Sistema Renal
Sistema Renal
Sistema Renal
Sistema renal
Docente: Estudiante:
Lic. Luis Vielma Mercy Morales 31.101.739
Bárbara Real 30.470.472
Stefanny Negrette 31.539.362
Anahis Pellin 29.658.622
Aparato renal
Los riñones y el aparato urinario ayudan al cuerpo a eliminar los desechos líquidos,
conocidos como "urea", y a mantener en equilibrio las sustancias químicas como el
potasio, el sodio y el agua. La urea se produce cuando los alimentos que contienen
proteínas, tales como la carne, el pollo y ciertos vegetales, se degradan en el cuerpo.
La urea se transporta en la circulación sanguínea hacia los riñones, donde se elimina
junto con el agua y otros desechos en forma de orina.
- Dos riñones. Par de órganos de color oscuro, entre marrón y morado, que se ubican
debajo de las costillas y hacia el centro de la espalda. Su función es eliminar los
desechos líquidos de la sangre en forma de orina; mantener un equilibrio estable de
sales y otras sustancias en la sangre; y producir eritropoyetina, una hormona útil en la
formación de los glóbulos rojos.
-Dos uréteres. Dos tubos estrechos que llevan la orina de los riñones a la vejiga. Los
músculos de las paredes de los uréteres se contraen y relajan continuamente para
forzar la orina hacia abajo, lejos de los riñones. Si la orina se acumula, o si se
mantiene detenida, puede desarrollarse una infección del riñón. Aproximadamente
cada 10 o 15 segundos, los uréteres vacían cantidades pequeñas de orina en la vejiga.
-Dos músculos del esfinter: los músculos circulares que ayudan a que la orina no
gotee cerrándose herméticamente como una cinta de goma alrededor del orificio de la
vejiga.
- Uretra. Este tubo permite que la orina se expulse del cuerpo. El cerebro envía
señales a los músculos de la vejiga para que se contraigan y expulsen la orina. Al
mismo tiempo, el cerebro envía señales a los músculos del esfínter para que se relajen
y permitan la salida de orina de la vejiga a través de la uretra. Cuando todas las
señales se suceden en el orden correcto, la persona orina normalmente.
Datos
-Los adultos eliminan aproximadamente un litro y medio de orina por día, según su
consumo de líquidos y alimentos.
-El volumen de orina que se acumula por la noche es aproximadamente la mitad del
que se acumula durante el día.
-La orina normal es estéril. Contiene fluidos, sales y productos de desecho, pero está
libre de bacterias, virus y hongos.
Células intersticiales
El tejido conjuntivo del parénquima renal, denominado tejido intersticial, rodea las
nefronas, los conductos y los vasos sanguíneos y linfáticos. Este tejido aumenta
considerablemente en cantidad desde la corteza (donde corresponde aproximadamente
al 7 % del volumen) hasta la región interna de la médula y la papila (donde puede
llegar a más del 20 % del volumen).
En la corteza, se reconocen dos tipos de células intersticiales: las células que se
parecen a fi-broblastos, situadas entre la membrana basal de los túbulos y los capilares
peritubulares contiguos, y algunos macrófagos. En su relación estrecha con la base de
las células epiteliales tubulares, los fi-broblastos del intersticio renal se asemejan a los
fi-broblastos subepiteliales del intestino. Estas células sintetizan y secretan el
colágeno y los glucosamino glucanos de la matriz extracelular del intersticio. En la
médula, las células intersticiales principales se parecen a los miofi-broblastos. Se
orientan paralelas a los ejes longitudinales de las estructuras tubulares y
desempeñarían algún papel en la compactación de estas estructuras. Las células
contienen haces prominentes de filamentos de actina, un retículo endoplásmico
rugoso (RER) abundante, un complejo de Golgi bien desarrollado y lisosomas. Las
inclusiones lipídicas prominentes en el citoplasma parecen aumentar y disminuir en
relación con el estado de diuresis.
