Seriec 466 Esp
Seriec 466 Esp
Seriec 466 Esp
la Corte Interamericana de Derechos Humanos (en adelante también “la Corte Interamericana”,
“la Corte” o “el Tribunal”), integrada por los siguientes Jueces:
presentes, además,
de conf ormidad con los artículos 62.3 y 63.1 de la Convención Americana sobre Derechos
Humanos (en adelante también “la Convención Americana” o “la Convención”) y con los artículos
31, 32, 62, 63, 65 y 67 del Reglamento de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (en
adelante “el Reglamento” o “el Reglamento de la Corte”), dicta la presente Sentencia, que se
estructura en el siguiente orden:
1
TABLA DE CONTENIDO
2
I
INTRODUCCIÓN DE LA CAUSA Y OBJETO DE LA CONTROVERSIA
1
La Comisión Interamericana designó como delegada a la Comisionada Antonia Urrejola Noguera.
Asimismo, designó a Marisol Blanchard Vera, entonces Secretaria Ejecutiva Adjunta, a Jorge Humberto Meza
Flores, entonces especialista de la Secretaría Ejecutiva, y a Erick Acuña Pereda, especialista de la Secretaría
Ejecutiva, como asesora y asesores legales.
3
medidas de reparación, aquellas incluidas en dicho inf orme 2. Este Tribunal nota con
preocupación, que, entre la presentación de la petición inicial ante la Comisión y el
sometimiento del caso ante la Corte, transcurrieron más de 18 años.
II
PROCEDIMIENTO ANTE LA CORTE
2
En el Informe de Fondo, la Comisión recomendó al Estado: 1.- reparar integralmente las violaciones
a derechos humanos, incluso por medio de medidas de satisfacción y de compensación, por daño material e
inmaterial; 2.- disponer medias de atención en salud física y mental a los familiares de las víctimas ejecutas
en forma extrajudicial; 3.-realizar una investigación completa y efectivas de las violaciones a derechos
humanos declaradas, y 4.- disponer diversos mecanismos tendientes a evitar la repetición de tales violaciones.
3
El Estado designó a la abogada María Fernanda Álvarez como agente principal, y al abogado Alonso
Fonseca y a la abogada María Fernanda Narváez como agentes alternos. La representación legal de las víctimas
es ejercida por los “profesionales del [d]erecho”: Héctor Bolívar Villagrán Lara, Héctor Enrique Villagrán Cepeda
y Leonidas Humberto Villagrán Cepeda.
4
En las presentaciones de 19 de noviembre de 2021 y de 11 de enero de 2022, el Estado remitió
documentación firmada por representantes de ambas partes en la que se efectuaba o consentía la solicitud de
suspensión de términos.
5
El 18 de abril de 2022 la Secretaría indicó al Estado que, en caso de suscribirse el acuerdo, se remitiera
al Tribunal una copia del mismo debidamente firmada. El 12 de mayo de 2022 la Secretaría solicitó al Estado
que, a más tardar el 23 de mayo de 2022, remitiera a la Corte una copia del acuerdo de solución amistosa,
debidamente firmada o, en su defecto, las aclaraciones que resulten pertinentes. El 20 de mayo de 2022 el
Estado informó que, por un cambio de autoridades gubernamentales, la firma del acuerdo todavía se
encontraba pendiente, pero que se avanzaría con los trámites correspondientes a la brevedad posible. El 29
de junio de 2022, la Secretaría solicitó al Estado que, en caso de que se suscribiera el acuerdo de solución
amistosa, se remitiera el mismo al Tribunal a más tardar el 14 de julio de 2022.
6
Se deja constancia que el Acuerdo, firmado por ambas partes, fue remitido a la Corte por el Estado
el 13 de julio de 2022. Por medio de una comunicación de la Secretaría de la Corte, de 14 de julio de 2022,
se otorgó un plazo a los representantes, hasta el 28 de julio de 2022, para que presenten las observaciones
que estimaran pertinentes. El 3 de agosto de 2022, se comunicó a los representantes el otorgamiento de un
plazo adicional, hasta el 11 de agosto de 2022, para que remitan sus observaciones. El 16 de agosto de 2022,
4
representantes “ratif ica[ron] el acuerdo suscrito con el Estado ecuatoriano” e inf ormaron
que “se ha cumplido con la parte de indemnizaciones pecuniarias”.
