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 Fomentan el pensar antes de tomar una decisión y planear las cosas antes de hacer
algo.
 Permiten comprender las propias ideas y emociones que se tienen y el desarrollo de la
autoestima.
 Aumentan el deseo de expresar cariño, apoyo y preocupación sincera por los demás.
 Ayudan a conocer mejor las emociones que se tienen, generando sentimientos de
respeto, confianza y cooperación hacia otras personas.
 Fomentan el pensar antes de tomar una decisión y planear las cosas antes de hacer
algo.
 Contribuyen a conocer los valores que son importantes para uno mismo (ej. respeto,
lealtad, compromiso, persistencia y, mediante la asertividad, poder rechazar peticiones
que no son de interés.
 Fomentan el trabajo en equipo y la colaboración.
 Incrementan la confianza para poder expresar ideas a los demás.
 Ayudan a resolver problemas con otras personas y encontrar soluciones.
 Facilitan el tratar asuntos de forma respetuosa con superiores y con la autoridad, a la
vez que se defienden los propios derechos.
Contacto visual o mirada:

Se utiliza para abrir y cerrar canales de comunicación y para regular turnos de palabra. Es
recomendable que mientras escuchamos, miremos a los ojos al menos el 75% del tiempo.

Gestos:

Generalmente expresados por movimientos de la cara y brazos. La cara muestra las

emociones y los brazos enfatizan lo que se está diciendo.

La voz:

La expresión de la voz es clave para comunicar adecuadamente los mensajes. Dos

características de la voz que debemos considerar son:

Tono: Uniforme y bien modulado, es importante que el tono que usamos esté de acuerdo
con el mensaje que se quiere transmitir.

Volumen: Si se controla el volumen será un poderoso instrumento de expresión personal.

Distancia y contacto físico:

Ejerce un efecto considerable dependiendo de la cercanía con la que nos posicionamos.

Podemos sentirnos invadidos, o cómodos.

Postura corporal:

Es recomendable mantener nuestro cuerpo dirigido a nuestro interlocutor cuando

queremos tener una comunicación más personal y una posición erguida cuando se desea
manifestar firmeza.

Para realizar una correcta comunicación asertiva es importante tomar en cuenta los
siguientes pasos:

Hablar en primera persona:

YO PIENSO, YO SIENTO, YO OPINO.

Hablar en primera persona nos ayuda a abrir la comunicación al hacer hincapié en que es
un punto de vista personal y no una verdad absoluta.
Algunos ejemplos

Algunos ejemplos de habilidades interpersonales son: empatía, asertividad, establecer

límites, manejo y respuestas a las críticas, negociación y soluciones de conflictos.

 Cuando alguien me esté hablando, poner atención a lo que los otros me están
contando más que en lo que yo quiero comunicar.
 Defender los derechos propios y opiniones sin dañar a los demás y sin mostrar una
actitud pasiva frente a un problema importante para nosotros.
 Ponerse en el lugar del otro para que la otra persona se sienta entendida sin ser
juzgada ni evaluada por nuestras opiniones.
 Encontrar estrategias creativas y flexibles para resolver eficazmente nuestros
problemas.
 Colaborar para lograr un objetivo común.
La empatía: Es mucho más que entender la postura de la persona que tenemos delante:
es sentir, compartir y ser capaces de comportarnos de tal manera que nuestras acciones
correspondan a lo que el otro vive, más allá de nuestras circunstancias.
Por esto es tan importante aprender a reconocer lo que sentimos, a regular su intensidad
y tener una respuesta que nos favorezca y promueva el bienestar.
  Disminuir el desgaste psicológico y permite hacer frente a las dificultades que
aparecen en el día a día.
 Favorece la regulación en la intensidad y la respuesta a lo que sentimos.
 Mejora la autoestima, al permitirnos conocer que las emociones y sentimientos son
normales, las puedo regular, puedo elegir la conducta a seguir y nos da seguridad
nosotras(os) mismas(os).
 Fortalece la convivencia con otras personas.
 Mejora el rendimiento de la persona en distintos ámbitos, como el laboral y el
académico.

 “Mantén los ojos abiertos y fija la mirada a un metro de distancia.”

 “Respira de modo natural, con un ritmo tranquilo, sin realizar inspiraciones o
espiraciones bruscas. Puedes colocar ambas manos sobre el abdomen, a la altura del
ombligo, y respirar tranquilamente durante un par de minutos, sin forzar la respiración
observando el movimiento del abdomen: cuando inspiramos, el diafragma se desplaza
hacia abajo y empuja el abdomen hacia afuera y cuando espiramos el movimiento es
inverso.”
Tiempo: entre 3 y 5 minutos pueden ser suficientes.
Observaciones: Este ejercicio resulta muy útil al comienzo de la mañana, sin embargo,
se puede realizar a cualquier hora del día.
 “Practicar alguna actividad mental (recordar nombres de películas, contar múltiplos de
números, pensar en letras de canciones, etc.).”
 “Hacer ejercicio físico, esto es importante para ayudar a la persona a liberar la energía
provocada por la emoción, el ejercicio es una buena manera de sacarlo sin dañar a otras
personas, por ejemplo, puedes intentar caminar, realizar estiramientos, hacer algunas
flexiones, entre otras.”
 “Realizar respiraciones lentas y profundas, para ello es necesario aprender a relajarse y
mantenerse tranquilo ante situaciones de estrés.”

