Contexto y Características Del Hipertexto Marcado
Contexto y Características Del Hipertexto Marcado
Contexto y Características Del Hipertexto Marcado
La teoría crítica
El hipertexto
Intertextualidad e hipertexto
Citas bibliográficas
La teoría crítica
Dentro del pensamiento postmoderno, que pone en crisis a los grandes relatos de la
modernidad (entendidos como los fundamentos del paradigma de la simplicidad
descrito en el punto anterior), y gracias al surgimiento del psicoanálisis de Freud,
se plantea que la conciencia ya no es algo indubitable, sino que debajo de ella
operan fuerzas inconcientes. Esas fuerzas, como no puede ser de otra manera,
están presentes en los textos, por lo cual es lícito pensar que no existen
interpretaciones unívocas de los mismos, así como no existe un punto de vista
único de la realidad. Los pensadores postestructuralistas que se enmarcan en esta
corriente (Roland Barthes, Jacques Derrida y Michel Foucault) consideran a
cualquier manifestación cultural como texto, como discurso susceptible de ser
analizado. Desde este punto de vista, el lenguaje es considerado siempre como
metafórico: un sistema de signos que no remite a una realidad, a la esencia
constante de una cosa, porque esa esencia no existe. Existe un mundo
independientemente del lenguaje, y éste es solo un intento de descripción, falible y
limitado. El individuo, sujeto y objeto de ese lenguaje, incorpora modos de
entender esa realidad compleja e inasequible. Desde esta perspectiva, la teoría
crítica literaria postula que los textos (no sólo hablan de libros, sino de imágenes y
sonidos) brindan una interpretación de la realidad, una entre muchas. Sin embargo,
tradicionalmente se ha naturalizado un prejuicio: el que los libros dicen la verdad,
que lo que describen los textos es verdadero. Este prejuicio se extiende hasta
nuestros días. Basta con comprobar el rigor de verdad que se le atribuye al libro en
algunos establecimientos educativos (incluso existe una jerarquía : se le da más
importancia a un texto literario que a un texto televisivo, por ejemplo).
El hipertexto
"es en 1965 cuando Ted Nelson (Universidad de Brown) acuña por primera vez, en
su trabajo "A file Structure for the Complex, The Changing and the Indeterminate",
los términos hipertexto e hipermedia, conceptos que posteriormente desarrollará en
su obra Literary Machines (1981)" (2)
"Un hipertexto, según el modelo que quedó establecido en los años 80 y que fue
consagrado posteriormente por el lenguaje HTML (Canals, 1990; Nielsen, 1995;
Woodhead, 1991; Caridad y Moscoso, 1991; Díaz, Catenazzi, Aedo, 1996; Tittel et
al., 1996) consiste en tres elementos:
Codina entiende que al modelo clásico de hipertexto hay que agregarle una suerte
de "meta-hipertexto" que indique cómo utilizarlo correctamente:
"La estructura clásica anterior puede enriquecerse, en nuestra opinión, con otro
elemento adicional, aunque no siempre esté presente: un conjunto de mapas de
navegación. Definimos un mapa de navegación como un meta-nodo, en tanto es un
nodo con información sobre otros nodos, que incluye representaciones de la
totalidad o parte de la información contenida en el hipertexto, con el fin de facilitar
la navegación y el acceso a la información a los lectores del hipertexto" (4)
Mucho se ha escrito acerca del hipertexto, a tal punto que se ha convertido en una
palabra tan amplia que ya no se sabe qué designa. Para salir de la confusión,
Juan Antonio Pastor Sánchez y Tomás Saorín Pérez (5) proponen la utilización de
un Hipertexto Documental, con una tabulación de los distintos usos del
hipervínculo, de acuerdo a dónde lleva al lector
Por otra parte, Umberto Eco (8) asegura que la computadora, con la posibilidad de
borrar, editar y finalmente imprimir, cumple con el sueño de escribir a la velocidad
del pensamiento, sin los condicionamientos psíquicos que provocaba la vieja
máquina de escribir. Es decir, recién a fines del siglo XX contamos con una
tecnología que nos permite desarrollar lo que es inherente al hombre desde el
principio de la creación: su capacidad de simbolizar y asociar ideas libremente.