III
ACUERDO DE SOLUCIÓN AMISTOSA
por medio de una comunicación de la Secretaría, se indicó a los representantes que, “por última vez”, se les
concedía un nuevo plazo, hasta el 29 de agosto de 2022, para que expresen las consideraciones que estimaran
procedentes. En dicha comunicación, se advirtió que, “[e]n caso de no recibirse observaciones por parte de
los representantes, oportunamente la Corte […] determinar[ía] lo conducente”. La Secretaría de la Corte no
recibió observaciones de parte de los representantes. Sin perjuicio de ello, el 22 de septiembre de 2022 ( infra
párr. 10), los representantes ratificaron el acuerdo suscrito con el Estado. Por otro lado, el Estado y los
representantes, en comunicaciones de 19 y 22 de septiembre de 2022 respectivamente, expresaron, como lo
habían hecho con anterioridad, que Wilson Huacón Baidal, víctima en el caso, se encuentra fallecido.
7
Es preciso dejar sentado que el 14 de julio de 2021, en una comunicación previa a la notificación del
caso (supra párr. 5 ), dada en respuesta a una consulta de la Secretaría de la Corte, los representantes
expresamente indicaron ejercer la representación del señor William Huacón. Por otra parte, se deja constancia
que el Estado, luego de la solicitud de la Secretaría de la Corte formulada el 1 de septiembre de 2022, no
presentó observaciones en relación con William Huacón.
8
El Acuerdo de Solución Amistosa obra como anexo a esta Sentencia. No obstante, en atención a lo
acordado por las partes respecto a la confidencialidad de información sobre las indemnizaciones ( infra párr.
64), y siendo que parte del texto del Acuerdo será publicado por el Estado (infra párrs. 54 y 55), dicho texto
no será hecho público por la Corte. Por otra parte, este Tribunal nota que la redacción efectuada en el Informe
de Fondo de varios de los nombres de las víctimas no es coincidente con el modo en que tales nombres
5
Las partes sometieron el Acuerdo ante el Tribunal y le solicitaron que emitiera una
Sentencia en la cual lo homologara y dispusiera que supervisará su cumplimiento.
15. En el Acuerdo, las partes también pactaron que Ecuador deberá cumplir con
diversas medidas de reparación de las violaciones a derechos humanos perpetradas en
perjuicio de Walter Gonzalo Huacón Baidal, Mercedes Eugenia Salazar Cueva y sus
f amiliares. Asimismo, se acordó el “plazo” y “f orma de pago” de tales medidas
reparatorias. El Acuerdo señala las personas benef iciarias.
B) Observaciones de la Comisión
17. En sus observaciones (supra párr. 9), la Comisión “valor[ó] positivamente que
las partes hayan arribado a un acuerdo de solución amistosa”, y observó “que las
medidas de reparación acordadas por las partes incorporan los distintos componentes
de una reparación integral, por lo que expres[ó]a su satisf acción por e l Acuerdo f irmado
por las partes”.
quedaron escritos en el Acuerdo. Para efectos de esta sentencia se seguirá la forma de escribir los nombres
plasmada en el Acuerdo.
6
C) Consideraciones de la Corte
18. De conf ormidad con el artículo 63 del Reglamento de la Corte 9, el Tribunal deberá
determinar la procedencia y ef ectos jurídicos del acuerdo de solución amistosa a que
arribaron las partes y del reconocimiento de responsabilidad internacional f ormulado por
el Estado en el mismo.
19. El Acuerdo contempla como víctimas a las personas indicadas en tal carácter en
el Inf orme de Fondo (supra párr. 1), a excepción de una: William Huacón (supra párr.
10). En razón de ello, la Corte entiende necesario hacer, por una parte, una valoración
general del acuerdo y, además, sin perjuicio de la misma, una evaluación particular
respecto a William Huacón. Por tanto, a continuación, este Tribunal expresará: a)
consideraciones generales sobre el acuerdo alcanzado y b) consideraciones sobre William
Huacón.
21. La Corte destaca la voluntad de las víctimas, sus representantes y el Estado para
alcanzar una solución a la controversia del presente caso. Resalta, además, el momento
procesal en que lo hicieron. Este caso se dif erencia de otros en que los diálogos entre
las partes que derivaron en el acuerdo de solución amistosa y el reconocimiento total de
responsabilidad internacional ef ectuado por el Estado se produjeron en una etapa
temprana del litigio ante esta Corte, previo a que venciera el plazo para que el Estado
presentara su contestación. Ello permite a este Tribunal arribar a una solución al litigio
de f orma más pronta que si se hubiere llevado a término el proceso internacional, a la
vez que posibilitó la obtención de justicia y reparación para las víctimas. De esta f orma,
la controversia en el proceso concluyó sin necesidad de ef ectuar una audiencia pública,
ni de recibir prueba pericial, testimonial ni declaraciones de las víctimas, y sin que se
llevará a cabo la etapa del procedimiento f inal escrito10.
