Una Sopa de Letras
Una Sopa de Letras
Una Sopa de Letras
Se coge carne y grasa de un borrego gordo y de los tripicallos. Se cortan, se lavan, se limpian y se ponen en
una olla nueva con sal, aceite, pimienta, cilantro seco, comino, cebolla cortada y se pone la olla a la lumbre,
moviéndola de cuando en cuando hasta que el agua de la carne se evapora y va a quedarse seca. Entonces
se le echa agua caliente para el caldo y se deja cocer la olla a la lumbre. Luego se cogen !as habas
machacadas y se lavan varias veces con agua caliente. Seguidamente se untan de aceite y se ponen en una
olla untada de aceite, con agua caliente, una cebolla entera, una cabeza de ajos entera, comino e hinojo, y
se pone la olla a cocer a la lumbre, sin dejar de mover hasta que las habas están tiernas. Si antes de estar
cocidas se seca el agua, se les añade agua caliente, hasta que quedan bastante cocidas. Luego se toma sal y
se disuelve en un plato; se coge una cuchara, se echa la sal y se remueven las habas, estrujándolas con la
cuchara, hasta que se deslíen. Se cuela, se sazona de sal y se deja. Luego se mira la carne, y si está ya cocida,
se le añaden las habas poco a poco para que se mezclen con la carne, dejando la olla sobre el rescoldo,
durante un rato, para que vaya enfriándose, se sirve en una fuente y se come.
Guiso de carne de animales salvajes
PRIMERA PARTE.-
I.Se trata de la comida de carne.
II.Prosigue la comida de carne.
III.Prosigue la materia del
passado.
IV.De la volatería.
SEGUNDA PARTE.-
I.Comida de pescado.
II.Prosigue la comida de pescado.
III.Prosigue la comida de
pescado.
IV.De todo género de Yervas.
APÉNDICES.-
I.Varias escudillas.
•Addición: para componer aguas,
y otras advertencias.
Algunos ejemplos de su recetario:
La segunda -y casi
podríamos decir la última-
aportación importante que
a la bibliografía
gastronómica nos aporta
el siglo XVIII es el “Arte de
Repostería”, de Juan de la
Mata, impreso en Madrid
en 1786, con otra
reimpresión en 1791.
Se hace un extenso recorrido
por la repostería europea
(española, italiana, francesa,
portuguesa) a través de
diversas recetas:
mostachones, rosquillas,
yemas, helados, vinos dulces,
chocolate, té o café, además
de la descripción y consumo
de las frutas de temporada y
varios ejemplos de la
colocación y disposición de
mesas y cubiertos, a lo largo
de 41 capítulos.
El siglo XIX europeo se
verá marcado por la
superior cocina francesa,
con genios como Carême,
gastrónomos como Grimod
de La Reynière, Anthelme
Brillat-Savarin, con su
influyente “Physiologie du
goût”, y autores como
Favre, Monselet, Gouffé,
Curnonsky, Escoffier,
etcétera.
Las aportaciones
bibliográficas españolas son
muy abundantes,
numerosísimas, aunque buena
parte de ellas copiadas de
recetarios contemporáneos
(fundamentalmente
franceses) o españoles
anteriores, aunque destacan
algunos buenos trabajos de
recopilación, como “El
Cocinero Español y la Perfecta
Cocinera”, o el “Libro de las
Familias”, auténticos best-
sellers en su época. Son, en
general, compilaciones más o
menos afortunadas, aunque su
proliferación nos muestra el
interés que existía en España
por esta literatura
gastronómica, cuyos
ejemplares figuraban en las
cocinas “a la moda” de la
época.
Entre la selva de ediciones y
de autores, destacan las obras
del crítico y conocedor
Mariano Pardo de Figueroa, el
“Doctor Thebussem” (”Doctor
Embustes”), con su “Mesa
Moderna”.
También el siglo XX verá la
proliferación de obras
gastronómicas, recetarios,
enciclopedias, fascículos,
audiovisuales y todo tipo de
recursos sobre el tema: desde unos
comienzos tibios, allá por los
primeros años del siglo (desde el
desastre del 98 hasta la Gran
Guerra), tras la Guerra Civil se
producirá un resurgimiento del
interés general sobre la cocina,
potenciando, por ejemplo, la
cocina popular con el “boom”
económico de los 60, como un
rasgo más del tipismo español. El
resto es bien conocido: autoras
como Simone Ortega, Parabere, o
“Cocineros-Comunicadores” como
Arguiñano, Arzak, Adrià,
Berasategui o Santamaría son los
protagonistas de la mediática
cocina española del siglo XXI.
En resumen: una historia
bibliográfica rica, notable, con
una tradición gastronómica
antigua y diversa, mezcla de
culturas y sabores, que ha
llegado a nosotros desde los
primeros textos medievales y
que hoy en día se revisa, se
innova y se actualiza
constantemente, con unos
recursos novedosos, a veces
controvertidos y que no dejan
a nadie indiferente.