AMPARO NUEVO

(REF. APELACIÓN JUICIO ORAL DE FIJACIÓN DE PENSIÓN ALIMENTICIA, EXPEDIENTE 02056-2021-01947 OFICIAL SEGUNDA
DE SALA SEGUNDA DE LA CORTE DE APELACIONES DE FAMILIA DEL DEPARTAMENTO DE GUATEMALA.)

HONORABLES MAGISTRADOS DE LA CORTE SUPREMA DE JUSTICIA,

CAMARA DE AMPARO Y ANTEJUICIO, CONSTITUIDA EN TRIBUNAL DE

AMPARO.

Yo, JUAN SEBASTIAN SANTILLANA CORONADO, de treinta y seis (36)

años de edad, casado, guatemalteco, Ingeniero Industrial, con domicilio en el

departamento de Guatemala, respetuosamente comparezco ante ustedes y;

EXPONGO:

I. DEL AUXILIO, DIRECCIÓN Y PROCURACIÓN: Actúo bajo la dirección y

procuración del abogado Juan Francisco Chajchalac Hernández, con número

de colegiado 23,300.

a. DEL LUGAR PARA RECIBIR NOTIFICACIONES: Señalo expresamente mi

deseo de ser notificado vía casillero electrónico proporcionado por el Sistema

de Notificaciones Electrónicas del Organismo Judicial JC00006696.

III. DEL MOTIVO DE MI COMPARECENCIA: Respetuosamente comparezco ante

la Honorable Corte Suprema de Justicia, Cámara de Amparo y Antejuicio,

constituido en Tribunal de Amparo, a interponer acción constitucional de

AMPARO en contra de los MAGISTRADOS DE LA SALA SEGUNDA DE LA

CORTE DE APELACIONES DE FAMILIA DEL DEPARTAMENTO DE

GUATEMALA, quienes pueden ser notificados en la tercera calle, nueve guion

veinticuatro de la zona uno de esta ciudad capital, departamento de

Guatemala.

IV. DEL ACTO QUE CAUSA AGRAVIO Y TEMPORALIDAD DE LA PRESENTE

ACCIÓN: El acto que causa agravio a mi persona y contra el que reclamo, es

la resolución identificada con el número de Juicio Oral de Fijación de Pensión

Alimenticia, expediente cero dos mil cincuenta y seis guion dos mil veintiuno

guion mil novecientos cuarenta y siete (02056-2021-1947) emitida por la

Honorable Sala Segunda de la Corte de Apelaciones de Familia del

departamento de Guatemala con fecha trece de octubre de dos mil veintidós la

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 cual fue notificada a mi persona el día tres de mayo del dos mil veintitrés,

mediante la cual, la SALA resuelve lo siguiente en Recurso de Apelación

Planteado: “..DECLARA: I. SIN LUGAR EL RECURSO DE APELACIÓN

interpuesto por JUAN SEBASTIAN SANTILLANA CORONADO, ... II. CON

LUGAR PARCIALMENTE LA ADHESIÓN AL RECURSO DE APELACIÓN

interpuesta por ANDREA CORINA DONIS PAZ, ... III. En consecuencia, se

MODIFICA, la sentencia conocida en grado quedando el numeral romano tres

de la parte resolutiva de la siguiente forma: III) Se condena al señor JUAN

SEBASTIAN SANTILLANA CORONADO a pagar en concepto de pensión

alimenticia la suma de CINCO MIL QUETZALES mensuales a favor de

ANDREA CORINA DONIS PAZ en su calidad de esposa, …”

V. DE LA DEFINITIVIDAD DEL ACTO IMPUGNADO: La resolución emitida por la

HONORABLE SALA SEGUNDA DE LA CORTE DE APELACIONES DE

FAMILIA, en la cual ya fue identificada como el acto agraviante, por lo que se

han agotado los recursos que nuestra legislación permite y que, en el presente

caso, facultan a mi persona a interponer la presente acción constitucional de

amparo. En virtud de lo anteriormente expuesto, me permito plantear la acción

constitucional ya citada, sobre la base de los siguientes,

HECHOS:

I. ANTECEDENTES:

a. ANTECEDENTES DEL EXPEDIENTE JUDICIAL:

- Sentencia emitida por el Honorable Juez V del Juzgado Pluripersonal de

Primera Instancia de Familia con Competencia Específica para Procesos

de Pensiones Alimenticias del Departamento de Guatemala, en la cual

fija una pensión Alimenticia de 5000 a mi persona en favor de la señora

ANDREA CORINA DONIS PAZ, la cual considero violatoria a los

principios de proporcionalidad, complementariedad y necesidad que

rigen la obligación de prestar alimentos, toda vez que al momento de

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 resolver no se toman en cuenta pruebas que fueron aportadas dentro del

proceso y no se les dio una debida valoración.

- En Recurso de Apelación, la Honorable Sala Segunda De La Corte De

Apelaciones De Familia no solo confirma la sentencia, si no que la

modifica aumentando el monto a 5000 que había sido fijado en Primera

Instancia que habían sido fijados en 1000, haciendo imposible el

cumplimiento de esta, lo cual resulta violatorio a mi derecho de defensa

al no tomar en cuenta circunstancias que se hacen ver dentro del

proceso y no se le da una debida valoración.

b. ARGUMENTOS QUE DEMUESTRAN LA PROCEDENCIA DE LA PRESENTE

ACCIÓN CONSTITUCIONAL DE AMPARO:

- Del Debido Proceso y Legítima Defensa: El artículo 12 de la

Constitución Política de la República, consagra el derecho que posee
toda persona, a un debido proceso y una legítima defensa.