La mayoría de los fi-broblastos se origina dentro del tejido intersticial a través de un
mecanismo denominado transición epitelio mesenquimatosa. La conversión de las
células epiteliales tubulares en un fenotipo mesenquimatoso se inicia por la alteración
del equilibrio de las concentraciones locales de citocina. Durante la lesión persistente
y la inflamación crónica del parénquima renal, aumenta la cantidad de fi-broblastos y,
mediante la secreción del exceso de matriz extracelular, la arquitectura intersticial
normal del riñón se destruye. Los estudios de investigación indican que en la fibrosis
renal, más de una tercera parte de todos los fi-broblastos relacionados con la
enfermedad se originan a partir de las células epiteliales tubulares ubicadas en el sitio
de la lesión. La proliferación de fi-broblastos en respuesta a mitógenos locales suele
conducir a una insuficiencia renal irreversible caracterizada por nefritis tubulo
intersticial. Intervenciones terapéuticas recientes sobre la fibrosis renal tratan de
inhibir la formación de fi-broblastos mediante el cambio del equilibrio local de las
citocinas a favor de la transición mesenquimoepitelial inversa.
• Vasos rectos, que forman asas paralelas al asa de Henle. Actúan como
intercambiadores de contracorriente de agua y solutos entre la parte descendente
(arteriolas rectas) y la parte ascendente (vénulas rectas) de los vasos rectos. Los
vasos rectos contribuyen a mantener el gradiente osmótico de la médula.
La interacción entre los conductos colectores, las asas de Henle y los vasos rectos es
necesaria para la concentración de orina mediante el mecanismo de intercambio de
contracorriente. Debido a que la rama gruesa ascendente del asa de Henle posee un
alto nivel de actividad de transporte y puesto que es impermeable al agua, el
Ultra filtrado modificado que finalmente llega al túbulo contorneado distal es
hipoosmótico. Cuando está presente la ADH, los túbulos contorneados distales y los
conductos colectores son muy permeables al agua. Por lo tanto, dentro de la corteza,
en la cual el intersticio es isoosmótico con respecto a la sangre, el ultra filtrado
modificado dentro del túbulo contorneado distal se equilibra y se torna isoosmótico,
en parte debido a la pérdida de agua hacia el intersticio y en parte por la adición de
iones diferentes de Na y Cl al ultra filtrado. En la médula, cantidades crecientes de
agua abandonan el ultra filtrado a medida que los conductos colectores atraviesan el
intersticio cada vez más hiperosmótico en su trayecto hacia la papila.
Como se ha mencionado, los vasos rectos también forman asas en la médula que son
paralelas al asa de Henle. Esta disposición asegura que los vasos proporcionen
circulación a la médula sin alterar el gradiente osmótico establecido por el
intercamtransporte de Cl en el epitelio de la rama ascendente del asa de Henle.
1. Filtración: Tiene lugar en una de las múltiples nefronas que hay en los riñones,
concretamente en los glomerulos. La sangre, al llegar a las nefronas, es sometida a
gran presión extrayendo de ella agua, glucosa, aminoácidos, sodio, potasio, cloruros,
urea y otras sales. Esto equivale a, aproximadamente, el 20% del volumen plasmático
que llega a esa nefrona, es aproximadamente 180 litros/dia, que es 4,5 veces la
cantidad total de líquidos del cuerpo, por lo que no se puede permitir la pérdida de
todos estos líquidos, pues en cuestión de minutos el individuo acusaría una
deshidratación grave.
2. Reabsorción: Cuando éste filtrado rico en sustancias necesarias para el cuerpo pasa
al túbulo contorneado proximal, es sometido a una resorción de glucosa, aminoácidos,
sodio, cloruro, potasio y otras sustancias. Ésta equivale, aproximadamente, al 65% del
filtrado. Aunque la mayor parte se absorbe en el túbulo contorneado proximal, este
proceso continúa en el asa de henlen y en el túbulo contorneado distal para las
sustancias
5. Secreción tubular: Este proceso se lleva a cabo a lo largo de los túbulos renales y
es similar a la reabsorción, pero ocurre en sentido, contrario, es decir, desde la sangre
pasan hacia la orina sustancias tóxicas que aún no han sido eliminadas y que puede
ser periudiciales para el organismo.
