GPC Oxigenoterapia Udec 2010
GPC Oxigenoterapia Udec 2010
GPC Oxigenoterapia Udec 2010
Carrera de Kinesiología
GUÍA DE PROCEDIMIENTO
Oxigenoterapia
1.0 PROCEDIMIENTO
Oxigenoterapia
2.0 DESCRIPCIÓN
Desde 1770 que el oxigeno es conocido como un gas presente en la atmosfera, desde
entonces se comienzan a dar recomendaciones empíricas de su beneficio, y ya en 1840 se
comienza a utilizar en anestesia, pero no fue hasta 1920 cuando Alwin Barach le otorga el
concepto moderno de su uso terapéutico, y desde ahí se ha comenzado a entender cada vez
de mejor manera sus efectos terapéuticos, para lo cual debemos entender la fisiología del
transporte de oxigeno a la periferia y la fisiopatología de la hipoxemia, esto con el fin de
darle la mejor aplicación clínica a la oxigenoterapia.
Dado que el oxígeno entra a la sangre únicamente a través de los pulmones, un incremento
en D(A-a)O2 indica una alteración en la transferencia pulmonar del O2 , sea por trastorno de
difusión, de la relación ventilación/perfusión o por incremento del cortocircuito,
exceptuando el cortocircuito extrapulmonar de derecha a izquierda. A partir de este paso, el
aporte de oxígeno a la periferia dependerá de la concentración de hemoglobina, de la curva
de disociación de la hemoglobina, del gasto cardíaco y de la perfusión individual de cada
órgano.
Si bien son muchas las variables que debemos considerar para cuantificar la gravedad de la
hipoxemia, como primer acercamiento tenemos que:
Bajo la PO2 teórica para la edad del paciente (en Concepción =105 – edad / 2) y sobre
60mmHg, se considera hipoxemia leve. Si la PO2 está entre 40 y 60 mmHg se considera
una hipoxemia moderada. Si la PO2 cae por debajo de los 40 mmHg se considera una
hipoxemia grave, ya que se teme de un daño miocárdico y cerebral. Mientras que, si la PO2
es menor a 20 mmHg, el riesgo de muerte es inminente.
Una vez que la presión de oxigeno en la sangre disminuye, el organismo intentará revertir
esta situación, por ello desencadenará una serie de respuestas fisiológicas enfocadas en
realizar esta misión. La primera respuesta que observaremos en la clínica, cuando la PO2
sea inferior a 55mmHg, será un aumento del trabajo respiratorio, para incrementar la
ventilación minuto produciendo una hipocapnia y por ende una mejora en la PAO2 y de la
PaO2. En la vasculatura pulmonar se produce una vasoconstricción en respuesta a la menor
PAO2, tratando de mejorar la relación V/Q.
Los lechos vasculares periféricos hipóxicos se vasodilatan causando taquicardia con el fin
de aumentar el gasto cardiaco; el volumen latido también aumenta. Hay un aumento de la
secreción de eritroyetina, por parte del riñón, causando eritrocitosis para mejorar la
capacidad de transporte del O2. Si bien estas respuestas fisiológicas son efectivas, al largo
plazo pueden tener efectos contraproducentes, ya que, el aumento del trabajo respiratorio
desencadena mayor demanda metabólica por mayor consumo de O2, lo cual contribuye a
desnutrición en pacientes con enfermedad pulmonar crónica severa. La vasoconstricción
pulmonar, la taquicardia, aumento del gasto cardíaco y eritrocitosis causan hipertensión
pulmonar, falla ventricular derecha y secundariamente pueden llevar a la muerte.
La hipoxemia se debe determinar por medio de la medición de gases arteriales que permite
no solo medir la PO2, sino también la PCO2, y calcular el D(A-a)2, ya que estos últimos
valores nos son útiles para determinar la causa de la hipoxemia. En pacientes sin historia ni
sospecha de retención de CO2, la oximetría de pulso es un método útil y fácil de utilizar, ya
que por medio del haz de luz que posee, es capaz de medir el porcentaje de hemoglobina
saturada con oxigeno (oxihemoglobina) de una manera no invasiva, por lo que no es una
medida absoluta de la cantidad de oxigeno, sino relativa en relación a la cantidad de
hemoglobina y lo saturada que ésta esté; pero si bien es muy utilizado, tiene ciertas
limitaciones, ya que puede arrojar falso-negativo para la hipoxemia o falso-positivo para la
normoxemia o hiperoxemia.
La hipoxemia por desequilibrios de la relación V/Q, es el posicionamiento el que juega un
rol importante más que el aporte de oxigeno. Mientras que en la hipoxemia por aumento del
shunt o cortocircuito intrapulmonar, que ocurre cuando la sangre no se oxigena por irrigar
zonas colapsadas, la administración de O2 no revertirá esta situación, lo que se denomina
hipoxemia refractaria, y el tratamiento apuntará a maniobras de reclutamiento alveolar.
