Fases para Una Auditoria
Fases para Una Auditoria
Fases para Una Auditoria
Un examen a los Estados Financieros de una Entidad del Sector Público, requiere
garantizar resultados efectivos que respalden el trabajo del auditor y que apoye a la
que ésta tiene en la fiscalización pública; enuncia también las diferentes fases en que se
desarrolla el proceso.
y los requisitos que estos deben cumplir; de igual forma se establecen las reglas
de éste de forma definitiva. Cabe mencionar que el tipo de opinión del auditor podría
presente la Administración.
DIAGNOSTICO INTERNACIONAL
Los estados financieros se realizan con la finalidad de presentar un informe periódico sobre
la actuación de la administración que la dirige, y son necesarios porque ayudan a la sociedad
a asignar los recursos en forma eficiente. La auditoría a los estados financieros es
proporcionar credibilidad a la información, es decir, personas externas, como accionistas,
acreedores, reguladores gubernamentales, clientes y otros terceros interesados pueden
confiar en ella. Los estados financieros no auditados pueden haber sido elaborados
honestamente, sin embargo de forma descuidada, donde se pueden pasar obligaciones por
alto, sobrestimado activos como resultado de errores aritméticos o debido a una falta de
conocimiento de los principios de contabilidad generalmente aceptados. Como
organización poseer estados financieros auditados brinda un valor agregado en lo que
respecta a captar capital de terceras personas, ya que las decisiones económicas se toman
bajo condiciones de incertidumbre.
Se han realizado auditorías de diferentes tipos a través de la historia registrada del comercio
y de las finanzas de los gobiernos. El significado original de la palabra auditor fue “persona
que oye”, y fue apropiado para la época durante la cual los registros de contabilidad
gubernamental eran aprobados solamente después de una lectura pública en la cual las
cuentas eran leídas en voz alta. Durante la Revolución Industrial, se realizaban auditorías
para determinar si las personas en posiciones de responsabilidad oficial en el gobierno y en
el comercio estaban actuando y presentando informes en forma honesta, a medida que el
tamaño de las empresas aumentaba, sus propietarios empezaron a utilizar los servicios de
gerentes contratados. Con esta separación de grupos de propiedad y de gerencia, los
propietarios ausentes acudieron cada vez con mayor frecuencia a los auditores para
protegerse contra el peligro de errores no intencionales, o contra los fraudes cometidos pro
gerentes y empleados. Los banqueros fueron los principales usuarios externos de los
balances generales y se preocuparon también por saber si los informes estaban
distorsionados debido a errores o fraude.
94 En la primera mitad del siglo XX, el enfoque del trabajo de auditoría tendió a alejarse de
la detección de fraude y se dirigió hacia la nueva meta de determinar si los estados
financieros presentaban un panorama completo y razonable de la posición financiera, los
resultados de la operación y los cambios. Esto se debió al número creciente de accionistas
y el mayor tamaño en las corporaciones, los auditores se tornaron más responsables frente
a las agencias gubernamentales, y demás que dependían de la información financiera
dejando de ser los banqueros los únicos usuarios externos, la razonabilidad de las ganancias
reportadas se convirtió en un asunto de primordial importancia.
Etapa intermedia:
Consiste en efectuar pruebas globales para cerrar el círculo de la revisión y concluir sobre
la razonabilidad de cada aspecto significativo del encargo, finalizando con la emisión del
informe y elaboración del dictamen.
