Luis Antonio Escobar
Luis Antonio Escobar
Luis Antonio Escobar
Biografía
Perfil
Personalidad tan inquieta como versátil, Luis Antonio Escobar fue compositor, dirigente activo del
Club de Estudiantes Cantores y programador de radio y televisión. Se inició desde temprana edad
en la música.
Estudios musicales
En 1944 ingresó al Conservatorio Nacional en Bogotá, y luego viajó a Estados Unidos con una beca
de la Universidad Nacional. Allí estudió con Nicolás Nabokov en el Peabody Conservatory of Music
y después siguió estudios en la Universidad de Columbia.
En 1951 viajó a Europa y fue discípulo de Boris Blacher en Berlín, recibiendo de éste gran
influencia en los aspectos rítmicos. Regresó Colombia en 1954 y se vinculó activamente, al
movimiento musical nacional. Se desempeñó como secretario y profesor del Conservatorio de
Bogotá, que lo vio nacer como artista; ejerció, igualmente, como conferencista, libretista y
presentador de programas de divulgación musical en los medios radiales y televisivos; fue editor y
comentarista en periódicos y revistas. También desempeñó importantes cargos en el país y en el
servicio consular en el extranjero. En 1958 recibió la beca Guggenheim.
Prolífico compositor
Según José Ignacio Perdomo, la producción musical de Escobar es abundante. A veces desigual,
pues escribe con facilidad desconcertante. Escobar compuso música en todos los géneros;
Hernando Caro Mendoza la clasifica así: Cuantiosa obra vocal, con especial insistencia en el
aspecto coral, cantatas campesinas, cánticas colombianas, madrigales y canciones; algunas
partituras de cámara y una obra pianística interesante, de la que se destacan varias sonatinas y
sonatas y numerosas piezas breves, de inspiración popular, que él denominó "bambuquerías".
En géneros más ambiciosos, un gran ballet de tema indígena titulado Avirama (1956) y dos óperas,
una para público infantil, La princesa y la arveja, y otra, muy audaz para su momento, con
despliegue de instrumentos de percusión, Los hampones, basada en un texto del poeta Jorge
Gaitán Durán, prematuramente desaparecido. Como música puramente sinfónica, un divertimento
juvenil -tal vez de lo más logrado de su producción-, dos pequeñas sinfonías y una Sinfonía cero, y,
con solistas, un delicioso concertino para flauta -también temprano en su carrera-, y tres
conciertos para piano.
Fallecimiento
José Ignacio Perdomo clasifica la producción musical de Escobar en cuatro grupos: obras
escénicas; obras para orquesta, entre las que se destacan, Serenata colombiana, Divertimento N'-
1, Concertino para flauta y orquesta, Primera sinfonía (1955) y Suite infantil; obras vocales:
Cantata campesina, para tenor, contralto, coro y orquesta, Cántica de cantos colombianos, para
solistas, coro mixto y orquesta, y Rondas y canciones infantiles (1956); y, por último, obras de
cámara, entre las que se destacan las Bambuquerías.