Los Heraldos Negros
Los Heraldos Negros
Los Heraldos Negros
César Vallejo nació el 16 de marzo de 1892 en la ciudad andina de Santiago de Chuco del norte
del Perú.
Familia
Fue el menor de los once hijos de Francisco de Paula Vallejo Benítez y María de los Santos
Mendoza Gurrionero. Se crio en el seno de una familia mestiza con una gran devoción cristiana.
Su familia deseaba que se convirtiera en cura.
Estudios
Más tarde viajó a Lima para estudiar un doctorado en la Facultad de Letras de la Universidad
Nacional Mayor de San Marcos.
Escritor
En 1918 editó su primer libro con el título de “Los Heraldos Negros” (impreso en 1918, circula
en 1919), uno de los más representativos ejemplos del posmodernismo.
Por entonces se sumó al denominado grupo “Norte”, liderado por Antenor Orrego, Víctor Raúl
Haya de la Torre, Macedonio de la Torre y Alcides Spelucín, entre otros.
Tuvo diferentes empleos que le ayudaron a conocer la realidad social de su país influyendo en
algunos de sus poemas. Las dificultades económicas siempre estuvieron presentes en su vida.
César Vallejo está considerado el máximo exponente de las letras de Perú y como uno de los
más importantes innovadores de la poesía del siglo XX.
Abarcó casi todos los géneros literarios: poesía, narrativa, guiones de teatro y diversos ensayos.
Además, realizó una labor periodística escribiendo crónicas y artículos. Corrigió mucho sus
textos puesto que casi nunca estuvo satisfecho con lo que escribía.
Prisión
En 1920 regresó a su pueblo natal y se vio envuelto en un incidente por el que fue detenido y
llevado a la cárcel de Santiago de Chuco, donde permaneció tres meses. Los periódicos de
aquella época defendieron su inocencia quedando posteriormente en libertad. Estando preso
escribió Escalas melografiadas.
Esta experiencia tendrá una crítica y permanente influencia en su vida y obra, y se refleja de
modo muy directo en varios poemas de su siguiente libro, Trilce (1922) considerada una obra
innovadora en el uso del lenguaje. Este usa múltiples figuras literarias, como onomatopeyas y
vulgarismos.
Viaje a Europa
Un año después partió para París, donde permanecerá (con algunos viajes a la Unión Soviética,
España y otros países europeos) hasta el fin de sus días. Estos años estuvieron marcados por
una gran pobreza y un intenso sufrimiento físico y moral.
Poesía
Fue en la lírica donde Vallejo alcanzó su verdadera expresión. Esta consta de tres etapas:
modernista, vanguardista y revolucionaria.
Conoció a poetas como Huidobro, Gerardo Diego, Juan Larrea y Juan Gris, con los que participó
en actividades de sesgo vanguardista, pero pronto abjuró de su propio Trilce y hacia 1927
aparece firmemente comprometido con el marxismo y su activismo intelectual y político.
Trabajó para periódicos y revistas, escribió piezas teatrales, relatos y ensayos de intención
propagandística, como Rusia en 1931. Reflexiones al pie del Kremlin (1931).
Afiliado al Partido Comunista de España (1931) y nombrado corresponsal, sigue de cerca las
acciones de la Guerra Civil y escribe su poema más político: España, aparta de mí este cáliz,
que apareció en 1939 impreso por soldados del ejército republicano.
Toda la obra poética escrita en París, y que publicó en diversas revistas, se recopiló con el título
Poemas humanos (1939).
Esposa
Casado con Georgette Philippart de 1934 a 1938. Esta tenía solo treinta años cuando se quedó
viuda, preservando para la posteridad las obras literarias de su marido, una de las más
importantes escritas en español.
Muerte
Entre sus obras póstumas más reconocidas aparecen Poemas humanos y España, aparta de mí
este cáliz, ambas publicadas en 1939. Estos títulos reflejan una corriente de más conciencia
social.