Al respecto, ese máximo tribunal constitucional ha sentado abundante

doctrina legal en el sentido que: "la garantía del debido proceso no sólo
se cumple cuando en un proceso se desarrollan los requisitos
procedimentales que prevé la ley y se le da oportunidad de defensa a
ambas partes de esa relación procesal, sino que también implica que
toda cuestión litigiosa debe dirimirse conforme disposiciones normativas
aplicables al caso concreto con estricto apego a lo que dispone el
artículo 204 de la Constitución" y que "se viola el debido proceso, si a
pesar de haberse observado meticulosamente el procedimiento, en la
sentencia se infringen principios que le son propios a esta garantía
constitucional." (Sentencia de 4 de marzo de 1,998, expediente 929-97);
también en atención a que "El derecho a la tutela judicial que deben
dispensar los jueces o tribunales comprende el de emitir resoluciones
fundadas en Derecho. El tribunal de amparo debe examinar los
argumentos que apoyan la acción constitucional y la decisión judicial
impugnada, con el fin de comprobar la congruencia con la normativa de
la Carta Magna, pudiéndose suspender el acto gravoso y reenviar a la
autoridad reclamada para que corrija la situación jurídica afectada por

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 errores con relevancia constitucional." (Sentencia de 16 de abril de
1,998, Expediente 946-97).

Así mismo, ha considerado que: “La puntual observancia de tales

aspectos se materializa en el respeto al principio jurídico del debido
proceso, que es un derecho que asiste, en igual proporción, a todas las
partes que concurren a juicio y es lo que les permite ejercer su actividad
con oportunidades equivalentes cada una en su ámbito de actuación. Sin
embargo, cabe hacer énfasis en el hecho de que dicho principio no se
agota con el sólo cumplimiento de las fases que conforman los procesos
-cualquiera que sea su índole-, pues es necesario que en cada una de
ellas se respeten los derechos que la ley confiere a las partes de
acuerdo al derecho que ejercitan. De ahí que en la sustanciación de un
proceso bien podrían consumarse todas las etapas necesarias para su
tramitación, pero, si en una o varias de ellas se impide o veda a las
partes el uso de un derecho, ello se traduce en violación del derecho al
debido proceso.” (Sentencia de 16 de enero de 2000, Expedientes
acumulados Nos. 491 y 525-2000).

- Derecho de Petición: El artículo 28 de la Constitución Política de la

República, regula que los habitantes de la República de Guatemala
tienen derecho a dirigir, individual o colectivamente, peticiones a la
autoridad, la que está obligada a tramitarlas y deberá resolverlas
conforme a la ley.

- Libre Acceso a Tribunales y Dependencias del Estado: El artículo 29

de la Constitución Política de la República, estipula que toda persona
tiene libre acceso a los tribunales, dependencias y oficinas del Estado,
para ejercer sus acciones y hacer valer sus derechos de conformidad
con la ley.

- Fundamento Jurídico: De conformidad con el Código Civil: Artículo

278. “La denominación de alimentos comprende todo lo indispensable
para el sustento, habitación, vestido asistencia médica y también la
educación e instrucción del alimentista cuando es menor de edad”.
Artículo 279. “Los alimentos han de ser proporcionados a las
circunstancias personales y pecuniarias de quien los debe y de quien los
recibe, y serán fijados por el juez, en dinero”. Artículo 280 “los alientos
se reducirán o aumentarán proporcionalmente, según el aumento o

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 disminución que sufran las necesidades del alimentista y la fortuna del
que hubiere de satisfacerlos”. Artículo 281. “Los alimentos sólo se deben
en la parte en que los bienes y el trabajo del alimentista no alcancen a
satisfacer sus necesidades”. Artículo 289 “Cesará la obligación de dar
alimentos: … 2⁰… cuando termina la necesidad del que los recibía…”.

- Relación de Hechos: La sentencia emitida por el Honorable Juez de

Primera Instancia de Familia con Competencia Específica para Procesos
de Pensiones Alimenticias del Municipio y Departamento de Guatemala,
fija una pensión alimenticia de un mil quetzales exactos (Q1,000. ⁰⁰) en
favor de Andrea Corina Donis Paz, la misma está fundamentada y
razonada únicamente en dos aspectos: 1. “En que la pretensión de la
actora si prospera, en virtud de haber certificación de
matrimonio…”. 2. “El demandado… demostró que sí tiene la
capacidad económica como para poder proporcionar una pensión
alimenticia a favor de la actora en su calidad de esposa…”.