En situaciones agudas, en las que la insuficiencia respiratoria tiene menos de 24-48 hrs de
evolución, se pueden administrar altas concentraciones de FiO2 desde el inicio del
tratamiento; mientras que en los casos de insuficiencia respiratoria crónica agudizada,
donde existe cierto grado de hipercapnia previa, la administración de oxigeno debe ser con
FiO2 bajas para evitar la acidosis respiratoria y/o encefalopatías por incremento excesivo de
PCO2, por lo que se aconseja iniciar el tratamiento de oxigenoterapia con FiO2 de 24% o
28%, y controlar su efecto con gasometría unos veinte minutos después de iniciada la
terapia. El objetivo siempre será de mantener una PO2 sobre 60 mmHg o una saturación de
oxigeno sobre 90%, sin incrementar de forma significativa la PCO2.
Existen distintas fuentes de oxigeno, con beneficios y limitaciones propias a cada uno, por
lo que la elección irá, principalmente, según el requerimiento de O2 y según el paciente.
Existen en el mercado cilindros de diferentes capacidades, cada uno esta indicado con una
letra que representa sus características y un factor matemático que permite calcular a través
de una ecuación el tiempo disponible de oxígeno que el cilindro es capaz de ofrecer a un
flujo determinado. La ecuación es la siguiente:
Poseen diversos sistemas de seguridad para su acople, de modo de no mezclar circuitos con
suministros errados, entre los sistemas están:
ASSS = American Standard Safety System
PISS = Pin – Index Safety System
DISS = Diameter – Index Safety System
Sistemas de Conexión Rápida
Ventajas:
Los sistemas de gas comprimido no presentan pérdidas del contenido aún cuando no se
utilizan por tiempos prolongados.
No requiere de electricidad.
Mayor disponibilidad en el mercado
Constituye un sistema de alta seguridad.
Los cilindros tipo D y E pueden utilizarse de forma portátil para traslados.
Desventajas:
• Los cilindros requieren ser llenados periódicamente por lo que es necesario depender de
una compañía que realice el servicio.
• Por ser un sistema de alta presión puede ser sumamente peligroso si no es utilizado
adecuadamente (efecto torpedo)
• No puede permanecer en lugares muy cálidos o muy fríos.
Los cilindros no deben perforarse y acercarse al fuego, no debe permitirse fumar en las
áreas cercanas a donde se utilizan.
Las unidades portátiles conteniendo de 1 a 2 libras pesan entre 0,45 y 0,49 Kg., con 8 a 10
libras pesan de 3.6 a 4.5 Kg. y pueden ofrecer oxígeno continuo a 2 lpm por unas 8 horas.
El oxígeno líquido es ideal para pacientes que requieren altos flujos o que reciben oxígeno
con dispositivos tipo máscara simple o de reservorio, también es ideal para traslados que
requieren más tiempo de uso portátil.
Cuando el flujómetro del cilindro pequeño es abierto el oxígeno en forma líquida pasa a
través de un conducto donde una resistencia aumenta la temperatura y lo convierte en gas
que es la forma como es recibido por el paciente.
Ventajas:
• Al igual que los sistemas de gas comprimido el oxígeno líquido no requiere electricidad.
• Es capaz de ofrecer cantidades importantes de oxígeno en contenedores pequeños.
• Constituye un sistema de baja presión.
• Es ideal para traslados por permitir mayor margen de tiempo
Desventajas:
Una de las más importantes, es la perdida del contenido cuando no se usa
periódicamente.
La baja temperatura a la que esta sometido el gas para hacerse líquido puede causar
quemaduras graves en caso de accidentes.
Requiere de una compañía de servicio para el llenado y mantenimiento de los tanques.
No es ideal para países muy calurosos.
Es un sistema más caro.
Un sistema que puede ser agregado a los cilindros de gas comprimido y oxígeno líquido es
el denominado DODS (Demand Oxygen Delivery System), que consta de un sensor de
presión capaz de captar los cambios que se producen al comenzar la fase inspiratoria del
paciente, este sensor, activa una válvula solenoide que permite el envío del oxígeno al
dispositivo durante la inspiración, luego durante la espiración el sistema se cierra no
permitiendo la salida de oxigeno. Su objetivo principal es el ahorro, aumentar el tiempo de
los cilindros y disminuir costos en pacientes que requieren largos períodos con O2.
Las dos piedras actúan de forma alternativa, presurizándose para separar el oxígeno y
despresurizándose para purgar los gases de desecho, este proceso es llamado ciclo
oscilatorio. El oxígeno resultante es almacenado y enviado al paciente a través de un
flujómetro, debido a que el vapor de agua es absorbido, este sistema requiere de
humidificación adicional.
Desventajas
Requieren de energía eléctrica.
Necesita de fuente gaseosa suplementaria adicional.
No son portátiles
Costo inicial alto
Requiere de electricidad
Es necesaria la adquisición de un cilindro adicional lleno como medida de seguridad en
caso de fallas eléctricas
En el caso del concentrador de piedra molecular solo ofrece un máximo de 6 lpm y este
es inversamente proporcional a la concentración
En el caso del concentrador de membrana solo ofrece concentraciones de 40% de
oxígeno
Requiere supervisión continua de una compañía especializada.
Los concentradores deben colocarse en lugares donde exista una adecuada circulación de
aire no contaminado.
3.2 EQUIPOS
Existen dos sistemas para la administración de oxígeno: los sistemas de bajo flujo y los
sistemas de alto flujo.
