Antecedentes de Los Seguros
Antecedentes de Los Seguros
Antecedentes de Los Seguros
CARRERA:
Derechos
Curso:
Derecho de seguros
ESTUDIANTE:
Atenas Escarleth Palomino Gil
CICLO:
XII-C
Docente:
Doc. José Manuel Romero Amasifuen
Pucallpa / Perú
2021
DEDICATORIA
El Seguro no es otra cosa más que el contrato que se establece con una empresa
aseguradora. En dicho contrato, denominado "Póliza", la empresa se compromete a
que si la persona que compró el seguro sufre algún daño en su persona
(enfermedades o accidentes e incluso la muerte), o en algunos de sus bienes
(automóvil, empresa, taller o casa) por cualquier motivo (robo, incendio, terremoto),
dicha persona (o quien ella haya designado como beneficiario) recibirá la cantidad de
dinero acordada en la póliza. A este dinero se le conoce como "Indemnización".
PRIMERA ETAPA
SEGUNDA ETAPA
En esta etapa, se relata el desarrollo y formación del seguro a partir del siglo XIV. En
1347 aparece el primer contrato de seguro marítimo en Italia, en el puerto de Génova,
y cubría ante posibles accidentes, naufragios o acciones de piratas. Se conserva un
ejemplar de este contrato en el Archivo Notarial de Génova. En 1385 aparece la
primera póliza, escrita en italiano, y no en latín como se solía hacer.
TERCERA ETAPA
La última etapa es el seguro moderno, que culmina con la creación de las grandes
empresas aseguradoras. En 1710, tras el gran incendio que convirtió a Londres en
cenizas, se fundó Fire Office, para levantar todos los edificios destruidos por este
siniestro, los cuales eran alrededor de 13,200. En este momento surgió la idea de
compensar las pérdidas financieras en escenarios como estos. Se considera a Fire
Office la primera compañía aseguradora contra incendios.
Con los años fueron añadidas nuevas necesidades que las personas desean amparar.
A los riesgos económicos o productivos se sumaron los riesgos de la salud. Incluso la
naturaleza también empezó a ser considerada un factor para el aseguramiento,
creándose así los productos contra terremotos, huracanes, inundaciones, etc.
El contratante o tomador del seguro, que puede coincidir o no con el asegurado, por su
parte, se obliga a efectuar el pago de esa prima, a cambio de la cobertura otorgada
por el asegurador, la cual le evita afrontar un perjuicio económico mayor, en caso de
que el siniestro se produzca.
3. INTERES ASEGURABLE.
La obligación principal del asegurador tiene por objeto o prestación la tutela del interés
amenazado por el riesgo asegurado, mientras no se haya producido el siniestro, y esta
obligación se convierte en la de indemnizar el daño causado, si el siniestro se produce.
Por interés se entiende la relación lícita de valor económico sobre un bien. Cuando
esta relación se halla amenazada por un riesgo, es un interés asegurable.
4. RIESGO ASEGURABLE
Más allá de los aspectos técnicos, para que un riesgo se considere asegurable ha de
cumplir con las siguientes condiciones:
Teniendo en cuenta estos factores, el riesgo podrá ser considerado o no por parte de
la entidad aseguradora.
Los riesgos asegurables y otras técnicas del riesgo actuarial son abordadas en el
Máster en Gestión de Riesgos en Seguros de EALDE Business School. Se trata de un
máster 100% online que capacita para dominar los conceptos relacionados con el
sector asegurador. Esto incluye la normativa Solvencia II y los seguros de empresa. El
programa de esta escuela de negocios online cuenta con becas y ayudas al estudio
propias. Si bien, tiene plazas limitadas, que se otorgan según el orden de llegada y el
cumplimiento de determinados requisitos académicos.
5. SINIESTRO
Es aquel acontecimiento que, previsto en el contrato de seguro, ocasiona daños en la
persona o bienes del asegurado, obligando por ello a la entidad aseguradora a
indemnizar al asegurado o a sus beneficiarios, en los términos previstos en la póliza.