Ante esta resolución considero que el Honorable Juez, violentó mis

derechos, al no establecer una pensión ajustada al principio de
proporcionalidad, al no darle valor probatorio a varios documentos
presentados por mi persona que si demuestran esa igualdad de
condiciones tanto en el ámbito económico y profesional, siendo éstos
documentos una factura electrónica que comprueba la compraventa de
un vehículo marca Hyundai por parte de mi persona y que se encuentra
a nombre de Andrea Corina Donis Paz, tal como indica el desplegado de
vehículos propios adjunto dentro del proceso, factura que, junto a los
estados de cuenta de mis Tarjetas de Crédito, documentos que el
Honorable Juez tampoco le da valor probatorio, pero sí comprueban que
hasta la presente fecha continúo con los pagos de dicho vehículo, el cual
se encuentra en poder de la parte actora circunstancia que ella no hace
ver por no convenir a sus intereses personales, sin embargo sigo
cumpliendo con esa obligación, lo cual se puede comprobar con ambos
estados de cuenta que la deuda por el vehículo que es de uso personal
de Andrea Corina Donis Paz da una suma total de tres mil cuatrocientos
cuarenta y cuatro quetzales con cuarenta y cinco centavos (Q3,444.45),
tampoco dándole valor probatorio al cheque que se presentó por el
monto de treinta y ocho mil novecientos noventa quetzales

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(Q38,990.00), con lo cual se puede comprobar que hasta la presente
fecha yo he pagado la totalidad del vehículo que en ningún momento
utilice.

Considero que no se hizo una correcta valoración y apreciación de los

ingresos de ambos, circunstancia que definitivamente altera la
proporcionalidad con la que resuelve, puesto que si se le da valor
probatorio a mi carta de ingreso por el monto de Veinte mil quinientos
cincuenta y ocho quetzales con veinticinco centavos (Q20,558.25) y
también se le da valor probatorio a la constancia de ingresos de Andrea
Corina Donis Paz por el monto de veinte mil novecientos veintisiete
quetzales con sesenta y siete centavos (Q20,927.67), con la cual se
pude constatar que incluso es un monto mayor a mis ingresos.

Por su parte, la Honorable Sala Segunda de la Corte de Apelaciones de

Familia, resolvió denegando la apelación planteada por mi persona, pero
acogiendo parcialmente la adhesión al recurso de apelación planteado
por Andrea Corina Donis Paz, resolviendo modificar la pensión fijada en
primer grado, quedando la misma por la cantidad de cinco mil quetzales
exactos (Q5,000. ⁰⁰), fundamentando dicha resolución en los siguientes
aspectos que constan en el considerando II de su resolución: a) “Consta
el certificado de matrimonio…, por lo que, al existir un vínculo conyugal,
se genera la obligación exigida en la demanda…”. b) … el estudio
socioeconómico practicado refleja los gastos que realiza…,
reiterando que únicamente es referencial de la situación económica…”.
c) “Consta en las actuaciones que la actora Andrea Corina Donis Paz,
es médico y cirujana, profesión que le permite generar ingresos propios
por doce mil quetzales mensuales aproximadamente y por lo tanto,
se aplican los artículos 111 y 281 del código civil, pues ella también
tiene obligación de contribuir con el sostenimiento del hogar y la pensión
que se fija debe únicamente complementar su derecho alimentos,
por lo que en este caso no es factible que el demandado sufrague la
totalidad de los gastos que realiza la actora para su subsistencia, por
ello esta Sala considera no acceder al monto de trece mil cien quetzales
solicitado”.

En este punto considero que la Honorable Sala no hizo una correcta

interpretación de los hechos en cuestión demostrados dentro del

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proceso en primera instancia, violentando mi derecho de defensa ya que
le dan más valor a lo dicho por la parte actora y no a lo que yo sí pude
comprobar de conformidad con lo que establece el artículo 126 del
Código Procesal Civil y Mercantil, al razonar que ella gana doce mil
quetzales mensuales cuando yo puede comprobar sus ingresos con una
carta de ingresos a la que si se le da el valor probatorio correspondiente
por el monto de veinte mil novecientos veintisiete quetzales con sesenta
y siete centavos (Q20,927.67), teniendo así una profesión e ingresos
propios que le permiten sufragar sus gastos personales.

d) “… el demandado … mencionó que gana veintiún mil quinientos

treinta y cuatro quetzales con setenta y ocho centavos, ambos
aspectos son útiles y sirven de referencia para conocer la capacidad
económica del obligado, siendo éste el único ingreso que esta sala
tiene por acreditado, …”. e) … el señor Juan Sebastián Santillana
Coronado, si posee capacidad económica para proporcionar no
solo el monto fijado por el Juez en primera instancia -un mil
quetzales-, sino incluso una cantidad mayor, … no es cierto que la
pensión alimenticia no cumpla con un debido equilibrio, al contrario,
resulta desproporcional, pero porque la cantidad fijada, mil quetzales
es muy poca en contraposición del salario del demandado que oscila los
veintiún quetzales mensuales…”. e) “En cuanto al monto de pensión
alimenticia, de la demandada para exigir el pago de alimentos, fue por
estar en riesgo el derecho a la vivienda, … indicando la alimentista
que el demandado dejó de pagar la cuota que le corresponde por la
casa adquirida por ambos para el hogar conyugal y que es el lugar
donde ella continúa residiendo; … En el presente caso, se observa
que si el demandado pagaba la cantidad de cuatro mil ciento setenta
quetzales con ochenta y nueve centavos en concepto de vivienda, lo
que denota que sí posee capacidad de pago…; esta Sala reconoce
que el demandado posee más cargas familiares, pero que advierte
qué al procrear a su hija …, él ya era conocedor de las obligaciones
contraídas con su esposa y si tomó la decisión de adquirir nuevos
compromisos, es porque él consideraba tener la capacidad para
cumplirlos, por lo que las decisiones del apelante no pueden afectar los
derechos de la actora, ni poner en riesgo su derecho a la vivienda, ni
dejar de cumplir los compromisos legales previamente adquiridos en el

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matrimonio, pues su hija nació el 07/07/2021 y la obligación de pago de
vivienda fue adquirido el 02/09/2019; … Lo mismo sucede con otras
deudas que el demandado indica debe pagar, pues dichas obligaciones
las adquirió con pleno conocimiento de su obligación relacionada a
proveer vivienda para el hogar conyugal, … En ese sentido, esta sala
decide aumentar el monto de pensión alimenticia que también
comprende la vivienda…”.