9
El artículo 63 señalado, que se titula “Solución amistosa”, expresa: “Cuando la Comisión, las víctimas
o sus representantes, el Estado demandado y, en su caso, el Estado demandante, en un caso ante la Corte
comunicaren a ésta la existencia de una solución amistosa, de un avenimiento o de otro hecho idóneo para la
solución del litigio, la Corte resolverá en el momento procesal oportuno sobre su procedencia y efectos
jurídicos”.
10
Cfr. En el mismo sentido, Caso García Cruz y Sánchez Silvestre Vs. México. Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 26 de noviembre de 2013. Serie C No. 273, párr. 19, y Caso de los Buzos Miskitos
(Lemoth Morris y otros) Vs. Honduras. Sentencia de 31 de agosto de 2021. Serie C No. 432, párr. 23.
7
de derecho contenidas en el mismo respecto de las violaciones a los derechos humanos
de las víctimas. El Tribunal estima que el reconocimiento de responsabilidad del Estado
constituye una contribución positiva al presente proceso y a la vigencia de los principios
que inspiran la Convención Americana 11.
23. En razón de lo anterior, de conf ormidad con los términos en que f ue suscrito el
acuerdo entre las partes y f ormulado el reconocimiento de responsabilidad internacional
en el caso, la Corte considera que ha cesado la controversia sobre los hechos así como
los argumentos relativos a las violaciones de los siguientes derechos contenidos en la
Convención Americana: derecho a la vida (artículo 4.1), integridad personal (artículo
5.1), garantías judiciales (artículo 8.1) y protección judicial (artículo 25), todo lo anterior
en relación con el deber general de respetar los derechos (artículo 1.1) y de adoptar
disposiciones de derecho interno (artículo 2), en perjuicio de Walter Gonzalo Huacón
Baidal, Mercedes Eugenia Salazar Cueva, Mary del Pilar Chancay Quimis (viuda del señor
Walter Gonzalo Huacón Baidal), Wilson Eduardo Huacón Baidal (pareja de la señora
Mercedes Eugenia Salazar Cueva al momento de los hechos), Karent Lisset Huacón
Chancay (hija de Walter Gonzalo Huacón Baidal), Walther Bryan Huacón Chancay (hijo
de Walter Gonzalo Huacón Baidal), Wilson Fabián H uacón Salazar (hijo de Mercedes
Eugenia Salazar Cueva), Karla Fernanda Huacón Salazar (hija de Mercedes Eugenia
Salazar Cueva) y Kerlly Mercedes Huacón Salazar (hija de Mercedes Eugenia Salazar
Cueva).
24. Además, el Tribunal valora positivamente la voluntad y el esf uerzo de las partes
por alcanzar un acuerdo de solución amistosa, que también ref leja la voluntad de
Ecuador de reparar de manera integral los daños ocasionados a las víctimas por las
violaciones producidas en el presente caso y evitar su repetición. La Corte estima,
además, que alcanzar acuerdos entre las partes contribuye n con los f ines del Sistema
Interamericano de Protección de los Derechos Humanos, especialmente con el propósito
de encontrar soluciones justas a los problemas particulares de un caso12. Ello también
permite que las violaciones en perjuicio de las víctimas del presente caso sean reparadas
de f orma más pronta que si se hubiera continuado el curso normal del litigio ante este
Tribunal hasta su f inalización. Para contribuir a lograr ese propósito , la Corte, al igual
que en otras oportunidades 13, emite la presente Sentencia en el menor tiempo que le
f ue posible.
25. Con base en todo lo anterior, la Corte considera, como en otras ocasiones 14, que
el acuerdo de solución amistosa y el reconocimiento de responsabilidad producen plenos
ef ectos jurídicos en el presente caso.
11
Cfr. Caso del Caracazo Vs. Venezuela. Fondo. Sentencia de 11 de noviembre de 1999. Serie C No.
58, párr. 43, y Caso Deras García y otros Vs. Honduras. Fondo, Reparaciones y Costas . Sentencia de 25 de
agosto de 2022. Serie C No. 462, párr. 26.
12
Cfr. Caso Pacheco Teruel y otros Vs. Honduras. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 27 de
abril de 2012. Serie C No. 241, párr. 19, y Caso de los Buzos Miskitos (Lemoth Morris y otros) Vs. Honduras,
supra, párr. 19.
13
Caso García Cruz y Sánchez Silvestre Vs. Estados Unidos Mexicanos, supra, párr.22, y Caso de los
Buzos Miskitos (Lemoth Morris y otros) Vs. Honduras, supra, párr. 23.