Estos sistemas suministran oxígeno puro (100%) a un flujo menor que el flujo inspiratorio
del paciente. El oxígeno administrado se mezcla con el aire inspirado y, como resultado, se
obtiene una concentración de oxígeno inhalado (FiO2) variable, alta o baja, dependiendo
del dispositivo utilizado y del volumen de aire inspirado por el paciente. Es el sistema de
elección si la frecuencia respiratoria es menor de 25 respiraciones por minuto y el patrón
respiratorio es estable, de lo contrario, el sistema de elección es un dispositivo de alto flujo.
Los consensos sobre oxigenoterapia establecen que el oxígeno suministrado a los adultos
por cánula nasal con cantidades de flujo menor o igual a 4 L/min no necesita ser
humidificado; no obstante en cada servicio de salud existen protocolos, los cuales no
debemos pasar por alto.
Ventajas
• Tiene buena tolerancia por parte del paciente
• Constituye un dispositivo ideal para aportar bajas FIO2
• Permite al paciente hablar y comer sin interrumpir la oxigenoterapia
• Es un dispositivo económico
• Es ideal para largos períodos de tiempo de oxigenoterapia
Desventajas
• La FIO2 que aporta es variable dependiente del flujo inspiratorio que genere el paciente
• Puede moverse fácilmente y salir del lugar ideal durante el sueño
• No permite el aporte de flujos superiores a 6 lpm, ni FIO2 superiores a 0,4
• Si no se lubrica adecuadamente puede ocasionar graves molestias
Puede suministrar una FiO2 de 0,35-0,50 (35%-50%) de oxígeno con flujos de 5-10 litros
por minuto. Es necesario mantener un flujo mínimo de 5 litros por minuto con el fin de
evitar la reinhalación de CO2 secundario al acúmulo de aire espirado en la máscara. Se
deben tomar precauciones cuando se utiliza una máscara simple, pues, su empleo a largo
plazo puede ocasionar irritación en la piel y úlceras de presión. Durante el periodo de
alimentación el paciente debe utilizar cánula de oxígeno para evitar hipoxemia.
Ventajas
• Es un dispositivo económico y práctico
• Es capaz de ofrecer FIO2 hasta de 0,6
• No es invasivo
Desventajas
• La FIO2 es variable dependiente del flujo inspiratorio del paciente
• Es menos tolerada que el bigote nasal
• El paciente no puede comer ni hablar cómodamente sin interrumpir la oxigenoterapia
• No puede aportar FIO2 inferiores a 0,4
• Si se utilizan flujos inferiores a 5 lpm puede ocurrir reinhalación de CO2
• Puede ocasionar irritación en la piel.
Es una máscara simple con una bolsa o reservorio en su extremo inferior; el flujo de
oxígeno debe ser el flujo de oxígeno debe ser como mínimo el doble del volumen minuto o
el suficiente para mantener la bolsa inflada. A un flujo de 6 a 10 litros por minuto puede
aportar una FiO2 de 0,4-0,7 (40%-70%). Las máscaras de no reinhalación de oxígeno son
similares a las máscaras de reinhalación parcial, excepto, por la presencia de válvulas
unidireccionales entre la bolsa y la máscara que evita que el aire espirado retorne a la bolsa
y otras dos válvulas que evitan inspirar el aire que no sea de la bolsa de reservorio.
A medida que se retiren las válvulas laterales esta FiO2 va en disminución, así con una
válvula menos, el aporte será aproximado a 70 – 90%, y al retirar ambas válvulas la FiO2
será entre 60 y 70%, cuando retiramos todas las válvulas, se comporta como un máscara de
reinhalación parcial y su aporte de oxigeno será entre 50 – 60%.
Ventajas
• Ofrece mayores FIO2 sin ser invasivo
• Resulta un recurso útil para situaciones de emergencia
• El reservorio garantiza mejor aporte aun en pacientes con un VC deteriorado.
Desventajas
• La FIO2 es variable dependiente de la capacidad inspiratoria del paciente
• El paciente no puede hablar y comer cómodamente sin suspender la oxigenoterapia
• El reservorio puede tener escapes inadvertidos
• Su uso incorrecto puede traer como consecuencia la reinhalación de CO2
• No puede suministrar FIO2 inferiores a 0,5
• El reservorio puede contaminarse y ser lugar de cultivo para hongos y bacterias
• Requiere de estricta supervisión por parte del médico tratante y del terapeuta respiratorio.
Ventajas
• Ofrece altas concentraciones de forma no invasiva
• Representa un sistema de bajo flujo y alta concentración
• Puede ser muy útil en casos de emergencia.
Los pacientes que reciben oxígeno por cánula transtraqueal (pequeñas cánulas
transtraqueales diseñadas para oxigenoterapia domiciliaria), pueden continuar recibiendo
oxígeno por este método al llegar a urgencias si no hay problemas adicionales. Si se
presentan dificultades relacionadas con la ruta de administración transtraqueal, la
oxigenación debe ser asegurada por otros medios.
