Responsabilidad Extracontractual
Responsabilidad Extracontractual
Responsabilidad Extracontractual
EXAMEN DE GRADO
DERECHO CIVIL
“Responsabilidad Extracontractual”
I.- CONCEPTO: “Es la obligación de indemnizar los daños o perjuicios causados a consecuencia de
la infracción de una obligación de origen contractual o un hecho ilícito (delito o cuasidelito civil).
La expresión "responsabilidad" merece de por sí un análisis, porque en el sentido amplio se emplea
como algo que implica en sí misma la culpabilidad de una persona; así, lo normal es decir que un
individuo es responsable de un hecho cuando ese hecho le es imputable, es decir, cuando ha realizado
ese hecho con suficiente voluntad y discernimiento.
Es este precisamente el sentido que se le da a la expresión "responsabilidad" en el derecho penal
(también se le da esta acepción en la moral).
En el derecho civil la situación es distinta, porque esta expresión no es definida por su fundamento,
sino por el resultado de ella y al hablar de resultado nos estamos refiriendo a las consecuencias
jurídicas que un hecho produce para su autor. En ese sentido se dice que una persona es responsable
cuando está obligada a indemnizar el daño que ha causado.
Es decir, en el derecho civil hay responsabilidad cada vez que una persona tiene que reparar el
perjuicio que otra persona ha sufrido. Por eso es que en derecho civil se define la responsabilidad
como "la obligación que pesa sobre una persona de indemnizar el daño o perjuicio sufrido por otra".
Art. 1556°CC: “La indemnización de perjuicios comprende el daño emergente y lucro cesante, ya
provengan de no haberse cumplido la obligación, o de haberse cumplido imperfectamente, o de
haberse retardado el cumplimiento”. Exceptúense los casos en que la ley la limita expresamente al
daño emergente. (R. contractual)
Art. 2314°CC: “El que ha cometido un delito o cuasidelito que ha inferido daño a otro es obligado a la
indemnización, sin perjuicio de la pena que le impongan las leyes”. (R. extracontractual)
A) DELITO CIVIL "Es el hecho ilícito cometido con la intención de dañar y que ha causado injuria
o daño en otra persona" Dolo.
B) CUASIDELITO “Es el hecho culpable cometido sin la intención de dañar y que ha inferido
injuria o daño a otra persona” (artículos 1.437 y 2.284). Culpa.
Lo que caracteriza al delito y cuasidelito civil es el hecho de inferir daño a otra persona. Por ello, un
hecho ilícito que no causa daño a otra persona, no constituye delito ni cuasidelito civil, porque la
consecuencia del delito y cuasidelito es el deber de reparar el daño, y ello sólo es procedente cuando
el daño se ha causado: "Sin daño no hay responsabilidad civil" (artículos 1.437° y 2.314°).
El delito y cuasidelito civil se asemejan entre sí en que ambos son hechos ilícitos, ambos causan daño
y ambos producen obligaciones.
RESPONSABILIDAD RESPONSABILIDAD
CONTRACTUAL EXTRACONTRACTUAL
DEFINICIÓN: “Es aquella que proviene de la Es aquella que proviene de la comisión
infracción de un contrato”. de un delito o cuasidelito civil.
REPARACION Hoy en día, ambas responsabilidades conciernen a una reparación integral del
DEL DAÑO: daño, sea moral o material.
Uno de los problemas graves que presenta la responsabilidad delictual o cuasidelictual civil es la
prueba, especialmente de la culpa, la cual recae sobre la víctima. Para palear los problemas que
ella presenta, el legislador ha establecido algunos casos de presunciones de responsabilidad o
presunciones de culpa.
De acuerdo con el sistema de responsabilidad subjetiva (que es el aceptado por el Código Civil), la
víctima de un hecho ilícito tiene sobre sí el peso de la prueba de la culpa o dolo del autor, lo cual
evidentemente presenta dificultades para la víctima. Para atenuar estos inconvenientes y hacer más
expedito el ejercicio de la acción que a la víctima le corresponde, el legislador en ciertos casos
supone la existencia de culpa, es decir, presume la responsabilidad del autor del daño.
Cuando estamos ante estas presunciones,la víctima no debe probar ni el dolo ni la culpa, solamente
va a tener que acreditar la existencia del hecho que produjo el daño, es decir, va a tener que probar
los hechos de los cuales la ley deriva la presunción.