14
Cfr. Caso Acevedo Jaramillo y otros Vs. Perú. Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas.
Sentencia de 7 de febrero de 2006. Serie C No. 144, párrs. 176 a 180; Caso Torres Millacura y otros Vs.
Argentina. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 26 de agosto de 2011. Serie C No. 229, párr. 37; Caso
Pacheco Teruel y otros Vs. Honduras, supra, párr. 19, y Caso García Cruz y Sánchez Silvestre Vs. Estados
Unidos Mexicanos, supra, párr. 23.
8
26. Respecto de las medidas de reparación descritas en el acuerdo convenido por el
Estado, las víctimas y sus representantes, la Corte las homologa en los términos
descritos en la presente Sentencia (infra Capítulo VI) por contribuir al objeto y f in de la
Convención Americana. La Corte analizará dichas medidas, con el f in de determinar su
alcance y f ormas de ejecución.
27. De conf ormidad con lo indicado por el Inf orme de Fondo, el señor William Huacón
es primo de Walter Gonzalo Huacón Baidal, y una de las personas que la Comisión
determinó como víctimas en el caso 15. Los representantes, en su oportunidad (supra
nota a pie de página 7), expresamente indicaron que ejercían la representación del señor
William Huacón. El acuerdo de solución amistosa no contempló al señor William Huacón
como víctima o benef iciario de medidas de reparación. Los representantes explicaron, al
respecto, que “considera[ban] que las únicas personas que deben ser tratadas como
víctimas son los f amiliares directos de las víctimas mortales” (supra párr. 10).
28. La Corte, en primer lugar, entiende necesario expresar la importancia de que las
partes y sus representantes actúen de buena f e en el marco del proceso internacional.
No es acorde a ello que, como ocurrió en este caso, quienes ejercen la representación
de víctimas o presuntas víctimas en el proceso aseveren actuar en def ensa de los
derechos e intereses de una persona, y luego, al ejercer ef ectivamente esa
representación, no lo hagan.
[E]n ejercicio de sus poderes de tutela judicial internacional de derechos humanos, cuestión de orden
público internacional que trasciende la voluntad de las partes, incumbe al Tribunal velar porque los
actos de reconocimiento de responsabilidad y los posibles acuerdos entre las partes resulten aceptables
para los fines que busca cumplir el Sistema Interamericano. Esta tarea no se limita únicamente a
constatar, registrar o tomar nota del reconocimiento efectuado por el Estado, o a verificar las
condiciones formales de los mencionados actos, sino que los debe confrontar con la naturaleza y
gravedad de las violaciones alegadas, las e xigencias e interés de la justicia, las circunstancias
particulares del caso concreto y la actitud y posición de las partes, de manera tal que pueda precisar,
en cuanto sea posible y en el ejercicio de su competencia, la verdad de lo acontecido 17.
30. Lo anterior, a su vez, debe ser considerado teniendo presente el principio pro
persona, criterio hermenéutico que debe regir el entendimiento de las normas sobre
derechos humanos, y que surge del artículo 29 de la Convenció n Americana, el cual
prescribe una interpretación extensiva de los derechos y un entendimiento restrictivo de
sus limitaciones.
15
Así surge de los párrafos 9, 77, 82 y 83 del Informe de Fondo.
16
Cfr. Caso García Cruz y Sánchez Silvestre Vs. Estados Unidos Mexicanos , supra, párr. 17, y Caso de
los Buzos Miskitos (Lemoth Morris y otros) Vs. Honduras, supra, párr. 18.
17
Caso García y familiares Vs. Guatemala. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 29 noviembre
de 2012 Serie C No. 258, párr. 16. Ver, en el mismo sentido, Caso Kimel Vs. Argentina. Fondo, Reparaciones
y Costas. Sentencia de 2 de mayo de 2008. Serie C No. 177, párr. 24; Caso Manuel Cepeda Vargas Vs.
Colombia. Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 26 de mayo de 2010. Serie
C No. 213, párr. 17, y Caso Masacres de El Mozote y lugares aledaños Vs. El Salvador. Fondo, Reparaciones y
Costas. Sentencia de 25 de octubre de 2012. Serie C No. 252, párr. 23.
9
31. Por ende, y siendo que, como ha quedado dicho (supra párr. 14), los términos
del acuerdo incluyen un reconocimiento de responsabilidad por parte del Estado respecto
de todos los hechos y las violaciones a derechos humanos determinados por la Comisión
Interamericana en el Inf orme de Fondo, el señor William Huacón debe ser considerado
víctima y benef iciario de medidas de reparación 18.