A mediados del siglo XVIII en Inglaterra aparecieron las primeras máquinas hiladoras y de
tejido, hecho que marcó el nacimientode la Revolución Industrial lo cual sustituyó los
procesos manuales de fabricación de las máquinas. Dentro del periodo (1783-1784) se
inventó la descarburación del hierro, lo cual abaratósu industrialización, dicho antecedente
constituyó el nacimiento de la industria relativa a la siderurgia, permitiendo una expansión
del uso de las máquinas. Esto dio origen a la formación del capitalismo y a las diversas
teorías económicas de libre comercio.El advenimiento del capitalismo ocasionó
concentraciones de capital, por lo que pequeñas organizaciones y fábricas tendieron a
desparecer y comenzó la etapa del surgimiento de sociedades comerciales e industriales las
cuales a su vez se agruparon en pools, trust y holdings, las cuales requerían de la
participación de inversionistas para tener recursos que les permitieran una expansión y
crecimiento. Este fenómeno comercialsurgió tanto en Europa como en Estados Unidos, por
lo que los gobiernos de dichos países empezaron a instaurar disposiciones o regulaciones
que establecían medidas en relación a los estados financieros de las empresas que tenían
acciones dentro del público inversionista. Estas medidas consistían en órganos revisores,
dentro los cuales solamente estaban facultados contadores públicos independientes.
La auditoría financiera al ser un examen sistemático necesita basarse en los libros y registros
de una entidad puesto que se necesitan verificar dichos datos sin embrago al realizar una
auditoría esta necesita ser contemplada por una estructura claramente establecida por la
Normas de Auditoria Generalmente Aceptadas para posteriormente obtener una evidencia
y finalmente dictaminar. Mientras que en un proceso contable se requiere de una
planificación para el registro de cuentas la cual día a día, mes a mes, año a año, se va
registrando para un control efectivo y sin duda al final del periodo presentar los
correspondientes balances, no obstante estas dos acciones se interrelacionan puestos que
son una secuencia de la otra y al estar ligadas.
Ambas se benefician de un mismo producto por lo tanto un proceso contable y una
auditoría financiera no es solo evaluar y dictaminar sino de una conexión de dos procesos.
Las auditorias están respaldas sobre un marco de referencia que si bien permiten dar pautas
para el desarrollo de una auditoria son mecanismos regulatorios par a estandarizar aspectos
comunes como su presentación y evaluación, dicho de otro modo Las Normas
Internacionales de Auditoría (NIAs) y ahora en una sola combinación las Normas
internacionales de Información Financiera (NIIF), tienen como propósito describir el marco
de referencia dentro del cual se describe la parte contable así como la auditoría los servicios
relacionados que pueden ser desempeñados, este marco de referencia no tiene la intención
de implicar que una persona que desempeñe servicios relacionados necesite ser el auditor
de los estados financieros de la entidad. Sino pretende proporcionar información acerca de
la posición financiera, rendimiento y cambios en la posición financiera de la entidad que es
útil para que un amplio rango de usuarios pueda tomar decisiones.
La clave de la auditoría financiera actual es realizar una evaluación del riesgo antes de
comenzar la auditoría a fin de identificar y centrar el esfuerzo de auditoría en los asuntos
más significativos que afectan a los estados contables de las empresas. Este enfoque
reconoce que, al operar el negocio para lograr los objetivos de éste, el plantel gerencial lleva
a cabo numerosas acciones para obtener satisfacción de que los sistemas de información
que afectan a estas áreas de riesgo son sólidos, generando datos confiables para su uso
dentro del negocio y para informar a la Dirección y alta Gerencia. Al aplicar la auditoría
financiera basada en riesgos, el contador público concentra su atención en evaluar con qué
efectividad la gerencia ha obtenido esta satisfacción.
