Tratamientos de Lodos Activados
Tratamientos de Lodos Activados
Tratamientos de Lodos Activados
Una operación adecuada del proceso de lodos activos requiere de la supervisión y control de
ciertos factores, tanto biológicos como fisicoquímicos, que garanticen:
- Una buena sedimentación de los flóculos formados, produciendo un lodo concentrado que
permite ser recirculado y, en consecuencia, un sobrenadante clarificado.
Los sistemas de lodos activados se diseñan de tal manera que la concentración de sólidos
suspendidos en el licor de mezcla (SSLM) no rebase ciertos límites, tanto inferiores como
superiores, para que en la práctica funcionen adecuadamente.
Los microorganismos presentes en el licor de mezcla necesitan oxígeno para oxidar los
contaminantes presentes en el agua residual. Es por ello indispensable que el operador de la
planta de tratamiento supervise siempre la concentración de oxígeno disuelto en el reactor
aerobio. Para asegurar que el oxígeno es suficiente para llevar a cabo el proceso de lodos
activos, la concentración de oxígeno disuelto siempre ha de ser mayor a cero. Si la
concentración de oxígeno disuelto en el reactor aerobio es baja, la velocidad de consumo de
contaminantes también será baja. En general, la concentración mínima de oxígeno disuelto en
el tanque de aireación se debe mantener en 1.0–2.0 mg O2/L, aunque en algunos casos
(sistemas con nitrificación) puede estar entre 2–4 mg O2/L. Los valores superiores a 4 mg O2/L
apenas mejoran la operación pero aumentan considerablemente los costos de operación.
La observación rutinaria del licor de mezcla con un microscopio proporciona información muy
relevante sobre las condiciones de los microorganismos presentes en los lodos activos. Los
flóculos presentes en el licor de mezcla están compuestos por millones de microorganismos
que incluyen bacterias, hongos, levaduras, protozoarios y nematodos. Desde el punto de vista
microbiológico, la abundancia de unos microorganismos frente a otros dependerá de las
características del agua, pero también de las condiciones ambientales y la forma de operar de
la planta. Así, un cambio en la microbiología del licor de mezcla podría indicar un problema
operacional. Por ejemplo, una disminución de la población de protozoos podría indicar
limitaciones de oxígeno o un TRS demasiado bajo y un crecimiento de bacterias filamentosas
podría anticipar la aparición de problemas de sedimentabilidad.
Estrategias de operación del sistema de lodos activos
Para mantener una operación exitosa que garantice la calidad del efluente en un sistema de
lodos activos se debe prestar atención a los parámetros del proceso mencionados en la sección
2.2.1 y, de acuerdo a sus valores, decidir un modo de control del proceso. Existen varias
opciones principales de control del proceso, que varían en función del tipo de planta
depuradora y del tipo de agua residual a tratar. A continuación se detallan los principales
enfoques para el control de un proceso de lodos activos:
Esta estrategia de operación que consiste en mantener una concentración de lodos activos en
el reactor aerobio que permita alcanzar el grado de tratamiento requerido. Por tanto, este
enfoque se centra en el caudal de lodo que se recircula desde el sedimentador secundario al
reactor aerobio. Estos lodos activos recirculados o LAR hacen posible que los microorganismos
permanezcan más tiempo en el reactor que el agua residual que fluye a través de éste. Es
decir, el TRS y el tiempo de residencia hidráulico del reactor aerobio se desacoplan.
Este control es quizás el más utilizado en las plantas de tratamiento de lodos activos. Se
fundamenta en mantener el TRS del sistema mediante la eliminación del exceso de lodo
producido en el mismo. En la Tabla 2 se muestran valores típicos de TRS en sistemas de lodos
activos. La cantidad de lodos activados purgados afectará a la calidad del efluente, a la
velocidad de crecimiento de los microorganismos, al consumo de oxígeno, a la
sedimentabilidad del licor de mezcla, a la cantidad de nutrientes requerida y a la posibilidad de
tener nitrificación en el sistema. El objetivo de esta estrategia es que la cantidad de lodos
activados en el proceso permanezca lo más constante posible. Esta condición se conoce como
estado estacionario y es una condición deseable para la operación de la planta depuradora. En
la práctica, las condiciones de estado estacionario sólo se alcanzan aproximadamente ya que
existen fluctuaciones típicamente asociadas a la naturaleza y a la variación de caudal del
influente que llega a la planta.
La purga de los lodos activos puede realizarse directamente en el reactor aerobio, pero
normalmente se realiza en la línea de recirculación de lodos desde el sedimentador, ya que los
LAR están más concentrados que en el reactor y por tanto los costes de bombeo son menores.
La purga del reactor aerobio posee la ventaja de evitar una purga en exceso, ya que ésta se
controla mejor por el mayor volumen involucrado. El lodo purgado se bombea, o bien a los
espesadores o algún proceso de eliminación del agua y, posteriormente, a un digestor
anaerobio. La purga de lodos se puede realizar de una manera intermitente o por lotes (purga
periódica) o de una manera continua
Regulación de la relación F/M
La regulación de la relación F/M se utiliza para asegurar que el proceso se alimente a la misma
velocidad a la que los microorganismos del licor de mezcla sean capaces se degradar los
contaminantes del agua residual (nutrientes). Esta estrategia no debe basarse en los
resultados de las pruebas diarias de laboratorio de DQO y SSVLM, ya que las concentraciones
suelen oscilar de un día a otro, sino que deben utilizarse los valores promedio de,
aproximadamente, los últimos 7 días de operación. En la Tabla 4 se muestran los valores
típicos de la relación F/M para distintas implementaciones del proceso de lodos activos
La principal causa del bulking suele ser un desarrollo excesivo de bacterias filamentosas en los
lodos activos y se conoce como bulking filamentoso. Las bacterias filamentosas son aquellas
que crecen formando una especie de filamentos o cuerdas que sobresalen de los flóculos
(fácilmente observables al microscopio). El desarrollo excesivo de este tipo de bacterias puede
deberse a distintos factores, tales como:
Formación de espumas
En algunas ocasiones los microorganismos presentes en los lodos activos pueden estar
sometidos a períodos de hambruna si hay un déficit de nutrientes (contaminantes) en el
influente del sistema, o sencillamente si hay períodos en los que no hay agua residual a tratar.
En el tratamiento de aguas residuales urbanas suele ocurrir por las fluctuaciones de caudal y
composición de las mismas. En las aguas residuales industriales, los períodos de hambruna se
producen durante las paradas de las plantas de tratamiento por mantenimiento o incluso
durante el período vacacional. Bajo esta condición de estrés, los microorganismos suelen
cambiar su metabolismo y consumir sus propias moléculas intracelulares, lo que
eventualmente produce no solo una disminución del crecimiento de la biomasa sino también
la muerte de la misma. Por tanto, durante estos períodos de hambruna la capacidad de
tratamiento biológico del agua residual se deteriora notablemente. El diseño de una estrategia
adecuada para hacer frente a los períodos de hambruna es fundamental. Se pueden mantener
diferentes condiciones (aerobias, anaerobias, anóxicas o alernantes) que varían según el tipo
de sistema implementado. En general, las condiciones anaerobias, o alternantes entre
anaerobias y aerobias son las más recomendadas para mantener la actividad bacteriana en las
plantas de tratamiento de lodos activos. En los sistemas con implementación de la eliminación
de nutrientes (nitrógeno y fósforo) lo ideal es mantener condiciones anóxicas o anaerobias, ya
que la muerte los microorganismos es más lenta en estas condiciones que en condiciones
aerobias.