Componentes Del Lenguaje
Componentes Del Lenguaje
Componentes Del Lenguaje
Todo lenguaje se compone de cuatro partes principales que serán explicadas a continuación.
Fonología.
Es el primero de los componentes del lenguaje e involucra las reglas de estructura y secuencia de los
sonidos de nuestro idioma. El desarrollo fonológico ocurre en períodos que van desde el nacimiento
hasta el primer año de vida, que es cuando el niño empieza a balbucear o hacer sonidos semejantes
al idioma. A partir del primero y hasta los dos años de edad el niño comienza a pronunciar algunas
palabras, un desarrollo que se extiende hasta aproximadamente los seis años de edad.
Semántica.
La semántica no es otra cosa que el vocabulario y los conceptos que este representa por medio de
palabras. Al igual que el desarrollo fonológico, el desarrollo semántico ocurre en etapas. A partir del
primer año de vida los niños comienzan a comprender que el lenguaje es un medio de comunicación.
A partir del segundo año de vida el vocabulario del bebé comienza a crecer exponencialmente. A
partir de los tres a cinco años de edad los niños utilizan vocabulario pero muchas veces de manera
incorrecta. Por ejemplo un niño dirá “pato” en lugar de zapato. Del sexto año en adelante la mayoría
de niños puede comprender el significado de las palabras y saben las definiciones de múltiples
vocabularios, incluso pueden establecer las diferencias de aquellos que suenan parecidos como ojo y
rojo.
Gramática.
Este es el tercer componente de todo idioma e involucra dos partes, la primera la sintaxis, que son
las reglas por medio de las cuales se forman las oraciones. El segundo componente de la gramática es
la morfología. La morfología se ocupa del uso de marcadores gramaticales que indican tiempo, voz
pasiva o activa entre otros. A partir de los dos años de edad la mayoría de niños puede formar
oraciones simples pero a partir de los seis son capaces de utilizar estructuras gramaticales complejas.
Pragmática.
Segundo: alternar el uso del lenguaje de manera que le hablemos diferente a cada persona
dependiendo quién es él o ella.
Tercero: seguir reglas tales como esperar a que la otra persona deje de hablar para comenzar
nosotros y mantenerse en el tópico de la discusión.
A partir de las edades de uno o dos años, los niños pueden involucrarse en conversaciones en donde
toman turnos para hablar. A la edad de tres, los niños pueden comprender la intención del mensaje
recibido. Por ejemplo, una madre puede preguntar ¿quieres leche? Y el niño entiende que ahora
puede hablar para contestar a la pregunta. A la edad de seis y más adelante el niño es capaz de
sostener conversaciones más complejas como por ejemplo hablar por teléfono.