William Thomas Porter y John C. Burton definen “la Auditoría como el examen de la información por
una tercera persona distinta de quien la preparó y del usuario, con la intención de establecer su
veracidad; y el dar a conocer los resultados de este examen, con la finalidad de aumentar la utilidad
de tal información para el usuario.” (Porter, 1983) Para garantizar la imparcialidad de los resultados
del examen, este debe ser realizado por una persona diferente del elaborador de la información y
el usuario. Arthur W. Holmes obtiene como conclusión en su concepto moderno que la Auditoría es
"el examen crítico y sistemático de la actuación y los documentos financieros y jurídicos en que se
refleja, con la finalidad de averiguar la exactitud, integridad y autenticidad de los mismos." (Holmes,
1984). El propósito del examen es determinar la autenticidad, integridad y calidad de la información
que produce el sistema. El Instituto Norteamericano de Contadores Públicos (AICPA), tiene como
definición de Auditoría la siguiente: “Un examen que pretende servir de base para expresar una
opinión sobre la razonabilidad, consistencia y apego a los principios de contabilidad generalmente
aceptados, de estados financieros preparados por una empresa o por otra entidad para su
presentación al Público o a otras partes interesadas”. (AICPA, 1983). La anterior definición, aunque
es de las más usadas, es muy sectorizada, pues no comprende toda la gama de auditorías existentes
como por ejemplo auditoria de sistemas de información, auditoría ambiental, auditoria social y las
que se puedan desarrollar en un futuro y se queda limitada solamente a la Auditoría de los estados
financieros. 5 La "American Accounting Association" (AAA, 1972) con un criterio más amplio y
moderno define en forma general la Auditoría identificándola como un proceso de la siguiente
manera (textual, tomado del libro Auditing: A Journal of Practice & Theory, 2014) “La Auditoría es
un proceso sistemático para obtener y evaluar de manera objetiva las evidencias relacionadas con
informes sobre actividades económicas y otros acontecimientos relacionados. El fin del proceso
consiste en determinar el grado de correspondencia del contenido informativo con las evidencias
que le dieron origen, así como determinar si dichos informes se han elaborado observando
principios establecidos para el caso. Un proceso sistemático comprende una serie de pasos o
procedimientos lógicos, estructurados y organizados. Obtener y evaluar evidencia objetiva
significa examinar las bases para las declaraciones (representaciones) y evaluar los resultados
juiciosamente sin prejuicios o desviaciones a favor o en contra de la persona (o entidad) que hace
las declaraciones. Declaraciones acerca de acciones económicas o eventos son las protestas
hechas por la entidad o por la persona. Comprenden la esencia de la auditoría. Las afirmaciones
incluyen información contenida en estados financieros, reportes internos de operación y
declaraciones de impuestos. Grado de correspondencia se refiere a la cercanía en que las
afirmaciones pueden vincularse con criterios establecidos. La expresión de correspondencia puede
cuantificarse como la cantidad de faltante dentro del fondo de caja chica, o podrá ser cualitativa,
como el grado en que los estados financieros son razonables. Criterios establecidos son los
estándares contra los cuales se juzgan las afirmaciones o representaciones. Los criterios podrán
constituir reglas prescritas por los cuerpos legislativos, presupuestos o demás medidas de
desempeño establecidas por la administración o principios de contabilidad generalmente aceptados
establecidos por el Financial Accounting Standards Board (FASB) y demás órganos autorizados. 6
Usuarios interesados son las personas que utilizan (o confían en) los hallazgos del auditor. En el
entorno de negocios se incluye a los accionistas, administradores, acreedores, dependencias
gubernamentales y público en general.” De acuerdo con la anterior definición emitida por la triple
AAA evidenciamos que para evaluar y valorar los sistemas de información financiera se deben
poseer conocimientos profundos de la estructura y funcionamiento de la entidad auditada, del
medio en que se desarrolla y las normas legales que la rigen. La opinión del auditor debe ser emitida
de manera independiente, el examen que se realice técnicas profesionales determinadas. Las
anteriores definiciones del término auditoria se eligieron, por ser mucho más amplias respecto de
la definición tradicional, la cual se aplica solo a un tipo de auditoria, la auditoría a los estados
financieros. De las definiciones transcritas se entiende que la Auditoría implica una reconstrucción
de acontecimientos económicos del pasado para determinar su apego a la realidad y darles o no
validez.