Los sistemas de alto flujo aportan mezclas preestablecidas de gas con FiO2 altas o bajas a
velocidades de flujo que exceden las demandas del paciente, es decir, el flujo total de gas
que suministra el equipo es suficiente para proporcionar la totalidad del gas inspirado. Los
dispositivos de alto flujo utilizan el sistema Venturi con base en el principio de Bernuolli,
en el cual, el equipo mezcla en forma estandarizada el oxígeno con el aire ambiente a través
de orificios de diferente diámetro. Proporciona FiO2 conocidas entre 24 y 50% para lo cual
se debe seleccionar la FiO2 que se desea aportar al paciente y luego suministrar el flujo
necesario para que este aporte se cumpla.
Generalmente en el dispositivo Venturi aparece la cantidad de flujo de oxigeno que se
necesita para aportar cada FiO2, pero en caso de no ser así, se puede calcular de acuerdo a
una ecuación.
Para lograr la mezcla deseada pueden manipularse dos variables, el tamaño del agujero,
mientras mas pequeño, mayor será el aumento de la velocidad, menor la presión generada,
mayor la entrada de aire ambiente por lo tanto una menor concentración de oxígeno. Otra
variable sería, que con un tamaño fijo del diámetro del agujero, se varíe el tamaño de la
ventana que permite el acceso al aire ambiente, mientras mayor sea el tamaño de la
ventana, mayor será la cantidad de aire que entra y menor la concentración de oxígeno en la
mezcla final.
El dispositivo se une, en un extremo con la línea de oxígeno que proviene de la fuente y en
el otro extremo a un espaciador, que generalmente es un trozo de manguera corrugada,
donde ocurre la mezcla, y éste a una máscara. Al contrario de la máscara simple, la
utilizada para el sistema Venturi, debe tener grandes agujeros a los lados, perfectamente
abiertos, que permita la liberación de la presión dentro de la máscara por el alto flujo
originado por el sistema.
Los dispositivos están marcados con el flujo al que debe colocarse y el porcentaje de
oxígeno que aportara el sistema en estas condiciones. Cualquier variable dentro del sistema
que no se utilice adecuadamente variará su exactitud y hará al sistema ineficiente al no
cumplir con el objetivo deseado, que es saber con exactitud de la FIO2 que recibirá el
paciente.
Por el hecho de que se utiliza gran parte del aire ambiente para la mezcla, que posee la
humedad necesaria, este sistema no necesita conectarse a un humidificador, si en
determinados casos se hace necesaria la aplicación adicional de humedad, por ejemplo para
hidratación de secreciones, mediante, por ejemplo, de un sistema de burbuja u otro, o
aprovechar que el sistema cuenta con una pieza llamada Hood, que se conecta de tal
manera, que rodea la ventana por donde entrará el aire ambiente. Esta pieza tiene una
entrada que permite la conexión de una manguera corrugada, ésta se une a un frasco aerosol
y éste a una fuente de aire comprimido, este proceso logra crear un ambiente alrededor de
la ventana de pequeñas gotas de agua que entraran al sistema, se unirán a la mezcla, y se
humidificará la vía aérea. Aunque en otros casos no se requiera humedad extra para las vías
aéreas, se recomienda conectar de todas formas el hood al sistema, sin la manguera
corrugada, de manera que sirva de protección a la ventana de entrada de aire, que muchas
veces es bloqueada por la cobija o por la postura del paciente.
Los dispositivos que varían la apertura de la ventana de entrada de aire crean una FIO2 de:
• 0,24 y 0,26, a 3 lpm • 0,4 a 12 lpm
• 0,28 y 0,3 a 6 lpm • 0,5 a 15 lpm.
• 0,35 a 9 lpm
El color del dispositivo para las fracciones comprendidas entre 0,24 y 0,3 es verde,
mientras que el color del dispositivo para fracciones de 0,35 a 0,5 es verde y blanco.
Los dispositivos de agujero variable, presentan diferentes colores según la concentración de
oxígeno que son capaces de ofrecer, de todas formas, la pieza siempre debe llevar impreso
la concentración y el flujo requerido. Los dispositivos son los siguientes:
• Azul, aporta 24% de oxígeno a un flujo de 3 lpm.
• Blanco, aporta 28% de oxígeno a un flujo de 6 lpm.
• Naranja, aporta 31% a 8 lpm.
• Amarillo, aporta 35% a 12 lpm.
• Rojo, aporta 50% a 15 lpm.
3.1.2.2 TUBO EN T
Es una campana cerrada y compacta que se utiliza en lactantes. Proporciona un alto grado
de humedad y funciona como un sistema de alto flujo si se conecta a un sistema Venturi. Es
indispensable utilizarla con un nebulizador. Tiene como desventajas la dificultad para
alimentar el lactante y la dificultad para su aplicación en niños activos. Se recomienda
eliminar la condensación acumulada en los tubos por lo menos cada dos horas y, si se
utiliza calentador, asegurar una temperatura de 34,5- 35,6ºC en el interior de la cámara con
controles cada 4 horas.
La tienda facial funciona como un sistema de alto flujo cuando se acopla a un nebulizador
Venturi. Es útil en pacientes que no toleran la mascarilla facial o en caso de traumatismo
facial. Es poco práctica para tratamiento a largo plazo, debido a que, en algunos pacientes
produce sensación de calor y de confinamiento. El riesgo de reinhalación de CO2
disminuye cuando la máscara se acopla a un sistema Venturi.