Estos tres puntos resolutivos de la Honorable Sala, también violentan

mis derechos, por ser contraria nuevamente al principio de
proporcionalidad e igualdad, porque nuevamente razona que yo si poseo
suficientes ingresos para dar una cantidad mayor a la resuelta por el
Juez en Primera Instancia, nuevamente haciendo un equívoco
razonamiento en cuanto al monto proporcional de los ingresos, los
cuales fueron comprobados por mi persona y como argumente
anteriormente, incluso los ingresos de la parte actora son mayores que
los míos, aumentando así la Honorable Sala el monto de pensión,
aduciendo que se pone en riesgo el derecho a la vivienda, sin tomar en
cuenta, no solo mis gastos personales, si no que no toma en cuenta que
aún continúo pagando la cantidad de tres mil cuatrocientos cuarenta y
cuatro quetzales con cuarenta y cinco centavos (Q3,444.45) en favor de
Andrea Corina Donis Paz, habiendo sido únicamente yo quien tiene a
cargo la obligación con dicho vehículo el cual estuvo todo el tiempo a
disposición de ella.
Así como tampoco se valoró que el enganche por la compra de la casa
que asciende al monto de cincuenta y seis mil quetzales (Q56,000.00)
que se encuentra establecido dentro del contrato presentado por la parte
actora en su memorial de demanda y que la Honorable Sala valoró para
resolver, con lo que se puede establecer que, a pesar de tener una
igualitaria fuente de ingresos era mi persona quien corría con la mayoría
de los gastos para el mantenimiento del hogar.

h) “En cuanto a la inconformidad del pago de costas procesales

planteada por el demandado, él alegó que actuó de buena fe; sin
embargo, el actuar del demandado dentro del juicio fue oponerse a la
pretensión de la actora e interponer excepción perentoria, misma que

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 fue declarada sin lugar, circunstancia que conllevó ser parte vencida
en juicio, …”.

En cuanto a este último punto resolutivo, considero también una

violación a mi derecho de defensa, ya que la Honorable Sala manifiesta
que, por haber interpuesto una excepción, lo cual son herramientas
pertinentes que la legislación regula para defenderse en juicio, fui
vencido en juicio, sin embargo ni el Juez de primera Instancia ni la Sala
le da un valor procesal al hecho que desde el inicio de mi contestación a
la demanda en la literal b de los Hechos, reconozco la obligación que la
Ley impera a mi persona y propongo una cantidad más ajustada a la
realidad de ambos, esto de conformidad a los argumentos vertidos en
este memorial de Amparo, así mismo soy yo quien demuestra mis
ingresos así como la mayor cantidad de pruebas admitidas por el juez en
primera instancia demostrando mis gastos y lo que yo he aportado hasta
la presente fecha a la señora Andrea Corina Donis Paz, siendo que ella
no demostró fehacientemente la necesidad de solicitar una pensión
alimenticia, a pesar de contar con una profesión e ingresos propios que
le permiten subsistir de una manera digna y más holgada que mi
persona.

- Jurisprudencia:

c. DE LOS MOTIVOS QUE SUSTENTAN LA PRESENTE ACCION

CONSTITUCIONAL:

Tal como podrá ser apreciado por los Honorables Magistrados, se puede

evidenciar la violación a las disposiciones Constitucionales y Legales ya

señaladas, puesto que si bien es cierto, el Código Civil en su artículo 283

establece que están obligados los cónyuges a darse alimentos, también es

cierto que el mismo cuerpo legal en más de un articulado establece que debe

existir una necesidad así como también una proporcionalidad al momento de

pedirlos y otorgarlos, es así que el artículo 279 del Código Civil establece que

“Los alimentos han de ser proporcionados a las circunstancias personales y

pecuniarias de quien los debe y los recibe…” al igual que el artículo 287 del

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mismo cuerpo legal establece que “La obligación de dar alimentos será

exigible, desde que los necesitare la persona que tenga derecho a

percibirlos…”, así mismo el artículo 281 establece que “Los alimentos solo se

deben en la parte en que los bienes y el trabajo del alimentista no alcancen a

satisfacer sus necesidades.”

Así es pues que, dentro de la ventilación del proceso en primera instancia, la

señora Andrea Corina Donis Paz no comprobó en ningún momento la

necesidad que tenía de solicitar alimentos, al contrario, dentro juicio se logró

comprobar por las pruebas aportadas que, la alimentista, si cuenta con

ingresos suficientes para cubrir sus necesidades básicas incluyendo la

vivienda, a la cual aporté en gran parte para poder adquirir la misma. Ésta

circunstancia se puede concatenar con lo preceptuado por el artículo 126 del

Código Procesal Civil y Mercantil en cuanto a “Quien pretenda algo de probar

los hechos constitutivos de su pretensión...”.

