reg. Arg. Acad. Nac. Anales Inst. Bot. Cavanilles 32: 215-234.
Cienc. Córdoba 1: 577-650. Luti, R., M. A. Bertrán de Solís, M. F. Galera, N. Müller de
Grace, J., H. Savord & S. Harrison. 2007. Large-scale causes Ferreira, M. Berzal, M. Nores, M. A. Herrera & J. C.
of variation in the serpentine vegetation of California. Barrera. 1979. Vegetación, en J. Vázquez, R. Miatello
Pl. Soil 293: 121–132. & M. Roque (eds.), Geografía Física de la provincia de
Córdoba, pp. 297-368. Ed. Boldt, Buenos Aires.
Gram, W., E. Borer, K. Cottingham, E. Seabloom, V.
Boucher, L. Goldwasser, F. Micheli, B. Kendall, & Lüttge, U. 1997. Physiological ecology of tropical plants.
R. Burton. 2004. Distribution of plants in a California Springer-Verlag, Berlin.
serpentine grassland: are rocky hummocks spatial Martínez Carretero, E. 1994. La vegetación saxícola
refuges for native species? Pl. Ecol. 172: 159–171. de la precordillera de Mendoza. VI Congreso
Guaglianone, R. 2009. Alliaceae, en R. Kiesling (dir.), Latinoamericano de Botánica, Mar del Plata, Argentina.
Flora de San Juan 4: 367-376. Editorial Fundación Maycock P. F. & D. Fahselt. 1992. Vegetation of stressed
Universidad Nacional de San Juan. calcareous screes and slopes in Sverdrup Pass,
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 33
Ellesmere Island, Canada. Canad. J. Bot. 70: 2359– Palmer, M. 2011. Ordination methods for ecologist. http://
2377. ordination.okstate.edu/reduce.htm visitado 12 de Agosto
McCune, B. & M. Mefford. 1999. Multivariate Analysis of de 2011.
Ecological Data, Version 4.0. MjM Software. Gleneden Parmentier, I., T. Stévart & O. Hardy. 2005. The inselberg
Beach, Oregon. flora of Atlantic Central Africa. I. Determinants of
Médail, F. & R. Verlaque. 1987. Ecological characteristics species Assemblages. J. Biogeogr. 32: 685–696.
and rarity of endemic plants from southeast France and Petryna, L., M. Moora, C. O. Núñez, J. J. Cantero &
Corsica: Implication for biodiversity conservation. Biol. M. Zobel. 2002. Are invaders disturbance-limited?.
Conserv. 80: 269-281. Conservation of mountain grasslands in central
Medina Cazorla, J., F. Perez Garcia, J. Garrido-Becerra, F. Argentina. Appl. Veget. Sci.5:195-202.
Martinez-Hernandez, A. Mendoza, A. Perez Latorre Pärtel, M., M. Zobel, K. Zobel, K. & E. van der Maarel.
& J. Mota. 2005. Riqueza y rareza florísticas en los 1996. The species pool and its relation to species
afloramientos dolomíticos de las Cordilleras Béticas (sur richness: evidence from Estonian plant communities.
de España): ensayo preliminar. Acta Bot. Malacitana Oikos 75: 111-117.
30: 111-127. Phillips, D. L. 1982. Life-forms of granite outcrop plants.
Meier, H. & J. Braun-Blanquet. 1934. Prodrome des Amer.Middl. Nat. 107: 206-208.
groupements vegetaux. 2. (Classe des Asplenietales Pickett, S. T. A. & E. S. White. 1985. The ecology of natural
rupestres-Groupements rupicoles). Marie-Lavit. disturbance and patch dynamics. Academic Press.
