Mejoredu 10 16
Mejoredu 10 16
Mejoredu 10 16
Ello representa un cambio de ruta significativo. En las últimas tres décadas presen-
ciamos un crecimiento constante –y por momentos acentuado– de la evaluación
educativa de carácter exógeno, aquella que no llevan a cabo las maestras y los maes-
tros, los estudiantes o las escuelas en su conjunto, sino instancias externas a éstas.
Desde ese enfoque, casi todo se volvió evaluable en el Sistema Educativo Nacional
(SEN), bajo la justificación retórica de que la evaluación era esencial o, más aún, punta
de lanza para la mejora de la educación. Si bien el impulso a la evaluación externa
ofreció más información sobre los actores, las instituciones y los procesos educativos,
sus bondades para mejorar las prácticas en nuestras escuelas permanecieron opacas
y, en cambio, fue trastocando la posibilidad de un cambio educativo auténtico, al po-
sicionar a la evaluación como un fin en sí misma.
9
La mejora continua de la educación.
Principios, marco de referencia y ejes de actuación
Mejoredu se rige por el marco jurídico vigente y sus leyes en materia de educación.
A partir de él, puntualizamos en el primer capítulo un conjunto de principios que
orientan el trabajo de la Comisión: un enfoque de derechos en la educación, una
visión humanista de ella, su mejora continua como prioridad, el cambio educativo
a partir de las escuelas, la revalorización de maestras y maestros y de su trabajo; e in-
clusión, participación y colaboración. Comenzamos con el reconocimiento de estos
principios porque conforman el fundamento para desarrollar el marco de referencia
que proponemos en este documento.
10
I. Mejoredu: principios orientadores
para un marco de referencia
1 Estos principios son: a) el aprendizaje de niñas, niños, adolescentes y jóvenes (NNAJ) como centro de la
acción del Estado; b) la mejora continua de la educación, que implica el desarrollo y fortalecimiento per-
manente del Sistema Educativo Nacional (SEN) para el incremento del logro académico de los educandos;
c) el reconocimiento a maestras y maestros como agentes fundamentales del proceso educativo y de la
transformación social; d) la búsqueda de la excelencia en la educación; e) la integralidad del SEN, pro-
curando la continuidad, complementariedad y articulación de la educación, desde el nivel inicial hasta
el tipo superior; f) la contribución para garantizar una cobertura universal en todos los tipos y niveles
educativos; y g) la participación social y comunitaria (Ley Reglamentaria del Artículo 3º de la Constitución
Política de los Estados Unidos Mexicanos, en Materia de Mejora Continua de la Educación).
Esta ley señala que, para el ejercicio de sus atribuciones, Mejoredu debe regirse bajo los principios de inde-
2
11
La Mejora Continua de la Educación.
Principios, marco de referencia y ejes de actuación
La educación debe preparar a las y los estudiantes para disfrutar, ejercer y defender
sus derechos, así como los de otras personas.3 Entre los derechos humanos, la educa-
ción es clave, ya que permite el conocimiento, disfrute, ejercicio y defensa de otros.4
3
Véase ONU (2011) para la distinción entre una educación sobre, para y por medio de los derechos huma-
nos. Defender los derechos propios y los de otras personas implica que los estudiantes están preparados
para demandar su exigibilidad y justiciabilidad [para profundizar en estas nociones, véanse Abramovich y
Courtis (2002); Saura Estapà (2011)].
4
En el marco de los derechos humanos no es posible adjudicarle mayor importancia a uno sobre otro; sin
embargo, distintos autores han planteado el carácter fundamental que la educación tiene para el ejerci-
cio de otros derechos. Véase, por ejemplo, Latapí Sarre (2009).
5
Véase el capítulo II para una argumentación al respecto.
12
I. Mejoredu: principios orientadores
para un marco de referencia
6
Véase el capítulo III para una descripción más detallada sobre los ejes de actuación de la Comisión y la ar-
ticulación entre evaluación y la emisión de lineamientos, criterios, sugerencias y programas para la mejora
continua de la educación.
Véase el capítulo II (2.2.2) para un desarrollo sobre la mejora continua de la educación como un proceso
7
diferenciado y contextualizado.
13
La Mejora Continua de la Educación.
Principios, marco de referencia y ejes de actuación
las escuelas.8 Existen, por el contrario, diversas instancias de mediación, en las que
actores colectivos o individuales ‒docentes, estudiantes, personal directivo escolar,
madres y padres de familia, autoridades educativas locales‒ apropian, modifican,
reformulan, rebasan, niegan, resisten o rechazan aquello que desde arriba busca
modificar sus prácticas (Ball, Maguire y Braun, 2012; Ezpeleta, 2004).
El cambio educativo es un proceso complejo, pero sin duda posible cuando las
comunidades escolares hacen un balance reflexivo y crítico de su situación y desa-
rrollan sus propias estrategias de mejora; cuando docentes, estudiantes y otros ac-
tores escolares ponen en juego su propia visión, trayectoria y experiencias (Fullan
y Stiegelbauer, 1997).
Frente a las visiones que reducen al docente a un ejecutor disciplinado del currículo,
de las políticas y los programas que otros elaboran, y que constantemente lo carac-
terizan a partir de sus carencias, nos sumamos al impulso a la profesionalidad de
maestras y maestros. Ello implica considerar tanto la profesionalización ‒asociada
con el reconocimiento social y la importancia que éste otorga al desempeño de sus
funciones‒ como al profesionalismo, relacionado con el manejo experto y el mejora-
miento constante de su práctica (Hargreaves, 1999).
8
Tal como planteamos en el capítulo II (ver también Deming, 1982), usamos el término “escuela” para referir-
nos a un conjunto heterogéneo de espacios regulados por el Estado donde tiene lugar la educación escolar.
14
I. Mejoredu: principios orientadores
para un marco de referencia
La educación como bien público es una tarea compartida que demanda incluir, par-
ticipar y colaborar. Mejoredu busca realizar su trabajo en diálogo con diversos acto-
res educativos y de la sociedad en general, particularmente con aquellos a quienes
se dirigen los instrumentos normativos y los programas de formación que emite.
Por ello, tenemos como principio la apertura a la participación y colaboración con
diferentes instancias y actores.
9
La función de este consejo es conocer, opinar y dar seguimiento a los resultados de los trabajos que
realice la Comisión, así como a las acciones de difusión que emprenda sobre estos resultados.
15