Considero también de suma importancia advertir a los Honorables Magistrados

sobre circunstancias que, si bien es cierto no pudieron comprobarse durante la

tramitación del juicio ya que por la misma naturaleza de la prueba no era

posible en ese momento, actualmente si es posible de verificar y me veo en la

necesidad de poder hacerlas ver, continuando en la misma ilación de hechos

argumentados, en la cual ella no demuestra esa necesidad de requerir

alimentos, no solo queda también demostrado que Andrea Corina Donis Paz

promueve el Juicio Oral de Pensión Alimenticia un año después de nuestra

separación, también lo es que durante la tramitación del proceso se pudo

apreciar y también podía haber sido comprobada a través de las presunciones

humanas, las cuales se pasan por alto, es que la alimentista durante la

tramitación del proceso objeto de análisis, se encontraba embarazada,

circunstancia que puede verificarse Honorables Magistrado con la Certificación

de Nacimiento de Helena Ainara Marroquín Donis, quien es hija de Andrea

Corina Donis Paz con tercera persona ajena a nuestro matrimonio, quienes son

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ajenos a mi obligación marital, ya que en la misma podemos observar que la

menor nació el veintidós de agosto del dos mil veintidós y la sentencia en

primera instancia fue dictada el día dos de junio del dos mil veintidós, con la

cual se puede asumir que la alimentista tenía ya para el inicio de la tramitación

del proceso una relación distinta al matrimonio, circunstancia que puede ser

tomada como una presunción humana tomando en cuenta el tiempo que debe

transcurrir entre la concepción y el nacimiento de un ser humano, dicha

relación de convivencia constituyó su hogar en la misma residencia que era

destinada para nuestro hogar conyugal, circunstancia que está también fuera

de mis obligaciones maritales, tal y como ella misma lo aceptó al manifestar

que aún reside en dicha dirección y de no serlo así no tendría cabida la

resolución emitida por la Honorable Sala, ya que en eso basa su resolución.

Aunado a esto, Honorables Magistrados, se puede traer a colación la norma

jurídica que preceptúa “…La mujer gozará de la pensión mientras … no

contraiga nuevo matrimonio…”, contenido en el artículo 169 del Código Civil, si

bien es cierto, no es posible que Andrea Corina Donis Paz contraiga nuevo

matrimonio por existir aún vínculo entre nosotros, es cierto que la norma

permite hacer una interpretación análoga de éste precepto, trayendo a colación

que uno de los fines del matrimonio es el ánimo de permanencia con el fin de

vivir juntos y procrear, alimentar y educar a sus hijos, circunstancia que no se

cumple entre nosotros por no existir hijos y no vivir juntos, pero que si se da

con la relación que tiene la señora Andrea Corina Donis Paz con el señor

Carlos Manuel Marroquín Arriaza, al convivir junto a su menor hija en el mismo

hogar que la Honorable Sala me obliga a pagar.

Ante esta situación, se puede advertir la grave violación a mis derechos así

como también el derecho que tiene mi familia de que yo pueda cumplir mi

obligación para con ellas, circunstancia que desde el inicio yo reconocí y no

negué en ningún momento, sin embargo este hecho fue aprovechado también

por la parte actora para denigrarme e insultarme a mí y a mi familia, ya que en

reiteradas ocasiones, en su memorial de adhesión al recurso de apelación

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 planteado por mi persona, hace mención que soy una persona “irresponsable,

misógina y fraudulenta y que tengo una vida libertina estando con cuanta mujer

quiera teniendo cuantos hijos extramaritales quisiera”, a pesar de que fui yo

quien demostró tener una familia, que merece todo el respeto posible, que fui

yo quien corrió con la mayoría de los gastos de hogar durante nuestra

convivencia y que demuestro también que aún estoy pagando un vehículo que

se encuentra en su poder.

Es por esto Honorables Magistrados, que haciendo una interpretación análoga,

de ésta normativa legal, que ella ya tiene una nueva relación de convivencia en

la que ha procreado una hija y residiendo en el que se supone era nuestro

hogar conyugal, además del hecho de iniciar el proceso un año después de

nuestra separación coincidiendo este hecho en los tiempos en que ella tiene

una nueva relación, a pesar que menciona que para sostenerse incluso recurrió

a préstamos y que acudió a terapia psicológica por culpa mía, estos hechos no

los comprobó durante la tramitación del proceso, se puede establecer que ella

no tenía una necesidad en principio para solicitar el pago de una pensión

alimenticia, mucho menos a una como la otorgada por la Honorable Sala

Segunda de la Corte de Apelaciones de Familia.

Para esto el autor Vladimiro Naranjo Mesa, en su obra titulada Derecho

Constitucional, refiere que con la interpretación análoga se busca que el

intérprete establezca la semejanza entre un caso claramente cubierto por la

norma y otro no previsto por ella, para proceder a investigar cual es el criterio

con que la norma enfoca el caso previsto y así aplicar el mismo criterio al que

no lo está, con lo cual si podemos adecuar lo estipulado en el artículo 169 del

Código Civil a éste caso en concreto.

d. DE LA VIOLACION A OTRAS DISPOSICIONES LEGALES POR PARTE DE

LA SALA SEGUNDA DE LA CORTE DE APELACIONES DE FAMILIA.

El artículo 8 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad,

regula que el amparo protege a las personas contra las amenazas de

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 violaciones a sus derechos o restaura el imperio de estos cuando la violación

hubiere ocurrido.