IV
COMPETENCIA
32. La Corte Interamericana es competente para conocer del presente caso, en los
términos del artículo 62.3 de la Convención Americana, debido a que Ecuador es Estado
Parte de dicho instrumento desde el 28 de diciembre de 1977 y reconoció la competencia
contenciosa de la Corte el 24 de julio de 1984.
V
RESUMEN SOBRE LOS HECHOS DEL CASO Y LAS VIOLACIONES A LOS DERECHOS
HUMANOS
A) Introducción
B) Hechos
18
Se aclara, por ello, que, en adelante, cuando en esta Sentencia se hace mención a “familiares”, ello
incluye al señor William Huacón.
10
domicilio con sus dos hijas. Su conviviente, Mercedes Salazar, se retiró media hora más
tarde acompañada del señor Walter Huacón, quien pidió a su primo, William Huacón,
que le prestara su vehículo, un taxi que se encontraba estacionado af uera del lugar de
la reunión.
36. El señor Walter Huacón olvidó llevar consigo su licencia de conducir y los
documentos del vehículo. No obstante, condujo el taxi por la Avenida Perimetral
avanzando unos 200 metros, hasta que, ante la presencia de un patrullero de la Comisión
de Tránsito que estaba solicitando documentos, se cercioró que no los tenía y dio la
vuelta para retomar a la casa, en contravía.
38. La Policía Técnica Judicial instruyó una investigación en la que concluyó que J.C.B.
era el responsable de la muerte de Walter Huacón, dado que el examen balístico indicaba
que los proyectiles hallados en su cuerpo habían sido disparados del arma de este
agente. Persisten cuestionamientos sobre la participación de los restantes agentes en la
muerte de la señora Mercedes Salazar, pues se reportó que estos dirigieron disparos
contra el auto. Ssin embargo, no comparecieron ni entregaron sus armas de dotación
para realizar los inf ormes de balística correspondientes.
39. Frente a los hechos, se presentó una acción penal ante la justicia ordinaria , la
cual f ue remitida a la jurisdicción penal policial. El 16 de marzo de 2000, el Juzgado
Segundo del IV Distrito de la Policía Nacional conf irmó cargos solo contra J.C.B. por el
delito de homicidio simple, cuya causa pasó a plenario. A f avor de los otros agentes hubo
sobreseimiento provisional. El 30 de noviembre de 2000 la II Corte Distrital de Policía
en instancia de apelación, conf irmó la decisión de los tribunales inf eriores de
sobreseimiento a f avor de los cinco agentes; lo mismo hizo el 9 de noviembre de 2001
sobre la resolución respecto de J.C.B. Este no compareció al proceso, se suspendieron
las actuaciones y el delito f ue declarado prescrito el 11 de octubre de 2012.
40. Por otra parte, en abril de 2000 los f amiliares presentaron dos acciones civiles
para reclamar una indemnización. Se solicitó el pago de una tasa judicial del 1% del
monto de la cuantía para continuar con el proceso, la cual ascendía, en cada caso, a USD
40 mil (cuarenta mil dólares de Estados Unidos de América). Conf orme se indica en el
Acuerdo, “[n]o existe más inf ormación sobre estas causas”.
11
C) Las violaciones a los derechos humanos
12
la investigación seguida contra el agente J.C.B. continuó abierta durante más
de veintidós años después de ocurridos los hechos.
iv. La situación de impunidad por los hechos del caso, y a que el Estado “ha
incumplido su deber de realizar una adecuada investigación a ef ectos de
identif icar y en su caso, sancionar a todas las personas responsables por las
ejecuciones extrajudiciales de Walter Gonzalo Huacón Baidal y Mercedes
Eugenia Salazar Cueva”.
VI
REPARACIONES19
45. En consideración del acuerdo de solución amistosa alcanzado entre las partes
para reparar a las víctimas en el presente caso, el cual ha sido previamente homologado
por este Tribunal (supra párrs. 25 y 26), y tomando en cuenta la relevancia y magnitud
de las violaciones reconocidas por el Estado, la Corte expondrá las medidas acordadas
y, en lo que resulte necesario, determinará su alcance y f ormas de ejecución, así como
precisiones sobre la supervisión de su cumplimiento. Asimismo, en atención a lo antes
determinado (supra párr. 31), este Tribunal f ijará reparaciones a f avor de William
Huacón.