 Un evento tiene un impacto estresante en la medida en que se considera que exige

demasiado o excede los recursos que tenemos.
 Puede poner en peligro el bienestar de una persona y podría llegar a tener efectos
graves para la salud cuando se presenta por un tiempo prolongado y no se controla de
manera adecuada.
  El manejo de tensiones y estrés implica reconocer las fuentes de estrés en la vida y
comprender qué ayuda a reducirlo.
 Existen diversas maneras de manejar las tensiones y el estrés entre ellas se encuentran
aquellas habilidades para promover hábitos saludables como una alimentación
balanceada, la calidad del sueño, hacer ejercicio y/o actividades recreativas, etc.
 También se pueden implementar técnicas de respiración para focalizar la atención y
solicitar ayuda, técnicas de relajación muscular, entre otras.

QUÉ ES? Es la habilidad que implica conocerse a una(o) misma(o); comprender el carácter, las
fortalezas, las debilidades, los deseos, las preferencias y las aversiones que se tienen.

CÓMO AYUDA? El autoconocimiento ayuda a las personas a comprender sus propios

pensamientos, emociones, sentimientos y comportamiento. También permite identificar
cuándo se necesita ayuda y aprender a solicitarla.

CÓMO DEBO AYUDAR? Para poder realizar un proceso de autoconocimiento, resulta

indispensable llevar a cabo una reflexión sobre sí misma(o) partiendo de reconocer las
cualidades y limitaciones para tratar de convertir lo descubierto en áreas de oportunidad y
desarrollo personal.

CÓMO SE REALIZA? Para poder conocerse mejor a sí misma(o), se recomienda realizar lo

siguiente:

 Hacer una lista de las cualidades y los defectos tratando de ser objetiva(o) y que no se
trate de prejuicios que se han formado a partir de la interacción con otras personas.
 Identificar aquello que agrada y desagrada.
 Plantear metas y realizar un proyecto de vida con propósitos a corto plazo y maneras
de conseguirlos.
 Escribir un diario.
 Buscar conocer el cuerpo y lo que se puede realizar.
 Ser capaz de identificar las emociones y cómo se reacciona ante las dificultades.
QUÉ ES? Aprender a resolver conflictos y tomar decisiones ayuda a las personas a promover
la autoeficacia y resolver con éxito las situaciones que enfrentan, al evaluar mejor sus
opciones y los efectos que pueden tener al elegir alguna.

QUE DEBO HACER? Para mejorar la toma de decisiones, es importante poder considerar de
manera objetiva los beneficios, los inconvenientes y costos de cada posible elección a la que
se enfrenta una persona, para ello resulta importante adquirir habilidades de la estrategia de
solución de problemas.

CÓMO SE REALIZA?

1. Identificación del problema: consiste en describir de manera clara y específica en qué

consiste el problema, separando cualquier problema relacionado o secundario y no
debe involucrar el señalar o culpar a otras personas. Ejemplo: El problema es que
discutimos cuando hablamos de ese tema.
2. Ofrecer soluciones. Este paso implica proponer y escuchar las diferentes alternativas
de solución, es importante: Hacer una lluvia de ideas para considerar y disponer de
soluciones. Evitar criticar cualquiera de las opciones ofrecidas. Buscar varias
alternativas: entre más soluciones mejor. Definir claramente la alternativa de solución.
3. Analizar las ventajas y desventajas de cada alternativa: implica que la(s) persona(s)
identifique y analice antes de tomar una decisión todas las consecuencias que tendría
cada una de las opciones de solución, a través de identificar las ventajas y desventajas
de cada una de ellas. La persona puede considerar además la viabilidad, los riesgos, la
facilidad para llevar a cabo cada una de las opciones para hacer un análisis y determinar
cuáles son las más adecuadas.
4. Elección de solución: en este paso es importante que se hayan considerado las
opciones que representen más ventajas, que sean más viables y sobre todo aquellas
con la que la persona se sienta más segura y cómoda.
5. Control de la situación: en este paso es importante que la persona genere un plan de
acción para llevar a cabo la solución, considerando los posibles obstáculos y teniendo
alternativas para enfrentarlos. Finalmente es importante que la persona se
comprometa a llevar a cabo la alternativa de solución.
6. Implementación de la solución: una vez llevada a cabo la solución, es importante que
la persona tenga la oportunidad de revisar si fue efectiva o no para resolver el conflicto,
le permite además evaluar si es necesario realizar algún ajuste.
2. Etapa para pensar:

Utilizando la información que se ha encontrado, se debe pensar si antes ocurrió un problema

similar y si se puede resolver de la misma forma o qué cambios se deberían de hacer para dar
una solución.