Tipos de siniestro
6. FRANQUICIA O DEDUCIBLE
El deducible o franquicia es una figura del derecho de los seguros y se define como la
participación del asegurado en la pérdida ocasionada por el siniestro y tiene como
finalidad que el asegurado haga todo lo que esté a su alcance para evitar que
acontezca el siniestro.
Generalmente el importe del deducible puede ser pactado con la aseguradora bajo la
siguiente regla: A mayor importe de la prima, menor es el importe del deducible, y a
menor importe de la prima, mayor es el importe del deducible. La aplicación más
sencila de esta regla consiste en establecer una prima mínima, con una franquicia
determinada; y una prima mayor, sin ninguna franquicia.
En países con alta contratación de seguros (sea por costumbre local o por la
imposición gubernamental de la contratación de seguros obligatorios) es común que
no exista la figura del deducible, pues las pérdidas de los siniestros, si las hubiere, se
reparten en una gran población de asegurados.
7. EL ASEGURADOR
El ente asegurador puede ser definido como «la persona jurídica que constituida con
arreglo a lo dispuesto por la legislación correspondiente, se dedica a asumir riesgos
ajenos, cumpliendo lo que a este efecto establece aquella legislación, mediante la
percepción de un cierto precio llamado prima».
En la figura del asegurador cabe destacar unos perfiles concretos entre los que
podemos apreciar los siguientes:
Dentro del amplio espectro de las posibles personas jurídicas son supuestos admitidos
como válidos:
Sociedad Anónima.
Sociedad Mutua a prima fija.
Mutuales de previsión social.
Sociedad Cooperativa.
Siendo el seguro un asunto que afecta a toda la comunidad, y que está directamente
conectado con el bienestar de esta y cuya base indispensable es la confianza y el
crédito. A las entidades que deseen actuar como aseguradoras se le exigen una doble
serie de formalidades tanto como jurídicas como económicas, obedeciendo estas de la
entidad que se quieran formar para proveer los seguros.
8. EL ASEGURADO
El asegurado puede ser definido como el titular del área de interés que la cobertura del
seguro concierne, y del derecho a la indemnización que en su día se satisfaga que, en
ciertos casos, puede trasladarse al beneficiario. Es la persona natural o jurídica a
quien el acontecimiento del siniestro va a afectarle más directamente. En definitiva, es
aquel sobre cuya cabeza o bienes van a recaer las consecuencias del siniestro. La
figura del asegurado es esencial dentro del contrato de seguro. Porque lo mismo que
no cabe concebir un contrato de aquella naturaleza sin la existencia de un riesgo que
cubrir o tampoco resulta dable pensar un negocio jurídico de la naturaleza mencionada
sin que haya una persona o destinatario final de la garantía que se pacta, y cuyos
intereses, protegidos de esta suerte, son la causa eficiente del contrato.
9. EL BENEFICIARIO
Es la persona que tiene derecho a recibir la prestación del asegurador. La figura del
beneficiario tiene especial relevancia en los seguros de personas, ya que con
frecuencia están destinados a aprovechar a un tercero, e incluso en ciertas
modalidades esto es necesario, como ocurre en los seguros para caso de muerte.
TIPOS
1) Agentes de seguros
Personas físicas o jurídicas que, mediante la celebración de un contrato de
agencia con una o varias entidades aseguradoras y la inscripción en el
Registro administrativo especial, se comprometen frente a éstas a realizar las
actividades que les son propias.
Para celebrar un contrato de agencia (por medio de éste se adquiere la
condición de agente de seguros de la entidad aseguradora con la que se
celebre), será preciso tener capacidad legal para ejercer el comercio y ser una
persona con honorabilidad comercial y profesional. Este contrato tendrá
siempre carácter mercantil, se consignará por escrito y tendrá el contenido que
acuerden libremente las partes.