Asimismo, el artículo 10 de dicha ley de carácter constitucional, regula que la

procedencia del amparo se extiende a toda situación que sea susceptible de un

riesgo, una amenaza, restricción o violación a los derechos que la Constitución

y las leyes de la República de Guatemala reconocen.

En el presente caso, evidentemente la HONORABLE SALA SEGUNDA DE LA

CORTE DE APELACIONES DEL RAMO DE FAMILIA, viola los principios

constitucionales contenidos en los artículos, 28 y 29 de nuestra carta magna,

los cuales regulan el respeto a la Legítima Defensa, Debido Proceso 279 del

Código civil, que regula lo relativo a la fijación de la proporcionalidad de los

alimentos; y al aumentar el monto fijado en la Sentencia dictada en Primera

Instancia, resulta evidente que la HONORABLE SALA SEGUNDA DE LA

CORTE DE APELACIONES DEL RAMO DE FAMILIA, viola tales disposiciones

constitucionales, sobre todo cuando la norma general aplicable a todo aspecto

relativo a los alimentos, es decir el Código Civil, clara y taxativamente regula

que los alimentos han de ser proporcionales a las circunstancias personales y

pecuniarias de quien los debe y quien los recibe, además que deba demostrar

la necesidad de recibirlos.

II. SOLICITUD DE AMPARO PROVISIONAL:

El artículo 24 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de

Constitucionalidad, señala que en el memorial de interposición del amparo

podrá solicitarse la suspensión provisional de la disposición, acto, resolución o

procedimiento reclamado.

El artículo 27 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de

Constitucionalidad, regula que la suspensión provisional del acto reclamado

procede tanto de oficio como a instancia de parte. En cualquier caso, el

tribunal, en la primera resolución que dicte, aunque no hubiere sido pedido,

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resolverá sobre la suspensión provisional del acto, resolución o procedimiento

reclamados, cuando a su juicio las circunstancias lo hagan aconsejable.

Por su parte, la literal c) del artículo 28 del mismo cuerpo legal, establece

deberá decretarse de oficio la suspensión provisional del acto, resolución o

procedimiento reclamado, cuando la autoridad o entidad contra la que se

interponga el amparo esté procediendo con notoria ilegalidad o falta de

jurisdicción o competencia.

Asimismo, el artículo 33 de dicha ley, regula que los jueces y tribunales están

obligados a tramitar los amparos el mismo día en que les fueren presentados,

mandado a pedir los antecedentes o en su defecto informe circunstanciado a la

persona, autoridad, funcionario o empleado contra el cual se haya pedido

amparo, quienes deberán cumplir remitiendo los antecedentes o informando

dentro del perentorio término de cuarenta y ocho horas, más el de la distancia,

que fijará el tribunal en la misma resolución, a su prudente arbitrio.

Si dentro del indicado término no se hubiesen enviado los antecedentes o el

informe, el tribunal que conozca del caso, deberá decretar la suspensión

provisional del acto, resolución o procedimiento reclamado.

En ese sentido, y habiendo demostrado dentro de la presente acción de

amparo, la violación a disposiciones constitucionales en la que incurre la

HONORABLE SALA SEGUNDA DE LA CORTE DE APELACIONES RAMO DE

FAMILIA, cuya resolución, indudablemente causan agravios irreparables a mi

persona, solicito se otorgue amparo provisional al momento de emitirse la

primera resolución, dejando en suspenso los actos impugnados.

MEDIOS DE PRUEBAS:

Para probar las aseveraciones anteriores, ofrezco los siguientes medios de

convicción que adjunto al presente memorial:

I. Documentos.

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 1. Fotocopia simple de mi Documento Personal de Identificación con

Código Único de Identificación mil novecientos setenta y nueve

cincuenta y cinco mil setecientos ochenta y nueve cero ciento

uno (1979 55789 0101).

2. Copia simple de la sentencia emitida por la Honorable Sala

Segunda de la Corte de Apelaciones de Familia del Departamento

de Guatemala de fecha trece de octubre de dos mil veintidós y

que me fuere notificada el día tres de mayo del dos mil veintitrés.

3. Expediente número cero dos mil cincuenta y seis guion dos mil

veintiuno guion cero mil novecientos cuarenta y siete a cargo del

Juzgado Pluripersonal de Primera Instancia de Familia con

Competencia Especifica para Procesos de Pensiones

Alimenticias, Guatemala, Juzgado al cual la Honorable Corte

Suprema de Justicia, Cámara de Amparo y Antejuicio deberá

solicitar las actuaciones, en las cuales constan todos los medios

de prueba ofrecidos por las partes en su momento y de los cuales

se hace referencia en el presente memorial, así como la

sentencia emitida con fecha dos de junio de dos mil veintidós.

4. Certificación de nacimiento de Helena Ainara Marroquín Donis de

fecha veinticinco de febrero de dos mil veintitrés emitida por el

Registro Civil de las Personas, del Registro Nacional de las

Personas -RENAP-, en el cual consta la relación que tiene la

señora Andrea Corina Donis Paz con el señor Carlos Manuel

Marroquín Arriaza.

II. Presunciones Legales y Humanas.

1. Que deberá determinar la Honorable Corte Suprema de Justicia,

Cámara de Amparo y Antejuicio, constituido en tribunal de

amparo, de los indicios que se desprendan de las pruebas

aportadas por los sujetos procesales.