3. Etapa de iluminación:

A partir de todas las soluciones que se han pensado, se elige la que parece ser la mejor y se
lleva a cabo.

4. Etapa de revisión:

Con base en los resultados, se comprueba si la idea realmente ayudó o fue útil para resolver
el problema que se tenía.
La violencia, abuso, negligencia o intimidación u otras experiencias adversas pueden poner a
los niños, niñas y adolescentes en riesgo de enfermedades mentales; por el contrario, el
cuidado proporcionado por la familia, redes de apoyo y comunidad puede protegerlos.
Proveedores comunitarios

Los gestores comunitarios pueden desempeñar un papel importante para ayudar a los
cuidadores a utilizar mejores habilidades para afrontar su situación y pueden alentar a los
cuidadores a adoptar estrategias para responder a la conducta de una niña o niño
involucrándose de forma sensible y recíproca, y promoviendo la interacción positiva.
Mantener contacto visual con las hijas y/o hijos cuando se les habla, se juega, ayuda a
promover la cercanía y sentimientos de confianza.

Tener contacto físico, ya sea a través de besos, abrazos, hacer cosquillas, etc., con la y/o el
menor es importante para promover la interacción positiva y demostrar afecto a las y/o los
menores.

Es importante que las madres, padres y/o cuidadores promuevan momentos agradables a
través de responder sonriendo, generar la risa en las y/o los menores por ejemplo a través de
contar chistes, hacer muecas, entre otras.

Es importante promover en las y/o los menores esas conductas, a través de compartir con
ellas y/o ellos el juego, alimentos o actividades, para a su vez promover que ellas y/o ellos lo
hagan con sus pares.
2. Dar instrucción clara: Es importante que la petición sea corta y específica, evitando que sea
una solicitud de apoyo o una interrogación al NNA.

Por ejemplo:

Instrucción clara: Lleva tus juguetes a tu cuarto.

En vez de una solicitud de apoyo: “Puedes llevar tus juguetes a tu cuarto”.

3. Esperar: La cuidadora o cuidador deberá esperar el cumplimiento de la instrucción por

parte de la o el menor sin responder a protestas o quejas durante 10 segundos.

4. Elogio: Es importante que, si la o el menor responde a la instrucción, se promueva la

obediencia a través de brindar un elogio describiendo a la niña, niño o adolescente lo que hizo
adecuadamente, mirándole, sonriéndole y tocándola(o).

Por ejemplo:

Muy bien Luis por llevar tus juguetes a tu cuarto, eso es de gran ayuda para mí.
 Elogia o recompensa cuando notes un buen comportamiento.
 Encuentra formas de evitar confrontaciones severas. Sé firme pero amable y trata de
no gritar porque esto puede hacer que la niña o niño se sienta asustado o se podría
agravar cualquier conflicto.
 Encuentra formas de evitar confrontaciones severas. Sé firme pero amable y trata de
no gritar porque esto puede hacer que la niña o niño se sienta asustado o se podría
agravar cualquier conflicto.
 Evita criticar o insultar a su hija(o).
 No uses amenazas o castigos físicos y nunca abuses físicamente de tu hija(o). Usar el
castigo físico envía el mensaje de que la violencia física está bien.
 Promueve una interacción académica positiva.
 Establece reglas claras de la conducta y establece ganancias por el cumplimiento.
 Corrige de manera consistente las conductas inapropiadas.
Para hacer frente al estrés de este trabajo, es importante dar prioridad a tu propia salud física
y mental.
Cuando hay mucho trabajo que hacer o si uno se siente sometido a mucha presión, puede
ocurrir que no prestes atención a tu propia salud y necesidades. Sin embargo, a la larga es
mucho mejor que prestes atención a tu salud, para asegurarse de que te sientas bien y que
seas capaz de continuar prestando servicios a tu comunidad.
Centrarse en la propia salud comienza por adoptar un estilo de vida saludable.
 1. Participar en actividades individuales como leer, escuchar relatos o cocinar.
2. Participar en actividades creativas como escuchar música o hacer manualidades.
3. Participar en actividades físicas como dar un paseo relajante o presenciar o practicar
un deporte.
4. Participar en actividades individuales como leer, escuchar relatos o cocinar.

Si te sientes abrumada(o) o incapaz de afrontar los factores estresantes en tu trabajo o en tu

vida personal, trata de ponerte en contacto con tu familia, tus amistades u otros miembros
de la comunidad para que te apoyen.

Considera la posibilidad de solicitar ayuda de un prestador de atención de salud o un

especialista en salud mental, de ser necesario.

No estás sola(o) y siempre hay ayuda disponible.