Montpellier. London.º
Meirelles, S. T. 1996. Estrutura da comunidade e PlanEar. 2011. Plantas Endémicas de la Argentina. http://
características funcionais dos componentes da vegetação www.lista-planear.org/ .
de um afloramento rochoso em Atibaia – SP. Tese de
doutorado, Universidade Federal de São Carlos, São Pope, N., H. Tanner & N. Rajakaruna. 2010. Vascular Plants
Carlos. of Adjacent Serpentine and Granite Outcrops on the
deer isles, Maine, U.S.A. Rhodora 112 (950): 105–141.
Meirelles, S. T., E. A. Mattos & A. C. Silva. 1997. Potential
desiccation tolerant vascular plants from southeastern Porembski, S. & W. Barthlott. 2000. Granitic and gneissic
Brazil. Polish J. Environ. Studies 6: 17-21. outcrops (inselbergs) as centers of diversity for desiccation-
tolerant vascular plants. Pl. Ecol.151: 19-28.
Méndez, E. 2010. La vegetación saxícola y de taludes del
Flanco oriental del Cordón del Plata (Luján de Cuyo, Porembski, S. 2007. Tropical inselbergs: habitat types,
Mendoza, Argentina). Bol. Soc. Argent. Bot. 45: 119- adaptive strategies and diversity patterns. Revista Brasil.
147. Bot. 30: 579-586.
Michelangeli, F. A. 2000. Species composition and species- Porembski, S., G. Martinelli, R. Ohlemuller & W. Barthlott.
area relationships in vegetation isolates on summit of 1998. Diversity and ecology of saxicolous vegetation
a sandstone mountain in southern Venezuela. J. Trop. mats on inselbergs in Brazilian Atlantic forest. Diversity
Ecol. 16: 69-82. and Distributions 4: 107-119.
Morat, P., Jaffré, T. & J.-M. Veillon. 2001. The flora of Porembski, S., W. Barthlott, S. Dörrstock & N. Biedinger.
New Caledonia’s calcareous substrates Adansonia 23: 1994. Vegetation of rock outcrops in Guinea: granite
109-127. inselbergs, sandstone table mountains and ferricretes
– remarks on species numbers and endemism. Flora
Mota, J., F. Valle & J. Cabello. 1993. Dolomitic vegetation 189: 315-326.
of South Spain. Vegetatio 109: 29-45.
Raunkiaer, C. 1934. Life forms and terrestrial plant geo
Mota, J., J. M. Medina-Cazorla, F. Bruno Navarro, J. Pérez- graphy. Clarendon Press, Oxford.
García, A. Pérez-Latorre, P. Sánchez-Gómez, J. Torres,
A. Benavente, G. Blanca, C. Gil, J. Lorite & M. E. Rédei, T., Z. Botta-Dukát, J. Csiky, J. Kun & T. Tóth. 2003.
Merlo. 2008. Dolomite flora of the Baetic Ranges glades On the possible role of local effects on the species
(South Spain). Flora 203: 359–375. richness of acidic and calcareous rock grasslands in
Northern Hungary. Folia Geobot. 38: 453–463.
Mota, J., M. Cueto & M. Encarna Merlo. 2003. Flora
amenazada de Almería. Monografías de Ciencia y Rivas Martínez, S. 1960. Roca, clima y comunidades
Tecnología. Universidad de Almería. 329 p. rupícolas. Sinopsis de las alianzas hispanas de
Asplenietea rupestris. Anales Real Acad. Farm. 26:
Núñez, C.O., J. J. Cantero, G. Ramírez, L. Petryna & A. 153-168.
Amuchástegui. 2002. Efectos del fuego y pastoreo sobre
tipos funcionales de poaceas C3 y C4 en pastizales Rogers G, & S. Walker. 2002. Taxonomic and ecological
serranos centroargentinos. Agrosur (Chile) 30: 12-24. profiles of rarity in the New Zealand vascular flora. New
Zealand J. Bot. 40: 73–93.
