El Capitalismo Revoluciones y Guerras
El Capitalismo Revoluciones y Guerras
El Capitalismo Revoluciones y Guerras
Revoluciones y
Guerras.
INTRODUCCIÓN.
La Humanidad ha experimentado en los últimos 250 años un progreso
económico y social sin precedentes.
El resultado ha sido una evolución por etapas; simplificando mucho éstas
han sido: feudalismo, capitalismo, socialdemocracia. Pari passu, ha tenido
lugar una lucha por la igualdad y la justicia social, que ha logrado grandes
mejoras, pero también ha conocido fluctuaciones.
El capitalismo ha sido objeto de
grandes debates sociológicos,
económicos e históricos desde
el siglo XV. El comercio existe desde
que surgió la civilización, pero el
capitalismo como sistema
económico no apareció sino hasta
el siglo XVI en Inglaterra, en
sustitución del feudalismo.
Según Adam Smith, los seres
humanos siempre han tenido una
fuerte tendencia a realizar trueques, cambios e intercambios de unas cosas
por otras. De esta forma al capitalismo, al igual que al sistema de precios y
la economía de mercado, se le atribuye un origen espontáneo o natural
dentro de la edad moderna.
El camino hacia el capitalismo a partir del siglo XIII fue allanado gracias a la
filosofía del Renacimiento y de la Reforma Protestante. Estos movimientos
cambiaron de forma drástica la sociedad, facilitando la aparición de los
modernos Estados nacionales (y posteriormente el Estado de
Derecho como sistema político y el liberalismo clásico como ideología) que
proporcionaron las condiciones necesarias para el crecimiento y desarrollo
del capitalismo en las naciones europeas. Este crecimiento fue posible
gracias a la acumulación del excedente económico que generaba el
empresario privado y a la reinversión de este excedente para generar
mayor crecimiento económico, lo cual generó industrialización en las
regiones del norte.
Muchos de los rasgos fundamentales de las sociedades modernas, en
especial las europeas, y como rasgo especial el desarrollo económico, tienen
su origen en los siglos oscuros del pasado medieval. Existe una clara
continuidad entre el capitalismo actual y las instituciones económicas de la
Edad Media como los gremios, los mercados, los talleres, los banqueros, las
prácticas mercantiles, e incluso las formas del seguro marítimo medieval
(Tortella y otros, 2014).
¿Qué es el Capitalismo?
Teóricos
La doctrina política que históricamente ha encabezado la defensa e
implantación de este sistema económico y político ha sido el liberalismo
económico y clásico del cual se considera sus padres fundadores a John
Locke, Juan de Mariana, Adam Smith y Benjamin Franklin.
El pensamiento liberal clásico sostiene en economía que la intervención del
gobierno debe reducirse a su mínima expresión. Sólo debe encargarse del
ordenamiento jurídico que garantice el respeto de la propiedad privada, la
defensa de las llamadas libertades negativas: los derechos civiles y políticos,
el control de la seguridad interna y externa (justicia y protección), y
eventualmente la implantación de políticas para garantizar el libre el
funcionamiento de los mercados, ya que la presencia del Estado en la
economía perturbaría su funcionamiento. Sus representantes
contemporáneos más prominentes son Ludwig von Mises y Friedrich
Hayek por parte de la llamada Escuela de Viena de economía; George
Stigler y Milton Friedman por parte de la llamada Escuela de Chicago,
existiendo profundas diferencias entre ambas.
La revolución capitalista
El sistema pre-capitalista de producción era restrictivo. Su base histórica era
la conquista militar. Los reyes victoriosos habían dado la tierra a sus
paladines. Estos aristócratas eran señores en el sentido literal de la palabra,
ya que no dependían del apoyo de consumidores comprando o
absteniéndose de comprar en un mercado. Por otro lado, ellos mismos eran
los principales clientes de las industrias de procesado que, bajo el sistema
de gremios, se organizaban siguiendo un esquema corporativo. Este
esquema se oponía a la innovación. Prohibía el desvío de los métodos
tradicionales de producción. El número de personas para las que había
trabajo incluso en la agricultura o en las artesanías estaba limitado. Bajo
estas condiciones, muchos hombres, por usar las palabras de Malthus,
tuvieron que descubrir que “en la fiesta poderosa de la naturaleza no hay
espacio para ellos” y que “esta les dice que se vayan”.1 Pero algunos de
estos marginados se las arreglaron sin embargo para sobrevivir, tener hijos
y hacer que el número de indigentes aumentara cada vez más.
¿Qué es la guerra?
Economía y Sociedad
Poder y dominación