Existen diferentes métodos para administrar el O2, cada uno de ellos con indicaciones más
o menos precisas y con ventajas e inconvenientes propios. La fuente de oxígeno es variable,
desde el sistema centralizado de los hospitales hasta diferentes equipos domiciliarios.
Los dispositivos más empleados son los balones metálicos con gas comprimido que
contienen O2 al 100% a alta presión. Sin embargo, resultan poco prácticos en aquellos
pacientes que requieren flujos altos y continuos de O2 (> 2 L/min por 24 horas), pues
obligan al recambio frecuente de los balones y aumentan, consecuentemente, los costos de
mantención. Estos inconvenientes son superados por los concentradores eléctricos, que
funcionan haciendo pasar el aire ambiente a través de un filtro molecular que remueve el
nitrógeno, el vapor de agua y los hidrocarburos, con lo cual concentran el O2 ambiental a
más del 90%. Su uso exige una alta inversión inicial, pero permite disminuir los costos de
mantención. Debido a que emplean energía eléctrica, se requiere algún medio
complementario de aporte de O2 para aquellas situaciones en que se interrumpa el
suministro eléctrico. Desafortunadamente, el gas comprimido y los concentradores no
permiten la deambulación de los pacientes fuera del domicilio. Los únicos dispositivos que
lo permiten son los depósitos de oxígeno líquido, reservorios estacionarios que permiten
llenar reservorios portátiles livianos, con autonomías de hasta 7 horas a flujos de 2 L/min.
Esto permite al paciente estar varias horas alejado de la fuente estacionaria y eventualmente
reintegrarse a alguna actividad laboral. Tienen el inconveniente de su alto costo. (3)
Se considera indicacion por tanto una hipoxemia documentada, en adultos y niños mayores
de 28 días, se toma como referencia una PaO2< 60 mmHg o SatO2 < 90% mmHg
respirando aire ambiente, en neonatos se toma como referencia una PaO2 < 50 mmHg o
una SatO2 < 88% o una tensión capilar de O2 < a 40%.
Cualquier situación de emergencia donde se sospeche hipoxemia.
Traumatismos severos.
Infarto agudo miocárdico.
Puede utilizarse en recuperación de anestesia.
La oxigenoterapia crónica tiene indicaciones muy precisas, debido a su alto costo. Su efecto
beneficioso más relevante es prolongar la sobrevida. Sin embargo, este efecto sólo se ha
demostrado en pacientes con EPOC. En las otras causas de insuficiencia respiratoria
crónica en que se emplea O2 (enfermedades intersticiales, enfermedades neuromusculares,
otras limitaciones crónicas del flujo aéreo) los efectos benéficos son principalmente
sintomáticos: disminución de la disnea, aumento de la capacidad de ejercicio, mejoría de la
calidad del sueño y mayor calidad de vida. Los criterios empleados para indicar el uso
crónico continuo de oxígeno son más o menos universales
Oxigenoterapia continua (18-24 h/día). (3)
4.2.2 INTERMITENTE
4.2.2.1 PO2 < 55mmHg o SaO2 < 88% sólo durante el sueño
4.2.2.2 PO2 < 55mmHg o SaO2 < 88% sólo durante el ejercicio
Cuando existe retención de CO2 en una insuficiencia respiratoria aguda sobre crónica y
debe administrarse oxígeno en concentraciones precisas y progresivas, aspecto que se
discutirá más adelante. (3)
5.0 CONTRAINDICACIONES
La toxicidad del oxígeno esta relacionada con la aparición de radicales libres. El mayor
producto que se produce del metabolismo del oxígeno es el agua, sin embargo, algunas
moléculas de oxígeno producen especies altamente reactivas llamadas radicales. Todos
ellos son tóxicos para las células traqueobronquiales y alveolares.
Normalmente las enzimas antioxidantes como la desmutasa del supraóxido y la peroxidasa
de glutatión actúan protegiendo a las células debido a la acción destructora de los radicales
libres del oxígeno (anión súper óxido, radicales hidroxilos, peróxido de hidrógeno, entre
otros), que se ha observado que aumentan precozmente en el aire exhalado en condiciones
de hiperoxia. Cuando la exposición a oxígeno a elevadas concentraciones es prolongada en
el tiempo el sistema antioxidante es superado produciéndose el daño tisular.
Cuando esto sucede hay destrucción oxidativa del tejido pulmonar y esto se manifiesta de
manera aguda con una irritación traqueobronquial con desarreglo de la actividad de los
cilios del epitelio respiratorio y con disminución de la capacidad vital secundaria al edema
presente y a las atelectasias por reabsorción. Si el contacto continúa, los capilares
comienzan a trasudar. Esto se acompaña de hemorragia intralveolar con producción de
edema alveolar con menoscabo de la función de las células tipo II, productoras de la
sustancia tensoactiva del pulmón. El resultado final puede ser la aparición del síndrome
distresante respiratorio del adulto con infiltrados pulmones, fibrosis, y eventualmente la
muerte. Cambios patofisiológicos asociados con este síndrome incluyen un decremento de
la distensibilidad pulmonar, una reducción del flujo de aire inspiratorio, una disminución de
la capacidad de disfunción, y la presencia de disfunción de las vías respiratorias pequeñas.