Edad Industrial A mediados del siglo XVIII en Inglaterra aparecieron las primeras máquinas hiladoras
y de tejido, hecho que marcó el nacimiento de la Revolución Industrial lo cual sustituyó los procesos
manuales de fabricación de las máquinas. Dentro del periodo (1783-1784) se inventó la
descarburación del hierro, lo cual abarató su industrialización, dicho antecedente constituyó el
nacimiento de la industria relativa a la siderurgia, permitiendo una expansión del uso de las
máquinas. La revolución Industrial surgió durante la segunda mitad del siglo XVIII, implementó
técnicas contables nuevas, especialmente en materia de auditoría buscando cubrir las necesidades
de las grandes empresas, el avance surgió en el año de 1845 en donde el “Railway Companies
Consolidation Act” estableció la obligación de una verificación anual que debía ser realizada por los
auditores. Pero no solo en Inglaterra se encuentran antecedentes de esta actividad, en los inicios
contables, sino también en Estados Unidos, en donde surgió una importante asociación encargada
básicamente de vigilar el cumplimiento de las normas de auditoria, para lo cual publicó diversos
reglamentos, de los primeros que se tiene conocimiento datan del año 1939 de ahí se formularon
varios reglamentos hasta 1943. En esta etapa de la auditoria se realizan las primeras revisiones e
inspecciones a todas las organizaciones que realizaban algún tipo de actividad comercial. La
actividad de la auditoria en su principio se instauró con el propósito de implementar procesos de
carácter administrativo mejorando la función de las organizaciones comerciales. Esta necesidad de
implementar procesos surge a partir del crecimiento de las empresas, en su mayoría fábricas, las
cuales no podían ser atendidas o supervisadas por una persona y tenían que recurrir a un
mecanismo de supervisión y de implementación de procesos con la finalidad de garantizar que
podían cumplir con los resultados esperados en relación a los productos que producían. Esto dio
origen a la formación del capitalismo y a las diversas teorías económicas de libre comercio. El
desarrollo del capitalismo ocasionó concentraciones de capital, por lo que pequeñas organizaciones
y fábricas tendieron a desparecer y comenzó la etapa del surgimiento de sociedades comerciales e
industriales las cuales a su vez se agruparon en pools, trust y holdings, las cuales requerían de la
participación de inversionistas para tener recursos que les permitieran una expansión y crecimiento.
Este fenómeno comercial surgió tanto en Europa como en Estados Unidos, por lo que los gobiernos
de 13 dichos países empezaron a instaurar disposiciones o regulaciones que establecían medidas en
relación a los estados financieros de las empresas que tenían acciones dentro del público
inversionista. Estas medidas consistían en órganos revisores, dentro los cuales solamente estaban
facultados contadores públicos independientes.
En el siglo XVI la actividad contable adquiere una gran importancia en el sector económico y social.
Una contribución importante tuvieron Grammateus en Alemania, Tagliente en Italia, Salcedo y
Felipe II en España. Hasta el siglo XVIII los auditores tenían el papel de descubrir o prevenir las
fraudes, y los auditores tenían cierto estatuto social y venían de entre los curas o los contables,
teniendo calidades morales reconocidas. En los siglos XVII y XVIII nace el Mercantilismo en Francia,
y en Inglaterra aparecen los grandes imperios comerciales e industriales, que imponen la
contabilidad como actividad profesional, independiente y libre. Los auditores procedían de las filas
de los mejores contables, siendo sus labores requeridas por el estado, por los accionarios o por los
bancos. Napoleón Bonaparte en 1805, impone que los practicantes de este oficio estén sometidos
a un rigoroso examen.