Lo que sucede es que esta disposición en su inciso 1° establece la regla general en materia de
responsabilidad delictual o cuasidelictual civil al decir que: "por regla general todo daño que pueda
imputarse a malicia o negligencia de otra persona, debe ser reparado por ésta". Cuando el Código
Civil utiliza la expresión "malicia", se está refiriendo al dolo y, con la expresión "negligencia",se está
refiriendo a la culpa. Pero, esta norma del artículo 2329°CC añade en su inciso 2: "son
especialmente obligados a esta reparación..." y hace una enumeración de las personas obligadas
a reparar. En cuanto a esta enumeración, la norma se aparta de la regla general del inciso 1; ello,
sostienen los autores, queda evidenciado por la redacción del inciso 2., quienes toman como base
la expresión "especialmente"y dicen que la norma se separa de la regla general, porque se está
refiriendo necesariamente a aquello que se diferencia de lo general y la singularidad que tiene esta
situación de apartarse la norma de la regla general es que, en estos casos enumerados, hay una
presunción de culpa del autor.
La importancia de establecer una presunción de culpa del autor es que se modifican por este hecho
las reglas generales en materia de prueba de la responsabilidad, porque en estos casos que
enumera el artículo 2329°CC, como se presume la culpa del autor, la víctima no va a tener que
entrar a probar la culpa de éste, sino que es el autor del daño quien va a tener que probar que
actuó con la debida diligencia o cuidado.
Uno de los motivos principales que origina la responsabilidad delictual o cuasidelictual civil deriva
de los accidentes causados en la actualidad por vehículos motorizados y sucede que ya en el CP
se establecieron normas para los accidentes causados por vehículos de tracción mecánica o animal
y en que resultaren personas lesionadas o se produjere la muerte.
La norma del CP nos dice que en estos accidentes causados por vehículos de tracción mecánica o
animal en que resultare herido un peatón, se presume la culpa del conductor del vehículo dentro del
radio urbano cuando el accidente sehubiere producido en el cruce de las dos calzadas o en la
extensión de los 10 metros anteriores a la esquina; ocurrido el accidente en otro lugar que no sea
éste, se presume la culpa del peatón (artículo 492° CP). Por su parte, la actual Ley del Tránsito
(L.18290), consagra una serie de presunciones de culpa en su artículo 172°CC.
Pero, hay casos de excepción, porque hay circunstancias en que una persona va a entrar a
El fundamento de esta responsabilidad por hecho ajeno radica en que la ley estima que cuando una
persona tiene a otra bajo su cuidado o dependencia, aquélla tiene que vigilar a esta última para
evitar que cause daño.
Pues bien el legislador razona sobre la base que es de suponer que si la persona que está al
cuidado o bajo la dependencia de otra causa un daño es porque la persona que debía vigilarla no
empleó el cuidado suficiente para evitar que el hecho se produjera. De modo que lo que la ley hace
es presumir en estos casos que el daño se produjo porque no se empleó la debida diligencia para
cuidar o controlar a la persona que se tiene a cargo, ya que si la hubiere empleado el daño no se
habría producido.
En los casos de responsabilidad por el hecho ajeno hay una presunción de responsabilidad, la cual
consiste en suponer que el daño se produjo por culpa de la persona encargada de vigilar al autor
del daño y es esa culpa la que la ley presume. Basta ver los casos de responsabilidad por hecho
ajeno para ver cuál es el principio que inspira a todas estas presunciones.
En los casos que la ley señala, se presume la existencia de este vínculo de subordinación;
así por ejemplo: el padre, para eximirse de la responsabilidad por el hecho del hijo, tendrá
que probar que no lo tenía a su cuidado y, en los demás casos, el que invoca la
responsabilidad va a tener que probar el respectivo vínculo entre las personas.
- Si la persona que comete el delito o cuasidelito civil es incapaz, tiene aplicación el artículo
2319 y va a responder por este hecho ilícito la persona que lo tiene a su cuidado, sólo si
puede imputársele negligencia.
- La diferencia entre estas dos situaciones está en que si el autor del daño es capaz, se
presume la culpa de la persona que lo tenía a su cuidado. En cambio, si es incapaz, la
víctima va a tener la culpa del guardián, porque la ley exige como requisito para su
responsabilidad el que pueda imputársele negligencia.