En general se consideran como primeros signos de toxicidad por oxigeno la tos, inquietud,
letargia, vómitos, disnea, dolor toráxico retro esternal, sensación referida como quemadura
u opresión. Las lesiones mas avanzadas pueden manifestarse por infiltrados en las
radiografías de tórax, cianosis, edema pulmonar y posiblemente hemoptisis.
6.1 Los pacientes con hipercapnia crónica (PaCO2 > 45 mm Hg) pueden resultar con una
hipercapnia agravada por la hiperoxia generalmente producida por una combinación de tres
fenómenos: aumento del espacio muerto, efecto Haldane y disminución de la ventilación
minuto. Pueden por ello presentar depresión ventilatoria, episodios de acidosis y narcosis
por retención de CO2 si reciben concentraciones altas de oxígeno, ya que el estímulo para la
ventilación en estos pacientes es la hipoxemia; por lo tanto, está indicada la administración
de O2 a concentraciones bajas (no < de 30%). En pacientes con EPOC, hipercápnicos e
hipoxémicos crónicos, se busca corregir la hipoxemia (PaO2 por encima de 60 mmHg y
saturación mayor de 90%) sin aumentar significativamente la hipercapnia mediante flujos
de 1-3 l/min; si son necesarias FiO2 más elevadas, probablemente haya que recurrir a VM.
6.2 Con FiO2 mayor o igual a 50% se puede presentar atelectasia de absorción, toxicidad
por oxígeno y depresión de la función ciliar y leucocitaria. Las tensiones de oxígeno
inspirado hasta 50% a una atmósfera rara vez causan toxicidad aguda por oxígeno aunque
la exposición sea prolongada.
En recién nacidos pueden darse cuadros de Displasia Broncopulmonar Mas frecuente
mientras más inmaduros son (< 28 semanas), pues la maduración del sistema surfactante y
las enzimas antioxidantes es lo que impide el daño broncoalveolar por radicales de O2. Por
otra parte está disminuida la actividad inhibitoria de las proteasas y esta a junto a la
actividad oxidante son las responsables de las lesiones descritas que se expresan como
inflamación, edema y fibrosis. La hiperoxia inhibe a su vez la maduración y el crecimiento
de los pulmones que tienen por ello menos alvéolos y desarrollo vascular.
La DBP se puede producir con FiO2 60% durante dos días o con FiO2 de 40% con un
mínimo de 3 días. Para que se produzca con FiO2 40% se necesita un período de tiempo
más prolongado en ventilación mecánica. En general con 5 días en ventilación mecánica
convencional y una FiO2 60% ya se produce una DBP.
6.3 En prematuros debe evitarse llegar a una PaO2 de más 80 mmHg, por la posibilidad de
retinopatía.
6.4 En niños con malformación cardiaca ducto dependiente el incremento en la PaO2 puede
contribuir al cierre o constricción del conducto arterioso.
6.5 El oxígeno suplementario debe ser administrado con cuidado en intoxicación por
paraquat y en pacientes que reciben bleomicina
En pacientes con SDRA se recomienda no usar FIO2 > a 60%, de no ser posible se
recomienda no usar FIO2 > 60% por periodos mas allá de 24 Hrs.
6.6 Durante broncoscopia con láser, se deben usar mínimos niveles de oxígeno
suplementario por el riesgo de ignición intratraqueal.
6.9 Pueden existir manifestaciones citotóxicas del O2 sobre el sensible epitelio respiratorio
con producción de síndromes agudos (SDRA) o crónicos (trastornos inflamatorios similares
en el adulto con enfisema y fibrosis).
También hay que tener precaución cuando se rellena la mochila de oxígeno líquido (OL),
ya que puede originar quemaduras por congelación.
En la manipulación de los balones hay que tener cuidado de no golpear el regulador ya que
este se puede desconectar e impulsar el balón como un misil.
Se debe también tener cuidado de no tener fuentes de calor cerca del oxigeno (cigarro,
fogon, calentadores, etc.) por el riesgo de generar combustión y quemaduras en el paciente
que recibe oxigenoterapia tanto por combustión del oxigeno como del equipo que
suministra el oxigeno (por ejemplo la cánula nasal a pesar de que éstas están por lo general
hechas de un material plástico que es resistente al fuego.)
7.0 PROCEDIMIENTO
Equipo
Mascarilla.
Fuente de oxígeno.
Medidor de Flujo (flujómetro).
Humidificador.
Solución estéril
· Elegir el tamaño de la mascarilla. Conector adecuado para la concentración deseada.
· Comprobar y ajustar la concentración de oxígeno prescrita. Ajustar la mascarilla a
paciente tirando de la cinta elástica y adaptando la tira metálica a la nariz.
· Vigilar que el paciente se encuentre cómodo, ya que suele ser molesta, causa sensación de
ahogo y dificulta la comunicación.
· Si el tratamiento es continuo, debe cambiarse por una cánula nasal durante las comidas.
· Limpiar la mascarilla y cara del paciente, además de lubricar diariamente los labios. (4)
Equipo
Procedimiento
Equipo
Mascarilla de Venturi.