Obras seleccionadas
Poesía
Narrativa
• Escalas melografiadas
• Fabla salvaje
• Hacia el reino de los Sciris
• El Tungsteno
• Paco Yunque
• El niño del carrizo
• Viaje alrededor del porvenir
• Los dos soras
• El vencedor
ANALISIS LITERARIO DE LOS HERALDOS NEGROS
Los Heraldos Negros” es un poema del peruano César Vallejo que escribió cuando tenía 25 años.
Forma parte de un primer libro de 69 poesías también titulado: Los heraldos negros. Como gran
parte de su trabajo, destaca el dolor en la condición humana.
«Hay golpes en la vida, tan fuertes… ¡Yo no sé!” verso que se repite al inicio y al final cuando
se cierra el poema, haciendo un círculo. Con esto nos muestra que el yo lírico, no logra
explicar todo el dolor y sufrimiento que quiere expresar en el poema.
La primera estrofa
Plantea golpes, dolor, un Dios que golpea hasta el alma, es una estrofa llena de dudas y
mucha angustia: ¡Yo no sé!. (Pero Dios no golpea, golpean los hombres).
La segunda estrofa
“Son Pocos; pero son…” así comienza la segunda estrofa, porque pareciera decir son pocos
contra muchos. En otras palabras, son pocos los capataces “bárbaros Atilas” y muchos los
esclavos, a los que se “…abren zanjan oscuras en el rostro… y en el lomo…” Capataces que
pudieron ser también negros o también mensajeros negros. “Heraldos negros”.
En la tercera estrofa
Habla de las múltiples caídas de Cristo, torturado durante su pena, pero cierra en el siguiente
verso “…con una fe adorable que el destino blasfema”. ¿Es una fe distorsionada en el destino
de quien la vive, y por eso se comporta así, de manera blasfema? Una fe que reniega su
origen. Y por eso golpea de manera sangrienta generando “crepitaciones” en la piel negra
de un esclavo, al que compara con las crepitaciones del pan que “en la puerta del horno se
nos quema”. Donde la constante es la impotencia cuando la vida se nos quema.
La cuarta estrofa
¡Dios…!. Es como ver a un esclavo, … Pobre… ¡pobre! Que, siendo maltratado, ha sido tan
adoctrinado, que aún se siente culpable, “como charco de culpa, en la mirada…” Bien
acertado será terminar este análisis con el último verso del poeta; “Hay golpes en la vida,
tan fuertes… ¡Yo no sé!”
Algunos investigadores opinan que se trata de un poema que representa el dolor humano,
(de manera general) el dolor de la humanidad, el dolor del mundo. Donde el yo lirico se
encuentra imposibilitado para expresar ese dolor y asume la personificación de ese dolor en
su persona. Es como si fuera un Cristo que lleva el dolor y el pecado de todos los hombres.
Métrica
Hay/ gol/pes/ en/ la/ vi/da,/ tan/ fuer/tes…/ ¡Yo/ no/ sé!/= 14 sílabas (13 + 1)
Gol/pes/ co/mo/ del/ o/dio/ de/ Dios;/ co/mo/ si an/te e/llos,/= 14 sílabas
En/ el/ ros/tro/ más/ fie/ro/ y en/ el/ lo/mo/ más/ fuer/te./= 14 sílabas
Son/ las/ ca/í/das/ hon/das/ de/ los/ Cris/tos/ del/ al/ma/= 14 sílabas
De al/gún/ pan/ que en/ la/ puer/ta/ del/ hor/no/ se/ nos/ que/ma./= 14 sílabas
Cuan/do/ por/ so/bre el/ hom/bro/ nos/ lla/ma u/na/ pal/ma/da;/= 14 sílabas
Hay/ gol/pes/ en/ la/ vi/da,/ tan/ fuer/tes…/ ¡Yo/ no/ sé!/ = 14 sílabas (13 + 1)
ANÁLISIS LITERARIO
DE
TRILCE