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 FUNDAMENTO DE DERECHO

LEY DE AMPARO, EXHIBICIÓN PERSONAL Y DE CONSTITUCIONALIDAD,

DECRETO 1-86 DE LA ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE:

ARTÍCULO 8. OBJETO DEL AMPARO. “El amparo protege a las personas

contra las amenazas de violaciones a sus derechos o restaura el imperio de los

mismos cuando la violación hubiere ocurrido. No hay ámbito que no sea

susceptible de amparo y procederá siempre que los actos, resoluciones,

disposiciones o leyes de autoridad lleven implícitos una amenaza, restricción o

violación a los derechos que la Constitución y las leyes garantizan”.

ARTICULO 9. SUJETOS PASIVOS DEL AMPARO. “Podrá solicitarse amparo

contra el Poder Público, incluyendo entidades descentralizadas o autónomas,

las sostenidas con fondos del Estado creadas por ley o concesión o las que

actúen por delegación de los órganos del Estado, en virtud de contrato,

concesión o conforme a otro régimen semejante. Asimismo, podrá solicitarse

contra entidades a las que debe ingresarse por mandato legal y otras

reconocidas por ley, tales como partidos políticos, asociaciones, sociedades,

sindicatos, cooperativas y otras semejantes. El amparo procederá contra las

entidades a que se refiere este artículo cuando ocurrieren las situaciones

previstas en el artículo siguiente o se trate de prevenir o evitar que se causen

daños patrimoniales, profesionales o de cualquier naturaleza.”

ARTICULO 10. PROCEDENCIA DEL AMPARO. “La procedencia del amparo

se extiende a toda situación que sea susceptible de un riesgo, una amenaza,

restricción o violación a los derechos que la Constitución y las leyes de la

República de Guatemala reconocen, ya sea que dicha situación provenga de

personas y entidades de derecho público o entidades de derecho privado.”

Por su parte, la Constitución Política de la República de Guatemala establece

que la defensa de la persona y sus derechos son inviolables; que nadie puede

ser condenado, ni privado de sus derechos, sin haber sido citado, oído y

vencido en proceso legal ante juez o tribunal competente y preestablecido; que

los funcionarios son depositarios de la ley y deben observarla y no transgredirla

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y que son responsables legalmente por su conducta oficial; que ningún

funcionario, o empleado público civil o militar está obligado a cumplir órdenes

manifiestamente ilegales o que impliquen la comisión de un delito; que los

tribunales de justicia, en toda resolución o sentencia, observarán

obligadamente el principio de que la Constitución de la República de

Guatemala prevalece sobre cualquier ley o tratado; que el amparo ha sido

instituido con el fin de proteger a las personas contra las amenazas o

violaciones a sus derechos o para restaurar el imperio de los mismos, cuando

la violación hubiese ocurrido; que no hay ámbito que no sea susceptible de

amparo y que procederá siempre que los actos, resoluciones, disposiciones o

actos de autoridad lleven implícitos una amenaza, restricción o violación a los

derechos que la Constitución y las leyes ordinarias garantizan.

El artículo 28 de la Constitución Política de la República, contempla el derecho

de petición y el mismo estipula que los habitantes de la República de

Guatemala tienen derecho a dirigir, individual o colectivamente, peticiones a la

autoridad, la que está obligada a tramitarlas y deberá resolverlas conforme a la

ley.

Por su parte, la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad

establece que las disposiciones de dicha ley, se interpretan siempre en forma

extensiva, a manera de procurar la adecuada protección de los derechos

humanos y el funcionamiento eficaz de las garantías de defensa del orden

constitucional; que la defensa de la persona y sus derechos son inviolables;

que nadie podrá ser condenado, ni privado de sus derechos, sin haber sido

citado, oído y vencido en proceso legal ante juez o tribunal competente y

preestablecido; que en todo procedimiento administrativo o judicial deben

guardarse u observarse las garantías propias del debido proceso; que el

amparo protege a las personas contra las amenazas de violación a sus

derechos o restaura el imperio de los mismos cuando hubiese ocurrido

violación; que no hay ámbito que no sea susceptible de amparo y procederá

siempre que los actos, resoluciones o leyes de autoridad lleven implícitos una

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 amenaza, restricción o violación a los derechos que la Constitución y las leyes

garantizan o reconozcan, ya sea que dicha situación provenga de personas y

entidades de derecho público o entidades de derecho privado; que toda

persona tiene derecho a pedir amparo, entre otros casos, para que se le

mantenga o restituya en el goce de los derechos y garantías que le otorgan la

Constitución, o cualquiera otra ley; para que se declare en casos concretos que

una ley, un reglamento, una resolución o un acto de autoridad no obligan al

recurrente por contravenir o restringir cualquiera de los derechos garantizados

por la Constitución o reconocidos por cualquiera otra ley; cuando la autoridad

de cualquier jurisdicción dicte reglamento, acuerdo o resolución de cualquier

naturaleza, con abuso de poder o excediéndose de sus facultades legales o

cuando carezca de ellas, o bien las ejerza en forma tal que el agravio que se

causare o pueda causarse no sea reparable por otro medio legal de defensa;

que procede en los asuntos de los órdenes judiciales o administrativo, que

tuviesen establecidos en la ley procedimientos y recursos, por cuyo medio

puedan ventilarse adecuadamente de conformidad con el principio jurídico del

debido proceso, si después de haber hecho uso el interesado de los recursos

establecidos por la ley, subsisten las amenazas, restricción o violación de los

derechos que la constitución y las leyes garantizan; que no se excluyen

cualquiera otros casos que no están comprendidos en la enumeración que

dicha ley contiene.