Serán personas agentes de seguros exclusivas las personas físicas o jurídicas
que, mediante la celebración de un contrato de agencia de seguros con una
entidad aseguradora y la inscripción en el Registro administrativo especial, se
comprometen frente a dicha entidad a realizar la actividad de mediación de
seguros establecida:
Serán personas agentes de seguros vinculadas las personas físicas o jurídicas
que, mediante la celebración de un contrato de agencia de seguros con varias
entidades aseguradoras y la inscripción en el Registro administrativo especial,
se comprometen frente a éstas a realizar la actividad de mediación de seguros
establecida:
Tendrán la consideración de operadores de banca-seguros, las entidades de
crédito y las sociedades mercantiles controladas o participadas por éstas,
mediante la celebración de un contrato de agencia de seguros con una o varias
entidades aseguradoras y la inscripción en el Registro oportuno, realicen la
actividad de mediación de seguros como persona agente de seguros utilizando
las redes de distribución de las entidades de crédito. El operador de banca-
seguros podrá ser operador de banca-seguros exclusivo u operador de banca-
seguros vinculado.
2) Corredores de seguros
Personas físicas o jurídicas que realizan la actividad de mediación de seguros
privados sin mantener vínculos contractuales que supongan afección con
entidades aseguradoras, y que ofrece asesoramiento independiente,
profesional e imparcial a quienes demanden la cobertura de los riesgos a que
se encuentran expuestos sus personas, sus patrimonios, sus intereses o
responsabilidades.
Éstos informarán a quien trate de concertar el seguro sobre las condiciones del
contrato que a su juicio conviene suscribir y ofrecer la cobertura que, de
acuerdo con su criterio profesional, mejor se adapte a las necesidades de
aquél. Velará también por la concurrencia de los requisitos que ha de reunir la
póliza de seguro para su eficacia y plenitud de efectos.
Estarán obligados en la vigencia del contrato de seguro a facilitar a la persona
tomadora, a la persona asegurada y a la persona beneficiaria del seguro la
información que reclamen sobre las cláusulas del contrato y, en caso de
siniestro, a prestarles su asistencia y asesoramiento.
3) Corredores de reaseguros
Personas físicas o jurídicas que, a cambio de una remuneración, realizan la
actividad de mediación de reaseguros.
Para ejercer la actividad de corredor de reaseguros será preciso estar inscrito
en el Registro administrativo especial.
Las relaciones entre los corredores de reaseguros y las entidades
reaseguradotas se regirán por el contrato que las partes acuerden libremente,
que tendrá carácter mercantil
1) Generales
Las personas mediadoras o profesionales de la mediación de seguros
ofrecerán información veraz y suficiente en la promoción, oferta y suscripción
de los contratos de seguro y, en general, en toda su actividad de
asesoramiento.
En toda publicidad y documentación mercantil de mediación de seguros
privados, ya sea en papel, ya sea utilizando cualquier técnica de comunicación
a distancia o contrato a distancia, deberán destacar las expresiones y
menciones establecidas en la Ley 26/2006, y en todo caso se deberá hacer
constar el número de inscripción en el Registro administrativo especial.
Antes de iniciar su actividad, deberán figurar inscritos en el Registro
administrativo especial.
2) De información
Antes de la celebración de un contrato de seguro, la persona mediadora de
seguros deberá, como mínimo, proporcionar a la clientela, entre otros
aspectos, la siguiente información: su identidad; su dirección; el Registro en el
que esté incluido; los procedimientos previstos que permitan a las personas
consumidoras y otras partes interesadas presentar quejas sobre los
intermediarios de seguros y de reaseguros y, en su caso, sobre los
procedimientos de resolución extrajudiciales; el tratamiento de sus datos de
carácter personal.
El deber de información previo también será exigible con ocasión de la
modificación o prórroga del contrato de seguro si se han producido alteraciones
en la información inicialmente suministrada.
