Sistema Hematico
Sistema Hematico
Sistema Hematico
¿QUE ES?
El sistema hemático o también conocido como sistema sanguíneo, es una red de
órganos y tejidos que trabajan juntos para producir, almacenar y transportar sangre por
todo el cuerpo.
La sangre, como elemento central del sistema hemático, juega un papel fundamental en la
preservación de la homeostasis y la supervivencia del organismo. Se trata de un tejido
líquido que se compone de glóbulos rojos, glóbulos blancos, plaquetas y plasma.
FUNCIONES
GLOBULOS ROJOS
GLOBULOS BLANCOS
Los neutrófilos son fagocitos activos que utilizan una gran variedad de
receptores de la superficie para reconocer bacterias y otros agentes
infecciosos en los sitios de inflamación.
Los BASÓFILOS tienen más o menos el mismo tamaño que los neutrófilos
y se llaman así debido a que los abundantes gránulos grandes que hay en
su citoplasma se tiñen con colorantes básicos. Son los menos abundantes de
todos los leucocitos y representan menos del 0,5% del total.
El núcleo lobulado de los basófilos suele quedar cubierto por los gránulos
en los frotis de sangre teñida, pero sus características se pueden ver bien
en fotomicrografías electrónicas.
La heterocromatina es principalmente periférica y la eucromatina está
ubicada sobre todo en el centro del núcleo
Los LINFOCITOS son los agranulocitos más comunes y representan
aproximadamente el 30% del total de los leucocitos sanguíneos. Para
comprender la función de los linfocitos, debe tenerse en cuenta que la
mayoría de los linfocitos que se encuentran en la sangre o la linfa
representan células inmunocompetentes recirculantes. Representan
alrededor del 30% de los leucocitos sanguíneos.
Hay tres tipos de linfocitos desde el punto de vista funcional: linfocitos T,
linfocitos B y linfocitos NK:
Los linfocitos T participan en la inmunidad mediada por células y se
caracterizan por receptores del linfocito T (TCR) y marcadores CD4 o CD8.
Los linfocitos B participan en la producción de anticuerpos y expresan
marcadores específicos como CD19, CD20 y CD24. Los linfocitos NK están
programados para destruir células infectadas por virus y algunas células
tumorales; expresan marcadores como CD16, CD56 y CD94.
Los monocitos son los leucocitos más grandes en el frotis de sangre.
El núcleo del monocito posee típicamente una escotadura más pronunciada
que la del linfocito, también contienen retículo endoplasmático liso, retículo
endoplasmático rugoso y mitocondrias pequeñas. Si bien se clasifican como
agranulocitos, en su citoplasma hay pequeños gránulos azurófilos densos.
Estos gránulos contienen enzimas lisosómicas típicas similares a las
encontradas en los gránulos azurófilos de los neutrófilos. Los monocitos se
transforman en macrófagos que actúan como células presentadoras de
antígenos en el sistema inmunitario(Durante la inflamación, el monocito
abandona el vaso sanguíneo en el sitio de inflamación, se transforma en
macrófago de los tejidos y fagocita bacterias, otras células y detritos tisulares.
El monocito-macrófago es una célula presentadora de antígenos y desempeña
un papel importante en las respuestas inmunitarias.)
El macrófago degrada parcialmente los antígenos y presenta sus fragmentos
en las moléculas MCH II ubicadas en su superficie a los linfocitos T CD4+
cooperadores para su reconocimiento.
PLAQUETAS