Veamos ahora los casos de responsabilidad por hecho ajeno, algunos de los cuales están
expresamente señalados en el artículo 2320°CC. Hay otros que pueden encuadrarse en el inciso
1 del artículo 2320°CC y, finalmente, también hay algunos que se encuentran establecidos en otras
leyes. Estos casos son los siguientes:
b) Tienen que ser hijos menores de 21 años. Por los hijos mayores de edad no
responden los padres, sino que personalmente el autor del daño. Por esta razón,
si el hijo de familia comete un delito o cuasidelito civil y tiene peculio profesional o
industrial, no va a responder el padre, porque cuando es así, ese hijo se mira como
mayor de edad (artículo 240°CC). Esta institución de la patria potestad (conjunto
de derechos que la ley confiere al padre sobre los bienes del hijo) termina por la
emancipación y no con la obligación de cuidado del hijo, por consiguiente, no elimina
la responsabilidad por los hechos ilícitos de él.
c) Que el hijo habite en la misma casa del padre o madre: esta exigencia de la ley
se basa en que solamente puede exigirse esta obligación de vigilancia o cuidado del
padre o la madre en el caso que el hijo conviva con ellos, ya que si no viven juntos
es difícil que el padre o la madre puedan dar cumplimiento a esa obligación. De tal
suerte que si el hijo no habita en la casa de su padre o madre, no va a existir la
presunción de responsabilidad, es decir, el padre o la madre no van a responder de
los delitos o cuasidelitos civiles cometidos por el hijo menor, salvo la situación
excepcional que se contempla en el artículo 2321°CC, en el cual hay
responsabilidad de los padres por los actos del hijo, no obstante que no habiten en
la misma casa.
d) Que el hijo habite en la misma casa del padre o madre: esta exigencia de la ley
se basa en que solamente puede exigirse esta obligación de vigilancia o cuidado del
padre o la madre en el caso que el hijo conviva con ellos, ya que si no viven juntos
es difícil que el padre o la madre puedan dar cumplimiento a esa obligación. De tal
suerte que si el hijo no habita en la casa de su padre o madre, no va a existir la
presunción de responsabilidad, es decir, el padre o la madre no van a responder de
los delitos o cuasidelitos civiles cometidos por el hijo menor, salvo la situación
excepcional que se contempla en el artículo 2321°CC, en el cual hay
responsabilidad de los padres por los actos del hijo, no obstante que no habiten en
la misma casa.
5) OTROS CASOS FUERA DEL ARTÍCULO 2.320°CC: Existe uno muy particular en el artículo
2322°CC, aquí el legislador emplea la expresión "amo", entendiéndose por tal la persona
que tiene a sus servicios a empleados domésticos; y por "criados" o "sirvientes", las personas
empleadas en esos menesteres. El amo responde sólo de los actos ejecutados por el
sirviente o criado que se realicen mientras este último desempeñe susfuncione, labores
o cumple las órdenes que se le han impartido.
No hay si responsabilidad por los actos ejecutados por éstos y que sean ajenos a
las funciones que les corresponden, ni tampoco por los actos que importen un
abuso de las funciones que le corresponden al criado o dependiente.
La razón del primer efecto está en que la responsabilidad por hecho ajeno tiene por fundamento la
idea que de parte del responsable ha habido un descuido, una negligencia, es decir, una culpa por
falta de vigilancia de la persona que está sometida a su autoridad y, es por ello que se presume la
responsabilidad de esta persona, presunción esta que es simplemente legal, yaque la regla general
en la materia nos la da el inciso final del artículo 2.320°CC.
El segundo efecto, no lo dice expresamente la ley, sino que se deriva de la aplicación de las reglas
generales, porque el autor ha cometido un delito o cuasidelito civil y porque es plenamente capaz
en lo que dice relación con los hechos ilícitos y, por consiguiente, queda comprendido en las
disposiciones generales de los artículos 2.314° y 2.329° b inciso final.
Por lo demás, no hay ninguna norma legal expresa que excluya la posibilidad de dirigirse contra
el hechor, es decir, si la víctima del hecho ilícito no ha sido reparada por la persona civilmente
responsable, va a poder accionar en contra del autor del hecho ilícito. No va a ser esta la situación
frecuente y normal, porque la presunción de responsabilidad se encuentra establecida, entre otras
razones, por la posible insolvencia del hechor o autor.
Lo que no puede hacer la víctima del hecho ilícito es demandar al hechor y al tercero
civilmente responsable en forma conjunta, porque la regla general en esta materia es que no
existe solidaridad, salvo en el caso del propietario de un vehículo, que responde solidariamente con
el conductor, regulado en la ley 18.290 de Tránsito.