No será obligatorio facilitar la información prevista con anterioridad cuando se
trate de mediación de un gran riesgo.
Funciones principales
Actualmente existen muchos tipos diferentes de pólizas de seguro, cada uno con unas
cláusulas y condiciones específicas de contratación. Por tanto, cuando surgen
problemas con el seguro, es importante contar con el experto adecuado que permita
llevar a cabo la reclamación con resultado exitoso.
Según el área de especialidad, existen los siguientes tipos de Peritos de Seguros:
El Perito de Seguros, puede dictaminar la causa del siniestro, valorando los daños y
demás circunstancias que influyen en la indemnización económica del contrato de
seguro.
Cobertura de la póliza
Pagos atrasados
Políticas del contrato abusivas
Actuaciones contrarias a la ley en la contratación
Interpretación inadecuada de políticas de contratación
Litigios comerciales por "mala fé" a gran escala, donde hay cientos de
afectados
Errores u omisiones por parte del agente de seguros
Negligencia legal que involucra cobertura del seguros
En su labor, el Perito de Seguros debe de ser imparcial ante ambas partes, aunque
esto rara vez es así. Por lo que puede haber discrepancias entre las partes, puediendo
intervenir un tercer profesional.
Si contratan un seguro más allá del tipo de seguro que sea, reciben como
mencionamos la documentación de la Póliza de Seguro dónde figuran los principales
aspectos del aseguramiento.
La póliza, se define como el contrato de seguro, en la misma figuran los términos por
los que la agencia aseguradora se obliga a cumplir con el pago ante un daño o a pagar
un cierto monto de verificarse determinado evento previamente previsto en el contrato
del seguro; a la vez el contratante del seguro, queda obligado a tener que pagar una
prima a cambio de recibir una futura cobertura de la aseguradora.
Por lo que, la prima del seguro le permite al asegurado eludir ciertos perjuicios
económicos, es decir tener que pagar una parte mayor de los daños sufridos ante un
siniestro. La Prima es el valor que abonan mensualmente por acceder a la cobertura
de la póliza de seguro.
Seguro de vida
Seguro de responsabilidad civil
Seguro popular
Seguro contra incendio
Seguro automotriz
Seguro internacional
Seguro médico
Seguro de caución
Seguro contra todo riesgo
Una vez recibida la póliza, se debe revisar que incluya todas las coberturas de la
propuesta, es decir, que las condiciones corresponden a las acordadas, y la persona o
bien asegurado esté correctamente identificado.
Es importante guardar la póliza, por si se tiene que hacer uso del seguro en caso de
siniestro.
La misma norma prevé que cuando un asegurado voluntario deja de cotizar durante
seis meses consecutivos se excluya del Régimen y para reingresar, debe cancelar
hasta 12 cuotas cuando se trata del primer reingreso, hasta 24 cuando se trate un
segundo reingreso o bien hasta 36, cuando se trata de un tercer reingreso.
En razón de las amplias facultades que confiere un poder generalísimo, aún con limite
de suma, sin duda autoriza al apoderado para un acto como es tomar un seguro
voluntario.
Tal es el criterio de la Dirección Jurídica, manifestado en Dictamen DJ-0829-97, del 20
de mayo de 1997, emitido ante consulta del MBA. Eduardo Flores Castro, Jefe del
Area de Cotizaciones de la Institución.
CONCLUSIÓN
Es importante asegurarse, ya que podemos protegernos de algo malo que nos pudiera
ocurrir; sin embargo esto no nos garantiza, que eso "malo" (que se conoce como
Siniestro) no nos pueda pasar.
Si muere, su familia podrá continuar con el nivel de vida que tenía mientras el
Asegurado la mantenía.
BIBIOGRAFIA
www.bse.com
www.cadeco.org
www.conducef.gob.mx
www.eurosur.org
www.lapositiva.com
www.monografias.com
www.previsora.com
www.secomex.com
www.terra.com