Adaptador de acuerdo a la concentración de oxígeno que se desee.
Fuente de oxígeno.
Procedimiento
a) Llenar la bolsa reservorio con oxígeno hasta inflarla y ajustar el flujómetro entre 6 a10
l/min.
b) Ajustar el flujo de oxígeno de tal manera que la bolsa en la reinhalación no se colapse
durante el ciclo inspiratorio.
Equipo
Mascarilla de no respiración.
Fuente de oxígeno.
Medidor de Flujo (flujómetro).
Solución de irrigación.
Humidificador.
Procedimiento
Equipo
Casco cefálico.
Fuente de oxígeno.
Flujómetro.
Humidificador.
Solución para irrigación.
Tubo para conexión.
Procedimiento
Los resultados se evalúan mediante una valoración clínica y fisiológica que establezca una
adecuada respuesta del paciente a la terapia.
Después de iniciada la oxigenoterapia se debe evaluar periódicamente los beneficios
clínicos, la corrección de la hipoxemia y la presencia de efectos deletéreos.
En los pacientes con EPOC agudizado se requieren 20 a 30 minutos para llegar a una
situación de estabilidad luego de cualquier cambio en la FiO2. Por esta razón, las
pulsoximetrías realizadas antes de este lapso de tiempo pueden dar información errónea que
conduce a decisiones inadecuadas.
Se recomienda vigilar el posible empeoramiento de la PaCO2 durante la oxigenoterapia en
los siguientes pacientes:
• Pacientes con antecedente de retención de CO2 en hospitalizaciones anteriores.
• Pacientes con EPOC que presentan empeoramiento súbito de la hipoxemia.
• Pacientes que correspondan al estereotipo del “abotagado azul”, con hipoxemia y
cor pulmonale pero con disnea leve.
• Pacientes sin diagnóstico previo en quienes la hipoxemia aguda se acompaña de
hipersomnolencia. (1)
9.0 FRECUENCIA
10.0 MONITORIZACIÓN
Todos los sistemas de administración de oxígeno tienen que ser evaluados por lo menos
una vez al día.
Es necesario realizar evaluaciones más frecuentes con analizadores calibrados a algunos
sistemas de administración de oxígeno:
- Sistemas susceptibles de variación en la concentración de oxígeno (ej: sistemas
mezcladores de alto flujo).
- Sistemas de oxigenoterapia aplicados a pacientes con vía aérea artificial.
- Sistemas que suministran mezclas de gas precalentado.
- En pacientes que están clínicamente inestables o que requieren FiO2 >0,50.
- Evitar la interrupción de la oxigenoterapia en situaciones como la deambulación o el
transporte para procedimientos.
ANALIZADORES DE OXIGENO
Existen tres tipos básicos de analizadores de oxígeno: los físicos o paramagnéticos, los
eléctricos y los electroquímicos.
Analizadores eléctricos
Los analizadores eléctricos están basados en el principio de la conductividad térmica.
Los gases conducen en mayor o menor grado calor, el oxígeno conduce mejor el calor que
el nitrógeno, de manera que un cambio en las proporciones de estos gases dentro de una
mezcla altera directamente la conductividad térmica, estos cambios son directamente
proporcionales a la cantidad de oxígeno presente.
De una batería sale un puente con dos ramales, uno se dirige al lugar donde se expone el
gas al análisis y el otro actúa como una resistencia variable que sirve para el proceso de
calibración.
La calibración que debe realizarse antes de su uso, consiste en hacer pasar una muestra de
aire ambiente, la medida debe llevarse a 21%, luego se introduce oxígeno, lo que creará un
desbalance entre los dos ramales eléctricos y ésta diferencia de potencial es leída en
términos de porcentaje de oxígeno por un galvanómetro.
Hay que recordar que este tipo de analizador, lee la proporción de oxígeno con respecto al
nitrógeno, de manera que si la mezcla contiene otros gases, la lectura puede ser errónea, sin
embargo, la calibración puede hacerse para interpretar otros gases como el helio, de hecho,
generalmente los equipos de función pulmonar que utilizan este gas poseen este tipo de
analizador.
La resistencia eléctrica de estos analizadores genera calor, por lo que puede resultar
peligroso el análisis de gases inflamables mezclados con oxígeno, por esta razón no se
recomienda su uso para este tipo de mezclas.
Analizadores electroquímicos
Existen dos tipos de analizadores electroquímicos: Los polarográficos, también conocidos
como electrodos de Clark, y el de célula galvánica.
A diferencia de los analizadores físicos y eléctricos, los analizadores electroquímicos son
capaces de proporcionar un análisis continuo de las concentraciones de oxígeno.
Los analizadores electroquímicos se basan en el principio químico de la oxidoreducción, la
reacción ocurre dentro de una solución electrolítica por un ánodo y un cátodo, separados
del aire por una membrana semipermeable, la cantidad de oxígeno que difunde a través de
esta membrana es proporcional a la PO2, al pasar, las moléculas de oxígeno migran al
ánodo, donde químicamente se reduce a iones hidroxilos. Estos iones migran entonces al
cátodo donde oxidan un metal, que generalmente es plata o plomo, de manera que la oxido-
reducción ocurre dentro de un flujo constante entre el ánodo y el cátodo, de esta reacción se
liberan electrones y este potencial eléctrico se transmite a un galvanómetro calibrado para
dar lectura en términos de presión parcial.