A principios del siglo XIX los auditores son ya profesionales reconocidos, como una especialización
distinta de la contabilidad. La generalización del término “auditoría” es propia del siglo XIX, cuando
tuvo lugar una delimitación de las competencias y responsabilidades de los administradores o
directores ejecutivos de las empresas, de la de los propietarios (socios o accionistas). El nivel que
alcanzaron los negocios en ese período, la internacionalización y complejidad de las transacciones
ya no permitían a los propietarios el control eficaz de las sociedades. Por este motivo, la dirección
de los negocios y la gestión del patrimonio pasa a manos de los gerentes, personas preparadas en
este sentido. En un principio los propietarios verificaban personalmente la actividad de los gerentes,
pero con el paso del tiempo se vieron obligados a recurrir a los servicios de profesionales
independientes de la dirección de las entidades, para que verificasen la honradez, la corrección y el
modo en que era gestionada su riqueza por los gerentes. En Inglaterra se crean los primeros
gabinetes de auditoría, y los inspectores o revisores recibieron la denominación de auditores
financieros, al dedicarse a la administración de los bienes de las empresas halladas al borde de la
quiebra. “La profesión de auditor era muy buscada y bien pagada” (Neamţu H. y otros, 2012, pág.
11). A principios del siglo XX aparecen las primeras Asociaciones de Contabilidad que empiezan a
establecer sus propias normas y sus propios convenios para el ejercicio de esta profesión – en 1899
en Suecia, en 1916 en Suiza, en 1917 en Japón. Entre los años 1930 y 1950 se han 31 verificado y
publicado por AAA todo lo que estaba relacionado con los principios de la contabilidad. En Estado
Unidos, tras la crisis económica de 1929, las empresas buscaban soluciones para reducir los gastos
y aumentar la eficacia. En este sentido, ellas empezaron a recurrir a los servicios de los gabinetes de
auditoría externa, pero posteriormente organizaron sus propios departamentos de auditoría
interna. Por tanto, la auditoría externa y la interna se organizaron bajo la presión del público, de los
propietarios y de los demás usuarios de informaciones contables, que manifestaron cierta
desconfianza en la corrección o competencia de los gerentes. Al mismo tiempo los gerentes también
sintieron la necesidad de organizar los departamentos de auditoría interna, debido a ciertos factores
socio-económicos que actuaban e aquel período: la descentralización de las actividades de las
grandes empresas por zonas geográficas o por sectores de actividad, el aumento de la complejidad
del acto gerencial, la diversificación de las actividades, el incremento de la competencia. Para
dominar los riesgos y alcanzar los objetivos los gerentes necesitaban los servicios de unos
consultantes, que les concedan asistencia gerencial. A finales de la crisis económica de 1929, los
propietarios y los inversores acusaron a la contabilidad y a la dirección de las empresas las pérdidas
sufridas. “Se aprecia que esta crisis no fue solamente económica, sino también una crisis de la
calidad de las informaciones suministradas por la contabilidad” (Feleagă N., 1999). Las
informaciones presentadas no exponían la situación real del patrimonio, eran irrelevantes,
insuficientes y demasiado optimistas. Los administradores a veces, con fines oscuros intentaban
presentar situaciones envilecidas o engañosas a los propietarios. Por eso las personas responsables
de la toma de decisiones económicas recurren a los servicios de seguros concernientes a la calidad
de las informaciones que se les suministran, de unos profesionales independientes, llamados
auditores financieros. El desarrollo de los intercambios internacionales, la realización de trabajos
contables complejos necesitaban conocimientos especailizados de análisis y evaluación, que estos
profesionales poseían. Tras los años ’70, los gabinetes de auditoría se reorganizaron en forma de
redes internacionales de auditoría, alcanzando en breve tiempo homogeneidad en los métodos de
trabajo y en la calidad de las prestaciones. Varían mucho en tamaño y se caracterizan por la 32
fuerte especialización de sus empleados por dominios o grupos de elementos, promoviendo el
trabajo en equipo y abreviando así el tiempo necesario para una misión de auditoría. Se otorga una
atención especial a los aspectos relacionados con las normas de contabilidad, utilizando técnicas
contables eficaces y empiezan a crearse las primeras asociaciones profesionales. El período
contemporáneo está marcado por un desarrollo acelerado de la auditoría financiera, determinada
por las modificaciones continuas de los mercados de capital, por el fenómeno de globalización y por
los avances tecnológicos sin precedentes. Todo ello impone la actualización permanente de las
Normas Internacionales de Contabilidad, de las Normas Internacionales de Auditoría y el
perfeccionamiento continuo de las técnicas y de los métodos de auditoría. Los comienzos de la
auditoría financiera en Rumanía y España difieren en gran medida, del momento en que se inician y
de su expansión, estando influidos, en todo caso, por los acontecimientos políticos que suceden y
condicionan la evolución reciente de los dos países.