46. La Corte considera como “parte lesionada” a Walter Gonzalo Huacón Baidal,
Mercedes Eugenia Salazar Cueva, Mary del Pilar Chancay Quimis, Wilson Eduardo
Huacón Baidal, Karent Lisset Huacón Chancay, Walther Bryan Huacón Chancay, Wilson
Fabián Huacón Salazar, Karla Fernanda Huacón Salazar, Kerlly Mercedes Huacón Salazar
y William Huacón, por tratarse de las personas declaradas víctimas en la presente
Sentencia, con base en el acuerdo a que arribaron las partes y el reconocimiento de
responsabilidad de Ecuador (supra párrs. 18 a 26, 31 y 41 a 44). Por lo tanto, las
personas antes designadas serán consideradas benef iciarias de las reparaciones que
ordene el Tribunal. Sin perjuicio de ello, se deja constancia que las partes inf ormaron
que el señor Wilson Huacón Baidal f alleció (supra nota a pie de página 6), y los
representantes aclararon que, “en el [A]cuerdo […] los valores que correspondían a su
indemnización como víctima -por haber enviudado en razón de la ejecución extrajudicial -
f ueron directamente considerados en las indemnizaciones pecuniarias que recibieron sus
hijos”.
47. La Corte nota, por otra parte, que en el acápite “4.3.5. Acceso a la educación
superior” del acuerdo de solución amistosa, el Estado acordó otorgar medidas de
reparación en benef icio de Kaite Debora Huacón Franco, Wilson Gabriel Huacón Franco,
Ashley Dennise Castro Huacón, Ayleen Alexandra Murillo Huacón y Jostin Randi Castro
Huacón, nietos del señor Walter Gonzalo Huacón Baidal y de la señora Mercedes Eugenia
Salazar Cueva. En virtud del reconocimiento de responsabilidad del Estado y del espíritu
y alcance del Acuerdo a f avor de las f amiliares de las víctimas, el Tribunal homologa el
Acuerdo en este aspecto y considerará a estas personas como benef iciarias de las
medidas de reparación dispuestas en dicho documento20.
19
Aplicación del artículo 63.1 de la Convención Americana en el marco de la homologación del acuerdo
de solución amistosa.
20
Cfr., en igual sentido, Caso García Cruz y Sánchez Silvestre Vs. México, supra, párr. 68.
13
B) Obligación de reportar los avances de las investigaciones
[E]l Estado reportará anualmente los avances o limitaciones por el lapso de 5 años por parte de
la Secretaría de Derechos Humanos. Luego de los 5 años, el Estado, a través de la Secretaría de
Derechos Humanos, elaborará un informe sobre el derecho a la ver dad y, en conjunto con las
víctimas se evaluará la posibilidad de mantener abierta dicha investigación en la jurisdicción
interna. Adicionalmente, luego del transcurso del mencionado periodo de tiempo, el Estado, a
través de la Procuraduría General del Estado pedirá a la Corte I[nteramericana] que tome nota
acerca de que la medida ha sido cumplida y se solicitará que disponga el archivo de la causa a
nivel internacional.
49. Además, se dispuso que “el Estado, a través de las instituciones que
correspondan coordinará las acciones para ejercitar el derecho de repetición en contra
de las y los servidores públicos que comprometieron la responsabilidad internacional del
Estado en el presente caso. Este derecho se ejercerá conf orme al ordenamiento jurídico
vigente, sobre la materia”.
50. En consecuencia, la Corte ordena al Estado, adoptar las acciones necesarias para
cumplir lo previsto en el Acuerdo en relación con la investigación de los hechos ( supra
párr. 48). Sin perjuicio de lo anterior, la Corte aclara que: a) la previsión en el Acuerdo
de que el Estado, cuando resulte oportuno, solicitará el “archivo de la causa a nivel
internacional” no compromete la determinación que, llegado el caso, este Tribunal pueda
evaluar pertinente, en el marco de su competencia y f unciones; y b) no será supervisada
la acción estatal consistente en ejercitar el “derecho de repetición contra […] servidores
públicos”.
C) Medidas de satisfacción
52. Adicionalmente, para el caso de Ashley Denisse Castro Huacón, se acordó que la
Secretaría de Derechos Humanos acompañará la gestión de la mencionada ciudadana
ante la SENESCYT en su solicitud de retorno al acceso a la educación superior, hasta que
su caso sea solucionado. Para el caso en que se requiera un nuevo proceso de
postulación, se acordó contemplar 15 puntos conf orme a las variables de ruralidad y
territorialidad. En relación con Ayleen Alexandra Murillo Huacón, se acordó que “la
Secretaría de Derechos Humanos acompañará la gestión de la mencionada ciudadana,
ante la SENESCYT, para el cambio de universidad. En caso de que el cambio de
14
universidad requiera de un nuevo proceso de postulación, se contemplarán 15 puntos,
conf orme las variables de ruralidad y territorialidad”. Respecto a Jostin Randi Castro
Huacón, se acordó que “la Secretaría de Derechos Humanos acompañará la gestión […]
para el ingreso a la Maestría en mejoramiento de procesos en la ESPOL y de ser
necesario, activará a la entidad competente con la f inalidad de verif icar la posibilidad de
que se apliquen acciones af irmativas para el ingreso a la mencionada Maestría”. Sobre
este tema, se acordó que la medida sería “revisa[da]” por la Secretaría de Derechos
Humanos, “hasta que todas las personas mencionadas ingresen al sistema de educación
superior o hasta cuando las mismas desistan de estas medidas”.