Pareciera que el digital es el soporte que cumple con todos los requerimientos de la
libre asociación de ideas. Landow afirma que la digital es una revolución similar a la
de la creación de la imprenta. Lo mismo afirmaba Marshall Mc Luhan (9), cuando
hablaba de la era electrónica en su obra "La Galaxia Gutemberg".
"la teoría crítica promete teorizar el hipertexto mientras que este promete encarnar
y, así, demostrar varios aspectos de la teoría, sobre todo los relativos a textualidad,
narrativa y a los papeles o funciones de lector y escritor" (10)
Respecto de la obra en sí, los teóricos estructuralistas no conciben una obra cerrada
y conclusa, sino abierta y susceptible de ser completada por el lector en el acto de
leer, y éste no es otro que una acción de interpretación, una entre las muchas
posibles. Entonces, el poder que, de acuerdo a la literatura tradicional,
monopolizaba el autor, ahora es discutido y compartido en forma corresponsable
con el lector. Este último también participa en la obra en la medida en que
interpreta, construye su mundo de significado, y aporta su cuota de valor. Entra en
crisis, entonces, la personalidad del autor, y se transforma él mismo en hipertexto
dentro de una red infinita de significados:
"...la personalidad asume la forma de una red descentrada (sin centro) de códigos
que, en otro nivel, también sirve de nodo en otra red sin centro. Jean Francois
Lyotard, por ejemplo, rechaza los paradigmas decimonónicos y románticos de
personalidad insular por un modelo de personalidad como nodo en una red de
información".(11)
Entonces, el texto deja de ser considerado como un objeto finito, acabado, para
pasar a convertirse en accesos a otros textos, y estos, a su vez se transforman en
nuevos accesos. El mismo Roland Barthes (12) habla del concepto de red:
"En este texto ideal, abundan las redes (réseaux) que actúan entre sí sin que
ninguna pueda imponerse a las demás; este texto es una galaxia de significantes y
no una estructura de significados; no tiene principio, pero sí diversas vías de
acceso, sin que ninguna de ellas pueda calificarse de principal" (13)
El gurú de la era de la información, Manuel Castells, amplía la noción de red a
todos los estamentos sociales:
Entonces, cabe pensar que la estructura de red no sólo se aplica al hipertexto, sino
que éste concreta una realidad existente ya en la sociedad, más concretamente en
el denominado paradigma de la complejidad. Cualquier texto, cualquier autor,
cualquier lector, en fin cualquier actor del escenario actual, es un nodo en la red.
Por lo tanto, la generación de información se amplía y se potencia en la medida en
que cualquier actor -en la medida en que es un nodo en la red- puede ser productor
de información. Al decir de Lyotard:
Intertextualidad e hipertexto
"Borges formula, desde la narrativa, una de las ideas teóricas vertebrales en los
estudios posteriores: la plurisignificación del discurso literario. Lo que hace en su
cuento "Pierre Menard, autor del Quijote" no es más que poner en práctica lo que
Barthes, más de veinte años después, postulará en su Crítica y Verdad: "Hacer una
segunda escritura con la primera escritura de la obra es en efecto abrir el camino a
márgenes imprevisibles, suscitar el juego infinito de los espejos"." (17)
Con la publicación de "El jardín de los senderos que se bifurcan", Borges (18) abre
el camino a la idea de la intertextualidad y la plurisignificación de los textos. El
postestructuralismo francés que nace en los ´60 (representado por los autores
citados), recoge el guante del desafío planteado por Borges y propone una teoría
literaria alternativa a la tradicional. Uno de los cuentos del mencionado libro de
Borges se titula "La Biblioteca de Babel", que de acuerdo a Vouillamoz es el
antecedente de Internet:
"Con la aparición de Internet, se superan las fronteras de las redes locales hacia
una divulgación internacional. Muchos son los escritores que han definido la gran
red mundial como la Biblioteca Universal: esa construcción laberíntica que Borges
proyecta en su cuento "La Biblioteca de Babel" es hoy una realidad gracias a la
World Wide Web. En ella es posible navegar de un texto a otro en un recorrido
infinito". (19)