No obstante que no puede demandar conjuntamente al autor y al tercero responsable, la víctima
podría hacerlo en forma subsidiaria, de tal modo que uno responde si el otro no puede hacerlo.
Tampoco le está permitido por la ley el que pueda acumular la responsabilidad por hecho ajeno
proveniente de distintas causas, como sería el caso de un hijo menor que a la vez es estudiante: no
podría acumular la responsabilidad del padre o de la madre y la del director de la escuela o colegio.
Por último, la ley le reconoce a la persona civilmente responsable el derecho derepetir lo que se ha
pagado en contra del hechor (artículo 2325°CC). Para que exista este derecho a repetir por parte
del tercero civilmente responsable, deben concurrir determinados requisitos:
a) El hecho ilícito tiene que haber sido cometido por persona capaz.
c) El hecho ilícito tiene que haberse cometido sin orden de la persona quepretende repetir.
d) Que el hechor tenga bienes sobre los cuales pueda dirigirse el civilmenteresponsable.
- Hay ciertos casos en que la prueba de culpa por parte del dueño o del que tenía el animal
bajo su responsabilidad ni siquiera es admisible, como sucede en la situación
contemplada en el artículo 2.327° respecto del animal fiero del que no se reporta utilidad
para la guarda o servicio de un predio.
- Para obtener la reparación de los perjuicios, la víctima tiene una acción indemnizatoria, la
cual presenta las siguientes características:
- Es siempre una acción mueble, porque tiene por objeto, normalmente, el cobro de una suma
de dinero y, en ciertos casos, la ejecución de un hecho.
- DOLO:
El dolo en materia extracontractual está definido en el Art. 44 inc. final del CC, dice que “es la
intención positivo de inferir injuria a la persona o propiedad de otro”.
- CULPA:
CONCEPTO: “Es la falta de diligencia o cuidado en la ejecución de un hecho”.
A diferencia del dolo, la culpa se aprecia en abstracto, lo que significa que el juez compara la
actuación del que cometió el hecho ilícito y la actuación de una persona prudente en la misma
situación, de manera que si el hombre prudente en la misma situación hubiera actuado igual que el
que cometió el hecho ilícito entonces el juez determinará que no hubo culpa.
En cambio, si el juez aprecia que una persona prudente puesta en la misma situación que quien
cometió el hecho ilícito habría actuado de manera distinta, ej. Hubiere advertido el peligro y tomado
precauciones que no tomó quien realiza el hecho ilícito, entonces ya está probada la culpa.
En materia extracontractual la culpa no admite graduación, pero la culpa puede ser igual positiva o
negativa, ósea culpa de acción (ejecutar un hecho ej.: disparar un arma) y la culpa por omisión, es
decir la no ejecución de un hecho (ej. no auxiliar a una persona en un lugar despoblado que sufrió un
accidente.
Dentro de este requisito, que el hecho sea doloso o culpable, además debe ser ilícito, antijurídico, con
violación de derecho. Precisamente el C.C no dice nada respecto a la antijuridicidad del hecho y por
lo tanto los autores recurren a la materia penal donde están los hechos justificativos de un individuo
que ha causado daño. En materia civil estudiaremos solo tres:
a) Legítima defensa: Consiste en contener una agresión actual e inminente que a su vez es
ilícita.
La legítima defensa requiere una agresión ilegitima y el que causa el daño no lo haya provocado. El
otro elemento es la proporcionalidad, vale decir, una proporción entre el medio empleado en el ataque
y el medio empleado en la legítima defensa.
c) Por orden o autoridad de la ley: Se causa un daño por un imperativo legal, se actúa
conforme a la autoridad de la ley. No hay violación de ley.
Art. 2319°CC: “No son capaces de delito o cuasidelito los menores de siete años ni los dementes;
pero serán responsables de los daños causados por ellos las personas a cuyo cargo estén, si pudiere
imputárseles negligencia.
Queda a la prudencia del juez determinar si el menor de dieciséis años ha cometido el delito o
cuasidelito sin discernimiento; y en este caso se seguirá la regla del inciso anterior”.
3) DAÑO O PERJUICIO.
A) DAÑO MATERIAL: Consiste en una afectación al patrimonio o a los bienes, es una lesión
pecuniaria, donde existe una disminución en el patrimonio. Este daño material puede ser:
daño emergente y lucro cesante. Este daño puede recaer en los bienes de la víctima o en
la persona de la víctima.