En la propuesta capitular encontramos que se va a realizar una investigación simultánea para dejar
en entre visto la aplicación que las entidades hacen mediante una auditoría financiera, esto con la
intención de poder mejorar el sistema que están utilizando dando asi una nueva mejora que ayude
a los usuarios a tener un mayor entendimiento de esto.
En la propuesta capitular se desglosa una serie de capítulos que nos van ir dando una enseñanza
más profunda del desarrollo de cada uno de los temas que están expuestos y que estos podrán
mejorar el aprendizaje de los clientes y podrán tener más acceso a la información y tendrán una
mayor facilidad de entendimiento.
Mediante la investigación realizada podemos decir que la auditoría financiera es de gran utilidad
para las pequeñas y medianas entidades, ya que avala la fiabilidad de los estados financieros, y
supone un gran apoyo para la gestión de la empresa contar con un auditor que emita un juicio de
valor con el fin de incrementar la veracidad de sus cuentas y mejorar su control interno. Con el
tiempo la evolución de esta auditoría tanto a nivel nacional como mundial ha tenido una gran
aceptación ya que ayuda al enriquecimiento de quienes hacen uso de este tipo de auditoría, esto
consiste en que el mercado laboral de contadores públicos crezca cada día más y que todos los
profesionales desempeñen su trabajo mostrando sus habilidades en dichos procedimientos.
El propósito principal de una auditoría es el de garantizar la confianza de los usuarios de los Estados
Financieros, para ello el Auditor diseña y aplica procedimientos de auditoría que le permiten adquirir
suficiente y apropiada evidencia para obtener conclusiones razonables y emitir una opinión
independiente sobre la presentación de las cifras que se aprecian en los Estados Financieros, por lo
tanto, el Auditor es el profesional que posee la experiencia para conducir la revisión y examinar de
forma independiente los Estados Financieros de cada entidad que contrata sus servicios.
Para llevar a cabo los procedimientos de auditoría en la revisión de los Estados Financieros el Auditor
utiliza como marco de referencia las Normas Internacionales de Auditoría (NIA), las cuales detallan
los requisitos y responsabilidades del Auditor para efectuar la revisión de la contabilidad, asimismo,
define las cualidades profesionales del Auditor para efectuar su trabajo y también incluyen y
orientan sobre la estructura de los informes que presenta al concluir su revisión.
Es importante indicar que una auditoría de acuerdo con las Normas Internacionales de Auditoría, se
conduce sobre la condición de que la administración de la entidad a revisar reconoce sus
responsabilidades sobre las que se fundamenta la conducción de una auditoría, estas
responsabilidades incluyen la preparación y presentación de los Estados Financieros de acuerdo con
un marco de referencia aplicable, también incluye el cumplimiento del desarrollo organizativo y el
cumplimiento de la aplicación de un sistema de control interno para facilitar la preparación y
presentación de los valores que se aprecian en los Estados Financieros para que la información
contable a revisar esté libre de errores importantes, por otra parte, la administración debe
proporcionar al auditor acceso a toda la información que se haya considerado relevante en relación
a los Estados Financieros, asimismo, atender los requerimientos para proporcionar información
adicional que se requiera para propósitos de la auditoría. La auditoría financiera consiste en el
examen de los registros, comprobantes, documentos y otras evidencias que sustentan los estados
financieros de una entidad u organismo, efectuado por el auditor para formular el dictamen
respecto de la razonabilidad con que se presentan los resultados de las operaciones, la situación
financiera, los cambios operados en ella y en el patrimonio todo ello con la disponibilidad de brindar
la mayor parte de información posible a los usuarios.