53. La Corte advierte que los hechos del caso generaron cambios signif icativos en las
vidas de los f amiliares de Walter Gonzalo Huacón Baidal y Mercedes Eugenia Salazar
Cueva, af ectando sus relaciones humanas y su desarrollo personal. En atención a lo
anterior, y teniendo en consideración el acuerdo de solución amistosa, la Corte ordena,
como medida de satisf acción en el presente caso, que el Estado adopte las acciones
previstas en el Acuerdo, en los términos pautados a través de dicho documento (supra
párrs. 51 y 52).
54. El Acuerdo contempla, como medida “solicitada expresamente por las víctimas”,
lo siguiente:
55. La Corte dispone que el Estado cumpla las acciones previstas en el Acuerdo, en
los términos señalados a través de éste (supra párr. 54). El Estado deberá inf ormar de
f orma inmediata a esta Corte una vez que proceda a realizar cada una de las
publicaciones dispuestas, independientemente del plazo de un año para presentar su
primer inf orme dispuesto en el punto resolutivo 9 de esta Sentencia.
56. Asimismo, la Corte dispone que el Estado deberá publicar, en el plazo de seis
meses, contado a partir de la notif icación de la presente Sentencia , la misma en su
integridad21 en un sitio web of icial del Gobierno Nacional. Dicha publicación estará
disponible por un período de un año. El Estado deberá inf ormar de f orma inmediata a
esta Corte una vez que proceda a realizar esta publicación, independientemente del
plazo de un año para presentar su primer inf orme dispuesto en el punto resolutivo 9 de
esta Sentencia.
21
Aunque el texto del Acuerdo obra como anexo a esta Sentencia, y la integra, no debe ser publicado
por el Estado en cumplimiento de esta medida. Lo anterior, sin perjuicio de las publicaciones referidas en el
párrafo 54 de esta Sentencia.
15
C.3 Traslado de los restos
El Estado, a través de la Secretaría de Derechos Humanos, realizará las gestiones necesarias con
el Municipio de Guayaquil para el traslado de los restos del señor Walter Huacón Baidal a una
bóveda propia del cementerio del suburbio Ángel María Canales; y, para el traslado de los restos
de la señora Mercedes Salazar Cueva, a una bóveda propia dentro del cementerio ubicado a la
altura de Milagro, en el recinto Lorenzo Guaraicoa; el traslado deberá efectuarse en un plazo de
seis meses, contados desde la suscripción del […]Acuerdo de solución amistosa. En estas
gestiones las víctimas no incurrirán en gasto alguno.
62. Según lo dispuesto en el Acuerdo, el monto f ijado por indemnización del daño
material e inmaterial sería pagado por el Estado “inmediatamente después de suscrito”
el mismo. El Acuerdo aclaró, además, que la distribución de los montos respectivos entre
las personas benef iciarias, si bien está indicado en el Acuerdo, “responde netamente al
acuerdo interno entre [tales] personas que se encuentran con vida”, y que “la
responsabilidad de la división y entrega de los montos a cada víctima particular se rá
16
exclusivamente asumida por las y los procuradores comunes designados para el ef ecto”,
que están señalados en el Acuerdo.
63. En f orma consistente con lo anterior, en el primer párraf o del punto octavo del
acuerdo, titulado “Plazo y f orma de pago”, el Acuer do f ijó un monto único y total que el
Estado se comprometió a entregar.
64. El Tribunal estima procedente homologar las reparaciones asumidas por el Estado
en el acuerdo de solución amistosa por los conceptos de daño material e inmaterial.
Asimismo, estima procedente homologar lo dispuesto en el acuerdo respecto de no hacer
“ref erencia a las indemnizaciones, por motivos de seguridad de las víctimas”, por lo cual
ha omitido transcribir los montos respectivos en la presente Sentencia.
65. La Corte advierte que el 22 de septiembre de 2022 (supra párrs. 8 y 10) los
representantes manif estaron que “se ha[bía] cumplido con la parte de indemnizaciones
pecuniarias”. Por tanto, esta Corte, sin perjuicio de lo que se indica a continuación en
relación con William Huacón, no supervisará el cumplimiento de las medidas pecuniarias
de reparación.