Irrigación sanguínea
Algunos aspectos de la irrigación sanguínea del riñón se han descrito en relación con
las funciones específicas (es decir, filtración glomerular, control de la presión arterial
e Intercambio de contracorriente), sin embargo, aún no se han brindado una
descripción general de la irrigación sanguínea renal. Cada riñón recibe una rama
grande de la aorta abdominal denominada arteria renal.
Vasos linfaticos
Los riñones contienen dos redes principales de vasos linfaticos. Estás redes suelen
no ser visibles en cortes histológicos de rutina pero pueden demostrarse por métodos
experimentales. Una red está ubicada en las regiones exteriores de la corteza y drena
vasos linfaticos mayores, que hay en la cápsula. La otra red es más profunda dentro
del parenquina del riñón y desemboca en los vasos linfaticos grandes en el seno renal.
Inervación
Las fibras que conforman el plexo renal derivan, en su mayor parte de la división
simpática del sistema nervioso autónomo. Causan la contracción del músculo liso
vascular y la consecuente vasocontraccion.
¿Qué es el uréter?
El uréter es un conducto muscular delgado y tubular que desempeña un papel
esencial en el sistema urinario. Su función principal es transportar la orina desde los
riñones hasta la vejiga, donde se almacena hasta su expulsión a través de la uretra.
Cada persona tiene dos uréteres, uno conectado a cada riñón.
Capa muscular: La capa media del uréter, formada por fibras musculares lisas
dispuestas en haces longitudinales y circulares. La contracción rítmica de esta capa,
conocida como peristaltismo, propulsa la orina hacia la vejiga.
¿Qué es la vejiga?
La vejiga forma parte del sistema urinario. Es un órgano con forma de globo, situado
en la pelvis, que se encarga de recoger y mantener la orina hasta su expulsión a través
de la uretra.
-Capa muscular: está formada por músculo liso con tres capas:
¿Qué es la uretra?
La uretra es un conducto tubular que forma parte del sistema urinario y tiene como
función principal la eliminación de la orina desde la vejiga hacia el exterior del
cuerpo. Además, en los hombres, también cumple una función reproductiva, ya que es
la vía por la cual el semen se expulsa durante la eyaculación.
Anatómicamente, la uretra presenta diferencias significativas entre hombres y
mujeres debido a sus funciones y ubicaciones específicas:
Balance Hidrico
El balance hídrico consiste en la relación existente entre la cantidad de líquidos que
consumimos y la cantidad de líquidos que expulsamos. Dependiendo de la cantidad de
ambos, la salud del individuo será mejor o peor. También hay que tener en cuenta la
temperatura ambiente, la humedad y la cantidad de minerales del agua.
Las vías urinarias son el sistema de drenaje del organismo para eliminar la orina, que
está compuesta de toxinas y exceso de líquido. Para que se produzca la micción
normal, todas las partes del organismo en las vías urinarias deben trabajar juntas en el
orden correcto. La cantidad de orina que producimos depende de muchos factores,
como la cantidad de líquidos y alimentos que consumimos y la cantidad de líquido
que perdemos a través del sudor y la respiración. Ciertos medicamentos,
enfermedades médicas y tipos de alimentos también pueden afectar la cantidad de
orina que el cuerpo produce. Los niños producen menos orina que los adultos.
También, los órganos de la excreción (riñones, glándulas sudoríparas y pulmones)
consiguen que los productos de desecho salgan del organismo. En el riñón los
productos de desecho salen desde la sangre junto con gran cantidad de agua y algunas
sustancias útiles.