Esto es la relación de causa y efecto. Este elemento o requisito de responsabilidad civil se da tanto
en la responsabilidad subjetiva como en la objetiva.
- En la responsabilidad subjetiva hay un nexo causal entre el hecho ilícito doloso o culpable
que sería la causa, y el daño o perjuicio que sería el efecto.
- En la responsabilidad objetiva, en cambio, hay un nexo causal entre un hecho que genera
un riesgo y el daño o perjuicio a la víctima producto de la materialización del riesgo.
La relación causal significa que el daño o perjuicio es la consecuencia inmediata del hecho ilícito. El
daño o perjuicio debe haberse producido por el hecho ilícito positivo (acción) o negativo (omisión).
El legislador chileno no habla expresamente de la existencia de un vínculo entre el hecho ilícito y el
daño, pero la doctrina y jurisprudencia están de acuerdo que todo el sistema chileno de
responsabilidad civil extracontractual está basado en que es necesaria la idea de causa y efecto.
CONCEPTO: “Es aquella que deriva de la obligación de indemnizar los daños causados a
consecuencia de la infracción de una obligación de origen contractual o de un delito o cuasidelito civil”.
Entonces la victima puede obtener la reparación por dos vías: de común acuerdo, donde la víctima y
el que cometió el hecho ilícito se ponen de acuerdo en cuanto a los daños y montos. La otra vía es
recurrir a los tribunales de justicia para obtener una sentencia favorable.
La sentencia que se pronuncia en juicio de indemnización por responsabilidad extracontractual es de
carácter declarativa. El tribunal declara la existencia de la obligación de indemnizar los perjuicios por
esa obligación, siempre que se prueben los requisitos de la responsabilidad extracontractual o se
ampare en una presunción.
1) ACCIÓN PERSONAL:
Emana de un derecho personal o de crédito (Art.578°CC), por tanto la acción indemnizatoria se ejerce
en contra de quien cometió el hecho ilícito o del tercero civilmente responsable, o contra ambos.
2) ACCION MUEBLE:
Los hechos que se deben se reputan siempre muebles. Art. 581°CC: “Los hechos que se deben se
reputan muebles. La acción para que un artífice ejecute la obra convenida, o resarza los perjuicios
causados por la inejecución del convenio, entra por consiguiente en la clase de los bienes muebles”.
¿QUÉ OCURRE CON LAS PRESCRIPCIONES QUE SON ESPECIALES Y DE CORTO TIEMPO?
No se les aplica el beneficio de suspensión. Vale decir, corre a favor y en contra de toda persona. Pero
la acción si puede interrumpirse sea de forma natural o civil.
Se interrumpe naturalmente por el reconocimiento de la deuda, donde la interrupción puede ser
expresa o tácita. Se interrumpe civilmente a través de la demanda.
LEGITIMARIOS ACTIVOS:
La acción indemnizatoria le corresponde a la víctima, sus herederos o cesionarios.
Los herederos pueden demandar en calidad de victimas cuando justamente se ha producido la muerte
del causante. En cuanto a la víctima es importante determinar el daño; cuando el daño es en la
persona, la víctima es aquella que sufrió ese daño pero no excluye que el daño también pueda afectar
a otra persona.
El daño puede ser en los bienes de la persona de la víctima, debiendo acreditar un derecho
preexistente.
Art 2333°CC: Por regla general, se concede acción popular en todos los casos de daño contingente
que por imprudencia o negligencia de alguien amenace a personas indeterminadas; pero si el daño
amenazare solamente a personas determinadas, sólo alguna de éstas podrá intentar la acción.
LEGITIMACION PASIVA:
- Autor del daño. Aquel que cometió el hecho ilícito en calidad de autor o cómplice pero no al
encubridor. Solo se puede demandar civilmente al autor y al cómplice. No nos olvidemos que
la responsabilidad es de carácter solidaria, demando a todos.
- El responsable del hecho ajeno, el tercero civilmente responsable.
- El que recibe provecho del dolo ajeno.
- Los herederos. La responsabilidad extracontractual es transmisible.
La indemnización es el pago de una cantidad de dinero, y esa cantidad se señala en la demanda. El
juez puede confirmar la suma o reducirla (nunca aumentarla). El juez puede reducir el monto en el
caso del art. 2330°CC cuando la víctima se expuso imprudentemente al daño.