PETICIONES:

DE TRÁMITE:

I. Que con el presente memorial y documentos adjuntos se inicie la formación del

expediente respectivo.

II. Que se tome nota de la dirección y procuración bajo la cual actúo, así como del

lugar señalado para recibir notificaciones.

III. Que se admita para su trámite la presente acción de amparo en contra de la

resolución identificada como JUICIO ORAL DE FIJACIÓN DE PENSIÓN

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 ALIMENTICIA, EXPEDIENTE cero dos mil cincuenta y seis guion dos mil

veintiuno guion cero mil novecientos cuarenta y siete (02056-2021-1947)

OFICIAL SEGUNDA, emitida por la HONORABLE SALA SEGUNDA DE LA

CORTE DE APELACIONES DE FAMILIA DEL DEPARTAMENTO DE

GUATEMALA DE FECHA …

IV. Que se tenga por ofrecidos y presentados los medios de prueba

individualizados en el apartado respectivo.

V. Que se manden a pedir los antecedentes y el informe respectivo a la autoridad

recurrida de conformidad con la ley.

VI. Que se OTORGUE AMPARO PROVISIONAL, en el sentido que se deje en

suspenso provisionalmente la resolución identificada como JUICIO ORAL DE

FIJACIÓN DE PENSIÓN ALIMENTICIA, EXPEDIENTE 02056-2021-1947

OFICIAL SEGUNDA, emitida por la HONORABLE SALA SEGUNDA DE LA

CORTE DE APELACIONES DE FAMILIA DEL DEPARTAMENTO DE

GUATEMALA de fecha trece de octubre de dos mil veintidós; en virtud de

concurrir los supuestos establecidos en las literales b y c del artículo 28 de la

Ley de Amparo, Exhibición Personal y de Constitucionalidad.

VII. Que, con base a los antecedentes remitidos y el informe en su caso, se de

audiencia a los interesados, a la Procuraduría General de la Nación, Ministerio

Público y Procuraduría de los Derechos Humanos por el término común de

cuarenta y ocho horas.

VIII. Que vencido el término indicado en el numeral anterior, se abra a prueba el

presente amparo, por el plazo de ley

IX. Que concluido el término probatorio se confiera segunda audiencia, de

conformidad con el artículo 37 de la Ley de Amparo, Exhibición Personal y de

Constitucionalidad.

DE FONDO:

Que, concluido el trámite correspondiente se dicte la sentencia

correspondiente, DECLARANDO:

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 i. Con lugar el amparo solicitado por mi persona, promovido en contra de la

resolución identificada como JUICIO ORAL DE FIJACIÓN DE PENSIÓN

ALIMENTICIA, EXPEDIENTE cero dos mil cincuenta y seis guion dos mil

veintiuno guion cero mil novecientos cuarenta y siete (02056-2021-1947)

OFICIAL SEGUNDA, emitida por la HONORABLE SALA SEGUNDA DE LA

CORTE DE APELACIONES DE FAMILIA DEL DEPARTAMENTO DE

GUATEMALA DE FECHA TAL…

ii. Que, en consecuencia, de lo anterior se deje sin efecto la resolución

identificada como JUICIO ORAL DE FIJACIÓN DE PENSIÓN ALIMENTICIA,

EXPEDIENTE cero dos mil cincuenta y seis guion dos mil veintiuno guion cero

mil novecientos cuarenta y siete (02056-2021-1947) OFICIAL SEGUNDA,

emitida por la HONORABLE SALA SEGUNDA DE LA CORTE DE

APELACIONES DE FAMILIA DEL DEPARTAMENTO DE GUATEMALA, DE

FECHA TAL.

iii. Que se ordene a la autoridad recurrida, es decir, la HONORABLE SALA

SEGUNDA DE LA CORTE DE APELACIONES DE FAMILIA DE GUATEMALA,

a que dentro del plazo perentorio que ese digno Tribunal de Amparo señale,

emita resolución por medio de la cual pueda fijar una pensión alimenticia

acorde a la realidad y al principio de igualdad y proporcionalidad de acuerdo

con los medios de prueba debidamente comprobados o en su defecto me

exima del pago de la misma.

iv. Que se hagan las demás declaraciones que en derecho corresponde.

CITA DE LEYES. Fundo mis pretensiones en las leyes ya transcritas y los

artículos: 1, 2, 5, 12, 28, 29, 154, 155, 156, 203, 204, 221, 251, 265, de la

Constitución Política de la República de Guatemala; 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10

incisos a), b), d), 20, 21, 24, 27, 33, 35, 36, 37, 42, 43, 44, 45, 49, 50, 53 del

Decreto número 1-86 de la Asamblea Nacional Constituyente, Ley de Amparo,

Exhibición Personal y de Constitucionalidad; 1, 2, 3, 4, 7, 8, y 9 de la Ley del

Organismo Judicial; 25 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos,

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aprobada por el Congreso de la República mediante el Decreto 6-78; y 279 del

Código Civil.

Acompaño copias de ley del presente memorial y documentos adjuntos.

Guatemala, veintiocho de mayo de dos mil veintitrés.

EN SU AUXILIO, DIRECCIÓN Y PROCURACIÓN:

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