66. Corresponde, por lo expresado con anterioridad en esta Sentencia ( supra párrs.
31, 41 a 44 y 46), que este Tribunal determine una medida de reparación a f avor de
William Huacón. En relación con el daño inmaterial suf rido por el mismo, la Corte
destaca, en primer término, que el Estado ha reconocido que, a causa de los hechos del
caso, suf rió una vulneración a diversos derechos, inclusive al derecho a la integridad
personal (supra párr. 43). Este Tribunal advierte, además, que el señor William Huacón
estaba presente en la reunión f amiliar que tuvo lugar el 31 de marzo de 1997, que f acilitó
el automóvil al señor Huacón Baidal y a la señora Salazar Cueva, quienes f ueron
ejecutados en dicho vehículo. La muerte del señor Huacón y de la señora Salazar se
produjo cerca de la residencia en donde tuvo lugar la reunión f amiliar, en la que estuvo
presente el señor Huacón. Todo lo anterior indica una cercanía con los hechos que,
presumiblemente, tuvo que haber causado en el señor William Huacón una af ectación a
su integridad personal. Estas circunstancias surgen no solo del Inf orme de Fondo, sino
también de la petición inicial y de la demanda de indemnización f ormulada por f amiliares
del señor Huacón y la señora Salazar el 13 de abril de 2000 22. Por tanto, en las
circunstancias particulares del caso, en equidad, y como reparación por el daño
inmaterial suf rido por esta víctima, la Corte determina que el Estado debe pagar al señor
William Huacón, en el plazo de un año, contado a partir de la notif icación de la presente
Sentencia, un monto de USD $5.000,00 (cinco mil dólares de los Estados Unidos de
América). En caso de que el benef iciario f allezca antes de que le sea entregada la
indemnización, esta se ef ectuará directamente a sus derechohabientes, conf orme al
derecho interno aplicable.
67. El Estado deberá cumplir con la obligación monetaria dispuesta en esta Sentencia
(supra párr. 66) mediante el pago en dólares de los Estados Unidos de América.
68. Si por causas atribuibles a la persona benef iciaria de la medida pecuniaria o a sus
derechohabientes no f uese posible el pago de la cantidad determinada dentro del plazo
22
Cfr. Demanda de indemnización de 13 de abril de 2000, presentada ante el Juez Civil de Guayas
(expediente de prueba, anexo 1.1 al Informe de Fondo, fs. 783 a 785).
17
indicado (supra párr. 66), el Estado consignará el monto establecido a su f avor en una
cuenta o certif icado de depósito en una institución f inanciera ecuatoriana solvente, en
dólares de los Estados Unidos de América, y en las condiciones f inancieras más
f avorables que permitan la legislación y la práctica bancaria. Si no se reclama el monto
correspondiente una vez transcurridos diez años, las cantidades serán devueltas al
Estado con los intereses devengados. En caso de que lo anterior no sea posible, el Estado
deberá mantener asegurada la disponibilidad a nivel interno de los f ondos por el plazo
de diez años.
70. En caso de que el Estado incurriera en mora, deberá pagar un interés sobre la
cantidad adeudada correspondiente al interés bancario m oratorio en Ecuador.
VII
PUNTOS RESOLUTIVOS
LA CORTE
DECIDE,
Por unanimidad,
1. Homologar el Acuerdo de solución amistosa suscrito por las víctimas del presente
caso y el Estado de Ecuador, que integra la presente Sentencia y obra como anexo a la
misma, en los términos de los párraf os 25 y 26 de la presente Sentencia.
DECLARA,
18
Eugenia Salazar Cueva, Mary del Pilar Chancay Quimis, Wilson Eduardo Huacón Baidal,
Karent Lisset Huacón Chancay, Walther Bryan Huacón Chancay, Wilson Fabián Huacón
Salazar, Karla Fernanda Huacón Salazar, Kerlly Mercedes Huacón Salazar y William
Huacón, en los términos del párraf o 43 de la presente Sentencia.
Y DISPONE
9. El Estado, dentro del plazo de un año contado a partir de la notif icación de esta
Sentencia, rendirá al Tribunal un inf orme sobre las medidas adoptadas para cumplir con
la misma, sin perjuicio de lo dispuesto en los párraf os 54 a 60 de la presente Sentencia.
19
Corte IDH. Caso Huacón Baidal y otros Vs. Ecuador. Sentencia de 4 de octubre de 2022.
Comuníquese y ejecútese,
20