La reacción química puede resumirse así:
Básicamente este tipo de analizadores es el que se encuentra en los gasómetros que analizan
muestras de sangre, solo que frecuentemente utilizan ánodos de platino u oro y un cátodo
de plata.
Los analizadores electroquímicos contienen una batería que se encarga de mantener la
polaridad de los electrodos y la velocidad de las reacciones, esto es lo que permite la
clasificación de este tipo de analizador, como analizador de respuesta rápida.
Los analizadores electroquímicos tipo galvánico utilizan un ánodo de oro y usualmente un
cátodo de plomo, a diferencia del electrodo de Clark, el flujo es sostenido solo por las
mismas reacciones químicas, o sea, que a menos que se quiera agregar accesorios al
analizador, como alarmas de alerta, éste no necesita ser conectado a una corriente eléctrica.
Oximetría de pulso
La oximetría o saturometría de pulso, es un método que permite obtener una buena
aproximación de las condiciones de saturación arterial de oxihemoglobina.
Su tecnología se basa en dos principios físicos, que son la espectrofotometría y la
fotopletismografía. La espectrofotometría es la técnica que nos permite medir la cantidad
de luz que una sustancia es capaz de absorber y la fotopletismografía usa luz para medir la
presión arterial a través de las ondas generadas por el pulso de los capilares.
Las moléculas de oxígeno tienen la propiedad de absorber longitudes de ondas luminosas
infrarrojas, estos equipos, tienen un emisor y un receptor de dicha luz, la cantidad restante
entre la luz que envía el emisor y la que capta el receptor es proporcional a la cantidad de
moléculas de oxígeno presentes en los capilares y a la saturación de la hemoglobina.
Con el fin de facilitar el paso de la luz infrarroja a través de los capilares, debe elegirse una
zona en la cual estos capilares sean abundantes y estén lo más cercano posible a la
superficie de la piel, como es el caso de las puntas de los dedos y los lagrimales. En otras
épocas se uso mucho también la oximetría de oído.
Este método de medición de la saturación no sustituye de ningún modo a los gases
arteriales, ni a la medida directa de la PaO2.
Indicaciones
• Necesidad de evaluar o monitorear el comportamiento de la saturación de O2 en la sangre
de forma no invasiva.
• Evaluar los requerimientos y ajustes de oxígeno suplementario
• Evaluar cambios en la saturación durante procedimientos hemodinámicos, broncoscopia,
partos, etc.
• Monitoreo continuo por períodos prolongados de tiempo, por ejemplo durante estudios de
sueño.
• Evaluación de cambios en la saturación durante procedimientos como pruebas de
esfuerzo, rehabilitación pulmonar y procedimientos de terapia respiratoria.
Consideraciones
• Aunque la oximetría de pulso constituye un sistema práctico y no invasivo de evaluación,
debe tomarse en cuenta que es capaz de dar falsos resultados para hipoxemia, normoxemia,
e hiperoxemia
• La presencia de patologías que involucran a la hemoglobina representa una limitante para
este método
• La lectura debe tomarse una vez que se estabiliza el número en el monitor
Bajo circunstancias normales los sistemas de oxígeno de flujo bajo (incluyendo cánulas y
máscara simples) no representan riesgos clínicamente importantes de infección, siempre y
cuando se usen en el mismo paciente, y no necesitan ser reemplazados rutinariamente.
Los sistemas de alto flujo que emplean humidificadores precalentados y generadores de
aerosol, especialmente cuando son aplicados a personas con vía aérea artificial, generan un
importante riesgo de infección. Ante la ausencia de estudios definitivos sobre los intervalos
de cambio de los equipos la guía de American Association for Respiratory Care (AARC)
recomienda establecer la frecuencia de cambio de los equipos de acuerdo con los resultados
obtenidos por el comité de infecciones en cada institución. En forma general, se
recomienda hacerlo cada 2-3 días.
12.0 REFERENCIAS
02.- Clinical Practice Guideline. Oxygen therapy for adults in the acute care facility
American Association for Respiratory Care (AARC).. Respir Care 2002; 47(6):717-720.
03.- Selection of an oxygen delivery device for neonatal and pediatric patients. Revision &
Update. American Association for Respiratory Care (AARC). Clinical practice guideline.
Reprinted from Respir Care 2002; 47:707-716.
04.- Oxygen Therapy in the Home or Alternate Site Health Care Facility. Revision &
Update. American Association for Respiratory Care (AARC). Clinical Practice Guideline.
Respir Care 2007; 52: 1063 - 1068
08.- http://www.alfa1.org/info_alfa1_epoc_oxigenoterapia.htm
10.- ABC of oxygen. Acute oxygen Therapy. Bateman NT, Leach Rm. BMJ 2001; 322: 799.
11.- http://www.pisa.com.mx/publicidad/portal/enfermeria/manual/4_2_1.htm
12.- http://www.clinicadam.com/salud/5/007242.html