Olsacher, J. 1960. Descripción geológica de la Hoja 20h
- Los Gigantes, Provincia de Córdoba. Dirección Sadler, K. D. & G. E. Bradfield. 2010. Ecological facets of
Nacional de Geología y Minería, Anales XII. Buenos plant species rarity in rock outcrop ecosystems of the
Aires. Gulf Islands, British Columbia. Botany 88: 429–434
Ortiz, S. & J. Rodríguez Oubiña. 1993. Synopsis of the Saetersdal, M., J. M. Line & H. J. B. Birks.1993. How
rupicolous vegetation of Galicia (North-western Iberian to maximize biological diversity in nature reserve
Peninsula). Folia Geobot. Phytotax. 28: 15-49.
34 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
selection: vascular plants and breeding birds in Ter Braak, C. J. F. 2002. Program CANOCO Version 4.5.
deciduous woodlands, western Norway. Biol. Conserv. Biometris - quantitative methods in the life and earth
66: 131–138. sciences Plant Research International, Wageningen
Safford, H. D., J. H. Viers & S. P. Harrison.2005. Serpentine University and Research Centre Box 100, 6700 AC
endemism in the California flora: a database of Wageningen, the Netherlands.
serpentine affinity. Madroño 52 (4): 222–257. Troncoso, N. 1979. Verbenaceae, en A. Burkart (dir.), Fl.
Sarthou, C. & J. Villiers. 1998. Epilithic plant communities Ilust. Entre Ríos 6: 229-294. INTA, Buenos Aires.
on inselbergs in French Guiana. J. Veget. Sci. 9: 847- Wardle, J. 1971. The forests and shrublands of the Seaward
860. Kaikoura Range. New Zealand J. Bot. 9: 269–292.
Sayago, M. 1969. Estudio fitogeográfico del norte de Wardle, P. 1991. Vegetation of New Zealand. Cambridge
Córdoba. Bol. Acad. Nac. Cienc. Córdoba 46: 123-427. University Press.
Scarano, F. 2002. Structure, function and floristic Winterringer, G. S. & G. Vestal. 1956. Rock-ledge vegetation
relationships of plant communities in stressful habitats in southern Illinois. Ecol. Monogr. 26: 105-130.
marginal to the Brazilian Atlantic rainforest. Ann. Bot. Wiser, S. K. & R. P. Buxton. 2009. Montane outcrop
90: 517-524. vegetation of Banks Peninsula, South Island, New
Scarano, F. 2007. Rock outcrop vegetation in Brazil: a brief Zealand. New Zealand J. Ecol. 33 (2): 164-176.
overview. Revista Brasil. Bot. 30: 561-568. Wiser, S. K. & R. P. Buxton. 2008. Context matters:
Seine, R., S. Porembski & U. Becker. 2000. Phytogeography, Matrix vegetation influences native and exotic species
en S. Porembski & W. Barthlott (eds.). Inselbergs, pp. composition on habitat islands. Ecology 89: 380–391.
435-449. Ecological Studies v.146. Springer-Verlag, Wiser, S. K., R. K. Peet & P. S. White. 1996. High-elevation
Berlin. rock outcrop vegetation of the Southern Appalachian
Selvi, F. 2007. Diversity, geographic variation and Mountains. J. Veget. Sci. 7: 703-722.
conservation of the serpentine flora of Tuscany (Italy). Zuloaga, F. O. & O. Morrone 1999 a. Catálogo de las Plantas
Biodiversity and Conservation 16: 1423–1439. Vasculares de la República Argentina. I. Monogr. Syst.
Sfragulla, J. A., A. Bonalumi, N. Briolini & J. Cabrera. 2009. Bot. Missouri Bot. Gard. 60: 1-323.
Prospección de rocas ultramáficas de Córdoba, orientada Zuloaga, F. O. & O. Morrone 1999 b. Catálogo de las Plantas
a su aplicación industrial. Actas del IX Congreso Vasculares de la República Argentina. II. Monogr. Syst.
Argentino de Geología Económica: 287-292, Catamarca. Bot. Missouri Bot. Gard. 74: 1-1269.
Sfragulla, J. A., D. G. Jerez & A. Bonalumi. 1999. Mármoles Zuloaga, F. O., E. G. Nicora, Z. Rúgolo de Agrasar, O.
y otras rocas carbonáticas de Córdoba, en E. O. Morrone, J. Pensiero & A. M. Cialdella. 1994. Catálogo
Zappettini (ed.) Recursos Minerales de la República de la Familia Poaceae en la República Argentina.
Argentina, pp. 271-295. Anales Instituto de Geología y Monogr. Syst. Bot. Missouri Bot. Gard. 47: 1-178.
Recursos Minerales SEGEMAR, Buenos Aires.
Zuloaga, F. O., O. Morrone & M. J. Belgrano. 2008.
Sims, J. P., T. R. Ireland, A. Camacho, P. Lyons, P. Pieters, Catálogo de Las Plantas Vasculares Del Cono Sur:
R. Skirrow & P. Stuart Smith. 1998. U–Pb, Th–Pb (Argentina, Sur de Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay).
and Ar–Ar geochronology from the southern Sierras Monogr. Syst. Bot. Missouri Bot. Gard. 107 (I-II-III):
Pampeanas, Argentina: implications for the Palaeozoic 1-3348.
tectonic evolution of the western Gondwana margin,
en R. J. Pankhurst & C. W. Rapela (eds.). The Proto-
Andean Margin of Gondwana, pp. 259-281. Geological
Society (London) Special Publication, 142.
Smith, J. M. B. & A. M. Cleef. 1988. Composition and
origins of the world’s tropicalpine floras. J. Biogeog.
15: 631-645.
Stevanovic, V., K. Tan & G. Latrou. 2003. Distribution
of the endemic Balkan flora on serpentine I. Obligate
serpentine endemics. Plant Syst. Evol. 242: 149–170.
Original recibido el 17 de Agosto de 2011;
Ter Braak, C. J. F. 1995. Ordination, en R. H. J. Jongman, primera decisión: 18 de Noviembre de 2011;
C. J. F. Ter Braak & O. F. R. Van Tongeren (eds.). Data
aceptado el 14 de Diciembre de 2011.
Analysis in Community and Landscape Ecology, pp.
91-173. Cambridge University Press, Cambridge, UK.
Editor responsable: Guillermo Funes.
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 35
ANEXO I
Lista de taxones de plantas vasculares relevadas en los afloramientos de mármoles cálcicos, mármoles dolomíticos y serpen-
tinitas de la provincia de Córdoba, Argentina entre los 30° 42’ a 33° 5’ de Latitud Sur y 64° 20’ a 65° 20’ de Longitud Oeste.
Grupos corológicos: A. Andino, MB. Montañas Bajas, AB. Austrobrasilero, Ch. Oeste Chaqueño, P. Patagónico. Endemis-
mos. P. Provincial, R. Regional., N. Nacional. Formas de vida. T. Terófitas, G. Geófitas, H. Hemicriptófitas, C. Caméfitas, FS.
Fanerófitas suculentas. F. Fanerófitas. E. Epífitas. Tipos litológicos. Frecuencia relativa (%) de todas las especies encontradas
en los tres tipos litológicos: mármoles dolomíticos, mármoles cálcicos y serpentinitas.
36 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
Anexo I (cont.)
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 37
Anexo I (cont.)
38 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
Anexo I (cont.)
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 39
Anexo I (cont.)
40 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
Anexo I (cont.)
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 41
Anexo I (cont.)
42 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
Anexo I (cont.)
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 43
Anexo I (cont.)
44 Tomo 36 (2): 11-45. 2011
KURTZIANA
Anexo I (cont.)
CANTERO, J. J. et al. Afloramientos de mármoles y serpentinitas de las Sierras de Córdoba 45
Anexo I (cont.)